Mejorando Nuestra Convivencia en La Familia PDF

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 49

www.flacsoandes.edu.

ec

MÓDULO 3

Mejorando nuestra
convivencia en la familia
www.flacsoandes.edu.ec
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra
convivencia en la familia
www.flacsoandes.edu.ec

PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
Lenín Moreno Garcés

Ministra de Inclusión Económica y Social


Berenice Cordero Molina

Viceministra de Inclusión Social


María Soledad Vela Yépez

Viceministro de Inclusión Económica


Marco Antonio Cazco Cazco

Gerente de Estrategia de Mejoramiento del Talento


Humano de los Servicios Desarrollo Infantil Integral
Ivonne Tatiana León Alvarez

Directora de Participación Ciudadana


Andrea Natalia Collaguazo Laines

Comité Nacional de Gestión de Escuela de Familias

Equipo técnico y diseño gráfico


Jorge Andrés Díaz, Henrry Ruales,
Georges Djoubi, Marcelo Lapo

ISBN: En trámite

Primera Edición, 2018


© Ministerio de Inclusión Económica y Social
Av. Amaru Ñan, Quito 170146. Piso 5
Plataforma Gubernamental de Desarrollo Social.
Quito, Ecuador
www.inclusion.gob.ec

La reproducción parcial o total de esta publicación,


en cualquier forma y por cualquier medio mecánico
o electrónico, está permitida siempre y cuando sea
autorizada por los editores y se cite correctamente la
fuente.

DISTRIBUCIÓN GRATUITA - PROHIBIDA SU VENTA


www.flacsoandes.edu.ec

Índice 3

Mejorando nuestra convivencia en la familia

Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
Objetivo general . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6
Objetivos específicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6
Ideas fuerza de la unidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6
Desarrollo del taller . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6

1. La convivencia en las familias . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8


1.1 Promover la equidad, justicia y reconocimiento de “las otras personas” en nuestras familias . . . 10
1.2. Generación de ambientes de estimulación, respeto, cariño y cuidado. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
1.3. Acordar normas y límites en la convivencia familiar con respeto, ejemplo y cariño . . . . . . . . . . 13

2. Comunicación familiar asertiva: Sabemos dialogar y escuchar . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16


2.1 La comunicación asertiva . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
2.2 La escucha activa y empática . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17

3. Resolviendo saludablemente los conflictos en las familias:


La negociación y búsqueda de consensos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21

4. La mediación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25

5. Cierre del taller. Compromisos a nivel personal, familiar y comunitario . . . . . . . . . . . . . . . . . 25

6. Material de apoyo. Convivencia, ciclo de vida y grupos de atención . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26


6.1 La convivencia con niñas y niños . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26
6.2 La convivencia con personas adultas mayores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28
6.3 La convivencia con personas con discapacidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33

Cronograma para el desarrollo del taller . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 35

Material recomendado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 36

Glosario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 36

Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37

Herramientas de facilitación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 39
www.flacsoandes.edu.ec

4 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias


www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 5

Mejorando nuestra
convivencia en la familia

Introducción
La educación tiene un rol fundamental para socializar y transmitir los principios de convivencia, comunicación y
resolución saludable de conflictos que son esenciales para la construcción de una sociedad libre de violencia,
especialmente cuando se desarrolla en las familias, la escuela y la comunidad que son espacios centrales para
la vida en sociedad.

En este marco, la Constitución de 2008 establece que el Estado ecuatoriano garantizará la seguridad humana
a través de políticas públicas y acciones interinstitucionales que aseguren la convivencia pacífica de las
personas, promuevan una cultura de paz, así como la prevención de las formas de violencia y discriminación
(Art. 393). Esta política pública parte del reconocimiento de los derechos de todas las personas e implica la
consolidación de planes, programas y proyectos para la igualdad, equidad y justicia como mecanismos para
superar la exclusión y fomentar la convivencia social (Plan Toda una Vida, 2017).
www.flacsoandes.edu.ec

6 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

De esta manera, el Ministerio de Inclusión Económica y Social promueve lugares de encuentro con las familias
y la comunidad, reconociendo sus diferencias y diversidades, lo que constituye un elemento esencial para
lograr cohesión social, desarrollar actitudes de pertenencia y respeto, fomentar la asociatividad y legitimar
espacios de integración y convivencia familiar, en el marco del respeto de los derechos humanos y la dignidad
de todas las personas.

Para el desarrollo de esta política pública es necesario dotarnos de herramientas y aprendizajes participativos
que nos permitan fortalecer la convivencia familiar, mediante el uso de la palabra, el diálogo, la inclusión y
el reconocimiento de las “otras personas” para llegar a acuerdos y consensos con nuestros seres queridos,
conjunto de capacidades que contribuyen al desarrollo de una sociedad más incluyente, equitativa y pacífica,
donde todas y todos podamos vivir juntos.

Objetivo general

Prácticar la capacidad de empatía, comunicación asertiva y resolución saludable de conflictos por parte de las
familias y usuarios de los servicios del MIES para el mejoramiento de la calidad de vida y corresponsabilidad
en los hogares.

Objetivos específicos

• Desarrollar con los integrantes de las familias actividades que fortalezcan las relaciones sociales basadas
en la empatía y en valores familiares para potenciar interacciones libres de violencia.
• Incentivar en las familias la práctica de la comunicación asertiva y la escucha activa como mecanismos que
contribuyan al entendimiento mutuo, incluyente y participativo.
• Resolver saludablemente los conflictos familiares mediante el diálogo, la cooperación y construcción de
acuerdos que sean justos y equitativos.

Ideas fuerza de la unidad

• Una familia centrada en demostrar cariño, apoyo y afecto a todos sus integrantes genera ambientes de
acogida, estimulación y protección.
• La convivencia familiar nos permite vivir juntos, generando espacios de inclusión y respeto.
• Conversar las diferencias para ponerse de acuerdo es una manera positiva de construir espacios y com-
promisos consensuados para la convivencia con nuestros seres queridos.
• La convivencia familiar se fortalece con una comunicación asertiva, cooperación y resolución saludable de
conflictos.
• La resolución saludable de conflictos es una forma corresponsable de llegar a acuerdos y permite una
democratización del poder al interior de las familias.

Desarrollo del taller

Para iniciar este proceso de sensibilización y reflexión sobre la convivencia familiar, a continuación se de-
sarrollará una dinámica sobre el valor de la empatía y la importancia del reconocimieto de las diferencias y
diversidades de las personas como elementos fundamentales para la vida en sociedad.
www.flacsoandes.edu.ec

ACTIVIDAD
Nombre de la actividad
1 Mejorando nuestra convivencia en la familia
REFLEXIÓN COLECT
Ejercicio lúdico para pe
y dialogar sobre los va
familiares.
nsar
lores
IVA
7

“La Olla de Lorenzo”


LA OLLA DE LORENZO
Duración: 15 minutos.

1. Materiales requeridos
Proyector (en caso de tener acceso), impresión del cuento Isabelle Carrier
o reproductor de audio (puede ser utilizado el celular).
Papelotes.
Marcadores de colores.
Esferos.

2. Desarrollo
a. La persona facilitadora reproducirá el cortometraje “La olla de Lorenzo”, si no cuenta con proyector leerá
el cuento1 (anexo No. 1) o reproducirá el audio.
b. Luego de presentar el cortometraje, leer o reproducir el cuento, la persona facilitadora realizará las siguien-
tes preguntas:
• ¿Qué reflexión nos deja la historia de Lorenzo?
• ¿Por qué Lorenzo decide esconderse? ¿Qué representa la olla en esta historia?
• ¿Qué permitió que las personas lograran ver las cualidades de Lorenzo?
• ¿Cuál es el papel que juegan las “personas maravillosas” en este cortometraje / cuento? ¿Qué valor o
valores permiten actuar de esta manera?

c. Después de esta reflexión, la persona facilitadora


solicitará a los participantes dividirse en grupos de
seis personas y entregará a cada equipo un pa-
pelote en donde van a dibujar un objeto o espa-
cio familiar (por ejemplo, el comedor, la cama, la
casa, etc.). Luego, dentro del dibujo anotarán un
valor familiar que consideren muy relevante.

d. Un integrante de cada grupo explicará el valor familiar escogido y su importancia para la convivencia familiar.

3. Utilidad para la persona facilitadora


Reflexionar sobre los valores familiares y su relevancia para una convivencia armónica.

Actividad para trabajar con:


Grupos de atención
Familias Niñas, niños y Personas con Personas adultas
adolescentes discapacidad mayores

1 El cuento es una obra de Isabelle Carrier denominado “El cazo de Lorenzo”, que fue publicado en 2010 por la Editorial Juventud. Se realizó una adaptación
del lenguaje para el contexto latinoamericano. Su lectura y difusión es recomendada por la Confederación Española de Organizaciones en favor de las
Personas con Discapacidad Intelectual (FEAPS).
www.flacsoandes.edu.ec

8 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

A partir de esta actividad se pudo identificar que la empatía es una


habilidad fundamental para el desarrollo de relaciones sociales
incluyentes, ya que implica ser capaces de comprender lo que
la otra persona está pensando y sintiendo. Para su desarrollo es
necesario ir más allá de nosotros mismos, sobrepasar la visión
individual y comenzar a hacer interpretaciones basadas en la mirada
ajena. Este valor impulsa el crecimiento personal y el desarrollo de
cada uno de nosotros, ya que al ver a través de los ojos de los otros
también podemos observarnos mejor a nosotros mismos.

Adicionalmente, logramos evidenciar que existen otros valores que son


esenciales para una convivencia familiar armónica. En este contexto ¿Qué
entendemos por convivencia y qué otros elementos son esenciales para
cultivarla?

1. La convivencia en las familias


El primer lugar donde aprendemos a convivir es nuestra familia, en ella adquirimos las principales habilidades
y aptitudes para vivir en sociedad. De esta manera, la convivencia se entiende como la capacidad de habitar
en compañía e interacción con los distintos integrantes de la familia, lo que contribuye a generar un entorno
de seguridad, confianza, bienestar y, sobre todo, hace posible que podamos comunicarnos e integrarnos.

Esta convivencia encierra un conjunto de prácticas y valores que son compartidos en nuestras familias, los
cuales promueven relaciones intrafamiliares basadas en la tolerancia, la comunicación y el apoyo mutuo.

Debido a que los valores son aquellos principios o convicciones profundas que orientan nuestra conducta, se
pueden identificar valores que ayudan al desarrollo de un ambiente familiar armónico. A continuación obser-
vemos algunos de ellos.

!
Recuerda qué

Las relaciones basadas en el buen trato, el respeto y la convivencia armónica


contribuyen a construir una vida libre de violencia.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 9

Valores
que fortalecen la
Convivencia Familiar
RESPETO
TOLERANCIA Es el reconocimient
s,
Es el respeto a las idea s consideración y aten o,
ción
creencias o prácticas de es
lo se le tiene a las otra que
rent s
demás cuando son dife personas.
a las propias.

La convivencia es la
capacidad de vivir
juntos, entre todos los
integrantes de nuestra
familia.
AD EMPATÍA
SOLIDARID paldo a la Es fundamental para el Es la capacidad de
n y res
es la adhesió otros familiares, desarrollo de un persona de colocars una
causa de los apoyo mutuo. ambiente familiar e en el
lugar de la otra.
involucra el armónico, incluyente y
estimulante.

DIÁLOGO ermite el RESPONSABILID


rso que p Es el cumplimiento D
A
Es un recu y comprensión de
nto a obligaciones y la ca de las
entendimie sentimientos frente s pacidad de
las ideas y que relacionan a la tomar decisiones
los hechos personas. conscientemente.

¿Qué otros valores consideras que son fundamentales para la convivencia familiar? ¿Cuáles son los más
frecuentes en tu familia? ¿Piensas que se puede fortalecer alguno de éstos en tu hogar? ¿Cómo lo harías?

Ahora bien, entendiendo que la convivencia no es una condición social previamente establecida, sino que
aprendemos a convivir, revisaremos a continuación algunos elementos que estimulan y favorecen la integra-
ción familiar.
www.flacsoandes.edu.ec

10 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

1.1 Promover la equidad, justicia y reconocimiento de “las otras personas” en nuestras familias

En la medida en que respetamos y comprendemos al “otro”, reconocemos la diferencia como una oportuni-
dad para vivir y compartir entre todos los integrantes de la familia (Yudkin, 2017). Ahora bien, en el entorno
familiar podemos evidenciar diferencias en relación al sexo (mujeres - hombres), la edad (niñas, niños, adoles-
centes, adultos, personas adultas mayores), la condición de discapacidad, entre otros, motivo por el cual es de
vital importancia aprender, desde el mismo entorno familiar, que la diversidad nos enriquece como sociedad y
que no es admisible convertir la diferencia en desigualdad social.

Esta situación permite la inclusión y participación activa de todas y todos en las actividades y decisiones del grupo
familiar, proceso de involucramiento que va unido al sentimiento de pertenencia, así como al respeto de sus derechos
y dignidad como personas, situación que impulsa a colaborar desde actitudes constructivas y cooperativas.

Algunas de las acciones que contribuyen a este proceso de inclusión son:


• Fomentar en las familias la equidad entre los hombres y las mujeres, así como la corresponsabilidad de
todos los integrantes de la familia en las tareas de cuidado y protección, superando los estereotipos de
género y reconociendo la importancia del cuidado para el bienestar de la sociedad.
• Generar ambientes de acogida en el entorno familiar que permitan la interacción entre todos los inte-
grantes, reconociendo que cada uno de nosotros somos responsables del afecto y del respeto mutuo
indispensable para la convivencia familiar.
• Escuchar y tomar en cuenta las opiniones, necesidades y deseos de las niñas, niños y adolescentes, así
como fomentar su participación e involucramiento en la actividades familiares.
• Fortalecer la solidaridad y asociación entre las generaciones jóvenes y de adultos mayores, basadas en el
apoyo mutuo y en la transferencia de habilidades y experiencias. Valorar tanto a las generaciones jóvenes
como a las mayores, resaltando sus aportes para la sociedad. Las personas adultas mayores deben ser
respetadas y valoradas, así como tratadas con afecto y cariño.
• Enfrentar las barreras actitudinales y sociales hacia las personas con discapacidad, debido a que pueden
impedir o dificultar su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con las
demás. Asimismo, comprender que la discapacidad es parte de la “diversidad” de las personas, familias
y comunidades que conforman la sociedad y el país, por lo tanto, las personas con discapacidad tienen
derecho a vivir con dignidad, seguridad, libres de explotación y violencia.

Relacionado con lo anterior, se encuentran también los cuidados que se brindan mutuamente los integrantes
de la familia, los cuales son indispensables para un crecimiento integral, convivencia plena y libre de violencia.
Las prácticas de cuidado hacen referencia a las tareas y relaciones ligadas a la atención y asistencia en el
desarrollo y bienestar de otros individuos, como lo son:

• Alimentación
• Higiene RECURSOS AFECTIVOS
• Salud • Cariño
• Educación • Amor • Sentido del deber
• Recreación • Preocupación • Responsabilidad
por el otro
RECURSOS SOCIALES

RECURSOS MATERIALES
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 11

En este marco, las prácticas de cuidado y autocuidado favorecen la convivencia y el tejido familiar debido a
que implican tanto la atención y asistencia a las personas que lo requieren como la promoción de la autono-
mía e independencia personal, lo que contribuye a generar bienestar y calidad de vida, motivo por el cual es
fundamental consolidar las capacidades de cuidado y autocuidado en nuestras familias.

1.2. Generación de ambientes de estimulación, respeto, cariño y cuidado2.

La familia es el mejor ambiente para la estimulación, el respeto, el cuidado y la convivencia en sociedad. Una
familia centrada en “demostrar cariño, en dar apoyo, donde hay más estímulos que castigos, produce un ambiente
en el que sus integrantes se sienten cómodos y acogidos, lo que favorece la integración y convivencia familiar”
(UNICEF, 2010: 21). De igual forma, el desarrollo de relaciones basadas en el buen trato, la ternura y la expresión
de afecto <sentirse querido y brindar cariño> estimulan tanto emocional como socialmente a los integrantes de
la familia y son fundamentales para generar un ambiente de respeto, seguridad y empoderamiento.

Un punto clave en este proceso consiste en desarrollar, de manera permanente, un reconocimiento y valora-
ción de los logros, avances y aprendizajes durante todo el ciclo de vida.

“Lo “Con tus


hiciste muy habilidades puedes
bien, felicitaciones”. llegar a donde te
propongas”.
“Me gusta que eres “Qué rico que la
una persona pasamos haciendo
solidaria”. deporte juntos”.

“Me
“Sé siento muy a
que estás gusto compartiendo
esforzándote”. contigo”.
“Gracias por mantener
el espacio limpio”.

“Recuerda que te
“Estamos muy queremos y cuentas
orgullosos de lo que con nosotros”.
has logrado”. “La comida que hicimos
“Cuidaste muy bien a estuvo deliciosa”.
tus hermanos”.

2 En el presente módulo se han utilizado aportes del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (2010, 2003, 2003), del Instituto Complutense de
Mediación y Gestión de Conflictos (2010, 2010b), así como de la Ley de Arbitraje y Mediación del Ecuador (2006), entre otros.
www.flacsoandes.edu.ec

12 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

En este sentido ¿Cómo te sientes cuando recibes un reconocimiento por parte de un familiar? ¿Cuál fue la
última vez que expresaste con afecto lo bien que la pasaste con alguien de tu familia? Recuerda que las perso-
nas que se sienten queridas y apreciadas son más seguras de sí mismas. Por tal motivo, NO te abstengas de:

• Estimular a tus familiares cuando se esfuerzan, hacen bien las cosas o alcanzan una meta.

• Valorar y fijarte más en sus cualidades y fortalezas que en sus defectos.

• Tratar a las personas como deseas ser tratada. En este sentido ¿Cómo deseas ser tratado en todo mo-
mento? ¿Qué estás haciendo para lograrlo?

La integración familiar también se fortalece cuando aseguramos momentos y tiempo de calidad para com-
partir actividades con los distintos miembros de la familia, espacios donde cada uno puede sentirse contento
y acogido, por ejemplo:

Comer

Compartir en Pasear
comunidad

COLISEO
o Artistas
Teatr

o Artistas
Teatr
Conversar
Eventos culturales

Reunirse
Jugar
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 13

Para que este tiempo sea de calidad es importante evitar distracciones y aprovecharlo para compartir e inte-
ractuar con los seres queridos. ¿Cuáles son las actividades que más disfrutas en familia? ¿Cuáles te gustaría
hacer con mayor frecuencia? ¿Cómo puedes organizarte para asegurar estos espacios?

1.3. Acordar normas y límites en la convivencia familiar con respeto, ejemplo y cariño

Para una buena convivencia es fundamental establecer colectivamente las normas que orientan la interacción
familiar, puesto que son una guía de lo que está o no permitido en el hogar. Recuerda que es mejor “tener
pocas normas, pero claras, que se cumplan y siempre con el acuerdo entre las personas adultas responsables”
(UNICEF, 2010: 34).

De igual forma, se debe tener en cuenta que tanto la falta de límites como el exceso de éstos puede llegar a
ser perjudicial para la interacción familiar, por lo que es preciso buscar un equilibrio que permita establecer y
cumplir las normas de convivencia, así como también la generación de espacio para la autonomía y toma de
decisiones de los integrantes de la familia, de acuerdo con su edad y responsabilidades. Los límites pueden
ser flexibles para adaptarse a situaciones especiales y se van adecuando a los diferentes ciclos de vida.

En síntesis, las normas de convivencia facilitan la interacción familiar y al ser establecidas con respeto y cariño
producen seguridad y confianza en las personas. Además, permiten educar con el ejemplo, promoviendo
una cultura de paz en nuestras familias.

Por otra parte, uno de los elementos fundamentales para la convivencia armónica es la comunicación familiar
asertiva que tiene como base las capacidades de diálogo y escucha activa. A continuación, realizaremos una
actividad lúdica sobre este tipo de comunicación y su relación con el trabajo colaborativo en las familias.
www.flacsoandes.edu.ec

14

2
Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias
Actividad SENSIBILIZACIÓN
Ejercicio lúdico para
practicar la comunicac
ión
asertiva en las familias
Nombre de la actividad
La familia cruza el río…
Duración: 30 minutos.

1. Materiales requeridos
Papelotes, cinta masking.

2. Desarrollo
a. La persona facilitadora solicitará a los participantes que se reunan en grupos de 6 integrantes, quienes
conformarán una familia que deberá cruzar un río que se encuentra crecido y donde además hay coco-
drilos hambrientos. Debido a que el puente está dañado deberán pasarlo solamente con la ayuda de tres
rocas (papelotes – papeles) de diferentes tamaños.

b. Indicaciones:

I. La persona facilitadora señalará las dos orillas del río con cinta masking. Este río debe ser lo suficiente-
mente ancho para que sea difícil cruzarlo por el grupo sólo con la ayuda de las rocas en las que deben
dar los pasos. Luego, entregará tres papeles con forma de rocas que tendrán las siguientes dimensio-
nes: un papelote; medio papelote y un cuarto de papelote.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 15

II. La persona facilitadora explicará a los participantes que toda la familia deberá pasar el río como un solo
equipo. Nadie puede tocar el agua (suelo), por eso deben usar las rocas (papeles) para cruzar. Debido
a que el río estaғ lleno de cocodrilos, si alguien pisa el agua con el pie, no podráғ usarlo maғs; si alguien
pierde el equilibrio y toca el agua con la mano, los cocodrilos se la comeraғn y el participante tendraғ que
ponerla detraғs de la espalda; si alguien sale completamente de la roca, todo el equipo debe volver a la
orilla y empezar de nuevo.

III. Las rocas (papeles) deben estar en contacto con un participante todo el tiempo, en caso de
que no sea asiғ seraғn arrastrados por la corriente, debiendo comenzar de nuevo el ejercicio.
La persona facilitadora brindará a cada grupo 5 minutos antes de iniciar la actividad para que entre
todos dialoguen y elaboren una estrategia. Es importante que todos compartan sus ideas, se escuchen
y se organicen para decidir cuál es la mejor estrategia antes de iniciar.

Luego, informará a los participantes que el tiempo de la actividad es de 15 minutos. Al finalizar, se reconocerá
el trabajo de todos los grupos con un fuerte aplauso.

c. Posteriormente, se realizará una reflexión sobre el ejercicio. La persona facilitadora abrirá el espacio para
iniciar el diálogo entre los participantes con las siguientes preguntas:
· ¿Cómo se sintieron al realizar la actividad?
· ¿Cuál fue la estrategia de cada grupo?
· ¿Cómo fue la comunicación entre los integrantes de cada equipo?
· ¿Por qué creen que a pesar de tener los mismos materiales se obtuvieron resultados diferentes?
· Si surgió algún tipo de discusión o malentendido ¿Cómo lo resolvieron?
· ¿Qué elementos ayudaron a la comunicación entre los integrantes y cuáles lo dificultaron?
· A partir de esta experiencia ¿Qué entenderíamos como comunicación asertiva?

d. Al finalizar la reflexión, la persona facilitadora recuperará los puntos en común que señaló cada equipo y hará
énfasis en los componentes de la comunicación asertiva que contribuyen a fortalecer la convivencia familiar.

3. Utilidad para la persona facilitadora

Sensibilizar sobre la importancia de la comunicación asertiva y el trabajo colaborativo como elementos que
permiten una buena interacción social y familiar.

Nota:
i Durante todo el ejercicio es importante que el facilitador incentive la participación e inclusión de
todos los integrantes de la familia, en especial niñas y niños, personas adultas mayores y personas
con discapacidad, lo que permita que sus propuestas sean escuchadas y tomadas en cuenta.

Actividad para trabajar con:


Grupos de atención
Niñas, niños y Personas con Personas adultas
Familias
adolescentes discapacidad mayores
www.flacsoandes.edu.ec

16 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Este ejercicio nos ha permitido comprender de manera práctica la importancia de poder


hablar, escuchar y cooperar en nuestra vida diaria. En el siguiente apartado revisaremos
los aportes de la comunicación asertiva y la escucha activa para el entendimiento mutuo
y la interacción familiar.

2. Comunicación familiar asertiva: Sabemos dialogar y escuchar


Una comunicación incluyente, participativa y empática con las personas que diariamente convivimos es la base
de una buena relación familiar. Permite expresar sentimientos, necesidades y expectativas de cada uno de los
integrantes de la familia, así como asegurar que éstas sean escuchadas y satisfechas por otros familiares, lo
que favorece la convivencia familiar.

Esta forma de comunicación contiene dos elementos centrales: Una comunicación asertiva y una escucha
activa, que se encuentran orientadas al intercambio de ideas y al entendimiento mutuo.

2.1 La comunicación asertiva

En todo momento estamos comunicando: en lo que hacemos, decimos o dejamos de hacer, ya sea por medio
de palabras (lo que decimos o escribimos), como también a través de actitudes, gestos, sonrisas o miradas.
Es decir, utilizamos tanto nuestra expresión verbal como no verbal.

La comunicación es efectiva cuando nuestro mensaje es coherente tanto en la expresión verbal como en la
no verbal, de manera que lo que deseamos transmitir a otra persona pueda ser comprendido en el mismo
sentido que nosotros le dimos3 (UNICEF, 2003b). Por otra parte, la asertividad se entiende como la habilidad
de expresar nuestras opiniones y sentimientos, sean o no agradables para otras personas, de forma clara y
directa, sin ser hostiles ni sentirnos culpables por hacerlo.

En este contexto, la comunicación asertiva consiste en la capacidad de expresar sentimientos, ideas u


opiniones de manera respetuosa y sin agredir a los demás. Implica comunicarse a favor de nuestros derechos,
reconociendo también los de los demás, convirtiendose en un estilo de comunicación propositiva para relacio-
narnos con la gente que nos rodea.

En el marco de la convivencia familiar, la comunicacioғn asertiva permite manifestar de manera clara y respe-
tuosa las necesidades e intereses comunes, exponer las posiciones y motivaciones, así como buscar la com-
prensión mutua. Motivo por el cual es importante tener en cuenta que cuando se muestra empatía, respeto y
no se juzga, las personas se animan a continuar hablando y se sienten mejor expresando sus pensamientos
y sentimientos.

De esta manera, la comunicación asertiva mejora la calidad de las relaciones e interacciones que
realizamos en nuestra familia.

3 Esto implica la capacidad de superar algunos nudos de la comunicación como los malentendidos, la descalificación o la sobrevaloración del criterio propio.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 17

2.2 La escucha activa y empática

Escuchar activamente significa disponer nuestra mente y cuerpo para prestar atencioғn a lo que nos están di-
ciendo. Implica dejar de hacer otras cosas y escuchar al otro, hacieғndole saber con nuestros gestos o palabras
que estamos atentos a lo que nos quiere decir. De esta manera, saber escuchar es también valorar y respetar
a la otra persona, es una forma de hacerle sentir que es una persona importante y que sus sentimientos son
valorados por nosotros.

La escucha empática nos permite tomar un tiempo para buscar captar sus sentimientos, opiniones, valores
y necesidades. Es una forma de escuchar atentamente sin enjuiciar lo que la otra persona nos está diciendo.
La empatía significa ponerse en el lugar del otro, lo que nos ayudaraғ a responder de forma adecuada a sus
necesidades (UNICEF, 2003).

Para mejorar la comunicación en nuestra familia es recomendable:


• Buscar momentos adecuados para dialogar, por ejemplo, asegurando que exista tranquilidad
y no se presenten distracciones durante la comunicación.
• Hablar claro, con frases cortas y simples. Es bueno preguntar si se entendió el mensaje para
evitar malos entendidos.
• Hablar mirando a los ojos y ubicados a la misma altura, generando un ambiente de confianza
y respeto por la opinión de la otra persona.
• Confirmar si lo que quisimos decir fue entendido por la otra persona en el mismo sentido
que nosotros le dimos o, por el contrario, si se entendió de una manera diferente, pudiendo
generar malentendidos.
• Escuchar atentamente, con respeto e interés. Fortalecer la capacidad de atención y concen-
tración, recibir información y enriquecerse con las experiencias de otras personas.
• Expresar claramente nuestros deseos, intereses y motivaciones, así como manifestar las
expectativas que tenemos de las otras personas.

Por otra parte, se puede comunicar lo que sentimos de forma clara y sincera, sin ofender, maltratar o desca-
lificar a las otras personas. Cuando descalificamos estamos utilizando una estrategia que genera intimidación
e inseguridad y, por lo general, se orienta a imponer la propia visión sobre un tema sin aceptar que las otras
personas también pueden tener argumentos o posiciones que son válidas.

Es más difícil solucionar los problemas cuando utilizamos la descalificación, la crítica destructiva,
los mensajes dobles o incongruentes. Si cambiamos el lenguaje podemos cambiar el escenario
de la discusión y, tal vez, el resultado (Instituto Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos,
2010: 16).
www.flacsoandes.edu.ec

18 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Por el contrario, cuando estimulamos a las personas generamos confianza y fortalecemos su autoestima, lo
que es fundamental para sentirse capaz, valorado y valioso. Tener confianza consigo mismo y actuar con se-
guridad frente a los demás, se convierte en un factor poderoso a la hora de comunicarse y resolver de manera
asertiva los conflictos.

Por medio de la comunicación asertiva también se puede establecer con cariño y sin faltar el respeto las
normas de convivencia familiar.

! Recuerda que…

“Las personas a las que queremos se sienten bien


cuando son escuchadas, cuando nos ponemos en
su lugar, cuando sentimos como ellos (empatía),
cuando elogiamos o apoyamos sus logros,
cuando decimos las cosas (las que nos gustan y las
que no) con mensajes claros y congruentes, cuando
buscamos maneras de solucionar los problemas”.
(Instituto Complutense de Mediación y Gestión de
Conflictos, 2010: 15).

Por otra parte, uno de los principales elementos que favorecen la convivencia dentro del hogar es la capacidad
de resolver pacífica y creativamente los conflictos que se presentan en las diferentes etapas de la vida familiar
(UNICEF, 2003).
www.flacsoandes.edu.ec

ACTIVIDAD 3 Mejorando nuestra convivencia en la familia

DIÁLOGO Y COOPERACIÓN
Ejercicio lúdico para trabajar la
19

resolución saludable de confl


ictos

Nombre de la actividad
Buscando las soluciones...
Duración: 45 minutos

1. Materiales requeridos
Papelotes.
Marcadores de colores.
Esferos.

2. Desarrollo
a. La persona facilitadora solicitará a los participantes dividirse en grupos de 6 personas. Luego, pedirá a
un representante de cada grupo que, al azar, saque una (1) de las seis (6) tarjetas (ver anexo 2) que se
encuentran guardadas en una funda o en una caja, en la que se hará referencia a una situación familiar
cotidiana.
b. A partir de la situación familiar evidenciada en la tarjeta, cada grupo comenzará a discutir y anotar en un
papelote qué características tendría esta relación cuando se presenta un conflicto, que es: 1. Procesado de
manera saludable (intensidad leve); 2. Procesado de manera no saludable (intensidad media); 3. Procesa-
do de manera muy negativa (intensidad alta). Para este ejercicio se utilizará la siguiente matriz:

1. Descripción del 2. Descripción del 3. Descripción del


conflicto cuando es conflicto cuando es conflicto cuando es
Situación familiar procesado de manera procesado de manera procesado de manera
saludable no saludable muy negativa

––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––– –––––––––––––––––––

––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––– –––––––––––––––––––

––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––– –––––––––––––––––––

–––––––––––––––––––– –––––––––––––––––––– –––––––––––––––––––– ––––––––––––––––––––

i Revisa el Anexo 2 donde encontrarás las seis relaciones familiares:


- Mantenimiento y aseo de la casa. - Comunicación entre padres e hijos. Horarios
- Presupuesto y gastos familiares. de salidas.
- Relación íntima de pareja. - Normas de convivencia. Disciplina y castigos.
- Cuidado de los abuelos. - Cuidado de un familiar con discapacidad.
www.flacsoandes.edu.ec

20 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias


Nota: Este primer ejercicio permitirá a la persona facilitadora evidenciar:
1) Las principales características de relaciones saludables que contribuyen a una convivencia familiar armónica,
las cuales requieren ser fortalecidas permanentemente;
2) Las principales características de conflictos procesados de manera no saludables, donde existen dificultades
(nudos) en la comunicación e interacción, pero que pueden ser resueltos pacíficamente mediante el diálogo y
la cooperación (Este caso será retomado en la siguiente parte del ejercicio);
3) Las principales características de conflictos procesados de manera muy negativas, los cuales pueden vulnerar
los derechos de las personas y llegar a ser violentos, motivo por el cual requieren una atención profesio-
nal e institucional.

c. En la segunda parte del ejercicio, la persona facilitadora solicitará a cada grupo retomar el conflicto cuando es “pro-
cesado de manera negativa” (que corresponde al segundo caso de la matriz anterior), a partir del cual se identifica-
rán tres (3) posibles soluciones al conflicto que sean justas y equitativas. Para su desarrollo, la persona facilitadora
entregará un papelote donde se realizarán las siguientes acciones:

Buscando las soluciones

Paso 1 Paso 2

De la lista de 3 posibles soluciones, elegir las 2 opciones


Hacer una lista de 3 posibles soluciones al conflicto
que consideren las más justas y equitativas para las partes
(Ventajas - Desventajas)
en conflicto.

1. -

2. -

3.

- Posteriormente, en plenaria cada grupo expondrá el caso analizado y las soluciones encontradas.
- Se reflexionará sobre la experiencia del ejercicio y la importancia de identificar varias salidas a un mismo pro-
blema.

Ideas fuerza de la actividad


• Entender que no existe una sola solución a un conflicto ayuda a desarrollar la flexibilidad y creatividad para poder
abrirse a nuevas soluciones.
• Cuando las personas participan y se involucran en las soluciones de sus conflictos, el compromiso en el acuerdo
es más fuerte y duradero.

3. Utilidad para la persona facilitadora


Introducir las principales herramientas de la resolución pacífica de conflictos y promover el énfasis en la búsqueda de
soluciones justas y equitativas.

Actividad para trabajar con:


Grupos de atención
Niñas, niños y Personas con Personas adultas
Familias
adolescentes discapacidad mayores
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 21

Teniendo en cuenta los aportes de la anterior actividad, a continuación se presentarán


varios aportes conceptuales sobre las principales herramientas de la resolución pacífica
de conflictos.

3. Resolviendo saludablemente los conflictos en las familias:


La negociación y búsqueda de consensos
La resolución saludable y pacífica de conflictos es una habilidad y capacidad para alcanzar colectivamente
acuerdos que sean equitativos y justos, mediante el diálogo y la cooperación. Esta perspectiva se concibe
como una de las formas de acción positiva para la convivencia social y familiar, puesto que se basa en la
comunicación, la negociación y el respeto de los derechos de todas las personas, de manera que se centra en
la exploración conjunta y colaborativa de soluciones para enfrentar los problemas compartidos.

Esto es así debido a que los conflictos son parte de nuestra vida cotidiana y se originan en situaciones propias
de la convivencia e interacción social, de manera que nuestra trayectoria personal y familiar se desenvuelve
en el marco de un conjunto de conflictos por resolver, los cuales se convierten en oportunidades permanentes
para crecer y aprender.

“En la familia es normal que haya desavenencias y diferencias, sobre todo cuando las familias
pasan por momentos de crisis, en el sentido de que se produzcan cambios que requieran la
adaptación a nuevas realidades. Eso pasa por ejemplo cuando nace el primer hijo o hija, cuando
las hijas y los hijos se hacen mayores y se van de casa, provocando lo que se conoce como el
“síndrome del nido vacío”; cuando un abuelo o abuela se incorporan al mismo domicilio donde
reside la familia; cuando alguien de la familia enferma y se hace dependiente; cuando se pro-
duce algún fallecimiento, etc. En todos esos casos, se producen cambios que rompen la rutina
familiar, de modo que hay que acostumbrarse a que entren nuevos miembros o a prescindir
de ellos o a nuevas situaciones que nos desestabilizan” (Instituto Complutense de Mediación y
Gestión de Conflictos, 2010b: 17).

De esta manera, se evidencia que los conflictos en las familias hacen parte de nuesta vida cotidiana, motivo
por el cual es fundamental tener en cuenta que resolverlos de manera saludable fortalece la estructura familiar,
incrementa la cohesión y el sentimiento de pertenencia.

Los conflictos se entienden como aquellas situaciones en las que dos o más personas perciben o tienen posi-
ciones, valores, intereses, aspiraciones o necesidades contrapuestas (Jares, 2004). No obstante, el sólo hecho
de pensar distinto no genera un conflicto, sino que este surge cuando frente a un asunto cada una de las partes
considera tener la razoғn, lo que genera una situación de contraposición o pugna de ideas (UNICEF, 2003).
www.flacsoandes.edu.ec

22 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Actualmente, se concibe que los conflictos no solo son inevitables, sino que
además NO deben interpretarse, por sí mismos, como algo negativo. De
hecho, los conflictos tienen aspectos que son positivos:
• Contribuyen a conocer y practicar nuevos modos de responder a los
problemas y construir mejores relaciones sociales.
• Se convierten en un desafío interesante de crecimiento y comprensión
de la otra persona y de sí mismo.
• Pueden ser origen de cambios personales y sociales.

Lo esencial es aprender a procesarlos de manera saludable y pacífica.

Ahora bien, es importante reconocer que frente a una misma situación es usual que las personas presenten
distintos intereses, deseos y decisiones, puesto que la diversidad de experiencias e historias de vida de cada
uno explican las diferentes formas de ser, pensar, resolver sus dificultades o satisfacer sus necesidades (UNI-
CEF, 2003). Por lo tanto, los conflictos no son, en sí mismos, ni buenos ni malos, sino que la forma como los
percibimos y asumimos tienen que ver con el modo como habitualmente los gestionamos.

En las familias se identifica el conflicto con pensar u opinar diferente y se asocia a sentimientos
muy íntimos: a tensiones, acusaciones, falta de disposición a escuchar, a comprometerse, falta
de acuerdo. En este sentido, para lograr una convivencia sana dentro del hogar es de vital
importancia conocer estrategias creativas de resolución de conflicto y, antes que todo, saber
identificar cuáles son las situaciones conflictivas (UNICEF, 2003: 5).

Para la resolución de un conflicto familiar es relevante la búsqueda de consensos que permitan soluciones jus-
tas y equitativas en donde las distintas partes se sientan beneficiadas. En la mayoría de las ocasiones, incluso
en situaciones muy complicadas, la cooperación familiar es la mejor salida.

El hecho de que todos ganen en una situación conflictiva “implica buscar la mejor solución para todos,
buscar soluciones pensando en las necesidades de todas las partes. Y eso, no lo puede hacer uno sólo. De
ahí la colaboración” (Instituto Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos, 2010: 19). De manera
que la inclusión, participación y cooperación facilitan que las tensiones entre las personas se resuelvan
pacificamente.

En el siguiente gráfico se presentan los principales componentes de la resolución pacífica de conflictos:


www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 23

Resolución pacífica de conflictos


Es la capacidad de alcanzar colectivamente acuerdos que sean equitativos y justos, mediante el diálogo y la
cooperación.

DIALOGAR
• Hablar y escuchar de forma activa y empática.
• Comunicar lo que se piensa de manera clara y sincera, sin maltratar ni ofender.
• Buscar comprender a la otra persona y ser comprendidos.

GENERAR UN AMBIENTE DE CONFIANZA


• Crear un entorno adecuado para el diálogo, sin distracciones, que sea tolerante y
respetuoso.
• Prestar atención y utilizar un lenguaje verbal y no verbal que genere tranquilidad.

INDAGAR
• Entender y definir claramente el conflicto, identificando las necesidades e intereses
comunes.
• Ser empáticos – colocarse en los pies de la otra persona.
• ¿Qué quieres? ¿Qué quiero? ¿Qué necesitas? ¿Qué necesito?

CENTRARSE EN LAS SOLUCIONES


• Tener apertura para pensar alternativas e intercambiar propuestas satisfactorias para
ambas partes.
• ¿Cómo piensas que podemos resolverlo? ¿Qué cosas deberían cambiar? ¿Qué po-
demos hacer al respecto? ¿Qué estamos dispuestos a hacer? ¿En qué coincidimos?
• Entender que no hay una única solución ayuda a desarrollar la flexibilidad y la crea-
tividad para poder abrirse a nuevas soluciones.

COOPERAR
• Trabajar juntos para elegir la opción que mejor sirva para todas las partes implicadas.
• Cuando las personas participan y se involucran en las soluciones de sus conflictos,
el compromiso en el acuerdo es más fuerte y duradero.
• Por lo general, las personas ceden y ganan un poco.

CONSTRUIR UN ACUERDO JUSTO, EQUITATIVO Y DONDE TODAS Y TODOS


PUEDAN GANAR
• Buscar un compromiso transformador ¿Qué podemos hacer desde nuestra propia
realidad y con los recursos que tenemos para cambiar esa realidad?
• Recordar que el diálogo, el entendimiento y la cooperación son las principales he-
rramientas para la resolución de conflictos.

PONER EN PRÁCTICA EL ACUERDO


• Evaluar si el consenso alcanzado logró resolver el conflicto.
• En caso de que no haya servido, aplicar otra de las alternativas analizadas que sean
justas y equitativas.
www.flacsoandes.edu.ec

24 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

!
Recuerda

La resolución saludable de conflictos es una forma corresponsable de llegar a acuerdos


y permite una democratización del poder al interior de las familias.

De esta manera, podemos generar espacios donde las personas implicadas en un conflicto puedan hablar con
calma, sin agresiones, donde se analicen todas las posibilidades de solución y se puedan consensuar cuál o
cuales son las más convenientes, justas y equitativas, de manera que todos los implicados se comprometan
con el acuerdo alcanzado.

Asimismo, debemos tener en cuenta que los procesos de negociación y consenso tienen lugar en el momento
que “las personas inmersas en una disputa han reconocido su existencia (del conflicto), han acordado la nece-
sidad de resolverlo, y se comprometen activamente en un proceso cuya finalidad será solucionar la situación”
(Instituto Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos, 2010b: 20).

Practicar es una buena manera de encontrar formas alternativas de solución de conflictos sin lastimar a otras
personas ni las relaciones que se han construido con ellas. Si somos persistentes es probable que poco a
poco se transforme en una forma habitual de responder a este tipo de situaciones.

Una vez que las personas han experimentado una solución pacífica de los conflictos, aumenta la probabilidad
de que alcancen nuevas soluciones constructivas en futuras situaciones, motivo por el cual es pertinente su
implementación en nuestra sociedad para un desarrollo integral de las personas y la configuración de una
sociedad libre de violencia.

¿Por qué es tan importante excluir el uso de la violencia física, psicológica o sexual en
nuestras relaciones intrafamiliares?
- Es una manera negativa de enfrentar los conflictos, en donde se imponen las ideas y los
deseos de la persona que posee mayor poder (fuerza, edad, dinero, etc.), por sobre el que tiene
menos poder. Esta forma de relación genera daño físico y/o psicológico.
- Es una vulneración a los derechos y la dignidad de las personas, por lo tanto, constituye un
delito y es un comportamiento inaceptable.
- Ningún ser humano debe ser maltratado ni golpeado. La violencia genera miedo, rabia y frustración.
- Si no se detienen las primeras conductas violentas, estas se vuelven más frecuentes, intensas y
peligrosas, llegando a convertirse en una forma de relación social, de manera que genera más
violencia y empeora los problemas. Además, al presentarse en las familias puede reproducir
generacionalmente el ciclo de violencia.

Por otra parte, debemos saber que cuando estamos en medio de un conflicto y se nos dificulta resolverlo, por
ejemplo, cuando estamos muy enfadados, no logramos comunicamos adecuadamente y el conflicto se inten-
sifica, aún tenemos una oportunidad para resolverlo de forma positiva: la mediación, que es una herramienta
alternativa de resolución de conflictos.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 25

4. La mediación
La mediación tiene un importante potencial transformador de las personas y del clima de convivencia, refuerza
la autoestima e implica un aprendizaje y cooperación. En este punto participa la persona mediadora, quien
nos ofrece la posibilidad de apoyarnos a desbloquear la situación de conflicto, facilitando la búsqueda de
soluciones. De esta manera, es alguien externo al conflicto que actúa de manera imparcial para construir un
ambiente adecuado para la interacción.

“El mediador actúa como facilitador para que fluya la comunicación


icación entre
las partes en conflicto. Es un profesional formado en técnicass específicas
de comunicación que crea un clima de confianza necesario para que las
personas se sienten a hablar libremente. Ellas son las que llevan
van adelante
la mediación, ya que ésta parte de la base de que cada uno es capaz de
gestionar su conflicto y de buscar las soluciones que mejor lee convienen
en cada caso. Así, a través de las diferentes conversaciones mantenidas,
las personas, con la ayuda del mediador, pueden tratar los temas
mas que
les preocupan, manifestar sus sentimientos, emocionarse cuandoando lo
necesiten, ser escuchados por la otra parte en discordia,
y decir lo que siente y piensa respecto del tema”. (Insti-
tuto Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos,
2010b: 14).

Las personas que toman la decisión de iniciar un proceso de mediación son conscientes de que necesitan
conseguir soluciones para poder resolver sus dificultades, pero también saben que, en esta ocasión, necesitan
ayuda para que ellos mismos puedan llegar a los acuerdos.

De igual forma, la mediación parte de la premisa de que cada familia conoce las razones por las que han llegado a la
situación de conflicto y que cada uno de los integrantes debe poner de su parte para superar esta situación.

De esta manera, lo fundamental es enfrentar los conflictos y resolverlos de forma saludable y pacífica,
sin usar la violencia. Es decir, centrándose en su solución por medio de herramientas y habilidades como el
diálogo, la negociación y la búsqueda de consensos.

5. Cierre del taller. Compromisos a nivel personal, familiar y comunitario


Para finalizar las reflexiones y actividades desarrolladas durante el taller, la persona facilitadora solicitará a los
participantes ponerse de pie y organizarse uno al lado del otro, formando un circulo. En la mitad del circulo se
colocará una planta, la cual puede ser natural (en caso de tenerla) o también puede dibujarse en un papelote.

La persona facilitadora pedirá a los participantes que cirren los ojos y que internamente piensen
cuál es su compromiso personal, familiar o comunitario para cultivar una convivencia saludable y
armónica en sus familias.
www.flacsoandes.edu.ec

26 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Posteriormente, la persona facilitadora


cogerá un vaso con agua y regará la
planta mientras menciona al grupo su
compromiso para cultivar una conviven-
cia saludable y pacífica en su familia. En
el caso de haber dibujado la planta, la
persona facilitadora colocará encima del
papelote un dibujo de una gota de agua,
previamente elaborada, mientras mani-
fiesta su compromiso.

Finalmente, solicitará a los participantes


que cada uno de ellos riege la planta con
una gota de agua mientras mencionan al
grupo su compromiso personal, familiar
o comunitario.

6. Material de apoyo. Convivencia, ciclo de vida y grupos de atención


La convivencia familiar requiere ser cuidada, de manera que hace falta construir permanentemente relaciones
y sentimientos armónicos en los hogares, asegurando bienestar y calidad de vida de las personas durante
todo su ciclo de vida.

En este sentido, a continuación se realizará una breve referencia sobre varios elementos que son específicos
de la convivencia con niñas y niños, personas adultas mayores y personas con discapacidad.

6.1 La convivencia con niñas y niños

Una buena convivencia familiar es esencial para el desarrollo integral y formación de las niñas y niños. Así,
por ejemplo, los reconocimientos y felicitaciones son buenas estrategias para estimular que las niñas y niños
adquieran hábitos y conductas para una convivencia armónica. Además, la expresión de sentimientos y la
sensación de querer y ser querido por sus familiares les produce bienestar emocional. En este sentido:

!
“Los niños y niñas cuyas familias son
cariñosas y estimuladoras tienen más Recuerda
posibilidades de desarrollarse sanos y
“La forma en que nos relacionamos con
felices; las expresiones de afecto y formas
nuestros hijos influye poderosamente en
adecuadas de comportamiento en la
familia promueven un clima emocional la forma en que él o ella va construyendo
positivo y los prepara mejor para el futuro” su imagen y autoestima. Un niño necesita
(UNICEF, 2010: 20). sentirse escuchado con atención,
acogido en sus penas, y satisfecho
en sus necesidades, especialmente
Escuchar en forma activa y ser empáticos por quienes son las personas adultas
con los hijos desde que ellos son muy chi- más importantes para ellos. Esto los
cos es una buena forma de sembrar con- hace sentirse seguros y confiados para
fianza, de ese modo es más probable que
expresar sus sentimientos y necesidades”
se atrevan a contar sus cosas y recurrir a
sus padres cuando necesitan ayuda. Los (UNICEF, 2003b: 19).
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 27

frutos de esta confianza pueden facilitar la relación entre padres e hijos durante la adolescencia, período en
que las dificultades de comunicacón tienden a ser mayores.

Por otra parte, poner normas y límites claros y firmes conlleva beneficios para nuestras niñas y niños puesto
que les ayuda a vivir en sociedad y los protege de los riesgos debido a que aprenden a distinguir los peligros,
razón por la cual es necesario inculcarlos con amor, afecto, respeto y sobre todo con el ejemplo.

! Recuerda

“Los adultos (madres, padres, abuelos, etc.) tienen la responsabilidad de poner normas
y límites a sus niños y niñas para protegerlos y ayudarlos a convivir en sociedad. Deben
ponerse de acuerdo en las normas y límites, sin desautorizarse frente a los niños y niñas.
Si hay normas y límites establecidos de antemano, es más fácil enfrentar adecuadamente
el comportamiento de ellos y se evitarán reacciones inadecuadas como gritos, insultos o
golpes” (UNICEF, 2010: 33).

Cuando se ponen límites también es importante explicar el por qué de ellos, así como generar espacios, de
acuerdo con su edad, para que vayan tomando decisiones y responsabilidades.

De esta manera, se evidencia que en el entorno familiar es donde las personas viven un “proceso de desa-
rrollo físico y mental hasta llegar a ser autónomos, a la vez que los padres asumen la función de transmitirle
sus valores y costumbres y prepararle para integrarse en las pautas culturales y sociales vigentes” (Instituto
Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos, 2010b: 17). En este sentido, es importante tener en
cuenta que tanto el exceso como la falta de nomas y limites familiares puden llegar a ser perjudiaciales, por lo
que cada familia debe buscar el equilibrio entre las normas de convivencia y los espacios para que las niñas y
niños, de acuerdo con su edad, puedan tomar decisiones y ejercitar su autonomía.

Cuando los adultos son Los niños y niñas suelen ser


Seguros de sí mismos y actuan con confianza, au-
Cariñosos y fijan límites adecuados tonomía y creatividad, además de controlar sus impul-
sos y tolerar la frustración.
Activos, independientes, sociables, poco agresivos,
Cariñosos y fijan pocos o ningún límite
desobedientes, irrespetuosos.
Sumisos, obedientes, esforzados, dependientes, poco
Cariñosos y muy estrictos
críticos, muy pegados a las normas.
Muy tímidos, les cuesta relacionarse con otros niños y
Hostiles y muy estrictos adultos, se tienen poca confianza, tienen pocos intere-
ses, sienten mucha culpa, son muy obedientes.
Muy agresivos, descontrolados, rencorosos, pueden o
Hostiles y fijan pocos o ningún límite no tener iniciativa, transgreden las normas como algo
natural.
Fuente: Ministerio de Educación – CEDEP (2002). Manolo y Margarita aprenden con sus padres. Manual para la educadora. Santiago, Chile.
www.flacsoandes.edu.ec

28 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Recuerda educar en el buen trato y la resolución pacífica de conflictos, puesto que si la niña o el niño “ve que
los adultos que lo rodean resuelven sus conflictos de manera constructiva y pacífica, él o ella también desa-
rrollará este tipo de estrategia para enfrentar sus problemas” (UNICEF, 2010: 27), de manera que enseñar
con el ejemplo tiene un impacto muy positivo en la convivencia familiar y social.

¿Por qué es tan importante excluir el uso del castigo físico y psicológico hacia niñas y niños?
- Los niños maltratados muestran mayor agresividad en las relaciones con sus pares, y tienden a
vivir como amenazantes las situaciones de acercamiento, lo que los hace estar a la defensiva en
forma permanente. Otros niños pueden reaccionar al maltrato poniéndose muy retraídos, aislán-
dose de la gente.
- El maltrato infantil se ha asociado también con limitaciones en el desarrollo cognitivo, con trastornos
del aprendizaje, repitencia y deserción. Además, cuando un niño o niña es agredido física o psicoló-
gicamente se le está enseñando que esa es una manera válida de resolver conflictos, la que luego
aplicarán en el resto de sus espacios de desarrollo (escuela, amigos, etc.).
- Los niños que viven maltrato presentan en mayor medida una baja autoestima, carecen de con-
fianza en sí mismos, tienen perspectivas de futuro inciertas y frecuentes manifestaciones de tristeza
e infelicidad.
- Los niños que viven situaciones de maltrato tienen un daño importante en el vínculo con sus padres
(agresores), lo que los predispone a desconfiar de otros adultos que los rodean, y a limitar sus po-
sibilidades de exploración del mundo externo (UNICEF, 2003: 10).

6.2 La convivencia con personas adultas mayores

Sin duda, el estado anímico es determinante en la calidad de vida de todo ser humano. Cuando una persona
adulta mayor convive más tiempo con su familia, se siente mejor, ríe más y sus defensas se fortalecen.

En los últimos diez años se habla mucho de la población adulta ma-


yor, su estado actual, y las condiciones en que se desenvuelven; esto Cuando se dedica más
permite estar conscientes de la magnitud e importancia de esta franja tiempo a las personas
poblacional y prestar mayor atención al relacionamiento que tenemos adultas mayores, se
con ellos desde diferentes espacios de interacción familiar o social. En sienten felices y sus
este proceso se observan de ellos, caras desencajadas; es decir, se defensas se fortalecen.
habla mucho pero, ¿cómo se habla?, siempre de la misma manera,
buscando movilizar la compasión, la piedad humillante. Mostrando esta
edad como la antesala del final o el infierno mismo. No nos damos cuenta que cuando hablamos de ellos
en realidad estamos hablando de nosotros mismos, más cerca o más lejos de llegar indefectiblemente a esa
edad, y por ahora en tránsito.

Convivir con una persona adulta mayor es vincularse y participar en sus actividades diarias respetando la
necesidad y ritmo individual, es brindarle ayuda para que desarrolle sus actividades cotidianas siempre que
la requiera. Para que la convivencia funcione las familias deben tener una buena dosis de paciencia y com-
prender sus condiciones de vida y su situación actual de salud física y emocional. Todas las personas somos
diferentes; por ello, cada una de las situaciones también serán únicas y todos afrontarán desafíos distintos, por
tanto hay que procurar acciones integrales4.

4 Permite que la persona siga siendo independiente y responsable de su autocuidado físico, emocional, mental, espiritual y recreativo, manteniendo un
equilibrio que le permitirá mantenerse saludable y vital dentro del entorno social (Cafam, 2017).
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 29

La convivencia muestra la vertiente social5 de un ser humano. Antes que estar bien con los demás, es indis-
pensable que la persona que realiza cuidados se encuentre bien con ella misma, cuidar de sí y sentirse bien;
de lo contrario, resultará muy difícil disfrutar de las relaciones sociales y la convivencia con los demás,
cuando alguien no está bien consigo mismo, sufre al tener que estar con los demás. A continuación presen-
tamos una serie de aspectos a tener en cuenta:
• Duerma: La persona que cuida debe dormir lo suficiente para garantizar un buen estado de ánimo y
salud. Aproveche cuando la persona adulta mayor duerme, para dormir usted también.
• Haga ejercicio: La persona que cuida debe ejercitarse para mantenerse en buenas condiciones físicas,
disminuir la tensión, mejorar el sueño, subir el ánimo y prevenir lesiones por el esfuerzo físico. A continua-
ción alguna sugerencias de ejercicios:

Inclinamos la cabeza hacia la derecha, luego hacia


la izquierda, tratando de que los movimientos
sean suaves esto lo hacemos diez veces a la
izquierda, diez veces a la derecha. Esto ayuda a
relajar los músculos del cuello y parte del hombro.

Inclinar la cabeza hacia delante y hacia atrás tra-


tando de que los movimientos sean suaves, ésto
lo hacemos diez veces adelante, diez veces atrás,
este es un estiramiento que ayuda a la región
cervical.

Movimiento de los hombros. Hacer círculos le-


vantando los hombros, repetir diez veces, pode-
mos también alzar los brazos y luego bajarlos,
contribuye aliviar el dolor de los hombros.

5 Conducta social del ser humano en su contexto (CCE, 2015).


www.flacsoandes.edu.ec

30 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Hacer movimientos con los brazos bien arriba


y lo bajamos, acompañarnos de la respiración,
subimos los brazos inhalamos, repetir diez veces
bajamos los brazos exhalamos.

Apoyando nuestra mano en la pared con los


dedos apuntando hacia atrás, nos movemos un
poco hacia adelante y con la mano que queda
libre tratamos de llevarlos un poco hacia atrás,
debe sentirse estiramiento en la palma de la
mano, todo el brazo y parte del pecho esto nos
ayuda a liberar la tensión que se acumula en los
brazos.

Movimiento de los pies como que los ponemos


en puntas, también podemos hacer círculos con
un pie diez repeticiones y luego con el otro pie
otras diez repeticiones.

Buscar un lugar muy cómodo recostarse sobre


una alfombra, manta o colchoneta boca arriba,
levantamos una pierna lo más alto posible y lue-
go bajamos, luego la otra pierna y luego bajamos
repetimos el proceso diez veces, esto sirve para
fortalecer el abdomen, que debe estar fuerte para
proporcionar soporte y equilibrio cuando es ne-
cesario sostener a personas adultas mayores.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 31

Consuma una dieta balanceada


La persona que cuida a población adulta mayor debe mantener una alimentación sana y respetar los horarios;
se aconseja consumir:
• Moras muy beneficiosa para aliviar el estrés.
• Almendras contienen zinc, otros nutrientes claves para el mantenimiento de un estado de ánimo
equilibrado.
• Chocolate negro además de delicioso, hormona del estrés que causa los síntomas de ansiedad.
• Avena es una excelente fuente de vitamina B, magnesio y fibra. Y por tanto un alimento fundamental
para combatir el estrés.

Evite el aislamiento
• Evite aislarse totalmente de sus círculos sociales.
• Mantenga las relaciones sociales gratificantes que le proporcionen diversión, entretenimiento, compren-
sión y apoyo emocional.

Entreténgase
• Es muy importante recrearse, procure divertirse, leer, ir al cine, pintar, o realizar otra actividad que le guste.
• La risa, el amor y la alegría son fundamentales para mantener una buena salud.
• Evite el alcohol para animarse.

Salga de casa
• Busque alguien que le ayude a cuidar a la persona adulta mayor y reserve tiempo para salir, para hacer
otras actividades y liberar la mente.
• Si no es posible, pase un rato con usted misma en otra habitación de la casa, relájese, escuche música
agradable, complazca un capricho: postre, helado, etc.

Planifique las actividades


Haga una lista de actividades necesarias y dé descanso para el día según las necesidades.

Pida y acepte ayuda


• La persona principal que realiza cuidado debe tener apoyo emocional y entendimiento de su red de
apoyo y cuidadores secundarios, familiares, amigos, vecinos, compañeros.
• Busque información sobre la enfermedad, evolución, tratamiento y recursos disponibles para la misma.
• Encuentre alivio en la meditación, para lograr relajación haga el siguiente ejercicio:

1.- Repita estas frases que provocan relajación:

Este es mi espacio en
donde encuentro calma Siempre encuentro la
fortaleza para continuar Permito que la paz se
instale dentro de mí

2.- Tome aire, repita mentalmente la frase elegida mientras expulsa el aire pausadamente
3.- Repita varias veces:

SI TU ESTÁS BIEN TODOS LOS MIEMBROS DE LA FAMILIA LO ESTARÁN


www.flacsoandes.edu.ec

32 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

¿Cómo mantener una buena convivencia con una persona adulta mayor?

1. Intimidad: Las personas adultas mayores tienen pudor como cualquiera de nosotros. Respetar su
intimidad es respetarlos como personas.

2. Cultura: Tienen hábitos característicos, culturales, que le significan identidad. Debemos respetarles
sus costumbres como por ejemplo, ir a misa, escuchar su tipo de música, gustar de su programa de
televisión, tener estampitas en su mesa de luz, etc. No respetar su cultura personal es una forma de
violencia y maltrato.

3 Participación: La pertenencia debe ser participativa, es decir, activa. No es solamente un estar con
los otros sino un ser con los otros. Sentir que hay algo que aún puedo hacer, compartir, es de
importancia fundamental para la persona mayor. Permitirle espacios para aprender algo nuevo, con-
tinuar desarrollando intereses o hobbies, asumir trabajos que pueda realizar, actividades domésticas,
responsabilidades cotidianas, también promueve calidad de vida.

4 Intergeneracionalidad: Las personas adultas mayores necesitan el contacto intergeneracional. En


realidad, todos lo necesitamos. La vida familiar es un ámbito de crecimiento, entre otras cosas, por-
que nos permite la riqueza de ese contacto. Es un beneficio para abuelos y nietos, jóvenes y adultos.

5 Escucha: Las personas adultas mayores tienen muchas cosas para dar. Experiencia acreditada en
tantos años de vida, cuentan con historias que dan testimonio de la historia familiar, la tradición.
Necesitan transmitirlo y la familia necesita recibirlo.

6 Ser mayor significa seguir siendo: Por sumar años uno no deja de ser el que es. Es decir, si una
señora ha sido muy coqueta toda su vida, por ser mayor, no deja de serlo. Aún cuando esté en
cama, en un geriátrico o en silla de ruedas, sigamos permitiéndole maquillarse, arreglarse el cabello,
regalémosle aros, aretes etc. Siguen siendo las mismas mujeres y hombres que fueron siempre. Ni
los años ni la enfermedad significan que “han dejado de ser lo que son”, y aún cuando su imagen
ha cambiado, son en esencia las mismas personas.

7 Comprender, no entender: Los vínculos se sostienen por la comprensión, no por el entendimien-


to. Es decir, no hace falta entender al otro para comprenderlo. La lógica de las personas adultas
mayores muchas veces no es entendida por la lógica de los demás. Los hijos muchas veces no
entienden las razones de sus padres mayores. Podemos no entenderlos, pero no podemos dejar de
comprender sus emociones, sus sentimientos y sus necesidades.

8 Compartirlo todo: El mito expresa que: la convivencia con ancianos es difícil, cuando la realidad es
que toda convivencia es compleja. Una de las claves para lograrlo es compartirlo todo, es decir, lo
que hay y lo que se carece. Cuando en un vínculo uno está muy bien a costa de que el otro esté muy
mal, no sirve. Busquemos una situación que aporte sentido para todos, la mejor situación posible.
La mejor, no menos, posible, no más. Dejar de vivir mi vida para cuidarlo a papá o mamá, no sirve
ni para uno ni para el otro.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 33

6.3 La convivencia con personas con discapacidad

El Estado ecuatoriano ha promovido diferentes programas y servicios con el objetivo de brindar una atención
integral a las personas con discapacidad, su inclusión en las diversas actividades sociales y comunitarias y la
promoción de la corresponsabilidad por parte de las familias en la atención y cuidados necesarios para mejorar
su calidad de vida y fomentar una convivencia familiar saludable.

Al tener en cuenta que las personas con discapacidad hacen parte de poblaciones vulnerables de la sociedad,
la familia constituye una de las redes de apoyo más importantes y fundamentales en su desarrollo físico, emo-
cional e intelectual. De acuerdo con el Informe Mundial sobre la Discapacidad, elaborado por la Organización
Mundial de la Salud, las personas con discapacidad y sus familias pueden: “Ayudar a otras personas con dis-
capacidad mediante el apoyo entre pares, formación, información y asesoramiento, promover los derechos de
las personas con discapacidad dentro de sus comunidades locales, participar en campañas de sensibilización
y foros” (OMS, 2011), en los cuales se podrá definir las prioridades para incidir en las políticas públicas de
los gobiernos nacionales, quienes deben incluir en sus agendas la promoción de la salud, la comodidad y la
dignidad de las personas con discapacidad.

En este contexto, la convivencia familiar con una persona con discapacidad, implica fortalecer valores como: la
empatía, el respeto, la solidaridad, el diálogo, el compromiso, la gratitud, el cariño, la tolerancia, el sentido del
humor, entre otras, para enfrentar las dificultades que se presenten en la vida cotidiana, frente a las cuales “las
familias se sobreponen, enriquecen, maduran, se vuelven más fuertes y hasta mejoran problemáticas previas
presentes en su seno” familiar (Núñez, 2003, Citado por Ortega, Torres, Garrido y Reyas, 2006).

Canalizar la energía de las personas con discapacidad a través de actividades que puedan desarrollar en su
hogar y comunidad, permite que ellos aprecien y disfruten de sus propios logros, lo cual aumentará la auto-
estima, mejorará las relaciones con los demás miembros de la familia, potenciará la comunicación asertiva,
mejorando la convivencia, integración y calidad de vida de las familias (Rodríguez, Verdugo y Sánchez, 2008).

Elementos para fortalecer una convivencia familiar saludable con personas con discapacidad:

En primer lugar, es importante señalar que la convivencia familiar con personas con discapacidad, se beneficia
al realizar cambios o adecuaciones en la estructura de la vivienda, por ejemplo, proveer accesos más amplios
en la habitación, el baño y la cocina y si es posible, que éstos estén construidos en la primera planta. A partir
de estos arreglos se fomenta que las personas con discapacidad puedan participar en la mayoría de las acti-
vidades que se realizan en el espacio familiar.

De igual forma, el compartir más tiempo entre los miembros de la familia ayudará a que las personas con
discapacidad puedan dialogar, aportar, participar y ser incluidas en las actividades, fortaleciendo los lazos y
convivencia familiar.

Para que la interacción entre los miembros de una familia sea lo más adecuada posible, es ne-
cesario que el sistema familiar sea capaz de enfrentar las crisis, expresar los afectos, permitir el
crecimiento individual de sus miembros y producir el intercambio o interacción constante entre
ellos, respetándose la autonomía y el espacio del otro, la comunicación deberá ser clara y directa,
las funciones de sus miembros estarán bien establecidas, así como sus responsabilidades, y predo-
minará entonces la flexibilidad del sistema familiar (Ojeda, 1998, citado por Pérez y Parra, 2007).
www.flacsoandes.edu.ec

34 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Lo que tú puedes hacer:


- Si la persona tiene una discapacidad motriz y requiere de una silla de ruedas u otro elemento de apoyo
como muletas o prótesis, pregúntale cómo puedes ayudarle apropiadamente, recuerda que cada vez
que tengas una conversación larga con ella o él, debes acomodarte de tal forma que ambos queden
con los ojos al mismo nivel, esta acción permitirá demostrar el respeto que le tienes y a su vez ellos
sentirán, que son apreciados en dicho ambiente familiar. De igual forma, implica respetar el ritmo de
ellos, ya que en la mayoría de los casos su desplazamiento es más lento, evita que los empujen y no
los dejes solos cuando tienen que trasportar objetos o paquetes (Conadis, 2014). Si llevas a cabo
estas recomendaciones estarás propiciando un escenario de confianza y seguridad entre la persona
con discapacidad y los demás miembros de la familia.
- En el caso de las personas sordas, la comunicación es vital para una convivencia saludable, por lo tanto,
tú y la familia podrían aprender el lenguaje de señas, si no es posible, debes hablar de una manera
clara y pronunciando bien las palabras, a un ritmo normal, directamente con el o ella, manteniendo el
contacto visual y además puedes utilizar las expresiones faciales, gestos o movimientos de tu cuerpo
para que él o ella puedan entender más fácilmente lo que quieres comunicarles.
- La convivencia con una persona con discapacidad intelectual, implica que tú y los demás miembros
de la familia sean comprensivos y tolerantes, ya que ella o él necesitan más tiempo para comprender
la situación que se presenta; sin embargo, debes procurar que la persona con discapacidad se des-
envuelva sola en el resto de actividades. Esto significa, que tú y todos los familiares, deben procurar
que las personas con discapacidad, desarrollen habilidades cotidianas del hogar, como el cuidado de
la ropa, realizar algunas tareas relacionadas con la cocina, higiene y a nivel general utilizar el teléfono
o artefactos eléctricos, entre otros, “con la finalidad de que adquieran destrezas que les permitan ser
más independientes” (Vicepresidencia de la República del Ecuador, 2011).
- La convivencia familiar con una persona con discapacidad visual total, implica que los miembros del hogar
conozcan cuál es la mejor manera para apoyarla en cada momento del día, es importante que toda la
familia se involucre y participe responsablemente en su cuidado, expresándoles el cariño y afecto que les
tienen. Las acciones a tener en cuenta son: ofrézcale ayuda si observa que vacila, o bien si existe algún
obstáculo, si le ofrece o indica alguna cosa, descríbales de lo que se trata, infórmele en que lugar exacto
se encuentra lo indicado, utilice palabras de guía como “izquierda”, “derecha”, “adelante”, “atrás”, “arriba”,
“abajo”, etc., no lo deje solo sin una advertencia previa, no deje obstáculos en el camino, infórmele cuando
se muevan o cambien muebles de su lugar habitual, no coloque alfombras o tapetes pequeños en el suelo
y deje los objetos de uso cotidiano siempre en el mismo lugar. (Conadis, 2014).

! Recuerda que en nuestras relaciones familiares siempre es mejor:

• Escuchar activamente
• Expresar las expectativas mutuas
• Ponerse en el lugar de la otra persona
• Apoyar al otro
• Actuar con cariño y respeto
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 35

Cronograma para el desarrollo del taller

Actividad Tiempo Temas que serán trabajados

Bienvenida a los participantes a


nombre del MIES.
Presentación de los objetivos, 10 minutos
metodología y resultados esperados
del taller.

Actividad 1: Esta actividad permitirá reflexionar sobre los valores


“La olla de Lorenzo” 15 minutos familiares y su relevancia para una convivencia
armónica.

Discusión participativa sobre contenidos:


1. La convivencia en las familias.
1.1. Promover la equidad, justicia y reconocimiento
15 minutos
de “las otras personas” en nuestras familias.
1.2. Generación de ambientes de estimulación,
respeto, cariño y cuidado.

Actividad 2: Esta actividad permitirá sensibilizar sobre la


“La familia cruza el río…” importancia de la comunicación asertiva y el trabajo
20 minutos
colaborativo como elementos que permiten una
buena interacción social y familiar.

Discusión participativa sobre contenidos:


2. Comunicación familiar asertiva: Sabemos dialogar
15 minutos y escuchar.
2.1. La comunicación asertiva.
2.2. La escucha activa y empática.

Actividad 3: Esta actividad permitirá introducir las principales


“Buscando las soluciones …” herramientas de la resolución pacífica de conflictos
25 minutos
y promover el énfasis en la búsqueda de soluciones
justas y equitativas.

3. Resolviendo pacíficamente los conflictos en las


20 minutos familias: La negociación y búsqueda de consensos.
4. La mediación.

Actividad de cierre:
Compromisos a nivel personal,
15 minutos
familiar y comunitario

Tiempo total 135 minutos


www.flacsoandes.edu.ec

36 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Material recomendado
Ley de Arbitraje y Mediación. Normativa aprobada por el Estado ecuatoriano (2006, modificada en 2009)
que promueve mecanismos alternativos de resolución de conflictos como el arbitraje, la mediación y la me-
diación comunitaria. El artículo 43 de esta normativa define la mediación como “un procedimiento de solución
de conflictos por el cual las partes, asistidas por un tercero neutral llamado mediador, procuran un acuerdo
voluntario, que verse sobre materia transigible, de carácter extrajudicial y definitivo, que ponga fin al conflicto”.

Tiempo de crecer. Guía para la familia - Cómo desarrollar relaciones positivas en la familia. Publi-
cación del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, orientada a fortalecer y potenciar la expresión
de sentimientos, comunicación y relaciones interpersonales en las familias que contribuyan al crecimiento y
desarrollo de niñas y niños, en el marco de relaciones familiares positivas y armónicas.

La comunicación en familia. Comunicarnos de forma sana con quienes vivimos diariamente. Publi-
cación del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, que analiza el estilo de comunicación familiar,
explora los nudos (dificultades) de la comunicación y promueve estrategias de comunicación efectiva.

Cómo resolver los conflictos familiares. Publicación del Instituto Complutense de Mediación y Gestión de
Conflictos que estudia las especificidades de los conflictos familiares, los identifica como oportunidades para
crecer y fomenta su resolución por medio de la escucha activa, el lenguaje propositivo, la participación, la
manifestación de afecto, la capacidad para cambiar el escenario, entre otros elementos.

La familia diáloga y llega a acuerdos: La mediación familiar. Publicación del Instituto Complutense de
Mediación y Gestión de Conflictos que explica el rol que juega la persona mediadora para contribuir a desblo-
quear una situación de conflicto familiar, facilitando la búsqueda de soluciones.

Glosario
Asertividad: Es la habilidad de expresar nuestras opiniones y sentimientos, sean o no agradables para otras
personas, de forma clara y directa, sin ser hostiles ni sentirnos culpables por hacerlo.

Convivencia: Es llegar a vivir juntos entre distintos sin los riesgos de la violencia y con la expectativa de
aprovechar fértilmente nuestras diferencias. Convivir es acatar reglas comunes, contar con mecanismos cultu-
ralmente arraigados de autorregulación social, respetar las diferencias y acatar reglas para procesarlas.

Equidad: Justicia e imparcialidad en un trato o un reparto.

Equidad de género: Significa que mujeres y hombres, independientemente de sus diferencias biológicas,
tienen derecho a acceder, con justicia e igualdad, al uso, control y beneficios de los bienes y servicios de la
sociedad, así como a tomar decisiones en todos los ámbitos de la vida social, económica, política, cultural y
familiar.

Empatía: Es la capacidad de una persona para ponerse en el lugar del otro, identificarse con él o ella, com-
partir sus sentimientos y circunstancias; comprender las causas que explican sus actitudes y comportamientos.

Respeto: Es el reconocimiento, consideración y atención que se le tiene a las otras personas. Un sujeto
cuando es respetuoso acepta y comprende las maneras de pensar y actuar distintas a las de él o ella. Signi-
fica reconocer que todas las personas son valiosas, que tienen los mismos derechos y que poseen dignidad
humana. El respeto es la base de la convivencia.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 37

Responsabilidad: Capacidad para reconocer y aceptar las consecuencias de un hecho realizado libremente.
Una persona responsable es capaz de responder y enfrentar con inteligencia, esfuerzo, interés, creatividad y
convencimiento las situaciones que se le presentan en la vida de acuerdo con su edad y actividad.

Solidaridad: Es la adhesión circunstancial a la causa de otros individuos. Somos solidarios cuando nos damos
cuenta de que existen individuos o grupos a los que podemos ayudar y nos preocupamos por esto. Para que
la solidaridad esté completa no es suficiente darse cuenta de que podemos brindar apoyo, sino hacerlo, es
decir, se trata de reconocer las necesidades de los demás y actuar.

Tolerancia: Es el respeto a las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias
a las propias. Una persona tolerante es capaz de aceptar sin molestias o nerviosismo las actitudes y caracte-
rísticas de otras personas aunque sean diferentes de las suyas, siempre y cuando no le causen un perjuicio o
afecten su bienestar.

Valores: Son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como
personas. Los valores también son entendidos como convicciones profundas de los seres humanos que de-
terminan su manera de ser y orientan su conducta.

Bibliografía
Asociación Matiz (2015). Resolución pacífica de conflictos. Guía de recursos y experiencias prácticas para
educadores/as. España: Ayuntamiento de Vitoria - Gasteiz.

Carrier, Isabelle (2010). El cazo de Lorenzo. Madrid: Editorial Juventud.

Consejo Nacional para la Igualdad de Discapacidades, Conadis; Ministerio de Educación, (2014). Los sueños
pueden ser realidad. Seis historias inspiradoras. Guía para padres y maestros. Ecuador.

Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF (2015). Te suena familiar. Guía para la familia. Santiago:
UNICEF.

Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF (2010). “Cómo desarrollar relaciones positivas en la fami-
lia”. En: Tiempo de crecer. Guía para la familia. Santiago: UNICEF & Fondo de Solidaridad e Inversión Social,
FOSIS.

Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF (2003). Aprender a resolver nuestros conflictos. Santiago
de Chile: UNICEF, Fundación de la Familia & Fundación Integra.

Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF (2003b). La comunicación en familia. Comunicarnos de
forma sana con quienes vivimos diariamente. Santiago de Chile: UNICEF, Fundación de la Familia & Fundación
Integra.

Instituto Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos (2010). Cómo resolver los conflictos familiares.
Madrid: Comunidad de Madrid - Consejería de Familia y Asuntos Sociales.

Instituto Complutense de Mediación y Gestión de Conflictos (2010b). La familia diáloga y llega a acuerdos: La
mediación familiar. Madrid: Comunidad de Madrid - Consejería de Familia y Asuntos Sociales.
www.flacsoandes.edu.ec

38 Ministerio de Inclusión Económica y Social • Escuela de Familias

Ministerio de Educación (2002). Manolo y Margarita Aprenden con sus padres. Manual para la educadora.
Santiago de Chile: CEDEP.

Mockus, Antanas (2002). Convivencia como armonización de ley, moral y cultura. Revista Perspectiva, Vol.
XXXIII, No. 1.

Organización Mundial de la Salud, (2011). Resumen Informe Mundial sobre la Discapacidad. Ginebra.

Ortega, Patricia; Torres, Laura; Garrido, Adriana; Reyes, Adriana (2006). Actitudes de los padres en la sociedad
actual con hijos e hijas con necesidades especiales. En “Psicología y Ciencia Social. Año/Vol. 8, Número 001.
Distrito Federal México, Universidad Nacional Autónoma de México.

Ortega Ruiz, Rosario (2007). La convivencia: un regalo de la cultura a la escuela. Revista Idea, No. 4.

Pérez, Víctor; Zurama, Lorenzo. (2007). El impacto del déficit mental en el ámbito familiar. Revista Cubana de
Medicina General Integral.

Rodríguez, Alba; Verdugo, Miguel; Sánchez, María Cruz (2008). Calidad de vida familiar y apoyos a progenito-
res de personas con discapacidad intelectual en proceso de envejecimiento. En Revista Española sobre Disca-
pacidad Intelectual. Vol. 39 (3), Núm. 227. Salamanca: Instituto Universitario de Integración en la Comunidad.

Vicepresidencia de la República del Ecuador (2011). Modulo III. Calidad de vida y apoyos complementarios.
Quito, Editorial Ecuador.

Yudkin Suliveres, Anita (2007). Aprender a convivir: Principios y pautas en torno a por qué, para qué y cómo
construir cultura de paz. Revista Profesional, Vol. XXI, No. 1.
www.flacsoandes.edu.ec

Mejorando nuestra convivencia en la familia 39

Herramientas
de facilitación
ANEXOS
www.flacsoandes.edu.ec

40 Anexo 1. Cuento “La Olla de Lorenzo”

LA OLLA DE LORENZO
Isabelle Carrier

Editorial Juventud

1 2

3 4

5 6
www.flacsoandes.edu.ec

Anexo 1. Cuento “La Olla de Lorenzo” 41

7 8

9 10

11 12
www.flacsoandes.edu.ec

42 Anexo 1. Cuento “La Olla de Lorenzo”

13 14

15 16

17 18
www.flacsoandes.edu.ec

Anexo 1. Cuento “La Olla de Lorenzo” 43

19 20

LA OLLA DE LORENZO
Isabelle Carrier

Editorial Juventud

El cuento es una obra de Isabelle Carrier denominado “El cazo de


Lorenzo”, que fue publicado en 2010 por la Editorial Juventud.
Se realizó una adaptación del lenguaje para el contexto
latinoamericano. Su lectura y difusión es recomendada por la
Confederación Española de Organizaciones en favor de las
Personas con Discapacidad Intelectual (FEAPS).
www.flacsoandes.edu.ec

44 Anexo 2. Situaciones Familiares

Mantenimiento y Presupuesto y
aseo de la casa. gastos familiares.

Relación íntima Cuidado de los


de pareja. abuelos.

Comunicación entre Normas de


padres e hijos. convivencia.
Horarios de salidas Disciplina y castigos

Puedes ubicar una relación familiar.

Cuidado de un
familiar con
discapacidad.
www.flacsoandes.edu.ec
www.flacsoandes.edu.ec
www.flacsoandes.edu.ec

También podría gustarte