Chikung de Los Huesos - Odt
Chikung de Los Huesos - Odt
Chikung de Los Huesos - Odt
Siéntese cómodamente y extienda sus brazos sobre el regazo. Las palmas de las manos deben estar
abiertas y los dedos relajados.
Inhale suavemente a través de la nariz en dirección al abdomen y ahora exhale todo el aire desde el
abdomen.
Hágalo varias veces, dejando salir la tensión con cada exhalación.
Lleve su atención a la punta del dedo índice de su mano izquierda.
La próxima vez que respire normalmente, simplemente deje que su atención recorra lentamente el
trayecto desde la punta del dedo hasta la base del mismo.
Mientras exhala por la nariz de manera natural, permita que la energía se quede en el dedo, y vuelva
a llevar su atención a la punta del índice. Repita este proceso con la siguiente respiración.
A la vez que una sensación de calor o pesadez se despliega en el índice izquierdo, compárelo con el
índice derecho donde aún no ha hecho la respiración de huesos. Esto le ayudará a desarrollar la
habilidad de sentir más profundamente e identificar la sensación que trae esta práctica.
A medida que el índice izquierdo se calienta o se vuelve más pesado continúe con esa misma
respiración de huesos con el resto de dedos de la mano izquierda, ya sea uno a uno o bien todos al
mismo tiempo.
Cuando la mano izquierda se haya vuelto más caliente o pesada compárela con la mano derecha,
donde no se ha hecho ninguna práctica todavía.
Cuando decida incorporar la mano derecha a la práctica, simplemente reproduzca las sensaciones de
la mano izquierda en la derecha y comience de nuevo dedo a dedo.
Una vez ambas manos se sientan pesadas continúe con la práctica subiendo cada vez más alto por
los brazos hasta llegar a los hombros.
Para hacer la práctica por los pies es mejor descalzarse y quitarse cualquier ropa apretada, ahora
puede llevar su atención a los dedos de los pies, ya sea uno a uno o bien todos juntos hasta el
tobillo.
Para llevar a cabo la respiración de huesos por la columna empiece por la punta del hueso sacro y
vaya recorriendo la columna con su atención hasta la base del cuello, y la misma sensación de calor
y pesadez se irá dando.
A medida que la práctica progresa y el cuerpo se relaja, la respiración común a través de la nariz
puede ir cambiando a una respiración cada vez más sutil. No intente forzar la respiración, deje que
cada vez sea más y más sutil y calmada. Continúe subiendo su atención por los huesos.
Finalmente es posible estar haciendo la respiración de huesos en todo el cuerpo, incluyendo los
dientes.
Mientras se desarrolla la práctica trate de respirar a través de todo el cuerpo al mismo tiempo, como
una esponja.
Si desea un conocimiento más específico de los huesos, se recomienda trabajar con un mapa
anatómico del esqueleto, para guiar la energía con mayor precisión.
Calendario de cursos
Febrero 2019