Pieles Sensibles y Congestivas y Sus Tratamientos
Pieles Sensibles y Congestivas y Sus Tratamientos
Pieles Sensibles y Congestivas y Sus Tratamientos
Las pieles reactivas van en un aumento. Cada vez son más las mujeres que acuden a la consulta
de dermatología y alergología para consultar diversas reacciones cutáneas. Cuando la piel "ya
no soporta nada" decimos que se ha vuelto reactiva. El medio ambiente más agresivo, con
mayor contaminación, variaciones climáticas, la luz, y la climatización de hogares y lugares de
trabajo, junto con un modo de vida a veces desequilibrado (estrés, cambios en el sueño,
descansos, etc.), la utilización de cosméticos inadecuados, son las causas principales del
recrudecimiento de esta alteración.
CONSIDERACIONES GENERALES
El ácido láctico, aplicado una vez en la cara, produce quemazón o escozor en las personas de
piel sensible (stingling en inglés significa punzar, doler) que aumenta durante varios minutos,
casi siempre sin signos externos de Imitación cutánea.
Estas personas (en inglés stinger) no son sensibles al ácido láctico, sino a otras sustancias
químicas muy diversas. La causa principal parece residir en su capa comea que es más delgada
y permeable. Las personas no sensibles (nonstinger) se hacen susceptibles si su piel sufre algún
daño previo (detergentes, quemaduras, solar, etc.).
Las pieles reactivas poseen un techo de tolerancia más bajo de lo normal; cuando su barrera
epidérmica se sobre reacciona, sus células de defensa reaccionan ante los agentes agresores.
Estas pieles reaccionan más rápida y violentamente a todo lo que le agrede. Cuanto más
frecuentes son estas agresiones, más intolerante se vuelve la piel. Con el tiempo, las
reacciones, lejos de disminuir, se intensifican. El riesgo que presenta es una evolución hacia
una piel de tipo alérgico.
Las pieles reactivas deben ser tratadas lo antes posible para frenar este proceso, ya que se
calcula que aproximadamente un 60% de las mujeres presentan este problema, sin olvidar a
hombres y a las etapas infantiles.
El síntoma principal es una hiperemia transitoria, que puede convertirse en una
sensación de quemazón y tirantez de la piel, e incluso llegar al dolor.
A estos síntomas se suman manifestaciones reactivas secundarias, como la
hiperfunción de las glándulas sebáceas, el estado seborreico, la hiperqueratosis, las
telangiectasias y la rosacea. Otras veces nos encontramos con piel seboestática
(alípica) con una capa córnea más delgada.
Por todo lo dicho, es importante la consulta médica previa al tratamiento estético, de
manera que se busque la estabilización del sistema nervioso vegetativo si fuera
necesario.
Las pieles sensibles pueden convertirse en pieles alérgicas, por lo que se deberán
cuidar que los cosméticos usados hipoalergénicos.
En la piel negra la imitación se observa como una mancha más oscura.
COSMETOLOGÍA ESPECÍFICA
PRINCIPIOS ACTIVOS
NECESIDADES CUTÁNEAS
• Descongestionar y tonificar
• Mejorar la circulación superficial
• Proteger frente a los agentes externos.
Los cosméticos serán ricos en flavonoides, que regulan la permeabilidad vascular las
manipulaciones, sobre todo el masaje, irán a mejorar la circulación sanguínea y activar el tono
vascular, ya que en estas pieles existe una importante atonía de las paredes de los vasos. En
cuanto a las técnicas, es conveniente tener en cuenta que este tipo de pieles no requiere ni
toleran excesivas manipulaciones. Las pulverizaciones tibias son técnicas que más la favorecen.
Se desea realizar un tratamiento preventivo, puesto que es una piel con tendencia congestiva,
pero no muy manifiesto, se puede realizar una gimnasia vascular, de manera que se aplica
calor y frio alternativamente para mejorar el tono de vasos sanguíneos. So empieza con calor y
se termina con frio. Este tipo de tratamientos se deben realizar con especial cuidado, Puede
utilizar la alta frecuencial con efectos descongestivos, interponiendo una gasa para facilitar el
movimiento del electrodo. También se puede usar la ionización para favorecer la penetración
de sustancias activas, o la galvanización, por su mejora de la permeabilidad vascular.
LA PIEL Y EL ESTRÉS
El estrés y la ansiedad son la causa oculta de ciertos desordenes de la piel. Asi, forúnculos,
orzuelos, etc. Aparecen en épocas de estrés, otras como psoriasis y eccema pueden empeorar.
En la nomenclatura no existe el concepto de "piel estresada" a pesar de la estrecha relación
existente entre el sistema nervioso vegetativo y la piel.