Trabajo Escrito Seminario Tuberculosis Pulmonar
Trabajo Escrito Seminario Tuberculosis Pulmonar
Trabajo Escrito Seminario Tuberculosis Pulmonar
FACULTAD DE MEDICINA
DOCTORADO EN MEDICINA
HOSPITAL NACIONAL ZACAMIL
“Medicina interna I”
Presentado por:
Parada Cruz, Katherine Elizabeth 2018010474
Paredes Arana, Fátima Geraldina 2017010692
Peña Cárcamo, Jorge Antonio 2019010051
Pérez Cruz, Maritza Beatriz 2017010883
Pérez Sánchez Julio César 2015020143
Piche Rivas, Mario César 2019010624
Pineda Cárcamo, Carla Melissa 2019010638
Quintanilla Contreras, María José 2018010301
Ramírez Menjívar, Karen Guadalupe 2019010978
Ramos Guevara, Bryan Agustín 2019010752
Reyes Torres, Andrea Gabriela 2018010076
Ríos Echeverria, Nelson Asael 2019010025
Rivas Delgado, Miguel Francisco 2019010516
Rivas García, William Andrés 2019010656
Rivas Hernández, Adriana Valentina 2018011043
Rivera Ortiz, Liliana Michelle 2016010741
Rivera Ríos, Sofía María 2019010846
San Salvador 16 de abril de 2023
Tabla de contenido
Introducción ........................................................................................................................ 3
Objetivos ............................................................................................................................. 4
Tuberculosis pulmonar ...................................................................................................... 5
1. Generalidades........................................................................................................... 5
2. Etiología .................................................................................................................... 5
3. Epidemiología ........................................................................................................... 6
4. Patogenia e inmunidad ............................................................................................ 8
5. Manifestaciones clínicas........................................................................................ 11
6. Diagnóstico ............................................................................................................. 15
7. Prevención .............................................................................................................. 18
8. Tratamiento Acortado Estrictamente Supervisado (TAES) ................................. 22
Bibliografía: ....................................................................................................................... 25
Anexos:.............................................................................................................................. 26
Introducción
La tuberculosis es una patología proveniente de bacterias específicamente del
complejo Mycobacterium tuberculosis; hoy en día se tienen investigaciones que
sugieren la presencia de esta enfermedad desde hace miles de años con un origen
en la región de África central, es importante mencionar que hasta la actualidad la
tuberculosis sigue en tendencia a ser una causa de morbilidad y mortalidad a gran
magnitud a nivel mundial en ámbitos de la salud publica razón suficiente para que sea
un tema que requiera atención urgentemente.
En base a lo anterior dentro de los datos brindados por la OMS se ha reportado que
alrededor de 7.1 millones de nuevos casos de TB (todas las formas, pulmonar y
extrapulmonar) se han desarrollado mayormente en los países en vías de desarrollo
esto no tomando en cuenta aquellos casos que no han podido diagnosticarse de
manera adecuada estimándose que en el mundo ocurren alrededor de 10 nuevos
millones de casos anualmente con una tasa de 130/100,000 habitantes. En
comparación en El Salvador se ha estimado con los últimos datos brindados para el
año 2020 con una incidencia de 17.2 casos por cada 100,000 habitantes en
MINSAL/ISSS y con 2275 casos presentados en centros penales.
Objetivo General:
Objetivos específicos:
1. Generalidades
Por lo general, la enfermedad afecta los pulmones, aunque hasta en un tercio de los
casos hay compromiso de otros órganos. La TB por cepas susceptibles a fármacos
es curable en casi todos los casos. Sin tratamiento, la enfermedad puede ser letal en
> 70% de los casos.
2. Etiología
Un organismo muy relacionado aislado en casos del oeste, centro y este de África es
M. africanum. El complejo incluye algunos miembros zoonóticos, como M. bovis
(bacilo tuberculoso bovino que de forma característica es resistente a pirazinamida) y
M. caprae (relacionado con M. bovis).
Además, hay informes raros de otros microorganismos que causan TB, incluye M.
pinnipedii, M. mungi, M. orygis, M. microti y poor último, M. canetti. No se conoce un
reservorio ambiental para ninguno de estos microorganismos.
3. Epidemiología
En el año 2019 la OMS recibió reportes de más de 7.1 millones de nuevos casos de
TB (todas las formas, pulmonar y extrapulmonar); 97% de los casos se registraron en
los países en vías de desarrollo.
Ocho países incluyeron el 66% de todos los casos nuevos: India, Indonesia, China,
Filipinas, Pakistán, Nigeria, Bangladesh y Sudáfrica. De todos los casos, 57%
ocurrieron en varones, 32% en mujeres y 11% en niños.
Se estima, que ocurrieron 1.4 millones de fallecimientos por TB (intervalo, 1.3 a 1.6
millones), incluidos 0.21 millones en personas que también tenían infección por VIH,
ocurridos en 2019, y 98% de ellas pertenecía a países en desarrollo
Durante los últimos años del decenio de 1980 y a inicios del decenio de 1990, las
cifras de casos informados de TB se incrementaron en los países industrializados.
Estos incrementos estuvieron relacionados en gran medida con la inmigración desde
países con alta prevalencia de TB; infección con VIH; problemas sociales como
incremento de la pobreza urbana, número de indigentes y consumidores de drogas,
así como la desaparición de los servicios para atención de la TB. Durante los últimos
años se han reducido las cifras de casos informados, y se ha iniciado su reducción o
estabilización en naciones industrializadas.
Datos recientes sobre tendencias globales señalan que para 2019 la incidencia de la
enfermedad era estable o disminuía en muchas regiones; tal tendencia comenzó en
2000 y al parecer persiste, con una disminución promedio anual 1.7% en todo el
mundo y de 2.3% entre 2018 y 2019. Dicha disminución mundial proviene más bien
de disminución en países subsaharianos de África, en los cuales la incidencia
aumentó progresivamente desde el decenio de 1980 como consecuencia de la
epidemia de VIH y la precariedad de sistemas y servicios sanitarios.
Al hablar de nuestro país tenemos que en los últimos diez años las tasas de incidencia
han oscilado entre 27.5 para el 2010 y 32.3 por 100,000 habitantes para el 2020, a
pesar de haber obtenido buena tasa de detección y de curación se ha observado un
incremento significativo de la incidencia de la enfermedad en los últimos años. (Anexo
1) Los casos de TB tienden a presentar un predominio del sexo masculino, con el 88.6
% de los casos y el femenino con 11.4 %, siendo las edades que presentan mayor
número de casos entre 25 y 34 años. (ver Anexo 2).
Por otra parte, la carga de casos nuevos de TB en todas sus formas, en los seis años
ha oscilado entre 1700 y 3600 casos. Si se analiza por cada proveedor, para el 2020
la tasa de incidencia para el Ministerio de Salud fue de 41.3 por 100,000 habitantes,
la seguridad social de 12.1 y la tasa para los Centros Penitenciarios de 46.6 por
100,000 habitantes; una tasa mayor que la tasa del Ministerio de Salud. Esta carga
mayor en penales está condicionada a la alta transmisibilidad de la enfermedad al
interior de los Centros Penitenciarios ya que por cada 8 sospechosos de padecer
tuberculosis se diagnosticó un caso; siendo la primera Institución que diagnostica la
mayoría de casos (46.6 %), condicionada a otros factores de riesgo como la
desnutrición y comorbilidades, lo que afecta directamente en el control de infecciones.
(3) (ver Anexo 3)
4. Patogenia e inmunidad
La mayor parte de los bacilos queda atrapada en las vías respiratorias altas y se
expulsan por el barrido ciliar de las células de la mucosa, pero una parte de ellos (por
lo general < 10%), llega hasta los alvéolos, un ambiente inmunorregulador singular.
Todavía no se aclara cómo el bacilo ingresa al parénquima, es posible que infecte las
células epiteliales en forma directa o que migre mediante los macrófagos infectados
a través del epitelio. Luego, las células dendríticas o monocitos infectados empiezan
a transportar bacilos al sistema linfático.
Los estudios sugieren que M. tuberculosis utiliza un mecanismo de virulencia
específico para trastocar las señales celulares del hospedador e inducir una respuesta
proinflamatoria inicial que estimule la expansión del granuloma y la proliferación
bacteriana durante esta fase incipiente decisiva.
Los datos de otro estudio han indicado que el fagosoma dentro de los macrófagos del
hospedador secreta AMP cíclico derivado de M. tuberculosis, y con ello trastoca las
vías de transducción de señales de las células, y estimula un incremento en la
secreción del factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α), más la incorporación de células
proinflamatorias. Al final, las quimiotaxinas y los productos bacterianos liberados
durante los ciclos repetidos de lisis celular e infección de macrófagos nuevos permiten
a las células dendríticas tener acceso a los bacilos.
Dichas células migran a los ganglios linfáticos regionales y presentan los antígenos
micobacterianos a los linfocitos T. En ese momento inicia el desarrollo de la inmunidad
celular y de la inmunidad humoral.
Estas etapas iniciales de la infección suelen ser dos a cuatro semanas de infección,
se desarrollan dos respuestas del hospedador a M. tuberculosis: respuesta
inmunitaria celular con activación de macrófagos y una respuesta que produce lesión
a los tejidos.
Los granulomas individuales que se forman durante esta fase de la infección varían
en tamaño y composición celular; algunos contienen la diseminación de las
micobacterias, pero otros no. La infección tuberculosa ocurre como consecuencia de
este equilibrio dinámico entre el microorganismo y el hospedador.
5. Manifestaciones clínicas
c. Tuberculosis de las vías respiratorias altas: casi siempre son una complicación
de la TB pulmonar cavitada avanzada y pueden afectar a la laringe, la faringe y la
epiglotis. Los síntomas consisten en ronquera, disfonía y disfagia, además de tos y
expectoración crónicas. Los signos dependen de la localización, es posible observar
úlceras en la laringoscopia. (1)
6. Diagnóstico
Los métodos diagnósticos a utilizar y el tipo de secreción o fluido corporal a evaluar
para la búsqueda de TB, dependerá del sitio anatómico en el que se sospeche la
enfermedad. (2)
1. Baciloscopias: es uno de los métodos más utilizados a causa de su bajo costo y
disponibilidad con una sensibilidad 40% a 60%, se puede realizar a través de la
técnica de coloración de Zielh Neelsen, en laboratorios más modernos se utilizan
tinción con auramina rodamina y microscopia de fluorescencia requiriendo un mayor
costo, pero poseyendo una mayor sensibilidad. (2)
El personal de salud debe identificar a la persona SR tanto a nivel intrainstitucional
como comunitario en los casos siguientes: Personas que se presenten con signos y
síntomas sugestivos, tales como: tos persistente con expectoración por quince días o
más, esputo sanguinolento, dolor torácico, fiebre, sudoración nocturna, pérdida de
peso y apetito. Pacientes adoleciendo exacerbaciones de enfermedades crónicas
respiratorias como: Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, en adelante EPOC,
asma, neumonías, entre otros, que no mejoran con el tratamiento convencional.
Personas que, habiendo sido examinados con radiografía de tórax por cualquier
causa, presenten imágenes sugestivas de TB pulmonar. Las personas con tos y
expectoración persistente que sean detectadas en las visitas domiciliarias, por
personal de salud o colaboradores voluntarios de la comunidad. Grupos de alto riesgo
como: privados de libertad, adultos mayores, personas con diabetes u otros tipos de
pacientes inmunosuprimidos (2)
Ante la presunción de que una persona adolezca de TB, luego de la historia clínica,
el personal de salud debe proceder a:
a) Registrarlo en el libro de sintomático respiratorio (PCT-2) y luego, registrar los
resultados de las baciloscopias o prueba Xpert MTB/RIF, en las casillas
correspondientes. (2)
b) Llenar en forma completa la solicitud del examen bacteriológico de tuberculosis
(PCT-3). Si se requiere, prueba Xpert MTB/RIF, cultivo o tipificación y resistencia,
debe especificarlo, enviar una boleta original y dos copias en los casos que se indique
cultivo o prueba Xpert MTB/RIF. (2)
c) Entregar al paciente los frascos previamente rotulados con el nombre completo y
número de muestra, para recolectar la muestra de esputo. El responsable del
programa de tuberculosis del establecimiento de salud, debe identificar a las personas
que han sido diagnosticadas con TB, registrarlo en el libro (PCT-1) para los pacientes
diagnosticados en hospitales y UCSF diagnosticadoras y referirlos con su respectiva
(PCT-8), al establecimiento de salud correspondiente o donde este lo solicite, para la
administración y seguimiento del tratamiento supervisado y si el paciente será tratado
en el mismo lugar donde se hizo el diagnostico se debe ingresar en el registro general
de casos (PCT-5) según el criterio de ingreso. (2)
Cuadro 1. Fuente Victorino Farga, José Antonio Caminero. Tuberculosis, tercera edición 2011.
Cuadro 3. Fuente Ministerio de salud. Lineamientos técnicos para la prevención y control de la tuberculosis en el
laboratorio clínico 2019.
Cuadro 5. Fuente Ministerio de salud. Equipo técnico para la actualización de lineamientos técnicos
para la prevención y control de la tuberculosis 2020
7. Prevención
La mejor forma de evitar la TB es diagnosticar y aislar rápidamente los casos
infecciosos y emprender el tratamiento apropiado hasta que los pacientes sean
calificados como no infectantes. Otras estrategias consisten en la vacunación con
BCG y el tratamiento preventivo en los individuos muy proclives a avanzar hasta la
enfermedad activa. (2)
Una vez que la valoración clínica apropiada ha descartado TB activa, los lactantes y
niños ˂ 5 años que se encuentren en contacto con casos infecciosos deben recibir
tratamiento preventivo incluso en ausencia de pruebas positivas para infección
tuberculosa, así como, las personas infectadas con VIH ˃ 1 años que han estado
expuestos a paciente con tuberculosis infecciosa deben recibir tratamiento sin
importan resultado de TST. Se pueden utilizar varios regímenes de TPT, el más usual
se basa en isoniazida sola en dosis diaria de 5mg/kg (hasta 300 mg/día) por 9 meses,
sin embargo, hoy en día la OMS recomienda un periodo terapéutico de 6 meses, un
régimen alternativo para adultos es la administración de rifampicina diaria por 4
meses, la cual también es eficaz con cepas resistentes a isoniazida. En algunos
países se usa un tratamiento con isoniazida y rifampicina diarias por 3 meses en
adultos y niños sin infección por VIH. (2)
Examen Físico:
Comenzó 24 horas previas con tos seca, agregó fiebre de hasta 39,5ºC y dolor
abdominal difuso a predominio de hemiabdomen inferior. En el momento de la
consulta (22 de setiembre de 2010) se encontraba con buen estado general, febril,
hemodinámicamente estable, sin síndrome funcional respiratorio. A la auscultación
pleuropulmonar se evidenció hipoventilación en cara axilar de hemitórax izquierdo.
Ante la persistencia del dolor abdominal se solicitó una ecografía que mostró múltiples
adenomegalias abdominales de hasta 25 mm de diámetro, que impresionaban
corresponder al territorio mesentérico y retroperitoneal medio. Se realizó una
tomografía computada (TC) de tórax, abdomen y pelvis, en la que se observó, en el
lóbulo inferior izquierdo, una extensa área de consolidación parenquimatosa, con
escaso broncograma áereo y varias imágenes hipodensas, con adenomegalias
hiliares izquierdas, subcarinales, en el receso pleura-ácigo-esofágico y látero-
traqueales derechas altas y bajas. Se identificaron múltiples adenomegalias
mesentéricas, con realce periférico y centro hipodenso, aspecto compatible con
necrosis. El resto del estudio no mostró alteraciones.
Los hallazgos tomográficos sugirieron el diagnóstico de TBC, a forma pulmonar y
abdómino-ganglionar, por lo que se decidió iniciar en forma empírica tratamiento
antituberculoso según pauta de la CHLA. En los días siguientes al cambio antibiótico
presentó buena evolución clínica, con desaparición de la fiebre y del dolor abdominal.