(Arrastrado) 5

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Comprensión lectora

Unidad

5 Ficha 41 Fecha:

Comprensión lectora: la novela

Lee atentamente el siguiente capítulo de la novela Malditas matemáticas. Alicia en el país de los
números.

Las matemáticas no sirven para nada


Alicia estaba sentada en un banco del parque que había al lado de su casa, con un libro y un cuaderno
en el regazo y un bolígrafo en la mano. Lucía un sol espléndido y los pájaros alegraban la mañana con sus
trinos, pero la niña estaba de mal humor. Tenía que hacer los deberes.
—¡Malditas matemáticas! ¿Por qué tengo que perder el tiempo con estas ridículas cuentas en vez de jugar
o leer un buen libro de aventuras? —se quejó en voz alta—. ¡Las matemáticas no sirven para nada!
Como si su exclamación hubiera sido un conjuro mágico, de detrás de unos matorrales que había
junto al banco en el que estaba sentada salió un curioso personaje: era un individuo larguirucho, de rostro
melancólico y vestido a la antigua; parecía recién salido de una ilustración de un viejo libro de Dickens que
había en casa de la abuela, pensó Alicia.
—¿He oído bien, jovencita? ¿Acabas de decir que las matemáticas no sirven para nada? —preguntó
entonces el hombre con expresión preocupada.
—Pues sí, eso he dicho. ¿Y tú quién eres? No serás uno de esos individuos que molestan a las niñas en los
parques…
—Depende de lo que se entienda por molestar. Si las matemáticas te disgustan tanto como parecen
indicar tus absurdas quejas, tal vez te moleste la presencia de un matemático.
—¿Eres matemático? Más bien pareces uno de esos poetas que van por ahí deshojando margaritas.
—Es que también soy poeta.
—A ver, recítame un poema.
—Luego, tal vez. Cuando uno se encuentra con una niña testaruda que dice que las matemáticas no
sirven para nada, lo primero que tiene que hacer es sacarla de su error.
—¡Yo no soy una niña testaruda! —protestó Alicia—. ¡Y no voy a dejar que me hables de mates!
—Es una actitud absurda, teniendo en cuenta lo mucho que te interesan los números.
—¿A mí? ¡Qué risa! No me interesan ni un poquito así —replicó ella juntando las yemas del índice y el
pulgar hasta casi tocarse—. No sé nada de mates, ni ganas.
—Te equivocas. Sabes más de lo que crees. Por ejemplo, ¿cuántos años tienes?
—Once.
—¿Y cuántos tenías el año pasado?

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5 Ficha 41 Fecha:

—Vaya pregunta más tonta: diez, evidentemente.


—¿Lo ves? Sabes contar, y ese es el origen y la base de todas las matemáticas. Acabas de decir que no
sirven para nada; pero ¿te has parado alguna vez a pensar cómo sería el mundo si no tuviéramos los
números, si no pudiéramos contar?
—Sería más divertido, seguramente.
—Por ejemplo, tú no sabrías que tienes once años, nadie lo sabría y, por lo tanto, en vez de estar tan
tranquila ganduleando en el parque, a lo mejor te mandarían a trabajar como a una persona mayor.
—¡Yo no estoy ganduleando, estoy estudiando matemáticas!
—Ah, estupendo. Es bueno que las niñas de once años estudien matemáticas. Por cierto, ¿sabes cómo se
escribe el número once?
—Pues claro; así —contestó Alicia, y escribió 11 en su cuaderno.
—Muy bien. ¿Y por qué esos dos 1 juntos representan el número 11?
—Pues porque sí. Siempre ha sido así.
—Nada de eso. Para los antiguos romanos, por ejemplo, dos 1 juntos no representaban el número once,
sino el dos —replicó el hombre, y, tomando el bolígrafo de Alicia, escribió un gran II en el cuaderno.
—Es verdad —tuvo que admitir ella—. En casa de mi abuela hay un reloj del tiempo de los romanos y
tiene un dos como ese.
—Y, bien mirado, parece lo más lógico, ¿no crees?
—¿Por qué?
—Si pones una manzana al lado de otra manzana, tienes dos manzanas, ¿no es cierto?
—Claro.
—Y si pones un uno al lado de otro uno, tienes dos unos, y dos veces uno es dos.
—Pues es verdad, nunca me había fijado en eso. ¿Por qué 11 significa once y no dos?

Carlo Frabetti, Malditas matemáticas.


Madrid: Alfaguara, 2000.

1. ¿Cuál es la acción principal del capítulo leído? ¿Qué efecto tiene esta acción en lo que piensa
Alicia?

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5 Ficha 41 Fecha:

2. ¿Qué prefería hacer Alicia antes de sacar cuentas?

A. Tomar el sol en el parque.


B. Escuchar a los pájaros trinar.
C. Leer un libro de aventuras y jugar.
D. Ir al parque que estaba al lado de su casa.

3. ¿Qué opinaba Alicia de las matemáticas?

4. Describe al curioso personaje que se encuentra con Alicia.

5. ¿Por qué Alicia le dice al curioso personaje "¡Yo no soy testaruda!"? ¿Cómo crees que se sintió
Alicia en ese momento?

6. Responde las siguientes preguntas en tu cuaderno.

¿Por qué a Alicia la ponía de mal humor hacer sus deberes?


¿En qué época y lugar se ambienta la obra? Explica tu respuesta con fragmentos del relato.
En conclusión, ¿estás de acuerdo con la afirmación: “las matemáticas no sirven para nada”?
Fundamenta a partir del texto.

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5 Ficha 42 Fecha:

Comprensión lectora: el cómic

Lee y observa atentamente el siguiente cómic.

La isla del tesoro

Caleta de la Colina Así pasaron muchos meses,


Tu capitán, Se sentó, desafiante, en la
Existía un extraño hasta que una fría tarde de
¿tiene un tajo silla del Capitán.
huésped que se hacía invierno…
en la mejilla Vamos a darle
llamar Capitán y que Esa mesa…, No, señor,
derecha? una sorpresa al
se pasaba los días ¿es para mi ahí se
compañero Jill? sentará el buen Bill.
obervando el mar.
Capitán.

Sí… sí,
señor.

Cuando el Capitán ¿Te sorprende verme? Flint está muerto y


volvió del acantilado… Siéntate, Bill. Hablemos Y tú, Jim, yo quiero el mapa …
como los viejos ¡¡Quiero el mapa!!
tráenos algo
compañeros que somos. de beber.
¡No! Y si atrapan a
uno, ¡entonces que
atrapen a todos!

¡Black Dog!

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Comprensión lectora
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5 Ficha 42 Fecha:

El Capitán volvió muy Quieren el mapa,


agitado… pero Flint me lo
Llévale esa respuesta a dio a mí.
los tuyos…, ¡¡canalla!! ¡Debo irme antes
de que me pasen
la mancha negra!

Ahora estás
perdido, Bill…, Esos rufianes…, los
¡perdido! marineros de Flint…

Yo, un pobre ciego que perdió la Ahora, chico…,


¡Pronto, Jim!,
¿Quién es?, vista defendiendo a Inglaterra… llévame con Bill.
dame algo
¿quién anda ¡O si no, te romperé
de beber. ¡Viva el ¡Dame la
ahí? el brazo!
rey Jorge! mano!

¡Blind Traigo algo para ¡Oh, no! ¡La mancha Entonces, el ciego desapareció entre
Pew! ti… ¡Alarga la negra! Volverán a las la niebla con tanta rapidez como si
mano! diez… ¡Estoy acabado! hubiera tenido los ojos sanos…

Equipo editorial

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5 Ficha 42 Fecha:

1. Describe a dos de los personajes del cómic.

2. Escribe V (verdadero) o F (falso), según corresponda.

El capitán Bill se escondía de los marineros de Flint en la caleta de la Colina Negra.

El capitán Flint había muerto y había dejado el mapa del tesoro a Bill.
Bill quería compartir el tesoro con todos los marineros de Flint.
Jim Hawkins entregó el mensaje de la mancha al capitán Bill.
Blind Pew fue a visitar amistosamente al capitán Bill.

3. Une la forma del globo con la acción que representa y entrega un ejemplo del cómic para
cada tipo.

Pensamiento Grito Diálogo

Ejemplo: Ejemplo: Ejemplo:

4. Contesta en tu cuaderno.
¿Cómo influye el mensaje que trae el ciego en el desarrollo de la historia?
¿Cómo es el ambiente de La isla del tesoro? Señala tres características.
¿Qué costumbres de la época se reflejan en el cómic leído? Nombra y explica dos.
En un cómic, ¿cuál es la relación entre la imagen y el texto?
Crea dos nuevas viñetas donde inventes el final de la historieta.

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