Bloque 9

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 15

BLOQUE 9: La crisis del Sistema de la Restauración y la caída de la

Monarquía (1902- 1931)

9.0 Introducción

9.1. Alfonso XIII y la crisis del sistema político de la Restauración: los partidos dinásticos.
Las fuerzas políticas de oposición: republicanos, nacionalistas,socialistas y
anarcosindicalistas.

9.2 La intervención en Marruecos. Repercusiones de la Primera Guerra Mundial en España.


La crisis de 1917 y el trienio bolchevique.

9.3.- La dictadura de Primo de Rivera. El final del reinado de Alfonso XIII.

9.0 INTRODUCCIÓN

A comienzos del siglo XX el sistema político de la Restauración seguía vigente. La


monarquía borbónica era liberal, pero no democrática, apoyada en la Constitución de 1876
y en el sistema de turno pacífico, que todavía perduraban y le daba estabilidad (a través del
fraude electoral como ya sabemos).
A finales del siglo XIX, la corriente denominada “Regeneracionismo”, denuncia los vicios y
corrupciones de este sistema y realiza una serie de propuestas para la modernización de
España.
A principios del siglo XX, varias corrientes que piden cambios se manifiestan:

REGENERACIONISTAS: Corriente de pensamiento crítica con el sistema monárquico y la


Restauración. Consideraban el turno canovista caduco y corrupto. Querían cambios
políticos y sociales.
Estaban encabezados por Santiago Alba, Basilio Paraíso y Joaquín Costa (autor de
Oligarquía y caciquismo, que denuncia los fraudes electorales y exige la desaparición del
sistema vigente).

REVISIONISTAS: Movimiento heterogéneo que promovía también un cambio, compuesto


por conservadores pero que querían reformar el sistema desde dentro. Consideran viable el
sistema Canovista, pero revisado y adaptado.

Sus máximos representantes serán Antonio Maura y Francisco Silvela.

Será esta corriente la que finalmente predomine, y de ella saldrán dos partidos que
mantendrán el sistema bipartidista anterior: Conservadores liderados por Antonio Maura y
progresistas liderados por José Canalejas. Se mantiene así el turno de partidos y la
Constitución de 1876

La derrota ante EEUU y la pérdida de las últimas colonias dió a la población española un
sentimiento de derrotismo. La situación política requería un cambio y los sectores más
críticos pedían una regeneración dentro de la vida pública y política.
La muerte prematura de Alfonso XII y la Regencia de María Cristina, dan paso al reinado de
Alfonso XIII (en 1902 con 16 años) de carácter conservador y autoritario, cuyo reinado será
muy controvertido, que culminará en una dictadura militar con su respaldo.

Alfonso XIII accede al trono en 1902, después de 17 años de regencia de su madre (María
Cristina de Habsburgo-Lorena) y los partidos del turno (tras la muerte de sus líderes,
Cánovas y Sagasta) viven sus propias crisis internas. La inestabilidad sigue siendo una
constante en la política y economía españolas durante este periodo.

El reinado de Alfonso XIII va a tener dos grandes etapas (aunque se pueden subdividir en
más): un primer periodo denominado “constitucional” y un segundo periodo bajo la dictadura
de Miguel Primo de Rivera.

9.1. ALFONSO XIII Y LA CRISIS DEL SISTEMA POLÍTICO DE LA


RESTAURACIÓN: LOS PARTIDOS DINÁSTICOS. LAS FUERZAS
POLÍTICAS DE OPOSICIÓN: REPUBLICANOS,
NACIONALISTAS,SOCIALISTAS Y ANARCOSINDICALISTAS.

Cuando Alfonso XIII accede al trono, en el contexto de la crisis del sistema canovista, los
partidos llamados “dinásticos” deciden reforzarse y renovarse asumiendo nuevos líderes y
remodelando sus ideologías.

1
Así tenemos dos renovados partidos y corrientes ideológicas:

- Partido conservador: Considerado “revisionista”. Liderado ahora por Antonio Maura ,


era un partido heterogéneo compuesto por conservadores que querían continuar con
el sistema pero consideraban que necesitaba una renovación desde dentro, pero
veían que mantener el sistema canovista era sostenible.
- Partido “progresista” o liberal: Considerado “regeneracionista”. Dirigido en política
por José Canalejas. En realidad era una corriente de pensamiento cuyos líderes
eran Santiago Alba, Basilio Paraíso y Joaquín Costa (autor de Oligarquía y
caciquismo, que denuncia los fraudes electorales y exige la desaparición del sistema
vigente).
Esta corriente de pensamiento era crítica con el sistema monárquico y la
Restauración. Consideraban el turno canovista caduco y corrupto. Querían cambios
políticos y sociales.

En cuanto a la evolución política de los partidos dinásticos:

Desde que en 1902 comenzó el reinado de Alfonso XIII los partidos dinásticos se
propusieron reformar el sistema canovista, pero manteniendo el turnismo (por eso decimos
que la corriente dominante es la primera antes mencionada). Los grandes proyectos
regeneracionistas fueron obra de Maura y Canalejas.

- Periodo entre 1902-1909: se empiezan a aplicar los primeros intentos de


revisionismo político por presión del regeneracionismo: Desde la crisis del 98 había
voces que tachaban al sistema político de enfermo y degenerado (Joaquín Costa,
Santiago Alba...).
Pedían una regeneración moral, fin del caciquismo y del fraude, pero también una
reformulación de todo el sistema. Pero el cambio que se inicia será el revisionista
que se inicia desde dentro, por lo que no cambia el sistema.
El asesinato de Cánovas pone a Francisco Silvela como líder del Partido
Conservador (defensor de tesis revisionistas): Silvela formó varios gobiernos que
intentaron luchar contra la corrupción, pero chocó con intereses internos de su
propio partido. En 1903 abandona la política, sustituyéndolo en el cargo Antonio
Maura, que formará su primer gobierno entre 1903- 05.

La 1ª crisis del reinado de Alfonso XIII llegará en 1905 (bajo el gobierno de Montero
Ríos, progresista): El detonante será la publicación de una viñeta satírica que se
burlaba de la situación del ejército en la revista catalana Cu-Cut.

2
Miembros del ejército asaltaron la redacción de la revista y los altos mandos
presionan al gobierno hasta la aprobación de la Ley de jurisdicciones (daba
jurisdicción a los tribunales militares sobre cualquier ofensa al ejército).

Entre 1907 y 1909 se produce el segundo gobierno de Maura, llamado también


“gobierno largo”, y su intento de regeneracionismo. Su gobierno será de talante
autoritario. Su idea era organizar una “revolución desde arriba” o lo que era lo
mismo, hondas reformas del sistema desde dentro, pero sin alterar las bases del
régimen. Una de las medidas que se implementó fue la Ley electoral de 1907, que
declaraba el voto obligatorio y pretende hacer limpieza electoral, erradicar el
caciquismo y ganarse el apoyo de las clases media, pero no se consiguió sanear
las elecciones.
Quizá la aportación más importante de este periodo sea la Ley de la administración
local, legislación que daba más autonomía a las diputaciones y gobiernos locales,
como intento de acercar posturas con el nacionalismo.

En 1909, un hecho va a cambiar el devenir político, conocido como la Semana


Trágica de Barcelona.
Para entender este evento histórico tenemos que explicar primero el problema en
Marruecos (que desarrollaremos en el epígrafe 9.2).
España, tras el desastre del 98, intenta recuperar un poco de prestigio colonial, por
eso pone su vista en Marruecos. En 1906 se celebra la Conferencia de Algeciras,
donde España y Francia concretan sus zonas de influencia en Marruecos (donde

3
se había establecido un protectorado). A España le corresponderá la zona norte
(también llamada del Rif).

Para gestionar este protectorado, España se vio obligada a incrementar el


número de tropas y llevar a cabo campañas militares en algunas zonas de
resistencia marroquí y proteger intereses mineros y comerciales en la zona
(entre ellos, la construcción del ferrocarril, cuyos trabajadores eran atacados por
las cabilas o tribus locales).

En el verano de 1909 se produjeron duros enfrentamientos entre tropas españolas y rifeños,


por lo que se movilizaron a más soldados en España para mandarlos a combatir a
Marruecos. Se movilizaron a muchos reservistas en Cataluña, en su mayoría hombres
jóvenes casados y con hijos que iban a zonas muy peligrosas.
El embarque de estas tropas en Barcelona desencadenó una serie de protestas contra la
guerra y por el pago de exenciones, lo que llevó a una huelga general organizada por los
sectores republicanos, socialistas y anarquistas.
La emboscada en el Barranco del Lobo en Marruecos contra las tropas españolas (con
derrota de estas) en la que murieron muchos soldados, radicaliza todavía más la huelga
sumiendo a la ciudad de Barcelona en el caos, una batalla campal (barricadas en las calles,
quema de conventos, etc.)

4
El gobierno reprimirá con gran dureza estos hechos, que tendrán como resultado casi 500
heridos, más de 1500 personas arrestadas y unos 150 muertos entre militares y civiles.
Después de estos hechos, se celebran juicios en busca de responsabilidades con 17
condenas a muerte, de las cuales se ejecutaron 5, entre ellas la de Francisco Ferrer
Guardia, fundador de la Escuela Moderna, acusado sin pruebas de ser el causante de la
rebelión. Su fusilamiento fue un escándalo internacional, y esto forzó la dimisión de Antonio
Maura, y un cambio de gobierno liderado por José Canalejas.

5
- Periodo de 1910-1912: Con Canalejas llega un gobierno conocido como liberal
regeneracionista con idea de establecer la democratización de manera progresiva.
Este gobierno intenta también modernizar el país, el apaciguamiento social y
establecer una separación clara entre Iglesia y Estado (y con ello establecer la
libertad religiosa y la secularización de la educación).
Durante este periodo se aprueba la llamada Ley del candado (1910) que limita la
creación de nuevas órdenes religiosas (cosa que le valió muchos opositores).
En cuanto a reformas sociales se hacen mejoras en tema laboral (reducción de
jornada laboral, etc.) y se suprime el impuesto de consumos.
También se promulgó la Ley de reclutamiento ( que establece un servicio militar
obligatorio generalizado) y la Ley de mancomunidades de 1912.

- Periodo de 1912-1917: Durante este periodo se sucedieron gobiernos del liberal


Romanones y del Conservador Eduardo Dato (no apoyado por Maura, hecho que
divide al P. Conservador):
También en este periodo estalla la IGM y España se declara neutral, lo que supuso
estimulación económica durante la guerra (exportaciones) pero duro revés social
tras la paz (cierre de fábricas, minas…).
En 1917 estallará una crisis que, ni el gobierno ni los 13 siguientes hasta 1923,
podrán detener la caída del sistema.

A medida que iban sucediéndose los hechos antes narrados y el reinado de Alfonso XIII
entraba en crisis, la oposición iba creciendo. En cuanto a las fuerzas políticas de oposición,
nos encontramos las siguientes situaciones:

- El republicanismo: El proyecto republicano basado en el laicismo, las reformas


sociales y la fe en el progreso a través de la educación, tuvo una importante
influencia social entre sectores ilustrados de la clase media y entre los obreros.
Sin embargo, el peso político del republicanismo era pequeño debido a su división
entre centralistas y federalistas. Hubo que esperar a que en el año 1907 Alejandro
Lerroux fundara el partido Republicano Radical, obrerista, anticlerical, para que el
republicanismo adquiriera de nuevo relevancia política en España, especialmente en
Cataluña.

- El nacionalismo: Los nacionalismos periféricos adquirieron mayor protagonismo


político y mayor apoyo social tras el desastre del 98 que reflejó la debilidad del
estado español. En Cataluña en 1901 los diferentes grupos catalanistas se unieron
en la Lliga Regionalista, partido liberal moderado presidido primero por Prat de la
Riba y posteriormente por Francès Cambó, que reclamaban el autogobierno y
aumentar la influencia de Cataluña en la política nacional. La Lliga hegemonizaría el
catalanismo hasta la fundación de Esquerra Republicana de Catalunya en 1931.
En el País Vasco el nacionalismo estaba liderado por el PNV, tenía menor
implantación y limitaba su zona de influencia a Bilbao. Tras la muerte de su fundador
Sabino Arana en 1903, el nacionalismo vasco evolucionó desde el independentismo
antiliberal hacia el autonomismo, ampliando así su base territorial y social: en 1903
consiguió su primer diputado por Bilbao, en 1911 fundó el sindicato nacionalista
Solidaridad de Trabajadores Vascos y en 1917 obtuvo un importante éxito en las

6
elecciones a las diputaciones, convirtiéndose así en una fuerza de primer orden en
el País Vasco.

- El movimiento obrero: PSOE y anarcosindicalistas. El movimiento obrero español


estuvo fuertemente dividido entre marxistas (PSOE y UGT) y anarquistas desde su
fundación hasta la Guerra Civil. Esta división llevó a enfrentamientos por hacerse
con la hegemonía del movimiento obrero: sólo unieron sus fuerzas en contadas
ocasiones, como en la huelga general de 1917.

- El anarcosindicalismo: A principios de siglo el anarquismo también se


encontraba dividido en dos facciones: los grupos de acción directa partidarios
de la violencia terrorista (atentado contra Alfonso XIII y asesinatos de
Canalejas o Dato), y las agrupaciones anarcosindicalistas regionales que
propugnaban la huelga general como instrumento revolucionario y entre las
que destaca la barcelonesa Solidaridad Obrera. Finalmente, se impuso la
tendencia anarcosindicalista con la fundación en 1910 de la CNT (Centro
nacional de Trabajadores, que en pocos años se convertiría en la fuerza
hegemónica del movimiento obrero español en Cataluña y Andalucía. El
anarcosindicalismo fue el principal protagonista tanto de la huelga general de
Barcelona de 1909 (que terminó en la Semana Trágica), como de la intensa
conflictividad social de los últimos años de la Restauración en Barcelona y
Andalucía conocida como el trienio bolchevique.
- El Partido Socialista Obrero Español: El PSOE, aspiró desde sus inicios, a
agrupar al proletariado industrial español bajo la ideología marxista, aunque
su implantación fue muy pequeña excepto en Madrid, Asturias y el País
Vasco. El menor peso político del PSOE comparado con otros partidos
marxistas europeos se debió a la radicalización, que lo alejaba de las clases
medias, y a la fuerza del anarquismo entre los sectores obreros.
A partir de 1910 cambió de estrategia y se integró en la alianza electoral
Convergencia republicano-socialista consiguiendo que su fundador y líder
Pablo Iglesias fuese el primer diputado obrero español.
A partir de entonces su importancia en la sociedad española fue en aumento,
tanto por su actividad como partido parlamentario, como por la fuerza que
alcanzó el sindicato socialista la Unión General de Trabajadores (UGT), que
culminó con la organización de la huelga general de 1917 junto a la CNT.
En 1921, tras la Revolución Soviética, un sector minoritario del PSOE fundó
el Partido Comunista de España, un partido muy minoritario hasta la guerra
civil.

La incapacidad de los diferentes gobiernos de integrar a nacionalistas, republicanos y


movimiento obrero en el sistema de la Restauración, aceleró el proceso de descomposición
del régimen, especialmente a partir de la crisis de 1917 y la coyuntura internacional.

9.2 LA INTERVENCIÓN EN MARRUECOS. REPERCUSIONES DE LA


PRIMERA GUERRA MUNDIAL EN ESPAÑA. LA CRISIS DE 1917 Y EL
TRIENIO BOLCHEVIQUE.

7
Por lo todo lo visto anteriormente, podemos afirmar que el reinado de Alfonso XIII vive en
una situación de permanente crisis debido a:

- Las luchas internas de los partidos dinásticos divididos y sin líderes indiscutibles tras
la muerte de Cánovas y Sagasta.
- El fracaso de los intentos regeneracionistas de liquidar el caciquismo, atraer a las
clases medias urbanas y reducir la influencia de la Iglesia para acabar con el
creciente anticlericalismo.
- La intromisión política del ejército: ley de jurisdicciones (1906), Juntas de Defensa
(1917).
- La fuerte conflictividad social debido a la incapacidad del Régimen de integrar a las
fuerzas de oposición (republicanismo, nacionalismos periféricos, movimiento obrero)
que se materializó en las crisis de 1909 y 1917 y en la crisis final de la Restauración.

El problema en Marruecos: A todos estos problemas se sumará la cuestión marroquí, ya


introducida en el tema anterior, y que influirá en la vida del país hasta 1925, causando la
propia división del ejército entre africanistas y peninsulares por las diferencias acerca del
sistema de promoción, que no era igualitario. Con la pérdida de los territorios ultramarinos y
una España cada vez más aislada de Europa, para los altos mandos del ejército era de vital
importancia participar en el reparto de África. En 1906 España celebra la Conferencia de
Algeciras y se consigue un protectorado compartido con Francia en el Norte de Marruecos,
aunque Marruecos sigue manteniendo su independencia.

La presencia colonial de España en Marruecos tuvo dos objetivos: uno era asegurar las
posesiones españolas de Ceuta y Melilla ante el aumento de los ataques de los indígenas y
el otro, y otro recuperar el prestigio de la monarquía y del ejército tras el Desastre del 98.

En un principio la presencia española no encontró resistencia. Sin embargo, la explotación


de sus riquezas mineras provocó una insurrección en 1909, la denominada Guerra de
Melilla, que desencadenó la Semana Trágica de Barcelona, por obligar el empleo de
reservistas y supuso la destitución de Maura.

En 1912, el sultán de Marruecos admitió formalmente la formación de un Protectorado por la


situación de anarquía que vivía el país. Pero la creación formal del protectorado
desencadenó un aumento de la resistencia indígena contra la presencia española. El
ejército español fue incapaz de ocupar de forma efectiva todo el territorio.

En la zona rifeña (donde se situaban minas de hierro) se encontrarán con la oposición de


las cabilas encabezadas por Abd-el Krim, que emplea una ofensiva de guerrillas.

En 1921 el General Silvestre, saltándose al General Berenguer (Alto Comisionado en


Marruecos), ataca a Abd-el Krim produciéndose el “desastre del Annual” con derrota para
España (en este desastre todos sus 13.000 hombres fueron masacrados).

El parlamento exigió responsabilidades y se abrió el Expediente Picasso (durante la


investigación salió el nombre del propio Rey), hecho que provocó la dimisión del gobierno y
aceleró el fin de la Restauración con el Golpe de Estado de Primo de Rivera en 1923.

8
Primera Guerra Mundial: Paralelamente al desarrollo de la política con Marruecos, entre
1912 y 1917 tras el asesinato de Canalejas y la destitución de Maura, se sucedieron
gobiernos del liberal Romanones y del Conservador Eduardo Dato (no apoyado por Maura,
hecho que divide al P. Conservador).
En este periodo coincide con el estallido de la IGM y España se declara neutra, cosa que es
un reflejo de la falta de peso político de España a nivel internacional, que acrecentará su
aislacionismo. Pero a su vez, esta neutralidad supuso una estimulación económica durante
la guerra, las exportaciones hicieron que los beneficios empresariales crecieran
espectacularmente.

Cuando llegó la paz, el cierre de fábricas y minas, supuso un aumento del paro y de la
conflictividad. El malestar social fue inevitable y acentuó la crisis que vivía el país en 1917
con la convocatoria de una huelga general.

Trienio Bolchevique: En el verano de 1917 se desencadenó un triple conflicto en España por


la confluencia de factores (triple crisis)

- La crisis militar surge por un enfrentamiento entre el Ejército y el Gobierno. Oficiales


de bajo y medio rango crean Juntas de Defensa, asociaciones corporativas militares
que reclama más salarios y rápidos ascensos de los “africanistas” (parte del Ejército
que lucha en el norte de África, enfrentada a los “peninsulares”, que abogan por
mantener el tradicional sistema de ascensos, mucho más lento). El entonces
presidente del gobierno, Eduardo Dato (Partido Liberal) legaliza esta Junta y
concede a los “africanistas” sus reivindicaciones. De este modo, los militares
aumentan su influencia en la esfera política.
- La crisis política tiene su foco en Cataluña, donde se forma una Asamblea de
Parlamentarios (diputados de Liga Regionalista de Cambó, republicanos, socialistas;
es decir, todas las fuerzas que no forman parte del Turno). Piden la convocatoria de
unas Cortes Constituyentes para acabar con el centralismo y la corrupción. La
respuesta de E. Dato es cerrar las Cortes y mandar al Ejército a Barcelona para
poner orden.
- Por último, la crisis social deriva de la convocatoria de una huelga general
convocada por la UGT y la CNT, que también reclaman una Asamblea
Constituyente. Hay una dura represión por parte del Gobierno, con más 80 muertos
y el encarcelamiento de sus líderes (como del socialista Largo Caballero).

La violencia contra los huelguistas hace que la Asamblea de Parlamentarios acepte una
solución de compromiso con Alfonso XIII: la formación de un gobierno de concentración
formado por conservadores, liberales o nacionalista (Cambó). Así, finaliza el turnismo,
siendo el último intento político revisionista de salvar la Restauración. Su fracaso es
absoluto, como lo demuestra la sucesión de 13 gobiernos hasta 1923.

9
La crisis económica tras la finalización de la Primera Guerra Mundial, más la agitada
situación social avivada por las noticias que venían de la revolución bolchevique en Rusia,
aumentan los temores a una insurrección popular.
Se aprueban leyes de contenido social para calmar los ánimos: se crea un sistema público
de pensiones, se establece la jornada laboral de 8 horas en las industrias, etc. Sin embargo,
el clima de crispación aumentaba.
Las mayores tensiones se producen entre 1918 y 1921, conocido como Trienio bolchevique.
En el campo andaluz y en la industria de Barcelona se producen múltiples acciones
violentas (sabotajes, pistolerismo, ley de fugas...). Se asesinan a líderes anarquistas como
Salvador Seguí o políticos como Eduardo Dato.
Finalmente, el capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera (con el beneplácito del
rey), aprovecha el caos, el descrédito de los partidos y del gobierno para declarar el “estado
de guerra” en 1923. Provoca la dimisión del gobierno y Alfonso XIII entrega el poder a Primo
de Rivera, consumándose un pronunciamiento pactado y dando comienzo a la dictadura
apoyada por el rey.
La Constitución de 1876 queda anulada y se pone fin a la Restauración.

9.3.- LA DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA. EL FINAL DEL REINADO DE


ALFONSO XIII.

La guerra de Marruecos (y el desastre de Annual), la gran agitación social (y radicalización


del movimiento obrero, auge del nacionalismo, etc.) y la inestabilidad política llevan al
general Miguel Primo de Rivera a dar un golpe de estado el 13 de septiembre de 1923
(también incentivado por el triunfo del golpe de estado en Italia de Mussolini en el 22).
Los militares estaban descontentos debido al desprestigio que la guerra de Marruecos les
había concedido y la apertura del Expediente Picasso (que ellos consideraban una
humillación).
El golpe de estado se extendió rápidamente y contó con el apoyo de militares, oligarquía,
iglesia y clases medias acomodadas. También con el beneplácito del rey Alfonso XIII, que le
encargó formar gobierno. Veamos cómo llegamos a este golpe de estado

En 1920 situación era muy difícil debido a:


- Una serie de gobiernos ineficaces.
- División interna de los partidos turnistas y corrupción política.
- Radicalización del movimiento obrero: enfrentamiento abierto contra la patronal y
generalización de la huelga.
- Ejército debilitado por el desastre del Annual y la petición de responsabilidades con
el Expediente Picasso (que llegó hasta el rey).
- Auge del nacionalismo y mejora de resultados electorales de los republicanos y
socialistas (hasta el punto de alarmar a la oligarquía).

En 1923 la crisis era ya insostenible:


- El 13 de septiembre de 1923 el Capitán General de Cataluña Miguel Primo de Rivera
declara el estado de guerra.
- El gobierno dimitió y el rey entregó el poder a los sublevados, consumándose así el
Golpe de Estado (el Rey encarga formar gobierno a Primo de Rivera).

10
Junto con el golpe de estado Primo de Rivera publica un manifiesto. En él, justifica la acción
como un intento regeneracionista: el nuevo régimen militar se establecerá con carácter
temporal para resolver los problemas de España, y acusa a los políticos liberales de los
males del país.

Manifiesto de Primo de Rivera tras el golpe de estado (13 de septiembre de 1923)

«Al país y al Ejército: Españoles: Ha llegado para nosotros el momento más temido que
esperado (porque hubiéramos querido vivir siempre en la legalidad y que ella rigiera sin
interrupción la vida española) de recoger las ansias, de atender el clamoroso requerimiento
de cuantos amando la Patria no ven para ella otra salvación que libertarla de los
profesionales de la política, de los que por una u otra razón nos ofrecen el cuadro de
desdichas e inmoralidades que empezaron el año 98 y amenazan a España con un próximo
fin trágico y deshonroso. La tupida red de la política de concupiscencias ha cogido en sus
mallas, secuestrándola, hasta la voluntad real. Con frecuencia parecen pedir que gobiernen
los que ellos dicen no dejan gobernar, aludiendo a los que han sido su único —aunque
débil— freno, y llevaron a las leyes y costumbres la poca ética sana, el tenue tinte de moral
y equidad que aún tienen; pero en la realidad se avienen fáciles y contentos al turno y al
reparto, y entre ellos mismos designan la sucesión. Pues bien, ahora vamos a recabar todas
las responsabilidades y a gobernar nosotros u hombres civiles que representen nuestra
moral y doctrina. Basta ya de rebeldías mansas, que, sin poner remedio a nada, dañan
tanto y más a la disciplina que está recia y viril a que nos lancemos por España y por el Rey.
Este movimiento es de hombres: el que no sienta la masculinidad completamente
caracterizada, que espere en un rincón, sin perturbar los días buenos que para la patria
preparamos. Españoles: ¡Viva España y viva el Rey! No tenemos que justificar nuestro acto,
que el pueblo sano demanda e impone. Asesinatos de prelados, ex gobernadores, agentes
de la autoridad, patronos, capataces y obreros; audaces e impunes atracos; depreciación de
la moneda; francachela de millones de gastos reservados; sospechosa política arancelaria
[...] porque quien la maneja hace alarde de descocada inmoralidad; rastreras intrigas
políticas tomando por pretexto la tragedia de Marruecos; incertidumbre ante este gravísimo
problema nacional; indisciplina social, que hace al trabajo ineficaz y nulo, precaria y ruinosa
la producción agraria e industrial; impune propaganda comunista; impiedad e incultura;
justicia influida por la política; descarada propaganda separatista [...].»
ABC, 14-IX-1923

Pese a sus primeras decisiones, no pretende un nuevo orden totalitario al estilo del
fascismo (Italia, Alemania), creía en el orden y valoraba los gobiernos fuertes, pero su
carácter era sin duda dictatorial. Para ello adopta las siguientes medidas: Disuelve las
Cortes y prohíbe la actividad de los partidos políticos y establece una rígida censura de
prensa.

La dictadura la podemos dividir en varias etapas:

➔ Directorio militar: Entre 1923 y 1925 estuvo exclusivamente en manos de militares,


cuyo gobierno se centró en las siguientes claves:

11
◆ Represión de las libertades: Se declaró el estado de guerra permanente por
lo que se suspendieron Cortes e instituciones y garantías constitucionales.
Además se aplicó una férrea censura.
◆ Represión del movimiento obrero: se persiguieron anarquistas, comunistas y
todos los movimientos de agitación social.
◆ Represión de los nacionalismos: Se anuló la Ley de mancomunidades y se
prohibieron himnos, banderas y lenguas de zonas nacionalistas.
◆ Creación de un partido único, la Unión Patriótica.
◆ Resolución del problema marroquí: Primo de Rivera era en principio
partidario de abandonar Marruecos tras el desastre de Annual, pero luego
decidió ejercer acción militar en la zona, y con el apoyo de Francia, que
también había sido atacada por Abd El Krim, realizó el desembarco de
Alhucemas en 1925, con mucho éxito de ocupación efectiva de Marruecos,
dando mucho prestigio al dictador.

➔ Directorio civil: No hubo elecciones, pero el nuevo gobierno, compuesto de militares


y civiles fue respaldado por un plebiscito.
En 1927 se crea una Asamblea Nacional Consultiva (pseudo parlamento): Debería
preparar y presentar al gobierno una legislación que regulase escalonadamente el
procedimiento para la vuelta a la normalidad.
En 1928 se reúne, pero no existió acuerdo entre sus miembros sobre el régimen
constitucional que tendría que tener el país (hecho que acabará por arruinar a la
propia dictadura: su incapacidad para encontrar una fórmula institucional diferente a
la del pasado).
Este Directorio puso en marcha una política económica intervencionista: se aplicaron
medidas proteccionistas como el aumento de aranceles a las importaciones.
También se creó un plan de obras públicas (regadíos del Ebro, electrificación de
ferrocarriles, carreteras...) y hubo una inversión estatal en industria pesada
(siderometalurgia y cemento). Si bien a corto plazo estas medidas disminuyen el
paro y contribuyen a la paz social, aumentaron considerablemente la deuda pública
(hipotecando las posteriores actuaciones de la II República).
Crean monopolios estatales como Compañía Telefónica Nacional de España,
CAMPSA, Tabacalera, etc., el objetivo final era nacionalizar toda la industria.
En política social, se crea en 1926 el Consejo Nacional del Trabajo (Organización
Corporativa nacional, un pseudo sindicato)que tenía como objetivo resolver los
conflictos laborales, legislar contratos, condiciones laborales, subsidios...
Se establecen comités paritarios de obreros y patronal (al estilo de los sindicatos
verticales implantados por Mussolini en Italia).
Primo de Rivera intentó atraer a líderes sindicales moderados, como Largo
Caballero (sustituto de Pablo Iglesias al frente de la UGT), que aceptó formar parte
por unos meses (ya que muchos dentro del PSOE no estaban dispuestos a
mantener un enfrentamiento abierto con la dictadura, considerándola transitoria,
para luchar por el régimen burgués de la restauración).
Pese a la puntual colaboración de la UGT con el Consejo Nacional del Trabajo, la
CNT fue prohibida y los comunistas perseguidos, como ya hemos mencionado
antes.

12
En oposición al régimen (oposición que acrecentó cuando se empezó a hacer patente que
la dictadura no era una medida de transición, sino que estaba dispuesta a quedarse) nos
encontramos las siguientes posturas:

- Conservadores y liberales exigen elecciones y la vuelta a la Constitución de 1876.


- Los republicanos fundan en 1926 la Alianza Republicana (y empieza una campaña
exterior contra la dictadura).
- El nacionalismo catalán
- A intelectuales como Ortega y Gasset o Miguel de Unamuno.
- Los anarquistas, que fundaron la FAI (Federación Anarquista Ibérica).
- Sectores del ejército: descontentos por el sistema irregular de promociones,
produciéndose pronunciamientos como la Sanjuanada.

Esta oposición que ganó fuerza, obliga a Primo de Rivera a dimitir en enero de 1930 y a
exiliarse a París. Alfonso XIII decide entonces encargar el gobierno al general Berenger
para que se restableciese poco a poco la normalidad constitucional, a este periodo se le
llamará la “dictablanda”.

Berenguer anuncia la vuelta a la Constitución de 1876 y convoca elecciones. Pero fue


incapaz de solucionar los problemas: pierde credibilidad a la par que la monarquía (que sólo
se limitó a ofrecer a la sociedad una vuelta al caduco sistema anterior y no nuevas
soluciones).

Mientras el republicanismo fue avanzando posiciones entre los propios políticos, tanto
liberales como conservadores: Miguel Maura funda P. Republicano Conservador y Niceto
Alcalá Zamora el P. Republicano Progresista.
Los republicanos sin esperar a nuevas elecciones optaron por la conspiración y en 1930 se
firma el Pacto de San Sebastián, como principales componentes: Lerroux (P. Republicano
Radical), Manuel Azaña (P. Reformista e intelectual de prestigio), N. Alcalá Zamora (que
sería el presidente del comité revolucionario establecido en San Sebastián) y un manifiesto
revolucionario. Intentaron un levantamiento (Levantamiento de Jaca) pero fracasó por falta
de coordinación: los miembros del comité fueron perseguidos y encarcelados, ante lo que
se produjo una oleada de huelgas y protestas en todo el país que obligaron a Berenguer
presentó su dimisión en febrero de 1931.Además, un grupo de intelectuales (Ortega, Ramón
Pérez de Ayala y Gregorio Marañón) crean la Asociación al Servicio de la República.

Ante todo esto, Alfonso XIII encarga formar gobierno al almirante Juan Bautista Aznar:
Convoca elecciones municipales para que los nuevos ayuntamientos garantizasen las
posteriores elecciones constituyentes. Los resultados fueron sorprendentes: pese a que la
mayoría de los concejales elegidos eran monárquicos, en las ciudades (todas las capitales
de provincia), donde el sufragio era más limpio, habían ganado los republicanos.
Celebré será la frase “El país se ha acostado monárquico y se levanta republicano”,
pronunciada por Aznar.

El 13 de abril de 1931 Alfonso XIII por medio de un manifiesto, dejaba el trono: el 14 de abril
se proclamaba la II República Española.

13
14

También podría gustarte