12) Macizo de Brasilia

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MACIZO DE BRASILIA.

GEOMORFOLOGÍA:

El macizo de Brasilia ocupa el centro -


este de América del Sur y se extiende
de las sierras atlánticas hacia el
interior.

Constituye el núcleo más antiguo y


extenso de América del Sur

Es algo más joven que el macizo de


Guayana y se consolidó definitivamente
hace unos 500 millones de años,
cuando representó la región occidental
de Gondwana, el supercontinente
formado por la unión de África, India,
Antártida, Australia y América del Sur.

Este escudo se halla separado del de


las Guayanas por una fosa tectónica
actualmente ocupada por el Amazonas
desde la confluencia con el Madeira
hasta el mar, denominada o conocida
como la sineclise del Amazonas (de
origen devónico).

El relieve que predomina es de meseta


y sus mayores alturas se encuentran
en el este y sudeste. Hacia el este
disminuye su altura presentando mesetas bajas, cubiertas por bancos de sedimentos secundarios
o terciarios formando los denominados “chapados” o “taboleiros” (superficies planas).

Los rebordes de las mesetas descienden abruptamente hacia el este y presentan el aspecto de
sierras, en cambio, hacia el oeste tienen suave pendiente.

Fue fracturado y dislocado con dirección


norte-sur, por las presiones recibidas cuando
se plegaron los Andes. Por esas fracturas,
durante el mesozoico, afloraron grandes
coladas de basalto con altos contenidos de
minerales de hierro que al ponerse en
contacto con la atmosfera cálida y húmeda se
alteraron y formaron los suelos rojos o
lateríticos muy aptos para los cultivos
subtropicales como el café.

Hacia el río Paraná en los distritos


occidentales y en Misiones, existen suelos
rojos similares a los de Sao Paulo, originados
por la descomposición de rocas eruptivas
diabáticas. En la misma región afloran basaltos más recientes sobre los cuales los ríos se

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precipitan en cascadas. El país ondulado del Paraguay oriental se compone abundantemente de
formaciones ígneas.

Mientras que las tierras altas del Matto Grosso y Goyaz en la parte occidental del interior de la
meseta, están cubiertas de sedimentos mesozoicos. Su superficie es notablemente plana en su
conjunto, y la única variación en el relieve está causada por valles escavados por los cursos de
agua, los cuales, por todas partes, tienden a
ensancharse y están marcados por líneas de
acantilados, hacia la cumbre en ambos lados
de la cuenca.

Los recursos minerales en este macizo son


muy importantes. A fines del siglo XVII, el
descubrimiento de oro y diamantes provocó
una gran migración hacia Minas Gerais. Otros
recursos minerales que se explotan son
hierro, manganeso, magnetita, níquel, carbón,
cobre, arena de monasita, cristales de cuarzo
y tungsteno, encontrándose también
yacimientos de piedras preciosas y
semipreciosas como amatistas, aguas marinas y topacios.

El principal interés delas riquezas minerales de los centros del Brasil oriental está en los vastos
depósitos de hierro en Minas Gerais y más al norte en Bahía.

Los depósitos brasileños de manganeso son también los más extensos del mundo; pero a
diferencia de las de hierro, hace ya mucho tiempo que fueron exportadas.

CLIMA:

El clima es cálido y subtropical excepto en los valles profundos de los afluentes del Amazonas, los
cuales representan la prolongación de la región climática ecuatorial del valle del Amazonas y en el
noreste, donde el promedio anual de temperatura es de unos 26,7° C en las tierras altas,
resultando el clima de esta sección más bien de tipo tropical que subtropical.

El clima de la meseta brasileña varía mucho según la latitud, la altitud, la dirección de los vientos
dominantes y la cantidad y distribución de las lluvias.

En el sector septentrional de la meseta, por debajo del trópico de Capricornio, el clima es


subtropical moderado, pero pasa gradualmente a templado en las del río Grande do Sul.

La lluvia es marcadamente estacional en todas partes excepto en las tierras altas orientadas al
levante de las más septentrionales.

Al otro lado de la llanura costera oriental hasta el curso medio del Tocantins y desde las tierras
bajas costeras septentrionales hasta los límites del Estado de Bahía y todavía más allá se extiende
una región que se caracteriza por la incertidumbre de la lluvia y por su aridez parcial.

La meseta brasileña comienza a fragmentarse y finalmente acaba en las alturas que dominan el
Atlántico en río Grande do Norte y Ceará, donde la lluvia es suficiente por todas partes, excepto en
las fajas costeras y lo mismo que en las altas cordilleras del interior, están pobladas de bosques
del tipo tropical de hojas siempre verdes o permiten cultivos que se desenvuelven sin gran riego de
fracaso para las cosechas a causa de las sequías. La extensión en la cual se dan estas

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condiciones comprenden los cuatro Estados del noreste, así como los de Miauhiy, Alagoas y
Sergipe y las partes surestes del Paraná y septentrional del de Bahía.

HIDROLOGÍA:

Este macizo es un importante centro dispersor de aguas. En él nacen ríos de la cuenca del
Amazonas y los que se dirigen hacia el sur corresponden a la cuenca del Río de la Plata. La mayor
parte de ellos corren hacia el norte o hacia el
sur, porque lo hacen por las fracturas
originadas cuando se plegaron los Andes.

En los desniveles de los bloques presentan


saltos y cascadas como las Cataratas del
Iguazú y los saltos de Yacireta, Apipé en el
Paraná y Salto Grande en el río Uruguay
siendo estos últimos utilizados para producir
energía.

Los ríos de la meseta durante largo tiempo


han escavado sus valles, tanto antes de la
inmersión parcial. Ninguno de ellos,
nisiquiera los del extremo sur fueron
interrumpidos por una glaciación como que la que ocurrió en otras regiones de Sudaméricamás
alejadas del Ecuador y en otras partes del mundo. Así, pues, los valles fluviales están muy
desarrollados: por lo general han escavado de un modo profundo las rocas más duras de la meseta
y son relativamente anchos; los cauces de los ríos están escalonados de tal modo que el agua
desciende de la meseta más bien por una serie de cataratas que un gran cascada simple; los
afluentes tienden a desembocar en la corriente principal por valles cuyas partes más bajas fueron
erosionadas hasta alcanzar el mismo nivel que el cauce que los recibe; y en todo el continente, el
caudal del desagüe se concentra en un corto número de poderosos ríos.

BIOMAS:

Dos tercios de la meseta brasileña desde el


punto de vista meteorológico son
inapropiados para la vegetación forestal y
están cubiertos con prados, plantas
herbáceas, arbustosdispersos y grupos
ocasionales o fajas de palmeras.

Las tierras bajas costeras, relativamente


abundante de lluvias, donde se dan las
cosechas tropicales, se llama la matta; allí,
la vegetación original fue el bosque en la
mayoría de los sitios.

Las partes intermedias de la meseta detrás


de la matta se llaman caatingas, el segundo de cuyos nombres sirve para designar parajes abiertos
de árboles y plantas de corta talla y con espinas, incluidas las cactáceas, que se han adaptado a
estas regiones secas.

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Más arriba de las caatingas se encuentran los sertaos, que cubren grandes extensiones del
interior. La vegetación natural consiste en matorral y praderas, entremezcladas en fajas y rodales
con las catingas, entre los árboles achaparrados de la cual se encuentran praderas y también
cultivos. En las sierras que atraviesan la región se halla además otra zona de vegetación,
verdadera que se eleva, en las alturas que exceden de 900 m de elevación.

Los sertaos se encuentran en las altiplanicies en todo el trayecto desde el río Grande do Norte
hasta el límite septentrional de Minas
Gerais.

En las partes orientales de la meseta existen


campos o praderas naturales, como ocurre a
sí mismo en los distritos de tierras más altas
separados al oeste tanto de Paraná como de
Río Grande.

Entre el Atlántico y el río Paraguay se


distinguen tres zonas de bosques que corren
de norte a sur. La primera es la selva
tropical y subtropical alo largo de las tierras
bajas costeras y sobre las laderas orientales
de la meseta.

Una segunda y ancha zona de bosques se extiende desde la línea a lo largo de la cual la meseta
comienza a descender hacia el interior, a unos 80 kilómetros del río Paraná. Este es el famoso
bosque de araucarias, el cual se interna en el norte en el Estado de Sao Paulo y se continúa en el
sur hasta más allá del alto Uruguay, en el Estado de Río Grande do Sul. La superficie total cubierta
por el bosque de araucarias es de unos 777.000 kilómetros cuadrados.

Una tercera zona de bosques se extiende desde el borde oriental del bajo valle del Paraná hacia el
oeste, hasta las orillas del Paraguay. Estos son densos bosques tropicales de tipo siempre verde,
conteniendo una gran variedad de especies, la mayor parte de las cuales son duras, de madera
pesada. Algunos de los arboles como el cedro español, poseen maderas más blandas y más
ligeras usadas para aplicaciones generales y de considerable valor económico. Como es corriente
en bosques de este género, las especies rara vez presentan gran numero en superficies pequeñas,
a pesar de lo cual se corta considerable cantidad de madera para uso local y para el comercio de
exportación, destinándose a los mercados de la región del río de la Plata. Estos bosques interiores
se van aclarando rápidamente de este a oeste; a lo largo de las orillas de Paraná prácticamente, la
superficie entera de las tierras está cubierta de densos bosques, pero la proporción del área
cubierta de árboles baja al 60% entre los 56° y 57° de longitudOestey a menos del 25 % al oeste
del meridiano de 57°. En los bosques citados al este de los 57,5° de longitud Oeste es frecuente la
presencia del arbolito del mate y la recolección de sus hojas da lugar a una importante industria.

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