CArtel
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Una idea que se me repite, al pensar en el cartel, es investigar la producción del síntoma analítico en
el marco de las entrevistas preliminares. Desde Freud y Lacan pero no sin Miller.
Es importante que el analista no se quede solo con su práctica, sino que, también, observe la práctica
de sus colegas.
Acto de autorizar la auto avaluación de alguien que quiere ser un paciente. Aceptarlo o rechazarlo ya
es un acto analítico.
¿Qué sucede en los centros de salud, dónde se promueve la inclusión, con la acción de rechazar un
paciente? ¿Qué es, mas precisamente, lo que se rechaza, al paciente o a la demanda que realiza?
El analista se demora en iniciar el proceso del análisis hasta que esté satisfecho, en el sentido de
autorizar la demanda de análisis.
“La localización subjetiva no es sólo una avaluación de la posición del sujeto, sino también un acto
del analista, un acto ético. Como intenté mostrar, el analista a través de la separación entre
enunciado y enunciación ( aclarar que es cada cosa), a través de la reformulación de la demanda, de
la introducción del malentendido, dirige al paciente en una vía precisa al encuentro del inconciente.
(¿qué significa inconciente aquí?); lo lleva en dirección al cuestionamiento de su deseo y de lo que
quiere decir, y hacerle percibir que, en sí mismo, hay siempre una boca mal-entendida. Ese es un
acto de dirección del analista (…) en las entrevistas preliminares hay conducción por parte del
analista”.
Página 65: “El deseo comporta, en sí mismo, un momento de no desear; al mismo tiempo que este
paciente demanda, lo que se ve es que no quiere lo que demanda, se le debe mostrar que no quiere
lo que demanda”.
Página 66: “ Hay una separación temporal entre el momento del “sí”, el momento del “no”, el
momento del “no no”. Esto se observa, ocasionalmente en la conducta obsesiva, como una manera
de oscilar entre el “sí” y el “no”.
Para el sujeto histérico esta división del deseo se opera de una manera mucho más refinada, por
cuanto el sujeto histérico puede decir “sí” y “no” al mismo tiempo. Es lo que Freud llamó proton
pseudos.
Página 572: “¿Quién es el analista? ¿El que interpreta aprovechando la transferencia? ¿El que la
analiza como resistencia? ¿O el que impone su idea de la realidad?”.