Tuberculosis Bacteria
Tuberculosis Bacteria
Tuberculosis Bacteria
Se calcula que una cuarta parte de la población mundial está infectada por el
bacilo de la tuberculosis, lo que significa que dichas personas están infectadas
por el bacilo pero (aún) no han enfermado ni pueden transmitir la infección.
Síntomas y diagnóstico
Los síntomas comunes de la tuberculosis pulmonar activa son tos productiva (a
veces con sangre en el esputo), dolores torácicos, debilidad, pérdida de peso,
fiebre y sudores nocturnos. La OMS recomienda el uso de pruebas rápidas de
diagnóstico molecular como prueba diagnóstica inicial en todas las personas
con signos y síntomas de tuberculosis, ya que tienen una alta precisión
diagnóstica y conducirán a mejoras importantes en la detección precoz de la
tuberculosis y la tuberculosis farmacorresistente. Las pruebas rápidas
recomendadas por la OMS son Xpert MTB/RIF, Xpert Ultra y Truenat.
Tuberculosis genitourinaria
La infección renal puede manifestarse como pielonefritis (p. ej., con fiebre,
dorsalgia y piuria) sin los microorganismos patógenos habituales en el
urocultivo convencional (piuria estéril). La infección suele diseminarse a la
vejiga y, en los hombres, a la próstata, las vesículas seminales o el
epidídimo, lo que produce un tumor escrotal expansivo. La infección
también puede extenderse al espacio perinéfrico y por debajo del músculo
psoas, en ocasiones con producción de un absceso sobre la cara anterior
del muslo.
Tuberculosis cutánea
La tuberculosis cutánea (escrofuloderma) se debe a la extensión directa de
un foco de tuberculosis subyacente (p. ej., un ganglio linfático regional, un
hueso o una articulación infectado) a la piel suprayacente, que forma
úlceras y un trayecto fistuloso.