Mensaje para el Día del Fundador 2023

“¡La misión en la cabeza, en los labios y en el corazón!”

Queridas hermanas y hermanos:

Salir es un camino agotador de crecimiento para descubrir la misión entre los pueblos (inter-gentes),
dentro de diferentes contextos sociales, aprendiendo a hablar el lenguaje del otro. Salir es también
una oportunidad que no hay que perder para comprender que la misión sólo se puede realizar
juntos (cum gentibus), con los demás, en actitud de escucha de la llamada evangélica.
(Documento preparatorio al XIV Capítulo IMC, n. 17)

La misión no es nuestra: pertenece a Dios, que por gracia nos hace partícipes del dinamismo de su
amor. No somos los dueños de la misión, estamos más bien involucrados en ella, como un
movimiento de la Trinidad que nos envía, como rayos de Su llama, a las periferias y al mismo tiempo
nos atrae hacia Su Centro de irradiación. [...] El fuego del carisma nos lleva al anuncio de Cristo,
verdadera consolación, en la misión que es relación, en la atención y escucha de cada persona.
((Dirección General MC, Circular n.º 8, 25 de diciembre de 2022)

La fecha del 16 de febrero es, cada año, un evento muy esperado, importante y precioso para
nuestra "Familia de la Consolata", donde misioneros y misioneras comparten, con numerosos
amigos, el carisma del beato G. Allamano, en la "dulce y consoladora alegría de evangelizar"
(Evangelii Gaudium, 9). Y este recuerdo de nuestro Fundador adquiere, cada vez, matices
diferentes y nuevos, porque no se celebra en un aura de serenidad litúrgica o espiritual, sino que
está radicalmente inmerso en la vida de nuestros Institutos, de la Iglesia y del mundo.
Por lo tanto, incluso en este tiempo de tribulación y desorientación global y, además, marcado
por la pandemia, por las guerras ("¡una tercera guerra mundial a pedazos!), las injusticias y los
sufrimientos, estamos llamados a ser más que nunca un signo de esperanza luminosa, maestros de
vida espiritual y oración, caminando con todos los hombres y mujeres de buena voluntad,
intentando construir juntos el Reino de Dios.
1
 Además, como Institutos misioneros, desde hace un buen tiempo, hemos estado reflexionando
y orando en preparación para los próximos Capítulos Generales, ahora inminentes y en los que
tenemos tantas expectativas y esperanzas.

Los Capítulos Generales marcan uno de los momentos más importantes de nuestra vida fraterna.
Es un momento en el que todas y todos juntos damos gracias al Señor por el don de las misioneras
y misioneros comprometidos en dar testimonio del Evangelio y por nuestros difuntos que, con su
dedicación y perseverancia, han escrito páginas gloriosas de nuestra historia.
La celebración del Capítulo General se convierte así en una ocasión propicia para mirar con gratitud
el camino recorrido, pero al mismo tiempo para reflexionar y cuestionar nuestra fidelidad al carisma,
Don del Espíritu, que nos ayuda a descubrir nuevas perspectivas y a emprender nuevos caminos. Para
ser fieles a nuestra verdadera identidad, debemos tener fuego dentro, decía el Fundador: "Créanlo, quien
no arde, no prende fuego, quien no tiene fuego de caridad, no puede comunicarlo". 1.

Caminemos y colaboremos, todos juntos, con mucha confianza en el Señor para que todo el
proceso capitular sea un tiempo favorable y fecundo que nos ayude a ser auténticos y auténticas
personas consagradas para la misión. Sólo si tenemos el valor y la paciencia de "echar nuestras
redes" descubriremos lo que el Señor tiene reservado para nosotros. Que el Espíritu Santo venga
y encienda nuestro corazón con esperanza, lo cure con su consolación, lo llene de alegría e infunda
en nosotros el único deseo de ser completamente del Señor, testigos agradecidos de su amor en
nuestra vida y en nuestra misión.
Vivimos tiempos difíciles y exigentes, en un contexto social y humano completamente diferente
del pasado, un cambio de época, como se dice.

Así es como el Papa Francisco se expresó recientemente:

"A este respecto, se preguntarán: ¿cómo podemos responder a las necesidades de cambio del
tiempo presente salvaguardando el carisma? En primer lugar, es importante recordar que no es
el carisma el que debe cambiar: siempre debe ser acogido de nuevo y haciéndolo fructífero hoy.
Los carismas crecen a medida que crecen las verdades del dogma y la moral: crecen en plenitud.
Son las formas de vivirlo las que pueden constituir un obstáculo o incluso una traición al fin para
el cual el carisma fue suscitado por el Espíritu Santo. Pero reconocer y corregir los caminos
equivocados solo es posible con una actitud humilde, que resumiría con dos verbos: recordar (es
decir, volver al corazón, recordar el encuentro con el Misterio que nos ha traído aquí) y generar,
mirando hacia adelante con confianza, siguiendo las manifestaciones que el Espíritu expresa
nuevamente hoy. El hombre humilde, la mujer humilde, también se preocupa por el futuro, no
solo por el pasado, porque sabe mirar hacia adelante, sabe mirar los brotes, con una memoria
llena de gratitud. El humilde genera, invita y empuja hacia lo desconocido. En cambio, el orgulloso
repite, se pone rígido, retrocede y se encierra en su repetición, se siente seguro de lo que sabe y
teme, siempre teme a lo nuevo porque no puede controlarlo, se siente desestabilizado ... ¿por
qué? Porque perdió la memoria. Observen la memoria del Fundador".2

La esperanza, por tanto, es que nuestros dos Capítulos Generales sean una oportunidad para
sentirse fuertemente comprometidos y responsablemente involucrados en responder a preguntas
tan fundamentales: "Nunca digas: ¡no me toca a mí", nos repetía el Fundador!3

* * *
Quisiéramos, entonces, aprovechar esta feliz ocasión de la fiesta de nuestro Fundador, para
comunicar a todos que el pasado 10 de noviembre, el P. Stefano Camerlengo, Superior General

1
G. ALLAMANO, Así que te quiero, No. 3.
2
Papa Francesco, Discurso a los miembros de comunión y Liberación Plaza de San Pietro, 15 de octubre 2022.
3
G. ALLAMANO, Así los quiero, No. 48.

2
IMC, con la aprobación de la Madre Simona, Superiora General mc, nombró a Sor Renata Conti
mc Vice Postuladora General del Instituto Misiones Consolata.
Agradeciendo a la hermana su disponibilidad, quisiéramos señalar el profundo significado de
este nombramiento; es decir, la última etapa del largo (y no fácil) camino hacia la glorificación de
nuestro Fundador será compartida y llevada adelante por los misioneros y misioneras de la
Consolata juntos, "en un solo corazón y una sola alma" (Hch. 4, 32), como hijos e hijas del mismo
Padre amado.
Sor Renata colaboró en la redacción y corrección del "Summarium" (es decir, la síntesis
ordenada y corregida de todo el Proceso sobre el "supuesto" milagro del indígena Sorino
Yanomami, atribuido a la intercesión del Allamano); ahora este denso volumen, impreso y
confiado a la Comisión Médica y a la de los Teólogos del Dicasterio para la Causa de los Santos,
será escrupulosamente examinado y discutido; si se aprueba y se presenta al Papa, las puertas se
abrirán de par en par al día "previsto y hecho por el Señor" de la canonización del Beato José
Allamano, que podrá ser llamado e invocado como santo.
Por lo tanto, los invitamos a intensificar su oración y a acompañar el camino haciendo orar
también a los feligreses de la comunidad.

Preparémonos, pues, para celebrar con la más profunda alegría el dies natalis del beato José
Allamano. El, que en el lejano 1922, había preparado y guiado el primer Capítulo General de
nuestra historia misionera, esté particularmente cerca de nosotros en este año de gracia, en el que
los Institutos fundados por él celebrarán el Capítulo General, para que todos sus hijos e hijas se
abran a la voz del Espíritu, confiados y dispuestos también a abrir nuevos caminos, que favorezcan
la renovación de nuestro compromiso misionero.
La pequeña barca que para nosotros es el Instituto y que, a imitación de la Iglesia, no siempre
navega en aguas tranquilas, con la guía del Fundador podrá llegar felizmente al puerto de una
"autenticidad carismática Consolatina", ofreciendo a las generaciones jóvenes una propuesta de
vida exigente y radical, por la que realmente vale la pena apostar toda la existencia.

Padre de misericordia, que enviaste al mundo a tu Hijo Salvador

En comunión,

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P. Stefano Camerlengo Hna Simona Brambilla
Superior general IMC Superiora general MC

Nepi-Roma, 16 de febrero de 2023