Castellano
Castellano
Castellano
Entre un 20% y un 40% de los adolescentes sufren de una mala calidad del
sueño, hecho que se ha asociado con problemas de atención, problemas
mentales, aumento de accidentes, obesidad y riesgo de enfermedades
cardiovasculares y diabetes.
Hoy en día es habitual que muchos niños se despierten con sueño y con
cansancio, un hecho que puede afectar a la concentración y al rendimiento
escolar. ¿El principal motivo? La privación de horas de sueño. Los niños y
adolescentes, que deberían dormir alrededor de nueve horas, tienen largas
jornadas en el colegio y, algunos, con diversas clases extraescolares después.
El ritmo frenético unido al incremento del uso de aparatos electrónicos provoca
que nuestro cerebro esté muy activo hasta altas horas de la noche y no se
“apague” hasta estar agotado.
El culpable: la luz azul
¿Qué es el vamping?