Carta Maria Alejandra

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María Alejandra...

Me alegré tanto por ti cuando supe que habías dado este paso tan bonito para tu proceso
de vida, no me cabe duda que será de las mejores experiencias que podrás experimentar.
Mi mayor deseo para ti siempre será que seas feliz. Que este retiro te brinde la paz y el
amor que necesitas. Que sea Dios quien se adueñe de tu corazón y te brinde las
respuestas que quizá tu alma busca. Que regreses llena de paz, de amor y de felicidad, que
seas una mujer en completa plenitud después de este paso. Que brille y reine en ti la
alegría, que sigas brindando amor y seas rebosada del mismo en todo momento, que solo
te persigan las cosas buenas que la vida tiene para darte y que todos los proyectos por los
que trabajas sin descanso se vean realizados. Pero sobre todas las cosas, que sea el amor
quien reine en tu vida y en tu corazón.
Has sido de las mejores amigas que he tenido, siempre he agradecido a Dios por ello, son
pocas las personas (y más en estos tiempos) que alcanzan a vivir esa clase de amistad. Ya
no estamos con la misma fuerza de antes porque nos encontramos en escenarios
diferentes de nuestras vidas, pero sí con el mismo cariño de todos los tiempos. Hemos
tenido múltiples errores, pero los mismos han servido para aprender, crecer y conocernos
un poco más a fondo. Siempre estaré agradecida contigo y los tuyos, por todas las veces
que me escuchaste hablar de lo mismo, llorar y quejarme del mismo sufrimiento que
cargue por años, la falta de todo en la yo vivía. Alivianando mi sufrir. Lo relevante aquí, es
que no importa cuánto tiempo pase, ni en que circunstancias nos encontremos, siempre
que me necesites estaré para ti y los tuyos, mi apoyo para ustedes será incondicional.
Porque más que una amistad me brindaste un segundo hogar y eso lo agradeceré
siempre.
En mi corazón tendrás un lugar muy importante toda mi vida y espero que la misma, nos
brinde más momentos juntas para seguir llenándonos de recuerdos valiosos y reírnos de
señoras. Admiro mucho la manera en como afrontaste tu perdida, tu ilusión, eres muy
fuerte, siempre mostrarte serlo y eso muestra sin duda, que estas para grandes propósitos
en la vida y este retiro será un punto y aparte para ti.
Gracias por ser y dejarme ser...
Que Dios no se canse de bendecirte siempre.

 Te quiero con todo mi corazón.

Con amor, Jola.

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