EL RAPTO DE LA PRIMAVERA

ERICK GREEN

(Adaptación de la obra el Rapto de la Primavera)

Personajes: Narrador, Niña, Luna, Estrella Polar, Madre Naturaleza, Padre

Tiempo, Primavera, Verano, Otoño, Invierno, Lluvia, Tormenta, Ciclón, Sol, 2
Hombres, 2 Mujeres, 2 Árboles, 2 conejos.

Niña.- Diosito, ¿Me escuchas? Soy… Tú que todo lo sabes, has visto que no
he hecho nada malo. ¿Sabes? Mi hermano dice que soy una traviesa y que no
debí tomar sus apuntes de la escuela. Yo no quería hacer daño. De verdad que
no tengo la culpa, de que ahora mi hermano no pueda estudiar… ¿Cómo iba
yo a saber que en esas hojas hubiera algo importante.

Narrador.- Cansada de cuestionarse la niña, muy triste, se durmió. Pero

mientras dormía visitó un lugar de fantasía, Donde El sol, la luna, las estrellas,
las estaciones, las plantas, los animales y el hombre formaban un mundo con
vida. Tan fielmente relacionados que si alguno faltaba, la armonía se perdía.
Veamos ahora como nuestra pequeña amiga, formo parte de un drama
cósmico.

Luna.- ¡Noooo! ¡No puede ser! El Tiempo no puede hacerme esto. Pronto el
invierno dejará de visitar el reino de los mortales y entonces estaré perdida…
No debe salir de ahí. ¿Qué puedo hacer? ¡Ya sé quién puede ayudarme.
¡Estrella Polar! ¡Estrella Polar!...

Estrella Polar.- Aquí estoy, majestad

Luna.- Estoy desesperada. ¿Me oyes? Desesperada. ¿Por qué has tardado
tanto?

EP.- Es que… pues verá, Majestad…

Luna.- ¿Sí?

EP.- Es que andaba de compras.

Luna.- ¿De compras… ¿Y qué tal están las baratas?

EP.- ¿Baratas? ¿Cuáles baratas? Todo está carísimo. Todo está por las nubes.

Luna.- Tienes razón. Con eso de que el universo está en crisis ya no se puede
vivir. Tengo un problema muy grave.

EP.- ¡Ay, majestad no exagere! Tiene su castillo propio, es muy hermosa y la

mayor parte del tiempo se la pasa a dieta rigurosa.
Luna.- ¿Y tú crees que la belleza no cuesta? Las cremas, maquillajes y
tratamientos están carísimos.

EP.- Majestad, pero… ¿Para qué hace todo eso?

Luna.- ¿Cómo que para qué? Los amantes deben verme hermosa todo el
tiempo.

EP.- Y… ¿Tiene que cuidarse tanto?

Luna.- ¡Claro! Si me vieran tal como soy no me escribirían poemas, ni me

pintarían, ni nada.

EP.- Diga de que manera una humilde estrella como yo puede ayudarla.

Luna.- El tiempo transcurre demasiado rápido y pronto dejará de visitar el reino

de los mortales.

EP.- No entiendo. No veo en que pueda afectarla eso.

Luna.- en el invierno las noches son más largas, por lo que yo puedo lucir mi
belleza por más tiempo. En cambio en la primavera, las noches son más
cortas. ¿Crees que no es suficiente razón para preocuparme?

EP.- No…

Luna.- ¿Cómo de que no?

EP.- Digo ¡sí!... o… ¡realmente, no!

Luna.- ¡Por fin…!

EP.- Es que con su inteligencia y mi humilde colaboración, algo podemos hacer

para que el inviernos de quede donde está.

Luna.- Es por eso que te he mandado llamar. Tú siempre tienes una idea.
¡Ayúdame por favro!

EP.- Claro que sí. Permítame pensar.

Luna.- Por favor, piensa rápido.

EP.- Así lo haré, tranquilícese. ¿Así que quieres que el invierno permanezca
más tiempo allá abajo? Pues te ayudare, pero sólo porque quiero tener aún
más tiempo para enamorarlo. ¿Cómo hacer para que el invierno no se vya de
ahí?

Luna.- ¿Cuál es tu plan?

EP.- ¿Mi plan?

Luna.- Pues me imagino que tienes un plan, ¿No?

EP.- Sí, permítame continuar. Para lograr este propósito hay que hacer esto…

Luna.- ¿Pero cómo crees que yo voy a andar haciendo esas cosas?

EP.- No majestad, una reina como usted, no tiene por qué hacer eso.

Luna.- Entonces ¿Quién lo hará, tú?

EP.- No, recuerde que yo soy la autora intelectual, nada más.

Luna.- Si tu eres la autora intelectual y yo soy la reina ¿Quién puede hacerlo?

EP.- Yo tengo unos amigos que podrían hacerlo.

Luna.- Entonces que lo hagan inmediatamente.

EP.- No se preocupe majestad, yo me encargare de todo.

Narrador.- Y así fue como el plan se puso en marcha, la una pensó, la otra
aceptó, y el sabueso tras su presa corrió.

Tormenta.- Es necesario no hacer ruido.

Ciclón.- ¿Quién es el que hace ruido?

Tormenta.- ¿Quién hace ruido…? Tú

Lluvia.- Shhhhh

Ciclón.- Andar echando rayos y centellas por todas partes es una actitud poco
inteligente.

Tormenta.- Y tú siempre que llegas a un lugar lo único que sabes hacer son
destrozos.

Ciclón.- Es mi naturaleza.

Lluvia.- Si siguen haciendo tanto ruido nos van a descubrir. (ciclón y tormenta
pelean) ¡Por favor, dejen de pelearse!

Tormenta.- El empezó primero. (Pelean de nuevo)

Lluvia.- Paren, paren pro favor.

Ciclón.- Esta bien.

Lluvia.- Vamos a buscar.

Tormenta.- Está bien. ¿Dónde estará la primavera?

Lluvia.- No sé.
Ciclón.- Vamos a buscarla.

Tormenta.- ¿Por dónde empezamos?

Ciclón.- Por ahí. (Buscan)

Tormenta.- ¿Será la primavera?

Ciclón.- No lo sé.

Tormenta.- Pues investígalo.

Ciclón.- Investígalo tú.

Lluvia.- Yo lo averiguare.

Tormenta.- ¿Es o no es?

Lluvia.- (suspira) No, es el otoño, Me da gusto verle. Yo no quiero raptar a su

hermanita, pero tenía muchas ganas de venir…

Ciclón.- ¡Te estás arrepintiendo!

Lluvia.- No, es que pienso que no es correcto.

Tormenta.- Por supuesto que no es correcto.

Ciclón.- Además, tú fuiste la primera que quiso venir.

Lluvia.- Yo quería venir por ver al otoño.

Tormenta.- Apresurémonos a terminar.

Ciclón.- ¡Es está!

Tormenta.- ¡Saquémosla pronto! (acotación)

Lluvia.- Alguien viene.

Tormenta.- Vámonos.

Madre Naturaleza.- ¿Quién anda ahí?... Creo que nadie… seguramente me lo

imagine… sí, eso es… Primavera, hija, es hora de despertar… vamos, ya es
tiempo de visitar el reino de los mortales… hija… hija, Primavera, Primavera
¿Dónde estás?

Verano.- ¿Qué pasa?

MN.- La Primavera ha desparecido.

Otoño.- Probablemente despertó antes de que tú llegaras y se fue.

Verano.- No lo creo. Ella siempre espera que nuestra madre la despierte.

MN.- Cuando llegue a este lugar creí ver a alguien saliendo por el otro extremo.

Otoño.- Pudo ser la primavera.

MN.- No. Tengo el presentimiento de que algo malo le ha pasado.

Verano.- ¿Qué pudo haberle pasado?

MN.- No lo sé. ¡Búsquenla por favor!

Verano.- No te preocupes. La encontraremos.

Otoño.- Sí y te traeremos noticias suyas.

Narrador.- El sabueso tras su presa corrió. Corrió, corrió y al conejo alcanzo. Lo

asechó y lo cazó y a su amo se lo llevo. ¿Lo asechó? ¿Lo cazó? No. Lo raptó.
Malvadas.

H 1.- Qué extraño que la primavera no haya llegado.

M 2.- Ella siempre es puntual.

M 1.- Pues el 21 de marzo fue hace tres días y ella aún no llega.

H 2.- Posiblemente este año llegue después de lo previsto.

H 1.- No lo creo. Pocas veces la primavera se retrasa. Más cuando por alguna
causa sí lo hace, llega el 22 de marzo.

M 1.- Pero estamos a 25 de marzo.

H 2.- Pudo haberle pasado algo.

M 2.- Sería terrible.

M 1.- Hace algunos días soñé que este año no iba a ser como los otros. Soñé
que este año iba a suceder algo muy especial.

H 1.- Ya lo creo que va a suceder algo muy especial. Si la primavera no llega

puntual, las semillas que sembramos durante el otoño no podrán germinar, y si
no germinan, no habrá cosechas.

H 2.- También los árboles que ya están en pie no podrán dar frutos sin el cálido
sol que hay en la primavera.

H 1.- La naturaleza necesita de la primavera para poder renacer.

M 2.- Si la primavera no llega… ¿Nos moriremos de hambre?

M 1.- Por el momento no hay razón para preocuparse, aún nos queda alimento
para unos días.
H 1.- Espero que llegue antes de que se agote; si no ¿Qué vamos a hacer?
(Acotación)

A 1.- ¡Ya no soporto este frío!

A 2.- ¿Por qué no habrá llegado la primavera?

A 1.- ¡Como voy a saberlo! Estoy ansioso de volver a vestirme de verde y sentir
el calor del sol.

A 2.- Yo también. Además, me gusta que los nidos que hay en mis ramas estén
llenos de pajaritos.

A 1.- A mí lo que más me gusta son los polluelos.

A 2.- Sobre todo cuando los más pequeños están hambrientos y al llegar sus
padres y darles comida se ponen a cantar tan felices…

A 1.- ¡Ah, sí! Con hermosos cantos.

A 2.- Son unas escenas tan tiernas.

A 1.- Que no volveremos a ver si la primavera no llega pronto.

C 1.- Mientras la primavera no llegue, no pienso salir de aquí.

C 2.- Yo menos. Pero el problema es que la comida casi se acaba.

C 1.- No es posible.

C 2.- Recuerda que sólo almacenamos comida para no salir de nuestra

madriguera durante el invierno. Pero él ya debía haberse marchado.

C 1.- pues esperemos que se marche pronto.

Invierno.- No puedo abandonar este lugar hasta que la primavera no llegue.

Esta es mi misión.

H 1.- Ha pasado una semana y la primavera no llega.

A 1.- Se me están helando las raíces y la primavera aún no llega.

C 1.- Se nos terminó la comida y la primavera no ha llegado aún.

A 2.- ¿Qué podemos hacer.

M 1.- Nada. Solamente esperar.

A 1.- Rogar para que llegue antes de que muramos de frío.

C 1.- No perdamos la esperanza, no puede dejar de venir.

C 2.- Primavera, no te olvides de nosotros.

Todos.- Primavera, no te olvides de nosotros.

Narrador.- Pobrecita Luna, todas las molestias que se tomó para desaparecer a
la primavera y poder lucir su belleza y esplendor. Si todos los seres vvivos
mueren, no habrá nadie que la admire… ¡Qué terrible!

Padre Tiempo.- He venido a ti porque creo que eres el más indicado para
ayudarme.

Sol.- ¿En qué puedo servirle?

PT.- Hace algunos días la Madre Naturaleza me dijo, que la primavera había
salido de la casa de las estaciones, antes de que la despertaran. Esto les
pareció muy extraño y concluyeron que algo le había sucedido, pues aún no
vista el reino de los mortales. Quise salir a buscarla personalmente, pero eso
implicaría que el tiempo se detuviese y el tiempo no puede detenerse. Te pido
que la busques en mi nombre. Es necesario que cumpla con su misión.

Sol.-Despreocúpese señor, la encontrare. Sin la primavera, mi sita al reino de

los mortales no sería lo mismo.

PT.- ¡Sabía que podía confiar en ti!

Sol.- Haré hasta lo imposible por encontrarla.

PT.- Sé que lo harás. Recuerda, el futuro del reino de los mortales depende de
ti. ¡Que tengas suerte.

Sol.- Hermosa primavera, juro que te encontrare.

Narrador.- Y buscaron a la primavera por todo el cosmos, en cada uno de los

planetas, estrellas y constelaciones. No hubo rincón del universo donde no
buscaran, pero ninguno encontró nada. Mientras tanto en el castillo de la
noche.

Luna.- ¡Te felicito! El invierno continua en el reino de los mortales y yo estoy

más bella que nunca.

EP.- Gracias, majestad.

Luna.- espero que la primavera este bien escondidilla.

EP.- No se preocupe, Está bien oculta en un lugar muy seguro.

Luna.- ¿Estas segura?

EP.- ¡Aja! Y…. que le gustaría que hiciéramos con al primavera.

Luna.- No sé.

EP.- Es necesario pensar en eso.

Luna.- ¿A ti que te gustaría?

EP.- Pues… Darle unas largas vacaciones.

Luna.- ¿Qué tan largas?

EP.- Pues por toda la eternidad. (Salen riéndose) ¡Hola Pequeñita!

Primavera.- ¡Hola! ¿Para qué me han traído aquí.

EP.- Para que goces de nuestra hospitalidad.

Primavera.- Pero yo tengo una misión que cumplir.

EP.- Te equivocas. Tú ya no tienes ninguna misión que cumplir.

Primavera.- ¡No puedo dejar de cumplir mi misión!

EP.- ¡Qué pena! Pero te vas a quedar aquí.

Primavera.- ¿Por qué hace todo esto?

EP.- La luna desea que todo el universo admire su belleza y esplendor y en el

invierno las noches son más largas.

Primavera.- Pero si el invierno permanece más tiempo en el reino de los

mortales, ellos morirán y no habrá nadie que pueda admirarla.

EP.- Ese no es mi problema.

Primavera.- ¿Por qué acepta ayudar a la luna en sus maléficos planes.

EP.- Por amor.

Primavera.- ¿Por amor?

EP.- Siempre he estado enamorada del invierno.

Primavera.- El invierno no le perdonara lo que está haciendo conmigo.

EP.- Nadie sabe que estás aquí. Así que Chao querida.

Primavera.- Sol, ayúdame. (Acotación)

Otoño.-Estoy muy cansado. Hemos buscado por todo el universo y no aparece.

Verano.- No entiendo cómo pudo desaparecer sin dejar rastro.

Otoño.- Tal vez nuestra madre tuvo razón.

Verano.- No creo que alguien se la haya llevado.

Otoño.- Pues es la única explicación lógica.

Sol.- Más bien creo que no hemos sabido buscar.

Verano.- Pero si hemos revisado por todas partes.

Sol.- Pues hay algo que estamos pasando por alto.

Otoño.- Insisto, alguien pudo habérsela llevado.

Verano.- ¿Quién? ¿Por qué?

Otoño.- No sé.

Sol.- Entonces esa conjetura queda descartada.

Verano.- Hay que encontrar una pista de su paradero.

Sol.- Pues no esperemos que nos caiga del cielo. Busquémosla.

Otoño.- ¿En dónde empezamos?

Sol.- Tomemos cada quien un camino diferente y busquemos.

Otoño.- Si alguien encuentra algo llama a los demás.

Verano.- Y si no, no encontramos aquí. ¿De acuerdo?

Sol.- De acuerdo. Manos a la obra.

Otoño.- ¡Suerte! (Acotación)

Lluvia.- ¡Que sorpresa! ¡Tú aquí!

Otoño.- Hola.

Lluvia.- ¿Qué hace aquí?.

Otoño.- Busco.

Lluvia.- Buscas… ¿Qué buscas?

Otoño.- Algo.

Lluvia.- No estás muy comunicativo el día de hoy.

Otoño.- Estoy muy preocupado por mi hermana.

Lluvia.-¿Le pasa algo a tu hermana?

Otoño.- Hace ya tiempo que salió de la casa de las estaciones y aún no llega al
reino de los mortales a cumplir su misión.

Lluvia.- ¿Estas muy angustiado?

Otoño.- Imagínate es mi hermana menor.

Lluvia.- Sabía que estaba en aprietos. Me gustaría poder ayudarte.

Otoño.- Te lo agradezco.

Lluvia.- Acabo de recordar algo.

Otoño.- ¿Qué?

Lluvia.- He oído decir por ahí que…

Otoño.- ¿Qué has escuchado?

Lluvia.- Has buscado en el castillo de la noche.

Otoño.- No.

Lluvia.- Puede ser que ahí este.

Otoño.- ¿Puede ser? Sí. ¡Puede ser! Gracias.

Lluvia.- Espera. Es solo una suposición.

Otoño.- Es una esperanza. ¡Sol, verano! ¡He encontrado algo!

EP.- Majestad…

Luna.- Te agradecería que no me interrumpieras.

EP.- Es que… Tengo algo muy importante que contarle.

Luna.- ¿Muy importante?

EP.- Sí, muy importante.

Luna.- ¿Y qué es?

EP.- Un sueño, majestad.

Luna.- ¿Y desde cuando los sueños son importantes?

EP.- Es que este, es un sueño aterrador.

Luna.- Cuéntalo.
EP.- Pues soñé que de alguna misteriosa manera los hermanos de la
primavera se enteraban de que está encerrada en el hoyo negro No. 6, que
iban a buscarla y la sacaban de ahí.

Luna.- Por favor, no me hables de cosas tan nefastas antes de la cena.

EP.- Perdone, majestad, pero tenía que contárselo.

Luna.- No te preocupes, sería muy difícil que ellos se enteraran de lo que sólo
tú y yo sabemos.

Otoño.- Afortunadamente, las buenas noticias se propagan pronto.

Verano.- Nosotros las escuchamos, tienen mucho que explicar.

Otoño.- Señoritas, caminen.

EP.- Claro que iremos con ustedes. Pero primero, tendrán que atraparnos.
¡Corra majestad!

Luna.- ¡Espérame! (Las atrapan)

Otoño.- Es increíble lo que hizo.

Luna.- Yo no fui. ¡Lo hizo la estrella polar!

EP.- Yo sólo fui la autora intelectual.

Verano.- ¿Entonces quien lo hizo?

Luna.- Sus amigos.

EP.- ¡Traidora!

Verano.- ¿Quiénes son tus amigos?

EP.- No diré nada.

Verano.- ¿Segura?

EP.- Me ayudaron la lluvia, la tormenta y el ciclón.

Otoño.- ¿La Lluvia? Pero si ella me dijo que buscáramos aquí.

Luna.- Yo sabía que no podía confiar en tus amigos.

Otoño.- ¿estas segura de que la lluvia te ayudo?

EP.- Muy segura.

Otoño.- No sé porque lo haría. Pero yo le agradezco que nos haya ayudado a

encontrar a la primavera.
Verano.- Señoritas en marcha. Tienen una cita con el Padre Tiempo.

Sol.- Sabes cuánto te necesitan los seres vivos para poder subsistir. Sabes
cuánto te necesito yo para poder emanar mi calor a toda la naturaleza. Sin tu
presencia nada será igual: Las plantas no florecerán, los seres vivos morirán de
hambre y de frío, y el reino de los mortales desaparecerá bajo la nieve. ¡Te
necesito!.

Primavera.- ¡Yo también te necesito!

Narrador.- Y por fin la pesadilla terminó. La primavera volvió y la vida renació.

Los árboles de verde se vistieron, los animales de sus madrigueras salieron y
felices los hombres se sintieron. El invierno se marchó y la vida continuó.

Niña.- Parece que me quede dormida. ¡Que sueño tan hermoso tuve! Creo que
mi hermano tenía razón, no debí jugar con sus papeles. El no podrá estudiar y
reprobara su examen.

Hermano.- (Voz en off) Papá te ha levantado el castigo y dice que vengas a

cenar.

Niña.- De hoy en adelante seré más cuidadosa… Trataré de no dañar a los

demás con mis acciones.