Las Melcochas
Las Melcochas
Las Melcochas
Sin embargo, la historia de las melcochas es mucho más vieja y llena de tradiciones
que con los años se fueron perdiendo y modificando.
Recuerdo escuchar a mi madre, contarme que cuando ella estaba joven y disfrutó
de las melcochas en Santo Domingo, allá por inicios de los años 1940´s; se le
regalaba a cada invitado una melcochita de dulce en una hojita de naranjo o limón.
Ya en los años 1970´s, no se daba nada, es más, en algunas ocasiones había que
pagar. No era mucho y generalmente era para contratar la música; que se traducía
en el muchacho del pueblo, que tenía un buen equipo de sonido.
Más allá, de estas memorias, es difícil hallar más detalles. Sin embargo, para bien
del resguardo de nuestras tradiciones e identidad, en 1932, alguien escribió en un
periódico, su propia historia con las melcochas danzantes. Usó el seudónimo de:
El Viejo. Si asumimos que para 1930, era realmente un viejo, podemos estar
seguros, al menos, que vivió de primera mano las tradiciones que narró.
Podríamos definirlas como una fiesta de cumpleaños típica, en cierto nivel social.
Se hacían desde la tarde, porque como la costumbre era que la cena se servía a las
4:00 pm.; entonces, se dividía el evento en dos partes; uno antes de la cena y el otro
después, hasta ya entrada la noche.
Si era posible, al inicio, los jóvenes salían juntos a caminar por algún potrero o
parque cercano y luego regresaban a la casa. Quienes vivían cerca de la Sabana,
por ejemplo, solían caminar hasta este lugar. Ahí se organizaban algunos juegos
de prendas, se saboreaban las melcochas y se regresaba al caer la tarde para comer
el resto del banquete.
Es posible que de vivir en otros sitios, se fuera a visitar alguna poza o zona verde
cercana a algún río. En la zona de Heredia, esto era muy común.
Marta Zamora