APENDICECTOMIA

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 12

“Año del Fortalecimiento de la Soberanía Nacional”

TEMA: APENDICECTOMIA

ASIGNATURA: ASISTENCIA DE LA ADMINISTRACIÓN DE MEDICAMENTOS.

CICLO: IV grupo A – Noche

DOCENTE: GERMAN MACEDO GARCIA

ESTUDIANTE:

 Tantalean Guerra Shirley Rubby


 Perez Peña Victor Hugo
 Rengifo Saavedra Melita
 Lloclle Monzón Silvia
 Rodríguez Torres Sarita
 Yaicate Tamani Kenny

INSTITUTO CIENCIAS DE LASALUD SEDE PUCALLPA

2022 – PERU
INDICE
CARATULA…………………………………………………………………………………Pag. 1
INDICE……………………………………………………………………………………….Pag. 2
INTRODUCCION………………………………………………………………………….Pag. 3
1. APENDICITIS AGUDA………………..…………………………………………....Pag. 4
1.1. CONSIDERACIONES CLINICAS…….…………………………….Pag. 4
a) EMBRIOLOGIA………………………………………………..……Pag. 4
b) ANATOMIA…………………………………………………….……Pag. 4
c) FISIOPATOLOGIA………………………..………………..………Pag. 4
1.2 EPIDEMIOLOGIA…………………………………..…………..……..Pag. 5
1.3 ETIOPATOGENIA……..……………………………………………….Pag. 5
1.4 MANIFESTACIONES CLINICAS..………………………………….Pag. 5
1.5 DIAGNOSTICO………………………………………………………….Pag. 6
a) CLINICO……………………………………………………………….Pag. 6
b) RADIOLOGICO……………………………………………………..Pag. 6
2. APENDICECTOMIA……………………………………………………………………Pag. 7
a) APENDICECTOMIA LAPAROSCOPICA……..………………Pag. 7
a) APENDICECTOMIA ABIERTA…………..……..………………Pag. 8
3. COMPLICACIONES…………………………………………….……..………………Pag. 8
4. RECOMENDACIONES…………………………………………...…..………………Pag. 9
ANEXOS……………………………………………………………………………………….Pag. 10
ANEXOS……………………………………………………………………………………….Pag. 10
BIBLIOGRAFIA………………………………………………………………………………Pag. 12
INTRODUCCION

El estudio del apéndice se remonta a los dibujos anatómicos realizados por Leonardo da Vinci
en 1492; fue posteriormente detallado por Berengario da Carpi en 1521 e ilustrado en el
trabajo de Andreas Vesalius De Humani Corporis Fabrica, publicado en 1543.

La apendicitis se define como la inflamación del apéndice vermiforme y representa la causa


más común de abdomen agudo e indicación quirúrgica de urgencia en el mundo; se informa
que su mayor frecuencia es en la población de entre 20 y 30 años y no presenta predominio de
género. Su presentación clínica es variable en algunas ocasiones, por lo que se deben utilizar
estudios imagenológicos para su diagnóstico certero. El tratamiento de la apendicitis es
mediante cirugía con abordaje laparoscópico o abierto. El propósito de nuestra revisión es
exponer la información actualizada sobre este tema tan común.
1. APENDICITIS AGUDA

Caracterizada por primera vez como entidad quirúrgica en 1886 por el patólogo Reginald Fitz,
la apendicitis es ahora la emergencia abdominal más común y la apendicetomía es la cirugía no
electiva más frecuentemente realizada por cirujanos generales. Anualmente se diagnostican e
intervienen más de 250 000 casos en Estados Unidos. Se presenta con escasa mayor frecuencia
en hombres que en mujeres, con un riesgo durante la vida de presentarla de 8,6% y 6,7%
respectivamente.

La apendicitis aguda ocurre infrecuentemente en niños muy jóvenes, así como en adultos
mayores, teniendo su pico de incidencia en pacientes entre el final de la segunda década y
tercera década de la vida. Mostrando una relación inversa entre la incidencia y la mortalidad,
pues esta última es de menos del 1% en la población general y se incrementa hasta el 4-8% en
adultos mayores.

1.1. Consideraciones Clínicas. -


a) Embriología. - El apéndice vermiforme es derivado del intestino medio junto con el
intestino delgado, el ciego, el colon ascendente y la mitad derecha del colon
transverso; todas estas estructuras a su vez irrigadas por la arteria mesentérica
superior. Es visible en la octava semana de gestación y los primeros acúmulos de
tejido linfático se desarrollan durante las semanas catorce y quince de gestación.

b) Anatomía. - El apéndice vermiforme es una estructura tubular localizada en la pared


posteromedial del ciego a 1.7 cm de la válvula ileocecal, donde las tenías del colon
convergen en el ciego; su longitud promedio es de 91.2 y 80.3 mm en hombres y
mujeres, respectivamente. Dicho apéndice es un divertículo verdadero, ya que su
pared se conforma de mucosa, submucosa, muscular longitudinal y circular y serosa.
Sus relaciones anatómicas son el músculo iliopsoas y el plexo lumbar de forma
posterior y la pared abdominal de forma anterior. La irrigación del apéndice cecal es
a través de la arteria apendicular; dicha arteria es una rama terminal de la arteria
ileocólica, que atraviesa la longitud del mesoapéndice para terminar en la punta del
órgano. El mesoapéndice es una estructura de tamaño variable en relación con el
apéndice, lo cual le otorga la variabilidad en sus posiciones. Por lo anterior, la punta
del apéndice puede migrar hacia diferentes localizaciones: retrocecal, subcecal,
preileal, postileal y pélvica.

c) Fisiopatología. - La fisiopatología de la apendicitis aguda continúa siendo enigmática,


sin embargo, existen varias teorías que intentan explicar esta patología. La más
aceptada por los cirujanos describe una fase inicial que se caracteriza por obstrucción
del lumen apendicular causada por hiperplasia linfoide, fecalitos, tumores o cuerpos
extraños como huesos de animales pequeños, o semillas; esto favorece la secreción
de moco y el crecimiento bacteriano, generándose entonces distención luminal y
aumento de presión intraluminal. Posteriormente se produce obstrucción del flujo
linfático y venoso, favoreciendo aún más el crecimiento bacteriano y
desencadenando la producción de edema. En este momento encontramos un
apéndice edematoso e isquémico, causando una respuesta inflamatoria. Esta
isquemia a la que se somete al apéndice puede generar necrosis de la pared con
translocación bacteriana, desarrollándose la apendicitis gangrenosa. Si este proceso
se deja evolucionar y el paciente no es intervenido el apéndice ya gangrenoso se
perfora y puede generar un absceso con peritonitis local siempre y cuando la
respuesta inflamatoria y el omento logren contener el proceso, pero si estos son
incapaces se producirá una peritonitis sistémica. Otras teorías han sido descritas
como el compromiso del suministro vascular extrapendicular, la ulceración de la
mucosa por infección viral y posterior colonización bacteriana, así como una dieta
pobre en fibra con enlentecimiento del tránsito intestinal y retención de las heces en
el apéndice.

1.2 Epidemiologia. -
La apendicitis aguda representa la indicación más común de cirugía
abdominal no traumática de urgencia en el mundo; es una entidad que
ocurre con mayor frecuencia entre la segunda y tercera décadas de la vida.
El riesgo de presentarla es de 16.33% en hombres y 16.34% en mujeres.
Su incidencia anual es de 139.54 por 100,000 habitantes; se asocia con
sobrepeso en 18.5% y obesidad en 81.5%

1.3 Etiopatogenia. -

El evento patogénico central de la apendicitis aguda es la obstrucción de la luz


apendicular, la cual puede ser secundaria a fecalitos, hiperplasia linfoide, cuerpos
extraños, parásitos y tumores primarios (carcinoide, adenocarcinoma, sarcoma de
Kaposi, linfoma, etcétera) o metastásicos (colon y mama); la inflamación de la pared
apendicular es el fenómeno inicial, para después presentar congestión vascular,
isquemia, perforación y, en ocasiones, desarrollo de abscesos localizados
(contenidos) o peritonitis generalizada. Durante estos fenómenos ocurre proliferación
bacteriana: en el curso temprano de la enfermedad aparecen microorganismos aeróbicos,
para después presentarse formas mixtas (aeróbicas y anaeróbicas). De manera normal, el
apéndice cecal funciona como reservorio de la microbiota de E. coli y Bacteroides
spp, que son las más comunes; sin embargo, se han encontrado pacientes con microbiota
predominantemente distinta, como Fusobacterium; en el contexto de apendicitis
aguda, esta última se correlaciona con casos de apendicitis complicadas (perforadas).
Tales bacterias invaden la pared apendicular y luego producen un exudado
neutrofílico; el flujo de neutrófilos ocasiona una reacción fibrinopurulenta sobre la
superficie serosa, así como irritación del peritoneo parietal adyacente. Una vez que la
inflamación y la necrosis ocurren, el apéndice se encuentra en riesgo de perforación,
lo que conduce a la formación de abscesos localizados o peritonitis difusa. El tiempo
para la perforación apendicular es variable; de manera general, se correlaciona la
perforación con la evolución de los cuadros apendiculares: sin perforación
apendicular en menos de 24 horas de evolución y con perforación en más de 48 horas. No
obstante, la etiología de la apendicitis aguda se encuentra incierta y pobremente
entendible en la actualidad. Teorías recientes se enfocan en los factores genéticos,
influencias ambientales e infecciones; para muestra de ello se reporta que las personas
con historia familiar de apendicitis aguda tienen un riesgo tres veces mayor con respecto
a las que no tienen historia familiar de padecer dicha entidad.

1.4 Manifestaciones Clínicas. –

El dolor abdominal es el síntoma más frecuente que se presenta en los pacientes,


aunque también están descritos otros síntomas como anorexia, náuseas,
constipación/diarrea y fiebre. El dolor es típicamente periumbilical y epigástrico, y
más tarde migra hacia el cuadrante inferior derecho; no obstante, a pesar de ser
considerado un síntoma clásico, el dolor migratorio ocurre sólo en 50 a 60% de los
pacientes con apendicitis aguda. La aparición de náuseas y vómitos ocurre después
de la instalación del dolor, y la fiebre suele manifestarse alrededor de seis horas
después del cuadro clínico; éste varía en forma considerable de una persona a otra, lo cual, en
algunos casos, es atribuible a la localización de la punta del apéndice. Por ejemplo,
un apéndice de localización anterior produce dolor marcado y localizado en el cuadrante
inferior derecho, mientras que uno retrocecal puede ocasionar dolor abdominal
sordo y en la región lumbar baja. Asimismo, por la irritación que produce el apéndice,
pueden presentarse otros síntomas como urgencia miccional, disuria o síntomas rectales
como tenesmo o diarrea.

1.5 Diagnostico. -

a) Clínico. - A pesar de los múltiples métodos diagnósticos con los que se cuenta en la
actualidad, la historia clínica enfocada en la evolución del dolor y los síntomas
asociados, así como los hallazgos obtenidos durante el examen físico son aún las
piedras angulares del diagnóstico de la apendicitis. Históricamente el dolor es
descrito de instauración aguda y localizado inicialmente a nivel epigástrico o
periumbilical, posteriormente con el paso de las horas el dolor migra a la fosa iliaca
derecha donde aumenta en intensidad, sin embargo, esto solo ocurre en un 50-60%
de los casos. Resulta importante tener en cuenta las consideraciones anatómicas y
sus variantes ya que influyen en gran parte en la presentación del dolor, por ejemplo,
con un apéndice en localización retrocecal el dolor puede iniciar en fosa iliaca
derecha o en flanco derecho, de la misma forma un apéndice largo que sobrepase la
línea media puede producir dolor en el cuadrante inferior izquierdo. Anorexia y
nausea acompañan frecuentemente al dolor abdominal, el vómito puede
presentarse, pero rara vez se presenta antes de la instauración del dolor. Durante la
evaluación del paciente se debe enfatizar en la localización del dolor y en los signos
clásicos. Teniendo en cuenta que la positividad o negatividad de estos depende en
gran parte de las variantes en la localización del apéndice, así como el tiempo
trascurrido desde la instauración del dolor. Clásicamente se ha descrito que el uso de
analgésicos puede atenuar o incluso abolir los signos sugestivos de apendicitis aguda,
por lo que no deberían administrarse a estos pacientes. Sin embargo, la evidencia
actual no respalda este juicio. Debe de tomarse en cuenta que existen medicamentos
con propiedades analgésicas puras (opiodes), así como otros que adicionalmente
cuentan con mecanismos de acción antiinflamatorios (como el caso de los
antiinflamatorios no esteroidales), un estudio de casos y controles realizado por Frei
y colegas mostró que los opiodes no se asocian con el retraso del tratamiento, por
otro lado, los antiinflamatorios sí mostraron asociación con el retraso del
tratamiento.

b) Radiológico. - La radiografía simple de abdomen no debe ser utilizada de rutina, pero


puede ser útil en casos de clínica atípica y duda diagnóstica, puede mostrar un
fecalito, un íleo localizado, pérdida del patrón graso del peritoneo o una neumonía
no sospechada. El neumoperitoneo solo se presenta en un 1-2% de los casos de
apendicitis. El ultrasonido (US) y la tomografía abdominal (TAC) han sido comparadas
en los últimos años con el fin de afinar el diagnóstico de la apendicitis aguda (23-25).
El TAC ha demostrado una sensibilidad y una especificidad de 94% y 95% en niños
respectivamente y de 94% y 94% en adultos. En el mismo estudio el US mostró una
sensibilidad y especificidad de 88% y 94% en niños respectivamente, y de 83% y 93%
en adultos.

Otra desventaja del US es su conocida dependencia del conocimiento, habilidad y


paciencia del sonografista que lo ejecuta e interpreta. Algunos autores han
promovido el uso protocolario del TAC en los pacientes que cumplen con criterios de
sospecha de apendicitis aguda desde su admisión, pues demostraron reducción en
costos de hospitalización y mejores resultados en dichos pacientes.
Desde que el uso del TAC se ha vuelto más popular en los Estados Unidos se han
disminuido las tasas de apendicectomias negativas, sin embargo, no se ha
demostrado mejoría alguna en los pacientes que presentan clínica clásica de
apendicitis. Realizar un TAC innecesariamente retrasa el diagnóstico y el tratamiento,
por lo que se concluye que es preferible realizar el estudio en los casos en que exista
duda diagnóstica.

2. APENDICECTOMIA

La apendicetomía es el tratamiento de elección en el cuadro apendicular. Mientras más


temprano se diagnostique y trate, mejor es la evolución, ya que el apéndice frecuentemente se
perfora entre 24 y 36 h de iniciado el dolor; después de 36 h aumenta en forma significativa el
índice de apéndices perforados. Los elementos del manejo quirúrgico incluyen: preparación de
la piel, apendicectomía, extracción de cualquier apendicolito, evacuación del líquido
contaminado de la cavidad peritoneal, cierre apropiado de la base apendicular, cierre de la
pared abdominal y control del dolor. Ambos tipos de abordaje tradicional (cirugía abierta) o
laparoscópico, son aceptados.

2.1 Apendicectomía laparoscópica. - En la mayoría de las apendicectomías laparoscópicas


los cirujanos operan a través de tres pequeñas incisiones (cada una mide aprox. entre
6 y 12,5 mm) mientras se observa una imagen ampliada de los órganos internos del
paciente en una pantalla de televisión. En algunos casos, una de las pequeñas
aberturas puede alargarse hasta medir 5 a 7,5 cm para completar el procedimiento.

Una apendicectomía se hace empleando ya sea:

 Anestesia raquídea -- A usted le ponen un medicamento dentro de la espalda


para insensibilizarlo de la cintura para abajo. También le administrarán un
medicamento para hacerlo dormir.

 Anestesia general -- Usted estará dormido y no sentirá ningún dolor durante la


cirugía.

En su mayoría, las apendicectomías laparoscópicas se inician de la misma manera.


Mediante el uso de una cánula (un instrumento estrecho y tubular), el cirujano accede
al abdomen. Un laparoscopio (un pequeño telescopio conectado a una videocámara)
se inserta a través de una cánula, lo cual ofrece al cirujano una vista ampliada de los
órganos internos del paciente en una pantalla de televisión. Se insertan varias cánulas
adicionales a fin de permitir que el cirujano trabaje por dentro y extirpe el revisado. La
totalidad del procedimiento se puede completar a través de las cánulas o al alargar
una de las pequeñas incisiones para las cánulas. Es posible que se coloque un drenaje
durante el procedimiento. El mismo se quitará antes de que usted se vaya del hospital.
2.2 Apendicectomía Abierta. - Una cirugía abierta es aquella en la que el cirujano corta la
piel y los tejidos para poder tener una visualización completa de las estructuras y los
órganos involucrados. Se hace un corte (incisión) de unas 2 a 4 pulgadas de largo en el
extremo inferior derecho del abdomen. El apéndice se extrae a través de la incisión.

A comparación, la laparoscopia se conoce como cirugía mínimamente invasiva.


Permite que el tiempo que una persona tiene que pasar en el hospital sea más corto,
una recuperación más rápida, menos dolor y cicatrices más pequeñas que con la
cirugía tradicional – abierta que es más dolorosa, con un tiempo de recuperación más
ampliado. El procedimiento inicial es casi el mismo al que en la laparoscópica con
respecto a la analgesia.

3. COMPLICACIONES

Tal como ocurre en cualquier operación, existen riesgos entre los que se incluyen el riesgo de
complicaciones. Sin embargo, el riesgo de que ocurra alguna de dichas complicaciones no es
mayor que si la operación se realice mediante la técnica a cielo abierto.

 Sangrado
 infección
 Extirpación de un supuesto normal
 Una pérdida en el borde del colon donde se extirpó el
 Lesión de órganos adyacentes tales como el intestino delgado, el uréter o la vejiga.
 Un coágulo de sangre a los pulmones

Es importante que reconozca los indicios tempranos de complicaciones posibles. Comuníquese


con su cirujano si nota dolor abdominal severo, fiebre, escalofríos o sangrado rectal. Asegúrese
de llamar a su médico o cirujano si se le presenta alguno de los siguientes síntomas:

 Fiebre por encima de 101ºF (39ºC) que no cede


 Hinchazón abdominal que va en aumento
 Dolor que no se alivia al tomar sus medicamentos
 Náuseas o vómitos persistentes
 Escalofríos
 Tos persistente o falta de aliento
 Drenaje purulento (pus) de cualquier incisión
 Enrojecimiento alrededor de cualquiera de sus incisiones que empeoran o se agrandan
 Imposibilidad de comer o beber líquidos
4. RECOMENSACIONES

 Se debe conocer la Guía de Práctica Clínica para el diagnóstico de apendicitis


(México: Secretaría de Salud; 2009).

 En los pacientes pediátricos, es fundamental la valoración del cuadro clínico y la


exploración física.

 Por estudios de laboratorio clínico, la triada de leucocitosis, neutrofilia e


incremento de proteína C reactiva, apoyan fuertemente el diagnóstico de
apendicitis en pacientes pediátricos.

 En los pacientes con dolor abdominal agudo que asisten al Servicio de Urgencias,
es indispensable considerar la realización de examen general de orina, fórmula
blanca y ultrasonido.

 El empleo estudios de imagen juega un papel importante cuando existe duda


diagnóstica.

 Ante la sospecha de apendicitis, el paciente pediátrico debe ser valorado por


cirugía.
5. ANEXOS
7. BIBLIOGRAFIA

1. Dubón Peniche María del Carmen, Ortiz Flores Anahí. Apendicitis aguda, su diagnóstico
y tratamiento. Rev. Fac. Med. (Méx.) [revista en la Internet]. 2014 Ago [citado 2022
Abr 05] ; 57( 4 ): 51-57.

2. Vallejos O Claudio. Apendicectomía laparoscópica vs apendicectomía abierta en


apendicitis aguda. Experiencia del Hospital Regional de Coyhaique. Rev Chil Cir
[Internet]. 2006 Abr [citado 2022 Abr 04] ; 58( 2 ): 114-121.

3. Navarrete Salvador, Cantele Hector, Leyba Jose, Vasallo Miguel, Navarrete Ll Salvador.
Apendicectomía por laparoscopia en la apendicitis aguda complicada. Gac Méd
Caracas [Internet]. 2002 Abr [citado 2022 Abr 04] ; 110( 2 ): 217-221.

4. Hernández-Cortez Jorge, León-Rendón Jorge Luis De, Martínez-Luna Martha Silvia,


Guzmán-Ortiz Jesús David, Palomeque-López Antonio, Cruz-López Néstor et al .
Apendicitis aguda: revisión de la literatura. Cir. gen [revista en la Internet]. 2019 Mar
[citado 2022 Abr 05] ; 41( 1 ): 33-38.

5. Fallas González Jorge. Apendicitis Aguda. Medicina. pierna. Costa Rica [Internet].
marzo de 2012 [citado el 4 de abril de 2022]; 29(1): 83-90.

6. SOCIEDAD AMERICANA DE CIRUJANOS GASTROINTESTINALES Y ENDOSCÓPICOS


(SAGES) 11300 West Olympic Blvd., Suite 600. Los Ángeles, CA 90064

También podría gustarte