La Entrevista de Trabajo
La Entrevista de Trabajo
La Entrevista de Trabajo
2. Investigar a la empresa
Desde el momento en que nos citan para la entrevista es importante que nos pongamos
al día acerca de la empresa y el puesto al que aspiramos. Cuanta más información
tengamos acerca de la filosofía, objetivos y tipo de empresa que te ha preseleccionado,
más fácil te será responder las preguntas y, sobre todo, averiguar qué aspectos de
nuestro currículum y personalidad pueden interesarles más.
¿Cómo puedes averiguar todo esto?
● Estudia su web.
● Si tienen una newsletter, suscríbete.
● Utiliza el buscador de Google para saber qué se dice de la empresa y si tiene alguna
aparición en medios de comunicación.
● Y, por supuesto, no olvidemos de seguirlos en redes sociales ya que probablemente
las actualicen con mayor frecuencia que su web. Además, las redes sociales te servirán
para hacernos una idea del ambiente laboral y nos darán pistas muy útiles acerca de
qué tipo de entrevista nos vamos a enfrentar.
6. Prepara tu presentación
Es habitual que los reclutadores nos pidan que les contemos la trayectoria profesional
o que nos presentemos. Improvisar esto es muy difícil (y nada recomendable) así que
lo vamos a preparar. No consiste en que lo aprendamos de memoria (aunque practicar
con alguien es muy recomendable ya que te puede dar su opinión), sino tener en claro
cuáles son los puntos fuertes que nos conviene destacar.
Muy bien; ya conocemos a la empresa y las particularidades del puesto ofertado. Llega
el momento de hacer lo propio con nosotros mismos; porque, nunca olvidemos, somos
el producto y el que se debe vender de la mejor manera posible en la entrevista.
Para debemos responder las siguientes cuestiones:
• Analizar las fechas y los cargos desempeñados anteriormente (para
encontrar vacíos laborales y observar nuestra trayectoria)
• Evaluar nuestros puntos fuertes y reflexionaremos sobre lo aprendido de
nuestras debilidades (para generar confianza y seguridad)
• Defenderemos nuestros títulos y formación profesional (ya sean los
conocimientos prácticos o teóricos, si o si hay que defenderlos)
• Reflexionar sobre tu actitud y aptitud para trabajar, así como las habilidades
personales y sociales que te pueden ayudar en tu trayectoria.
4. El momento de LA DESPEDIDA:
Cuando el reclutador ponga fin a la entrevista, ya sea anunciándolo directamente o
levantándose de la silla para darnos la mano, debemos seguir los siguientes pasos:
• Despedirnos estrechando su mano con firmeza, sonriendo y agradeciendo la
oportunidad de habernos entrevistado.
• Mostraremos una vez más el interés por el puesto de trabajo ofertado, pero
sin llegar a ser insistentes o parecer demasiado desesperados.
• Preguntaremos cómo va a terminar el proceso de selección, si nos llamarán
para comunicarnos la decisión final o si tendremos que ser nosotros quien se
ponga en contacto con ellos.
LO QUE NUNCA HAY QUE HACER EN UNA
ENTREVISTA
A la hora de afrontar una entrevista de trabajo, cada persona tiene sus trucos/manías,
sus estrategias y sus métodos para lograr transmitir lo mejor de sí mismo. En
principio, no hay ningún manual escrito que sirva de guía infalible para lograr la
entrevista perfecta. Sin embargo, sí hay un listado de cosas que debemos evitar a
toda costa si no queremos echar a perder la oportunidad de conseguir el puesto.
Llegar tarde:
• La falta de puntualidad cuando ni siquiera hemos comenzado a trabajar ya da
mala imagen sobre nosotros. Por regla general es recomendable llegar unos
5 o 10 minutos antes de la hora a la que estamos citado, para evitar
imprevistos que nos hagan llegar tarde. Si no sabemos llegar al sitio, debemos
informarnos antes de salir de casa.
• La imagen dice mucho de nosotros, así que cuando nos presentemos en una
entrevista, tengamos en cuenta la imagen de la empresa y arreglarnos
conforme a ella lo demande. No es necesario ir siempre de traje, esto depende
de cada empresa, pero sí que hay que procurar vestirnos adecuadamente para
una entrevista y mostrar una imagen profesional.
Ir acompañado:
• Si aparecernos en la entrevista acompañado de amigos, padres o
familiares daremos una imagen de poca independencia e iniciativa. Evitemos
eso.
Provocar interrupciones:
Mentir:
• Es muy tentador exagerar o mentir acerca de las responsabilidades que
hemos asumido a lo largo de nuestra trayectoria profesional. Si tenemos alguna
carencia profesional o algún vacío laboral en nuestro currículum es mejor que
nos destaque nuestra motivación para aprender que una experiencia
inexistente. Tarde o temprano descubrirán la verdad y eso no sólo es motivo
de descarte automático si no también puede ser causa de despido.
• Una vez hemos acabado con la entrevista todavía podemos hacer algo para
que tu candidatura destaque sobre las demás. Así que, si queremos ganar
algún punto extra, recordemos enviar un email de agradecimiento a la
persona responsable de recursos humanos para agradecerle la
oportunidad de conocerlos personalmente.
• . Los candidatos no recuerdan los datos de sus CV. Es inaceptable para los
reclutadores que los candidatos no recuerden algún dato de su propio CV, como
cuando empezó y concluyó alguna etapa laboral. Los nervios pueden ser un
factor determinante en el olvido, pero también se valora la capacidad de control
emocional en el entrevistado.
• Los candidatos muestran desconocimientos sobre sus especialidades. Es
muy común que las personas mientan en su CV. Algunos incluso dedican horas
a preparar discursos falsos, pero a otros los nervios los traicionan y es ahí donde
la señal de alerta se activa.
• Vacíos cronológicos de empleos. Las lagunas en los puestos de trabajo,
pueden implicar que los candidatos tienen dificultades para retener o mantener
sus puestos de trabajo debido a faltas de productividad laboral o a problemas en
sus personalidades.