OSTEOPOROSIS
OSTEOPOROSIS
OSTEOPOROSIS
La osteoporosis es una enfermedad que adelgaza y debilita los huesos. Sus huesos se vuelven
frágiles y se quiebran fácilmente, especialmente los de la cadera, espina vertebral y muñeca.
En Estados Unidos, millones de personas padecen osteoporosis o están en alto riesgo debido a
baja densidad ósea.
Factores de riesgo.
Cualquier persona puede desarrollar osteoporosis, pero es más común en mujeres adultas
mayores. Los factores de riesgo incluyen:
El envejecimiento
Ser de talla pequeña y delgada
Antecedentes familiares de osteoporosis
Tomar ciertos medicamentos
Ser mujer de raza blanca o asiática
Tener baja densidad ósea.
Síntomas
Típicamente, las etapas iniciales de la disminución de la masa ósea no presentan síntomas.
Pero una vez que la osteoporosis debilita tus huesos, podrías tener signos y síntomas que
incluyen los siguientes:
Pruebas diagnosticas
Densitometría
Es la técnica de referencia para diagnosticar la osteoporosis y evaluar el riesgo de poder tener
fracturas. La valoración de la masa ósea se realiza por absorciometría de rayos X de doble
energía (también llamada DXA). La radiación recibida en una densitometría es muy baja. Las
localizaciones que se valoran, de acuerdo con la Sociedad Internacional de Densitometría
Clínica (International Society for Clinical Densitometry [ISCD]), son la columna vertebral a nivel
lumbar y la cadera. Además, en determinadas circunstancias la medición también se puede
realizar en la muñeca.
Es una prueba sencilla, rápida e indolora. No requiere ir en ayunas ni con una preparación
previa específica. No es necesario acudir acompañado. Se recomienda evitar la realización de
una densitometría ósea en mujeres embarazadas, puesto que se realiza por rayos X.
Analítica de sangre.
Para descartar otras enfermedades que se asocian con osteoporosis y/o fracturas. Así, es
importante valorar los valores del calcio y fosfato en sangre, que son los principales elementos
que constituyen el hueso, como también los niveles de la vitamina D.
Tratamientos Farmacológicos.
Los bifosfonatos suelen ser la primera opción para el tratamiento de la osteoporosis. Algunos
de ellos son los siguientes:
El estómago no absorbe bien las píldoras de bisfosfonato. Puede ser útil tomar el
medicamento con un vaso alto de agua y el estómago vacío. No ingieras nada más durante 30
a 60 minutos; trascurrido este tiempo, puedes comer, beber otros líquidos y tomar otros
medicamentos.
Cuidados de enfermería.
Respiración y circulación
Alimentación e hidratación
Eliminación
Movimiento y postura
Reposo y sueño
Higiene y estado de la piel
Termorregulación
Vestirse y desvestirse
Seguridad
Comunicación
Actividades recreativas y de ocio
Creencias y valores
Autorrealización
ARTRITIS GOTOSA
Causas
La gota es causada por tener un nivel de ácido úrico superior a lo normal en el cuerpo. Esto
puede ocurrir si:
Factores de riesgo.
Eres más propenso a padecer gota si tienes niveles elevados de ácido úrico en el organismo.
Los factores que aumentan el nivel de ácido úrico en el cuerpo son los siguientes:
Peso. Si tienes sobrepeso, el organismo produce más ácido úrico, por lo que los riñones tienen
mayor dificultad para eliminarlo.
Síntomas
En la mayoría de los casos, solo una o unas cuantas articulaciones están afectadas. Las
articulaciones del dedo gordo del pie, la rodilla o el tobillo resultan afectadas con
mayor frecuencia. Algunas veces muchas articulaciones se inflaman y duelen.
La articulación luce caliente y roja. Con mucha frecuencia, está muy sensible e
hinchada (duele al ponerle una sábana o cobija encima).
El ataque puede desaparecer luego de algunos días, pero puede retornar de vez en
cuando. Los ataques adicionales por lo regular duran más tiempo.
Pruebas diagnósticas.
Análisis del líquido sinovial. El médico puede usar una aguja para extraer líquido de la
articulación afectada. Los cristales de urato pueden verse cuando se examina el líquido debajo
de un microscopio.
Análisis de sangre. Tu médico puede recomendarte que realices un análisis de sangre para
medir los niveles de ácido úrico en la sangre. Sin embargo, los análisis de sangre pueden ser
confusos. Algunas personas tienen niveles de ácido úrico elevados, pero nunca tienen gota. Y
algunas personas tienen signos y síntomas de gota, pero no tienen niveles inusuales de ácido
úrico en la sangre.
Radiografías. Las radiografías de las articulaciones pueden ayudar a descartar otras causas de
la inflamación articular.
Ecografía. Esta prueba utiliza ondas sonoras para detectar cristales de urato en las
articulaciones o en los tofos.
Tomografía computarizada de doble energía. Esta prueba combina imágenes por rayos X
tomadas desde diferentes ángulos para poder ver los cristales de urato en las articulaciones.
Tratamientos farmacológicos.
Medicamentos que facilitan la eliminación del ácido úrico. Los medicamentos como el
probenecid (Probalan) ayudan a mejorar la capacidad de los riñones para eliminar el ácido
úrico del cuerpo. Los efectos secundarios incluyen erupción cutánea, dolor de estómago y
cálculos renales
Cuidados de enfermería.
Necesidad de respiración
Necesidad de alimentación e hidratación
Necesidad de eliminación
Necesidad de movilización y mantenimiento de postura adecuada
Necesidad de vestirse y desvestirse
Necesidad de termorregulación
Necesidad de higiene y protección de la piel
Necesidad de seguridad y evitar peligros
Necesidad de vivir según sus creencias y valores
Necesidad de trabajar y sentirse realizado
Necesidad de participar en actividades recreativas
Necesidad de aprendizaje
ARTRITIS REUMATOIDE.
La artritis reumatoide es una forma de artritis que causa dolor, inflamación, rigidez y pérdida
de la función de las articulaciones. Puede afectar cualquier articulación, pero es común en las
muñecas y los dedos.
Más mujeres que hombres padecen artritis reumatoide. Suele comenzar en la edad mediana y
es más común entre los adultos mayores. Usted puede padecer la enfermedad por un corto
período o los síntomas pueden aparecer y desaparecer. La forma severa puede durar toda la
vida.
Causas
No se conoce la causa de la artritis reumatoide. Los genes, el ambiente y las hormonas pueden
tener un rol. Los tratamientos incluyen medicamentos, cambios en el estilo de vida y cirugía.
Pueden disminuir o detener el daño en las articulaciones y reducir el dolor y la inflamación.
Síntomas.
La mayoría de las veces, la AR afecta las articulaciones en ambos lados del cuerpo por igual.
Los dedos de las manos, las muñecas, las rodillas, los pies, los codos, los tobillos, la cadera y los
hombros son los que resultan afectados con mayor frecuencia.
La enfermedad a menudo comienza de manera lenta. Los síntomas iniciales pueden incluir
Pruebas diagnosticas
Factor reumatoideo
Anticuerpos antipéptidos cíclicos citrulinados (anti-PCC)
Conteo sanguíneo completo (CSC)
Panel metabólico y ácido úrico
Proteína C reactiva (PCR)
Tasa de sedimentación eritrocítica (ESR)
Anticuerpos antinucleares
Prueba de hepatitis
Radiografías de las articulaciones
Ultrasonido o resonancia magnética de las articulaciones
Análisis de líquidos en las articulaciones
Trtamientos Farmacologicos.
Medicamentos antiinflamatorios: estos incluyen al ácido acetilsalicílico (aspirin) y
antiinflamatorios no esteroides (AINES) como el ibuprofeno, naproxeno y celecoxib.
Estos medicamentos funcionan muy bien para reducir la hinchazón e inflamación articular,
pero pueden tener efectos secundarios a largo plazo. Por esa razón, solo deben tomarse por
un corto tiempo y de ser posible en dosis bajas.
Ya que estos medicamentos no previenen el daño articular por sí solos, deben usarse junto con
medicamentos FARMA.
Pueden pasar semanas o meses antes de ver algún beneficio de estos medicamentos.
Estos fármacos pueden tener efectos secundarios serios, así que se necesitará exámenes de
sangre regulares cuando los esté tomando.
Medicamentos antipalúdicos -- Este grupo de medicamentos incluye hidroxicloroquina
(Plaquenil). Casi siempre se usan junto con metotrexato. Pueden pasar semanas o meses antes
de ver algún beneficio de estos medicamentos.
Agentes biológicos FARMA: estos medicamentos están diseñados para afectar partes del
sistema inmunitario que juegan un papel en el proceso patológico de la AR.
Estos fármacos se pueden administrar cuando otros medicamentos para la AR, como el
metotrexato, no han funcionado. Por lo general, los fármacos biológicos se agregan al
metotrexato. Sin embargo, al ser medicamentos costosos, generalmente requerirán
aprobación del seguro médico.
La mayoría de estos medicamentos se administran ya sea bajo la piel (subcutáneos) o en una
vena (intravenosos). Existen varios tipos de agentes biológicos.
Los agentes biológicos y sintéticos pueden ser muy útiles en el tratamiento de la AR. Sin
embargo, las personas que toman estos fármacos deben ser vigiladas muy de cerca debido a
reacciones adversas poco comunes, pero serias:
Cuidados de Enfermería.
En el Cuidado de enfermería para la artritis se encargan tanto de los cuidados personales como
la atención en la vivienda:
Las articulaciones son los componentes del esqueleto que nos permiten el movimiento y, por
tanto, nuestra autonomía funcional y están formadas por la unión de dos huesos a través de la
cápsula articular. En el interior de las mismas existe, generalmente, un fluido llamado líquido
sinovial que es producido por la membrana sinovial. Los extremos óseos que se unen para
formar la articulación están recubiertos por el cartílago articular.
Cuando este cartílago articular se lesiona, se produce dolor, rigidez e incapacidad funcional.
Normalmente la artrosis se localiza en la columna cervical y lumbar, algunas articulaciones del
hombro y de los dedos de las manos, la cadera, la rodilla y la articulación del comienzo del
dedo gordo del pie.
Factores de Riego.
Edad avanzada (se incrementa el riesgo a partir de los 50 años).
Sexo femenino.
Obesidad (sobre todo en artrosis localizada en articulaciones como las rodillas y otras que
soporten peso como la zona lumbar de la columna vertebral).
Menopausia.
Sintomas
Dolor. Las articulaciones afectadas pueden doler durante o después del movimiento.
Rigidez. La rigidez en las articulaciones puede ser más notoria al despertar o después de estar
inactivo.
Sensibilidad. Es posible que su articulación esté sensible cuando aplicas un poco de presión
sobre ella o cerca de ella.
Sensación chirriante. Es posible que sientas una sensación chirriante al usar la articulación y
que oiga chasquidos.
Osteofitos. Estos pedazos adicionales de hueso se sienten como bultos duros y pueden
formarse alrededor de la articulación afectada.
Hinchazón. Esto puede producirse por la inflamación de los tejidos blandos alrededor de la
articulación.
Pruebas Diagnósticas.
Radiografías
Imágenes por resonancia magnética (RM).
Análisis de sangre
Análisis del líquido sinovial
Tratamientos Farmacológicos.
Algunos de los medicamentos que pueden ayudar a aliviar los síntomas de la osteoartritis,
principalmente el dolor, son los siguientes:
Cuidados de Enfermería.
Peso corporal
Calor y frio.
Medicación
Hábitos posturales
Ejercicio
Reposo
Sobrecarga de articulaciones
Balnearios