Cambios Anatomofisiologicos Del Lactante
Cambios Anatomofisiologicos Del Lactante
Cambios Anatomofisiologicos Del Lactante
NARIZ:
En los lactantes, la pirámide nasal suele ser más elástica, las narinas más oblicuas y no
podemos visualizar las vibrisas en la parte epitelial interna de cada narina. Además la
nariz en los lactantes, es el lugar con mayor resistencia al paso del aire, debido a la
estrechez de la vía aérea
Los lactantes son inicialmente respiradores nasales exclusivos, hecho que favorece la
lactancia, pues la respiración se realiza de manera simultánea con la succión y deglución
CAVIDAD NASAL
En la cavidad nasal de los lactantes nos encontraremos con cornetes inmaduros y poco
vascularizados que poseen una respuesta vasomotora débil a los cambios de
temperatura, así como a los procesos inflamatorios infecciosos o alérgicos, y la mucosa
nasal inicialmente se encuentra poco vascularizada y con cilios escasamente
desarrollados e incapaces de entibiar, humedecer o filtrar efectivamente el aire
inspirado.
NASOFARINGE:
En el recién nacido y en los primeros meses de vida, hay una estrecha relación de la
nasofaringe con el oído medio a través de la Trompa de Eustaquio, que es corta y ancha,
tiene una posición horizontal y permanece abierta; por tanto, hay tendencia a las
infecciones del oído medio durante el periodo lactante.
LARINGE:
En el neonato, la laringe está localizada a la altura del cuerpo de C1, y la glotis se
relaciona con la mitad del cuerpo de esta vértebra. La glotis se mueve caudalmente a
medida que crece el lactante. El cuello de los RN y lactantes es corto lo que no favorece
el paso del aire.
En el lactante, la prominencia más palpable es el cricoides que coincidiría con la zona
subglótica
LA EPIGLOTIS:
se encuentra en una posición alta, muy cerca del paladar blando, lo cual favorece la
respiración nasal en lugar de la respiración oral, característica que facilita al lactante
succionar su alimento y respirar a la vez. En los lactantes la epiglotis tiene forma de
omega (Ω), es proporcionalmente más larga y proximal, sus tejidos de fijación son más
laxos y sobresale de la laringe en un ángulo de 45º
CUERDAS VOCALES:
En un lactante las cuerdas vocales tienen una inserción más baja en su parte inferior. La
vía respiratoria del niño es más corta y estrecha. Estas diferencias hacen que la
posibilidad de obstrucción sea alta.
TRAQUEA:
En el lactante, la dirección de la tráquea es caudal y posterior
La carina principal es mas ancha en los lactantes
TORÁX:
El tórax del lactante es de forma redonda o de tonel, debido a que los diámetros
anteroposteriores y transverso son iguales.
A medida que el niño o niña crece, el tórax se ensancha transversalmente, la inclinación
de las costillas hacia abajo es menor
PULMONES:
El pulmón durante el periodo neonatal presenta una distensibilidad disminuida que se va
desarrollando durante la primera infancia. Fenómeno que facilita el cierre fisiológico de
algunas zonas menos ventiladas de la vía aérea y a su vez la mayor tendencia a formar
atelectasias. Nacen con un peso de ambos pulmones de 200grs
Durante este periodo de desarrollo, los lactantes presentan una actividad metabólica
aumentada requiriendo mayor aporte de oxígeno, compensando dicha necesidad con una
frecuencia respiratoria normal más elevada (Lactante: 30 a 40x)
REFLEJO DE HERING BREUER:
Uno de los aspectos fundamentales es la presencia del reflejo de Hering- Breuer, que en
el recién nacido y en los lactantes permite finalizar la espiración antes de que el
volumen pulmonar disminuya demasiado
SISTEMA CARDIOVASCULAR
EL CORAZON:
En el lactante el corazón crece más despacio que el resto del cuerpo, su peso suele
duplicarse al año. El tamaño del corazón sigue siendo grande en relación con la cavidad
torácica; su anchura es alrededor del 55% de la del pecho.
HEMATOLOGIA
A) HEMOGLOBINA Y TRANSPORTE DE OXIGENO:
Durante el primer año de vida se producen cambios significativos en la hematopoyesis.
La hemoglobina fetal (HbF) aparece durante los primeros 5 meses, mientras que la
hemoglobina adulta aumenta de forma progresiva en la primera mitad de la lactancia.
Posteriormente, entre los 3 y 6 meses se observa un ligero aumento del recuento de
reticulocitos(glóbulos rojos inmaduros), que suele normalizarse después del año de vida.
La hemoglobina fetal se asocia a una supervivencia menor de los eritrocitos y un menor
número de estos. Una consecuencia frecuente a los 3-6 meses es una anemia fisiológica.
Las concentraciones altas de hemoglobina fetal disminuyen la producción de
eritropoyetina, una hormona liberada por los riñones que estimula la producción de
eritrocitos. Durante los primeros 5-6 meses existen reservas de hierro de origen
materno, que disminuyen de forma gradual, lo que explica una reducción de las
concentraciones de hemoglobina hacia el final de los primeros 6 meses.