Procesamiento Tramo I
Procesamiento Tramo I
Procesamiento Tramo I
AUTOS Y VISTOS:
Para resolver en la presente causa n° 9.789/2.000, del
registro de la Secretaría n° 8 de este Juzgado, caratulada “Galeano,
Juan José y otros s/ peculado, privación ilegitima de la libertad,
coacción, falso testimonio”, respecto de la situación procesal de las
personas que a continuación se detallan:
1. Juan José Galeano, argentino, D.N.I. nº 12.082.718, nacido el
11 de marzo de 1958, hijo de Juan Néstor y de Susana Foronda,
divorciado, de profesión abogado, domiciliado en la calle
Cerviño 3.421 Capital Federal. Asistido por el Dr. Juan Martín
Hermida, Defensor Oficial. Domicilio constituido en la
Avenida Comodoro Py 2.002, piso 5º de esta ciudad.
2. Eamon Gabriel Mullen, argentino, D.N.I. nº 13.430.331,
nacido el 7 de junio de 1959, hijo de Roberto Gabriel y de
María Teresita Cogley, casado en segundas nupcias, de
profesión abogado, domiciliado en la calle Uruguay 950, piso
2º “3” Capital Federal. Asistido por los Dres. Miguel Ángel
Almeyra y Enrique Paixao. Domicilio constituido en la calle
Talcahuano 847, P.B. de esta ciudad.
3. José Carlos Barbaccia, argentino, D.N.I. nº 16.051.953,
nacido el 26 de marzo de 1963, hijo de José y de María
Lucrecia Aranguren, casado, de profesión abogado. Asistido
por los Dres. Miguel Ángel Almeyra y Jacobo Isaac Grossman.
Domicilio constituido en la calle Talcahuano 847 P.B. de esta
ciudad.
4. Hugo Alfredo Anzorreguy, argentino, D.N.I. nº 4.273.429,
nacido el 10 de julio de 1938, hijo de Hugo Alfredo Beredicto
y de Hortencia Beatriz Recobiche, casado, de profesión
abogado, domiciliado en la calle Esmeralda 1.319, piso 6º
Capital Federal. Asistido por el Dr. Fabián Eduardo Musso.
Domicilio constituido en la calle Libertad 1.213, piso 5º de esta
ciudad.
5. Patricio Miguel Finnen, argentino, D.N.I. nº 10.083.343,
nacido el 26 de febrero de 1952, hijo de Miguel Tomás y de
Elsa Rosa Campo, casado, de profesión licenciado en ciencias
políticas, domiciliado en la calle Crisólogo Larralde 3.243,
Castelar, Provincia de Buenos Aires. Asistido por el Dr. Carlos
Daray. Domicilio constituido en la calle Viamonte 1.355, piso
6º, oficina “C” de esta ciudad.
6. Alejandro Alberto Brousson, argentino, D.N.I. nº 11.800.316,
nacido el 20 de enero de 1955, hijo de Alejandro Irineo y de
Martha Beatriz Morelli, casado, de profesión militar retirado,
domiciliado en la calle De Benedetti 405, piso 1º, unidad 5, La
Lucila, Partido de Vicente López, Provincia de Buenos Aires.
Asistido por el Dr. Gabriel Mario Presa. Domicilio constituido
en la calle Cerrito 260, piso 4º de esta ciudad.
7. Rubén Ezra Beraja, argentino, D.N.I. nº 4.287.632, nacido el
25 de marzo de 1939, hijo de Moisés y de Frida Saiegh, casado,
de profesión abogado, domiciliado en la calle Guido 2.514,
piso 3º Capital Federal. Asistido por el Dr. Marcelo Roberto
Buigo. Domicilio constituido en la Avenida Corrientes 1.393,
piso 3º, “F” de esta ciudad.
8. Carlos Alberto Telleldín, argentino, D.N.I. nº 14.431.202,
nacido el 25 de junio de 1961, hijo de Raúl Pedro y de Lidia
Seeb, divorciado, de profesión abogado, domiciliado en la calle
General Martín Güemes 1.654, Vicente López, Provincia de
Buenos Aires. Asistido por los Dres. Alejandro Castiñeiras y
Luis Antonio Sasso. Domicilio constituido en la calle Viamonte
1.453, piso 8º, oficina “55” de esta ciudad.
9. Ana María Boragni, argentina, D.N.I. -triplicado- nº
14.431.202, nacida el 2 de diciembre de 1957, hija de Domingo
(f) y de Felisa Camorra (f), soltera, de profesión comerciante,
domiciliada en la calle General Martín Güemes 1.654, Vicente
López, Provincia de Buenos Aires. Asistida por el Dr.Alejandro
Castiñeiras. Domicilio constituido en la calle Viamonte 1.453,
piso 8º, oficina “55” de esta ciudad.
10. Víctor Alejandro Stinfale, argentino, D.N.I. nº 16.870.933,
nacido el 30 de diciembre de 1963, hijo de Héctor Antonio y de
Lidia Evelina Rodríguez, soltero, de profesión abogado,
domiciliado en la calle Tacuarí 1.895, Ramos Mejía, Provincia
de Buenos Aires. Asistido por los Dres. Nicolás García Culla y
Gonzalo Álvarez Casado. Domicilio constituido en la Av.
Callao 1.016, piso 9º, “A” de esta ciudad.
Y CONSIDERANDO:
El objeto procesal de las presentes actuaciones es el que
establecieron el Tribunal Oral Federal nro. 3, el 29 de octubre de
2.004 -registro n° 1/04- y la Sala II de la Cámara Nacional de
Casación Penal, el 19 de mayo de 2.006 -registro n° 8.621-.
En este sentido, la investigación debe establecer la
existencia de una decisión política proveniente de las más altas esferas
del gobierno con la participación de actores judiciales y de otras
agencias penales públicas, en la construcción de una realidad procesal
alejada de la verdad, tal como lo señalaron los tribunales que
intervinieron en la investigación principal sobre el atentado. La prueba
que debe completarse estará dirigida a acreditar tales circunstancias.
La complejidad que se deriva de una investigación de
esta naturaleza -así como aquella en donde se investiga el atentado a la
A.M.I.A.-, radica en la circunstancia de que los hechos ocurrieron
hace más de diez años, lo que implica desentrañar su posible
existencia siempre dentro del cauce de los principios procesales
establecidos por nuestro sistema penal para la averiguación de los
hechos que son materia de una investigación penal.
De lo que se trata, es de determinar con precisión cuáles
son la acciones penalmente relevantes, su reconstrucción a partir de la
prueba que se produjo en este expediente y en el juicio principal por el
atentado a la sede de la A.M.I.A., y como su consecuencia atribuir
responsabilidades criminales.
Todo ello como el resultado del limitado marco que
otorga un análisis jurídico penal y no como parte de un entramado de
atribución de responsabilidades políticas, que aún pudiendo ser ciertas
en su definición, no pueden volcarse en un expediente criminal, con el
rigor y la limitación en la decibilidad de la verdad procesal que tiene
un juicio penal, como una derivación razonada del derecho y de la
prueba con la que se cuenta.
Es que no sería jurídicamente válido ni lícito formular
una declaración de conocimiento como la que aquí se formula con
sustento en hipótesis, confabulaciones o especulaciones -aún cuando
ellas encuentren su génesis en un fuerte reclamo social de “justicia”-
que aún pudiendo ser verdaderas no pueden respaldarse con la prueba
incorporada hasta el momento por la investigación.
Repárese que, el auto de mérito constituye como se dijo,
la expresión judicial del grado de conocimiento aquí alcanzado hasta
ahora, y como tal, un acto jurisdiccional. En este sentido sostiene
Ferrajoli que: “a diferencia de cualquier otra actividad jurídica, la
jurisdiccional, en el estado de derecho, es una actividad no sólo
práctica o prescriptiva, sino además teorética; o, mejor aún, es una
actividad prescriptiva que tiene por necesaria justificación una
motivación total o parcialmente cognoscitiva.” (Ferrajoli, Luigi,
Derecho y Razón, Teoría del garantismo penal, Trotta, Madrid 2001,
p. 542).
La condición de validez de una decisión jurisdiccional,
está supeditada a la motivación basada en los hechos y las pruebas, y
la fundamentación jurídica del caso. Esas dos condiciones, son las que
diferencian al acto jurisdiccional del acto político.
Sancinetti explica que: “El derecho penal de los Estados
modernos parte del presupuesto de estar provisto de ciertos principios
tenidos por fundamento de legitimidad de la actuación del Estado en
la persecución de quienes sean sospechados como autores de hechos
punibles. Estos principios no son levantables `por razones de
necesidad´, ni pueden ser relativizados `en ciertos casos´, etc. Del
desacierto de la suposición de que `en algunos casos´sea necesario
suprimir los principios sólo `ad-hoc´, el Estado argentino registra
ejemplos imborrables de su trágica historia todavía reciente, así como
también de la no reciente” (Sancinetti, Marcelo A., Análisis crítico del
caso “Cabezas”, T° I, La Instrucción, Ad-Hoc, Buenos Aires, mayo
2000, p. 1127).
También González-Cuellar Serrano refiere sobre este
punto que: “Ciertamente resulta muy poco dudoso, desde un punto de
vista constitucional, que el interés estatal de persecución penal pueda
quedar a merced de parámetros como el interés del público en el
rápido castigo del culpable, por la alarma producida por los hechos o
por la especial posición social del imputado. De nada sirve enmascarar
el ánimo de vindicta social apelando al interés del público en la
defensa del ordenamiento jurídico, en el éxito del proceso o en la
obtención de una sentencia judicial. Por otro lado, las exigencias de
participación de los ciudadanos en el Justicia penal a través del
transvase de sentimientos colectivos de alarma al proceso, en la
aplicación de medidas restrictivas de derechos, lejos de sintonizar con
las legítimas preocupaciones de una sociedad democrática, recuerdan
más bien a las coartadas que históricamente se han utilizado para dotar
de falsa apariencia de legitimidad a arbitrarias actuaciones del Estado
que no responden más que a intereses parciales de ciertos sectores
sociales o quizás incluso a sentimientos de grandes masas bien
dirigidas, ya sea por un líder o por órganos de comunicación
conservadores” (González-Cuellar Serrano, Nicolás,
Proporcionalidad y Derechos Fundamentales en el Proceso Penal,
Colex, Madrid 1990, p. 259).
Lo expuesto, sin perjuicio de señalar que la presente
decisión no agota el objeto de la investigación.
I- Hechos imputados:
En función de la prueba reunida en las presentes
actuaciones, como así también de la mencionada en las resoluciones
dictadas por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal n° 3, y por la
Sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal, se efectuaron las
imputaciones que a continuación se detallan:
I.a) Pago de U$S 400.000 a Telleldín.
Se imputó este hecho a Hugo Alfredo Anzorreguy, Juan
José Galeano, Eamon Gabriel Mullen, José Carlos Barbaccia, Patricio
Miguel Finnen, Alejandro Alberto Brousson, Rubén Ezra Beraja,
Víctor Alejandro Stinfale, Carlos Alberto Telleldín y Ana María
Boragni.
El hecho consistió en haberse pagado a Carlos Alberto
Telleldín -mientras se encontraba detenido a disposición del Juzgado
Nacional en lo Criminal y Correccional Federal n° 9 en la causa n°
1.156-, la suma de cuatrocientos mil dólares, provenientes de fondos
reservados de la Secretaría de Inteligencia del Estado, a cambio de que
éste aporte una nueva versión -ampliación de su declaración
indagatoria- convenida previamente con el magistrado, acerca del
destino que le había dado a la camioneta que luego habría sido
utilizada en el ataque a la sede de la A.M.I.A., involucrando al
personal de la Policía Bonaerense, en particular de las Brigadas de
Investigaciones II de Lanús y XVI de Vicente López -Juan José
Ribelli, Raúl Edilio Ibarra, Anastasio Irineo Leal y Mario Norberto
Bareiro-, en el atentado a la A.M.I.A.
Se le imputó al Dr. Hugo Alfredo Anzorreguy, titular de
la S.I.D.E, autorizar el pago y entregar el dinero a los agentes Patricio
Finnen y Alejandro Brousson -ambos a cargo de la Sala Patria de la
S.I.D.E.- para que éstos organizaran e instrumentaran el pago con sus
empleados (Legascue, Maiolo y Molina Quiroga), todo ello, bajo la
supervisión del Dr. Galeano.-
Se le reprochó a Ana María Boragni haber recibido las
dos cuotas de U$S 200.000. La primera, acompañada por el Dr.
Stinfale, el mismo día en que Telleldín suscribía su nueva declaración
indagatoria -5 de julio de 1996-, y la segunda, el 17 de octubre de
1996, una vez que las personas indicadas por el entonces imputado
declararon como testigos en la causa y ratificaron la versión expuesta
por aquél.
Finalmente, se les imputó que el día 6 de mayo de 1997,
el Dr. Stinfale en connivencia con el Dr. Galeano y el Dr. Beraja,
presentó un escrito solicitando un pedido de recompensa en favor de
Telleldín por haber colaborado con la investigación -que fue ratificado
por el nombrado el 6 de junio de 1997-, con el objeto de que se forme
un legajo de recompensa para justificar el pago previamente realizado.
I.b) Privación de la libertad y coacción a Miriam
Salinas.
Se les imputó al Dr. Juan José Galeano y a los fiscales
Mullen y Barbaccia. haber privado de la libertad -desde el 2 al 7 de
octubre de 1995- a Miriam Raquel Salinas, y haberla coaccionado
mediante la imputación de su participación en el atentado contra la
sede de la A.M.I.A., con la finalidad de que bajo promesa de liberarla,
sobreseerla y beneficiar la situación de su pareja Pablo Ibáñez -
imputado en la misma causa-, aporte en una posterior declaración
como testigo de identidad reservada, pormenores del entorno de
Telleldín y Boragni, como así también, elementos incriminantes para
los imputados en la causa n°1.156. Particularmente, habría permitido
el ingreso a su domicilio particular de personal de la SIDE y la
instalación de cámaras de filmación.
I.c) Falsedad en la declaración testimonial del Dr.
Gustavo Semorile.
Se le imputó al Dr. Juan José Galeano haber acordado
una reunión informal en el juzgado con Gustavo Semorile -abogado
defensor de Carlos Alberto Telleldín, Miriam Salinas y Pablo Ibáñez-
que fue grabada sin su conocimiento y en la que le pedía que cuente
todo lo que conocía respecto del “apriete” a Telleldín, cuando fue
detenido el 4 de abril de 1994.
En la reunión, Semorile reconoció su participación en la
extorsión a Telleldín por parte de los policías que integraban la
Brigada de Investigaciones de Lanús. Explicó que Telleldín entregó
vehículos y dinero para recuperar su libertad, quedándose Semorile
con una motocicleta “Kawasaki KMK 125”, dominio 328 APX, que
formaba parte de la extorsión.
Una vez finalizada la charla informal el Dr. Galeano le
exhibió el video a Semorile y los días 4 y 6 de junio de 1996, lo
determinó a realizar declaraciones diferentes a las que había efectuado
-sin que sea relevado del secreto profesional-, que se plasmaron bajo
la modalidad de reserva de identidad Testigo "2" -de la causa n°
1.156-. Asimismo, sus falsos dichos fueron parte de la base de las
imputaciones que se formularon a los funcionarios policiales.
I.d) Privación de la libertad de Ribelli, Leal, Ibarra y
Bareiro. Prevaricato.
Se les imputó el primero de los hechos a Galeano y a los
Fiscales Mullen y Barbaccia y el segundo sólo al primero de los
nombrados.
Se le reprochó haber interpretado la prueba en las
resoluciones de la causa n° 1.156, limitándose a realizar un análisis
parcial y aislado de los elementos de juicio, no integrado y
armonizado debidamente en su conjunto, desvirtuando la eficacia de
los medios probatorios y teniendo como único cometido procurar una
versión cargosa contra Juan José Ribelli, Raúl Edilio Ibarra, Anastasio
Irineo Leal y Mario Norberto Bareiro, sobre la base de convenios con
otros procesados, reuniones con personal de la Secretaría de
Inteligencia de Estado y con el detenido Carlos Telleldín, a quien le
pagó la suma de cuatrocientos mil dólares, luego de que brindara una
nueva versión convenida previamente con el magistrado, acerca del
destino que le diera a la camioneta que luego habría sido utilizada en
el ataque a la sede de la A.M.I.A., involucrando al personal de la
Policía Bonaerense mencionado, en el atentado contra la Asociación
Mutual Israelita Argentina.
Ello, por cuanto, a partir del auto de fecha 31 de octubre
de 1995, dispuso instruir la denominada causa “Brigadas” -que tramitó
en forma paralela a la principal-, libró órdenes de detención el 12 de
julio de 1996, respecto de los nombrados y les dictó el auto de
procesamiento con prisión preventiva el 31 de julio de 1996,
fundándolo en hechos falsos, y causando en consecuencia, la
privación de sus libertades desde el 12 de julio de 1996, hasta el 3 de
diciembre de 2003 -fecha que fue apartado del conocimiento de la
causa por la Sala I del fuero-.
En particular, se le imputó que al momento de resolver
tenía conocimiento de las falsedades afirmadas en las declaraciones de
Semorile que probaban la supuesta relación entre las Brigadas de
Lanús y Vicente López, y que además, efectuó una arbitraria
valoración de los informes remitidos por las empresas telefónicas
concernientes a los registros de llamados efectuados por los celulares
a nombre de Ribelli y que fueran captados por las celdas
correspondientes al domicilio de Telleldín; como así también, de los
informes que dieron cuenta de la existencia de numerosos llamados
con anterioridad y posterioridad al 10 de julio de 1994.
En este hecho a los fiscales Mullen y Barbaccia, se les
imputó el hecho de haber convalidado las resoluciones de la causa
n°1.156 -del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal
n° 9-, aún conociendo la irregularidad de las pruebas en las que se
fundaba el Dr. Galeano y el pago a Carlos Telleldín para que brindara
la nueva versión, convenida previamente con el magistrado,
involucrando al personal de la Policía Bonaerense mencionado en el
atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina.
II. Trámite de las actuaciones.
II.a) Denuncia y requerimiento fiscal.
La presente causa se inició con la presentación efectuada
por el entonces Ministro de Justicia y Derechos Humanos, Dr. Ricardo
Gil Lavedra, al ex Procurador General de la Nación, Dr. Nicolás
Becerra, en la cual puso en conocimiento de éste último, de los dichos
de los diarios “Página 12” y “Clarín”, referidos a irregularidades
denunciadas por Claudio Adrián Lifchitz (ex prosecretario del
Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal n° 9).
A fojas 5 el Fiscal General, Dr. Germán Moldes, con
fecha 16 de agosto de 2000, remitió esas actuaciones a la Excma.
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional
Federal de esta ciudad. Resultó desinsaculado el Juzgado Nacional en
lo Criminal y Correccional Federal n° 4, a cargo, en ese momento, del
Dr. Gabriel Rubén Cavallo.
En oportunidad de contestar la vista conferida en virtud
de lo establecido por el artículo 180 del Código Procesal Penal de la
Nación, el Fiscal Dr. Carlos Miguel Cearras describió el hecho de la
siguiente manera: “en una entrevista difundida por el programa
“Punto Doc” Liftchitz expresó que había trabajado como
prosecretario en el Juzgado Federal n° 9, colaborando en la causa
A.M.I.A., y formuló críticas sobre cómo se habría desarrollado la
investigación, afirmando que no se habían analizado algunos datos
existentes en agendas de personas que fueron imputadas, así como
que no se habrían investigado algunas pistas importantes. También
aludió a la Secretaría de Inteligencia del Estado (S.I.D.E.) la cual
habría ocultado y erradicado pruebas en torno a la presencia de unos
ciudadanos iraníes en la Argentina. Expresó también que un hermano
del Dr. Carlos Menem, de nombre Munir, habría llamado al juzgado
para interesarse por la situación de un iraní vinculado con la causa,
llamado Alberto Kanore Edul. Además de estas presuntas anomalías
el entrevistado manifestó haber sido víctima de amenazas telefónicas”
(conf. fojas 12).
Si bien en un principio, el Dr. Gabriel Cavallo delegó la
instrucción del sumario a la Fiscalía, con fecha 29 de septiembre de
ese año, a raíz de la recusación interpuesta por el Dr. José Manuel
Ubeira, el magistrado se excusó, resolviéndose, finalmente, darle
intervención en las presentes actuaciones al Dr. Claudio Bonadío,
titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal nº
11, quien con fecha 9 de octubre de 2.000 aceptó la causa y la instruyó
sin delegación fiscal.
II.b) Partes querellantes.
A lo largo de la instrucción se otorgó la condición de
querellante a las personas que a continuación se detallan:
1. Juan José Ribelli, patrocinado por el Dr. José
Manuel Ubeira (fs. 15).
2. Laura Alche de Ginsberg, patrocinada por los
Dres. Pablo Miguel Jacoby y Alberto Luis Zuppi (fs.
20). Los Dres. Jacoby y Zuppi, a fojas 1997, renunciaron
al patrocinio de Laura Alche de Ginsberg, siendo
reemplazado por el Dr. Eduardo Barcesat como abogado
patrocinante (fs 2.113).
3. Delegación de Asociaciones Israelitas
Argentinas (D.A.I.A), presidida por Rogelio
Cichowolsky y patrocinada por la Dra. Marta Nercellas
(fs 30). A fs 7.923 los Dres. Marta Nercellas y Mariano
Fridman renunciaron al patrocino de la D.A.I.A., siendo
reemplazado por el -Vicepresidente Primero de la
institución- Dr. Jorge Kirszeunbaum (fs. 8.056).
4. Diana Wassner de Malamud y Adriana
Marcela Reisfeld, en un principio con el patrocinio
letrado de los Dres. Pablo Miguel Jacoby y Alberto Luis
Zuppi y actualmente con el patrocinio de los Dres.
Mariana Trevisacce y Marcelo Hernán Caremi (fojas
10.123).
5. Anastasio Irineo Leal, patrocinado por los Dres.
Miguel Ángel Pierri, Jorge Luis Gondra y Humberto
Atilio Pieroni (fs. 269 vta.). A fs. 886 Anastasio Irineo
Leal revocó su patrocino letrado y designó a la Dra.
Karina Verónica Bacci. Asimismo, a fojas 1.011 designó
también a Jorge Guillermo Poblete, como abogado
patrocinante.
6. Asociación Mutual Israelita Argentina
(A.M.I.A.) patrocinada por los Dres. Miguel Bronfman,
Tomás Farini Duggan, Carolina Fernández Blanco y
Juan José Ávila (fs. 359/60).
7. “Familiares y Amigos de víctimas del atentado
contra la A.M.I.A./D.A.I.A.”. Integrado por Romina
Burstein, Mariano Sebastián Burstein, Luis Czyzewski,
Ana María Blugerman, Sofía Kaplinsky, Jacobo
Furman, Graciela Linial, León Mario Averbuch, María
Silvia Zajdweber, Elba Noemí Agostinelli, Rosa
Montano, Ana María Gaibisso, Aida Krimer de Plaksin,
Olga Noemí Diacovetzky de Degtiar, Sergio Leonardo
Burstein, Silvana Graciela Kupchiki, Israel Kupchik y
de David Schalit, representado por Julio Alberto Federik
con el patrocinio letrado del Dr. Mariano E. M. Pinciroli
(fojas 2.286). A fojas 6.965 los Dres. Federik, Arias y
Pinciroli renunciaron a la representación del Grupo de
Familiares y Amigos de las víctimas del atentado a la
sede de la A.M.I.A.
Actualmente se encuentra el Dr. Pablo Lanusse, en
representación de Olga Diacovetzky, Luis Czyzewski,
Ana María Blugerman, León Averbuch, María Silvia
Zasdweber y Graciela Linail de Furman (fs. 9480).
1. Óscar Eusebio Bacigalupo y Edilio Ibarra,
patrocinados por los Dres. José Manuel Ubeira y
Mariano La Rocca (fs 3.455).
2. Víctor Carlos Cruz, patrocinado por el Dr. José
Manuel Ubeira (fs. 3.888).
3. Daniel Emilio Quinteros, patrocinado por los
Dres. José Manuel Ubeira y Mariano La Rocca (fs.
4.777).
4. Marcelo Gustavo Albarracin, patrocinado por
el Dr. Luis Gualtieri (fs. 5.558).
5. Jorge Horacio Rago, con el patrocinio del Dr.
Enrique Julio Villarreal (fs. 5.804).
6. Argentino Gabriel Lasala, patrocinado por el
Dr. José Manuel Ubeira
7. Oficina Anticorrupción, representada por el Dr.
Daniel Morín, Fiscal de Control Administrativo. Si bien
en un principio el Dr. Bonadío rechazó el pedido, la
Excma. Cámara del Fuero con fecha 23 de noviembre de
2005, le concedió tal carácter.
8. Miguel Ángel Arancibia con el patrocinio del
Dr. José Manuel Ubeira (fs. 7.078).
9. Juan Carlos Ribelli, con el patrocinio del Dr.
José Manuel Ubeira (fs. 7.137)
10. Bautista Alberto Huici, patrocinado por el Dr.
José Manuel Ubeira (fs 7.913).
11. Juan Degtiar, Jorge Jurín, Luis Goldenberg,
Elisa Einstoss, Sergio Knorpel, Silvio Duniec, Jacobo
Furman, Sergio Burstein, Mariano Burstein y
Romina Burstein todos bajo la representación de Pablo
Lanusse, asignándosele a éste último el rol de
querellante (fs. 9.508).
12. Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de
la Nación. Secretaría de Política Criminal y Asuntos
Penitenciarios, representado por el Dr. Alejandro
Slokar, con el patrocinio de Nora Cherñavsky (fs.
9.480).
13. Benjamín Jorge Lew, con el patrocinio de los
Dres. Mariana Trebisacce y Marcelo Hernán Caremi
(fojas 10.123).
14. Ariel Esteban Toer, con el patrocinio de los
Dres. Carlos Wiater y Diego Fernando Sznurewicz (fs.
10.332).
En contraposición, no se aceptó el rol de parte
querellante a:
• Jorge Orlando Pacífico, en razón de no revestir la
condición de ofendido por los hechos que conforman la
investigación (fs. 330).
• Carlos Alberto Telleldín. El día 21 de noviembre
del año 2001 con el patrocinio del Dr. Víctor Stinfale
solicitó ser tenido por parte querellante (fs 1.679). Dicha
petición fue rechazada por el Dr. Bonadío con fecha 4 de
febrero de 2002 y confirmada por el Superior el 18 de
julio del año 2002 (fs. 1.865 y 2.504 respectivamente).
Con fecha 7 de mayo del año 2003 Carlos Alberto
Telleldín -patrocinado por las Dras. Andrea F. Novello y
Laura A. Fechino- solicitó nuevamente que se le otorgue
la condición de querellante; siendo rechazada, el mismo
día como así también el 20 de mayo del 2003. La
Ecxma. Cámara del fuero el 28 de noviembre de 2005,
confirmó dicho decisorio.
II.c) Causas incorporadas:
A lo largo de la investigación se han ido incorporando
causas, provenientes de diferentes juzgados, las que a continuación se
detallarán:
• Causa n° 13.779/01 proveniente del Juzgado
Nacional en lo Criminal y Correccional Federal n° 8,
caratulada: “Galeano, Juan José s/sustracción y
destrucción de medios de prueba”, agregada a fs
1.230/1.241. Fue iniciada a raíz de la presentación
efectuada por el Dr. Alberto Luis Zuppi, respecto de un
oficio remitido por el Dr. Juan José Galeano al Tribunal
Oral en lo Criminal Federal n° 3.
• Causa n° 15.220/01 caratulada “N. N. s/delito de
acción pública”, proveniente del Juzgado Nacional en lo
Criminal y Correccional Federal nº 1, Secretaría nº 2 (fs.
1.452/1.541). Se inició por testimonios del Tribunal Oral
en lo Criminal Federal nº 3, a raíz de los dichos de Juan
José Ribelli sobre una presunta conspiración entre
Carlos Menem, Carlos Corach, Juan José Galeano,
Javier De Gamas, Carlos Velasco, Hugo Anzorreguy,
Eamon Mullen, José Carlos Barbaccia y Luisa Martha
Riva Aramayo, que tuvo como objeto inducir a Carlos
Telleldín a que declare en la causa n° 1.156 “A.M.I.A.”
involucrándolo.
• Causa n° 19.482/01 caratulada “N. N. s/delito de
acción pública”, proveniente del Juzgado Nacional en lo
Criminal y Correccional Federal nº 2, Secretaría nº 3,
agregada a fs. 1.792/1.814. Se investigan los posibles
delitos de acción pública que podrían desprenderse de la
entrevista mantenida el día 10 de abril de 1996, entre el
Dr. Juan José Galeano y Carlos Alberto Telleldín,
registrada mediante un video.
• Testimonios de los cuerpos 9 a 14 del legajo nº
129 (que tramitaba ante el Juzgado Nacional en lo
Criminal y Correccional Federal nº 9). Se ordenó el 25
de septiembre de 2003 que corran por cuerda a las
actuaciones (fojas 5.439).
• Causa n° 11.516/04, caratulada: “N. N.
s/infracción ley 13.985", proveniente del Juzgado
Nacional en lo Criminal de Instrucción nº 11, Secretaría
nº 133, acumulada a fojas 7.282/8. Se inició a raíz de la
denuncia formulada por el Dr. Enrique Piragini, con el
objeto de que se investiguen a los responsables del
fracaso de la investigación del atentado a la Sede de la
A.M.I.A..
• Causa n° 17.957/03 caratulada “Galeano Juan
José s/amenazas, instigación al falso testimonio”,
proveniente del Juzgado Nacional en lo Criminal y
Correccional Federal nº 5, Secretaría nº 10, se acumuló a
fs. 7.487/545. Se inició a raíz de la denuncia formulada
por Carlos Alberto Telleldín contra Juan José Galeano
por amenazas coactivas contra el denunciante y su
familia e instigación al falso testimonio.
• Con fecha 17 de mayo del año 2005 el Dr.
Bonadío declaró la conexidad de las presentes
actuaciones con las causas nº 2.085/02 caratulada
“Galeano Juan José y otro s/falsedad ideológica”, nº
15.983/04 caratulada “Departamento de Explosivos y
Riesgos Especiales y otro s/ falsedad ideológica”, nº
15.984/04 caratulada “Galeano Juan José y otros
s/falsedad ideológica” -acumulada, a su vez, a la causa
nº 344/00 caratulada “Corach Carlos Vladimiro
s/incumplimiento de autoridad y violación de los
deberes de funcionario público”- y, nº 16.024/04
caratulada “Secretaría de Inteligencia Presidencia de la
Nación s/ delito de acción pública”. A todas ellas las
acumuló jurídicamente, por lo que corren por cuerda a
las estas actuaciones (fojas 8.354).
• Causa nº 1.598 caratulada “Brigadas”. Se recibió
-ad effectum videndi- de la Sala II de la Excma. Cámara
Nacional de Casación Penal
• Causa n° 16.023/04, caratulada: “Corach, Carlos
Vladimiro y otro s/ delito de acción pública”. A fojas
9.560 se acumuló jurídicamente la causa mencionada.
• Causa n° 9.658/99 caratulada “Ruckauf Carlos
s/encubrimiento”: iniciada con fecha 17 de agosto de
1999 a raíz de la denuncia efectuada por la Sra. Raquel
Norma Heler de Lew, quien manifestó que el entonces
vicepresidente de la Nación, Dr. Carlos Ruckauf, en su
discurso del día 10 de agosto de 1999, habría
manifestado textualmente: “estoy seguro de quienes
fueron los autores del atentado contra la A.M.I.A.
Detrás del crimen hay una potencia extranjera
involucrada” (fs. 1/2). Con fecha 20 de septiembre de
1.999 el Dr. Eduardo R. Freiler efectuó requerimiento de
instrucción, solicitando la realización de medidas
probatorias. Las actuaciones se encuentran en plena
etapa de instrucción.
• Causa n° 18.385/02 caratulada “Galeano, Juan
José s/delito de acción pública”: iniciada con fecha 6 de
noviembre del año 2002 con motivo de la denuncia
formulada por el Dr. José Manuel Ubeira, en
representación de Juan José Ribelli, en virtud de las
presuntas irregularidades relativa a los allanamientos de
la calle Ituzaingó 2335 de Villa Maipú y República 107
de Villa Ballester, ambos del partido de San Martín,
Pcia. de Buenos Aires.
II.d) Ampliación de los requerimientos:
A medida que se iban incorporando las distintas causas,
como así también algunas de las medidas propuestas por las partes, el
objeto procesal de la causa se ampliaba. El Dr. Bonadío, en cada
ocasión corría vista a la Fiscalía, en virtud de lo normado por el art.
180 del Código Procesal Penal de la Nación.
En base a ello a continuación se describirán los distintos
dictámenes efectuado por el Ministerio Público, a saber:
• Con fecha 5 de octubre de 2001, el representante
del Ministerio Público contestó la vista conferida y
relató que -según su criterio- debían ser investigados los
hechos que (resumidamente) se enuncian a
continuación: 1) armado e incorporación de prueba en
legajos y su ocultamiento a las partes; 2) video de
Telleldín y pago de la recompensa; 3) desaparición de
los casetes; 4) omisión del análisis de agendas de
Alberto Kanore Edul y de los hermanos Carlos y
Eduardo Telleldín; 5) omisión por parte de la S.I.D.E. de
informar al Dr. Galeano sobre la totalidad de la
documentación secuestrada en el Hotel de Las
Américas; 6) intervención de teléfonos sin orden; 7)
destrucción de los videos; 8) ocultamiento por parte de
la Secretaría de Inteligencia de Estado de la
investigación llevada a cabo por el titular del Juzgado
Nacional en lo Criminal y Correccional Federal de
Lomas de Zamora, Dr. Santa Marina, al entonces Juez
Galeano; 9) tratamiento de testigos: mediante la
utilización de los videos o por medio de promesas o
presiones directas se negociaron declaraciones de
testigos e imputados y se asentaron constancias falsas;
10) valoración parcial de la prueba (fs 1.213/5).
• Con fecha 17 de abril del año 2002, el
representante del Ministerio Público -Dr. Carlos Miguel
Cearras- amplió el requerimiento de instrucción en
orden a los posibles delitos de acción pública que
podrían desprenderse del contenido del video en el cual
se registró la entrevista mantenida el 10 de abril de 1996
por Juan José Galeano y Carlos Alberto Telleldín y la
destrucción de evidencias efectuadas por el P.O.C. (fojas
2.241/2.243).
• El 9 de febrero de 2004 el Dr. Cearras amplió el
requerimiento de instrucción en orden a investigar las
circunstancias del trámite formalizado en el legajo n°
308 caratulado “Relativo a información proporcionada
por el Dr. Rogelio Cichowolsky” en donde se llevó a
cabo una investigación sobre la base de datos aportados
por el entonces detenido Bautista Huici durante una
serie de entrevistas mantenidas con la Dra. Marta
Nercellas y el Dr. Roberto Zaindemberg -abogada y
vicepresidente de la parte querellante A.M.I.A.,
respectivamente-, las que por orden del Dr. Galeano
fueron registradas en casetes de audio y video (fs.
6.513).
• Con fecha 18 de diciembre del año 2003 el
Fiscal, Dr. Pablo G. Recchini, con relación a la c.n°
17.957/03, formuló requerimiento de instrucción contra
Juan José Galeano por amenazas coactivas a Telleldín
para que declare en la causa A.M.I.A. en contra los
policías bonaerenses. Asimismo, se remitió al dictamen
de fojas 1.213/1.215 (fojas 7.543/4).
• El Dr. Gerardo Di Masi -con relación a la causa
nro.15.984/04- formuló requerimiento de instrucción, a
fojas 9.403/9.429, por los siguientes hechos: 1) falsedad
ideológica del acta labrada con motivo de la declaración
indagatoria prestada el 5 de julio de 1996 por Carlos
Alberto Telleldín; 2) destrucción de videocintas en las
que se registraron declaraciones y entrevistas llevadas a
cabo durante la instrucción; 3) privación ilegal de la
libertad y torturas que habría sufrido César Antonio
Fernández; 4) lo actuado en el legajo n° 148 caratulado
“Ofrecimientos para obtener información” y la
intervención del Comisario Inspector Luis Ernesto
Vicat y del Oficial Inspector Aldo Andrés Spicacci
Citarella; 5) denuncia durante el debate oral y público
de Gisela Jaquelina Araya y Alexandra Gabriela de
Leone; 6) denuncia durante el debate oral y público de
Jorge Horacio Rago; 7) circunstancias que precedieron
la declaración testimonial prestada por Gustavo Alberto
Semorile ante el juzgado instructor; 8) comparecencias
ante el Juzgado nº 9 del fuero de Sandra Karina
Cardenal y Carlos Álvarez Matus; 9) comparecencias
ante el juzgado instructor de Walter Alejandro Castro,
Manuel Enrique García, Argentino Gabriel Lasala,
Marcelo Darío Casas, Eduardo Diego Toledo y José
Aurelio Ferrari; 10) falsedad ideológica de los informes
actuariales obrantes a fojas 8.206 y 8.619, del
expediente del que se extrajo testimonios; 11)
circunstancias que rodearon las intervenciones
telefónicas dispuestas a fojas 866 y 871, solicitadas por
la Secretaría de Inteligencia de Estado a fojas 865 y 870,
respectivamente, del expediente del que se extrajo
testimonios y 12) diligencias llevadas a cabo por el
Comisario General Antonio Armando Calabró, el Oficial
Principal Jorge Sebastián Menno y el Comisario José
Jofré.
• El Dr. Carlos Miguel Cearras, amplió el
requerimiento de instrucción, con fecha 15 de mayo del
corriente año, por la noticia dada por el Fiscal General
Alberto Nisman -titular de la Unidad Fiscal de
Investigaciones causa A.M.I.A.-, con motivo de la
posible pérdida de las grabaciones magnetofónicas de
las escuchas de las comunicaciones mantenidas a través
del abonado telefónico 449-4706 durante el año 1994,
perteneciente a Alberto Jacinto Kanoore Edul, como así
también de las correspondientes transcripciones, ya que
en el expediente existen constancias de que dichos
elementos fueron reservados (fojas 9.517/9.518).
II.e) Llamados a indagatorias por parte del Dr.Bonadío.