Apuntes de Sucesiones

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Sucesión testada o sucesión testamentaria.

(librito)

Concepto. Sucesión testada o testamentaria es la transmisión que el causante hace de sus bienes
derechos y obligaciones transmisibles a la persona o personas que designa en su testamento para
que le sucedan después de su muerte.

La testamentifacción es la acción de testar, es decir, el acto por el cual una persona otorga su
testamento. Desde los romanos, la testamentifacción ha sido consagrada por el derecho objetivo
como un derecho subjetivo porque en este segundo sentido, testamentifacción es la facultad que
tiene una persona de disponer de sus bienes por testamento. Como se ve, esta facultad no es sino
una consecuencia del derecho de propiedad, ya que este comprende la facultad de disponer de los
bienes, sea por acto entre vivos o por causa de muerte.

La libertad de testar. La facultad de testar o testamentifacción activa, debe ser absolutamente


libre o debe ser restringida? Las opiniones aquí se dividen en favor de uno de estos sistemas:

a) El de la libertad absoluta de testar, en que el causante sin limitaciones de ninguna especie,


puede disponer de sus bienes en la forma que estime conveniente, y
b) El sistema de la libertad restringida o de los herederos forzoso, en que el testador debe
respetar los derechos de determinados asignatarios, llamados legitimarios, a una porción
de la herencia, pudiendo disponer libremente del resto.

En doctrina se discute cuál de los dos sistemas es mejor, se dice que es preferible el de la libertad
absoluta de testar, porque el sistema de los herederos forzosos tiene el inconveniente de que los
hijos con la seguridad de que tarde o temprano van a heredar a sus padres, pueden perder todo
incentivo de trabajar para formarse su propio patrimonio, mientras que bajo la libertad absoluta
de testar como esos hijos no tienen la absoluta seguridad de heredar se esforzaran por formase
por si solos una sólida posición.

Sin embargo, se puede contra argumentar que el sistema de la libertad absoluta de testar es
igualmente peligroso, por ser causante, en muchos casos, puede ser un hombre desapegado de su
familia y falto de cariño por ella, y llegar a prescindir en su testamento de sus hijos, dejando sus
bienes a persona extrañas, no obstante, que sus parientes cercanos sean personas meritorias y
dignas de ayuda.

Restricción a la libre testamentifacción. En algunos países, como Inglaterra, existe la libertad


absoluta de testar, pero la totalidad de las legislaciones se inclina en favor del sistema contrario,
estableciendo restricciones más o menos graves a la facultad de testar.

En nuestro código no existe, la libertad absoluta de testar pues el causante debe respetar las
asignaciones forzosas que establecen la ley, pero estas restricciones son mínimas en comparación
con las impuestas por las legislaciones de otros estados. Dice el artículo 979: La testamentifacción
es libre. No hay más asignaciones forzosas que los alimentos debidos por ley a ciertas personas y
la porción conyugal, de manera que, si el testador se desentiende de esas asignaciones, los
beneficiarios de ellas tienen acción para pedir la reforma del testamento a fin de que se les
satisfaga como veremos más adelante al hablar designaciones forzosas.
El testamento. Concepto.; El testamento es un acto más o menos solemne en que una persona
dispone del todo o de una parte de sus bienes, para que tenga pleno efecto después de sus días,
conservando la facultad de revocar las disposiciones contenidas en el mientras viva. (Artículo º
980)

Características del testamento. Del análisis de esta definición resulta que el testamento tiene los
caracteres siguientes:

1. Es un acto jurídico unilateral, porque es una declaración de voluntad, hecha con intención
de producir efectos jurídicos; y unilateral porque para nacer a la vida jurídica solo requiere
la voluntad del testador.
2. Es un acto más o menos solemne. Todo testamento debe cumplir ciertas formalidades;
pero en alguno de ellos (los llamados solemnes) esas formalidades son más estrictas que
en los otros (los llamados menos solemnes o privilegiados), en atención a las
circunstancias especiales en que en estos últimos se otorgan.
3. Es un acto personalísimo. La definición transcrita dice que el testamento es un acto en que
una persona dispone, y el articulo 984 agrega: de una sola persona. Esta es una
peculiaridad del testamento pues en los demás actos unilaterales pueden intervenir dos o
más personas.
De este carácter del testamento se derivan dos consecuencias jurídicas de interés:
a) Es nulo el testamento otorgado por dos o más personas, ya sea en beneficio reciproco
de los otorgantes, o de una tercera persona (artículo 984);
b) La facultad de testar es indelegable (artículo 985).
En la vida jurídica todos los actos pueden realizarse por medio de representantes,
pero en el testamento, dado el carácter de personalísimo, por excepción, no tiene
cabida la representación.

4. Tiene por objeto fundamental, pero no único, disponer de los bienes.


Dados los términos de la definición de testamento, pareciera que esta tiene por objeto
único la disposición de los bienes del causante, de manera que un acto en que una
persona no dispone de sus bienes no será testamento; pero en realidad no es así, pues un
testamento puede otorgarse con otros objetos, como el reconocimiento de un hijo
natural, nombramiento de guardador de los hijos, partidor, etc., aunque no se disponga ni
de todos ni de parte de sus bienes.
5. Produce sus plenos efectos después de la muerte del causante.
Dice la definición: para que tenga pleno efecto después de sus días, lo cual es lógico,
porque el testamento da origen a la sucesión por causa de muerte, modo de adquirir el
dominio que se basa precisamente en el fallecimiento del causante; pero por excepción,
puede causar algunos efectos en la vida del causante: por ejemplo, el reconocimiento de
un hijo natural, que se hace en el testamento ; en las donaciones revocables y legados,
cuando las cosas donadas o legadas son entregadas en vida del causante a los donatarios o
legatarios, estos adquieren sobre ellos el derecho de usufructo.|(Artículos 1122 y 1123).

Artículo º 1122; Por la donación revocable, seguida de la tradición de las cosas donadas,
adquiere el donatario los derechos y contrae las obligaciones de usufructuario. Sin
embargo, no estará sujeto a rendir la caución de conservación y restitución a que son
obligados los usufructuarios, a no ser su lo exija el donante.

Artículo º 1123; Las donaciones revocables a título singular son legados anticipados, y se
sujetan a las mismas reglas que los legados. Recíprocamente, si el testador da en vida al
legatario el goce de la cosa legada, el legado es una donación revocable. Las donaciones
revocables, inclusos los legados en el caso del párrafo precedente, preferirán a los legados
de que no se ha dado el goce a los legatarios en vida del testador, cuando los bienes que
éste deja a su muerte no alcanzan a cubrirlos todos.

6. Es esencialmente revocable.
Esta es otra característica del testamento; que puede el testador revocarlo en cualquier
momento. Pero debe advertirse que, por excepción, tratándose del reconocimiento de un
hijo natural, aunque se revoque, el hijo se tendrá siempre por reconocido. Así lo dice
expresamente el (Articulo 327).

Artículo 327; Si el reconocimiento de los hijos naturales se hace por escritura pública o se
declara en sentencia ejecutoria, el interesado ocurrirá con el atestado auténtico a hacer la
inscripción en el registro de reconocimientos. Esta inscripción se verificará extractando lo
substancial de los referidos documentos y se pondrá nota de referencia al margen de la
partida de nacimiento. Lo dispuesto en el párrafo anterior se observará también cuando el
reconocimiento se verifique por acto de última voluntad. En este caso, aun cuando el
testamento sea revocado, el depositario del registro no cancelará la inscripción y el hijo se
tendrá siempre por reconocido.
La facultad de revocar el testamento es de orden público. Por eso el artículo 982 dice:

Artículo 982; Todas las disposiciones testamentarias son esencialmente revocables,


aunque el testador exprese en el testamento la determinación de no revocarlas. Las
cláusulas derogatorias de sus disposiciones futuras se tendrán por no escritas, aunque se
confirmen con juramento. Si en un testamento anterior se hubiere ordenado que no valga
su revocación si no se hiciere con ciertas palabras o señales, se mirara esta disposición
como no escrita.

Requisitos del testamento. Capacidad para testar.


Los requisitos para la validez del testamento son de tres clases: requisitos internos,
requisitos externos o solemnidades y los que se refieren a la validez de las disposiciones
testamentarias en sí mismas.
Los requisitos internos son: capacidad del testador y su voluntad exenta de vicios estos
requisitos son iguales en todo testamento, cualquiera que sea su forma. Su
incumplimiento trae consigo, por regla general, la nulidad e ineficacia total del
testamento. Los requisitos externos o solemnidades no constituyen exigencias únicas, sino
que varían conforme a las clases de testamento. Su función es igualmente la nulidad
integral de este.
Los requisitos de las disposiciones testamentarias en sí mismas se diferencias
fundamentalmente de las anteriores en que su infracción solo produce la nulidad de la
respectiva clausula testamentaria, y no afecta las demás disposiciones.

Personas inhábiles para testar.


Por regla general todas las personas son capaces de testar. En el derecho la regla s la
capacidad, y la acepción es la incapacidad. Son inhábiles para testar (artículo 986)
Artículo 986; No son hábiles para testar: 1.- El impúber. 2.- El que se hallare bajo
interdicción por causa de demencia. 3.- El que actualmente no estuviere en su sano juicio
por ebriedad u otra causa. 4.- Todo el que de palabra o por escrito no pudiere expresar su
voluntad claramente. Las personas no comprendidas en esta enumeración son hábiles
para testar.

1. El impúber es absolutamente incapaz para todo acto jurídico.


2. El que… se hallare en interdicción por causa de demencia. Esto no quiere decir que el
demente no interdicto sea capaz de testar, pues está incluido en el numero siguiente. La
diferencia entre ambos consiste en que si el demente está en interdicción no será
necesario probar la demencia para anular el testamento. Mientras que, si el demente no
está bajo interdicción, los que impugnen el testamento invocando esta causal deben
probarla.
3. El que actualmente no estuviere en su sano juicio por ebriedad u otras causas. La
expresión “actualmente” indica que la falta de juicio debe ser referida al momento en que
se otorgue el testamento. Por eso dispone la ley que en los testamentos se expresé la
circunstancia de hallarse el testador en su entero juicio; pero la consignación de esta
circunstancia en el testamento no obsta para que pueda probarse por otros medios
(dictámenes de peritos, presunciones) que el testador no estaba en su sano juicio. Las
otras causas por la que el testador no puede testar en su sano juicio son la demencia, el
hipnotismo, la influencia de alcaloides, etc.
4. Todo el que de palabra o por escrito no pudiere expresar su voluntad claramente. En
esta causal quedan comprendidos todos los que por enfermedad o accidente se
encuentren en ese estado; asimismo, los sordomudos que no puedan darse a entender
por escrito. Estos son, además, absolutamente incapaces para todo acto jurídico. Pero los
sordomudos que sepan leer y escribir pueden otorgar testamento cerrado, y los sordos no
mudos pueden otorgar testamento abierto, aunque sean analfabetos.

Estas cuatro causas de incapacidad para testar son taxativas, de manera que todos los que no
estén comprendidos en ellas son capaces para testar.

La capacidad debe existir al momento de otorgar el testamento. De esta circunstancia se


derivan las siguientes consecuencias: el testamento otorgado durante la existencia de
cualquiera de las causas de inhabilidad mencionadas es nulo, aunque posteriormente deje de
existir la causa; y por el contario, el testamento valido no deja de serlo por el hecho de
sobrevenir alguna de estas causas de inhabilidad (articulo 987)
LA VOLUNTAD EXENTA DE VICIOS. El segundo de los requisitos internos para la validez del
testamento es que la voluntad del testador sea expresada libremente, exenta de todo vicio. Esos
vicios pueden ser: el error, la fuerza, la intimidación y el dolo.

Del error se hablará más adelante, pues concierne a las asignaciones testamentarias en particular
y no al testamento en general.

Respecto a la fuerza, como el legislador no la define, hay que entender que ha querido referirse a
la violencia y a la intimidación de que habla el Articulo 1558 respecto al consentimiento en los
contratos, disposición que es aplicable también a los testamentos, cuando este se ha obtenido
empleando en el testador una fuerza irresistible. Por ejemplo, cuando una persona más fuerte que
él, contra su voluntad le ha llevado el puño para que firme el testamento. Aunque hablando en
propiedad aquí no habría una voluntad viciada, sino que no habría ninguna voluntad de parte del
testador; pero para el legislador hay una voluntad viciada en el testador.

Habría intimidación cuando se inspire al testador un temor racional y fundado de sufrir un mal
inminente y grave en su persona o bienes, o en la persona o bienes de su conyugue.
Descendientes o ascendientes (artículo 1558). De manera que para que la intimidación vicie la
voluntad del testador debe reunir los siguientes requisitos:

1) Que el temor que se inspire sea racional o fundado;


2) Que el mal con que se amenace sea inminente y grave;
3) Que ese mal sea injusto, es decir, ilícito y
4) Que la intimidación sea determinante en la manifestación de la voluntad. Para calificar si
hay o no intimidación debe atenderse a la edad, sexo y a la condición de la persona. Es
indiferente que la intimidación sea hecha por el beneficiario del testamento o por otra
persona cualquiera. (Artículo 1559).

En cuanto al dolo, como el legislador tampoco ha dicho nada en especial respecto al


testamento, debe aplicarse aquí la misma definición que da el artículo 1560, por la razón
arriba expresada. De modo que habrá dolo cuando con palabras o maquinaciones insidiosas
de parte cualquier persona es inducido el testador a otorgar el testamento o hacerse una
disposición que, sin ellas no hubiera hecho.

Si los vicios mencionados afectan solo a determinadas disposiciones testamentarias serán


nulas únicamente estas; pero si ataca la celebración del acto testamentario entero, es nulo
todo el testamento. (artículo 988)

CLASIFICACIÓN DE LOS TESTAMENTOS. Atendiendo a sus solemnidades los testamentos se


clasifican en solemnes y menos solemnes o privilegiados. Testamento solemne es aquel en
que se han observado todas las solemnidades que la ley ordinariamente requiere, y puede ser
abierto o cerrado. Testamento menos solemne o privilegiado es aquel en que no se han
observado algunas de estas solemnidades. por consideración a circunstancias particulares,
determinadas por la ley. Son testamentos privilegiado: el otorgado sin asistencia de notario, el
testamento militar y el testamento marítimo.

Los Testamentos Solemnes.


A) Testamento solemne otorgado en Honduras

REQUISITOS COMUNES A TODO TESTAMENTO SOLEMNE. Todo testamento solemne,


cualquiera que sea su forma, debe cumplir dos formalidades generales:

a) Debe ser escrito (artículo 990)


b) Debe otorgarse ante testigo. El número de testigos varia: tres en el testamento abierto y
cinco en el testamento cerrado.

Habilidad de los testigos. Los testigos de un testamento solemne deben reunir ciertos
requisitos. En primer lugar, deben ser hábiles para ser testigos. Las causas de inhabilidad de
los testigos, para su estudio la podemos clasificar en cinco grupos (artículo 991)

a) Inhabilidad de orden físico:


1. Los menores de 18 años;
2. Los ciegos;
3. Los sordos
4. Los mudos.

b) Inhabilidad de orden intelectual


1. Los que se hallen en interdicción civil por causa de demencia
2. Los que actualmente se hallaren privados de la razón;
3. Los que no entiendan el idioma del testado, excepto en el testamento cerrado.
c) Inhabilidades de orden moral
1. Los condenados por crimen o simple delito, mientras no hubiesen cumplido sus
condenas.
2. Los de conducta notoriamente viciada, como ebrios habituales, tahúres, alcahuete,
etc.
3. Los que no tengan oficio, profesión o medios conocidos de subsistencia;
4. Los deudores fraudulentos, es decir, los declarados en quiebra fraudulenta.

d) Inhabilidad de orden práctico. Los extranjeros no domiciliados en Honduras.

e) Inhabilidades por parcialidad o tener interés en el testamento.


1. Los escribientes de Juez o Notario que autorice el testamento
2. Los ascendientes, descendientes y parientes colaterales dentro del tercer grado de
consanguinidad y segundo de afinidad del otorgante o del funcionario que autoriza el
testamento;
3. El conyugue del testador;
4. Los sirvientes domésticos del testador, de su conyugue, del funcionario que autorice el
testamento, de los parientes de este, de los parientes del testador y de los parientes de las
personas a quienes resulte provecho directo del testamento, siempre que todos estos
parientes estén dentro de los grados ya mencionados;
5. Los que tengan con otro testigo del testamento los grados de parentesco citados o sean
sus sirvientes domésticos.
6. El sacerdote que haya sido confesor habitual del testador o lo haya confesado en su última
enfermedad.
7. Los herederos o legatarios, y en general todos aquellos a quienes resulte provecho directo
del testamento.

Habilidad putativa de un testigo. La ley tolera la habilidad de uno de los testigos del
testamento, es decir, que si en alguno de los testigos, pero solo en uno, concurre alguna de las
anteriores causas de inhabilidad, no por eso se anula el testamento, siempre que ocurran las
circunstancias siguientes:

1. Que la causa de inhabilidad no se manifieste en el aspecto o comportamiento del testigo;


2. Que sea una causa que se ignore generalmente en el lugar del otorgamiento del
testamento; y
3. Que la creencia general en la habilidad del testigo se funde con hechos positivos y
públicos.

Artículo 992; Si alguna de las causas de inhabilidad expresadas en el artículo precedente,


no se manifestare en el aspecto o confortación de un testigo, y se ignorare generalmente
en el lugar donde el testamento se otorga, fundándose la opinión contraria en hechos
positivos y públicos, no se invalidará el testamento por la inhabilidad real del testigo. Pero
la habilidad putativa no podrá servir sino a uno solo de los testigos.

Otros requisitos de los testigos:

1. Respecto al domicilio, dos por lo menos deben estar domiciliados en el lugar del
otorgamiento del testamento; y
2. Uno por lo menos saber leer y escribir, si concurren tres testigos, y dos por menos si
concurren cinco testigos.

LIBERTAD DE FORMAS DE TESTAR. El testador puede elegir la forma de testamento que prefiera,
con las siguientes excepciones

1. El ciego y el analfabeto solo pueden otorgar testamento abierto (artículo 998 y 1002)
2. El que no puede entender o ser entendido de viva voz, solo puede otorgar testamento
cerrado.

EL TESTAMENTO ABIERTO. Concepto. testamento abierto, público o nuncupativo es el acto por el


cual una persona hace saber sus disposiciones al Notario y tres testigos idóneos que vean y
entienda al testador (artículos 993 y 994 p. 1). Los jueces de Letras y de Paz, como Notarios por
ministerios de ley, pueden también autorizar testamentos en el municipio donde ejerzan su
jurisdicción, siempre que no haya en esos lugares Notario hábil residente o domiciliado.

SOLEMNIDADES DEL TESTAMENTO:

a) Debe otorgarse en el protocolo del notario sujetándose a las formas establecidas por la
ley del Notario, sin perjuicio de las especialidades señaladas por el código civil.
b) En el testamento deben expresarse las siguientes designaciones:
1) Nombre y apellido, edad, profesión u oficio y nacionalidad del testador;
2) Lugar de su nacimiento;
3) Si está o no avecindado en Honduras, y si lo está, el lugar de su domicilio;
4) La circunstancia de hallarse en su entero juicio
5) Los nombres de las personas con quienes hubiere contraído matrimonio, de los hijos
habidos o legitimados en cada matrimonio, de los hijos habidos fuera del matrimonio,
con distinción de vivos y muertos;
6) Nombre y apellido, estado civil, profesión u oficio y domicilio de cada testigo,
indicando si son mayores de edad;
7) Lugar, día, mes y año del otorgamiento. El lugar se refiere a la ciudad, pueblo, o aldea
en que se otorgue el testamento; y
8) El nombre, apellido y domicilio del notario autorizante
(artículo 995)
c) Escrituración, lectura y firma del testamento. El testamento abierto podrá haberse
escrito previamente. Pero sea que se halla escrito o que se escriba en el acto, será todo el
leído en alta voz por el notario; y mientras el testamento se lee estará el testador a la
vista, y las personas cuya presencia es necesaria (testigos, interpretes), oirán todo el tenor
de sus disposiciones (artículo 996). A continuación de la lectura y aprobación del
testamento, y sin que medie ningún intervalo de importancia termina el acto con la firma
del testador, de los testigos y la firma y sello del notario.

Si el testador no sabe o no puede firmar, se mencionará esta circunstancia en la escritura,


expresando la causa. Basta que se exprese la causa genérica (por enfermedad, por
ejemplo), sin que sea necesario consignar una causa especifica. Si se hallare alguno de los
testigos en el mismo caso, otro de los testigos firmara por él y a ruego suyo, expresándose
así. (artículo 997). Esta es una diferencia entre el testamento y demás escrituras: en estas,
si el otorgante no puede o no sabe firmar lo hace a ruego uno de los testigos; en el
testamento, en cambio uno de los testigos solo firma a ruego cuando uno o dos testigos
no saben o no pueden hacerlo.

De manera que bien puede ocurrir, que en el testamento solo aparezcan dos firmas: la del
único testigo que sabe firmar y firma por sí y a ruego de los otros, y la del notario
autorizante.

d) Unidad del acto. El testamento debe ser otorgado en su solo acto, sin que sea licita
ninguna interrupción, salvo la que pueda ser motivada por un incidente pasajero, y será
presenciado en todas sus partes por el testador, por un mismo notario y por unos mismos
testigos. (artículo 994 p. 2). es decir que tanto la lectura, como la aprobación y la firma del
testamento, deben hacerse la una a continuación de la otra, pues eso es lo que constituye
la esencia del testamento abierto y debe hacerse sin ninguna interrupción de importancia,
para que los oyentes puedan apreciar todo el contexto del testamento, y cumplir así con el
requisito de la unidad del acto.
TESTAMENTO DEL CIEGO. La particularidad de este testamento consiste en que debe leerse
dos veces: la primera por el Notario y la segunda por uno de los testigos elegido por el
testador. Esta solemnidad debe mencionarse en el testamento (artículo 998).

TESTAMENTO DEL SORDO. En este caso, se entiende por sordo aquel que está completamente
privado de la función auditiva, no el que se hace oír levantando la voz más alto que del
ordinario. La peculiaridad de su testamento consiste en que debe leerlo por si, y si no sabe o
no puede, designa dos personas para que lo hagan sucesivamente, en su nombre.

Estas personas pueden ser dos de los testigos u otras distintas; pero deben hacerlo siempre en
presencia de los testigos y del Notario. (artículo 999). Es obvio que etas dos personas
designadas por el testador deben de estar de antemano enteradas de las disposiciones de
este, pues de otra manera no sabrían si las contenidas en el testamento son la expresión de la
voluntad de él. Aunque la ley no lo dice, debemos entender que esas dos personas, aunque no
sean de los testigos, han de firmar también y que de la doble lectura debe dejarse constancia
en el testamento, así como se hace con el testamento del ciego, pues donde hay igualdad de
razón debe haber igualdad de disposición.

Aunque la ley no ha previsto el caso de que el testador sea a la vez sordo y ciego es lógico que
en tal eventualidad deben observarse tantos las reglas relativas del testamento del ciego como
las del testamento del sordo.

TESTAMENTO EN LENGUA EXTRANGERA. Para testar en lengua extranjera se requiere la


presencia de dos intérpretes elegidos por el testador que traduzcan su disposición al
castellano, el testamento se deberá escribir en las dos lenguas. (artículo 1000). Varias son las
cuestiones que pueden plantearse en torno a este testamento:

1. ¿Deberán reunir los interpretes las mismas condiciones que los testigos? Aunque su
función es tan importante como la de estos, la ley no exige que tengan la misma habilidad.
Bastaría que entendieran y supieran escribir el idioma del testador, pues quien, si no ellos
serían los llamados a escribir y leer el testamento en lengua extranjera, en el caso de que
el notario no hablara ese idioma. Mal podría el Notario escribirlo y leerlo en un idioma que
no entienda, por lo cual se limitaría a escribir y leer la traducción al castellano que le
dicten los intérpretes. Obsérvese que esa lengua puede ser de las que se describen con un
alfabeto distinto del latino (el árabe, por ejemplo).

2. ¿Pueden ser interprete los mismos testigos? Pueden, puesto que la ley no lo prohíbe.
Aunque las funciones de unos y de otros son distintas, nos son incompatibles la de los
testigos es atestiguar que las disposiciones contenidas en el testamento son la expresión
de la voluntad del testador. La de los interpretes es garantizar que la traducción al
castellano es fiel, y el Notario toma conocimiento de tales disposiciones a través de los
intérpretes. Conforme al artículo 36 p. 3 de la Ley del Notariado, estos deben protestar
ante el notario y cumplir fielmente su cometido, firmarán el testamento, y estas
circunstancias se harán constar en la escritura so pena de nulidad.

Si la Ley, además de exigir que los testigos entiendan el idioma del testador (artículo 991
No. 13), requiere la presencia de dos intérpretes, es porque bien podría acontecer que los
testigos aun hablando el idioma del testador, no supieran escribir (dos de ellos),
circunstancia que los inhabilitaría para su traducción, lo cual constituye precisamente la
función de los intérpretes.

EL TESTAMENTO CERRADO. Concepto. El testamento cerrado o secreto se caracteriza en que no


es necesario que el notario y los testigos conozcan las disposiciones del testador. Puede este, si lo
desea, dar a conocer sus disposiciones, pero no es necesario que lo haga, como en el testamento
abierto.

Dice el artículo 1003: lo que constituye esencialmente el testamento cerrado es el acto en que el
testador presenta al Notario y testigos una escritura cerrada, declarando de viva voz y de manera
que el Notario y Testigos lo vean, oigan y entiendan que en aquella escritura se contiene su
testamento. Los mudos podrán hacer esta declaración, escribiéndola ellos mismos a presencia de
notario y testigos (párrafo 1)

Personas ante quienes se otorga. El testamento cerrado se otorga ante un Notario y 5 testigos
hábiles. (artículo 1001). Lo mismo que en el testamento abierto, en los municipios en donde no
haya Notario hábil pueden los Jueces de Letras y de Paz autorizar un testamento cerrado, como
notarios por ministerio de Ley.

Otorgamiento del testamento cerrado: sus etapas. El otorgamiento del testamento cerrado se
descompone en cuatro etapas:

a) Escritura y firma del testamento;


b) Cierre y sellamiento de la caratula;
c) Presentación del testamento; y
d) Redacción y firma de la caratula (artículo 1003)
a) Escritura y firma del testamento. El testamento debe estar firmado por el testador y debe
ser escrito en papel sellado de primera clase. La ley no exige más solemnidades. Sino está
firmado por el testador, aunque firme otro a su ruego el testamento es nulo, pero si se
escribe en otra clase de papel no es nulo por esa causa, son que solo da lugar a una multa
equivalente a 10 veces el valor del papel que dejo de emplearse.
b) Cierre y sellamiento de la caratula. Esta caratula o cubierta debe ser también de papel
sellado de primera clase y estará cerrada, o se cerrará exteriormente, de manera que no
pueda extraerse el testamento sin romper el testamento, queda al arbitrio del testador
estampar un sello o marca o emplear cualquier otro medio para seguridad de la cubierta.
El medio correctamente es lacrar el cierre de la cubierta. Eta exigencia se justifica
ampliamente porque lo que caracteriza al testamento cerrado es, como su nombre lo
indica, ser secreto. Por ello la jurisprudencia a determinado que si se presenta un
testamento con la cubierta cerrada es nulo.
c) Presentación del testamento. Cerrada la cubierta como queda dicho el testador lo
presentara al Notario y los cinco testigos, declarando de viva voz y de manera que estos lo
vean, oigan y entiendan, que en esa cubierta se contiene su testamento. Los mudos
pueden hacer esta declaración escribiéndola ellos mismos a presencia del notario y
testigo.
d) Redacción y firma de la cubierta. Una vez efectuadas las operaciones anteriores, el
Notario redacta sobre la cubierta y bajo el epígrafe en negrita Testamento, un acta en que
se consignen las designaciones siguientes:
1. Lugar, día, mes y año del otorgamiento;
2. Nombre, apellido y domicilio del Notario, del testador y de cada uno de los testigos;
3. Circunstancia de hallarse el testador en su sano juicio y de haber presentado esa
cubierta al Notario y los testigos, declarando de viva voz (o por escrito si es mudo) que
en ella se contiene su testamento. A continuación, firmaran el acta del testador los
testigos y el notario, si el testador no pudiere firmar el tiempo del otorgamiento, es
decir, al tiempo de redactarse esa acta, firmara por él, otra persona distinta de los
testigos, y si alguno o algunos de estos no supieren firmar, lo harán otros por los que
no supieren o no pudieren hacerlo, de manera que en la cubierta aparezcan siempre
siete firmas: la del Notario, la del testador y la de los cinco testigos.

Unida del Acto. Durante el otorgamiento estarán presentes, además del testador, un mismo
notario y unos mismos testigos, y no habrá interrupción alguna, salvo algunos breves intervalos en
que algún accidente lo exigiere.

TESTAMENTO DE LOS QUE NO PUEDEN SER ENTENDIDOS DE VIVA VOZ. En este caso están
comprendidos:

1. El mudo que pueda darse a entender por escrito; y


2. El que no entienda el idioma del notario y los testigos. Los testadores que se encuentren
en este caso escribirán de su letra sobre la cubierta la palabra en negrita Testamento, o la
equivalente en el idioma que prefieran, y hará del mismo modo la designación de su
persona expresando, a lo menos, su nombre, apellido y domicilio y la nación a que
pertenece y en lo demás se observara lo expresado en los párrafos anteriores. (artículo
1004).

Deposito del testamento cerrado. Autorizado el testamento cerrado, el notario lo entregara al


testador, después de poner en el protocolo reservado, copia autorizada del acta de otorgamiento.
El testador podrá conservar en su poder el testamento cerrado, o encomendar su guarda a
persona de su confianza o depositarlo en poder del notario autorizante, para que lo guarde en su
archivo. En este último caso, el notario dará recibido al testador y hará constar en su protocolo
reservado al margen o a continuación de la copia del acta de otorgamiento, que queda el
testamento en su poder. Si lo retirare después el testador, firmara un recibo a continuación de
dicha nota. Artículos 1005 y 1006.

Obligación del depositario del testamento: su sanción. El notario o la persona que tenga en su
poder un testamento cerrado, deberá presentarlo al juez competente luego que se sepa el
fallecimiento del testador. Sino lo verifica dentro de diez días, será responsable de los daños y
perjuicios que ocasione su negligencia. El que con dolo deje de presentar el testamento cerrado
que obra en su poder dentro del plazo mencionado, además de la responsabilidad en que incurra
por daños y perjuicios perderá todo derecho a la herencia, si lo tuviera como heredero ab-
intestato como heredero o legatario por testamento. En esa misma pena incurrirán el que
sustrajere dolosamente el testamento cerrado del domicilio del testador o de la persona que lo
tenga en guarda o deposito, y el que lo oculte, rompa o inutilice de otro modo, sin perjuicio de la
responsabilidad criminal que proceda. Artículos 1007 y 1008

Apertura y protocolización del testamento cerrado. Para la apertura y protocolización del


testamento cerrado debe observarse el procedimiento señalado en los artículos 1024 y siguientes
del código de procedimiento civil.

Nulidad del testamento solemne. Conforme al artículo 1010 en relación con el 1586 Numeral 2, es
nulo el testamento abierto o cerrado en que se omitiere cualquiera de las formalidades a que
deben respectivamente sujetarse, según las disposiciones legales, citados en este capítulo. Así, por
ejemplo, será nulo el testamento:

1. Si no se otorga ante el número de testigos hábiles, exigidos por la ley, pero según la
jurisprudencia, es válido, aunque el número de testigos sea mayor al requerido por la ley;
2. Si falta la firma del testador en el testamento abierto y no se ha expresado la causa por la
cual no ha firmado, lo mismo que si falta la firma de un testigo y no ha firmado otro de los
testigos a su ruego; y en el testamento cerrado, si falta la firma del testador en el
testamento o si faltando en la cubierta, no ha firmado a su ruego otra persona distinta de
los testigos, lo mismo que si falta la firma de un testigo y no se ha suplido por la de otro en
saco de que no sepa o no pueda firmar.
3. Si falta la firma del Notario autorizante o si este estaba suspendido en el ejercicio de sus
funciones al tempo del otorgamiento o si es autorizado por un juez en un lugar donde hay
notario hábil residente o domiciliado.
4. Si se ha omitido el lugar o la fecha del otorgamiento.
5. S el notario no consigno la circunstancia de encontrase el testador en su sano juicio.
6. Si el testamento abierto no fue leído por el notario en alta voz estando a la vista el
testador y en presencia de los mismos testigos y sin interrupción desde el principio hasta
el fin de la lectura y firma de la cubierta del testamento cerrado.
7. Si aparece violada la cubierta del testamento cerrado.

Hay además otras causas de nulidad contenidas en la ley del notariado, por ejemplo, la de no
haber dado él, fe el notario de conocer al testador o no haber suplido este conocimiento por el
de otras personas llamadas testigos de conocimiento.

Por excepción es válido el testamento, aunque se halla omitido en él una o más de las
designaciones que la ley exige para la identificación del testador, los testigos o el notario; por
ejemplo, si no se ha expresado la edad, la profesión u oficio o domicilio del testador o de los
testigos, siempre que haya duda sobre la identidad de ellos. Artículo 1010 p. 1.

B) Testamento Solemne otorgado en país extranjero:

Artículo º 1011; Valdrá en Honduras el testamento otorgado en país extranjero por un hondureño
o por cualquier otra persona, si por lo tocante a las solemnidades se hiciere constar su
conformidad a las leyes del país en que se otorgó, y si además se probare la autenticidad del
instrumento respectivo en la forma ordinaria.

Formas de otorgarlo
Es válido en Honduras el testamento solemne otorgado en país extranjero y puede serlo de dos
formas:

1. Otorgado conforme a la Ley extranjera (mexicana); y


2. Otorgado conforme a la Ley Hondureña.

Testamento otorgado conforme a la Ley extranjera

El artículo 1011 dispone que “valdrá en Honduras el testamento otorgado en país extranjero por
un hondureño o por cualquier otra persona, si por lo tocante a las solemnidades se hiciere constar
su conformidad a la Leyes del país en que se otorgó, y si además se probare la autenticidad del
instrumento respectivo en la forma ordinaria.

De esta disposición se derivan las siguientes condiciones necesarias para la validez del testamento.

a) Debe ser un testamento solemne. Esta conclusión se infiere del nombre del capitulo III:
“Del testamento solemne otorgado en país extranjero”, en donde se encuentra dicha
disposición. En caso de que la ley de ese país extranjero no se haga la clasificación de los
testamentos en solemnes y menos solemnes o no solemnes, creemos que debe tenerse
por solemnes solamente aquellos que son autorizados por Notario o por un ministro de la
fe publica que haga las veces del Notario, es decir, los que hayan sido otorgados en
instrumento público (artículo 16).

b) Debe acreditarse que se han cumplido las solemnidades exigidas por la ley extranjera. En
caso de controversia, corresponderá rendir la prueba a quien pretende que el testamento
reciba cumplimiento en Honduras, esta prueba es indispensable porque la presunción del
conocimiento de la Ley no comprende las disposiciones de una legislación extranjera; es
decir, que se presume conocida la ley hondureña, pero no la extranjera, esta debe
probarse, y para esta prueba son admisibles todos los medios que franquea la ley
especialmente la prueba de peritos. (artículo 237 y 2).

c) Debe acreditarse la autenticidad del testamento. La autenticidad del testamento se


refiere al hecho de haber sido otorgado realmente por la persona y en la forma que en el
se expresa, (artículo 15 p. 2) Esta autenticidad se aprueba por el atestado de los a que se
refiere el artículo 325 del Código de Procedimientos Civiles.

Testamento otorgado conforme a la Ley hondureña

Artículo º 1012; Valdrá, asimismo, en Honduras el testamento otorgado en país extranjero por un
hondureño o un extranjero que tenga domicilio en Honduras, ante un funcionario diplomático o
consular de la República, con tal que concurran los requisitos siguientes: 1.- El testamento será
firmado por el testador y por tres testigos si el testamento fuere abierto, o por siete testigos si el
testamento fuere cerrado; debiendo ser los testigos hondureños o domiciliados en el lugar donde
se otorgue el testamento que llevara el sello de la legación o Consulado. Si el testador no supiere o
no pudiere firmar, firmará por el uno de los testigos. En el mismo instrumento se expresará que
fue leído al testador ante los respectivos testigos. 2.- Se expresarán en el testamento el nombre,
apellido y domicilio del testador y de los testigos, la circunstancia de hallarse aquel en su sano
juicio, y el lugar, día, mes y año del otorgamiento

Sus requisitos:

Según el articulo 1012, para que el testamento otorgado en el extranjero en conformidad a la ley
hondureña tenga eficacia en Honduras se requiere la concurrencia de las siguientes circunstancias:

a) El testador debe ser hondureño o extranjero domiciliado en Honduras.


b) Debe otorgarse ante un funcionario diplomático o Consular de la República y llevara el
sello de la legación o consulado.
c) Debe firmarse por el testador y por tres (3) testigos si el testamento es abierto o por siete
(7) si el testamento es cerrado. Si el testador no supiere o no pudiese firmar, firmara por
él, uno (1) de los testigos.
d) Los testigos deben ser hondureños o domiciliados en el lugar donde se otorgue el
testamento.
e) Se expresará en el testamento el nombre, apellido y domicilio del testador y de los
testigos, la circunstancia de hallarse aquel en su sano juicio, y el lugar, día, mes y año del
otorgamiento; y
f) Asimismo, se expresará en el testamento que fue leído al testador antes los respectivos
testigos.

En todo lo demás, se aplican las reglas señaladas para el testamento solemne otorgado en
Honduras, en lo que no aparezcan modificadas por las especiales sobre el testamento
otorgado en el país extranjero. Las mismas reglas se aplican para la apertura en Honduras del
testamento cerrado otorgado en país extranjero conforme a la ley hondureña.

Tramites posteriores. El Testamento otorgado en el extranjero conforme a la ley hondureña y


que no haya sido ante un jefe delegación, llevara el Visto Bueno de este Jefe, si lo hubiere: al
pie si fuere abierto, y sobre la cubierta si fuere cerrad, el testamento abierto será siempre
rubricado por el mismo jefe al principio y al fin de cada página, el Jefe de la Legación remitirá
en seguida una copia del testamento abierto o de la cubierta del cerrado, al Ministerio de
Relaciones Exteriores de Honduras, el cual a su vez abonando la firma del Jefe de Legación,
remitirá dicha copia al juez de ultimo domicilio del difunto en Honduras, para que lo haga
incorporar en su protocolo o en el de la Notaria que el mismo designe. No conociéndose al
testador ningún domicilio en Honduras, será remitido el testamento por el ministro de
Relaciones Exteriores al Juez de Letras de los Civil de la capital para su protocolización en la
Notaria que designe (artículo 1013).

TESTAMENTOS MENOS SOLEMNES O PRIVILEGIADOS:

Artículo º 1014; Son testamentos menos solemnes o privilegiados:

1.- El otorgado sin asistencia de Notario.


2.- El testamento militar.

3.- El testamento marítimo

Disposiciones comunes para los 3 tipos de testamentos menos solemnes o privilegiados

1. Sobre los testigos: Deben ser personas


Artículo º 1015 En los testamentos privilegiados podrá servir de testigo toda persona de
sano juicio, mayor de diez y ocho años, que vea, oiga y entienda al testador, y que no
tenga la inhabilidad designada en el número 7o. del Artículo 991. Se requerirá, además,
para los testamentos privilegiados escritos, que los testigos sepan leer y escribir.
Bastará la habilidad putativa, con arreglo a lo prevenido en el Artículo 992.

a) Que sean mayores de 18 años


b) Que estén en su sano juicio
c) Que vean, oigan y entiendan al testador
d) Que no estén condenados por crimen o simple delito, o si ya lo fueron, que hayan
cumplido su condena; y
e) Que sepan leer y escribir (solamente para los testamentos escritos). Basta la habilidad
putativa de un testigo. Como en el testamento solemne.

2. Sobre las solemnidades del acto. Requisitos:


Artículo º 1016; En los testamentos privilegiados el testador declarará expresamente que
su intención es testar: las personas cuya presencia es necesaria, serán unas mismas desde
el principio hasta el fin; y el acto será continuo, o sólo interrumpido en los breves
intervalos que algún accidente lo exigiere. No serán necesarias otras solemnidades que
estas y las que en las secciones siguientes se expresan

a) Es testados debe declarar expresamente su necesidad de testar.


b) Las personas cuya presencia sea necesaria serán las mismas desde el principio hasta el fin:
y
c) El acto debe ser continuo. O solo interrumpido en los breves intervalos que algún
accidente lo exigiere. No son necesarias otras solemnidades que estas y las
correspondientes a cada clase de testamento privilegiado.

Carácter común: Todo testamento privilegiado caduca solamente por el transcurso del tiempo.

El Testamento otorgado sin asistencia del notario

Concepto.

Artículo º 1017; Si el testador se hallare en peligro inminente de muerte puede otorgarse el


testamento ante cinco testigos.

Artículo º 1018; En caso de epidemia puede otorgarse el testamento ante tres testigos.
Testamento otorgado sin asistencia de notario, es aquel que otorga una persona que se halla en
peligro inminente de muerte, ante cinco testigos, en caso de epidemia puede otorgarse ante tres
testigos

Formas de otorgarlo:

Artículo º 1019 9; En los casos de los dos artículos anteriores, el testamento se hará verbalmente,
cuando no fuere posible escribirlo; y será válido aunque los testigos no sepan escribir.

Esta clase de testamento puede otorgarse por escrito o verbalmente. La segunda forma solo
puede emplearse cuando no sea posible escribirlo y será válida, aunque los testigos no sepan leer
y escribir.

Requisitos

Para la validez de este testamento se requiere la concurrencia de los siguientes requisitos


especiales

1) Que halla peligro inminente para el testador. De manera que no basta cualquier peligro
para la vida del testador, sino que debe ser inminente, además es necesario que haya sido
posible otorgar testamento solemne. Determinar si existió o no peligro inminente de
muerte es cuestión de hecho que debe apreciarse en cada caso por el Tribunal de
instancia.
2) Que se otorgue ante cinco (5) testigos, solamente en caso de epidemia basta con tres (3);
y
3) Se eleve a escritura publica y se protocolice.

Caducidad del testamento otorgado sin asistencia de notario.

Artículo º 1020; El testamento otorgado con arreglo a las disposiciones de los tres artículos
anteriores quedara ineficaz si pasaren sesenta días desde que el testador haya salido del peligro
de muerte, o cesado la epidemia. Cuando el testador falleciere en dicho plazo, también quedara
ineficaz el testamento si dentro de los noventa días siguientes al fallecimiento no se acude al Juez
competente para que se eleve a escritura pública, ya se haya otorgado por escrito, ya
verbalmente.

Este testamento caduca, es decir, queda sin validez en los siguientes casos

1. Cuando pasan sesenta (60) días desde que el testador salió del peligro de muerte o de
haber cesado la epidemia; y
2. Cuando habiendo fallecido el testador dentro de dicho plazo, no se acude ante el juez
competente dentro de los noventa (90) días siguientes al fallecimiento, para que se eleve
a escritura pública el testamento, ya sea que se haya otorgado por escrito o verbalmente.

Elevación del testamento a escritura pública y su protocolización.

Artículo º 1021; Los testamentos otorgados sin autorización de notario serán ineficaces si no se
elevan a escritura pública y se protocolizan en la forma prevenida en los artículos siguientes.
Como último requisito para la eficacia del testamento otorgado sin asistencia de notario, es
necesaria su elevación a escritura publica y protocolización en una notaría. El procedimiento para
la realización de esta formalidad varía según se trate de un testamento escrito o verbal

a) Cuando el testamento es escrito.


Artículo º 1022; Si el testamento fuere escrito, el Juez competente hará comparecer los
testigos para que reconozcan sus firmas y la del testador. Si uno o más de ellos no
compareciere por ausencia u otro impedimento, bastará que los testigos instrumentales
presentes reconozcan la firma del testador, las suyas propias y la de los testigos ausentes.
En caso necesario, y siempre que el Juez lo estimare conveniente, podrán ser abonadas las
firmas del testador y de los testigos ausentes, por declaraciones juradas de otras personas
fidedignas. En seguida pondrá el Juez su rúbrica al principio y al fin de cada página del
testamento, y lo mandará protocolizar.

El juez competente (del lugar del otorgamiento o domicilio del testador conforme al
artículo 158, regla 15 de la L.O.A.T), a petición de cualquier persona interesada en la
sucesión, hará comparecer a los testigos para que reconozcan sus firmas y las del testador.
Si uno o más de ellos no compareciere por ausencia u otro impedimento, bastara que los
testigos instrumentales presentes reconozcan la firma del testador, las suyas propias y las
de los testigos ausentes. En caso necesario y siempre que el juez lo estimare conveniente,
podrán ser abonadas las firmas del testador y de los testigos ausentes, por declaraciones
juradas de otras personas fidedignas. En seguida pondrá el juez su rúbrica al principio al
principio y al fin de cada página del testamento, y lo mandará protocolizar en la Notaria
que el mismo designe.

b) Cuando el testamento es verbal.


Artículo º 1023; Si el testamento fuere verbal, el Juez de letras del departamento en que
se hubiere otorgado, a instancia de cualquier persona que pueda tener interés en la
sucesión, y con citación de los demás interesados residentes en el mismo departamento,
tomará declaraciones juradas a los individuos que lo presenciaron como testigos
instrumentales y a todas las otras personas cuyo testimonio le pareciere conducente a
esclarecer los puntos siguientes: 1.- El nombre, apellido y domicilio del testador, el lugar
de su nacimiento, la nación a que pertenecía, su edad y las circunstancias que hicieron
creer que su vida se hallaba en peligro inminente. 2.- El nombre y apellido de los testigos
instrumentales y el lugar de su domicilio. 3.- El lugar, día, mes y año del otorgamiento.

Artículo º 1024; Los testigos instrumentales depondrán sobre los puntos siguientes: 1.- Si
el testador parecía estar en sano juicio. 2.- Si manifestó la intención de testar ante ellos.
3.- Sus declaraciones y disposiciones testamentarias.

Artículo º 1025; La información de que hablan los dos artículos precedentes, será remitida
al Juez de Letras del último domicilio, si no lo fuere el que ha recibido la información; y el
Juez, si encontrare que se han observado las solemnidades prescritas, y que en la
información aparece claramente la última voluntad del testador, fallará que, según dicha
información, el testador ha hecho las declaraciones y disposiciones siguientes,
(expresándolas); y mandará que valgan dichas declaraciones y disposiciones como
testamento del difunto, y que se protocolice el expediente

No se mirarán como declaraciones y disposiciones testamentarias sino aquellas en que los


testigos que asistieron por vía de solemnidad estuvieren conformes.

En este caso, el Juez de letras del departamento que se hubiere otorgado, a instancia
también de cualquier persona que pueda tener interés en la sucesión, y con citación de los
demás interesados residentes en el mismo departamento, tomara declaraciones juradas a
los individuos que lo presenciaron como testigos instrumentales y a todas las otras
personas cuyo testimonio le pareciera conducente a esclarecer los puntos siguientes:

1. Nombre, apellido y domicilio del testador, el lugar de su nacimiento, la nació a que


pertenecía, su edad y las circunstancias que hicieron creer que su vida se hallaba en
peligro inminente.
2. El nombre y apellido de los testigos instrumentales y el lugar de su nacimiento.
3. El lugar, día, mes y año del otorgamiento (artículo 1023) Los testigos instrumentales
depondrán sobre los puntos siguientes: 1. Si el testador pareciera estar en su sano
juicio; 2. Si manifestó su intención de testar 3. Sus declaraciones y disposiciones
testamentarias. (artículo 1025)

La información a que se refieren los dos artículos últimamente citados, será remitida a
juez del Letras del ultimo domicilio del testador, si no lo fuere el que ha recibido la
información; y el juez a quien se remite dicha información, si encontrare que en ella se
han observado las solemnidades prescritas, y que en la información aparece claramente la
última voluntad del testador, fallara que según esa información, el testador ha hecho las
declaraciones y disposiciones siguientes (expresándolas); y mandara que valgan dichas
declaraciones y disposiciones como testamento del difunto; y que se protocolice el
expediente. No se mirarán como declaraciones y disposiciones testamentarias sino
aquellas en que los testigos que asistieron por vía de solemnidad estuvieron conformes.

La resolución judicial es lo que constituye en definitiva esta clase de testamento. El juez es


soberano para dictarla, pero está sujeto a las limitaciones indicadas en el artículo 1025 o
sea

a) Solo dicta su resolución si encuentra que se han cumplido las solemnidades exigidas
por la ley.
b) Deberá observar si en la información aparece claramente la última voluntad del
testador; y
c) No se mirarán como declaraciones o disposiciones testamentarias sino aquellas en
que los testigos que asistieron por vía de solemnidad estuvieron conformes.

Finalmente, la resolución judicial con los demás antecedentes se protocoliza en una


notaria

Impugnación del testamento.


Artículo º 1026 9; El testamento de que se trata en el artículo anterior, podrá ser impugnado de la
misma manera que cualquier otro testamento auténtico; pero la impugnación deberá hacerse por
separado en juicio ordinario.

No puede deducirse oposición a que se eleve a escritura pública el testamento otorgado sin
asistencia de notario. Pero podrá ser impugnado de la misma forma que cualquier otro
testamento autentico y esa impugnación deberá hacerse por separado en juicio ordinario (artículo
1026) O sea que puede pedirse la nulidad del testamento otorgado sin asistencia de notario, de
acuerdo con las reglas generales, por ejemplo, alegando, la falta de razón del testador, la fuerza
ejercida sobre él, la falsedad de los testigos, etc…

EL testamento militar

Concepto.

Artículo º 1027; En tiempo de guerra, los militares en campaña, voluntarios, rehenes, prisioneros y
demás individuos empleados en el ejército, o que sigan a éste.

Es aquel que se otorga en tiempo de guerra, ya sea en el país o en el extranjero, por los militares
en campaña, voluntarios, rehenes, prisioneros y demás individuo, empleados del ejército o que
sigan a este.

Requisitos esenciales para testar militarmente

Debe estar el país en estado de guerra, ya sea civil o internacional, de manera que no se puede
testar militarmente en tiempo de paz.

Personas que pueden testar militarmente

1. Los militares y empleados en el ejercito


2. Los voluntarios, rehenes y prisioneros de guerra
3. Los demás individuos que van acompañando o sirviendo a los mencionados anteriormente

Funcionarios ante quienes puede otorgarse un testamento

Artículo º 1027; podrán otorgar su testamento ante un oficial que tenga por lo menos la categoría
de Capitán. Es aplicable esta disposición a los individuos de un ejército que se halle en país
extranjero. Si el testador estuviere enfermo o herido, podrá otorgarlo ante el facultativo que le
asista. Si estuviere en destacamento, ante el que lo mande, cualquiera que sea su graduación.

La ley transforma en funcionarios públicos para estos efectos a los oficiales del ejército que tengan
por lo menos la categoría de capitán u oficial de grado superior a este, en casos de excepción
también puede otorgarse:

1. Si el testador está enfermo ante el facultativo que lo asista.


2. Si está en un destacamento., ante el superior que mande esté, cualquiera que sea su
grado
3. Si el testador se halla en inminente peligro de muerte, puede otorgar el testamento
verbalmente ante 3 testigos

Formas de otorgar el testamento:


Puede ser abierto, cerrado o verbal

Testamento militar abierto. Solemnidades

Artículo º 1028; El testamento será firmado por el testador si supiere y pudiere escribir, por el
funcionario que lo ha recibido y por los testigos. Si el testador no supiere o no pudiere firmar, se
expresará así en el testamento.

1. Se otorga ante el oficial o facultativo mencionado y 3 testigos, pues, aunque la ley no


especifica el número de los testigos, debe aplicarse la regla general del testamento abierto
solemne.
2. Debe ser firmado por el testador si sabe y puede, por los testigos y el oficial facultativo
ante quien se otorga.
3. Si el testador no sabe o no puede firmar se hace constar así en el testamento.

Tramites posteriores:

Artículo º 1030; El testamento llevará al pie el visto bueno del jefe superior de la expedición o del
comandante de la plaza, si no hubiere sido otorgado ante el mismo jefe o comandante, y será
rubricado al principio y fin de cada página por dicho jefe o comandante, el cual en seguida lo
remitirá con la posible brevedad y seguridad, al Ministro de la Guerra, quien procederá como el de
Relaciones Exteriores en el caso del Artículo 1013.

El testamento llevará al pie el visto bueno del jefe superior o del comandante de la plaza, sino
hubiere sido otorgado ante el comandante o el mismo jefe, y será rubricado al principio o pie de
cada página por dicho jefe o comandante, el cual en seguida lo remitirá con la posible brevedad y
seguridad al ministerio de defensa nacional, quien procederá como el de relaciones exteriores en
el caso del testamento solemne otorgado en el extranjero; es decir, que el ministerio de defensa al
recibir el testamento abonara la firma del jefe y lo remitirá al juez de letras del ultimo domicilio del
testador en Honduras, para que haga protocolizar el testamento.

Testamento militar cerrado. Solemnidades

Artículo º 1032; Si el que puede testar militarmente prefiere hacer testamento cerrado, deberán
observarse las solemnidades prescritas en el Artículo 1003, actuando como ministro de fe el oficial
designado en el párrafo primero del Artículo 1027. La cubierta será visada como el testamento en
el caso del Artículo 1030; y para su remisión se procederá según el mismo artículo.

Esta clase de testamento se otorga solamente ante un oficial que tenga por lo menos el grado de
capitán y 5 testigos en lo demás se observan las mismas formalidades que para el testamento
cerrado solemne que ya están expresada en el capítulo anterior.

Tramites posteriores.

La cubierta del testamento cerrado militar llevará el visto bueno del jefe o del comandante de la
plaza y será remitido al ministerio de defensa nacional para que proceda como en el caso del
testamento abierto militar, como ya se expresó en el artículo 1032

Testamento militar verbal


Artículo º 1031; Cuando una persona que puede testar militarmente se hallare en inminente
peligro, podrá otorgar testamento verbal ante tres testigos; pero este testamento caducará por el
hecho de sobrevivir el testador al peligro. La información de que hablan los Artículos 1023 y 1024,
será evacuada lo más pronto posible ante el auditor de guerra o por el funcionario de que haga sus
veces. Para remitir la información al Juez del último domicilio, se cumplirá lo prescrito en el
artículo precedente.

Dice el artículo º 1031 “Cuando una persona que puede testar militarmente se hallare en
inminente peligro, podrá otorgar testamento verbal ante tres testigos…” esta clase de testamento
no es necesario que los testigos sepan leer y escribir (artículo 1015) para la legalización y
protocolización de este testamento se procede de la misma forma que para el testamento
otorgado sin asistencia de notario, como se dijo al principio de este capítulo. La información de los
testigos la recibirá lo más pronto posible el auditor de guerra o el funcionario que haga sus veces y
llevará al pie el visto bueno del jefe o del comandante de la plaza quien lo rubricara al principio y
al fin de cada página y la remitirá en el menor tiempo posible al ministerio de defensa nacional el
cual lo enviara al juez de letras respectivo para que los haga protocolizar en una notaría.

Caducidad del testamento militar.

Artículo º 1029; Si el testador falleciere antes de expirar los noventa días subsiguientes a aquel en
que hubieren cesado con respecto a él las circunstancias que habilitan para testar militarmente,
valdrá su testamento como si hubiese sido oportunamente otorgado en la forma ordinaria. Si el
testador sobreviviere a este plazo, caducará el testamento. En igualdad de votos contrarios
prevalecerá el favorable al matrimonio.

Artículo º 1031; pero este testamento caducará por el hecho de sobrevivir el testador al peligro.

Si el testamento es abierto o cerrado y el testador falleciere antes de expirar los 90 días


subsiguientes a aquel en que hubieren cesado con respecto a él las circunstancias que habilitan
para testar militarmente, valdrá su testamento como si hubiese sido oportunamente otorgado en
la forma rutinaria. Si el testador sobreviviere a ese plazo caducara el de testamento.

Si el testamento es verbal caducara, es decir, no tendrá valor alguno por el hecho se sobrevivir el
testador al peligro.

El testamento marítimo. Concepto. Testamento marítimo es aquel que se otorga en alta mar a
bordo de un buque de guerra hondureño o un buque mercante con bandera hondureña. (Articulo
1033, párrafo 1 y 1040). Como se ve, para otorgar testamento marítimo es requisito necesario que
el barco se encuentre en alta mar.

Personas que pueden otorgar testamento marítimo. Pueden otorgarlo no solo los individuos de la
oficialidad y tripulación, sino cualesquiera otros que se hallaren a bordo del buque.

Formas del testamento marítimo. Esta clase de testamento también puede ser abierto, cerrado o
verbal; pero en los barcos mercantes solamente puede otorgarse testamento abierto.

a) Testamento marítimo abierto. Solemnidad.


1. Se otorga ante comandante o su segundo, si le barco es de guerra, y ante el capitán o
el que haga sus veces, si el barco es mercante, en ambos casos ante tres testigos;
2. Es firmado por el testador, los testigos y comandante o capitán. Si el testador no sabe
o no puede firmar se expresa así en el testamento;
3. Se extiende por duplicado, uno de cuyos ejemplares se guardan entre los papeles mas
importantes de la nave, y se da noticia de su otorgamiento en el libro diario. (Articulo
1033 y 1034).

Tramites posteriores. Si el buque antes de volver a honduras arribare a un puerto a un


puerto extranjero en que haya un agente diplomática o funcionario consular hondureño,
el comandante o capitán entregará a este agente un ejemplar del testamento, exigiendo
recibido y poniendo nota de ello en el diario; y el referido agente lo remitirá al ministerio
de defensa nacional para los efectos ya mencionados al hablar del testamento militar. Si el
buque llegare antes a honduras se entregará dicho ejemplar con las mismas formalidades
al respectivo comandante del puerto, el cual lo remitirá para iguales efectos al ministerio
de defensa nacional (Articulo 1035).

b) Testamento marítimo cerrado. Solemnidades.


1) Este testamento se otorga únicamente ante el comandante de la nave o su segundo, y
ante cinco testigos con las demás solemnidades exigidas para el testamento solemne
cerrado, ya estudiadas en el capítulo anterior, (Articulo 1039, p. 1).
2) Se guardará entre los papeles más importantes de la nave y se dará noticia de su
otorgamiento. Se remitirá una copia de la cubierta al ministerio de defensa nacional
por el mismo conducto y para los mismos fines que el testamento abierto.

Testamento marítimo verbal. Este es el que otorga en caso de peligro inminente a


bordo de un buque de guerra en alta mar, ante tres testigos. Para la legalización de
este testamento, la información de los testigos la recibe el comandante del buque o su
segundo en la misma forma que para testamento otorgado sin asistencia de notario,
según queda expresado al principio de este capítulo, y para remisión de esa
información al juez del ultimo domicilio del testador, se procederá lo mismo que en el
caso del testamento verbal militar. (Artículo 1038).

Caducidad del testamento marítimo. El testamento marítimo abierto y el cerrado


solo tienen validez si el testador fallece antes de desembarcar o antes de expirar los
noventas días siguientes al desembarque. No se entiende por desembarque el pasar a
tierra por corto tiempo para v reembarcarse en el mismo buque. (Artículo 1037). El
testamento marítimo verbal caduca, es decir, queda sin eficacia, si el testador
sobrevive al peligro. (Artículo 1038 p. 1)

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