Nuestro Fundamento Doctrinales
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Nuestro Fundamento Doctrinales
INTRODUCCIÓN
En estos últimos tiempo tan difíciles que nos ha tocado vivir, donde el engaño y
las falsas enseñanzas abundan tal como lo profetizo nuestro Señor Jesucristo
en (Mateo 24:4) “mirad que nadie os engañe” y lo recalca en el versículo 5
“y a muchos engañaran” y nuevamente en el versículo 11 “y engañaran a
muchos” y aun en el versículo 24 “engañaran si fuere posible a los
escogidos”.
Estas advertencias dejan en claro que para los últimos tiempos un poder
engañoso y satánico, arrastraría a mucha gente que pondrán su fe y confianza
en las mentiras satánicas que son presentadas como una verdad.
Que triste es morir creyendo que una mentira es una verdad, con una vana
esperanza y con una vana creencia; es por esto que Dios ha inquietado mi
corazón para elaborar este manual de doctrina llamado “Nuestro fundamento”
para nuevos convertidos y aspirantes a bajar a las aguas, no es mi intención
hacer un estudio exhaustivo de los temas que se van a tratar si no explicar de
manera clara y sencilla, lo esencial de cada uno de ellos; a fin de dejar un
fundamento sólido en él nuevo creyente para su posterior edificación personal;
alejándolo del engaño, ya que solo la verdad destruye la mentira, solo la luz
resplandece en las tinieblas, por que nada podemos contra la verdad si no por
la verdad
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1. EL PECADO
El pecado como
ESTADO es la
ausencia de Justicia.
El PECADO:
Es una ofensa contra la santidad divina, es una insurrección contra el
gobierno de Dios.
Es una rebelión contra su autoridad, un ultraje contra su amor.
Es cuando la voluntad del hombre se opone a la voluntad de Dios.
DEFINICION DE LA JUSTIFICACION
La justificación puede definirse como el acto jurídico de Dios por medio del cual
este con la base en su propia justicia, declara justo al que cree en Jesucristo.
Es el juez mismo que hace esta declaración.
I. Justicia: rectitud de conducta, tiene que ver con equidad; dar a cada
uno lo que se merece. En cuanto a esto la justicia de Dios es perfecta.
( Romanos 2: 5-11; Apocalipsis 20:13; Salmos 96:13)
II. Justicia: tiene que ver con las obras que hacemos. (Mateo 6:1; Isaías
1:17; Hechos 10: 34-35; Deuteronomio 9:5)
III. Justicia: “es Cristo personificado” (Romanos 3:21-22; 10: 1-11)
IV. Justicia propia: justicia humana aparte de Dios, confianza propia
(Isaías 6:4; Tito 3:5; Filipenses 3:9).
V. Justicia imputada. (trasferida) (filipenses 3:9; 1:11; Efesios 4:24;
2Corintios 5:21; Romanos 1:17; 2Pedro 1:1).
VI. La justicia de Dios manifestada por el Espíritu Santo. (Efesios 5:9)
esta justicia de Dios se revela por fe (Romanos 1:17) a nuestras vidas
en el momento de creer en Jesucristo como nuestro salvador. Este es el
tipo de justicia (perfecta) que Dios demanda para poder entrar al cielo.
64:6) siempre que obramos sin depender de Dios por la fe en Cristo, se nos
cuenta el salario como deuda y no como gracia. (Romanos 4:4).
-DAVID:
“Como también David habla de la bienaventuranza del hombre a quien
Dios atribuye justicia sin obras, diciendo: Bienaventurados aquellos
cuyas iniquidades son perdonadas, y cuyos pecados son cubiertos.”
(Romanos 4:6-8).
Aquí en este pasaje vemos como David habla de la justificación y exclama
¡dichoso aquel hombre que Dios declara justo sin obrar y no solo lo declara
justo sino que habla de que todas sus iniquidades son perdonadas y sus
pecados cubiertos y que Dios no lo culpa de pecado!.
-ADAN:
“Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos
los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los
hombres la justificación de vida. Porque así como por la desobediencia
de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por
la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos” (Romanos
5:19).
¿Cómo la muerte de un solo hombre trae como resultado el perdón de
millones?
El pecado y la desobediencia comenzaron con un hombre (Adán) y se
extendieron luego a todos sus descendientes, todos participamos de la
enfermedad y su consecuencia, esto es inevitable, el reinado del pecado y la
muerte que separa al hombre de Dios. Sobre éste mismo principio la justicia y
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EL METODO DE LA JUSTIFICACION
(Romanos 3:20, 22.) “20ya que por las obras de la ley ningún ser humano
será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el
conocimiento del pecado. 21Pero ahora, aparte de la ley, se ha
manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas;
22la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que
creen en él. Porque no hay diferencia”
(Romanos 4:5) “5mas al que no obra, sino cree en aquel que justifica al
impío, su fe le es contada por justicia.”
(Efesios 2:8 al 9). “8Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y
esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9no por obras, para que nadie
se gloríe. 10Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para
buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que
anduviésemos en ellas.”
(Santiago 2:17) “¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre
cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? ¿No ves que la fe actuó
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Somos justificados por fe solamente, pero no por una fe que sea sola, sino
por una fe que obra en la vida diaria, la fe que influye y dirige los pensamientos,
las palabras y los hechos, pablo pone énfasis en que la salvación no se gana.
Santiago en que la salvación tiene que ser aplicada. La fe y las obras son como
los dos remos de un bote el uno es necesario para el otro. En cuanto a esto
pablo también nos habla de la fe que obra, en absoluta armonía con el apóstol
Santiago.
“Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo ni la incircuncicion
si no “la fe que obra” por el amor”. (Gálatas 5:6)
En resumen somos justos delante de DIOS por la fe, justos delante de los
hombres por las obras, justos por las obras de la fe, y justos por la fe que obra.
LA MEDIDA DE LA JUSTIFICACION
No podemos medir toda la grandeza de bendición que es derramada en la
vida de un pecador justificado. La justificación lleva consigo a lo menos tres
cosas esenciales para la vida cristiana.
A. PAZ: “porque ahora no hay más acusaciones”
“¿Quién acusara a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.”
(Romanos 8:33).
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1. EL ARREPENTIMIENTO
“Pero Dios habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia,
ahora manda a todos los hombres en todo lugar que se arrepientan.”
(Hechos 17:3)
El hombre puede recibir todos los beneficios de Dios; su justicia, su
salvación, su redención y su perdón pero solo si se arrepiente de sus pecados
y recibe a JESUCRISTO en su corazón (Hechos 3:19) y se vuelve a Dios para
no vivir mas en el pecado (Romanos 6:1-2 y 6:11-13) no podemos recibir a
CRISTO y a la ves recibir el pecado por que la justicia y la santidad de Dios no
tolera la práctica del pecado y quien lo hace pertenece al diablo y no a Dios (1
Juan 2:8)
¿QUE ES ARREPENTIMIENTO?
La palabra arrepentimiento viene del griego “metanoia” que significa cambio
de mente de actitud y propósito en la vida. Esta palabra tiene que ver con un
cambio de mente en cuanto al pecado por que desconocíamos la esclavitud
que este traía (Juan 8:34) y la condenación que se ejecuta sobre aquellos que
lo practican. (Romanos 6:23).
Un cambio de mente en cuanto a Dios por que a través de el arrepentimiento y
la aceptación de CRISTO ahora conocemos la gracia de Dios (Romanos 3:24)
y su amor para con nosotros (Juan 3:16) lo cual trae un cambio de vida por el
poder del Espíritu Santo que no es dado (1Corintios 2:17 y (1 Corintios 3:16.)
En (Hechos 17:30-31) dice: “pero Dios, habiendo pasado por alto los
tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo
lugar a que se arrepientan…”
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Es importante destacar que: Dios manda, Dios decreta, Dios establece, Dios
ordena, no es una sugerencia y mucho menos una opción, los hombres en todo
el mundo y en todo lugar tienen que cambiar “arrepentirse” si quieren ser
salvos, es él creador que lo dice, de otro modo si no se arrepienten ni aceptan
el único medio de salvación que es CRISTO, van a ser juzgado y condenados
por Dios (Marcos 16:15-16), ( Juan 3:18), ( Romanos 2:3), ( Hebreos 9:27) está
claro en la palabra de Dios que su juicio será con justicia. (Hechos 17:31)
ARREPENTIMIENTO DE CORAZON
La palabra muerte significa separación, lo cual quiere decir que por causa del
pecado Dios esta separado del hombre. Ahora bien hay tres clases de muerte:
1) Cuerpo: A través de esté percibimos las cosas material, es la parte que nos
hace “consientes del mundo físico”, (los sentidos del cuerpo).
2) El Alma: Esta formada por el Intelecto, que nos ayuda en el presente estado
de existencia, las Emociones, que proceden de los sentidos físicos, y la
“Voluntad”, que pertenece al propio yo del hombre, y revela su personalidad, y
esto es lo que nos hace tener “Conciencia de uno mismo”.
3) El espíritu: El espíritu es la parte mediante el cual nos comunicamos con
Dios, y solo por el podemos percibir y adorar a Dios. Se le llama el elemento
que tiene “Conciencia de Dios”, (Romanos 1:9; 12:11), (Juan 4:23-24),
(Filipenses 3:3). “Es soplo y aliento divino” (Génesis: 2:7)
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Tito. 3:5 “nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos
hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y
por la renovación en el Espíritu Santo”
CONCLUSION:
5. LA REDENCIÓN:(Romanos 3:24)
DESARROLLO:
CRISTO ES EL REDENTOR:
Liberación:
“El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al
reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre, el
perdón de pecados”. (Colosenses 1:13-14)
Rescatar:
“Como el Hijo del Hombre no vino, para ser servido, sino para servir, y
para dar su vida en rescate por muchos”. (Mateo 20:28).
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Soltar:
“El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el
principio. Para esto aprecio el Hijo de Dios, para deshacer las obras del
diablo”. (1Juan 3:8), (Lucas 13:15-16).
Pecados pasados:
Pecados Presentes:
Dios no solo toma en cuenta los pecados pasados, también los presentes, la
sangre provee limpieza y perdón permanente. (Apocalipsis 1:5), el nos amo y
nos lavo de nuestros pecados con su sangre. “Pero si andamos en luz, como él
esta en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su
Hijo nos limpia de todo pecado”. (1Juan 1:7).
Libres de la ira:
1. Hacia Dios:
2. Hacia el hombre:
La sangre ha satisfecho a Dios también debe satisfacernos a nosotros porque
ella tiene un segundo valor que es para nosotros. Purifica los corazones de la
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mala conciencia (Hebreos 10:22), tan pronto como encontramos que nuestra
conciencia esta intranquila, nuestra fe se debilita e inmediatamente
encontramos que no podemos ver a Dios, cara a cara y para poder seguir
andando con Dios debemos conocer día a día el valor de la sangre.
Somos hechos cercanos por la sangre de Cristo (Efesios 2:13)
Tenemos entrada al trono de la gracia por la sangre de Cristo
(Hebreos10:19-20), por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del
velo, esto es, de su carne. ¡ALELUYA!, esto es redención liberación total.
La base fundamental de nuestro acercamiento a Dios es la preciosa sangre de
Cristo (1Pedro 1:18-19)
El propiciatorio: Era el nombre que recibía la tapa del arca del testimonio, este
era el lugar entre los querubines de oro donde habitaba la presencia de Dios en
una nube, sobre sus alas extendidas. El propiciatorio era el sitio donde se
realizaba al acto mas elevado y perfecto de expiación, esta tapa era hecha de
oro puro representando el trono de Dios, era un trono de misericordia.
Propiciación significa “donde Dios es propicio o favorable” (1Juan 2:2), la
cubierta era por tanto el asiento de la misericordia de Dios, fue Dios quien
propicio en su mente la idea de un sacrificio expiatorio para salvar al hombre,
esto nació de Dios y no de los hombres.
El día de la expiación el sumo sacerdote rociaba la sangre en el Propiciatorio,
entonces los pecados del pueblo y los del mismo eran cubiertos, por que Dios
veía la sangre, que tipifica la sangre de Cristo, y apacigua la ira de Dios.
(Hebreos 5:1-3), pero ahora Cristo Jesús sumo sacerdote para siempre
(Hebreos 5:6), se presento en el trono de Dios (propiciatorio) por nosotros y
satisfacer su justicia (propiciación) quitando el pecado por medio de su
sacrificio llevando él (expiación) y liberándonos de la esclavitud del pecado
(redención). (Hebreos 9:23-26)
CONCLUSIÓN.
7. ADOPCIÓN:
PRIVILEGIOS DE LA ADOPCIÓN:
1. La presencia del Espíritu Santo en nuestros corazones (Gálatas 4:6):
Cristo habita en cada cristiano por el Espíritu Santo, esto sobrepasa y remplaza
todas las otras creencias. (Juan 16:7), (Efesios 3:17), por medio del Espíritu
santo que reside en nosotros tenemos el privilegio no solo de reflejar a Cristo,
sino de poseerlo. Nuestras capacidades varían, pero el cristiano mas joven y
débil puede atreverse a proclamarlo como el Apóstol, “Cristo vive en mi”
(Gálatas 2:20)
2. El poder del Espíritu Santo en nuestras vidas (romanos 8:2): Los que son
hijos de Dios ahora son puestos en libertad de la esclavitud del pecado, ya no
están bajo el yugo del pecado. Pero ¡AY! Cuantos cristianos profesos, fallan en
vivir a la altura de esta experiencia como Lázaro están atados con los lienzos
de la tumba, tienen vida pero no libertad, aunque han nacido de nuevo no
tienen libertad en la oración, la alabanza o el testimonio; no tienen libertad de
sus temores dudas, pecados que lo asedian, no tienen libertad de sus
ambiciones mundanas, sus hábitos pecaminosos y egoístas, y sus deseos.
El temor del hombre lo amarra, el temor de no ser populares, el temor del
ridículo los pone en silencio, como resultado están amarrados de pies y manos
como por los lienzos de la tumba, el poder de Dios que están ejerciendo es casi
como si todavía estuvieran muertos. Si él creyente comprende que su adopción
lleva consigo el asombroso poder del Espíritu Santo, constantemente a su
disposición no toleraría los grillos ni los lienzos de la tumba. (Romanos 8:2,13;
6:14).
El propósito divino respecto a este revestimiento del Espíritu Santo es que Dios
desea moldearnos a la imagen de Cristo su Unigénito. Cristo es la imagen del
Dios invisible (Romanos 8:29), (Colosenses 1:15), el Espíritu Santo es la
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“Y no solo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias
del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando
la adopción, la redención de nuestro cuerpo. (Romanos 8:23)
¡Que perspectiva! Por mas que nuestros privilegios sean ahora maravillosos,
serán sobrepasados cuando Cristo regrese para recoger a todos sus hijos a su
hogar entonces la redención del cuerpo será una realidad gloriosa y
entraremos, en todos los privilegios eternos de los hijos e hijas del Señor Dios
Todopoderoso
CONCLUSIÓN:
La adopción abarca el pasado, el presente, y el futuro
(Gálatas 4:4) “La plenitud)
Pasado: (Efesios 1:4-5)
Presente: (Gálatas: 4:4-5)
Futuro: (Romanos 8:22-23)
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nosotros el “creer” y así poder recibir por gracia el don y el fruto de la fe.
(Gálatas 5:22), (1Corintios 12:9), (Romanos 3:26), (Hebreos 12:2).
Toda la doctrina neo testamentaría de la redención y la salvación gira entorno a
la gracia de Dios, manifestada en la vida, obra y muerte de nuestro Señor
Jesucristo, es la base de nuestra justificación. (Romanos.24), es la verdadera
buena nueva y la esencia del evangelio. (Hechos 20:24)
La vida cristiana está contenida en su totalidad en la gracia de Dios, la
santificación, crecimiento y maduración, se reciben dentro de esa gracia.
(Hechos 13:43), (2Timoteo 2:1-2)
“Antes bien creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador
Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén”. (2Pedro
3:18).
La vida cristiana es orientada por la gracia. (2Corintios 1:12).
“Porque nuestra gloria es esta: el testimonio de nuestra conciencia, que con
sencillez y sinceridad de Dios, no con sabiduría humana, sino con la gracia de
Dios, nos hemos conducido en el mundo, y mucho mas con vosotros”.
(2Corintios 1:12)
Tanto la vocación a la vida cristiana, como al servicio de ella es obra de la
gracia de Dios. (Gálatas 1:6; 15) ;(Romanos 12:3) ;(1Corintios 3:10). Gracia
para predicar, gracia para enseñar, gracia para servir, etc.… Toda habilidad
utilizada sin tomar en cuenta la gracia de Dios, es hecha en la carne y no
proviene de la fe y todo lo que no es de fe es pecado. (Romanos 14:23).
Somos administradores de la gracia: (Efesios 3:2). “Cada uno según el don que
ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la
multiforme gracia de Dios”. (1Pedro 4:10).
Solo los mayordomos pueden administrar; esto quiere decir que somos
mayordomos de Dios. A quienes el ha dado sus dotes por gracia para que lo
ministremos a otros como buenos mayordomos (administrador), de los bienes
de Dios, ya que esas dotes están puestas en nuestras manos por un tiempo
establecido y luego tenemos que entregar cuentas al dueño de la obra. La
gracia no quiere decir entonces que seamos negligentes porque Dios lo ha
hecho, la gracia exige responsabilidad, esfuerzo y acción, excelencia de parte
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del creyente ya que tenemos que rendir cuentas al dueño de la casa. (Hebreos
3:5-6), (2Timoteo 2:1)
“Así pues, ténganos los nombres por servidores de Cristo, y administradores
de los misterios de Dios. Ahora bien, se requiere de los administradores, que
cada uno sea hallado fiel. (1Corintios 4:1-2)
La gracia es abundante y suficiente:
La Biblia caracteriza la gracia abundante y suficiente para toda emergencia,
necesidad y situación.
Tenemos poder por la gracia. (Hechos 4:33)
Reina la vida para los que reciben la abundancia de la gracia. (Romanos 5:17)
La gracia nos lleva al triunfo en Cristo. (2Corintios 2:14)
Por la gracia de Dios en nuestro corazón podemos ser dadivosos. (2Corintios
8:7) (Nos capacita para dar)
Somos aceptados por su gracia en Cristo. (Efesios 1:6)
CONCLUSIÓN
Todo es por gracia: a) La salvación. (Efesios 2:8), (Hechos 15:11), (Efesios
1:7), (Tito 3:7). b) Los dones (Romanos 12:6-8). c) El Espíritu Santo (Gálatas
3:2). Todo lo que se recibe por gracia, se mantiene por la gracia misma, y
debemos dar de gracia lo que recibimos de gracia. (Mateo 10:8), ¡Gloria a Dios!
9. LA FE
“Con la mira de manifestar en este tiempo su justicia a fin de que el sea el justo
y el que justifica al que es de la fe de Jesús (romanos 3: 26)”
INTRODUCCION
“La fe es de Jesús y no nuestra” nosotros la recibimos cuando lo recibimos a el
como nuestro Salvador, y no solo recibimos su fe sino su paz, su justicia, su
amor, su santidad, su carácter, y todo lo que hay en su majestuosa persona
“ahora es nuestro,” es por esto que la Biblia nos enseña que estamos
completos en el que es la cabeza de todo principado y potestad (Colosenses 2:
10), y si Dios no escatimo ni a su propio hijo, sino que lo entrego por todos
nosotros, ¿Cómo no nos dará también con el todas las cosas (Romanos 8:32).
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De manera que Dios nos lo ha dado todo en Cristo Jesús, y esto es una
realidad para Dios y un hecho y no algo que esta por suceder. En nuestra
experiencia puede que no estemos experimentando tal posición pero ya Dios
decreto “os lo e dado todo y están completos; porque si nos dio a su Hijo
entonces todo lo que hay en su Hijo es nuestro”
Ahora bien la fe consiste en reconocer que todo lo que Dios ha dicho y hecho,
es una realidad. La fe consiste en aceptar los hechos, esto es en reconocerlos
como hechos, la fe es un “hacer efectivo” algo, la obra de Dios esta realizada
en Cristo (consumado es Juan 19: 30) y esto es un logro divino, y no es
necesario que el hombre haga nada pues la obra realizada por Dios es
completa. Sin embargo, la gracia de Dios es justa por eso juntamente con los
“hechos” existe la necesidad de la cooperación humana, ¿Qué clase de
cooperación es esta? No consiste en agregar nada a lo que Dios ya realizo sino
en creer que todo lo que Dios ha efectuado es real, o sea que es un hecho, en
esto consiste la fe.
La fe se refiere a la manera en que el hombre cree en Dios, confía en su obra y
en su redención, reclama las promesas de Dios para si, es por medio de la fe
que los hechos relazados por Dios vienen a formar parte de la experiencia del
hombre.
DESARROLLO
tener la convicción de Cristo para poder decir como pablo: “en todas estas
cosas somos mas que vencedores por medio de aquel que nos amo”
(Romanos 8:37)
La Biblia habla de Cristo como el autor y consumador de la fe. (Hebreos. 12:2)
Autor: del griego “Arje” “Arjegos” iniciación, primero, primeramente, principado,
dirigente. Un autor en el diccionario secular es: quien inventa una cosa o el que
es causa de alguna cosa.
Consumador: en el griego es “teleiotes” y significa completador, perfeccionar,
acabar cumplir.
Cristo, es quien inicio la fe en los hombres el es la palabra encarnada de Dios
(Juan 1: 14) de manera que cuando Abraham, Moisés y los profetas oyeron
creyeron y recibieron la palabra con ella recibieron la fe de Jesús, que para
este entonces era el verbo y una gloria con el padre (Juan 17:5)
Ahora bien, nosotros hemos recibido a Jesús y todo lo que hay en el incluyendo
su fe, ahora; su fe en nosotros necesita desarrollarse esto es perfeccionarse
(consumador) (2 Corintios 10:15) y esta perfección la da Dios (Colosenses
2:19), (1 Corintios 3:6) y esto es gradual como el crecimiento de una planta;
hasta llegar a la unidad de la fe y del conocimiento del hijo de Dios a un varón
perfecto (Efesios 4:13.)
LA FUENTE DE LA FE
La palabra de Dios nos dice cual es la fuente de la fe “….Por medio de la fe; y
esto no de vosotros; pues es don de Dios (Efesios 2:8)” la fe nos es dada por
Dios, encontramos palabras parecidas en (Hechos 3:16) “…. la fe que es por
el”
“Entonces la fe se origina en Dios y no en nosotros”
El verbo (la Palabra encarnada) salió de Dios “… y que había salido de Dios y a
Dios iba (Juan 13:3)” “… porque yo de Dios e salido, y he venido; pues no he
venido de mi mismo (Juan 8:42)” por lo tanto Dios es la fuente de nuestra fe, y
Cristo (su Palabra encarnada) es el medio que Dios utilizo para darnos su fe
¿que debemos hacer entonces para recibir esta fe? Creer, creer, creer, y solo
creer (Mateo 21: 22; 8:13), ( Marcos 9:23;16:16)-, (Juan 3:16- 18; 7:38),
( Romanos 10:9) el creer lo pone el hombre y la fe la pone Dios, a través de su
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Espíritu Santo, ya que la fe es un fruto del Espíritu (Gálatas 5:22) y un don del
Espíritu (1Corintios 12:9) ,de manera que al recibir a Cristo recibimos el don
(regalo) del Espíritu Santo (Hechos 2:38) de Parte de Dios convirtiéndonos así
en la morada de Dios por el Espíritu.
(Romanos 10:17) “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.”
La fe se fundamenta en la palabra de Dios, una fe no fundamentada en la
palabra de Dios no es fe, es superstición.
VIVIENDO POR LA FE
(Hebreos 10:38) “Mas el justo por la fe vivirá; y si retrocediere, no agradara a
mi alma”
Todo en el reino de Dios se mueve por la fe y se experimenta por la fe; hasta
las cosas más pequeñas e insignificantes debemos llevarlas a la presencia del
Señor; cada decisión, cada mensaje, cada enseñanza, cada angustia, cada
pensamiento debe ser llevado a los pies de Cristo (2Corintios 10:5) y confiar
que Dios lo hará, esto es vivir por la fe, de esta manera nuestra fe se ejercita
en cosas pequeñas como si fuera un grano de mostaza, que va creciendo y se
hace mayor que todas las hortalizas (Mateo 17:20), (Marcos 4:31-32). Fe para
pequeñas cosas produce fe para grandes cosas. La fe necesita ser ejercitada
para que así como crece el músculo con el ejercicio así crezca nuestra fe
empezando por cosas pequeñas y yendo hacia cosa grandes.
Sin fe es imposible agradar a Dios: (Hebreos 11:6) y todo lo que no proviene de
fe es pecado (Romanos 14:23) de manera que todo debemos vivirlo por la fe a
fin de agradar a Dios.
LOS HEROES DE LA FE
(Hebreos 11:2) “porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos”
Alcanzar: del griego “Martureo” significa ser testigo, declarar, dar testimonio,
lograr, alcanzar. Según el diccionario secular significa: llegar a juntarse con una
persona o cosa que va delante y que generalmente se persigue. Llegar a
poseer lo que se busca o solicita, alcanzarle a uno algo, entenderlo.
Uniendo estos dos conceptos vemos que los antiguos buscaban siempre
alcanzar a Dios, y conocer su deseo, pensamiento y llegar a su corazón,
creyendo sus dichos; como resultado Dios les concedió fe abundante para
alcanzar sus promesas, y fueron testigos de Dios; declarando y dando
testimonio del que vive por los siglos de los siglos amen… y esto permitió que
ahora Dios diera testimonio de ellos en su santa palabra; ya que estas cosas
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CONCLUSION
Los antiguos alcanzaron buen testimonio, pero; ¿Cómo lo hicieron? ¿Cómo lo
lograron? “Por la fe” la fe fue el medio por el cual ellos obtuvieron buen
testimonio, (Hebreos 11:39) Si queremos tener un testimonio fuerte y poderoso,
hemos de tener una fe fuerte y poderosa y Dios dará testimonio de nosotros,
así como lo dio de Abel: (Hebreos 11: 4).
Dios quiere que obremos por la fe, y que nuestras obras sean obras de fe
(Gálatas 5:16), (Santiago 2:14- 20), a Dios no le agrada cuando tratamos de
hacer su obra sin confiar en el, sin tomar en cuenta sus promesas, Dios es fiel
a su palabra y es imposible que el mienta. (Hebreos 6:18).