La Auditoría Es Pasión, Emoción y Creatividad

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PREFACIO

El presente libro es para motivar y su nombre lo dice muy claro, primero a


los jóvenes que inician sus estudios universitarios, para ingresen a la carrera
de Contaduría Pública y también motivar a las empresas, comercios,
pequeñas, medianas o grandes, para que conozcan lo importante que son las
auditorías y que lo compartan con su personal y sirva de ejemplo para
proteger sus empresas. En el primer caso, el auditor debe tener mucha
habilidad para el uso de la observación y un razonamiento muy deductivo,
por eso, este libro va dirigido a la práctica, a la experiencia. La parte teórica o
de formación, se los dejaré a otros libros y por supuesto que a los centros
educativos, las normas internacionales de auditoría, al Informe Coso, a los
colegios profesionales y toda aquella literatura, ley, reglamento, o decreto
que existen o se establezcan para la buena labor de la profesión. En el
segundo caso, las recomendaciones pueden generar grandes ahorros a todas
las empresas y sobre todo, que conozcan cómo mejorar sus ingresos,
disminuir sus gastos, controlar las fechorías, corregir los errores, así como
las negligencias y las injusticias.
No soy tan tonto, ni voy a ser modesto, pero no es todo funcionario de
auditoría, que le produce millones de dólares, en ahorros, a las empresas,
como lo hice, gracias a mis muchos hallazgos importantes y algunos muy
difíciles de descubrir.
LA AUDITORÍA ES PASIÓN, EMOCIÓN Y CREATIVIDAD

Primero, antes de hablar de la profesión, quiero presentarme y decir algunas


pocas palabras sobre la misma. Mi nombre es Rodolfo Barrientos Boza,
licenciado en Contaduría Pública, con una maestría en Negocios
Internacionales y Mercadeo. Trabajé por casi treinta años en auditoría Interna
y fui miembro directivo en varias oportunidades de algunas asociaciones,
comités y cooperativas, (algunas fomentadas por mi persona) y al cabo de
algunos años, estás llegaron a tener la capacidad económica similar a los
bancos. Para aquellas personas que no conozcan qué es la auditoría, antes de
definir de la manera tradicional o conceptual, quiero hacerlo de forma
emocional. Sí, porque esa puede ser la palabra que defina a un funcionario
con la esencia de auditor. Cuando uno se apresta, para realizar una revisión,
se convierte en un extraordinario reto, y uno lo concibe, con una visión
enfocada a cumplir responsablemente hasta el final y una misión de llevar el
estudio en forma objetiva y veraz. Para explicar diferente lo que les digo,
aunque la mayoría de auditores no les gusta que los comparen con los
detectives, o más bien prohíben que se haga eso (en parte tienen razón), por
eso, no lo voy a hacer con un detective real, sino con el mejor personaje
creado por el escritor escocés, sir Arthur Conan Doyle, llamado Sherlock
Holmes, que para resolver los casos de los crímenes más complicados, hay
que utilizar la inteligencia, tener mucha habilidad para el uso de la
observación y un razonamiento muy deductivo.
A este personaje siempre se le relacionaba con una lupa, curioso o
casualidad, era uno de los instrumentos muy usados en la profesión de la
auditoría, en la era del papel y ha servido de portada en muchos libros, como
símbolo de la investigación, del auditor o del control interno.
Creo y sin decir mucho, la anterior explicación, es la mejor definición
emocional, para motivar a los jóvenes que inician sus estudios universitarios
o aquellos ya avanzados, porque al auditor le tocará hacer cientos de estudios,
todos, de temas diferentes, incluso, en áreas que salen de su capacidad de
especialización y abordar campos como el de la ingeniería, la química, la
medicina, la alimentación y muchos otros, que le serán difíciles, pero jamás
imposibles, porque cómo dije al principio, más bien serán todo un reto. Por lo
tanto, un auditor tiene que ser igual o mejor que Sherlock, para ayudar a
mejorar los procedimientos, los controles internos, ayudar a corregir los
posibles errores, dar recomendaciones que ayuden a cuidar los activos,
actualizar los reglamentos, los manuales y las políticas, así como combatir la
corrupción, los abusos, las estafas, los fraudes, pero también, la ineficiencia
en la administración de los recursos o las labores de los auditados.
Entonces, desde el mismo inicio, hay que investigar y averiguar todo lo
relacionado al tema, hay que ver la historia, tales como estudios anteriores y
sus resultados, así como, la parte técnica que se ocupará, desde leyes,
reglamentos, manuales, sistemas, procedimientos, políticas, equipos,
cuestionarios, folletos, libros y cantidad de instrumentos que nos pueden
llevar a obtener resultados satisfactorios.

¿Quién puede llegar a ser Auditor?


La respuesta en muy contradictoria, o también depende de muchos factores,
sin embargo, las tendencias en los últimos años, ha sido nombrar a
Ingenieros, o personas que cursan carreras diferentes a las de Contaduría
Pública, pero ¿Será esa una solución acertada?, de ninguna manera, porque
entonces de igual manera no podemos decir que un Contador Público,
también puede ser, ingeniero, doctor, profesional en química o similar, solo
imaginen lo que pasaría, se nos caerían los edificios, se morirían los
pacientes, o nos explotarían los experimentos, sin embargo, existe una razón
de mucho peso y es la siguiente: El Contador Público, tiene fe pública, al
igual que los abogados, por lo tanto, la firma del Contador Público es la única
válida en el ejercicio de la profesión, la cual, está garantizando tal condición
en todos los trabajos realizados, principalmente en el informe final y es
similar, a la firma del ingeniero en un plano, que el mismo, sin dicha firma,
se convierte en un dibujo, sin valor alguno y aunque el que construya el
edificio va a ser el capataz y los obreros, la firma y el sello de este, es lo que
vale, así como las instrucciones e inspecciones de la obra, y sin ella no se
permite construir. Por lo tanto, para mi criterio, sería absurdo, que cualquier
otro profesional de otra disciplina, ocupe plaza de Auditor. Si bien es cierto,
en algunas ocasiones, el auditor ocupe de especialistas en determinadas
materias, eso no significa que haya que contratar especialistas para ser
auditores. Para mí, zapatero a su zapato. Ahora, aquí viene lo contradictorio,
con la segunda parte de mi explicación sobre este tema, el cual me imagino
que mucho auditor o profesor siempre tocará en sus lecciones, ya que es
donde los estudiantes pueden decidir si siguen la profesión con pasión o se
retiran de ella.

¿La Auditoría se aprende o se nace para ser auditor?

Lo explico mejor así, con la misma pregunta, usando a un futbolista ¿Nace


futbolista o se aprende? Pienso que un jugador de balompié, específicamente
un delantero, puede leerse todos los reglamentos de FIFA, puede estudiar
todas las técnicas, libros, folletos, revistas que hablen de fútbol,
aprendérselos de memoria y cuando ya sepa que hacer, lo llamo, le doy un
balón y le digo que vaya a meter un gol. Creo que no va hacer nada, porque le
falta lo más importante, la práctica, la experiencia, la habilidad, la visión, el
olfato de gol, fe que lo va a lograr y así es la auditoría. Pero esa pregunta y
agregando que si el jugador nacía con la habilidad de pegarle duro y
colocado, al balón, se la hice hace algunos años a uno de los mejores
entrenadores extranjeros que han pasado por el país, de origen Checoslovaco
y aunque fue de un equipo contrario al mío, siempre le tuve mucho respeto y
admiración como entrenador, porque demostró mucha calidad y
conocimiento y ayudo a nuestro deporte, y su respuesta fue la siguiente: “En
el fútbol todo se aprende, no solo a patear bien la pelota, sino todo, a ser buen
portero, o buen defensa, igual a ser creativo del medio campo, todo se
aprende, entonces le pregunté, si aquí habían entrenadores con la capacidad
de enseñar algo así y él me contestó “una vez traje al país un gran entrenador
italiano, a dar unas charlas a todos los entrenadores y él les hizo la siguiente
pregunta: ¿Me pueden decir tres técnicas de definición? Ninguno de los
asistentes pudo contestar la misma, cosa muy fácil en Europa, entonces
agregó, es que si no se preparan muy bien a los entrenadores, entonces
difícilmente se van a preparar o enseñar muy bien a los pupilos.
Estoy de acuerdo, para mí es cierto y ocurre en todas las áreas, pero téngalo
por seguro que si nació para ser músico, o karateca, menos, para el fútbol, por
más que se le enseñe, o lo intente éste, muy difícil llegará a ser un buen
futbolista, y de allí el fracaso de muchas empresas o instituciones, con
algunos colegas auditores, que no nacieron para eso, pero desdichadamente
nunca fueron advertidos, para que cambiaran de carrera, antes y a tiempo.
Cuando escucho las noticias de grandes desfalcos, fraudes o robos que salen a
la luz pública, en instituciones de gobierno (porque casi siempre la empresa
privada es más reservada en el asunto) y aclaro, no solo en el país, sino en
todo el mundo, lo primero que se me viene a la cabeza, es del trabajo de las
auditorías, tanto interna como externa. Sin juzgar, ni mucho menos echar la
culpa de sus labores de auditoría, me preguntó ¿Qué pasó, qué hizo, o no hizo
la Auditoría? Por muchos años he escuchado personal de la administración
que nos acusan de cuidar cincos y descuidar millones, ¿Será cierto?
Antes de dar varias posibles respuestas a las mismas, voy a comentar algo
muy importante:
Hace unos 36 años, un extraordinario profesor, con mucha experiencia y
edad, en un curso de Control Interno, del cual todavía me acuerdo su nombre
y lo llamábamos como Charly, nos dijo, que en la Auditoría, ya todo estaba
inventado, que no había que inventar nada, absolutamente nada. Por
supuesto, (en esa época era un joven), para mi concepto, esa frase me pareció
imposible, más sabiendo que en el transcurso del tiempo, todo cambia, todo
evoluciona y hay veces todo se devuelve, pero cambia. Sin embargo, él
agregó algo muy importante y es lo siguiente: los procedimientos de auditoría
eran perfectos, empezando desde la planeación, los cuestionarios, la revisión
de los trabajos anteriores, el orden y la técnica con los papeles de trabajo,
eran de igual manera y muy importantes, así como los informes, las
recomendaciones y los hallazgos que se van clasificando y enumerando
ordenadamente, para ir entrelazando todo el trabajo de auditoría, así como la
discusión de los hallazgos, el informe preliminar, el dictamen final y el
seguimiento de las recomendaciones. Aunque no crean, en estos últimos
pocos párrafos, he explicado en sí, lo que es el trabajo de la Auditoría y es la
columna vertebral de la profesión, en todo el mundo, en cualquier país, en
cualquier empresa o institución. Por lo tanto, aunque hoy día se digitalicen
los papeles de trabajo, se realicen auditorías de sistemas y se lancen al
mercado sistemas informáticos de auditoría, pero si no cumplen esas
condiciones, los trabajos serían poco fiables. Como conclusión, en parte muy
importante y aunque han pasado muchos años, lo mismo pronunciado
(también lo que se hacía en aquellos tiempos), por el licenciado Charly, sigue
totalmente en vigencia y tengan por seguro, que aunque una persona no sea
muy buen auditor, o no lo traiga en la sangre, como el ejemplo que les
expliqué del futbolista, aun así, a diferencia de éste, puede hacer una labor
aceptable, porque con solo seguir los procedimientos, las matrices de estudio,
las comparaciones entre lo escrito y real, se pueden descubrir muchas
deficiencias en los controles internos, o en los procedimientos
administrativos.
¿Pero es eso suficiente? Creo que no, falta algo muy importante, y es allí
donde entra la otra parte, porque ésta que les comenté, lo enseñan todas las
universidades del mundo, incluso las más famosas y por supuesto con mucho
más hojas o incluso enciclopedias. Es más, los cursos de auditoría son muy
teóricos, diciendo esto mismo que les describí y más, lógicamente abarcando
millones de palabras y para enseñar cada una de las etapas, cómo llevar los
papeles de trabajo y documentar los hallazgos, confeccionar los informes,
incluso como tratar con la administración, los auditados y así suevamente, sin
embargo, lo que hace falta es lo más interesante, lo que dije al principio, es
esa mezcla que define al famoso detective de novelas, con el uso adecuado de
la observación y haciendo un análisis profundo, más el sentido común, la
objetividad y por supuesto que con respeto al auditado. Eso último lo aclaro,
porque cuando alguna persona está empezando sus primeros pasos de la
carrera, en algunas oportunidades, y por su investidura de auditor, trata con
poca sutileza al auditado, o dicho en otra forma, se le sube su puesto, pero
aquí es donde hay que tener cuidado, porque el auditor no debe juzgar a
nadie, aunque vea que esa persona este cometiendo algún error, de hecho,
todos somos humanos y siempre cometeremos errores, aun, eso no quita que
el auditor debe ser totalmente sincero y transparente con el compañero, ya
que no se trata de castigar o señalar a una persona, más bien, se trata de que
se arregle el error.
Los mejores profesores, son aquellos de mucha experiencia en el trabajo, sin
embargo, creo que debemos experimentar cómo invertimos o damos vuelta
al aprendizaje de la auditoría, de hacerlo un poquito menos teórico y un poco,
más práctico. Les recomiendo que busquen por internet al gallego Anxo
Pérez. Él dice que la educación actual es del siglo XVI y no está acorde a
estos tiempos de la tecnología y la rapidez. La verdad que es muy
inteligente, extraordinario y ha hecho un cambio importante en el sistema
educativo, en lo que respeta a idiomas, por lo que sirve como ejemplo,
también escribió un libro que es número uno, de ventas, en todo el mundo.
Años antes, cuando estaba en el colegio, un profesor de español, inicio un
gran y atrevido intento al cambio. Éste tenía la costumbre de irse al comedor
en medio examen y una vez me encontró a mí, de un extremo al otro, de pie y
copiando a una compañera, solo lo vi cuando se asomó a la ventana y me fui
a sentar, pero cuando ingresó al aula, ni me dijo nada, ni me castigó, ni me
rebajó puntos. A los años, me lo encontré en una actividad social y
aproveché para preguntarle, por qué él nunca me había castigado y me dijo
algo que en verdad tiene mucha razón y me gusto y es lo siguiente:
“Rodolfo, a mí no me interesa un examen, sino que el estudiante aprenda y
casi siempre, la mayoría aprenden las cosas de memoria y posteriormente se
les olvida, pero el que está copiando, no solo está estudiando, sino que por la
premura de no perder el examen, lo que copia siempre le quedará en su
mente”. Es un único profesor, de muchos que hablan de cambiar el sistema
educativo, que realmente lo tenía muy claro y creo que tiene mucho la razón
(esto sucedió hace más de cuarenta años). La mayoría de profesores siempre
piensan que un examen es lo más importante, lo cual creo que depende, o en
parte, no siempre y se los voy a explicar con un ejemplo diferente: Anoche
soñé, (cierto, fue un sueño, una pesadilla) que estaba en un examen de
baloncesto y yo que tenía buen pulso para los tiros libres, fallé todos, perdí y
quedé fuera, a pesar que los compañeros no eran mejores (en el sueño). Me
fui a buscar la encargada y le reclamé que cómo me iba a reprobar, después
de haber pasado todo el año encestando y ahora, en el examen fracasé. En
verdad era un sueño horrible, jajaja, (es que el baloncesto es mi vida) por
dicha que me desperté y apenas abrí los ojos, quería referirme a este asunto.
Un estudiante pasa años en la carrera profesional, en el universidad, en el
colegio, y la escuela, ha hecho miles de exámenes o trabajos de estudio y al
concluir su ciclo o su profesión, le hacen un examen final o examen de
bachillerato, o como le llamen y al igual que mi sueño, después de pasar
horas de horas con los profesores, con los libros, con las prisas, al final le
dicen, perdió el curso. De hecho, conocí un caso que a la mejor estudiante de
la clase, le pasó eso, se bloqueó, por los nervios. A mi parecer, no tiene
lógica que un colegial pasa muchos años y todos aprobados debidamente,
incluidos con pruebas, para después, mediante un solo tiro libre, lo
reprueben. Si los sistemas educativos quieren medir o evaluar la calidad de
los estudiantes, entonces les deberían hacer los exámenes a sus profesores,
jajaja ¿Qué tiene que ver esto que les conté con la auditoría? Mucho, nosotros
nos pasamos toda la vida haciendo estudios, talvez, de casualidad, cuando
hacemos una prueba, sale un error y es donde tenemos que tener y entender
algo muy importante que se llama: la prueba suficiente y competente. Por un
solo caso, o examen, pueda que no represente declarar una deficiencia, ya que
no siempre un error la representa, talvez solo ese día, por lo tanto, el hallazgo
debe ser representativo, o más bien, hay que evaluar todo el curso y allí
vamos a definir el verdadero resultado.
Ahora bien, ¿por qué abogo, que el estudiante debe recibir mucha práctica de
auditoría? A la gente le incomoda que alguien lo audite, o revisen sus
trabajos, a unos les da miedo, a otros cólera, algunos, burla, otros son
indiferentes, encontraremos malcriados, también habrá compañeros muy
amables y colaboradores, en fin, se topará con diferentes tipos de caracteres
que incluso, depende como a uno lo traten, puede un auditor llegar a deducir
que algo no anda bien y entonces uno les pone más cuidado. En muchas
oportunidades nos dicen, para justificar el problema, que siempre se ha hecho
así y esto puede generar de pasar de un error a fraude o cómplice del mismo,
porque si el auditor se da cuenta de un problema que incluso esté causando
pérdidas económicas a las empresas y le salen con esa frase, de que siempre
se ha hecho así, pero no se corrige dicho error, sino que se continúa haciendo
mal, pues simplemente eso se convierte en un delito y entonces el auditor,
con el dolor del alma y aunque el auditado sea un gran compañero o amigo,
debe de informar y pedir una sanción al funcionario, por los daños que está
causando. De hecho, eso sería una de las tantas diferencias entre error y delito
o negligencia. De allí la importancia de dominar estos aspectos, porque se
requiere de experiencia y personalidad, no perder la calma y analizar muy
bien, para saber si dicen o no la verdad, por eso creo que esto se aprende más
con la práctica que con la teoría.
Como pueden ver, talvez pueda o no, responder, específicamente las
preguntas que hice con anterioridad, sobre las noticias que se dan a nivel
global de muchos fraudes, robos, cohechos, que salen a la luz pública y me
preguntaba que hicieron mis colegas en cuanto a denunciar o descubrir esas
anomalías. Sin embargo, puedo señalar algunos aspectos, empezando con lo
finalizado anteriormente, con el ejemplo del error y de aceptarlo y dejarlo
pasar, si algunas de las Auditorías Internas o Externas, conocían el error y lo
ocultaron. Aunque estás no hayan robado nada, no solo son culpables de la
omisión, sino que se convierten en cómplices y eso se pueda dar, porque sus
clientes, en estos casos, les ordenan ocultar o maquillar la información, para
que no sean cuestionados en las asambleas de accionistas. Por supuesto que a
los auditores internos, no les gustaría perder sus trabajos y los externos no
les gustaría perder sus clientes. Lo podemos ver, como ejemplo, con grandes
despachos de contadores y grandes empresas, en los casos de la crisis
bancaria mundial del 2008, más específicamente con la quiebra de algunos
bancos y con el de Lehman Brother, donde auditorías, tanto internas como
externas y de gran renombre, callaron sus resultados o los maquillaron y
entregaban dictámenes satisfactorios de los estados financieros, a pesar que
según las noticias, estas sabían lo que estaba ocurriendo (también, para mí es
inconcebible que supuestamente nunca, los auditores, evaluaran las garantías
de los inmuebles sobreevaluados, que provocó la gran crisis financiera). De
aquí voy a definir una diferencia muy importante, entre la auditoría externa
con interna, y es que la primera cuenta con un tiempo y recursos humanos
muy limitados en comparación con la interna, y por la magnitud y
complejidad de las operaciones, es muy difícil o casi imposible, detectar
alguna anomalía, más bien, en muchas oportunidades, los auditados, les
esconden cosas importantes y entregan información, más que todo para
protegerse de que les señalen algunas deficiencias y por lo tanto, cuesta
mucho, y en tan poco tiempo, poder realmente descubrir cosas peligrosas,
pero aun así, entre lo normal, siempre se emite un dictamen satisfactorio,
basándose en la buena fe, de que la administración le pasó la información
requerida, en forma aceptable y por supuesto con lo que hayan podido
comprobar, de acuerdo a su plan de trabajo. En cambio, las Auditorías
Internas, tienen menos excusas, estás deben de ser más eficientes, porque
conocen mejor sus empresas, ya saben su historia, saben sus estatutos,
reglamentos, comprenden al personal, las operaciones diarias, por lo tanto
deben ser objetivas, y con mayor responsabilidad que las externas, pero aun
así se trabajan con muestras seleccionadas al azar y nunca se puede revisar el
100% de las operaciones, por lo que al igual de las externas eso se convierte
en la mayor defensa cuando no son detectados grandes desfalcos o errores,
sin embargo en algunas oportunidades se convierten también en un pretexto
de algún mal trabajo en la auditoría. En síntesis, para responder a medias, ya
que tendría que ver caso por caso, cuáles instituciones o empresas perdieron
dinero por alguna malversación, robo, error o lo que sea, deduzco algunas de
las posibilidades que se pueden estar presentando con dichas noticias de esas
instituciones, tal como lo expongo a continuación: Primero, que el que
descubrió la situación anómala, fue el auditor y pudo haberse dado con un
dictamen de auditoría que con su denuncia y buen trabajo, logró tal hazaña y
con ello, proteger a la institución de futuras pérdidas, otro caso que pueda
darse, que aunque la Auditoría Interna informara de anomalías, estás no
fueran consideradas por las instituciones o empresas, desestimando todas las
recomendaciones dadas por los auditores, para corregir los problemas, otro
caso, pueda que el auditor proteja al funcionario, gerente o al directivo y
omita las deficiencias, otro, que tal vez se hizo un mal trabajo y en vez de
proteger activos de importantes cuantías, se hicieron trabajos de poca
importancia, sin embargo, aunque esto tampoco es indicativo, porque un
simple estudio, puede convertirse o llevarlo al comino de un hallazgo que
salve de pérdidas a la empresa, tal como más tarde les contaré, un caso de
estos. Entre muchos otros, que se pueden dar, es que un funcionario de
auditoría hiciera muy bien su trabajo, pero sus jefaturas nunca presentaron a
los directores dichos resultados, o presentaron solo algo parcial o corrigieron
y ocultaron lo más trascendente.
Estoy casi convencido, que la mayoría de veces, se presentan grandes
problemas, porque la administración, o la gerencia, incluso, las juntas
directivas, desestimaron o no le dieron la mayor importancia, a las
recomendaciones de sus Auditorías Internas o Externas, y cuando nos damos
cuenta, vemos cómo se han perdido, sumas importantes de dinero, por una
situación de cuidado. También, hay que ver el otro extremo y es que las
auditorías ya sean internas o externas, se les pasaran por alto, o no pudieron
descubrir, el error o la situación que generó grandes pérdidas o problemas.
Ahora bien, en el caso de los grandes y famosos despachos o reconocidos
auditores, con muchos años de experiencia y currículos extraordinarios e
intachables, que callaron, se prestaron o protegieron a sus clientes, como por
ejemplo, en dicha crisis financiera mundial que les hablé o en cualquier
situación similar y después, algunos se lavaron las manos, o incluso se
cambiaron el nombre, la pregunta que habría que hacer es: ¿Qué tan
culpables son? Mi opinión sería: “Tan pecador es, el que comete el pecado,
como el que lo oculta, pero también como el que llega a conocerlo y no
hace nada, para corregirlo”.
Esto último, debe de tenerlo en cuenta cada funcionario de auditoría para toda
la vida, porque uno debe ser ejemplo de la sana actuación y demostrar la
eficiencia y eficacia en el ejercicio de nuestras profesiones. Se lo dice
alguien que por algo trabajó casi treinta años en el ramo, de hecho, cuando
me trasladé a trabajar a la parte administrativa, o de igual manera, cuando
pertenecí a directivas de importantes instituciones, uno nunca llega a quitarse
la maña de ser auditor, siempre nos convertimos en defensores, de los
controles internos y de los sanos procedimientos, pero hay que verlo como
positivo, porque les cuidamos las espaldas, a mucha gente, a los directores
colegas y la nuestra.
Cuando uno está de director de cualquier empresa, asociación o cooperativa,
no hay cosa más fea, que siendo inocente, nos involucren o denigren nuestra
imagen como persona, por algún funcionario corrupto que nos haya
manchado nuestro nombre con sus fechorías y los directivos de la
organización queden expuestos a la imagen pública, como si hubieran sido
también culpables de lo que otros hicieron. Realmente, si a un auditor, con
tiempo completo, le cuesta descubrir deficiencias, ahora imagínense a uno
como director, donde son poquitas horas al mes, para ver muchas cosas que la
administración nos suministra. En síntesis, un buen auditor protege además
de los bienes y activos de las empresas, también lo hace con las personas, no
solo de las juntas directivas, sino de la administración e incluso la de los
auditados. De este tema, quiero tocar algunos ejemplos más adelante.
Cabe indicar, que todos los auditores, cuando andamos en el campo de
nuestras labores, por razones obvias, lo hacemos sin un supervisor o un jefe a
la par, pero siempre debemos cumplir nuestro trabajo y lo repito
nuevamente, eficiente, eficaz, responsable y con respeto, ya que tenemos ojos
que nos están viendo y no lo pensarían dos veces, para acusarnos. En otras
palabras, hay que aprender a cuidarse de los puñales, porque cualquier
pérdida de tiempo, o cualquier error, por poquito que sea, nos señalan con
amplitud y de inmediato, de hecho, a uno le dan quejas de otros colegas, que
anteriormente habían llegado a realizar un trabajo similar, por lo que siempre
vamos a estar expuestos. Nos miran nuestros modales, el modo de hablar, de
vestir, la forma de actuar, incluso cosas diferentes a nuestras labores, como lo
que comemos, bebemos, las historias que decimos. En fin, porque en nuestras
auditorías, muchas veces nos dan altas horas de la noche y salimos a comer
con los mismos auditados, como parte normal de las relaciones entre
compañeros.
Para que entiendan lo delicado, una vez me comentaron lo siguiente de un
colega: “Su compañero, no come para no gastar y dejarse los viáticos, viene,
se nos queda viendo comer”. En verdad, era cierto, a mí solo una vez me tocó
salir con él y pedí nunca más hacerlo, no por esa razón, porque por pinche o
tacaño, que se quede con ganas, sino por vagabundo, ya que yo hice todo el
trabajo, porque él decía que le tocó manejar el vehículo, entonces, furioso,
les dije a mis jefes, que prefería ir solo, aunque sea en autobús, con chofer, ni
que fuera rico y no es que no estime a mi excompañero, todo lo contrario, es
que nunca me anduve por las ramas, siempre fui sincero y en su cara, por más
compañero que fuera ¿Si siempre lo fui con los auditados, no lo iba a ser con
él?. El auditor siempre debe ser objetivo, franco, cuidarse, no descuidarse,
abrir los ojos, los oídos y la mente, para estar alerta del contorno.
Con el tiempo, uno se vuelve tan diestro, que con mirar una situación, sin
tener toda la información suficiente, descubre que algo anda mal y nos
broma. Cómo anécdota, en otra empresa que hice un pequeño trabajo, en los
primeros días descubrí, de primer ojo, que la labor de la auditoría externa se
había hecho errónea y todavía les comenté con una pregunta, ¿Cómo sucedió
eso, y por varios años, que se les pasara los errores que vi? Eran tan
importantes, porque creo cambiaban en casi 180 grados las utilidades y es
que realmente los colegas, pedían todo al contador y este los enredaba con la
información que les pasaba. Lo malo fue, que me respondieron, que no les
interesaban las ganancias, jajaja, o sea que lo dejara así. (Es común, esos
argumentos, cuando alguien ve amenazado sus resultados, éxitos o
comisiones). Logré verlo en tan solo unos minutos que analicé los estados
financieros, así de sencillo, pero lo peor de todo, es que ellos argumentaban,
en uno de los casos que les cuestioné, que la Auditoría había avalado un
registro como correcto, (que para mí no lo era y estoy muy seguro,
(desconocían mi capacidad como auditor)), entonces, para ellos era como
“santa palabra” que lo mismo estaba bien hecho, solo porque la Auditoría se
pronunció. Más adelante les mostraré casos tan espectaculares como este, por
eso uno debe a prender a ser bueno, porque tarde o temprano alguien o
muchos verán nuestras labores, o papeles de trabajo.
Cómo pueden ver, hasta el momento, no les había hablado de estados
financieros, ni de contabilidad, ni de algún tipo de operaciones, porque mi
libro quiero basarlo un poco más diferente de lo tradicional. Quiero dirigir el
presente libro a la práctica, a la experiencia y lo haré con mis hallazgos, pero
los cuales fueron concebidos por mi iniciativa, intuición, análisis, y por
supuesto que para mí fueron todo un reto (que por razones obvias, es muy
difícil de aprender en la universidad, ya que eso lo da la experiencia y la
habilidad innata del auditor), incluso, muchos eventos van más allá de
lógica. Para que entiendan el concepto, cualquiera puede encestar de cancha a
cancha o de la media cancha, un balón de baloncesto con la mano una y otra
vez en un aro, pero son pocos los que encestan con el pie, eso es lo quiere
definir es un desafío a la física, así más o menos es la auditoría, de
emocionante, desafiante. Muchos auditores experimentados saben que es así,
de hecho pienso que un auditor, llega a madurar después de cuatro o cinco
años de experiencia, o sea, después de haber recibido muchos golpes. Como
chiste les comento, que una importante institución, cuando buscaba trabajo,
me botó treinta años a la basura, porque ellos decían que los requisitos eran
los últimos tres años, jajaja. Ahora que toco este tema, en la función pública,
o cualquier empresa, algunas veces, (no todas ni todo el tiempo) hacen
concursos en la contratación de auditores, pero van dirigidos para que gane
alguien en especial, principalmente en algunos casos, empleados o amigos y
lo he notado, con solo ver los requisitos que solicitan, además con los demás
procesos de la contratación y aunque también eso se puede dar con otros
profesionales, me parece increíble que se haga con la contratación de un
auditor, porque este debe ser reflejo y ejemplo por su honorable función y no
debe hacerse ningún montaje, para ganar algún puesto, sino ¿Qué se puede
esperar? Jajaja.
Por supuesto que tuve la suerte de contar con jefes que siempre me apoyaron
mis descubrimientos, confiaron en mí, y sobre todo, ellos se comportaron
como funcionarios muy austeros, poniendo su ejemplo de no abusar de los
recursos y de economizar, para el bienestar de la compañía.
Aunque me acuerdo cómo un excompañero que llegó a ser gerente de ventas
y le negó, con el mismo argumento, una calculadora, a un subalterno
encargado de una sucursal de ventas, donde más bien yo le hubiera dado una
computadora, atrasando el progreso y cuando se lo dije a mi amigo, se puso
furioso, pero eso no me perjudicaba, era a él mismo, porque se vería reflejado
en las ventas, en su credibilidad y hasta en su reputación.
Entre otras cosas que me enseñaron, en el pasar de los años, es que los
trabajos o descubrimientos que hacíamos, era una obligación como auditores,
por lo tanto, no pasa a mayor cosa, en cuanto a uno se refería, sin embargo,
en este punto, mi opinión cambió un poco, después de mucho tiempo, ya que
haciendo un análisis más profundo y cuantificando los millones de dólares,
que gracias a mis iniciativas, logré salvar de muchas estafas, errores,
sustracciones, cohechos y no solo de lo que se estaba presentando en el
momento, sino de lo que hubieran sustraído en el futuro, si no hubiera dado
con los problemas.
Observen lo importante que es contar con un auditor, porque cuantificando el
dinero (por eso lo hago en millones de dólares) y como un pequeño ejemplo,
de un solo caso que relataré más adelante, en detalle, logré ahorrarle a la
empresa, casi tres millones de dólares al año (multipliquen dicha suma por
varios años, si no lo hubiera descubierto, que al final los que pierden, son los
socios o dueños de la empresa) por eso cambié de parecer, ya que como
descubridor de ese y muchos otros eventos, si mis jefaturas no quisieron
hacer mención a la junta directiva que gracias a mí, se estaban ahorrando esa
exorbitante suma, (nunca debí haber pasado desapercibido por los directivos,
pero también, ellos debieron haber preguntado, quién había hecho y cómo,
dicho descubrimiento) y no es que quiera echarme flores, eso no me importa,
sino, que esto no se llega a tener tan fácil en un currículo de un profesional,
aquí ni en cualquier parte del mundo. Hoy día pienso, que por solo cumplir
un mandato de la auditoría que era trabajar, callar y punto, talvez, por esa
razón, nunca me invitaron ni a un café de despedida, ni mis compañeros,
amigos administrativos y mucho menos, los directores, a los cuales aprecio,
así como recuerdo y quiero a los cientos de asociados que conocí y yo sé que
ellos, también me tenían mucho cariño. Creo que eso no lo comprenderán
ahora, sino al final del libro. Mi opinión de callar cambió ya tarde y nunca lo
quikiriquié como un gallo, por respeto y cumplimiento. Seguro, por eso
nunca detectaron muchísimos de mis hallazgos, que en verdad, les generaron
mucho, pero mucho, dinero, y también prestigio a la misma Auditoría, sin
embargo, cuando escuché a un excompañero de estudios de la maestría y un
alto ejecutivo, en ese entonces, de la empresa como Procter & Gamble, donde
explicaba en una conferencia o seminario, cómo dicha transnacional, tenía
una política de recompensar a cualquier funcionario que generara un producto
o ganancias adicionales e importantes a la compañía, a tal punto, que lo
hacían socio de sus descubrimientos, solo dije, “Dios mío, cuántos millones
de dólares me hubiera ganado”, pero así es la vida, no todo el mundo es igual,
ni las oportunidades son para todo el mundo, y sobre todo, que son
enseñanzas muy valiosas, que les servirán a muchas compañías, incluso a las
que le trabajé. De hecho, si alguna persona evita que se me pierda algo de
mucho valor, estaría muy agradecido para siempre. La segunda razón, que
cambié ese estricto criterio, es por este, mi quinceavo libro y el primero de mi
profesión, el cual creo que va a ayudar a más de uno, en la contaduría, a ser
un mejor funcionario, pero también a todos los estudiantes, para que lleven
la auditoría en su corazón, porque la profesión es muy bonita, todos los días
se aprende y cada trabajo sale de lo rutinario y eso lo digo, porque trabajé
mucho tiempo, en el ramo. De igual manera les servirá a centros educativos,
de cualquier lugar del mundo, así como las normas de auditoría, que son
internacionales y aplican en cualquier país, empresa, institución pública, que
las haya adoptado.

Resumen de los procedimientos de auditoría

Voy a exponer un resumen muy corto pero nutritivo, de lo ideal para los
trabajos de la auditoría, por lo tanto, la parte teórica, conceptual, mecánica y
de aplicación a los procedimientos de la Auditoría, se los dejaré a otros libros
y por supuesto que a los centros educativos, las normas internacionales de
auditoría, al informe Coso, a los colegios profesionales y toda aquella
literatura, ley, reglamento, o decreto que se establezcan para la buena labor
de la profesión y después de dicho resumen, voy a comentar la parte práctica,
para que la gente aprenda a través de mis experiencias y cómo fueron los
hallazgos. Gracias primero a Dios y después a mi mente, son cosas que les
van a servir a muchas empresas, instituciones, tanto a pequeñas, medianas y
grandes, en cualquier lugar de nuestro planeta, porque eso es lo bueno de la
auditoría y es algo que es muy difícil de enseñar.
Solo quiero agregarles las siguiente frase para cada estudio de Auditoría:
Todo lo que nos dicen hay que creerlo hasta verlo.

Desde el punto de vista teórico, sin mucha explicación, presento un resumen


de los procedimientos de una auditoría, ya sea esta, financiera, operativa o
especial. No todos los puntos son necesarios para todas, ya que es diferente
cuando se revisa una cuenta de los balances financieros a otros tipos de
estudios, pero eso lo abarcarán específicamente con sus profesores.
1) Hacer una buena planeación, empezando por las cuentas y
operaciones de mayor relevancia y cuantía que asegure la mayor
seguridad a la institución.
2) Análisis y revisiones históricas de lo que se abarque en un estudio.
3) Repaso o estudio de las leyes, reglamentos normas internacionales
de auditoría, políticas de la empresa o institución, manuales, y
cualquier folleto o información que sea necesario para el estudio a
realizar, o por lo menos tener a mano, para aplicarlos o ir consultando
en todos los hallazgos encontrados.
4) Plan de trabajo.
5) Cuestionarios para la parte auditada y así poder ver en forma general
el control interno.
6) Escogencia de la muestra aleatoria, para proporcionar una
razonabilidad del estudio.
7) Ejecución del plan de trabajo.
8) Es recomendable practicar las llamadas pruebas ácidas, para los
estados financieros.
9) Análisis del riesgo empresarial. Esto por ejemplo, si se tiene solo un
congelador en un negocio y este se descompone, entonces el análisis
va enfocado a ese riesgo, como solucionar el problema, para no parar
la producción, ni las ventas, pero también, para minimizar las pérdidas
de los productos perecederos.
10) Revisión de los procedimientos de la parte auditada.
11) Revisión en profundidad del sistema de control interno en la
parte auditada.
12) Cualquier otra revisión necesaria que se descubra en el
presente estudio, pero que sea de mucha importancia para la empresa.
13) Consultas técnicas, o pruebas de laboratorios o de cualquier
otra especialidad que sean necesarias para el estudio en cuestión.
14) Recolección de evidencias suficiente y competente.
15) Cuantificar económicamente el impacto de las deficiencias.
16) Presentación de los resultados de la auditoría y discusión,
primero, con la parte auditada y luego con las instancias superiores.
17) Recomendaciones de ajustes, reclasificaciones o eventos
encontrados de mayor relevancia para la corrección inmediata.
18) Informe y dictamen final.
19) Papeles de trabajo, con la prueba suficiente y competente.
20) Archivo de los papeles de trabajo e informes finales.
21) Seguimiento a las recomendaciones, ajustes o correcciones.
A esos 21 puntos, quiero complementarlos agregando lo siguiente para un
buen desempeño en una auditoría: la experiencia, el olfato, la pericia, la
intuición, leer a las personas, los documentos, el ambiente, y lo más
importante, el reto para el auditor, porque va a tener que aprender no solo su
profesión como tal, sino va a tener que prepararse, por su propia iniciativa, en
otros campos o disciplinas de acuerdo al estudio que se esté realizando, para
evitar ser ignorante o confundido por otras personas, incluso de respetados
profesionales de otras Áreas. Por mi experiencia en el campo, lo pude vivir y
es que no es tan fácil como parece el asunto y lo explico seguidamente:
Algunas veces por miedo, por evitar regaños de sus jefaturas, o por esconder
algo comprometedor, algún funcionario lo quiere desviar a uno del estudio o
lo quieren asustar, técnicamente, por ejemplo, que nos digan que algo urge y
que si los atrasamos se pierde la mercancía, o que pueden parar sus labores y
si pasa algo malo, seriamos nosotros los responsables, del daño. Pero les voy
a poner un ejemplo clásico y otro que era para robar repuestos (y seguro
sucedió a mucha gente) se los cuento a continuación:
Al principio, cuando apenas iniciamos a utilizar las primeras computadoras,
los encargados de Informática nos metían miedo en el uso de los equipos y
siempre nos ponían excusas de sus propios errores, y a nuestras jefaturas, en
todas las áreas, les daba miedo de equipar a toda la gente, porque se creía que
el mal uso, incluso, con un clic mal metido, podíamos estropear todos los
sistemas informáticos, pero el jueguito se les acabó con el tiempo, apenas se
crearon las primeras auditorías de sistemas informáticos y nosotros nos
hicimos más diestros. Para que vean donde llegué como auditor que a los
muchos años y sin ser auditor de sistemas, les demostré manualmente y paso
a paso, como un sistema informático, estaba malo, si, así es, llevaba ocho
años en uso y fui el que halló la anomalía, tanto que de inmediato lo tuvieron
que cambiar ¿No es emocionante, encontrar eso, a un grupo de expertos?, sí
que lo es y no, porque los regañaran, sino por lo que uno puede llegar a
conseguir, como auditor, en un campo tan difícil como lo es la programación.
El sistema era de los cálculos de las mercancías importadas, nada menos de lo
que me había hecho experto, al inicio de mi carrera y por eso no me fue
difícil encontrar los errores, donde en el pasado había hecho uso, de
ecuaciones matemáticas. El sistema tenía errores de cálculo, tuve la paciencia
de hacer las operaciones y compararlo. Los técnicos lo callaron por
vergüenza, el problema era que se estaban sacando mal los costos finales,
pero también fallaron, los encargados de los cálculos de mercancías, tanto el
de las importaciones, como el de la contabilidad, por su mal desempeño y
falta, en el control interno.

El otro ejemplo, sucedió de la siguiente manera: Me encontraba recogiendo


un documento en la caseta de salida y en eso veo un funcionario del taller de
automotores que va saliendo con repuestos y herramientas para brindar
servicio a un vehículo tipo cabezal, sin embargo, en el instante que el oficial
levanta la aguja para que salga y viendo que la revisión que le había hecho al
mismo, fue muy superficial, entonces, le salí al paso y le dije que se
estacionara al lado, que le iba a realizar un inventario de lo que llevaba. Éste,
de inmediato se me negó y enojado me dijo que iba de prisa a auxiliar el
vehículo que estaba varado y que si yo lo atrasaba sería responsable de la
pérdida del producto. Tuve que responderle que sí, que me hacía responsable
y le pedí al jefe o supervisor de seguridad, que lo custodiara al taller, de
regreso, para hacerle el inventario. Lo que pasó es muy simple, llevaba
repuestos que no estaban en la lista autorizada para la reparación de la
unidad, y que no tenían que ver nada con el problema (los estaba sustrayendo,
porque de regreso tenía que entregar los repuestos que había cambiado y al
no estar en dicha lista, pues, se podían perder, por eso era su enojo). El atrasó
duró más, él oponiéndose, porque en menos de 10 minutos lo concluimos y
para un viaje de cuatro horas que iba a recorrer, ese tiempo no era nada, era
solo la excusa, sin embargo de nada valió mi labor, porque su jefatura lo
defendió y nada le hicieron. Algo parecido le hice a un asociado cuando salía
de comprar artículos y se me opuso, pero igual, lo agarré con las manos en la
masa y a ellos (por ser asociados), ningún compañero se les metía, porque les
daba miedo, creo que fui el único que lo hice, pero uno como auditor, no le
debe temblar el pulso, cuando olfatea o ve que está fallando el control
interno, eso sí, tener el cuidado de hacerlo con respeto y autoridad.
Por supuesto que en mi transcurso de la función de la auditoría, hubieron
muchísimos casos, y una cantidad importante que ya no me acuerdo o lo
hago a medias, pero de algo si estoy seguro, que en cada caso siempre le puse
inteligencia, análisis y mucha dedicación, incluso en otras áreas y diferentes
lugares que laboré y siempre aporté muy buenas recomendaciones.
Al principio, allá por el año 1978, la empresa donde trabajaba, llevaban años
con una mezcla de auditoría a priori con a posteriori y por esa época, casi
todo se hacía manual, con máquinas de escribir ya extintas o exhibidas en
museos, o con facturación y liquidaciones manuales, allí las computadoras,
eran nuestros cerebros, los vendedores así como nosotros, nos aprendíamos
los precios de los productos de memoria y eran muchos, entonces era
habitual, estar revisando todas las facturas de crédito así cómo todas las
liquidaciones y todos los días. Por supuesto que se daban muchos errores y
esos, nosotros lo detectábamos y solicitamos las notas de débito o crédito.
Eran cientos de documentos y horas extras trabajadas por toda la unidad.
Cuando llegué al departamento de Auditoría, era la primera persona joven
que aceptaban, apenas tenía dieciocho años, ya que siempre se habían
distinguido en ascender al personal de muy alta experiencia de las áreas de
contabilidad y finanzas, pero gracias a la jefa de Contabilidad de Costos, con
la cual había hecho la práctica de graduación un año atrás, me recomendó y
así inició mi carrera cuando apenas acababa de graduarme como contador en
un Colegio Vocacional.

Prueba suficiente y competente

No pasó mucho tiempo, y un compañero dejó el trabajo de encargado de la


revisión de los cálculos de mercancías importadas y nadie quería, porque se
requería conocimiento y especialización, pero ni lerdo ni perezoso, me
ofrecí de inmediato y allí comenzó mi verdadera vocación en la auditoría,
porque todos los días encontraba muchos hallazgos que representaban errores
económicos y tenía que estar debatiendo con el departamento de compras y
eso fue constante hasta los últimos años, por lo que voy a explicar esta
primera fase, con detenimiento.
Un primer gran error que cometí, fue con la prueba suficiente y competente,
donde obligado, aprendí la lección y nunca más lo volví hacer. El entonces
gerente de las compras, había cometido un error en un documento y de
inmediato hice un memorándum indicándole el mismo, pidiendo su
corrección. Cómo estábamos en el tipo de auditoría a priori, o sea revisando
al momento de las operaciones, esa era la costumbre, y este señor me hizo
una jugada, cambió de inmediato el documento del error y me denunció como
mentiroso. El error mío, fue que no había sacado fotocopia de dicho
documento y por eso me llevé una regañada, pero nunca más iba de dejar de
documentar con la prueba suficiente, mis hallazgos. Entonces y para
cuidarme, de un compañero tramposo, antes de ir a discutir un caso, y
gracias que entre los compañeros teníamos a un analista que a la vez era
profesor de matemática en sus tiempos libres, acudía a él, en algunos de los
hallazgos de errores en los cálculos de mercancías y le pedía a mi amigo que
lo verificáramos matemáticamente y lo planteábamos en forma de
ecuaciones, si demostrábamos que tenía razón, de inmediato procedía a
confeccionar mi informe y realizar los respectivos reclamos, si era lo
contrario, no perdía el tiempo. De allí en adelante, nunca más me
descuidaría, porque un mal, me hizo un bien.

Hallazgos económicos importantes.


¿Error o Negligencia?
No puedo comentar todos los casos, pero si eran muchos que significaban
cifras económicas importantes, en estas primeras etapas de mi vida
profesional y creo que por eso, me gané la exclusividad de participar
muchas veces, en todas las facetas de las compras. Además inicié estudios
universitarios en administración aduanera, por lo que me convertí en un
especialista en auditoría en esos campos.
Algunos de los hallazgos eran los siguientes: pagos erróneos en los
servicios, marítimos, terrestres, aéreos, que se hacían en algunos de los
procesos de las importaciones, donde se les pasaban por alto los reclamos,
otros hallazgos eran la duplicación de pedidos, o sea se equivocaban y pedían
las mismas mercancías, dos y hasta tres veces, así mismo la duplicación de
pagos de servicios y productos, también mercancías que traían vía aérea,
cuyos costos eran significativamente altos y debían hacerse solo para casos
de emergencias, sin embargo, pasaban meses en almacén fiscal, encareciendo
los costos, pudiéndose traer en forma marítima, ya que por mantenerse
embodegados sin nacionalizar el producto, era muestra que no precisaban.
Equivocaciones en pagos de impuestos, también en los pagos de agencias
aduanales que no eran revisados correctamente y no se realizaban los
reclamos a tiempo. Esta parte, solo lo hice en forma resumida pero esos no
fueron uno o dos casos, más bien, siempre se estaban dando y no era fácil
demostrar cada uno, había que abrir los ojos, defender bastante y con
pruebas. Si cuantificara cuanto logré ahorrar, estoy muy seguro que fueron
sumas muy importantes, que detecté con esos hallazgos, más, hay que
sumarle todo lo adicional que se hubiera dado, ya que evitaba que se
siguieran cometiendo esos errores. Les voy a comentar un desacierto como
ejemplo: Se compraron cuatro mallas transportadoras de acero inoxidable,
valoras, cada una, si más no me acuerdo, como en veinticinco mil dólares; de
inmediato me entró una duda de la cantidad de las mismas y su valor, por lo
que le consulté a un técnico del fabricante del equipo, de origen canadiense
que se encontraba en el país y le pregunté qué si era necesario tener varias de
esas mallas, como repuestos, más tratándose de acero inoxidable y lo caras
que eran. Él me acompaño a la bodega, las vio y de inmediato, en medio de
carcajadas, me dijo, que eso era increíble, que teníamos repuestos como para
veinticinco años, y seguidamente me respondió que solo bastaba tener un
repuesto, y que si por alguna razón se llegaba a dañar, algún tramo de la
malla transportadora, a un solo repuesto, se corta el pedazo y se suelda a la
misma. Este caso, no era solo responsabilidad del área de compras, también
lo era del ingeniero que había solicitado comprar las mismas. Esas
equivocaciones eran muy comunes. Por dicha, el técnico extranjero nos
ayudó a solucionar el problema, cambiando las mallas sobrantes, por otros
repuestos que se ocupaban.
Aquí pueden ver dos cosas increíbles, una, el error y la otra, la honradez del
técnico canadiense, como representante del proveedor, que no lo pensó dos
veces para reconocer dicho error de parte nuestra, en la compra, sino, que nos
ayudó también a solucionar la situación, por eso es digno de que quedara
escrito, en las páginas del presente libro, pero también para los estudiantes,
que sepan que hay que tener olfato, cuando hay dudas, hay que preguntar
mucho, y más adelante , me referiré a casos similares pero en abundancia.
Ahora, bien, veamos una cosa muy importante y analicemos este y los demás
hallazgos si se pueden clasificar como error o negligencia. Cabe indicar que
casi siempre sostenía la tesis que era negligencia y como tal, merecía un
castigo, porque se estaba arriesgando los intereses económicos de la empresa,
tal vez puedo parecer un poco duro o de sangre fría, pero si estoy en la
carrera de auditoría, así debo ser y eso se llama objetividad y sinceridad y si
el comportamiento y descuido se daba una y otra vez, la solución debía ser,
la destitución de las personas, triste, pero real. Primero veamos este último
caso y que solo fue un ejemplo, porque se repetía mucho. Entonces me
pregunto, ¿cómo, sin ser ingeniero, pude deducir que eran muchos repuestos
de mallas, para tener almacenadas en la bodega y él, o los encargados, sean
estos, ingenieros de la administración de los equipos, así como el de la
importación y la jefatura de bodegas, no lo hayan visto? Era obvio, en
verdad, no era difícil, solo sentido común.
En muchos otros casos, sucedía parecido, no era una, ni dos veces, era todo el
tiempo, para mí, duplicar pedidos, así como pagos, es absolutamente
negligente, tal vez soy riguroso, pero así debe ser un auditor, las cosas hay
que decirlas como son, al pan, pan y al vino, vino, aunque otros pensaran
diferente y dejaran pasar. Somos parecido a los árbitros de fútbol, pero con la
diferencia que uno no puede sacar la tarjeta amarilla o roja, eso le toca a la
administración, uno solo puede recomendar, bueno al menos eso hacía, pero
en algunos casos sin resultados. Realmente no sé qué pasaba, después que
informaba, ni tenía el poder para hacerlo. Sin embargo, me servía de mucho,
porque también iba desarrollando la habilidad de los hallazgos, cosa que no
es nada fácil, y eso ayudaría, para que en todos los subsiguientes trabajos,
ahorrar millones de dólares a las empresas.

Los Hallazgos

No voy a dar el concepto, porque la misma palabra lo define, pero aquí es


donde viene lo interesante, porque se pueden dar de múltiples formas y desde
nuestras mentes. Por razones obvias, y por todo el tiempo que he trabajado en
la función contable, solo voy a referirme a unos importantes hallazgos, pero
que aun así, significaron económicamente mucho. Antes de continuar, y
gracias a esa habilidad que desarrollé en el campo de la Auditoría, pude
escribir un libro llamado “Nuevos Descubrimientos Bíblicos, Dios es Tan
Maravilloso” y también el nombre describe el contenido, pero lo
extraordinario es, que con las mismas palabras escritas en el transcurso de
cientos de años , por los escribas de Israel, (hace más de dos mil años),
descubrí cosas nuevas en estos últimos tiempos, algo que nunca en la historia,
o al menos que haya conocido, se habían dado y eso que no soy un pastor,
menos un teólogo o doctor en las escrituras.
Por supuesto que Dios es Maravilloso, que dejó un camino listo y tuve la
habilidad de descubrirlo y en parte se debió a mi formación en el campo de la
auditoría y por supuesto en el de los hallazgos. Se los recomiendo, es muy
importante lo que hallé.
Vean hasta qué punto llegué, con el tema de los hallazgos y es que creo que
todos los que tenemos años en el área, nos desarrollamos fácilmente. Y vean
este primer caso:
Hace como 31 años le dije a mi jefe inmediato y sub-auditor general, en ese
entonces, lo siguiente “Don (fulano), cuando los compañeros revisan una
conciliación bancaria, no se trata de revisar si cuadran o no las cuentas, sino
lo que hay que analizar es el por qué un cheque se cambia un mes después o
seis meses, ya que una persona no puede ver que tiene una peseta, porque
corre por ella”,

Cabe indicar que a mí no me tocaba hacer esa labor, nunca, que me acuerde,
había revisado una conciliación bancaria, solamente, en la era de educación,
pero ese hallazgo nació de pronto, primero en mi mente, y después fui y se lo
comenté a mi jefe, sin haber revisado absolutamente nada, es algo mágico
que cuesta explicar.
Inmediatamente, don fulano, llamó a don zutano, compañero encargado de
conciliar y le pidió las conciliaciones bancarias actuales y no tardamos ni un
minuto, cuando comenzamos a ver, que habían cheques cambiados con
fechas muy tardadas, desde varios meses hasta más de un año y por supuesto
que allí mismo habíamos encontrado un robo de cheques. Como otro de los
jefes, era presidente de una cooperativa de ahorro, también de inmediato, hizo
una revisión a las conciliaciones a la misma y de igual manera, en menos de
un minuto descubrió lo mismo. O sea, mi intuición fue como una piedra que
mató dos pájaros de un tiro y lo peor, el gerente de dicha cooperativa, era
evangélico, cristiano, practicante, pero de igual manera estaba robando, ¿Qué
clase de ejemplo? Y como dice el famoso dicho, perro que come huevos, ni
quemándole el hocico, porque después que lo despidieron, me di cuenta que
había hecho algo similar en otra empresa.
A pesar de haber concebido tal hallazgo, y eso, que habían pasado muchos
años y nadie lo había hecho, a mí me apartaron de la investigación, porque no
era mis funciones , pero ya todo estaba servido, sin embargo, mis jefaturas
detectaron que los cheques cambiados y que habían sido sustraídos, el que
los hacía efectivos, siempre era el mismo cajero (funcionario de tesorería que
maneja los dineros que ingresan a la empresa), entonces le insistían una y
otra vez que declarará la verdad, que se había robado los cheques, y este
compañero asustado y preocupado me comentó que él era inocente, que
jamás había sustraído un solo cheque, entonces aquí viene algo muy
interesante, no todo lo que parece es, ni todo lo que es parece, jajaja, acaté a
decirle que revisara sus procedimientos, que pensara que pudo haber pasado.
Al día siguiente, el compañero, llegó a la Auditoría, con la respuesta que lo
libraba de la acusación y en verdad, era totalmente inocente, el que
realmente se los estaba robando era su jefe inmediato, un queridísimo
compañero por toda la institución, con un largo historial de trabajo, que una
vez que adulteraba el endoso de los mismos, se los daba al muchacho, para
que se los cambiara. Este funcionario de caja, después de más de 30 años,
todavía sigue laborando en la empresa. Cabe indicar, que a mí no me
importó quien haya concluido el trabajo, porque el hallazgo fue de inmediato,
solo faltaba cuantificar cuantos cheques y montos fueron sustraídos, de
hecho, en muchos de mis trabajos se omitieron mi firma, pero siempre serán
mis hallazgos y nadie me los puede quitar, fueron mis retos y mi orgullo,
palabra de hombre que así fue, Dios es mi testigo.

Documentos sin tachaduras ni borrones

Cuando las órdenes de compra se confeccionaban en las antiguas máquinas


de escribir manuales, observé de casualidad una orden de compra que tenía
tachada con corrector el nombre del proveedor y encima tenía anotado otro
nombre, de inmediato, y como ya me estaba haciendo un buen experto en el
área de compras, busqué toda la documentación relacionada, tal como: la
licitación y las respectivas ofertas, la adjudicación y todos los pormenores y
me di cuenta, que la misma, había sido adjudicada a otra firma, y que dicha
tachadura no era ni más ni menos que una adulteración de parte de un
funcionario de dicha dependencia. Lo que él hacía, una vez que todas las
jefaturas, de todas las áreas involucradas en la compra, sean estas las
técnicas, las de proveeduría, así como la gerencia general aprobaban la orden
de compra, de acuerdo a los resultados de la adjudicación, este funcionario,
adulteraba el nombre y la empresa que había sido adjudicada, quedaba por
fuera, haciendo que otro proveedor, participante, suministrara las mercancías.
Cabe indicar, que gracias a este hallazgo, pude comprobar el primer caso de
cohecho, de los muchos otros que descubriría. No solo es muy importante
aclarar esto, porque por desgracia, el cohecho es uno de los flagelos más
difíciles de detectar y una de las prácticas más usadas en todo el mundo, en
todo el comercio mundial. Todos los días, vemos casos gubernamentales, no
solo en nuestro país, si no en muchos, tal como podemos ver el Brasil,
Ecuador, México, Perú, con estos últimos sucesos de corrupción que han
surgido a la palestra, tales como en con las empresas y sus afiliadas de
Petrobras, así mismo lo que se presentó en nuestro país, en la CCSS, el ICE,
la Trocha y quién sabe cuántos miles de incidentes más, que desconocemos,
por lo difícil de comprobar, quedan totalmente ocultos. Sin embargo, las
empresas, no son exentas de esta situación y es uno de los rubros que más
encarecen el costo de vida y este caso que trataba de una tachadura y borrón,
era ni más ni menos para cometer un cohecho.
Si bien es cierto, ya no se hace ninguna orden de compra en máquina de
escribir, el peligro ahora es mayor, porque hoy día existen múltiples de
programas, que pueden corregir una hoja en PDF y nadie notaría que
hubieron tachaduras y borrones, de igual manera, correos , y otro tipo de
documentos, pueden ser adulterados.

Falsificación de documentos y firmas

Este tipo de caso es muy difícil, ni más ni menos, descubrí que habían
falsificado un documento de gran valor económico, y se dio de la siguiente
manera: Revisando una liquidación de ventas de productos de una sucursal,
encontré un documento de devolución de productos que aplicada a la
misma, rebaja el monto del resultado económico final. Me quedé viendo el
papel, fijamente, aproximadamente entre unos quince o treinta minutos, algo
no me sonaba y sospeché que era una falsificación y no me equivoqué, al
final determiné que dicha devolución, definitivamente había sido falsificada.
No lo pensé dos veces y de inmediato, me puse de pie, fui a buscar a las
personas que les tocaba firmar las devoluciones de mercancías, donde
hacían constar que habían recibido dichos productos y por supuesto, que
también al personal de control de calidad que tenían que autorizar las
mismas. En ese instante, pude comprobar que tanto sus firmas, como los
sellos utilizados, por cada una de las dependencias, los habían falsificado.
Ahora bien, la pregunta es: ¿Cómo descubrí que era una falsificación?, de
hecho, alguien me da un billete falsificado y a lo mejor no me doy cuenta,
con mucho más razón una hoja de papel boom, común y corriente donde
venían impresos el detalle de los productos, y nunca, de las cientos o miles
de liquidaciones de ventas que revisé, en bastantes años, jamás se me había
ocurrido cuestionar una. No sé, ni me lo explico, solo lo sentí desde que
agarré el documento, que era falsificado, es algo increíble, porque no era un
papel de seguridad. Hallé el asunto y otros compañeros continuaron la
investigación, pero el trabajo ya estaba hecho, fue mi hallazgo, nadie me lo
quita y todavía lo peleo, aunque sea, en este pequeño libro.
Después me di cuenta, cuando fueron a interrogar, al gerente de la sucursal,
que él mismo, salió corriendo a botar los sellos y las impresiones al cráter de
un volcán cercano, para desaparecer pruebas, en caso de demandas judiciales
y por supuesto, que fue cesado de inmediato (No entiendo cómo permitieron
o le avisaron, para que este señor tuviera tiempo de deshacerse de pruebas
vitales, porque lo correcto era que lo sacaran de las instalaciones,
debidamente custodiado, para evitar que no sucediera eso). La verdad que ni
llegué a conocer al señor, pero solo piensen, cuánto dinero nos hubiera
seguido robando y cuando sustrajo en el pasado, si no descubro dicha
anomalía, tampoco sé si lo demandaron, tanto a él, cómo a los que
confeccionaron los sellos. Esta peripecia, es un genuino descubrimiento por
olfato, mínimo me merecía un trofeo de honor, ¿Qué creen ustedes? jajaja,
es una broma lo del trofeo.
Estafadores foráneos

En las empresas, algunos funcionarios o asociados, de todo rango aprovechan


la amistad o cercanía con los gerentes, o directores, para dar órdenes en
nombre de ellos, sin que estos los sepan, por ejemplo, pedían algo y decían
que Fulano lo había ordenado, para presionar que le suministren lo que
quieren a la mayor brevedad, pero eso también es aprovechado por la
delincuencia. Descubrí en varias ocasiones, cómo, algunos delincuentes,
habían traspasado la seguridad de la empresa para cometer estafas. Comento
tres de ellas. Un estafador nos metió un cheque falso (robado de una
chequera), el mismo, llamó por teléfono a la empresa y sabía el nombre del
gerente financiero y le dijo: ·yo soy Zutano (socio importante de la empresa),
el señor presidente, don Fulano, me dijo que lo llamara a usted para que me
cambie un cheque en dólares”, al escuchar esto, nuestro funcionario le dijo
que con mucho gusto y giró las instrucciones para que lo atendieran en forma
inmediata y el estafador dijo que iba a enviar su mensajero (él mismo llegó,
tranquilo y normal, sin miedo alguno) no dudaron y en menos de media hora
el tipo se fue con el dinero. Por dicha el monto que utilizó era de prueba, no
era de gran cuantía, sin embargo, siempre les logré descubrir el asunto a
tiempo (porque lo tenían escondido, por la torta que había pasado, más
tratándose que habían engañado a un alto ejecutivo), pero gracias a eso, no
pasó una semana, cuando el tipo volvió a hacer lo mismo, ya venía con dos
cheques de sumas importantes y así logramos atraparlo en el momento. Otros
2 casos similares se dieron de esa forma, uno llegó a la recepción y dijo que
iba para donde Perencejo y lo dejaron pasar, y este salió con computadores,
teléfonos y otras cosas que se robó tranquilamente. Otro más, preguntó por
Mengano y a este lo estaba envolviendo en un negocio que realmente era una
estafa, y por poquito la hace, porque llevaba muy bien estudiado el tema, el
negocio y hasta los amigos de Mengano. Hay muchas cosas importantes que
tal vez todo el mundo conoce y no así la gerencia general o las juntas
directivas, como por ejemplo, estos casos, donde se acostumbran a utilizar
sus nombres sin que ellos sepan.

Inventarios

Creo que los inventarios, o más bien inventariar es una de las labores más
comunes en las auditorías, y por supuesto que siempre van a existir faltantes
y sobrantes, pero hay cosas importantes que analizar, hay que hacerlo más
allá de lo tradicional, como ver los movimientos, observar los tiempos, de
adquisición, ver el patrón o comportamientos, por ejemplo: Existen familias
de mercancías, o de productos envasados en onzas, cuartos, litros, galones,
en fin, cuando uno hace un inventario encuentra errores que se dan por
confusiones, físicamente o en los registros, unos con otros, pero aunque
generalmente, sucede porque en verdad fue un error, donde pueda que falte
un litro de agua pero sobre 1 galón de agua, sin embargo, cuando hay un
patrón o indicio que se está haciendo un manejo intencionado para sacar
algún provecho, constante y principalmente con productos de mucho valor
(porque el producto que falta es de gran valor y el que sobra es de menor,
pero no solo en uno, sino en varios productos), también puede significar un
indicio que se estén aprovechando con ese tipo de manejo y no sea un error.
Otro hallazgo importantísimo, fue la localización de repuestos con fechas de
ingresos de bastantes años, incluso, encontré bodegas enteras que no habían
tenido un solo movimiento, en más de veinte años, pero también otras
bodegas con repuestos de máquinas que ya no se usaban, igualmente muy
antiguos. Estos, aunque sea como material tenían valor, ya que algunos eran
de acero inoxidable, o similares, los cuales se les podían sacar un provecho
económico, refundiendo o vendiendo los mismos, pero aquí viene otra
deficiencia, los mismos, también ocupan espacios, mientras por otro lado,
estábamos alquilando bodegas, entonces almacenar los mismos también nos
generaba un gasto. Estos tipos de análisis, son muy importantes, aunque los
técnicos me daban algunos argumentos, principalmente para defenderse,
diciendo que si las máquinas se descomponían y no tenían el repuesto a
mano, por esa razón, se podía afectar la producción y darse millones de
pérdidas, por lo que tardaría traer un repuesto. Entonces, prácticamente, se
estaba comprando una máquina para producción y otra en repuestos. Por
lógica es aceptable los argumentos, pero no todo el tiempo era así, también
se daba por falta de conocimiento y otros casos por negligencia o incluso
por sustracciones, más cuando eran repuestos de vehículos. También, hoy
día, con la velocidad de los tiempos, es más fácil tener un repuesto de un día
para otro.
Otro caso de negligencia, es el siguiente: realizando un inventario, divisé
algunos envases que se habían enviado a manufacturar, para un producto
nuevo, pero este nunca se había sacado a la venta. Resulta que estos no eran
muestras, eran cantidades importantes, que se compraban, pero después
cambiaban de opinión y no sacaban el producto, originando gastos
importantes, en las compras de envases, para luego botarlos a la basura,
porque no servían para nada.
Un caso más: Faltantes importantes en las Estaciones de Combustible. Este
era un dolor de cabeza, por más controles y por más inventarios que se
realizaran a estas, siempre había faltantes importantes. Nosotros utilizábamos
tablas diseñadas por los ingenieros, con las medidas que indicaban la
cantidad de combustible que había en el tanque y ellos aseguraban la
infalibilidad de las mismas, pero a pesar de que los ingenieros me decían ese
argumento, pregunté a la refinadora qué se podía hacer, para verificar la
misma y al mismo tiempo para verificar que los tanque de combustible no
tuvieran fugas que estuvieran causando los faltantes. Después de negociar y
sin costo alguno, ellos procedieron a colaborar y nos dieron el apoyo para
vaciar los tanque uno a uno y así sucesivamente, revisarlos después llenarlos
poco a poco, en tarros de cincuenta litros. De esa forma se confeccionaría una
tabla en forma manual y a la vez constatar, descubrir o averiguar, lo que
realmente sucedía. Mi idea no fue fácil, el trabajo era contra reloj y había
que pasar turnos largos, porque se vaciaba el combustible en dicho tarro,
esperamos un tiempo para que no se moviera el líquido y metíamos una
varilla para medir y apuntábamos el resultado. Nos llevamos algunos días
llenando el tanque, con funcionarios de esa Institución, pero al final,
logramos determinar, primero: que las tablas estaban erróneas, segundo: que
los encargados de las Estaciones, ya no iban a tener escusas por los faltantes,
y ellos sabían que los hacíamos responsables de los mismos, porque no era
difícil controlar el inventario.
Sin embargo, aunque eso no aseguraba que no fuera a desaparecer el
combustible, porque existen otras posibles formas de sustraerlo, ya por lo
menos, bajaron considerablemente los faltantes, al final de este estudio,
tampoco firmé el informe, y en mi lugar lo hizo otro compañero, jajaja, pero
también, quiero afirmar de nuevo, palabra de hombre, que fue mi iniciativa
y mi trabajo. Recalco esto, porque las ideas de uno, deben de ser totalmente
respetadas, así como las regañadas, cuando uno comete un error, y más que
estábamos en defensa de la compañía, pero también, nadie había hecho
nunca, ese trabajo, ni tampoco en el futuro, ni siquiera las jefaturas de las
Estaciones de Servicio, y menos gratuitamente, tal como conseguí no solo
personal experto de la refinadora, sino, camiones cisternas de combustible,
exclusivos y estacionados, en todo el proceso, para vaciar poco a poco, hasta
llenar nuestros tanques, aquí no hubiera pedido una medalla, sino un día libre,
jajajaja, también es otra broma, lo del día libre.

Control consecutivo numérico de facturas y recibos


Voy a comentar dos casos muy graves que descubrieron dos colegas, gracias
a una auditoría del control del consecutivo numérico de las facturas y los
recibos. En ambos eventos se descubrieron estafas muy importantes,
realizadas por funcionarios de confianza.
El primer caso fue muy difícil y digno de felicitar al colega y aunque se
remonta hace unas décadas, me acuerdo como si fuera hoy, porque el que
hacia la estafa fue muy ingenioso y lo hacía solo, pero el que la descubrió
fue más astuto. Resulta que un funcionario se encargaba de exportar
productos a un país suramericano y enviar la mercancía, una vez que le
emitían el pago respectivo, para ese entonces en cheque. De inmediato, él
procedía a confeccionar la respectiva factura, la cual junto al cheque, la
llevaba a la unidad de tesorería y allí procedía a cancelar la misma con dicho
cheque, por lo que el funcionario de cajas, la sellaba y firmaba, con sus
respectivas copias y con eso se cancelaba la venta o exportación de los
productos. Después, el mismo funcionario, como jefe de exportaciones que
era, iba con la copia sellada por el cajero a retirar los productos y los enviaba
al cliente en dicho país, con la factura original. Hasta aquí, el proceso es muy
sencillo, práctico y normal. Ahora viene la trampa. El jefe de exportaciones,
en vez de un juego de facturas, emitía dos juegos y agarraba la copia del
segundo juego, que correspondía para retirar el producto en la bodega y la
introducía al primero, por lo que este documento lo llevaba a tesorería, bajo
el mismo procedimiento, presentaba la factura y el cheque y el compañero de
cajas, procedía automáticamente, a estampar el sello y firma en la factura
original y las demás copias, como siempre lo hacía, por lo que en esta
oportunidad, quedaban dos copias para retirar el producto con el dicho sello y
firma, aunque solo estaba pagando una. Entonces el señor procedía primero, a
sacar con una copia la mercancía y la enviaba al exterior y con la otra copia
retira de nuevo el producto y se lo robaba. Posteriormente, el segundo juego
con el original y demás copias, excepto la que uso para duplicar y hacer la
estafa, le estampaba el sello de anulado y listo. Realmente era muy audaz, y
por supuesto que el cajero o funcionario de tesorería por la costumbre, la
forma automática, además de la rapidez, de sellar hoja por hoja, era muy poco
probable que descubriera dicha situación, pero, mi amigo y colega si lo hizo,
con una revisión del consecutivo numérico, sin embargo no fue nada fácil,
porque a la hora de revisar el mismo, al hacerlo, se iba a encontrar con el
documento anulado y le pudo pasar igual al cajero, que al ver el mismo, lo
considerara normalmente, pero aquí viene la habilidad del auditor, el olfato y
su visión de trabajo, él revisó que la factura anulada, estuviera con todos los
tantos de las copias completos y el hallazgo de que faltaba la copia del retiro
en bodega, descubrió la estafa que era por varios millones, ya que no era la
primera vez que lo hacía y en una exportación a otro país es por cantidades
considerables. De mi amigo y colega me acuerdo perfectamente el nombre y
para mí, merece un gran premio, porque le ahorró, millones de dólares a su
empresa, pero estoy seguro que ni las gracias le dieron. Es lo cruel e injusto
de la profesión, y aunque no crean, he visto casos donde más bien premian,
con ascensos o aumentos a funcionarios negligentes, que descuidaron el
control interno o permitieron situaciones que dejaron grandes pérdidas a las
empresas. El segundo caso es el siguiente: Otro funcionario encargado de
cobros a clientes, se puso de acuerdo con el cobrador (mensajero que va a
retirar los pagos) y al igual que el anterior, emitían los recibos de pago, luego
se dejaban, principalmente el efectivo que cobraban y anulaban los recibos de
dinero o los desaparecían. El compañero que hizo la revisión del consecutivo
número, los descubrió y pudo comprobar la estafa, lo cual, también merece
una felicitación, por lo complejo y forma que se hacía, más cuando hay
cómplice de por medio. Pero cuando se llevó a juicio, su empresa perdió la
demanda, a pesar de contar con pruebas, testigos y entrevistas gravadas,
donde aceptaron los hechos. Eso es otro problema, porque ya sea por
negligencia en el juicio de parte de los abogados de la empresa o porque los
jueces fallan en sus condenatorias, salen libres de culpa personas que fueron
descubiertas en delitos. Como anécdota, el sujeto hizo lo mismo en otra
empresa, pero igual, totalmente impune. Creo que ningún recibo dinero debe
aparecer anulado o desaparecido, es muy peligroso y si se hace, debe este
estar en blanco, con todas las copias y muy justificado.

El auditor debe estar siempre atento

Todo funcionario de auditoría, debe estar siempre atento y alerta, tal vez
sea la primera vez que escuchen esto, y talvez nunca lo aprendan en los
centros educativos, pero quiero mostrarles dos casos uno con el alquiler
de camiones y otro con el manejo de piezas viejas y chatarra, para que
entiendan lo que les estoy afirmando, pero también se da en muchísimas
otras situaciones.
El primer caso, que quiero comentarles, es el siguiente: Venia de regreso de
una zona rural donde andaba junto con otro compañero, pero novato, porque
recién había entrado a trabajar y en ese tiempo andábamos en autobús, pero el
servicio era pésimo y las horas de viaje eran muchas, para ese entonces, pero
cuando iba pasando un camión, se me ocurrió pedirle que si nos podía
encaminar, ya que era mucho el sol y solo había como dos autobuses por día.
El señor no lo pensó dos veces y nos dio transporte, pasamos todo el trayecto,
conversando y conociéndonos, entonces él se dio cuenta que éramos
funcionarios de auditoría de la misma compañía donde él alquilaba algunos
camiones y de inmediato contó, que estaba molesto, porque dos personas, les
cobraban a los transportistas una suma de dinero importante, para poder
alquilar los camiones y después una mensualidad, constante y sonante. De
inmediato le dije que eso era un abuso y que él no necesitaba hacer eso, le
pedí todos los datos, teléfonos y su ayuda para parar dicha corrupción y el
señor aceptó hacerlo. Cuando llegamos donde nuestras jefaturas, le contamos
todo lo relatado, llamamos al señor y él llegó a la oficina y también aceptó los
hechos, pero dijo que iba a llevar las pruebas, demostrando los pagos
respectivos. Todo iba muy bien hasta que este, volvió a llamar y manifestó
que mejor no hacía nada, porque era sobrino de un director y que en verdad
no quería verse involucrado. Hasta aquí quería contarles la parte de estar
atento.
Uno, en auditoría, nunca debe dejar pasar una información tan importante,
donde se están dando casos de corrupción, por eso apenas escuché lo que el
caballero contaba, procedí a hacer lo correcto, informar, además éramos dos
testigos, cuando él lo dijo, lástima que desistió del caso y que nuestras
jefaturas no pudieron hacer nada, por los dos tipos denunciados, ya que
duraron años trabajando y ocupando puestos de confianza, que seguro se
aprovechaban de la forma que nos habían contado y por mucho tiempo. Aquí
la pregunta, en cuanto al caso, sería la siguiente: ¿Qué hubieran hecho
ustedes, como auditores? Y es que tal como lo dije al principio, el cohecho,
es muy difícil de comprobar, porque se necesitan pruebas, y generalmente
las sumas que se pagan se hacen a escondidas, sin embargo , yo si tengo una
respuesta, primero, ya existían pruebas, porque al contarnos la historia,
habíamos al inicio dos testigos y con eso es suficiente para levantar un caso
en la corte, y cuando él lo confirmó, con mis dos jefaturas, también habían
dos testigos más, entonces, este era un caso que debió: pedirse la destitución
de ambas personas, aunque hubiese que pagarles todos sus derechos
laborales, porque eran de alto riesgo y segundo, se debió llevar el caso a
junta directiva, de hecho, el tío del señor era una persona íntegra,
trabajadora, de grandes valores y no hubiera permitido la más mínima
sospecha, porque también era furioso con las injusticias.
El segundo caso, lo explico a continuación: Me encontraba en un Taller
Automotor, pero de pronto veo un contenedor y pido que me abran el mismo
y observo que estaba supuestamente lleno de chatarra o repuestos que eran
quitados de los vehículos, como me dio una corazonada, no lo pensé dos
veces, para pedir a mis jefaturas, permiso para realizar un inventario de lo
que se encontraba allí y por dicha siempre me apoyaban cuando les solicitaba
algo, bueno, ya me conocían. En verdad era horrible, estar varios días
metidos en el contenedor, sin aire, caliente y lleno de polvo, similar a un
basurero, no era nada bonito, pero, trabajo es trabajo, la sorpresa fue
mayúscula, y es que entre toda la mezcolanza de repuestos, habían muchos,
totalmente nuevos y otros no tanto, pero estaban buenos, y sin control alguno,
sin inventario de los mismos, sin estar incluidos en los registros contables, en
fin, fueron muchas las deficiencias encontradas. Resulta que se compraban
directamente repuestos, en pequeñas cantidades, sin control alguno sin
incorporarlo a los inventarios y pude determinar que algunos funcionarios
recibían comisiones, por todo lo que compraran, pero no era la primera vez
que esto sucedía. Además localicé repuestos a la intemperie y de segunda,
por su tamaño los mantenía allí, pero cuando busqué la información de los
mismos, eran repuestos importados y que habían costado tres veces más caro
que su valor en el mercado interno, en fin era una fiesta, completa.
Por eso me quería referirá esos dos trabajos, para explicar, que un auditor
debe de tomar la iniciativa, cuando así lo considere necesario, aunque el
asunto, no esté en el plan de trabajo.

Objetividad del auditor

La objetividad del auditor, deber ser la consigna, constante y sonante durante


toda su vida, nunca se debe suponer, siempre hay que comprobar las cosas,
ser sincero y nunca echar todo para un solo lado, debe ser justo, para todo el
mundo, cuando hay que denunciar hay que hacerlo, pero cuando hay que
defender, también .
Las personas buenas tienen ángeles que los cuidan, pero otras personas, se
aprovechan de los “Santos Protectores”.
Se me acaba de ocurrir esta frase, pensando en la suerte que tienen algunas
personas, o proveedores, que le están causando daño a las empresas o
instituciones y que en vez de quitarlos, se quedan trabajando o proveyendo, y
en algunas oportunidades los ascienden o les aumentan el salario, en el caso
de trabajadores. En primer lugar, si un empleado o proveedor, se les descubre
robando, sustrayendo, estafando, cohecho y todo tipo de fechorías, así mismo
si abusan o despilfarran los recursos, también si se comportan negligente en
forma constante, este debería ser cesado de inmediato de la organización, sin
embargo, esto no se da todo el tiempo y he visto, más bien como a varios, los
premian en algunas ocasiones. El auditor, debe ser firme en sus
recomendaciones y nunca anteponer la amistad, ni la política, ni alguna otra
situación o ligamen, simple y llanamente, debe de inmediato, pedir la
separación de este tipo de funcionarios y la no contratación de proveedores
que generaron problemas. Generalmente, trabajando en la auditoría interna,
se llega a conocer a muchos compañeros y como todo lugar, al tiempo nos
convertimos como en una familia, donde se hacen muchos amigos, pero en
los casos que les comenté, siempre debe ser objetivo, y no solo eso, sino
insistente, de que se cumpla.
De mi parte, siempre me mostré firme, pero también apoyé para aquellos
casos que fueron por errores o circunstancias, que sin ninguna mala
intención, causaron algún tipo de problema, siempre y cuando se corrija de
inmediato.
Y aunque no crean, entre más grandes sean los rangos, estos se hacen más
intocables y sino miren lo que pasa en el mundo, son pocos los presidentes,
que se comportan como el actual del país de Perú, excelentísimo don Pedro
Pablo Kuczynski, donde pide mano dura a todos los corruptos, quienes sea
estos, sin importar rango. Esperemos que lo logre, de viaje se ve que es un
señor íntegro.

Defender a los auditados

No hay que jalar solo para la empresa, si hay que también defender a los
auditados, cuando son inocentes. De esto quiero contar dos pequeñas
anécdotas, muy importantes, para que los estudiantes lo tomen en cuenta:
Nos llegó la denuncia de parte una jefatura, que habían recibido información
muy certera de un subalterno donde había descubierto a otro compañero
robando. Ellos estaban totalmente decididos a despedirlo, y el caso me llegó a
mí. Primero fui donde él lo entrevisté y le advertí que si era culpable, no lo
podía defender, pero que si era inocente por supuesto que sí. Entonces
comencé la investigación de cada uno de los puntos que lo acusaban, y todos
absolutamente todos, eran infundados, la acusación era un chisme, una falsa,
lo probé uno por uno. Después me di cuenta que la persona que lo acusó
había hecho lo mismo con otros compañeros a los cuales despidieron por lo
mismo, difamaciones, y eran gente inocente y humilde que nada tenían que
robar, en fin, por lo menos lo salvé a pesar que su jefatura aun presentando
las pruebas de descargo siempre lo quería despedir. Cuando veo personas de
este tipo, que le hacen daño a sus compañeros, primero lo hubiera sancionado
por difamar, segundo, me le pongo al corte porque algo raro esconde, lo que
pasa que no me lo permitieron.
Defendí a otro funcionario para que no lo despidieran, pese que en unas tres
oportunidades que le hice una auditoría salió con más de veintisiete
deficiencias, y ya lo tenían listo para proceder con su cese. Aproveché la
oportunidad de una reunión, donde participaban cuatro miembros de la junta
directiva y les hice saber, que si bien era cierto que tenía muchas debilidades
a nivel administrativo, él, como profesional en su campo, era muy bueno, y
esto a pesar que su antecesor jefe, como en cuatro o cinco oportunidades, en
diferentes reuniones, lo acusaba como un funcionario inútil, que no servía
para nada. Sin embargo, no influyó en mí, para defenderlo, ya que apelé a mi
objetividad, porque en ese momento pensaba que era injusto, sin embargo, en
otro estudio que me tocó realizar, descubrí algo nuevo y muy importante,
resulta que para la contratación de una obra, mediante el método de licitación,
él invitó a participar a una empresa, que nunca había tenido experiencia en
dichas labores y cómo fue una de las más bajo costo, salió ganadora del
concurso, pero, el trabajo final no fue aceptado, debido a que no sirvió de
nada.
Para empezar, esto fue una falta grave el hecho de invitar a alguien que no
tenía la experiencia, (la comisión adjudicadora de tal licitación, no se había
dado cuenta, porque el adjudicado tenía muchos años de ser proveedor, pero
de otros servicios), entonces, cuando se evaluaron a todos los oferentes, una
cosa confundió la otra, pero el funcionario si sabía que esa empresa era la
primera vez que iba a realizar ese tipo de trabajo contratado, y no lo advirtió,
ni siquiera debió haber sido invitado a participar. Esto, no fue todo,
investigué el asunto porque la gerencia general me había encargado que le
ayudara a examinar los hechos que se estaban presentando, pero ya era muy
tarde, se había cancelado el 80% de la obra, a pesar que esta no había sido
recibida a satisfacción y era cierto que tenía muchas deficiencias y fue un
error adelantarle dinero, porque eran cientos de millones, botados a la basura,
entonces, para evitar cancelar el otro 20% y analizando con los abogados,
logramos que nos firmaran un finiquito del contrato establecido, para por lo
menos, no perder el restante, a pesar que para mí, debió reclamarse el dinero
cancelado, sin embargo, nuestros abogados decían que era muy difícil, creo
que por haber pagado, era haber aceptado una parte del trabajo como
satisfactorio, entonces, una demanda era muy riesgosa. Si hubiera conocido
de antemano esta situación, no hubiera podido defender al funcionario para
que no lo cesaran en su oportunidad
Moraleja, tal vez hay algunos que no tienen santos o ángeles, que los
protejan, pero tienen suerte. Y pensar que conocí a un cajero que lo
despidieron por agarrar mil colones de la caja.
Quiero recalcar, que los casos que estoy enseñando, para efectos
didácticos, son una pequeña parte de mucho que aporté en mis labores
de auditoría, pero como son difíciles y significativos, pienso que les
puede servir de mucho a las personas que tengan poca experiencia. De
hecho, la mejor forma de aprender en el área de la contaduría, incluso de
otras carreras profesionales, es mediante de la exposición de casos.

Auditorías de compras, licitaciones, cotizaciones

Ya que toqué el caso de licitaciones, quiero comentar un poquito más el tema,


aunque también muy escuetamente, porque en esta parte, casi siempre me lo
dejaban a mí, por la habilidad que había agarrado en esa materia y los
descubrimientos o deficiencias que una y otra vez encontraba.
Voy a dar antes, una breve explicación:
Tanto para las empresas privadas, cómo públicas, los procesos son muy
similares, en las primeras se establecen reglamentos y políticas de compras y
en las segundan también pero existes las leyes y reglamentos de la
contratación pública, así como leyes y reglamentos de la administración,
control interno y por supuesto de la regulación del enriquecimiento ilícito y
muchas cosas más, escritas en miles de hojas y de gran calidad, pero para
efectos de este libro voy a explicar simplemente como funciona el asunto,
para todas. Existen varias formar de comprar las mercancías o activos y
generalmente se categorizan estableciendo montos para cada una de ellas, así
como la prioridades o casos de emergencia, o por ser un producto o servicio
único o exclusivo.
Por ejemplo, si una compra es de muy bajo costo y de algo que solo se va a
ocupar en ese momento, y cuyo artículo o repuesto no se encuentre en
bodegas, pues para eso se establecen montos mínimos y se puede comprar sin
cotizaciones o licitaciones, ejemplo algún accesorio o repuesto de un carro,
o el tubo del baño. Se establecen cajas chicas, para cancelar estos de
contado. También se establecen sistemas de compras mediante el método de
cotizaciones, donde casi todas, instituciones públicas o privadas, establecen
un mínimo de tres oferentes, y se le adjudica la que cumpla todos los
requisitos, tenga la mejor relación entre precio, calidad, servicios. Esta
modalidad de compras, se utiliza para montos establecidos importantes, pero
hasta cierto tipo de tope, el cual debe ir variando con el tiempo y la inflación.
De igual manera se hace con los métodos de compra por licitaciones y estas
son por montos muy importantes. Aquí generalmente se invitan a cinco o más
proveedores dependiendo de la empresa o institución y dicha invitación
puede hacerse privada o publicada en medios de prensa. En algunas partes se
piden en sobres cerrados y depositados en un buzón, y se abren el día de su
vencimiento o apertura de las mismas mediante un acta, donde estén
presentes, funcionarios del área de compras, del departamento interesado y
un delegado de la auditoría o de la gerencia general. En fin, de acuerdo a los
procedimientos establecidos las licitaciones se hacen para las compras de
vehículos, maquinaria, carreteras, puentes, materias primas, envases e
infinidad de activos.
También existen compras por contratos, por ejemplo de productos o
proveedores únicos o exclusivos, o para solucionar emergencias, tal vez
porque son los únicos que venden determinado producto, o que por su
naturaleza solo se puede comprar en forma directa y exclusiva, sin ningún
procedimiento de cotización o licitación, o porque se descompuso una
máquina de producción, un ejemplo, puede ser la compra de combustible.
Otro ejemplo puede ser la compra de un libro, cuyo autor tiene los derechos y
es único, ya que él lo escribió, pero para un centro educativo es un libro de
lectura necesaria, ejemplos tales como: Don Quijote de la Mancha, de
Cervantes, todo un clásico mundial o las Concherías de Aquileo J Echeverría
Zeledón, escritor nacional y extraordinario. Para estos tipos de compras,
generalmente se hacen listas o informes de proveedores en estas categorías y
se van revisando periódicamente. Todo hasta aquí muy bonito, bueno,
ordenado y práctico, pero era necesario esbozar con muy pocas palabras el
sistema de compras de bienes y servicios, no solo para el país, ya que es muy
similar en casi todos los países del mundo. Existen leyes y reglamentos que
regulan muy bien el tema, pero ahora lo voy a explicar desde el punto de
vista de la experiencia en la auditoría:

Antes, quiero comentar lo siguiente, un amigo y compañero de la maestría en


comercio internacional, llamado William, el cual, desde muy joven fue un
gran emprendedor, exportador, y comerciante, decía en la clase lo siguiente:
“profesor, en el comercio no existe ética, gana el más audaz”, y eso se lo
decía a casi todos, incluso al profesor de ética. Tal vez los profesores nunca
le dieron importancia a sus comentarios, por una simple razón, estos a pesar
de dar clases de comercio internacional, tal vez nunca exportaron, creo que ni
por Amazon. Mi amigo, también cuestionaba parte el programa de la maestría
a pesar que la universidad había contratado a los mejores profesores, con un
gran currículo, experiencia y pagando muy bien para tenerlos en el
programa. (Este ejemplo, quiero utilizarlo para matar varios pájaros de un
solo tiro, pero es parecido como se trabaja en la auditoría, donde un caso, nos
puede llevar a otros eventos y cuando es necesario, para proteger los intereses
de la empresa hay que hacerlo, aunque signifique sacrificios y riesgos, pero al
final siempre aterrizaré al tema central y se los voy a demostrar más adelante
con otro caso real). William, no estaba errado, y es que él dominaba muy bien
la parte práctica, y era muy inteligente y osado, de hecho con sus anécdotas,
nos estaba enseñando, incluso mejor que algunos profesores y para que lo
conozcan les cuento lo siguiente: A los dieciséis años, él exportó su primer
contenedor de camarones y ahora tenía la experiencia de hacerlo de cualquier
país del mundo, de una variedad de productos y manejaba las operaciones, la
logística y los contactos de forma profesional. Por eso, cuando lo escuchaba,
le entendía muy bien, porque cómo les comenté, desde muy joven me
especialicé en auditoría en la revisión de todas las importaciones y
exportaciones, de una importante compañía, así como inicié la carrera de
administración aduanera, donde en una materia llamada merceología (es la
ciencia que estudia la naturaleza u origen, composición o función de todas las
mercancías, para efectos de la clasificación aduanera), aprendí química, pero
aunque no era necesario, porque los que estudiamos esa carrera, nunca
íbamos a estar autorizados a realizar un examen a una mercancía y menos
como venenos, radioactivos etc., ya que le corresponde a un doctor en
química especializado y autorizado, sin embargo, el profesor lo hacía para
demostrarnos que él era una persona que sabía mucho y es que nos contaba
que fue muy pobre y así logró obtener varias carreras, en cuenta la de doctor
y que cursó estudios en Francia, entonces decía que nosotros no teníamos
pretexto. Lo importante era que se sentía muy orgulloso de los logros y a mí
me encantó la química, tanto que le hacía los días libres a un amigo que era
profesor de un colegio, pero gracias a él, que nos enseñó bastante, me iba a
servir para el caso donde le pude ahorrar una millonada de dólares al año a la
empresa, porque tuve que agarrarme con doctores en química y no pudieron
engañarme, pero se los contaré más adelante. Sin embargo, mi compañero no
tuvo la misma suerte con un profesor que nos tocó en la carrera, con la
diferencia que este no solo faltó a su palabra, sino que fue malo. Resulta que
desde el principio tuvo problemas con la clase, tanto que el grupo tuvo que
poner la denuncia a la rectoría y este señor que venía de una universidad
pública e importante, nos rogó que le diéramos una oportunidad que iba a
cambiar y al final del curso, realizó un examen con trampa, tanto que solo
pasamos la clase cinco compañeros y yo lo hice raspando, pero cuarenta
compañeros fracasaron con la materia, haciendo perder no solo un
cuatrimestre, sino dinero, incluyendo a don William, cuyo profesor no le
llegaba ni a los tobillos, por su experiencia. De hecho, nuestro compañero no
lo sabía, pero se había convertido en un buen profesor, que mediante sus
experiencias, nos enseñaba. Cómo muchos estudiantes van a pasar por esto,
quiero desviarme otro poquito ´más con los temas, de las auditorías de
compras, de la ética, en el negocio y sobre todo ver los puntos de vista desde
varios ángulos.
Volviendo al caso, a que se refería mi compañero, con el tema de que en el
comercio no hay ética. Voy primero a pasarme del lado contrario del
comprador que es el vendedor. Resulta que un proveedor sea pequeño o
grande, establece sus estadísticas, capacitación y supervisión, principalmente
a todos sus vendedores, estos tienen que tener resultados, deben de producir
ventas, no solo deben demostrar que su producto es excepcional, sino
concluir o terminar la venta, de hecho, allí depende sus comisiones. Quiero
aclarar que no todo el mundo usa el cohecho, pero si sucede, incluso con
empresas importantes o reconocidas y como tuve la oportunidad de trabajar
en el campo de la administración y traté con algunos proveedores, no
muchos, solo uno quiso corromperme, ofreciéndome un traje entero, un
vendedor mayor y muy malcriado, de hecho lo denuncié y lo saqué de
proveedor, seguro este ya tenía la costumbre de hacerlo, y es que les repito
cuando uno sale de la auditoría, la auditoría no sale de uno, sin embargo,
hallé varios proveedores o funcionarios que realizaban esa práctica, a pesar
que descubrirlos no es nada fácil, quiero comentarles un caso, para que
ustedes entiendan como puede operar el cohecho: Un día, estando en una
boda, conocí un caballero y él sin saber que yo era auditor, me contó sus
aventuras de vendedor y me dijo lo siguiente: “Que desde que se hizo
cristiano, le costó mucho conseguir o mantener un trabajo en esa área, que
gracias a Dios, encontró el dueño de una marca de línea blanca, en la iglesia y
este lo contrató. Ahora le era muy difícil de lograr los resultados que antes
tenía, cuando se encontraba en el mundo de los negocios, las fiestas y todos
los dimes y diretes”. Me comentó que él llegó a ser uno de los mejores
vendedores, primer lugar en ventas, ganancias extraordinarias, que si tenía
que comprar a alguien lo hacía muy fácil, ya fuera con dinero, mujeres, sexo,
fiestas o lo que fuera, solo él encontraba la debilidad del comprador, y lo
atrapaba, en fin, decía que si no lo ejercía así, la competencia andaba en lo
mismo y entonces perdía la venta y el cliente, pero ahora que estaba metido
en las cosas de la iglesia, ya no actuaba así, y el camino de las ventas y sus
ganancias cayeron en picada.
Ya más o menos van entendiendo lo que mi amigo decía que no hay ética en
los negocios. Pero uno cómo auditor, siempre tiene que lidiar con eso de
fondo, para supervisar el asunto y a pesar que se mueven muchos millones, es
uno de los trabajos más complicados, poco comprendidos y difícil en el
control interno, porque el dinero es la ambición humana y por desgracia,
aunque existe gente muy honrada, algunos sucumben a la corrupción. Hallar
que alguien le da los gustos o tratos que mencionó el vendedor anteriormente
descrito, es casi imposible y esto puede suceder en cualquier estatus, ya que
otro vendedor que estuvo en un curso conmigo, en la universidad, me dijo el
caso de un médico, que solo pedirle una cosa y otra, pero lo último que estaba
pidiendo, era un viaje a Europa.
Cosas así suceden, porque, una vez que la persona es seducida, después
quiere más y más, entonces al vendedor ya no le gusta el juego, se enoja y no
le queda más que pagar los gustos de sus clientes, incluso, en algunas
oportunidades cuando este no sale favorecido en alguna licitación o
cotización, se producen pleitos y puede presentarse una traición en la misma
sociedad, donde terminan delatando al comprador. El cohecho tiene muchos
problemas, incluso la competencia anda detrás, buscando como hacerlos caer
en una trampa, para desenmascarar a los mismos, corruptos y corruptores y
así para sacar del mercado a sus contrincantes. En otras ocasiones, alguna
esposa despechada, llamaba poniendo la denuncia en contra de su propio
marido y también con algún error pueden caer. Una forma que hace notar que
las cosas pueden andar irregular, es con sus estilos de vida y extravagancias,
gastos excesivos, vehículos nuevos, o casas nuevas y muy onerosas. Para
decirlo más sencillo, no van a ser tontos, tanto los que corrompen como los
que se venden, para dejar prueba o rastro alguno que los incriminen. Estamos
tratando con personas inteligentes y si lo vemos fríamente, en una lucha o
competencia, el que sobrevive, es el más audaz, sin embargo, a pesar de eso,
les voy a narrar a continuación, algunos hechos que dieron problemas, en las
compras y pude comprobar.

Casos de compras de repuestos de carros

El primer caso, lo pude palpar, primero porque me puse a revisar las


estadísticas de reparaciones por vehículos, cuyos informes eran enviados a las
jefaturas encargadas de las ventas, sin embargo, dichos informes los
archivaban y no le hacían una revisión profunda, pero mi carrera profesional
antes de contaduría, la inicie en estadística, después cambie, pero lleve
algunos cursos y como me gustaba, no me daba pereza sacar el rato para
analizar cualquier informe estadístico. Para explicar resumidamente, veo que
algunos vehículos les habían cambiado los mismos repuestos, en forma
consecutiva tal vez con una diferencia de dos o tres meses, incluso a uno le
cambiaron el motor, dos veces en menos tiempo. Me daba a la tarea de
buscar las requisiciones y demás detalles, para descartar las posibilidades, y
una vez que me cercioraba que no se habían equivocado de vehículo o
alguna cosa diferente, podía determinar que algo andaba mal, con algunos
funcionarios, pero también con el encargado de compras de esa área. Solicité
permiso para ir a cotizar una lista de repuestos, similares a los duplicados,
disfrazado de comprador y así averiguar los precios, o alguna otra
información. El resultado fue sorprendente, a pesar que muchos proveedores
me descubrieron que no era comprador, sino que andaba averiguando, cuando
vi los precios, de los repuestos nuevos, originales de fábrica, y al comparar
los precios que habíamos pagado por los mismos, eran el doble del valor los
que habíamos adquirido, en relación a los cotizados, pero allí no queda todo,
resulta que los que habíamos comprado, eran de segunda mano. Después,
pude constatar que se le compraba a un solo proveedor cuyo dueño, era ni
más ni menos el funcionario, que se había puesto una compra y venta de
repuestos usados, que aunque no estaba a su nombre, pude constatar que era
de él y cuando lo entrevistamos, no le quedó más remedio que aceptar los
cargos y poner la renuncia (algo similar descubrí con otro comprador de la
misma área, en los años siguientes, él se importaba de Estados Unidos y
salían más caros que en el país, en ese momento no le hicieron nada,
posteriormente también fue denunciado por otro proveedor y despedido).
Varios años después, nos informaron de un repuesto que se le compró a un
proveedor, el mismo venía con una placa de la empresa, o sea , que nos lo
habían robado y vendido de nuevo y me pongo averiguar quién era la
empresa o persona que nos lo vendió y resultó ser el mismo funcionario
corrupto, solo que le había cambiado el nombre a su negocio y cuando fui a
preguntarle al gerente de compras, el por qué lo había hecho proveedor,
sabiendo lo que había sucedido en el pasado, la respuesta fue que él creía
que ya había cambiado. Con este gerente y con todas las cosas que le
descubría, en cuenta esta, no le hacían ni una amonestación, por lo que les
dije anteriormente y para uno es frustrante, y creo que muchos auditores
viven estas cosas, y siempre le creyeron más a él que a mí por su investidura
de gerente y con el montón de cosas o “errores que le sacaba”, pero solo se
actuó, porque un proveedor le montó una cama (una trampa).

EL CABALLO DE TROYA
Disculpen que les escriba el título bien grande y en mayúscula, pero, le puse
ese nombre a los dos siguientes casos, porque no solo representaban grandes
o millonarias pérdidas, sino, que con el pretexto del servicio al cliente y de
darle un “regalo” a la empresa, nos daban sin cobro alguno, un funcionario
técnico y experto para que este, nos ayudara con el buen manejo de los
productos que nos vendían, pero ellos no eran ni más ni menos que Caballos
de Troya.

En toda empresa grande, la compra y los movimiento de las llantas son muy
importantes y cuantiosos, por lo que las mismas se adquirían o
reencauchaban bajo el método de licitación. Aquí, el ingeniero técnico, al
principio siempre recomendaba la misma empresa, mientras yo les
recomendaba e insistía, que deberían de realizarse pruebas de rendimientos
de las mismas, para comprobar si realmente eran las mejores llantas (ya que
me tocaba revisar las licitaciones, pero nunca encontré eco a mi propuesta).
Tiempo después, veo que el ingeniero cambió de opinión y ahora la
recomendación de las licitaciones y por ende de la compra de las llantas, la
que siempre compraba o adjudicaban, ya no era la mejor, sino, la de la
competencia. Pero un día que andaba por el taller, vi lo que pasó: el vendedor
había cambiado de empresa y ahora trabajaba para la otra, la cual era la
nueva adjudicada. El consumo de las llantas era muy alto y constante, sin
embargo, tiempo atrás, me había tocado hacer un inventario de las mismas, y
cuando llegué al lugar, noté la burla de los encargados de bodega, mediante
risas maliciosas y es que nosotros, como auditores, leemos a las personas,
entonces sentí que algo andaba mal, pero sin pruebas, no se puede hacer nada
y esa vez no fue la excepción, no solo a mí me sucedió, también habían
pasado muchos colegas compañeros y todo salía bien, ya que el inventario
siempre salía a la perfección, aun teniendo sospechas importantes del mal
manejo de las llantas, pero nunca se había encontrado nada. Mucho tiempo
después, me asignaron a realizar otro inventario, recordando lo anterior, me
propuse a realizar algo diferente y así, cambié el método y no hice ningún
inventario, más bien, no avisé nada a nadie y me puse a leer, toda la
literatura de las llantas, cuál era su período de vida, cuándo y cómo se
rencaucha, visité las empresas rencauchadoras para ver el proceso y entonces,
presté mi propio equipo de filmación de videos, me senté con un periódico,
como si lo estuviera leyendo, a una distancia considerable y comencé a filmar
el procedimiento de un vehículo de la agencia rencauchadora, cuando este
estaba cargando las llantas, para llevárselas a recauchar, una vez que estaba
cargado el vehículo, me acerqué y detuve la operación, aunque era la hora de
almuerzo, localicé al Gerente de Transportes, así como al jefe de bodega y les
pedí que se acercaran al mismo, para revisar llanta por llanta. Cuando
terminamos, el 96% de las llantas, se encontraban en buenas condiciones, en
síntesis, allí era donde estaba la estafa, y resulta que cuando ellos estaban
cargando las mismas, solo se encontraba el chofer y el “Caballo de Troya”,
que era un funcionario dotado sin costo alguno, por lo empresa
reencauchadora y esta persona, tenía la función total del manejo de las
llantas, pero a partir de ese día se les acabó la fiesta. Aunque aquí no termina
la sorpresa, a dicho funcionario procedieron a contratarlo directamente en la
empresa, en otro puesto de bodeguero, pero por mí fuera no lo hubiera dejado
ni acercarse a un kilómetro y la compañía rencauchadora no le hicieron nada,
a pesar que solicité su expulsión cómo proveedor. Así es la auditoría, otro
caso frustrante, tal vez nunca se pusieron a sacar las cuentas, desde cuando
llevaban haciendo esto y cuanto más hubieran estado defraudando a la
empresa. Creo que tratándose de jefaturas tanto de la parte administrativa
como de la Auditoría que tenían cargos importantes, me imagino que nunca
se les debió pasar ese alto ese dato. Eso sí, me acuerdo que yo calculé la
cuenta y solo de lo pasado, eran millones en gastos de este rubro, pero eso no
lo había comentado solo ese día, sino tenía años de estar pelando por las
adjudicaciones en las licitaciones, cuando revisaba los consumos y cómo
ejemplo, reclamé una vez, cuando descubrí que algunos vehículos se les
cambiaba constantemente llantas por mes, y lo que me decían era que por los
caminos y las horas laboradas, pero ya vemos que no era por eso, sino por la
estafa que se hacía. No crean, uno cuando veía y demostraba estas cosas, le
daba cólera, no sé cómo no perdí mi hígado y más con el próximo caballito.
El otro “Caballo de Troya”, es una de las más importantes investigaciones
que realicé, porque su impacto fue como de un ahorro aproximado de tres
millones de dólares, anuales.
Cabe indicar, que mis jefes, nunca me preguntaron cómo descubrí este caso,
ni nadie de la empresa, pero ahora se los voy a contar, solo tardé como cinco
minutos, para darme cuenta que estaba ante un gran “error”, si, solo ese
tiempo, palabra de hombre y lo que hice fue algo que para mí era muy
sencillo. Por mi formación y aprendizaje pude ligar una cosa con otra. De
casualidad, estaba frente a un equipo que se estaba lavando en ese momento y
miré el producto con el cual se estaba haciendo, entonces de inmediato me
pregunté: “¿Qué es eso? Mi mente voló como a mil kilómetros por hora, me
acordé cómo se hacía años atrás en comparación de lo que se estaba haciendo
ahora ya que me transporté en el tiempo (también es fácil, la mente se puede
transportar tanto al pasado como al futuro, se los aseguro, tengo las pruebas),
me acordé cuando realizaba inventarios en las plantas y cómo habían
recipientes llenos de soda cáustica, que se utilizaban para dicho lavado, pero
también me acordé de su valor, porque revisaba las compras, las
importaciones, los cálculos de mercancías, por lo tanto, no me fue difícil
descubrir este impresionante hallazgo:
Me le puse atrás a dicho producto nuevo, el cual se compraba por toneladas,
mediante el sistema de compras de producto único o exclusivo y se utilizaba
para el lavado de los equipos y tuberías, después de mi insistencia, pude
convencer a mis jefes, a que me apoyaran, para que este producto pasara de
exclusivo, a un proceso de licitación, porque lo habían asignado a esa
categoría. De inmediato me puse investigar todo lo relacionado a los
productos que nos vendían y el procedimiento de su uso, para ver cuál era la
diferencia.
Aquí, de igual manera al caso anterior, la compañía nos había suministrado
“con mucho cariño” y “sin costo alguno”, un técnico especializado para
administrar las cantidades necesarias de los productos, en el lavado integral
de todas las máquinas. Como sabía que el caso iba a ser muy difícil, procedí
a solicitar a la casa fabricante que nos había vendido la maquinaria, toda la
información para el mantenimiento de las mismas y ellos de inmediato
colaboraron y me enviaron un libro técnico con muchas hojas, el cual me
tuve que leer, para así entender bien el asunto y que no me agarraran de
ignorante en el tema, porque sabía que iba a discutir con ingenieros
químicos, y otros expertos, que por lo general, defendían lo indefendible,
además, no era tan tonto en química, porque en mi carrera de administración
aduanera, tal como les había explicado anteriormente, había llevado cursos
intensivos de química, en una materia llamada merceología y cuyo profesor
era el jefe de laboratorio químico de la aduana y nos enseñó química, de tal
manera que algunas veces reemplazaba a un amigo profesor que me pedía el
favor de cubrirle la clase.
Al fin de resumir el asunto, lo explico así de sencillo: resulta que el
producto que estábamos comprando para limpiar las máquinas nos
costaba a US. $2.15 el kilo, y el producto que ocupábamos para
limpiarlas, su precio era apenas de US. $0.35 el kilo, palabra, que así es,
y ¿qué era lo que nos vendían? Era soda cáustica al 40% diluida en agua,
con un colorante inocuo, en envases bonitos, una bella etiqueta y con un
nombre rimbombante. Aun así, las contrapartes me argumentaban o me más
bien me intimidaban, que si nosotros recomendábamos utilizar otro producto,
la vida de la tuberías de las máquinas disminuía, y sería responsabilidad mía
(si fuera cierto, a esos precios era preferible cambiar las tuberías), aunque lo
dudo, porque eran de acero inoxidable (pero anteriormente se utilizaba la
soda cáustica en las mismas máquinas y tuberías y nunca había pasado
nada), con la diferencia que el kilo de la soda vale US. $0.35 y solo se
ocupaba en 40% para luego diluir con un 60% de agua. Entonces, saqué muy
bien los números, ya que comprábamos toneladas del mismo, resultando la
cifra dicha. Aun, esto no se queda aquí, resulta que del 100% de las
compras que se hacían, (y repito, pagando a US. $2.15 dólares el kilo), solo
el 35% de dicho producto, se estaba utilizando para el lavado de las
tuberías y la maquinaria y el otro 65% se estaba usando para la Planta de
Tratamiento (una piscina donde se tratan los desechos) que de igual
manera, lo que ocupaba en dicha planta, era soda cáustica de $0.35 el
kilo. O sea, estábamos botando literalmente, millones de dólares al
excusado, ¡increíble!. Por supuesto, que de inmediato pedí la expulsión de
dicho proveedor, así como sentar las responsabilidades del caso y aunque en
esas peticiones no tuve eco, por lo menos se logró en bajar el costo de lo que
nos estaban vendiendo y la cantidad que nos estaban suministrando, no como
quería, pero ni modo. No es obligación, sin embargo, ni las gracias me dieron
por dicho trabajo y creo que ni siquiera los asociados y los directores se
dieron cuenta, el por qué les habían aumentado en forma significativa, las
utilidades de ese año. Esa fue una lucha mía, de principio a fin, de hecho, al
personal de las áreas de esa Dirección, les prohibieron darme información a
partir de ese día y ordenaron que cuando fuera a realizar auditorías, tenía que
preguntarle directamente a la Directora del área, cosa que no es correcta que
se haga a un auditor, este no debe tener ninguna traba para su desempeño,
pero con semejantes hallazgos, me limitaron de esa forma y aunque no crean,
con la gran satisfacción de mi trabajo, también me quedó un sabor amargo.
Muchos meses peleando, demostrando, y comprobando, hasta que al final se
logró por lo menos bajar el precio, en la licitación, sin embargo todos los
oferentes cotizaron por debajo de un dólar y el proveedor actual
primeramente cotizó similar a lo que nos estaba cobrando y después bajó el
precio a la mitad, (lo que también comprueba mucho más el hecho) y por eso
pedía, e insistía que se sacara como proveedor y se tomaran las medidas
sancionatorias. Para mí, no fue correcto, que en una licitación se le permitirá
a un participante, bajar el precio, para que se le adjudicara la misma, eso
también es una deficiencia muy grave. Pensar que solo tardé como cinco
minutos para descubrir todo, pero la lucha que me daban los técnicos y sus
jefaturas, de nada les valió, más demostraban que iban en contra de los
intereses de la empresa. El ahorro anual fue más de dos millones ochocientos
mil dólares, y cuando terminé mi estudio, saqué cuentas que eso equivalía al
salario anual de 420 empleados de planta, o al salario anual de 24 altos
ejecutivos, de hecho, era como 300 años de mi salario, jajaja. Algo
impensable sucedió después, es que a los dos funcionarios que denominé
los “Caballos de Troya”, en este y el anterior caso, al final, la empresa, o
más bien, los funcionarios ejecutivos, sin pena alguna, los contrataron
como empleados fijos, de la misma manera, ambos proveedores,
siguieron como tales, hicieron caso omiso a mis recomendaciones. Pero
sumen todo lo gastado demás en dos o tres años anteriores que habían
empezado con ese producto y sumen todos estos años, hasta la fecha,
donde ya han pasado más de catorce años, aunque, la verdad que no sé
si volvieron con las mismas prácticas, porque cómo dije anteriormente,
perro que como huevos, ni quemándole el hocico. Este ejemplo muestra
la importancia que es un auditor en la empresa, ¡eso creo!, jajajaa.
Algo muy importante de destacar, de este caso, es que siempre luchaba,
pero sin mucho éxito, por eliminar a los proveedores únicos o exclusivos,
porque cómo ustedes pueden ver, al estar en estas condiciones, los
precios se disparan y por mucho. Para mí es increíble que solo exista un
proveedor, en todo el mundo. Tal vez y lo dudo, en el país si, pero no, en
el resto del planeta. Aprendí que Los funcionarios defienden mucho a sus
proveedores, incluso más que a sus empresas. Quiero dejarles una
propuesta muy simple: Es que todo se haga por licitación, con un
método que se hace mucho en los concursos literarios y es justo para
todo el mundo, (con el cuidado que no se estén manipulando las
invitaciones de los invitados a participar). Presentar las ofertas en sobres
cerrados, con el uso de un seudónimo y aparte, otro sobre cerrado, con el
nombre de la empresa, pero para que esto no sea también mal
manejado, que un comité tenga la potestad de variar o sino, el que se
encargue de poner dicho seudónimo, antes que se pase a revisión de los
técnicos. Y es que vi tanto manipuleo incluso en las licitaciones, como por
ejemplo (solo de ejemplo) que se licitara un vehículo, entonces, en los
requisitos que confeccionaban para tal fin, se atrevían a poner hasta la
marca del vehículo, dejando por fuera a otros competidores, solo para
favorecer a su proveedor favorito. No es mentira, el manipuleo sucede y
con frecuencia, por eso, la empresa que controle lo mejor posible las
compras, esta se beneficiará mucho.

Revisión de extras, kilometrajes, viáticos

Me voy a referir muy breve a estos rubros y generalmente todos los auditores
descubrimos abusos de los mismos, pero lo traigo de ejemplo por una
importante razón que a continuación les describo:
En caso del kilometraje, solo voy a comentar, lo que casi siempre puede
ocurrir, es que algunos funcionarios reporten su kilometraje continuo, sin
hacer una diferenciación entre los días laborales y libres, por ejemplo,
algunos son compañeros que se desempeñan como: técnicos, supervisores o
vendedores, que andan de gira y tal vez trabajan de lunes a viernes, pero
también cobran el kilometraje el sábado y domingo (sus días libres) y que son
para sus asuntos personales.
En el caso de las extras, es donde me quiero enfocar más, porque a pesar de
mis recomendaciones, murió un querido compañero. Había un grupo de
trabajadores, que por su labor, tenían que trabajar muchas horas en el puesto
de choferes. Le hice saber a su jefatura, mediante la deficiencia reportada,
que era peligroso y no estaba permitido, pero ellos se negaron a pesar de que
el código de trabajo establece un máximo de horas extras por día, poniendo
en riesgo a los empleados. Estos también lo hacían porque ganaban mucho
dinero con las extras, y lo que recomendaba, era duplicar los trabajadores así
la misma empresa ahorraría, ya que se gastaría menos, cuyo valor de la hora
extra, es más cara, incluso el doble, pero lo que les repetía una y otra vez, era
el peligro de sus vidas y que ´la ley lo prohíbe, pero también nos podían
castigar con un aumento en la póliza de seguros y un punto demás representa
una millonada. Al cabo de unos meses, un chofer, cansado, perdió el control
de su vehículo y se mató, se desnucó. Comento, esta tragedia, porque esto
también sucede con el transporte público, donde la mayoría de choferes
laboran más de 14 horas diarias y hay veces los hacen trabajar su día libre, y
no solo ponen en peligro su existencia, sino las de muchas personas. Aquí
podemos ver que una simple recomendación de un funcionario de auditoría,
puede servir para evitar tragedias o accidentes, que le cueste la vida a alguna
persona.

Contratos

Los contratos, tal vez es una práctica constante en la revisión de la mayoría


de auditores de la función pública y a mí me asignaron a revisar y analizar
todos los contratos antes de que el gerente los firmara, La revisión que hace
un auditor es totalmente diferente a la de un abogado, por eso quiero
referirme a ellos, porque allí también pude detectar algunas anomalías y solo
me voy a referir en dos casos. El primero, la empresa decide iniciar con un
contrato tipo Leasing, para adquirir una máquina, cuando me llegó el mismo,
pedí todos los pormenores, incluyendo el estudio y la tasa de retorno de la
inversión, etc. En esta oportunidad, el contrato me llegó después que el
Gerente lo había firmado, no así la contraparte, ya que dicho estudio lo había
hecho, no solo un profesional en la materia, sino un alto ejecutivo de la
empresa, por lo que él no había dudado en firmarlo, pero a mí, siempre me
gusta corroborar la información, antes de poner el visto bueno y entonces,
revisé la aritmética, la lógica y la visión de dicho negocio. Cuando hice el
cálculo aritmético, este parecía bueno, pero al ver los componentes, descubrí
que aquí había una falla y esta era sumamente importante. Resulta que el
contrato establecida además del pago mensual del alquiler de la máquina, otra
condición: “La compra exclusiva de los envases”, pero al revisar todo el
contorno del negocio, resulta que los envases que nos iban a vender, eran de
la misma empresa que nos lo vendía en la actualidad, bajo la modalidad de
licitación, pero a un costo mucho mayor que lo que estábamos pagando, y
eran tan altos que representaba o era similar a comprar tres o cuatro de esas
máquinas, cuyo valor era de más de medio millón de dólares.
De inmediato me opuse a la negociación, por no haberse considerado esa
diferencia de dicho precio, en el cálculo de la tasa de retorno, pero también
argumenté, que ese costo era solo el inicio y que al cabo del tiempo ellos no
los iban a aumentar aún más, con mayor perjuicio para la empresa.
Lastimosamente, le creyeron al compañero de más alto cargo, y siempre se
dio el negocio. Al cabo de cinco años se cumplió todo y se corroboró de lo
que les había dicho, pero ya era muy tarde, allí se perdieron millones y nadie
salió respondiendo, ni mi unidad hizo nada al respecto. Pienso que aquí privó
la autodefensa que pudo darse del alto ejecutivo que había realizado mal el
estudio de la tasa de retorno de la inversión, principalmente para proteger su
imagen, o no sé, juzguen ustedes, sin embargo les pregunto. ¿Creen, qué a
mí, no me dio cólera?, jajaja, ahora me da risa.

El segundo contrato que me voy a referir, es un trabajo que al final se


extendió por muchas ramificaciones, totalmente diferentes al tema del
contrato en sí, pero es muy interesante esta historia. Cuando revisaba dicho
contrato veo que hay en almacenamiento fiscal, mil llantas de carritos
pequeños y el primer pensamiento que me llegó, era el alto alquiler que
estábamos pagando por una mercancía y el tiempo tan tardío de dicho
almacenaje y esto se me ocurrió, porque en el pasado había luchado contra
esta práctica, cuando revisaba los cálculos de las mercancías importadas.
Tuve la espinita de ir a ver las llantas a dicho almacén fiscal, algo no me
sonaba del asunto. Estando en el lugar, pensé que eran muchas y si realmente
se ocupaban, porque se tenían todavía almacenadas. Lo primero que descubrí
era cierto, después lo otro es más asombroso, porque al ver los
procedimientos, me di cuenta que cada vez que a un carrito pequeño se les
estallaba una llanta, lo que hacían era cambiarla y “supuestamente”
desecharla, en vez de arreglarla y pegarle un parche que traían incluido de
fábrica. Al ver tal cosa, me puse a investigar si habían más repuestos que se
les estuviera cambiando a menudo, como las llantas y también descubrí que
se les cambiaba constantemente, un rol de acero inoxidable y este era muy
caro, pero que como tal (por ser de acero), su promedio de vida era como de
treinta o mucho más años, o sea, primero de destruía el carrito que el rol.
Procedí a pasar a otra etapa y concepto, lo que estaba ocurriendo, era ni más
ni menos que un robo. De inmediato, me fui a ver y analizar los
procedimientos que se estaba llevando a cabo y descubrí que los carritos los
estaba reparando un contratista externo, por lo que lo fui a visitar en su taller,
en la provincia de Cartago. Al llegar al lugar, no hice ninguna pregunta, solo
observé el ambiente, y me devolví. Resulta que en dicho sitio, solo había
unos tres o cuatro carritos pequeños de nuestra empresa, pero estaba lleno
con carritos de la competencia, incluso pude ver que este contratista no solo
reparaba, sino que los fabricaba. Al salir del lugar, se me metió, o más bien
era lógico, que dicho señor estaba utilizando repuestos nuestros para construir
los otros, de una de nuestras competencias. Me le puse al corte, para ver el
retiro de los materiales de la bodega y resulta que dicho contratista llegaba
absolutamente solo, él mismo confeccionaba las requisiciones de repuestos,
le las llevaba al gerente del área de carritos, las firmaba sin chistar, ni
controlar, “confiando” en lo que el contratista decía, para deducir, que así era
como nos estaban estafando, una suma millonaria. Al haber un flujo
constante e importante de llantas, roles y otros materiales, entonces la bodega
surtía los mismos de acuerdo a los mínimos y máximos de sus movimientos.
De inmediato pedí la expulsión y demanda de dicho contratista, pero el
asunto no quedó allí, resulta que este señor, acostumbraba a descontar las
facturas en una cooperativa de ahorro y allí también terminó estafando a la
misma, con facturas descontadas, pero creo que falsas, solo nos faltó darle
las llaves de la empresa.
Para el colmo de males, pasaron dos hechos injustos, resulta que la empresa
al ver tal desorden y tanta problemática, decidió quitar el negocio de los
carritos pequeños y darlo en concesión y: ¿Adivinen quién fue el premiado?,
el gerente que estaba a cargo de los mismos, el cual era uno de los mayores
responsables que se dieran estos desfalcos, él ganaba muy bien, para que
hiciera su labor responsablemente, pero también, seguro que tenía un “Santo
Protector”, sin embargo, el hecho que no me gustó, fue que este funcionario,
días antes, despidiera a un señor subalterno e inocente, solo porque me
colaboró, con lo que le solicitaba y lo usaba para que fuera testigo, para la
investigación y él lo hacía honestamente y por más que reclamé para
protegerlo, no me hicieron caso, también eso fue muy injusto. Por ejemplo,
cuando visité al contratista él me acompañó, vio y me respaldó mi
conclusión, que el tipo estaba utilizando nuestros repuestos para hacer
carritos a la competencia, no me acuerdo como se llama, este buen
funcionario, pero todavía me da cólera que lo despidieran y también pena,
nunca pensé que un buen colaborador de la auditoría, fuera el único que
pagara los platos rotos. Este trabajo no fue fácil y me fue llevando una cosa a
otra, pero eso es el reto del auditor y todo nació en la revisión de un simple
contrato.

Auditorias de inversiones

En cuestión de estudios financieros, tal como el relatado anteriormente,


cuando acostumbraba a realizar una auditoría, como por ejemplo en
inversiones, no solo me fascinaba y era un reto para mí, sino que no se me
escapaba nada, esto lo comparaba con los pasivos, si estábamos invirtiendo a
tasas mucho más inferiores a tasas de pasivos financieros más caros, entonces
mi recomendación era que invirtiéramos pagando pasivos, porque ganaba
más la empresa, en ese campo. Por lo general, siempre me salía de lo
tradicional en los análisis, pero buscando el mayor beneficio para la empresa.

Estudios fuera de la Auditoría

Fui director de dos importantes instituciones financieras en diferentes


oportunidades, pero a uno, le cuesta quitarse el saco de auditor. Toda
empresa, institución, asociación, cooperativa o similar, uno de los órganos
más relevantes son los de la junta directiva, conformada por un grupo de
directores, los cuales son elegidos a ocupar un puesto de acuerdo a lo
establecido según su rama. A pesar de ser el órgano más importante y el que
toma las mayores decisiones y el rumbo de las empresas o instituciones,
estos nunca son instruidos o capacitados para desempeñar un buen papel en
sus funciones, pero si a eso le sumamos, que los que le suministran la
información necesaria (para nutrir de conocimiento y así administrar
sabiamente sus propuestas y votaciones), pueden equivocarse, esconder,
fallar, o desconocer cosas que son importantes presentarlas a la junta
directiva, eso, más agregando que son pocas las horas utilizadas en una
directiva, para saber o conocer el diario vivir de las empresas, es sumamente
muy difícil y delicado ser director. También existe otro problema, es las
personas que conforman una junta directiva son de diferente profesión, que
aunque pareciera que es bueno, porque cuando se hable de un tema, pueda
que por tener un integrante con una profesión que conozca el mismo, nos
aporte detalles de dicho tema para entender mejor el asunto, pero también, la
falta de conocimiento en alguna cosa hace que el director se lave las manos y
tome una decisión poco acertada argumentando su desconocimiento. Tal vez
cuesta mucho que me dé a entender, pero pongo el ejemplo de una
excompañera que en su profesión de periodista, y para tomar su decisión
argumentó que cómo desconocía el tema (un caso financiero que voy a
explicar) apoyaría una propuesta que tanto por su decisión y la de otros
compañeros, nos costaron varios millones de pérdidas económicas. Otro
problema importante que se presenta en algunas juntas directivas, es la que
yo llamo: “El poder del presidente y los demás que siempre lo apoyarán”.
Lo que pasa es, que éstos, cómo líderes, algunas veces se apropian de la
última palabra y los gerente hacen solo lo que él les dice (ignorando en
muchas oportunidades los que los demás miembros de directiva le proponen),
entonces el primero se convierte en cuasi administrador y dicho gerente, en
su secretario privado. Recalco, no en todas las juntas directivas, pero si lo he
visto y vivido en algunas (de hecho también fui presidente de algunas
asociaciones).
A lo mejor, por mi forma de ser, o mi formación de auditor, nunca me gusto
ser un levanta manos, para apoyar todo lo que digiera el presidente, solo lo
hacía por las cosas buenas, pero estos influyen tanto que algunos lo siguen,
aunque esté equivocado, no analizan las consecuencias o no les importan. Por
eso y porque siempre fui franco, tuve problemas, principalmente no caer
bien, pero no, con ellos, sino con los gerentes o algunos (poquitos) miembros
compañeros de la junta directiva, porque al final, casi todos me llegaban a
apoyar cuando tenía razón, no así los gerentes, de todos modos si a uno lo
eligen en un cargo de directiva, lo primero que debemos hacer, es defender a
los asociados, que confiaron y con su aprecio nos nombraron. Creí
importante tocar estos aspectos, para explicar algunos casos, que aunque no
fungía como auditor, razonaba como tal, pero siendo director de algunas
juntas directivas, tal como lo dije al principio.
La primera vez que llegué a una importante institución financiera lo hice en
el cargo de la vicepresidencia y le gané por mayoría al grupo oficial que se
encontraba en el poder, desde hacía muchos años. Ese fue un gran problema,
porque estaba solo en una directiva totalmente contraria a mi partido y con
una señora como gerente general de profesión agrónoma, la cual de
inmediato, le caí muy mal y me trataba de mala gana. Para ella, el único jefe
que existía era el presidente de la directiva, tal fue el caso que un día me
achacó una calumnia, por el cual mi amigo que era presidente, la corrigió y
dijo que no era yo el que había pasado la información sino que fue él. Esto lo
explico para que ustedes entiendan lo que pasa en algunas directivas, cuando
el gerente acepta solo o principalmente a los presidentes.
Resulta que al poco tiempo, iniciamos un nuevo emprendimiento financiero,
donde ofrecíamos un paquete de ahorro, principalmente para viajes y el cual
la persona podía ganarse la totalidad del mismo en una rifa semanal. El
negocio parecía tan bueno, por eso lo aprobamos, porque nosotros cobramos
el 130% y le devolvíamos al cliente el 100%. No era nada nuevo en el
mercado y funcionaba así. Solo como ejemplo, una persona compraba un
plan de US. $10.000.00 y ésta iba abonando $100 semanalmente y si salía
favorecido con la rifa, antes de haber cancelado los US. $13.000.00
(incluyendo el 30%), se ganaba el monto completo del plan. Todo nos parecía
fantástico, hasta que la señora gerente, nos presentó los primeros estados
financieros, con una utilidad neta muy alta y avalados por el presidente de la
junta directiva, el cual era director financiero de una importante compañía.
Cuando me puse analizar dichos estados (y es que solo yo lo hice), descubrí
que más bien, en vez de utilidad neta, teníamos una pérdida neta. De
inmediato me hicieron un berrinche (una oposición sin razonamiento) y una
compañera de directiva, me increpó y me dijo lo siguiente: “¿Quién se cree
usted, acaso va a saber más que el señor presidente, que es director
financiero…?, así de fuerte me atacó, (por mi gatita que así fue, y lo hizo con
la intención de echarme al presidente encima), cuando me dejaron
explicarles a todos, incluido al señor presidente, que de paso fue compañero
en Auditoría y muy amigo, le expuse donde estaba el error y era muy
sencillo. Lo malo que él propuso una comisión para analizar los estados
financieros, para estudiar el caso, pero me imagino que más por vergüenza,
porque sabía que había metido las patas (dicho popular para decir su error) y
yo tenía la razón, por eso, incluso, me dejó por fuera de la misma, pero su
decisión y la de los demás miembros de la junta directiva, nos costó muy caro
(y a todos los bolsillos de los asociados) ya que después de un año, las
pérdidas de dicho negocio fueron muy importantes.
Unos por acomodarse al presidente y éste, por negligente, junto con la
gerente de ese entonces. Para que entiendan el error, creo que ni hace falta ser
contador y se los explico sencillamente con los mismos datos que escogí de
ejemplo. La señora gerente, agarraba cada paquete vendido de $10.000.00 y
lo ingresaba en los registros contables, como venta total, y ese era el error, lo
que había que ingresar era solo $100.00 de las cuotas semanales y el resto era
una cuenta a cobrar a futuro. Primero, la gerente no era contadora, segundo el
que lo era, lo avaló mal y lo corrigió negligente y tres, no se puede exponer a
pérdidas, un negocio, solo por no aceptar a un miembro, que más bien
detectando ese hallazgo, les estaba cuidando las espaldas, aunque al final
nadie pagó por eso. Aunque ustedes no crean, eso de registrar ingresos
adelantados, es una práctica común en algunas organizaciones que funcionan
a base de cuotas y nosotros como auditores, debemos siempre, hacer notar
dicha deficiencia, porque los ingresos se deben de registrar en el momento
que se hacen efectivos, uno no sabe, si alguien muere y deja de pagar.
El segundo ejemplo, fue la segunda oportunidad que años posteriores,
volvieron a elegirme nuevamente, como miembro de la junta directiva de
dicha institución financiera, pero esta vez había una razón de peso: a dicha
organización la habían estafado un estimado de cuatrocientos millones de
melones, (jajaja, una broma lo de melones), entonces, los asociados me
pusieron como candidato y también gané con facilidad a pesar de haber sido
ametrallado de candidatos de parte de los miembros de la junta directica que
no querían mi nombramiento, pero la asamblea fue soberana y me escogió,
porque me tenían mucho aprecio. Sin embargo, otra vez algo parecido a la
anterior, en la primera sesión, presento una información que me había dado
una asociada para investigar a un exfuncionario que había sido cesado, por el
escándalo de la estafa, pero al cual no se le responsabilizó en el hecho,
entonces el nuevo gerente, que era el antiguo contador de dicha institución,
me increpó igualmente y de allí en adelante no hubo ninguna buena relación
con él, tanto que en el transcurso del tiempo, otro colega y miembro de la
junta directiva se levantó y le pidió respeto para mí, como director que era.
Donde nos habían dañado, era con un negocio de descuentos de facturas de
proveedores, lo cual la ley permite negociar como un título valor bancario, o
sea al comprar una factura lo recibíamos a un precio inferior a monto de la
misma, pero cuya tasa era superior a cualquier otro tipo de inversión o
incluso de cualquier préstamo de dinero y lo mejor, a un corto plazo, uno o
dos meses. De hecho, ese negocio lo había iniciado mi persona, la primera
vez que estuve en la institución, y llevé el primer cliente. Cuando llegué a la
directiva, todos los miembros, descontentos con lo que les había pasado en el
desfalco, decidieron frenar dicho negocio. Por mi parte me opuse, porque es
como si robaran en una panadería y por eso habría que dejar de vender pan. O
sea el error no estaba en el negocio, sino en el sistema de control interno. De
igual manera, si la estafa hubiera sido en cualquier título, o bono o certificado
de ingreso, no por eso habría que dejar de invertir.
Bueno, sobreviviendo al gerente, porque el presidente decía que este era muy
honrado, (no tenía la certeza, pero tampoco la duda, solo él y Dios sabrá),
aunque, logré frenarle una beca que se estaba adjudicando en una institución
universitaria prestigiosa pero muy cara y acosta de nuestra institución
financiera, la cual había sido herida recientemente.
Un día, ya cabreado, llegué con números en la mano y le dije a mis dos
compañeros de la comisión financiera de la institución, (en cual uno era
colega, amigo y excompañero, y el otro también, amigo), lo siguiente: “El
gerente puede ser muy honrado, pero si nos está haciendo perder en los
rendimientos económicos, trescientos millones de melones, aunque este sea
muy honrado, es similar a la suma que nos estafaron en el institución, por lo
tanto, si usted, usted y yo, no hacemos algo al respecto, entonces seriamos
similares a los estafadores que nos hicieron perder una cifra astronómica.
Tengan por seguro, que a partir de ese día no solo me apoyaron dichos
compañeros, sino que vieron que tenía la razón.
Después que salí del directorio, no duró mucho tiempo dicho señor.
También tuve la oportunidad, de ver en otras dos instituciones, cómo la parte
administrativa le mentía a los directores y le ocultaba información, en esos
casos sin poder hacer absolutamente nada, solo me quedaba la cólera y el
pensamiento que si en algún día remoto me tocara integrar nuevamente una
junta directiva, no me creería ni la mitad de lo que me dice la parte
administrativa.
Un tercer caso fue cuando fui miembro director de otra importante institución
financiera. Aquí la situación era al revés, el gerente era muy amigo, el cual le
había salvado en una oportunidad que lo despidieran, trabajando él, para otra
empresa, más que se trataba de una injusticia, sin embargo, eso no fue
motivo para que yo fuera objetivo, ni para que se me quietara la maña de
auditar. Voy a ser muy breve y voy a señalar las deficiencias y el panorama
que encontré. En la junta directiva éramos cinco personas, sin embargo uno
de los compañeros era subalterno del presidente y éste, como los demás
compañeros, levantaban la mano a todo lo que decía él, cuando yo les
mostraba las pruebas que demostraban una deficiencia me apoyaban, cuando
el presidente no estaba, pero si este luego decía lo contrario, todos cambian
de opinión, a pesar de las pruebas. De verdad, por iniciativa hacía algunos
trabajos de auditoría para cuidarnos, pero encontré deficiencias muy graves
con pruebas suficientes y competentes en lo siguiente: en un arqueo que
realicé al descuento de facturas, también en revisión de la importación de
autos, en préstamos prohibidos, en la administración del gerente, también en
lo peligroso de una relación de amistad que sostenía el contador con el
tesorero, en la contratación de un familiar del presidente y en otros negocios.
Al final de mi período, el presidente me atravesó el caballo, hizo todo lo
posible para que yo no me religiera, de hecho ni lo intenté, eso era una bomba
de tiempo, manejada peligrosamente. Y no era mentira, al cabo de unos cinco
años, le explotó en la cara a él y a cada uno de los miembros que
acostumbran a estar levantando la mano, con lo cual le costó hasta su buen
puesto de trabajo. Absolutamente todo lo que les había informado y
descubierto, se les cumplió al pie de la letra. Hubo estafas millonarias,
falsificación de los estados financieros, en fin, la empresa quedó casi al punto
de la quiebra. Si me hubiera respetado mis recomendaciones, el señor
presidente, no hubiera quedado cesante ni mal parado, él perdió millones por
pesetas.

Conclusiones

Está bien que un presidente sea un líder, pero no por eso, siempre tiene la
razón. Las juntas directivas deben contar por lo menos, con un par de
asesores, independientes de la gerencia y de la auditoría, con la potestad de
realizar pruebas especiales que les recomienden los directores, para los casos
de dudas o de querer cerciorarse más de los asuntos. Es triste, cómo en este
último ejemplo, que por errores, estafas o falsificaciones de otros, se juzgue a
una directiva o director, o se les vean como inútiles, incapaces, o similar,
más que tiene poco tiempo para conocer los pormenores o que fueron
engañados.

Campañas preventivas por las Auditorías


Como una recomendación creo que se debería hacer campañas preventivas y
constantes, mediante comunicados periódicos.
Como ejemplo, este libro puede ser compartido a todos los funcionarios, de
instituciones públicas o privadas, porque realmente todos deben de defender
su compañía donde trabajan, y para que sirva de ejemplo de no hacer nada
delictivo ni negligente. Recuerden algo muy importante, todos los hijos son
orgullosos de sus padres y de sus trabajos, no hay peor cosa que ellos se
enteren que despidieron a sus progenitores, porque los encontraron en algo
indebido.
Otra recomendación es que se debe de buscar un cambio en el sistema
educativo de la Auditoría, creo que la mitad de la carrera debe ser totalmente
práctica y se podría llevar con convenios, de las universidades y las empresas
o instituciones.

Reflexión:

En este libro he insistido bastante dando mi palabra de hombre, como si


fuera un juramento, porque en el mundo, existen personas que dicen
cosas bonitas a otras, de lo que les gusta escuchar y estas se lo creen, sin
saber que son más que lisonjeros, para beneficiarse en sus trabajos.
También existe gente que se apropian de los hallazgos de otros, sin pena
alguna, como me pasó en más de una oportunidad, que le comentaba a
un amigo una idea, y éste, descaradamente y en mi cara, me la plagiaba,
como si fuera de él. Los descubrimientos, inventos, creaciones,
habilidades, trabajos, son como los libros, un derecho de autor. Ya no
gano nada, con mis experiencias, incluso, por callar, a lo mejor nunca
gané nada, pero por lo menos me quedan como recuerdo y orgullo, de
mis éxitos. No soy tan tonto, ni voy a ser modesto, pero no es todo
funcionario de auditoría, que le produce millones de dólares, en ahorros,
a las empresas, como lo hice, gracias a mis muchos hallazgos importantes
y algunos muy difíciles de descubrir. De ahora en adelante, cuando
alguien pida mi currículo, le daré mi libro.
Anécdotas finales

Primera pequeña anécdota: un sábado, invité a un café, a una amiga y ese día se me ocurrió decirle que
me explicara su negocio. Consistía en venderle mercancías de alimentos a los barcos. Ella me narró en
unos quince minutos, cómo, operaba. Al terminar, por la confianza y cariño que le tengo, de inmediato
le dije lo siguiente: “Tu contador, te está robando”, claro ella me preguntó, muy sorprendida, el por
qué, entonces le dije: Vaya y revisa (algunas cosas que le sugerí) y verás lo que te estoy diciendo. Así
hizo, no le costó mucho encontrar cómo le estaban robando, incluso, su hermano al darse cuenta
intervino la empresa, tanto que el tipo dejó todo botado y salió corriendo, así literalmente. Eso me dijo
mi amiga, yo no podía parar de reírme, en solo imaginármelo. Lo extraordinario, es que esa vez hice el
hallazgo, sin siquiera haber tocado un libro contable, ni conocer las instalaciones, solo la escuché a ella
por unos minutos y mi amiga tuvo la suerte de decírselo a un Auditor, sino todavía estuviera siendo
víctima de un delincuente. Esta es la diferencia de un Auditor con experiencia y audacia y uno de pura
teoría. Se los comento, para que los estudiantes se preparen bien y sobre todo, se les abra una mente de
auditor. Ahora les pregunto lo siguiente: ¿Cómo descubrí, que el contador les estaba robando?, fácil,
pero se los dejo de incógnita y si quieren preguntarme, talvez les de la respuesta, o ustedes, como
auditores o futuros auditores, descubran cómo lo hice.

Como anécdota final, la portada del libro, viene con una operación matemática, con la cual molestaba a
los profesores del ramo, tanto en el colegio como en la universidad y para el presente libro me acordé
de nuevo, ya que nunca me pudieron responder la misma, porque rompe una ley de las matemáticas.
Para mí, cero entre cero, es cero, o sea, nada entre nada, es nada, pero de acuerdo a la ley de la ciencia
de las matemáticas, todo número dividido entre sí mismo, es resultado es uno y el cero no es la
excepción, porque también es numérico y mucho más valioso cada vez que se le agrega a otro número a
su derecha, más cuando trata de una cuenta bancaria, jajaja La verdad, pueda ser que si tenga una
respuesta lógica, o sea la excepción, pero siempre la usaba de broma, para retar y molestar a mis
profesores. He escrito varios libros cuentos, novelas, frases, pero este que son de casos de la vida real,
es igual de interesante y me parece emocionante. Creo que eso hace que un estudiante se motive y
llegue a estudiar nuestra carrera, que lo menos que tiene, es de aburrida.

OTROS LIBROS

Mirando Tristemente por la Ventana: con más de mil seiscientos aforismos, frases y pensamientos
en más de quinientas páginas, publicada en Amazon. Mundiando: una Novela cómica de 400 páginas.
Balín: aforismos. Viaje por la China: otra novela de 4 personajes y también publicada en Amazon.
Para gente muy inteligente como usted: La parte 2 de un cuento corto para niños y la juventud pero
con más de 92 personajes, para que se protejan y no caigan en las drogas, en el crimen, para que no
abandonen los estudios y muchos temas, de prevención entre otros. Pánico Bancario Mundial: una
novela corta. Construya su casa: fácil, bonita y barata: es un libro para aconsejar la gente en todos
los aspectos de la construcción de su vivienda, para que puedan tener acceso la clase pobre y mediana.
Popo y la gallinita Elena: un cuento para niños. La conciencia de Patán: es la primera parte del libro
Una vida Inteligente. 3 LIBROS Expresiones de la Naturaleza, tomos uno, dos y tres: son tres libros
de más de 400 tipos de animales, plantas, flores y paisajes, expuestas en más de 500 fotos artísticas,
captadas por este servidor. Nuevos Descubrimientos Bíblicos: su nombre lo dice todo. Un emigrante
con una mano atrás y otra adelante: Una bella novela, romántica
Doy gracias a Dios, que me permitió escribir un libro más. Es muy difícil hacerlo, corregir, publicar,
diseñar la portada, ponerle el nombre, registrarlo y sacar las lágrimas a más de uno, así como alguna
sonrisa. Pero lo más costoso, es patrocinar los mismos, venderlos, que los lean. He escrito en diferentes
tipos de géneros y en todos he dejado mensajes de mucha utilidad, para el público y son muy bonitos e
interesantes. Quiero compartir con ustedes unas poquitas frases de una de mis obras, un cuento y que lo
he escrito como preventivo, para ayudarle a los niños, jóvenes y adultos, para que no caigan en drogas,
violencia, abandono de estudios, pero también para motivarlos a estudiar, a leer, a ser exitosos
profesionales y a proteger el medio ambiente. Así mismo contiene una pequeña historia, de un niño,
porque pienso que es beneficioso para toda la sociedad, ya que un presidiario regenerado, equivale a
resolver de antemano muchos problemas. A continuación las frases del libro “Para gente muy
inteligente como usted” (92 personajes y más de 40 temas)
1ra historia del libro, donde habla un niño de unos siete años:
Hola, me llamo Caliche. katherinecita tiene toda la razón y lo que van a vivir nuestros amigos, los
animalitos, en esta aventura, es para darnos muchos consejos, simples, pero sabios, algunos con
muy poquitas palabras, pero con un mensaje enorme. Toda la fauna y la flora, tienen el mismo
derecho que nosotros de disfrutar este mundo, por lo tanto, nos dicen cómo defenderse, para vivir
feliz, o para que le enseñemos a nuestros padres como deben hacerlo, porque muchas veces, son
ellos los que se meten en grandes problemas o vicios y nosotros los niños, la pasamos muy mal y
sufriendo, tal como nos sucede a mis cuatro hermanitas y a mí, desde que mi papi está en la
cárcel. Hay veces pienso que él no nos ama, debido a que cada día que pasa, mi mami tiene que
ver cómo nos da de comer y yo muchas veces sueño con una hamburguesita. Casi todas las noches
la veo a ella orando y llorando, por eso, solo le pido a Diosito que cuando él salga libre, se porte
bien, prefiero que no nos compre hamburguesas, a cambio de un besito todos días. Cuando yo sea
grande, me haré abogado y defenderé a mi familia, para que no sufran como mis hermanitas.
2da historia, es un pensamiento de Fofito el árbol:
Los grandes científicos tienen definidos solamente cinco sentidos: vista, olfato, oído, gusto y tacto,
pero al respecto Fofito dice lo siguiente: “Así es y cuatro, ubicados en la cabeza, sin embargo, yo
agrego otros sentidos como:
El sexto sentido que son nuestros presentimientos.
El sentido de la mente que son nuestros pensamientos, con la cual funciona todo nuestro cuerpo.
El sentido de hablar que es el que más usamos.
El sentido del sueño, que es una vida paralela a la nuestra, con múltiples historias, aventuras,
deseos, pesadillas.
Los sentidos de los nervios, de la sangre, del cabello.
También y no menos importante, el de las emociones que reúne las alegrías, el llanto, la
desesperación y la esperanza.
Tal vez, también agregaría el del espíritu, el cual, es quien maneja nuestras actitudes, deseos y
forma de comportarnos y otros como: Los sentido de respirar, roncar y bostezar, la pereza, el
dolor, las cosquillas, orinar, en fin, son muchos los que pienso, pero para ir finalizando por el
momento, un sentido que aunque no es el último, lo considero el más importante de todos, junto
al último y es: El sentido del amor, que nadie sabe de dónde nace, porque sale solo, de pronto y
además a quienes debemos amar o simplemente a quién amamos, pero es tan grande dicho
sentido y tan abstracto que a todos nos hacen felices, nos hace soñar, nos hace sentir, pero
también en muchos casos, nos hace llorar, sufrir e incluso puede afectar a todos los demás
sentidos, principalmente por perder esperanzas, soportar traiciones, o porque nunca nos amaron.
Por último, el sentido más grande e importante es la vida misma, así es, el Alma, esa que nos hace
transcurrir el tiempo, el conocimiento, las relaciones humanas, que nos hace sentirnos en este
mundo y que realmente no sabemos cómo fuimos afortunados de tenerla y a donde irá.
3 era historia, es un pensamiento de Patán, un gato enamorado:
Estaba en un sueño profundo y muy bello, la mañana la veía de colores preciosos, las tardes las
esperaba con ansiedad y en las noches quería seguir soñando. Con los aguaceros me inspiraba y
mi corazón estaba muy feliz, me sentaba en una mecedora, frente a un bosque rociado de una
llovizna suave y un olor a tierra mojada y árboles de pino, riquísimo, mientras acariciaba a mi
bella gatita, con mis sentimientos puros y sinceros. En este sueño, me reencontré con el creador,
con la vida misma, con la esperanza, con el amor, sentía un alivio en mi alma y un gozo espiritual.
El mundo era mío, de pronto, hacia planes, estaba muy entusiasmado, también ilusionado, yo que
no cantaba nada, ahora lo hacía a gritos, me entregaba por completo; en mi sueño también
soñaba y ¿Qué soñaba?: Abrazos, muchos abrazos, besos, inmensidad de besos y cariño, pero era
solo un espejismo inmenso, sin embargo, me parecía tan real que no lo podía creer, lo veía como
amor puro, reluciente como el oro, como la felicidad completa. Tal vez, por ser el sueño más lindo
que haya tenido y al despertar con un balde de agua de indiferencia (que es más frio que el
hielo), sentí que la realidad era la pesadilla, porque mis manos estaban vacías, mi soledad seguía
intacta, el amor lejos y nunca había tenido una gatita, un bosque, una mecedora y ni un día de
colores, era solamente un sueño.
Saludos, Boza.

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