Definiciones de Teologia Dogmatica, Moral...
Definiciones de Teologia Dogmatica, Moral...
Definiciones de Teologia Dogmatica, Moral...
Hay que tener en cuenta que cada una de ellas se apoyan o siempre van unidas, por eso hay que
investigarlas y explicarlas con una metodología que indique esa unión.
Teología dogmática: es la que principalmente se ocupa del dogma cristiano diferenciándose de la
teología moral. Es desarrollada como ciencia del dogma eclesiástico, cuya función principal es dar a
conocer los artículos de la Fe, teniendo como base la Sagrada Escritura y la Sagrada Tradición y
analizarlos “especulativamente” con recursos racionales. La Dogmática estudia la Santísima
Trinidad, la Creación, el ser y la obra de Jesucristo, desde su encarnación hasta su Resurrección, los
Sacramentos, la Virgen María y las verdades Escatológicas. La Escatología, además de ser una
sección de la dogmática, es la orientación de toda la Teología. Según el texto, todas las demás
disciplinas, de una u otra manera dependen de ella
Teología patrística: se define como el estudio del pensamiento, doctrinas y obras del cristianismo,
fundamentado por los padres de la Iglesia.
Teología bíblica: La Teología bíblica es la reflexión ordenada y sistemática en cuanto a los
conceptos y categorías de la Sagrada Escritura, con el fin de ordenarlos en un sistema coherente,
que permita ver sus relaciones y ayude a su comprensión. Tiene su base en un trabajo Bíblico
introductorio y exegético. Ayuda a plantar y a consolidar los fundamentos de la teología dogmática,
y coloca en estudio el principio que la Biblia es el alma de la teología. Tiene como función reforzar
y corroborar las tesis dogmáticas, de enriquecerlas, replantearlas y colocarlas en un contexto
diferente para que haya una mayor comprensión.
Teología moral: es la que tiene en cuenta las enseñanzas de la dogmática; plantea la vida cristiana
como un combate contra los vicios y se esfuerza por lograr con la Gracia de Dios todas las virtudes
cristianas. Esta Teología moral también tiene en cuenta las enseñanzas del Concilio Vaticano II
como centro de la moral a la persona que libre y voluntariamente sigue la llamada de Dios, vista y
apreciada desde su conciencia con el fin que desde su vocación que se encuentre, le apunte a la
santidad y a la vida eterna. El hombre es sujeto de la Gracia y del pecado, como también de una
vocación y de una respuesta a exigencias morales. La teología moral también se preocupa de
fundamentos trascendentales de la vida cristiana como la imagen de Dios, vocación a la santidad,
incorporación a Cristo, vida en el Espíritu y comunión fraterna. Se ocupa de la estructura de la
acción y busca las leyes que la regulan.
La teología espiritual: es la que determina y tiene en cuenta los fundamentos dogmáticos de los
temas que propiamente estudia. (lo mismo puede afirmarse de las otras disciplinas). También es la
disciplina que trata de Dios como fuente y término de la vida cristiana, está fundada en la
Revelación y en la experiencia de la Iglesia. También tiene en cuanta la santidad de la vocación del
bautizado. Esta Teología considera la evolución dinámica de la vida cristiana.
Teología pastoral: Esta Teología es la que le apunta a los aspectos salvadores del mensaje de la
Revelación y a la verdad dogmática de una forma operativa y eficaz en la misión y en el estudio de
la Iglesia en cuanto a las situaciones históricas, culturales, sociales, de su acción evangelizadora y
en una sociedad secularizada, velar por las relaciones de la Iglesia o con otras comunidades que no
comparten el mismo credo. Los presupuestos de esta Teología son: la voluntad salvífica de Dios, la
conciencia de que la Iglesia se halla por voluntad Divina y que está al servicio de la humanidad
entera y que todos los pueblos, en lo absoluto coloquen su mirada en la Gracia de Jesús.
Teología sacramental: Nace Jesucristo como verbo encarnado, Sacramento de Dios, abarca a la
Iglesia “que es en Cristo como un Sacramento” y se manifiesta en los signos sacramentales de la
nueva alianza que son los siete sacramentos de la Iglesia. Nos dice que lo sacramental corresponde
especialmente al cristianismo. Los sacramentos solamente resultan inteligibles en cuanto a la
eclesiología. Y a la vez, la Iglesia es signo divino y humano de una realidad que la supera, es decir,
que es Cristo y el Reino que supera esa realidad.