Cosas Del Barranco 10
Cosas Del Barranco 10
Cosas Del Barranco 10
Entre Guanches y
Franceses. Los Tacoronte de Tegueste, los últimos
habitantes de la casona de los Laureles
Esta décima entrega de Cosas del Barranco, la dedicaremos a una familia muy
poco conocida por la mayoría de las jóvenes generaciones. Esos niños que
nacieron y crecieron en la casona grande del camino de Los Laureles[1], esa
que los mayores llaman “Casa de los Tacoronte”, o que nuestro cronista J.D.
Darias llamó “del barón de Chasserieu”. Sí, porque fue este noble francés,
René, Cónsul del país de la Marsellesa, el que en 1879, adquiere la finca anexa
al camino de los Laureles[2]. En el periódico de la época nos encontramos, el
anuncio de una subasta pública, generada por el banco Hipotecario de España,
sobre una finca que fue propiedad de Don Joaquín García y Mesa que se
describe de la siguiente manera: “Una hacienda en parte de riego situada en el
Pueblo de Tegueste el viejo denominada “Los Laureles” en el camino que llaman de
los Laureles, destinada al cultivo de trigo, papas, tabaco, cochinilla y millo, con
laureles y árboles frutales, con casa para su dueño, habitación para medianero y
salón para frutos, con otros alpendes para pajar y gallinero, de cabida de treinta
fanegadas o sea quince hectáreas, setenta y cuatro áreas y ochenta y cinco
centiáreas, que linda por Naciente con tierras que nombran de la Isequilla que hoy
posee D. José Tabares, por el poniente con el camino de la Placeta, por el Norte con
el barranco de las Tapias y por el sur con el expresado camino de los Laureles”[3].
La familia del Barón de Chasseriau, tuvo una profunda relación con el mundo
napoleónico, sobre todo en las campañas americanas, la Lousiana, Santo
Domingo y Haití, que le permitieron conseguir méritos y puestos en el estado
francés. En la familia además de funcionarios, se conocen algunos artistas
como el pintor Theodore Chasseriau, muy importante en los círculos de Ingres
y se convirtió en uno de los pintores Neoclásicos más importantes de
Francia[5].
Fig.2.- General Victor Frederic Chasseriau.
De esa unión nacen cuatro vástagos, Olga, Abel, María Luisa y Elena, que se
criaron correteando por los jardines de la casona y asistieron a las grandes
fiestas que se celebraban con la flor y nata de la sociedad del momento.
Fig.3.- Los nietos del barón René Chasserieu, en los jardínes de la casona de
Los Laureles. Finales del S.XIX.
Su posición social les llevó a emparentarse con familias importantes de la
sociedad canaria, dedicados principalmente a carreras militares, comercio o
política. Olga con Don Luis Vandewalle y Fernández del Castillo, un importante
comerciante lagunero[8], Luisa con el capitán del Estado Mayor D. Enrique
Suárez de Deza y Roure[9], Abel, después de sus estudios en Madrid se dedicó
a la carrera militar en el cuerpo de artilleros. Y por último Elena Aguilar
Chasserieu, que contrajo matrimonio en la ermita de la Placeta con D. Eduardo
Tacoronte y Bretillard[10].Descendiente de una importante familia de Abona (
Vilaflor y San Miguel) . Estos últimos pasarán a ocupar la casa solariega de la
familia continuando esa mezcla franco-guanche a la que hace alusión el título
de este artículo.
Fig. 4.- Esquema genealógico de los habitantes de la casona de Los Laureles.
“En 5 de enero de 1509, ante Sebastián Páez, toma en renta, junto con don Pedro
de Tacoronte, 60 puercas de vientre de Gonzalo del Castillo, tiempo de 4 años. Se le
identifica como don Juan de Tegueste, natural y vecino. Interviene Francisco de
Tacoronte como lengua -intérprete o traductor-, lo que nos indica que los dos
contratantes aún no sabían el castellano. AHPSC”.
Elena era célebre en su época por su gran belleza. En las fiestas de la alta
sociedad tinerfeña y en los distintos periódicos, en sus gacetas de sociedad,
era considerada una de las jóvenes más bellas del momento.
Como miembro del Ateneo de La Laguna, fundado por su padre entre otros,
vivió la represión centralista de Madrid. Nos cuenta Antonio Cubillo[17], que la
conocida como bandera del Ateneo, estuvo escondida en la casona de los
Laureles varios años, tras la entrada de tropas en Santa Cruz para reprender
cualquier intento de independencia.
Fig.6.- Primera bandera independentista. Conocida como del Ateneo.
Por su posición social debió tener una vida cómoda, los periódicos de la época
lo retratan como un muy buen estudiante[18]. Quizás por influencia de su tío
Enrique Suárez de Deza y Roure, se dedicó a la vida militar, llegando a la
graduación de Teniente-coronel. Participó en la División Azul, donde fue herido
en un brazo. El 21-10-1941, es destinado a la 10ª batería del IV grupo del
Regimiento de Artillería 250. Tras la herida fue atendido en el Hospital de
campaña de Grigorowo, Soltzy, Plescau, Porchow, en las afueras de Leningrado
. En 1942 retorna a España por Irún.
Sus últimos años los vivió en Madrid, donde falleció y dejó descendencia, es el
causante de que en Madrid podamos encontrar en los listines telefónicos un
apellido tan guanche como el Tacoronte.
Una vida de lujo, que los vecinos de Tegueste, comentaban de forma socarrona
en los mentideros del pueblo, entre sorpresa y envidia de una vida
inalcanzable y que muchos buscaron cruzando el Atlántico, en la aventura de la
emigración.
BIBLIOGRAFÍA.
[5] Sabemos por noticias orales que en la casona se conservaban hasta dos
cuadros de Theodore Chasseriau, uno de los pintores neoclásicos franceses
más prestigiosos del momento. Gran parte de sus obras se conservan en el
museo del Louvre de París.
[8] Su familia tenía una gran propiedad en Pedro Álvarez. De hecho tras su
boda, pasaron su luna de miel en Pedro Álvarez. Periódico El Progreso, 13 de
junio de 1913.
[11]La Leyenda de la Boda real de la hija del Mencey deTacoronte, Tejina, con
el hijo de Aguahuco de la Punta, Tegueste. Recreada por el poeta Antonio de
Viana. Ver Cosas del Barranco 3: La negación del Menceyato de Tegueste.
[13]AHPTF: PN. L. 397, f 396 y 655; L. 191, s/f. AHPLP: PN. L.735, f. 142-148. FRC
XXIV: 1043. FRCXVI1I:123
[14] Nos aparece en los amillaramientos de 1910, 1931.
[15] Médico y político. Hermano del sacerdote Pantaleón, nació en san Miguel
de Abona en 1845, hijo de Agustín Tacoronte Trujillo y Josefa Hernández Feo.
Tras aprender las primeras letras en su pueblo natal obtuvo en La Laguna el
título de Bachiller; luego pasó a la Península donde cursó la carrera de
Medicina. Ya en posesión del título de médico cirujano, hacia 1877 estableció
su consulta en La Laguna, que continuaba abierta en 1904. Fue médico de la
Beneficencia en el Hospital de Dolores de dicha ciudad, retribuido con fondos
de la Provincia; en 1889 fue designado miembro de la Junta de Sanidad de La
Laguna, junto con otras destacadas personalidades de la ciudad. Pero en su
vida coexistieron otras actividades, la de propietario, en su mayor parte fruto
de la herencia paterna, y la política, como miembro del Partido Liberal de La
Laguna. En ésta última faceta, fue elegido concejal para el bienio 1897-99, y
nombrado teniente alcalde; como tal llegó a desempeñar la alcaldía de esta
ciudad, con carácter interino, hacia 1898. Falleció en su domicilio de La Laguna
en 1905, a los 59 años de edad.
11/04/2019