Ensayo Teología Del Cuerpo

Curso de Formación Teológica
Teología del Cuerpo Humano
Prof. Dr. Patricio Lombardo Bertolini
TEOLOGÍA DEL CUERPO Y LA EXPRESIÓN DEL CUIDADO PERSONAL
Alejandro Navarrete Ulloa
Interpretación Musical c/esp. Canto
12.12.2021
La teología del cuerpo ha presentado un gran avance en cuanto a las relaciones
personales de cada ser humano con su propio ser y su religión, ofreciendo una
visión mucho más cercana al mensaje de amor que relatan los textos sagrados con
la palabra de Dios, pero aún existen muchos problemas a la hora de expandir este
mensaje a las masas y, más importante aún, aplicarlo en nuestras vidas.
La teología es el estudio de Dios. Cada día el ser humano aprende más sobre el
mundo que lo rodea y lo compone, lo que ha obligado a las comunidades religiosas
de todo el planeta a ponerse al día con estos conocimientos y aplicarlos a sus
creencias no sólo para mantenerse actualizados con la sociedad, pero también para
poder profundizar en los conocimientos ya disponibles desde sus inicios.
La teología del cuerpo es una de las ramas más nuevas de la teología. Surgió a
partir de los discursos del papa Juan Pablo II como un llamado a corporeizar todo
lo que crees, a practicar lo que predicas, y a hacer visible lo invisible, ya que no se
pueden ver el alma, el espíritu, y la fe, pero sí se puede ver el cuerpo y utilizar los
cinco sentidos para reconocer el mundo y expresarse. También es una invitación a
reconciliarnos con nuestro propio cuerpo, ya que cuando te sientes a gusto contigo
mismo puedes realmente sentir el amor de tu creación y todo lo que implica y ha
implicado.
Como dijo Juan Pablo II, citado por Santiago Valencia López en su artículo “A
Propósito de la Teología del Cuerpo”, “El hecho de que la teología comprenda
también al cuerpo no debe maravillar ni sorprender a nadie que sea consciente del
misterio y de la realidad de la Encarnación. Por el hecho de que el Verbo de Dios
se ha hecho carne, el cuerpo ha entrado, diría, por la puerta principal en la teología,
esto es, en la ciencia que tiene como objeto la divinidad.” (2012, p.5)
Como Dios creó absolutamente todo en el universo, cada aspecto físico que seamos
capaces de reconocer es una manera que tiene Dios para comunicarse con
nosotros, pero el cuerpo, al haber sido creado a su imagen y semejanza, se vuelve
lo más cercano a su divinidad, y por ende, les da la posibilidad a las personas de
alcanzar esta divinidad en forma física.
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Esta revelación de por sí ya es un gran paso para la humanidad en cuanto a sentirse
más cercana a Dios, pero sin importar cuánto hayamos avanzado como especie,
aún estamos muy lejos de desencadenar todos los misterios sobre el cuerpo
humano debido a la complejidad de este y la gran cantidad de excepciones que se
presentan en cada caso específico.
Aún así, los avances conseguidos hasta el día de hoy ofrecen una amplia variedad
de opciones, consejos, conocimientos, y actividades que nos permiten realmente
aplicar el mensaje de la teología del cuerpo y lograr sus objetivos.
El cuerpo es sagrado. Es nuestro medio de expresión e interacción con el mundo,

por lo que es deber de cada persona aprender a cuidarlo y poner su conocimiento
en marcha cada día. Para esto se presentan distintas categorías en las que hay que
desarrollar estos cuidados: física, psicológica, y espiritual.
Pero además, el cuidado personal se extiende más allá del propio cuerpo al verse
directamente afectado por todo lo que lo rodea, estos son las personas (relaciones
personales), los ambientes (tamaño, temperatura, limpieza, diversidad, etc.), las
situaciones que vivimos, y el significado que le damos a cada una de estas
interacciones. Estos cuatro puntos se pueden encasillar en los cuidados físicos,
psicológicos y espirituales libremente.
A la hora de explorar las necesidades físicas del cuerpo, podemos aplicar los
conocimientos impartidos por Husserl y Heidegger en torno a la fenomenología, los
cuales nos invitan respectivamente a volver a ver las cosas con una visión
observadora y no crítica para poder analizarlas y aprender de ellas, y a ver cómo
habita el ser humano en esta realidad para así obtener las respuestas a cada
interrogante que pueda ser generalizada o requiera de un análisis personal de cada
individuo.
Con la aplicación del método fenomenológico (vivir una experiencia, analizar su

esencia, sintetizar la información) podemos mirar la realidad con otros ojos y
descubrir cosas nuevas a nuestro alrededor y dentro de nosotros.
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El aspecto físico del cuerpo implica un cuidado tanto por fuera como por dentro de
sí, por lo que la mezcla entre una dieta balanceada con alimentos de buena
procedencia, una rutina de movimiento que abarque todo el cuerpo a lo largo de la
semana, un descanso nocturno lo suficientemente largo, pausas a lo largo de las
actividades diarias, y preparaciones previas para estas actividades son lo ideal para
cada persona y garantizará una salud duradera a lo largo de los años. Para
conseguir esto va a ser necesario empezar por el movimiento, ya que el movimiento
crea energía, y la energía es necesaria para mantener consistencia y perseverancia
en la práctica de estos cuidados.
El ser humano es cuerpo, por lo que requiere de un entorno físico para su expresión.
De este modo, cada persona notará durante su vida que hay entornos que afectarán
de manera positiva o negativa su desempeño en el día a día dependiendo de su
locación, estado, y significado. Hay personas que funcionan bien en espacios
cerrados, otras que tienen una mayor resistencia a la exposición solar, otras que se
desenvuelven a la perfección en zonas con mucha humedad, etc. Si bien todo esto
se puede entrenar, lo óptimo es que cada persona descubra a través de la práctica
cuáles son las cualidades en que mejor se desempeñen.
Así mismo, la práctica de diversas actividades requerirá de lugares específicos para

su realización. Cuando estos lugares adquieren un objetivo, te permiten conectar
con tus sentidos y con la historia y el pasado, se convierten en espacios sagrados.
El ser humano necesita de estos espacios para la creación de rutinas, y conectar
con otras personas y consigo mismo, por lo que es imprescindible el respeto y
cuidado de estos lugares también.
La mente es una representación interna de los sentidos. Para conseguir un balance

que garantice mantener una paz interior y favorezca el desempeño corporal a corto
y largo plazo es necesario tener un control sobre los pensamientos, ideas, y
concepciones que le damos a la realidad a través de nuestro vocabulario, nuestro
procesamiento del conocimiento, y nuestra toma de decisiones en todo momento.
La manera de conseguir esto es a través de la claridad de tus metas en cada

aspecto de tu vida. Saber lo que quieres lograr desde hoy en adelante con una visión
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a futuro que te permita decidir los pasos a tomar para lograr dichas metas. Las
hierofanías son una gran manera de descubrir tu llamado y encontrar ese algo que
te impulse a levantarte cada mañana con las ganas de lograr más y ser más, de
tener un impacto positivo en el mundo.
Todo lo anterior de por sí ya supone un cuidado espiritual, ya que el cuidado óptimo

de la mente y cuerpo requieren de una conexión y conciencia personal profunda
que genera paz, y no hay nada como vivir una vida en que te sientas a gusto con
todo lo que eres y haces.
En conclusión, nada de esto es fácil de lograr, pero una vez logrado, aplicado con
consistencia, perseverancia, y un ojo crítico y observador de la realidad, se volverá
parte de cada persona y hará que todo fluya con naturalidad. El cuerpo, mente, y
alma son un todo, por lo que cuidar uno de ellos implicará cuidar a los demás, y esto
se verá reflejado en toda interacción con el mundo que nos rodea de manera
positiva.
La experiencia es el modo que tenemos de acceder al conocimiento de nuestro

mundo y de nosotros mismos, por lo que la aplicación del método fenomenológico
es el camino a seguir para conseguir todo lo que se desee.
La teología del cuerpo abre la puerta a muchas conversaciones sobre el cuidado

personal y de quienes nos rodean. El cuerpo moldeará los espacios en que se
encuentre, las personas que conozca, y a sí mismo a través de sus hábitos,
convicciones, necesidades, y acciones pequeñas y grandes.
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BIBLIOGRAFÍA
Valencia López, Santiago. Cuestiones Teológicas. A Propósito de la Teología del

Cuerpo. Vol. 39. Junio, 2012. Medellín-Colombia. pp. 161-169.
YouTube. Your Body Reveals a Great Mystery! | The Sacramentality of The Body |
Theology of The Body. Theology of the Body Institute. March 2021.
YouTube. Why Theology of the Body is for Everybody | The Ultimate Meaning of Life
| Theology of The Body. Theology of the Body Institute. February 2021.

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Así mismo, la práctica de diversas actividades requerirá de lugares específicos para

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La manera de conseguir esto es a través de la claridad de tus metas en cada

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