Jurisprudencia 902
Jurisprudencia 902
Jurisprudencia 902
del Tribunal Supremo de Justicia, que establece con carácter vinculante que, en el
procedimiento penal ordinario y en el procedimiento especial por delitos menos graves,
previstos en el Código Orgánico Procesal Penal, la víctima -directa o indirecta- de los
hechos punibles investigados en dichos procesos, puede, con prescindencia del
Ministerio Público, presentar acusación particular propia contra el imputado, cuando ese
órgano fiscal no haya presentado el correspondiente acto conclusivo dentro: i) del lapso
de ocho (8) meses, seguido del denominado plazo prudencial que fije el Tribunal en
Funciones de Control en atención al tipo penal objeto del proceso, establecido en el
Artículo 295 eiusdem, en el procedimiento ordinario; ii) del lapso de 60 días continuos,
previsto en el Artículo 363 ibídem, en el procedimiento especial por delitos menos
graves, publicada en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N°
6.428 Extraordinario de fecha 1º de febrero de 2019.
terceras personas, antes identificado fue realizado por el Ex Fiscal Superior del Estado
Zulia Abogado Richard Linares en representación de ese Órgano (sic), quien tuvo la
Zulia, representada en ese acto por la abogada Alcira Josefina Torres Rodríguez, por
la responsabilidad penal de los autores y participes, sin que estos hayan sido
imputando (sic) según nuestro criterio jurídico, por los delitos de Apropiación (sic)
dispuesto de sus bienes que constituyen las herramientas para su trabajo, causándole
Pacifica (sic) previsto y sancionado en el Articulo (sic) 472, en virtud que el ciudadano
ocurrieron los hechos por más de 17 años, siendo perturbado por los ciudadanos
Ernesto Gómez Roo, Ricardo Gómez Roo y el abogado Gerardo González Nagel, este
último quien fungió ser abogado de la parte denunciada, también era abogado del
Venezolano”.
Que, “… [el] diez (10) de Junio (sic) de 2015, la Fiscalía Cuadragésima Octava
primero del artículo 300 numeral 1 del Código Orgánico Procesal Penal,
Que, “… [el] diez (10) de Julio (sic) de 2015, mediante decisión signada bajo el
Control del Circuito Judicial Penal del estado Zulia; (…) declaró con lugar la solicitud
conformidad con lo establecido en el ordinal 1o (sic) del artículo 300 del Código
Orgánico Procesal Penal vigente, a favor de los investigados ERNESTO GÓMEZ ROO,
artículo 468 del Código Penal, cometido en perjuicio del antes mencionado JESÚS
RECURSO DE APELACIÓN por parte del Abogado (sic) CARLOS JAVIER CHOURIO,
ESTADO ZULIA”.
Que, “… [el] tres (03) de Mayo (sic) de 2016, la Sala PRIMERA de la CORTE
declara con lugar el recurso de apelación interpuesto por parte del Abogado CARLOS
Que, “… [el] diez y ocho (sic) (18) de Octubre (sic) de 2016 el Juzgado Quinto
Itinerante del Circuito Judicial penal del Estado Zulia, vista la decisión de la Corte de
declaró sin lugar la solicitud de sobreseimiento efectuada por la Fiscalía del Ministerio
Que, el “… uno (01) de Marzo (sic) del 2017, ante la decisión dictada por la
Juez Quinto Itinerante del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, de no decretar el
lo previsto en el primer aparte del artículo 305 del Código Orgánico Procesal Penal
Judicial del Estado Zulia, representada para ese entonces por el Abogado (sic) Richard
Linares, emite opinión signada con el número 016-2017 (…), en los siguientes
términos:
‘ ...(omisis)... Sentada (sic) las consideraciones que fueron expuestas sobre este asunto,
estima preciso destacar que practicada (sic) la presente fecha, cualquier otra diligencia
de investigación, resulta inoficiosa, toda vez que la acción penal para perseguir la
acción se encuentra evidentemente prescrita a la presente fecha, por haber operado la
prescripción ordinaria habida cuenta el Delito (sic) de APROPIACIÓN INDEBIDA
CALIFICADA contempla una pena de prisión de uno (1) a cinco (5) años, siendo
aplicable de conformidad con el artículo 37 del Código Penal, su término medio, a
saber tres años de prisión, correspondiéndole en consecuencia un lapso de prescripción
de tres años, según las previsiones del articulo 108 ordinal 5° (sic) eiusdem.
Así mismo se observa que desde la fecha en que ocurrieron los hechos, es decir, el 15
de Octubre (sic) del 2012, la actuación practica (sic) en la presente causa, fue
realizada en fecha Septiembre (sic) del 2014, si es que hasta el día de hoy se halla
presentado circunstancia que interrumpa la prescripción ordinaria establecidas en el
artículo 110 del Código Penal Sustantivo (sic) y habiendo transcurrido desde la fecha
de comisión del hecho 15 de Octubre (sic) del 2012, hasta la presente es fecha es un
total de 4 años y cuatro meses aproximadamente, tiempo este necesario para que opere
la prescripción ordinaria en la presente causa.
efectuada por la Fiscalía Cuadragésima Octava del Ministerio Publico (sic) de esta
Que, “[c]on esta expresión del Ministerio Público sentada por escrito se
perecer por falta de diligencias hacer prescribir una causa y causar un gravamen
irreparable a una víctima, que en todo el transcurso del proceso diligenció activamente
la causa en busca de justicia, lo hacen configurar o presumir como una colusión con la
parte contraria o cualquier otro motivo fraudulento para solicitar el sobreseimiento.
convicción se desprenden otros delitos que configuran una concurrencia ideal en los
con lo previsto en el Primer (sic) aparte del artículo 305 del Código Procesal Penal
vigente para la fecha se ordenó remitir las actuaciones al Juzgado Quinto Itinerante del
Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, quien mediante decisión número 2339-17 (…),
suscrita por el Abogado (sic) Richard Linares, salvando su opinión en contrario en los
siguientes términos:
Ahora bien, ese (sic) Juzgado Quinto itinerante, de conformidad con lo establecido en
el Segundo (sic) Aparte (sic) del Artículo (sic) 305 del texto adjetivo penal, PROCEDE
Superior del Ministerio Publico, bajo los siguientes términos: Quien aquí decide no
comparte lo manifestado por la vindicta pública, al indicar que los hechos investigados
no se encuentra evidentemente prescrito y por cuanto faltan por realizar una serie de
esclarecimiento de los hechos objeto del presente proceso penal, para determinar la
identidad de los autores y participes del hecho punible; y siendo que los resultados de
legal por parte del Ministerio Publico (en este caso) que sustente el pedimento de la
las cuales se evidencia una carencia total de investigación y poder así recabar
así como a la propiedad, previstos en los artículos 20, 26, 49.1, 87 y 115
constitucionales.
Ministerio Publico del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia (ejercida por el
decidir sobre la presente acción de amparo, he alegado a su vez que los derechos
persona del Ciudadano (sic) Jesús Lombardi que con la omisión consiente desplegada
por la Fiscalía Superior del Ministerio Publico (sic) del Circuito Judicial Penal del
Estado Zulia, representada para ese entonces por el Abogado Richard Linares, al
presente causa, así como los comentarios que los abogados de las personas
denunciadas lo hacían saber en los predios de los Tribunales (sic), que esa causa no
iba a prosperar ni ninguna otra que interpusiera el ciudadano Jesús Lombardi, porque
todo lo iba a resolver el abogado Richard Linares, no constituye una ofensa lo antes
dicho por lo contrario, con las pruebas que se promueven en la presente Acción (sic) de
Lombardi, nunca fueron evacuadas, ni valoradas, mucho menos tomadas en cuenta por
Público, que son categóricos en manifestar que deben realizarse todas las pruebas
necesarias y pertinentes antes de solicitar un sobreseimiento”.
Que, “[e]l derecho al libre desenvolvimiento de la personalidad se le ha
Destacándose una amplia trayectoria empresarial que data desde el año 1.993,
Que, “[c]on esta acción desplegada se ha hecho nugatorio e inviable todos los
posesión del inmueble que venía ejerciendo desde Diciembre (sic) del año de 1994, por
omisiva y violatoria a la Tutela (sic) Judicial (sic) Efectiva (sic), al Debido (sic)
Proceso (sic), y al Derecho (sic) a la Defensa (sic) por parte del Ministerio Público
aun continua (sic), conculcando en forma definitiva su Derecho (sic) al Trabajo (sic)”.
Estado Zulia con voto salvado del Juzgado Quinto Itinerante de Primera Instancia del
Circuito Judicial Penal del Estado Zulia en fecha 19 de Junio de 2017 y la cual es objeto
posesión legítima, pacífica y notoria desde Diciembre (sic) del año 1994, de un
Segundo Circuito de Registro del Distrito Maracaibo del Estado Zulia, el día 11 de
Octubre de 1.995, bajo el No. 13, Protocolo 1, Tomo 22, (folios 67 al 71 de la pieza 1).
presente causa se encuentra el Registro de Información Fiscal RIF que data del año
1994 (folio 141 de la pieza 1), así como la narración y testimonio del ciudadano Jesús
que se observa en los folios 46 al 55 del Cuaderno (sic) de Apelación (sic), detentando
con lo previsto en los artículos 585 y 588 del Código de Procedimiento Civil, en
concordancia con el artículo 130 de la Ley Orgánica del Tribunal Supremo de Justicia a
Justicia cese la Perturbación de dicha posesión, acción ejercida por las personas
posesión legitima (sic) que se viene ejerciendo sobre dicho inmueble por parte del
ciudadano Jesús Lombardi, hasta que concluya el proceso Penal (sic) que ha de
causa.
Por otra parte, recurrimos a esta honorable sala (sic) como complemento y en protección
Bolivariana de Venezuela, el cual establece: "El Estado protegerá a las víctimas de los
Roo (…) y Gerardo González Nagel (…), mientras transcurran las investigaciones
Ciudad de Maracaibo del Estado Zulia, del cual, el ciudadano Jesús Lombardi,
posesión pacifica (sic), legitima (sic) y notoria desde Diciembre (sic) del año 1.994,
Bolivariana de Venezuela:
Justicia, bajo la Ponencia del Magistrado Dr. Jesús Eduardo Cabrera Romero, en fecha
Roo, que se desprenden de las actas procesales se declare con lugar la presente acción
de Amparo (sic) Constitucional (sic) y se ordene al Ministerio Público realizar todas las
imputación correspondiente.
audiencia correspondiente.
QUINTO: Declarada con lugar la Acción (sic) de Amparo (sic), solicitamos muy
referidas al Debido (sic) Proceso (sic) y a la Tutela (sic) Judicial (sic) Efectiva (sic).
QUINTO: Declarada con lugar la Acción (sic) de Amparo (sic), solicitamos muy
las pruebas solicitadas por la víctima y el Ministerio Público, las cuales fueron omitidas
que se desprenden de las actas procesales, tomando en consideración que no solo fueron
los bienes objetos de comisión de delito del Ciudadano (sic) Jesús Lombardi, sino
María Jiménez.
SEXTO: Declarada con lugar la Acción (sic) de Amparo (sic), solicitamos muy
II
MOTIVACIÓN PARA DECIDIR
La presente acción de amparo ejercida conjuntamente con medidas cautelares
innominadas, contra las actuaciones realizadas por el abogado Richard Linares, en su
carácter de Fiscal Superior del Ministerio Público de la Circunscripción Judicial del
Estado Zulia, mediante la cual ratificó la solicitud de sobreseimiento de la causa
formulada por la Fiscalía Cuadragésima Octava del Ministerio de la mencionada
Circunscripción Judicial, en el asunto identificado con el alfanumérico VP03-P-2015-
018387, seguido ante el Juzgado Quinto Itinerante de Primera Instancia en Funciones de
Control del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, con sede en Maracaibo, con
ocasión de los hechos delictivos denunciados por el hoy accionante, solicitud esta, que
fue declarada con lugar por el órgano judicial señalado, mediante decisión número
2339-17, dictada el 19 de junio de 2017.
Previo a cualquier análisis sobre el fondo, esta Sala debe pronunciarse sobre la
admisibilidad de la acción de amparo constitucional interpuesta, y en este sentido, se
evidencia de actas que, la conducta atribuida al Fiscal Superior del Ministerio Público
de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia ocurrió, según afirma el accionante, el 1
de marzo de 2017, y la presente acción de amparo fue interpuesta el 15 de enero de
2018, es decir, una vez transcurridos más de seis (6) meses desde la actuación señalada
como lesiva; de tal modo que al no evidenciarse respecto de esta actuación, afectación
al orden público, pues los derechos constitucionales cuya tutela se solicitó, no exceden
de la esfera particular de la parte actora, razón por la cual, la acción de amparo
interpuesta resulta inadmisible por caducidad, a tenor de lo previsto en el artículo 6.4 de
la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y Garantías Constitucionales. Así se
declara.
Sin perjuicio de lo anterior, esta Sala evidencia además razones suficientes que
harían procedente declarar terminado el procedimiento por abandono de trámite, toda
vez que, se interpuso el amparo el 15 de enero de 2018, y transcurridos más de seis (6)
meses, fue que la parte actora impulsó de nuevo el proceso, esto fue el 8 de agosto de
2018, ello conforme al artículo 25 de la Ley Orgánica de Amparo sobre Derechos y
Garantías Constitucionales y a la reiterada jurisprudencia de esta Sala.
Es el caso que, esta Sala observa prima facie, en las señaladas decisiones
judiciales, una afectación al orden público constitucional, al desconocer principios como
el debido proceso, la independencia y autonomía judicial, la intangibilidad de la cosa
juzgada formal y material, e igualmente el derecho a obtener la reparación de los daños
sufridos por las víctima de delitos comunes; aunado a ello, que las mismas se
fundamentan erróneamente en el único aparte del artículo 305 del Código Orgánico
Procesal Penal.
Esta Sala advierte que las decisiones n.° 1702-16 del 18 de octubre de 2016 y n.°
2339-17 del 19 de junio de 2017, ambas dictadas por el Juzgado Quinto Itinerante de
Primera Instancia en Funciones de Control del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia,
con sede en Maracaibo, contienen vicios de orden público que inciden en la esfera de
derechos del accionante, así como de la colectividad, pues afrentan los principios del
debido proceso, la cosa juzgada material y formal, e igualmente el derecho a obtener la
reparación de los daños sufridos por las víctimas de delitos comunes, por ello, es
preciso examinar los fallos señalados, por estar construidos erróneamente sobre la base
del único aparte del artículo 305 del Código Orgánico Procesal Penal, con relación al
cual esta Sala ya se pronunció en sentencia n.° 537/2017 del 12 de julio (caso: Oscar
Prim y Otros).
En este orden de ideas, se debe reiterar, tal como lo estableció esta Sala en
sentencia n.° 93/2001 del 6 de febrero (caso: CORPOTURISMO), los criterios para la
procedencia de la potestad revisora, dentro de lo cual destaca:
Para determinar el ámbito de la potestad revisora de sentencias de amparo
definitivamente firmes por parte de esta Sala, es necesario ante todo, interpretar lo
establecido en el Texto Constitucional. En este sentido, el numeral 10 del artículo 336
antes citado, establece la potestad extraordinaria de esta Sala para revisar las sentencias
de amparo definitivamente firme, así como de control de constitucionalidad de leyes o
normas jurídicas dictadas por los tribunales de la República. Ahora bien, esta norma
constitucional no intenta de manera alguna crear una tercera instancia en los procesos de
amparo constitucional o de control de constitucionalidad de leyes o normas jurídicas. El
precepto constitucional referido lo que incorpora es una potestad estrictamente
excepcional, extraordinaria y discrecional para la Sala Constitucional. Es por ello que
esta Sala, al momento de ejecutar tal potestad de revisión de sentencias definitivamente
firmes, está obligada, de acuerdo a una interpretación uniforme de la Constitución, y en
consideración de la garantía de la cosa juzgada, a ser excesivamente prudente en cuanto
a la admisión y procedencia de recursos que pretendan la revisión de sentencias que han
adquirido dicho carácter de cosa juzgada judicial.
… (Omissis)…
Por consiguiente, esta Sala considera que la propia Constitución le ha otorgado la
potestad de corregir las decisiones contrarias a las interpretaciones preestablecidas por
la propia Sala o que considere la Sala acogen un criterio donde es evidente el error en la
interpretación de las normas constitucionales. Esto tiene el propósito de imponer la
potestad constitucional de la Sala Constitucional de actuar como “máximo y último
intérprete de la Constitución”. Se desprende entonces del artículo 335 de la Constitución
de la República Bolivariana de Venezuela, que esta norma establece expresamente la
potestad de revisión extraordinaria de sentencias definitivamente firmes que se aparten
de la interpretación que de manera uniforme debe imponer esta Sala. Posee entonces
potestad esta Sala para revisar tanto las sentencias definitivamente firmes expresamente
establecidas en el numeral 10 del artículo 336 contra aquellas, tal como se dejó sentado
anteriormente, así como las sentencias definitivamente firmes que se aparten del criterio
interpretativo de la norma constitucional que haya previamente establecido esta Sala, lo
que en el fondo no es más que una concepción errada del juzgador al realizar el control
de la constitucionalidad, y así se declara.
III
DISPOSITIVA
Por los fundamentos antes expuestos, este JUZGADO QUINTO ITINERANTE DE
PRIMERA INSTANCIA EN FUNCIONES DE CONTROL DEL CIRCUITO
JUDICIAL PENAL DEL ESTADO ZULIA, administrando justicia en nombre de la
República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley,
DECLARA. PRIMERO: SIN LUGAR LA SOLICITUD FISCAL, y en consecuencia
NIEGA EL SOBRESEIMIENTO DE LA CAUSA, solicitado por la Representación de
la Fiscalía Cuadragésima Octava del Ministerio, en la cual figura como víctima el
ciudadano JESÚS JAVIER LOMBARDI BOSCÁN. SEGUNDO: SE ACUERDA
ENVIAR LAS ACTUACIONES A LA FISCALÍA SUPERIOR DEL MINISTERIO
PÚBLICO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ZULIA, a tenor
de lo establecido en el primer aparte del artículo 305 del Código Orgánico Procesal
Penal vigente (…).
El 5 de marzo de 2017, el abogado Richard Paul Linares, Fiscal Superior del
Ministerio Público de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, presentó escrito
mediante el cual ratificó la solicitud de sobreseimiento formulada el 10 de junio de 2015
por la Fiscalía Cuadragésima Octava del Ministerio Público de esa misma
Circunscripción Judicial, señalando como fundamento jurídico de tal actuación, el único
aparte del artículo 305 el Código Orgánico Procesal Penal.
El 19 de junio de 2017, se verificó el tercer pronunciamiento judicial
relacionado con la solicitud fiscal de sobreseimiento, en la que, el Juzgado Quinto
Itinerante de Primera Instancia en Funciones de Control del Circuito Judicial Penal del
Estado Zulia, con sede en Maracaibo, a cargo de la Jueza Edumary Ferrer, dictó la
decisión n.° 2339-17, mediante la cual decretó el sobreseimiento de la causa en el
asunto penal primigenio, con expresa mención de su opinión contraria, sobre la base de
los siguientes motivos:
Siendo el Fiscal del Ministerio Público, el titular de la acción penal, es quien está
obligado a ejercerla, desarrollando para ello, los trámites que correspondan según la
investigación desplegada. Dicha titularidad permite, como parte de buena fe, pronunciar
su apreciación al caso, todo ello en atención al cúmulo probatorio obtenido como resulta
de la investigación.
Es precisamente en la fase investigativa del proceso, que se recaban los elementos
tendientes a confirmar o descartar la sospecha acerca de la comisión de un hecho
punible y sus posibles culpables a fin de lograr en definitiva, que el Ministerio Público
presente el correspondiente acto conclusivo que bien puede ser para promover el juicio
penal (acusación), solicitar su archivo o bien para clausurar la persecución penal
(sobreseimiento), bajo el ejercicio debido de las vías legales en la forma honesta y
prudente para determinar la comisión o no de un hecho punible.
En el caso de autos, el Ministerio Público solicita el decreto del sobreseimiento,
basándose en que el hecho denunciado, no se realizó, tal como se desprende en la
presente investigación.
Ahora bien, ese Juzgado Quinto Itinerante, de conformidad con lo establecido en el
segundo aparte del artículo 305 del texto adjetivo penal, PROCEDE A EMITIR SU
OPINIÓN CONTRARIA a la solicitud efectuada por la Fiscalía Superior del Ministerio
Público, bajo los siguientes términos: Quien aquí decide no comparte lo manifestado
por la vindicta pública, al indicar que los hechos investigados por parte de la Fiscalía
Cuadragésimo Octava del Ministerio Público y contenidos en el expediente Fiscal N°
M.P-47155-2013, no se realizó tal y como se evidencia en el presente expediente, pues
considerando que nos encontramos en presencia de un hecho punible de acción pública,
perseguible de oficio que no se encuentra evidentemente prescrito, y por cuanto faltan
por realizar una serie de diligencias que pueden ser consideradas como necesarias y
determinantes para el esclarecimiento de los hechos objetos (sic) del presente proceso
penal; para determinar la identidad de los autores o partícipes del hecho punible; y
siendo que de los resultados de la actividad de investigación podrían llevar a concluir,
quizás en un acto conclusivo distinto al aquí solicitado. A criterio de este Tribunal, al no
hallarse motivación legal por parte del Ministerio Público (en este caso) que sustente el
pedimento de la Fiscalía 48° del Ministerio Público, observándose una completa
disparidad entre el pedimento efectuado por la vindicta pública y el contenido de las
actas procesales en las cuales se evidencia una carencia total de investigación y poder
así recabar múltiples y suficientes elementos de convicción que justifiquen la actuación
fiscal así como el pedimento efectuado.
DISPOSITIVO
Por los fundamentos antes expuestos, este JUZGADO QUINTO ITINERANTE DE
PRIMERA INSTANCIA DEL CIRCUITO JUDICIAL PENAL DEL ESTADO ZULIA,
administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por
autoridad de la Ley, DECRETA: el SOBRESEIMIENTO DE LA CAUSA, iniciada en
fecha 04-02-2013, por denuncia impuesta ante la sede del Ministerio Público, por el
ciudadano JESÚS JAVIER LOMBARDI BOSCÁN, de conformidad con lo dispuesto
en el Ordinal 1° del Artículo 300 del Código Orgánico Procesal Penal en concordancia
con lo previsto en el segundo aparte del artículo 305 ejusdem, por cuanto el hecho que
dio origen a la investigación no se realizó. Regístrese esta decisión; déjese copia en
archivo, notifíquese y remítase las actuaciones al archivo judicial en su oportunidad
legal.
Una vez verificado el iter del proceso penal primigenio, esta Sala procede a
realizar las siguientes consideraciones:
Inicialmente, encuentra esta Sala necesario indicar que, la decisión n.° 1702-16,
dictada el 18 de octubre de 2016 por el Quinto Quinto Itinerante de Primera Instancia en
Funciones de Control del Circuito Judicial Penal del Estado Zulia, con sede en
Maracaibo, estableció por un lado, la declaratoria sin lugar de la solicitud de
sobreseimiento formulada por el Ministerio Público, por encontrar que la misma no
llena los requisitos exigidos por la norma adjetiva penal y, por otro lado, ordenó la
remisión de las actuaciones del expediente penal primigenio a la Fiscalía Superior del
Ministerio Público de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, con fundamento en
el único aparte del artículo 305 del Código Orgánico Procesal Penal.
Así pues, esta Sala observa que el Código Orgánico Procesal Penal no establece,
un lapso específico para la conclusión de la fase investigativa. Sino que, como lo prevé
el artículo 295 eiusdem, el imputado o la víctima pueden solicitarle al Juez de Control
respectivo que establezca, por haber transcurrido un tiempo considerable, un lapso
prudencial para que el Ministerio Público concluya la investigación. A tal efecto, el Juez
de Control, con el fin de resolver la petición del imputado o la víctima, debe verificar si,
desde la oportunidad en que se dictó la orden de inicio de la investigación prevista en el
artículo 282 ibidem, realmente ha transcurrido un tiempo excesivo sin que el Ministerio
Público haya realizado una debida investigación. Ello significa que, a partir de la
oportunidad en que el Juez de Control le señale al Ministerio Público ese lapso
prudencial, la fase de investigación en el proceso penal ordinario deja de ser indefinida.
En este contexto debe indicarse que, para la validez del acto conclusivo, la
actividad investigativa dirigida por el Ministerio Público debe ser completamente
apegada a derecho, tanto por la forma en que se desarrollen las pesquisas (entre otras
cosas, garantizando los derechos constitucionales y legales de las partes), como por la
oportunidad en que sean ordenadas, obtenidas e incorporadas, pues cabrían
observaciones respecto a las diligencias de investigación materializadas fuera de esta
etapa procesal. De ahí la importancia de establecer con precisión la oportunidad cuando
inicia y termina la fase preparatoria.
En este orden de ideas, resulta oportuno traer a colación el contenido del artículo
254 constitucional, que preceptúa el principio de autonomía e independencia judicial en
los siguientes términos:
Así las cosas, la primera decisión objeto de la presente revisión de oficio, inició
su dispositivo estableciendo como primer particular, la declaratoria sin lugar de la
solicitud de sobreseimiento planteada por el Ministerio Público, lo que en criterio de
esta Sala, determinaba la remisión de las actuaciones a la Fiscalía Superior del
Ministerio Público, pero para que éste ordenara a otro Fiscal de Proceso de la misma
Circunscripción Judicial, pues quien formuló la solicitud de sobreseimiento inicialmente
ya emitió opinión al respecto, la continuación de la investigación y posterior
presentación del acto conclusivo a que haya lugar, con estricto cumplimiento de los
requisitos exigidos en la norma adjetiva penal.
Asimismo esta Sala considera necesario señalar, con relación al caso bajo
estudio que, como el órgano judicial en funciones de control negó la solicitud de
sobreseimiento por haber advertido de las actas, el incumplimiento de algunas
actividades investigativas por parte del Ministerio Público, tal resolución forma parte de
las que tienen carácter de cosa juzgada en su dimensión formal, mas no material. Ello
así porque una vez que el órgano fiscal prosiga con las investigaciones y subsane las
faltas advertidas, es decir, que efectivamente obtenga los resultados de las diligencias de
investigación que ordenó practicar, y asimismo, dé oportuna y adecuada respuesta a las
solicitudes planteadas por la víctima, podrá presentar el acto conclusivo a que haya
lugar tomando en cuenta los resultados de la totalidad de las actuaciones investigativas
realizadas, entre los cuales podría estar el sobreseimiento.
Ante la situación planteada, una vez dictada la decisión por el órgano judicial
que negó el sobreseimiento en los términos planteados, será necesario un cambio de las
circunstancias de la fase preparatoria, constituido por la incorporación de las
actuaciones faltantes, para que admita la posibilidad de presentar el nuevo acto
conclusivo, que como ya se ha dicho, podrá ser incluso el sobreseimiento. De esta
manera, sería inadmisible la simple presentación de un acto conclusivo que constituya la
reedición del presentado inicialmente, por haberse planteado sobre la base de las
mismas actuaciones, sin haber procedido a subsanar las omisiones de investigación que
advirtió el órgano judicial.
En este sentido, se hace necesario traer a colación el artículo 160 del Código
Orgánico Procesal Penal, que dispone lo siguiente:
Artículo 160. Después de dictada una sentencia o auto, la decisión no podrá ser
revocada ni reformada por el tribunal que la haya pronunciado, salvo que sea admisible
el recurso de revocación.
Dentro de los tres días siguientes de pronunciada una decisión, el Juez o Jueza podrá
corregir cualquier error material o suplir alguna omisión en la que haya incurrido,
siempre que ello no importe una modificación esencial. Las partes podrán solicitar
aclaraciones dentro de los tres días posteriores a la notificación.
La disposición legal transcrita, es una expresión del principio de inmutabilidad
de la cosa juzgada, que establece un obstáculo para modificar el contenido de la
decisión judicial que haya adquirido este carácter, con el objeto de garantizar el
principio de seguridad jurídica, como uno de los fines que fundamentan la existencia de
todo ordenamiento jurídico.
Aunado a lo anterior, debe agregarse que no conforme con haber incurrido en el
error de irrespetar la intangibilidad de la cosa juzgada en los términos expuestos, la
decisión n.° 2339-17 objeto de la presente revisión de oficio, modificó diametralmente
lo decidido, al establecer la procedencia del sobreseimiento solicitado por el Fiscal del
Proceso, ratificado por el Fiscal Superior, partiendo de graves errores de derecho, con
fundamento en un dispositivo legal que no le es aplicable y contraviniendo la
prohibición de reforma, así como el carácter de inmutabilidad de la cosa juzgada, lo cual
menoscaba la garantía constitucional del debido proceso, sobre lo cual esta Sala ya se
pronunció en sentencia n.° 0496/2018 del 26 de julio (caso: Gulfrido José Molina
Sánchez).
Como puede observarse del precedente judicial parcialmente transcrito, esta Sala
controlar el ejercicio de la acción por parte del Ministerio Público en aquellos casos en
que no procure dar término a la fase preparatoria del proceso con la diligencia que el
permitiéndole solicitar el plazo fijado en el artículo 295 del Código Orgánico Procesal
Penal, y una vez “[v]encido dicho plazo o la prórroga de ser el caso, dicha víctima -si
se tratare de delitos de acción pública- podrá formular una acusación particular propia
contra el imputado”.
víctima dentro del proceso penal ordinario, del cual esta Sala realizó una labor
sentencia n.° 1.268/2012 del 14 de agosto (caso: Yaxmery Elvira Legrand), de la cual
resulta oportuno extraer:
En efecto, conforme al contenido del artículo 30 de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela, el Estado está en la obligación de proteger a las víctimas de
delitos comunes y de procurar que los culpables reparen los daños causados. Como
desarrollo de esa garantía constitucional, la víctima adquirió mayor relevancia, con el
proceso penal establecido en el Código Orgánico Procesal Penal, toda vez que la misma
se constituyó como uno de sus objetivos primordiales, conjuntamente con el
establecimiento de la verdad de los hechos por las vías jurídicas y la justicia en la
aplicación del derecho; lo cual tiene plena correspondencia con lo señalado artículo 3 de
la Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, que
prevé:
… (Omissis)…
Ahora bien, visto que la anterior disposición normativa no establece la posibilidad de
que la víctima (directa o indirecta) de los delitos de violencia contra la mujer pueda
presentar acusación particular propia, con prescindencia del Ministerio Público, una vez
que precluya el lapso para concluir la investigación, más las prórrogas legales en caso
de que se hayan acordado, se hace, por lo tanto, necesario extender la doctrina señalada
en la sentencia N° 3267, dictada el 20 de noviembre de 2003 (caso: Francesco Porco
Gallina Pulice), que garantizan los derechos a la igualdad, acceso a la justicia y la tutela
judicial efectiva de la víctima, aplicable mutatis mutandis, a los procesos de violencia
contra la mujer, con el objeto de permitir que esta última pueda actuar, en forma directa,
mediante la correspondiente presentación de una acusación particular propia, cuando el
Ministerio Público no concluya la investigación bajo las condiciones establecidas en el
citado artículo 103 de la Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a Una Vida
Libre de Violencia, máxime cuando ese texto especial establece, en su artículo 1, como
objeto principal, que se debe garantizar y promover el derecho a una vida libre de
violencia, creando condiciones para prevenir, atender, sancionar y erradicar la
violencia contra las mujeres en cualquiera de sus manifestaciones y ámbitos.
presente fallo, que la víctima podrá presentar la acusación particular propia ante el Juez
el caso de que sea admitida la acusación particular propia presentada solamente por la
víctima, y los medios de pruebas ofrecidos, la causa será enviada al respectivo Juez de
Juicio para la celebración de la audiencia de juicio con prescindencia del Ministerio
Público. Sin embargo, dicho órgano fiscal, como parte de buena fe, podrá coadyuvar
con los intereses de la víctima, facilitando, entre otros aspectos, la evacuación de los
sentencia n.° 1.550/2012 del 27 de noviembre (caso: María Cristina Vispo López y
extiende a todos los jueces y juezas de la República, con competencia penal ordinaria, la
De esta manera, es concluyente afirmar que si bien el numeral 4 del artículo 285
Estado, de la acción penal en los casos que para intentarla o proseguirla no fuere
prevista en iguales términos en la Ley Orgánica del Ministerio Público (numeral 6 del
sujeto procesal con gran interés sobre las resultas del proceso penal realice esa
actuación en nombre propio. Todo lo contrario, el último aparte del artículo 285
justicia”, así como la garantía de reparación de los daños a las víctimas de delitos
suficientemente a la víctima para ejercer directamente la acción penal en los casos que
sea necesario, con el objeto de evitar la impunidad y lograr la justicia sustancial, como
artículo 2 ibídem.
IV
DECISIÓN
Por las razones expuestas, este Tribunal Supremo de Justicia, en Sala
Constitucional, administrando justicia en nombre de la República, por autoridad de la
Ley, declara:
VICEPRESIDENTE,
LOS MAGISTRADOS,