Integración Educativa 1

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Integración Educativa

3.10.1. Integración Educativa

Concepto

Birch (1974) define la integración educativa como un proceso que


pretende unificar las educaciones ordinaria y especial con el
objetivo de ofrecer un conjunto de servicios a todos los niños, en
base a sus necesidades de aprendizaje.
Kaufman (1985), define la integración en el marco educativo
"mainstreaming" como: " referida a la integración temporal,
instructiva y social de un grupo de seleccionado de niños
excepcionales, con sus compañeros normales, basada en una
planificación educativa y un proceso `programador evolutivo e
individualmente determinado. Esta integración requería una
clasificación de responsabilidades entre el personal educativo
regular y especial y el personal administrativo, instructor y auxiliar".
La NARC (National association of Retarded Citizens, USA) la define
como: "la integración es una filosofía o principio de ofrecimiento de
servicios educativos que se pone en práctica mediante la provisión
de una variedad de alternativas instructivas y de clases, que son
apropiadas al plan educativo, para cada alumno, permitiendo la
máxima integración instructiva, temporal y social entre alumnos
deficientes y no deficientes durante la jornada escolar normal".

La integración educativa supone que:

1. Un niño que se escolariza por primera vez y que por sus


características podría haber sido dirigido al centro especial, es
acogido en el centro ordinario.
2. Niños que están en centros especiales pasan a centros
ordinarios en alguna de las modalidades de integración.
3. Niños que están a tiempo total en una unidad de educación
especial de un centro ordinario lo vamos incorporando
paulatinamente al aula ordinaria.
4. Niños y niñas que se encuentran en el aula ordinaria que en
otras circunstancias pasarían a un lugar más restrictivo -aula
especial o centro específico- ahora van a continuar en esa aula
ordinaria.

Todo esto teniendo en cuenta una serie de premisas como por


ejemplo:

1. Éste es un proceso difícil y complejo y depende de muchas


circunstancias: del propio niño o niño, del centro y de la familia,
Cada caso requiere un estudio y un tratamiento determinado.
2. Existen, distintas situaciones o modalidades de integración.
No siempre será posible que el alumno se integre en el aula
ordinaria de un colegio ordinario; esto es lo ideal hacia lo que se
debe tender, pero habrá casos en que, por diversas circunstancias,
su modalidad de integración tenga que ser otra.
3. La ubicación de un niño en un lugar o ambiente determinado
no será para siempre, son que, mediante revisiones periódicas, se
intentará proporcionarle situaciones que supongan un mayor nivel
de integración.
4. Este proceso de integración se inicia con la valoración e
identificación de las necesidades educativas especiales del alumno
y lleva aparejado el proporcionarle las ayudas personales,
materiales, adaptaciones curriculares, etc., que posibiliten un mayor
desarrollo.
5. No supone la integración una simple ubicación física en el
ambiente menos restrictivo posible, sino que significa una
participación efectiva en las tareas escolares, que le proporcione la
educación diferenciada que precise, apoyándose en las
adaptaciones y medios que sean pertinentes en cada caso. 

PRINCIPIOS DE LA INTEGRACION ESCOLAR


Los principios relacionados con la integración escolar son los
siguientes:

1) La integración se deriva de la aplicación del principio de Normalización. Se entiende por


normalización la introducción en la vida diaria de la persona con deficiencias de unas pautas y
condiciones lo más parecidas posibles a las consideradas como habituales en la sociedad. Normalizar no
es pretender convertir en normal a una persona con deficiencias, sino reconocerle los mismos derechos
fundamentales que los demás ciudadanos del mismo país y de la misma edad. El principio de
Normalización, como organización de los servicios sociales, educativos, etc.

2) La aplicación del criterio normalizador a la integración social de los sujetos minusválidos, supone
también el principio de Racionalización y Sectorización de Servicios, de forma que éstos reciban las
atenciones que precisen dentro de su medio ambiente natural. Así es como lo define el Plan Nacional de
Educación Especial (1978), que entiende por sector la unidad geográfica y de población en la que se
considera posible, de manera adecuada y eficaz, evaluar las necesidades, programar los servicios,
coordinar las competencias, prestar las atenciones requeridas y estar sujetos a los oportunos controles de
calidad. Un concepto subyacente al principio de sectorización es el de la interdisciplinariedad, pues la
complejidad de funciones que inciden en el sector, lógicamente conlleva una pluralidad de profesiones.

3) Otro principio derivado de la normalización e integración es el de No exclusividad en la utilización de


los servicios de apoyo, que permite diversificar y extender los servicios que se destinan a todo alumno
que precise una ayuda específica en alguna etapa de su aprendizaje, sea deficiente o no.

4) Por último, el principio de Individualización de la enseñanza como


expresión de la necesidad de adaptar la respuesta educativa a las necesidades
individuales de cada alumno.
Publicado por Itzel Mora Rodríguez en 19:29 No hay comentarios: 
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 Niveles en el proceso de integración de los alumnos

                      

Desde otra perspectiva, más basada en la estructura organizativa, se


han planteado también diferentes  niveles en el proceso de integración de los alumnos. 

1- Sistema de Deno (1970):


Nivel 1: Niños en clases regulares, incluyendo los disminuidos, que pueden enfrentarse con las
acomodaciones de una clase regular con o sin terapia de apoyo médica o de orientación.
Nivel 2: Asistencia a clase regular más servicio suplementario de instrucción.
Nivel 3: Clase especial a tiempo parcial.
Nivel 4: Clase especial a tiempo completo.
Nivel 5: Centro especial.
Nivel 6: Hogar.
Nivel 7: Instrucción en hospitales o residencias.
Nivel 8: Servicios "no educativos" (cuidado médico y de supervisión)

2- Modelo de C.O.P.E.X. (1976):


Nivel 1: Clase regular con educador regular, primer responsable de la prevención, identificación,
evaluación y corrección de dificultades menores del alumno.
Nivel 2: Clase regular con servicios de asistencia al educador regular.
Nivel 3: Clase regular con servicios de asistencia al educador regular y al niño.
Nivel 4: Clase regular con participación del niño en una clase de apoyo.
Nivel 5: Clase especial en la escuela regular con participación en las actividades generales de la escuela.
Nivel 6: Escuela especial.
Nivel 7: Enseñanza a domicilio.
Nivel 8: Enseñanza en una institución o en un centro hospitalario.
Publicado por Itzel Mora Rodríguez en 19:09 No hay comentarios: 
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CLASES DE LA INTEGRACIÓN ESCOLAR.

El informe Warnock señaló las siguientes clases de integración:

a) Física: La escolarización se produce en centros o unidades de Educación Especial que se han


construido junto a centros ordinarios, por lo que se llegan a compartir algunos espacios comunes, como el
patio o el comedor.

b) Social: Las unidades de educación especial están en el centro ordinario, por lo que los alumnos con
deficiencias realizan algunas actividades junto a los demás chicos, como actividades extraescolares
o juegos.

c) Funcional: Los alumnos con necesidades educativas especiales están escolarizados en las aulas
ordinarias, participando plenamente del proceso educativo.

Soder distingue, por su parte, cuatro clases de integración:

a) Física: coincide con la del informe Warnock.

b) Funcional: Se define como la progresiva reducción de la distancia


funcional en la utilización conjunta de los recursos educativos, distinguiendo
tres niveles:

- Utilización de los mismos recursos en momentos diferentes.


- Utilización simultánea de tales recursos pero de forma separada.
- Utilización simultánea y con objetivos educativos comunes.
c) Social: Coincide con la funcional del informe Warnock.
d) Comunitaria: Integración en la sociedad en la vida adulta.

Publicado por Itzel Mora Rodríguez en 19:02 No hay comentarios: 


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Surgimiento de la integración escolar

La integración escolar surgió como una forma de incluir en la escuela común aquellos alumnos que se
encuentran en los márgenes del sistema escolar, debido a diversas dificultades. Antiguamente, cuando un
alumno no alcanzaba los niveles de rendimiento estipulados por el diseño curricular, era derivado a una
escuela especial. Muchas veces ocurría que un alumno no rendía lo suficiente en la escuela común, pero
tampoco estaba tan atrás como para la escuela especial. Asimismo, cuando un niño padecía algún
trastorno o discapacidad, su destino escolar era inevitablemente la escuela especial en sus distintas
modalidades (mentales, sordos, no videntes o motores).

La integración escolar como principio de la educación inclusiva es una consecuencia del principio de


normalización. A partir de la práctica de este principio, sería impensable una educación sin la
institucionalización de la escuela obligatoria para todas las niñas y los niños comprendidos en un
determinado periodo de edad.
Publicado por Itzel Mora Rodríguez en 18:47 No hay comentarios: 
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Definición de Integración Escolar


La integración es un proceso cooperativo y su éxito resulta de la responsabilidad compartida entre la
escuela común o la de sordos, la escuela especial, la familia y el alumno.

Las actitudes personales de quienes intervienen en el proceso son determinantes para su buen
fin. Conceptos como "aceptación", "normalización", "pertenencia" pueden tener una importancia
fundamental en el. Relacionada con las actitudes la interacción social, especialmente con los pares parece
ser uno de los factores más importantes para el éxito de la integración.Para que la igualdad de
oportunidades pueda darse en un sistema de integración es necesario proveer al niño de un adecuado
servicio de apoyo, que bien puede darse en un centro de recursos que debe cumplir al menos las
siguientes funciones:

 Material didáctico: selección del material, producción y/o adaptación, distribución y préstamo,
archivo tecnología, servicio de información y exposición, servicio de asesoramiento y formación de
profesionales.

 Evaluación: psicológica, social, medica, interdisciplinaria, educativa

 Atención educativa: implementación de una adaptación del curriculo y apoyo terapéutico-


educativo si se requiere.(Soler María José)

 El apoyo constante de un intérprete en el caso de un alumno que utilice la lengua de señas o el


alfabeto dactilológico visual o táctil.

Publicado por Itzel Mora Rodríguez en 18:25 No hay comentarios: 


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viernes, 22 de junio de 2012

La integración escolar
El preescolar es parte integrante de una institución en la cual no se atiende a la diversidad de los alumnos
como se debería y creemos que es necesario que la educadora considere algunos elementos para poder
atenderlos e integrarlos dentro de las actividades.
Los problemas de integración de grupo se manifiestan desde muy temprana edad, por lo que el ámbito
escolar adquiere importancia clave en la detección.

Cuadernos de Educación y Desarrollo


Vol 1, Nº 2 (abril 2009)

INTEGRACIÓN E INCLUSIÓN: DOS CAMINOS DIFERENCIADOS


EN EL ENTORNO EDUCATIVO

Cristina Alemañy Martínez (CV)


[email protected]

Resumen

Para poder llevar a la práctica, de manera efectiva, un modelo educativo que potencie la
inclusión es necesario e imprescindible que los docentes compartan los principios que conlleva
este movimiento. Exponemos las características de una escuela inclusiva y la necesidad de
formación del profesorado para llevarla a cabo de manera satisfactoria.

El origen del movimiento inclusivo se sitúa en los países anglosajones, dentro del marco de la
educación especial. En un intento por sintetizar sus bases, podríamos decir que la escuela
inclusiva reconoce la diferencia como un valor, de modo que todo el mundo puede formar parte
de ella en situación de igualdad. Este reconocimiento de las diferencias individuales nos lleva al
reconocimiento de la diversidad. Así, diversidad es reconocimiento de diferencias y valoración
de ellas.

El movimiento inclusivo se remonta a la ley de 1975 de los Estados Unidos (Education for All
Handicapped Children ACt), en la cual se consideraba que el alumnado con algún tipo de
deficiencia podía recibir una educación apropiada en ambientes menos restrictivos (clase
ordinaria). A partir de esta idea, surgen dos grandes movimientos: la iniciativa de educación
regular (REI) y la escuela inclusiva. El movimiento de la escuela inclusiva se centra en cómo
aumentar la participación del alumnado con deficiencias en un aula ordinaria,
independientemente de las características y niveles de cada persona.

No existe un consenso entre los autores más representativos de este movimiento (Ainscow,
2001; Arnaiz, 2003; Dyson, 1999; Stainback & Stainback, 1999) ya que cada uno tiene su
propia visión sobre el mismo.

Así, por ejemplo, podemos encontrar definiciones tan diferentes y clarificadoras como señala
Ainscow (2001, p. 44), “una escuela que no solo acepta la diferencia, sino que aprende de ella”,
o como definen Stainback y Stainback (1999, pp. 21-35), “es la que educa a todos los
estudiantes en la escuela ordinaria”.

¿Integración o inclusión?

Semánticamente, incluir e integrar tienen significados muy parecidos, lo que hace que muchas
personas utilicen estos verbos indistintamente. Sin embargo, en los movimientos sociales,
inclusión e integración representan filosofías totalmente diferentes, aun cuando tengan
objetivos aparentemente iguales, o sea, la inserción de las personas con discapacidad en la
sociedad.

La escuela inclusiva se construye sobre la participación y los acuerdos de todos los agentes
educativos que en ella confluyen. Considera el proceso de aprendizaje del alumnado como la
consecuencia de su inclusión en el centro escolar. Surge de una dimensión educativa cuyo
objetivo se dirige a superar las barreras con las que algunos alumnos y alumnas se encuentran
en el momento de llevar a cabo el recorrido escolar. Con una escuela inclusiva se trata de
lograr el reconocimiento del derecho que todos tienen tanto a ser reconocidos, como a
reconocerse a sí mismos como miembros de la comunidad educativa a la que pertenecen,
cualquiera que sea su medio social, su cultura de origen, su ideología, el sexo, la etnia o
situaciones personales derivadas de una discapacidad física, intelectual, sensorial o de la
sobredotación intelectual.

En esta escuela que se propone, el desarrollo de la convivencia se realiza a través del diálogo.
Los conflictos se transforman en una oportunidad para el desarrollo personal y social, porque
permite la aproximación entre los agentes en conflicto y el desarrollo de su aprendizaje.

Podemos establecer algunas de las diferencias entre integración e inclusión, como bien
señalan Arnaiz (2003) y Moriña (2002).

ESCUELA INTEGRADORA ESCUELA INCLUSIVA  

Centrada en el diagnóstico Centrada en la resolución de problemas de


colaboración.  

Dirigida a la : Educación especial Dirigida a la : Educación en general (todos los


(alumnos con n.e.e) alumnos)  
Basada en principios de igualdad y Basada en principios de equidad, cooperación y
competición solidaridad (valoración de las diferencias como  
oportunidad de enriquecimiento de la sociedad)

La inserción es parcial y condicionada La inserción es total e incondicional

Exige transformaciones superficiales. Exige rupturas en los sistemas


(transformaciones profundas)

Se centra en el alumno (se ubica al Se centra en el aula (apoyo en el aula ordinaria).


alumno en programas específicos)

Tiende a disfrazar las limitaciones para No disfraza las limitaciones, porque ellas son
aumentar la posibilidad de inserción. reales.

Para llevar a la práctica en la escuela un modelo que potencie la educación inclusiva es


necesario que todo el personal educativo (Ferrer y Martinez, 2005), en especial los profesores,
tengan una visión y un actitud positiva acerca de la inclusión (Cardona, Cook, Semmel y
Gerber, 1999). Si no se da el caso, el desarrollar dicho modelo será bastante complicado. Por
tanto, una de las premisas fundamentales que se deben cumplir para que el modelo se
desarrolle de manera adecuada es que se dé una implicación activa del profesorado y la
comunidad educativa en general.

Si como profesores nos planteamos que la atención de determinados alumnos puede


entorpecer o ralentizar el avance del resto de los alumnos, estaremos trabajando desde una
lógica claramente excluyente. Desde un modelo inclusivo, hemos de preguntarnos cómo
atender a todo el alumnado, no cómo atender a unos u otros. En este sentido se apoya la
premisa de Michael Fullan y Andy Hargreaves, estableciendo que merece la pena luchar para
que las escuelas sean lugares cada vez mejores en los que enseñar y aprender.

Cuando no se tienen en cuenta las diferentes necesidades y ofrecemos a todos lo mismo, no


hacemos sino ignorar la diversidad generando aún más desigualdad. Esto nos lleva
necesariamente a buscar las herramientas que den la oportunidad de participar a todos, de
desarrollar capacidades comunes por diferentes vías, porque si no estaremos favoreciendo a
unas personas sobre otras.

La situación actual en España necesita lo que en palabras de Giroux son los “profesores como
intelectuales transformativos”. El intelectual transformativo es el docente que busca crear
espacios donde todos tengan las mismas posibilidades, tanto dentro de la escuela como
cuando salgan de ella. Es un profesional comprometido con la lucha por la creación de una
escuela para todos. No obstante, este autor apunta que la innovación educativa es al mismo
tiempo una amenaza y un desafío para los docentes de la escuela. Principalmente porque las
medidas de las instituciones educativas denotan poca confianza en las capacidades del
profesorado. Muestra de ello es el diseño curricular vigente en nuestras escuelas. Es un
currículum técnico que define qué, cómo, cuándo y por qué hay que enseñar. El docente se
convierte así en un técnico ejecutor de las directrices prefijadas. Aunque el discurso legislativo
afirme que el profesor es autónomo, después se le plantean una serie de protocolos educativos
que tiene que seguir al pie de la letra. Y el caso es que, pese a este escaso poder de decisión,
es justamente el profesorado el que tiene en su mano el cambio.

La calidad de la educación está estrechamente ligada con la calidad de los profesores, y no con
la calidad de los proyectos que se generen fuera. El profesor tiene calidad si tiene autonomía,
si es un intelectual, y toma decisiones de las que será responsable, y cuya conveniencia
evaluará para así comprender y mejorar la situación educativa.

Teniendo en cuenta que el profesor de la escuela inclusiva necesita conocer la naturaleza de la


cultura que enseña, ser consciente de lo que significa una escuela inclusiva, ser crítico,
reflexivo, trabajar cooperativamente, ser autónomo y responsable, saber analizar, y en base a
todo esto tomar decisiones, resulta obvio que necesita una formación reflexiva.

Algunas características a seguir en la inclusión escolar:

Una vez determinadas las atenciones especificas e individuales que precisa el alumnado, se
hará necesario ver cómo se ordena el contexto escuela y comunidad, cómo se articulan los
recursos, cómo se potencian los mismos y se optimizan, qué cambios hay que generar en la
práctica educativa de los centros escolares, del profesorado en las aulas, del profesorado como
personas individuales, del alumnado con necesidades…, para que sea posible una adecuada
inclusión educativa como mediación para una inclusión social de todas las personas.

Algunas de las características a considerar en la inclusión escolar son:

- El alumnado debe tener un mínimo de condiciones académicas de acuerdo al grado que va a


ingresar.

- El apoyo pedagógico planeado es un factor facilitador para la continuidad y éxito del proceso
de inclusión.

- Afecto, paciencia y respeto del docente hacia el alumnado son términos a tener presentes en
todo momento por el docente.

- Formación del docente para atender y manejar las necesidades que se presenten en el
alumnado.

- Conocimiento de las características de las necesidades especificas o patologías que presenta


el alumnado.

- El estudio y seguimiento permanente del alumno(a), que permite valorar los logros, detectar
las dificultades para proponer acciones que contribuyan a superarlos.

- Contar con la ayuda de un equipo de profesionales (educadores especiales, fonoaudiólogos,


psicólogos y trabajadores sociales) para que asistan a estos jóvenes con apoyos específicos.

- Implicación total de los padres y madres de familia en la educación de sus hijos y la


aceptación al proceso de inclusión.

- El diseño curricular y la administración de éste es común a toda la comunidad educativa con


pequeñas excepciones, de tal manera que responda a la filosofía de una Escuela Inclusiva que
atiende la cultura y pedagogía de la diversidad.

- La estructura curricular (metodología evaluación) y organizacional permite ofrecer condiciones


necesarias y adecuadas en este proceso.

- Las dificultades educativas o dificultades de aprendizaje como suelen son muy comunes en
cualquier proceso de formación, porque cada individuo posee características diferentes que lo
convierten en un ser único y por lo tanto debe recibir un tratamiento individualizado que atienda
las particularidades que presenta.
- Las peculiaridades que en general presenta el alumnado de una institución requieren de
tratamientos diferenciados, porque considerar a un grupo de alumnos o personas con
caracteres homogéneos es incurrir en un error, en una "utopía.

- Proporcionar el entorno y los medios adecuados para el desarrollo, y que se remuevan las
barreras que la propia escuela crea para propiciar un aprendizaje exitoso.

- Buscar estrategias en las que se conjugue el respeto de la diferencia con la igualdad de


derechos y oportunidades, potenciando la convivencia y el diálogo de unos grupos con otros.

- Acercar la cultura minoritaria a la escuela exige un replanteamiento del funcionamiento del


aula que afecte a todos los elementos de la práctica educativa y a elementos esenciales del
currículo.

- Establecer un planteamiento global, un planteamiento de centro que afecte a toda la vida del
mismo, a partir de un enfoque intercultural desde donde se revisen los propios valores,
estrategias y objetivos.

Resumiendo, establecemos las siguientes condiciones que mejorarán la práctica en el aula


para poder trabajar con todo el alumnado:

- Trabajo colaborativo entre el profesorado.

- Estrategias de enseñanza – aprendizaje

- Atención a la diversidad desde el currículo

- Organización interna

- Colaboración escuela – familia

- Transformación de los servicios/recursos destinados a la educación especial

Todo esto requiere una serie de compromisos que impliquen, tanto a la propia Administración
educativa, en sus criterios de gestión educativa, como de los propios agentes docentes,
tutoriales, de apoyo, así como a otros agentes de la propia comunidad.

El docente precisa de unas pautas de seguimiento que les aporten orientaciones a la hora de
llevar a cabo su trabajo. Hablamos de:

- Aprender a manejar los tiempos y los espacios. Contemplar el aula como espacio total a
disposición del aprendizaje comunitario. Aprender a flexibilizar el tiempo, ya que esto facilita la
individualización de la enseñanza.

- Formación en selección de recursos. Resulta útil y el poder disponer de un banco de recursos


siempre a la disposición del docente, sin pasar por alto la consideración de la adecuación al
contexto.

- Capacitar al profesorado para crear nuevos canales de comunicación que sobrepasen las
fronteras del centro. Si la escuela inclusiva es una escuela para todos, abierta al entorno, los
profesionales que en ella trabajen deben saber y poder contactar con profesionales de otros
centros (en foros, seminarios) para preguntar, comentar, intercambiar… y así mejorar la acción.
Hablamos de colaboración frente a competición.

- Aprender a trabajar en cooperación con el orientador. No consiste en que actúe de manera


puntual sino mucho más interesante será trabajar en conjunto en la toma de decisiones del
quehacer educativo diario.
- Fomentar un modelo de enseñanza que desarrolle en el futuro docente el trabajo autónomo y
la responsabilidad reflexiva, conectando los aprendizajes teóricos y prácticos a través de la
reflexión, tomando conciencia de las teorías que aplica y confrontando lo que podría hacer con
su posición ideológica, para que luego no existan contradicciones entre ambas.

Serán los propios docentes los que, en el transcurrir de su tarea, detectarán sus propias
necesidades de formación. De ahí que la formación más importante, quizá sea, la que lo
capacite para buscar los recursos necesarios allí cuando los necesite.

En definitiva, en el mundo actual, los cambios se suceden cada vez con mayor rapidez. La
transformación de las relaciones sociales dentro del marco de la globalización y la
multiculturalidad hace que la única constante en cualquier situación educativa sea la diversidad.
Ante este panorama, es difícil seguir trabajando de acuerdo con la tradición educativa. La
escuela inclusiva se presenta como una respuesta que no sólo reconoce, sino que además
valora, la heterogeneidad del alumnado, al centrarse en el desarrollo de las potencialidades de
cada cual, y no en sus dificultades.

Resulta fundamental cuidar al máximo la formación del profesorado. Son los profesores los que
llevarán a cabo los cambios, por lo que no podemos pensar en una propuesta de mejora en la
escuela que no vaya acompañada de una mejora en la formación del profesorado.

Pero el caso es que el profesorado nunca se encontrará totalmente preparado para cualquier
situación. Ante esta perspectiva, la mejor formación surge a partir de la conciencia de
formación diaria y para toda la vida y que capacite al profesorado para asumir la gran
responsabilidad que conlleva la correcta toma de decisiones educativas.

En la escuela del siglo XXI al profesorado le corresponde alentar al alumnado en este proceso,
dotarles de puntos de referencia para comprender el mundo que le rodea y reforzar al mismo
tiempo su sentido de pertenencia a la comunidad. De la reflexión y revisión de su práctica
educativa surgirán tanto los cambios metodológicos como culturales, imprescindibles para
construir ese ámbito de inclusión. El centro escolar ha de ser y ocupar ese importante espacio
educativo que le corresponde donde las múltiples formas de la participación se articulen a
través de la convicción de la pertenencia al género humano.

BILBIOGRAFÍA

DE PABLOS RAMÍREZ, J.C. (1997). El papel del profesorado en una sociedad de cambio.
Granada. Universidad de Granada. Granada.

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FORTES, A; GUERRERO, R; ORTIZ, A; RIVAS, J.I (Coords.) (1998). Formación del


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PUJOLÀS, P. (2002). Enseñar juntos a alumnos diversos es posible. Cuadernos de pedagogía,


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STAINBACK, S. y STAINBACK, W. (1999). Aulas Inclusivas. Madrid: Narcea. 


 

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