10 Cap7 Pactos
10 Cap7 Pactos
10 Cap7 Pactos
Un pacto es un acuerdo que uno hace con otro; es como un contrato. En la Biblia, un pacto se hace
cuando Dios le dice a alguien: Ahora, así y asá es cómo la cosa va a funcionar (o sea le promete ciertas
cosas y espera ciertas cosas del que recibió las promesas). Siguiendo la regla de la primera mención (que
dice que la primera mención de un término en la Biblia muy a menudo define su uso a través del resto de
la Escritura), podemos ver esta misma definición de un pacto. La primera mención de este término en la
Biblia es Génesis 6.18 (aunque hay dos pactos antes de este, se menciona la palabra pacto por primera
vez aquí).
Mas estableceré mi pacto contigo, y entrarás en el arca tú, tus hijos, tu mujer, y las mujeres de tus hijos
Un pacto, entonces, es simplemente un acuerdo que Dios hace con los hombres en un momento dado en
Hay otra observación que podemos hacer en esta primera mención de la palabra pacto, y tiene que ver
con la palabra en hebreo. En hebreo esta palabra (el sustantivo: pacto) es berit (#1285 del sistema de
Strong; ver La concordancia exhaustiva de la Biblia por James Strong, Editorial Caribe). El verbo hebreo
de esta palabra (pactar) es bara (#1262 de Strong). Ahora, hay otro verbo en hebreo que suena igual
al de pactar y es cortar. La palabra hebrea por cortar es bara también (#1254 de Strong). Esto,
entonces, nos ayuda a entender la historia extraña en Génesis 15.6-21 cuando Dios cortó unos animales e
hizo un pacto con Abraham. Él pactó (bara) con Abraham y por esto cortó (bara) unos animales
delante de él. Al cortar (bara), Dios dijo que estaba pactando (bara). O sea, Dios estaba dándole a
Abraham una confirmación visual (cortar: bara) de lo que hizo en realidad (pactar: bara).
En la Biblia hay siete pactos principales que Dios ha hecho con el hombre. Los siete pactos se dividen en
dos categorías: Unos son condicionales (dependen del hombre y lo que él hace o no hace) y los otros son
incondicionales. Un ejemplo de un pacto condicional es el de Moisés. Cuando Dios entró en pacto con
Israel bajo la ley de Moisés, el cumplimiento del pacto (de lo que Dios prometió) dependía de la
Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los
El pacto de Noé es un buen ejemplo de un pacto incondicional. Cuando Dios entró en un acuerdo con los
hombres después del diluvio de Noé, Él prometió hacer ciertas cosas y no dependían de la obediencia del
hombre sino de la fidelidad de Dios. Puesto que Dios no miente, lo que Él prometió, también lo hará.
Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más
Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y
A veces, pero no siempre, hay una señal que viene con el pacto. No es una señal como los prodigios y
milagros que Jesucristo hizo para confirmar la veracidad de Su mensaje. Son señales como la de los
anillos (las argollas) que los novios intercambian cuando se casan. Es algo visible que da testimonio del
pacto, del acuerdo entre los dos. El pacto de Noé tiene la señal del arco iris (Gen 9.13); el pacto de
Abraham tiene la señal de la circuncisión (Gen 17.11); y el pacto de Moisés tiene la señal del día de
Otra cosa que hemos de entender acerca de los pactos en la Biblia es lo que podríamos llamar traslapo.
Algunos de los pactos tiene un fin; terminan en un momento dado. Otros continúan hasta el Milenio, y
aun otros son pactos eternos (que veces se llama sempiternos). Esto quiere decir que puede ser que en
un momento dado de la historia del hombre, hay varios pactos que están vigentes a la misma vez. O sea,
durante la misma dispensación, puede haber más de sólo un pacto vigente. Entonces, hemos de entender
que hay traslapo entre los diferentes pactos, y también entre los pactos y las dispensaciones. Unos pactos
traslapan otros pactos, y también varios pactos están vigentes a través de varias dispensaciones. No es que
Con todo esto en mente, lo que vamos a estudiar ahora son los siete pactos principales que Dios estableció
con los hombres. Estos pactos son contratos por escrito y varios afectan a nosotros, nuestras vidas y
27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los
peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol
30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que
hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así. [Gen 1.27-30]
Este pacto comenzó con Adán y Eva. Dios estableció el pacto con el hombre, varón y hembra. O sea,
este es un pacto que el Señor hizo con Adán y Eva, los primeros humanos en la tierra. Es un pacto que
Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el
hombre un ser viviente. Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente; y puso allí al hombre que había
198
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
El pacto de Edén se trata del hombre reinando sobre toda la tierra. Dios entró en un acuerdo con el
Génesis 1.27: El pacto tiene que ver con el hombre creado a la imagen de Dios
La imagen de Dios tiene que ver con lo que se llama la Trinidad. Dios es uno, pero es de tres Personas:
el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Él es tres en uno, una Santa Trinidad. Así es, entonces, como Él hizo
al hombre. El ser humano es una persona de tres partes: espíritu, alma y cuerpo.
Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado
El alma es el yo dentro del cuerpo (consiste en la mente, la voluntad, las emociones, etc.) y corresponde
a Dios el Padre. El cuerpo (la parte visible del ser humano) corresponde a Dios el Hijo (la Persona
visible del Ser divino: 1Tim 3.16). El espíritu del hombre, entonces, corresponde al Espíritu de Dios. Él
Señor entró en un pacto con el único ser en toda Su creación que fue hecho según Su propia imagen.
En esta comisión del pacto de Edén, hay varias responsabilidades. En primero lugar, el hombre es
responsable de llenar la tierra con sus propios hijos. También, debe sojuzgar la tierra. Entonces, vemos
que el hombre es la criatura suprema (máxima) y no hay ninguna otra por encima de él. Así que, bajo el
Además, el hombre es responsable de labrar (cuidar y atender) el huerto de Edén y guardarlo (protegerlo,
vigilarlo y defenderlo).
Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase. [Gen
2.15]
Adán y Eva fracasaron en esta área de su responsabilidad. Eva dejó la protección de su marido para andar
con el más guapo del huerto (2Cor 11.1-15; más sobre esto luego) y Adán la dejó ir sola, sabiendo que
había peligro en el huerto porque Dios le dijo que lo guardara. Entonces, el mal entró en el huerto y
ellos no le dijeron a Dios nada del asunto. Por esto fracasaron y todavía estamos llevando las
consecuencias.
Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer. [Gen 2.16]
La dieta del hombre (y también de los animales) al principio era vegetariana. Más bien, era sólo de frutas,
y Dios les había dado una abundante provisión de comida en el huerto de Edén. Por supuesto, esto cambió
después del diluvio de Noé (Gen 9.3). Ahora el hombre debe comer carne además de frutas, legumbres y
plantas verdes. Sin embargo, habrá un tiempo en el futuro cuando, otra vez, los hombres volverán a comer
sólo plantas. O sea, todos los hombres y todos los animales volverán a ser herbívoros. Esto tomará lugar
cuando este pacto de Edén se cumpla: en el Milenio, cuando el postrer Adán sojuzgue la tierra.
La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el león como el buey comerá paja. [Isa 11.7]
El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá paja como el buey; y el polvo será el alimento
de la serpiente. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová. [Isa 65.25]
199
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente
Cuando Dios dio la provisión de Génesis 1.29 de todo árbol, se la dio con una pequeña prohibición. El
hombre podía comer de todo árbol en el huerto, mas había un árbol (sólo uno) prohibido. Era el árbol
de la ciencia del bien y del mal. Dios le prometió al hombre que moriría en el día que de él comiera. Así
que, podemos ver que aunque no hubo condiciones del pacto, había una condición en el pacto.
Cuando Dios estableció el pacto con el hombre en Génesis 1.27-30, no puso ninguna condición al
cumplimiento de Sus promesas. Dios puso al hombre como cabeza del mundo y el hombre será cabeza
del mundo. No hay nunca condición al asunto; es una promesa de Dios (Gen 1.28). Esto quiere decir que
este es un pacto incondicional con respecto a su cumplimiento. Luego, como ya vimos, Dios le dio una
prohibición dentro del pacto (o sea, una condición en el pacto pero no del pacto), pero no tiene nada
que ver con su cumplimiento. Dios cumplirá con lo que dijo pese a todo. Entonces, hasta que este pacto se
cumpla, traslapa todos los siguientes pactos y todas las demás dispensaciones. No termina hasta que se
El pacto se cumplirá, pero hay una condición en el pacto que tiene que ver con cómo se cumplirá y a
través de quién. Podría haberse cumplido en Adán, per él fracasó. Él no llenó la condición porque comió
del árbol prohibido (Gen 3.6). Dios le prometió que en el día que comiera de aquel árbol, moriría. Y así
fue. Él comió y murió espiritualmente. Así nacemos todos los de la raza de Adán: Muertos y separados de
Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados. [Ef 2.1]
Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a
Hay que entender que la muerte en la Biblia nunca es aniquilación (o sea, dejar de existir) sino
separación. La muerte física es la separación de lo físico, del cuerpo físico y de este mundo físico. La
muerte espiritual, entonces, es la separación de la vida espiritual y, eventualmente, la vida eterna. O sea,
Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel
que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? [Juan 11.25-26]
Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. [Juan 14.6]
Por esto, la Biblia es muy clara en que los hijos de Adán ya no nacen con la imagen de Dios. Todos
nacemos con la imagen de Adán, que es la imagen de Dios torcida por el pecado. Es una imagen muerta
espiritualmente.
Y vivió Adán ciento treinta años, y engendró un hijo a su semejanza, conforme a su imagen, y llamó su
200
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Entonces, todos los hombres necesitamos el segundo nacimientoel nacimiento espiritual. No tenemos la
Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. [Juan 3.6]
El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo
Por esto, vemos que el pacto de Edén ya no se puede cumplir en Adán porque fracasó. Pero, el pacto es
incondicional, entonces se cumplirá. Ahora se cumplirá en Jesucristo, el Postrer Adán, porque Él llenará
toda condición.
El pacto de Edén se menciona otra vez al final de la historia del hombre, y casi al final de la Biblia. Se
menciona en Hebreos 2. Si un pacto es incondicional, tarde o temprano tiene que cumplirse. Si no es así,
Dios mintió (y sabemos que Él no miente; Num 23.19). Así que, tiene que haber un tiempo cuando esta
tierra estará completamente sojuzgada al hombre, bajo su dominio. Esto no sucedió bajo el primer Adán,
pero sí sucederá bajo el dominio del Postrer Adán (1Cor 15.45), Jesucristo. Vea lo que Hebreos 2.5-9 dice.
5 Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero, acerca del cual estamos hablando;
6 pero alguien testificó en cierto lugar, diciendo: ¿Qué es el hombre, para que te acuerdes de él, O el hijo del
7 Le hiciste un poco menor que los ángeles, Le coronaste de gloria y de honra, Y le pusiste sobre las obras de
tus manos;
8 Todo lo sujetaste bajo sus pies. Porque en cuanto le sujetó todas las cosas, nada dejó que no sea sujeto a él;
9 Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que los ángeles, a Jesús, coronado de gloria y de honra, a
causa del padecimiento de la muerte, para que por la gracia de Dios gustase la muerte por todos. [Heb 2.5-9]
El pacto de Edén se cumplirá en el Milenio, bajo el dominio de Cristo Jesús. En contexto, Hebreos 2 se
trata de sujetar el mundo venidero a alguien (y no es a los ángeles; Heb 2.5). La cita, el cierto lugar que
se menciona en el versículo 6, es el Salmo 8.3-9. Los siguientes versículos (Heb 2.7-8a) se refieren a
Génesis 1.27-28, cuando Dios hizo al hombre y lo puso sobre toda la creación para sojuzgarla. Antes del
pecado en Génesis 3, el hombre (Adán y Eva) estaba sobre todas las obras de las manos de Dios. Pero
ahora es un poco diferente, porque ahora no es así (Heb 2.8b). Todas las cosas no están sujetas al dominio
del hombre. Pero, Jesús, el Postrer Adán, tomó el lugar del primero (Heb 2.9a). Él también fue coronado
de gloria y honra como Adán en el versículo 7. O sea, Jesucristo reemplaza a Adán y, bajo el pacto de
Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Mi Hijo eres tú, Yo te he engendrado hoy, y otra vez: Yo seré a
él Padre, Y él me será a mí hijo? Y otra vez, cuando introduce al Primogénito en el mundo, dice: Adórenle
todos los ángeles de Dios. Ciertamente de los ángeles dice: El que hace a sus ángeles espíritus, Y a sus
ministros llama de fuego. Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el
Así que, el pacto de Edén se cumplirá cuando Cristo Jesús vuelva a esta tierra para reinar sobre ella y
Nosotros podemos participar en el cumplimiento de este reino si estamos en Cristo. Para ver este asunto,
compare Hebreos 2.9b (del pasaje arriba) y Romanos 5.15-21. En Adán perdimos el beneficio y la
201
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
bendición de participar en el pacto de Edén. Pero, en Cristo podemos gozar otra vez de lo que Dios dio
incondicionalmente al hombre en Génesis 1.28. Piénselo así: En Adán sólo experimentamos la primera
parte de Romanos 6.23 (la muerte). Pero en Cristo lo podemos experimentar todo porque Él gustó la
muerte por todos (la muerte que resultó del fracaso de Adán), para que nosotros no tenemos que hacerlo.
Podemos evitar las malas consecuencias del fracaso bajo este pacto y a la misma vez gozar de la buenas,
Así que, el camino hacia el cumplimiento de este pacto ya está abierto. Sólo es una cuestión de tiempo. Se
cumplirá en Cristo cuando Él venga para establecer Su dominio sobre la tierra en el Milenio.
Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces. Y reposará sobre él el Espíritu de
temor de Jehová. Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni
argüirá por lo que oigan sus oídos; sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los
mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío. Y
será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad ceñidor de su cintura. [Isa 11.1-5; para ver todo el contexto
de este pasaje, lea también los versículos del 6 al 9 con Apoc 19.11-21]
Aclaraciones
Dios hizo este pacto después del pecado en Génesis 3.6 pero antes de echar al hombre fuera del huerto de
Edén. Se llama el pacto de Adán porque Dios llamó al hombre y a la mujera los dosAdán (Gen
5.1-2). Fue Adán quien llamó a su mujer Eva, no Dios (Gen 3.20). Dios la llamó a ella Adán porque
ella fue hecha de él, de su cuerpo. Y puesto que nosotros venimos de Adán (de los dos, Adán y Eva),
todos participamos en este pacto de Adán. El hecho de nacer de nuevo no tiene nada que ver con nuestra
participación en este pacto porque siempre vivimos en los cuerpos naturales y muertos que heredamos de
nuestros primeros padres. Además, siempre vivimos en esta creación maldita comiendo lo que crece de la
tierra (también maldita). Por todo esto, se nos surge una pregunta: ¿Qué dijo Dios en el pacto de Adán y
Antecedentes
Antes de contestar la pregunta, sería bueno analizar unos antecedentes del pacto de Adán. Por ejemplo, en
Génesis 3.1 vemos que el pacto es realmente el resultado de la obra de la serpiente astuta. Así que,
primero que nada, hay que entender un poco acerca de esta serpiente porque, según la Biblia, Eva no
Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo
a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto? [Gen 3.1]
Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera
extraviados de la sincera fidelidad a Cristo... Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como
Eva estaba hablando con Satanás y él estaba disfrazado como un ángel de luz. O sea, él se veía como el
mismísimo Cristo Jesús, el Ángel de Luz (la apariencia de la luz de Dios en la creación; Juan 1.9). Él
tenía la apariencia del Señor Jesucristoun hombre perfecto (como Cristo: Ef 4.13) de más o menos 33
202
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
años y medio de edad. Ahora, la criatura que representa a Satanás en el mundo físico es, por supuesto, la
serpiente (Gen 3.1 con 3.14). Pero aun así vemos que Eva no estaba hablando con una culebra porque la
serpiente, antes de su maldición en Génesis 3.14, tenía patas y piernas (no andaba sobre su pecho hasta
Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos
los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. [Gen 3.14]
La serpiente en Génesis 3 no era una culebra sino un dragón. Este dragón tiene un nombre: Leviatán.
En aquel día Jehová castigará con su espada dura, grande y fuerte al leviatán serpiente veloz, y al leviatán
Así que, el dragón no es un mito judío. Además, según Job 41 (la plena mención de Leviatán), esta
criatura no es un simple monstruo marino (mucho menos un cocodrilo como dicen muchas Biblias de
estudio); es el mismo diablo, Satanás, Lucero, el quinto querubín en su estado caído y maldito. Todo el
capítulo 41 del Libro de Job trata de esta criatura y de sus maquinaciones. No nos haría ningún daño
Para que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones. [2Cor 2.11]
Entonces, la forma natural de Satanás (su cuerpo espiritual) es la de un gran dragón rojo que puede
hablar. Pero, él puede cambiar su apariencia y disfrazarse como un ángel de luz, como Cristo Jesús (un
Otra cosa que vemos en Génesis 3.1 es la estrategia principal de nuestro enemigo. Se destaca en este
versículo porque es la primera mención de Satanás en la Biblia. La primera vez que vemos a Satanás en la
Biblia, él está causando dudas en la mente de Eva en cuanto a la certidumbre de las palabras de Dios.
Cuestiona lo que Dios dijo. Él no ataca el mensaje ni las grandes doctrinas que Dios entregó al
hombre. No, más bien él se mete en una conversación con Eva y le causa dudas y confusión en cuanto a
las palabras individuales de Dios. ¿Qué es lo que Él realmente dijo? ¿Podrá saberlo? Si Satanás puede
meternos una duda en la mente en cuanto a la certidumbre de las palabras de Dios, ya tiene suficiente con
que puede trabajar para hacernos caer. Lo hizo así con Eva, y lo hace así con nosotros hoy en día.
Cuidado, entonces, con los maestros en la Iglesia que siempre quieren corregir las palabras de la Biblia
con el griego o con el hebreo (como si hubiera tal cosa). No debemos dudar las palabras de Dios y
jamás deberemos corregirlas. Debemos saber cuál es la Biblia que Dios ha preservado en nuestro idioma.
Ahí encontraremos las palabras de Dios y en vez de dudarlas o corregirlas, debemos simplemente
aceptarlas y obedecerlas (al pie de la letra). Y no es tan difícil como podría creerse. ¿Cuál es la Biblia de
la Reforma (la Biblia no Católica) que Dios está usando hoy día para edificar Su Iglesia. Es la Reina-
Después de causarle a Eva dudas en cuanto a las palabras de Dios, la serpiente le ataca a través del
Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para
alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.
[Gen 3.6]
Todo lo que Eva piensa en este momento crítico es positivo. El árbol es bueno para comer. No hay nada
malo en esto. También es agradable a los ojos. Tampoco hay nada malo ahí. Además es codiciable para
alcanzar la sabiduría. ¡Qué bueno! Todos necesitamos más sabiduría, ¿verdad? Es la auto-ayuda. Eva
quiere desarrollarse como una mujer independiente. Así que, toma del fruto, come y muere
espiritualmente. Desde entonces toda la raza humana ha estado bajo la condenación y la maldición de este
203
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
No se engañe por lo positivo en este mundo. Fíjese siempre en lo negativo, porque es a veces lo negativo
que le salvará la vida. Si una botella dice Veneno: no ingerir, es negativo pero muy importante. Si la
Biblia dice que la condenación y la ira de Dios están sobre el que no cree, ¡créalo! (Y de hecho, así es:
Juan 3.18, 36.) Lo negativo le puede salvar la vida porque si no quiere estar condenado, ponga su fe en
Cristo Jesús. De esta manera, lo negativo nos abre la puerta para experimentar lo positivo. Todo esto es
importante porque hay movimientos en la Iglesia de hoy día que sólo quieren mensajes positivos de los
predicadores y de los maestros. No es nada más que otro síntoma de la apostasía de los últimos días antes
de nuestro arrebatamiento. La gente tiene comezón de oír lo que le suena bien, y esto suena como Génesis
3.1-6.
Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán
maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.
[2Tim 4.3-4]
Este es el contexto, entonces, del segundo pacto principal que se menciona en la Biblia. Eva, engañada
por la astucia del diablo, peca. y el hombre le sigue en su pecado y Dios hace un pacto con el hombre
caído, con el pecador (con la raza humana: Adán, Eva y nosotros sus descendientes).
Al hacer este pacto, Dios habla primero con el diablo porque él inició todo el proceso cuando engañó a
Eva. Luego habla con Eva porque ella pecó primero. Después viene Adán que fue el último en meter la
pata. Y al final, Dios habla un poco acerca de la creación, porque Adán y Eva pecaron con ella (con el
fruto de un árbol que crecía de la tierra). Estas categorías del pacto de Adán son realmente maldiciones.
Son las consecuencias del pecadolas promesas divinas e incondicionales que resultaron del pecado del
Puesto que el contenido de este pacto se debe al pecado, hemos de entender un principio bíblico que se
llama la ley de la cosecha. Este principio es como una ley natural, entonces podemos verla en todo
lugar en todo tiempo. Lo que uno siembra es lo que uno cosecha. Es como plantar semillas de manzana.
La ley natural dice que un manzano crecerá de dichas semilla. La misma ley existe en la vida espiritual. Si
No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. Porque
el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu
Al aplicar este principio de la cosecha al pecado del hombre, la Biblia dice que Dios le castiga a uno
Yo os castigaré conforme al fruto de vuestras obras, dice Jehová, y haré encender fuego en su bosque, y
Así que, cuando estamos analizando las promesas que Dios hizo en el contexto de este pacto (o sea, las
maldiciones pronunciadas sobre cada uno que estaba involucrado en el hecho), hemos de pensar en por
qué Dios escogió específicamente estos castigos. ¿Qué tienen que ver con lo que el diablo, Eva y Adán
sembraron? Si los involucrados están cosechando lo que sembraron, entonces podemos ver más
detalles acerca del pecado original del hombre con sólo fijarnos en la cosecha.
204
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
La maldición de la serpiente
Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos
los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. [Gen 3.14]
En este versículo la serpiente (o sea, la culebrael reptil físico) llega a ser un tipo y cuadro de Satanás.
Es en este momento que la serpiente llega a ser como la que conocemos hoy día, un reptil que anda sobre
su pecho, sin patas y sin piernas. Dios no maldice a Satanás directamente porque ya lo hizo en la brecha
entre Génesis 1.1 y 1.2, cuando lo juzgó por su rebelión (ver: Ezeq 28.11-19; Isa 14.12-15 y el capítulo de
Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú
Esta promesa tiene que ver con la serpiente y con la mujer. Todavía Dios no ha hablado con Adán. El
asunto en este versículo, entonces, se trata de la simiente (la descendencia física) de Satanás y de la de la
mujer. En primer lugar, Dios pone enemistad entre la serpiente y la mujer. En el mundo físico (el tipo y el
cuadro de la realidad espiritual) esto es obvio. ¿A cuántas mujeres les gustan las serpientes? A la mayoría
de ellas una culebra le da asco. Tienen temor de las culebras. Además, en el sentido literal del pasaje
(hablando de Satanás y de Eva), desde este versículo en adelante, ha habido una enemistad marcada entre
Satanás y las mujeres. Es por esto que vemos ataques satánicos contra las mujeres como el de Génesis
6.1-4, ataques que todavía suceden en nuestros días bajo el Nuevo Testamento.
Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza, por causa de los ángeles. [1Cor 11.10]
En segundo lugar, Dios pone enemistad entre la simiente de la serpiente y la simiente de mujer. Hay que
entender lo que es la simiente de una criatura. La simiente es la semilla que produce (reproduce) otra
criatura. Esta misma palabra hebrea se traduce descendencia en Génesis 12.7. Se refiere a la
descendencia física de uno, a sus hijos, nietos, etc. Pero, también en este contexto puede referirse al acto
de reproducirse (de producir descendencia física). Esta palabra, entonces, abarca el concepto de la
relación conyugal, la relación física entre varón y hembra. En Levítico 18.20 la palabra hebrea se traduce
acto carnal (léalo en su contexto en su propia Biblia) y en Levítico 19.20 se traduce yaciere (hombre
con mujer). Así que, podemos ver en esto el sentido literal de la simiente que se menciona en Génesis
La mujer, sin embargo, no tiene simiente. Es el hombre que tiene la simiente. Así que, lo que tenemos
aquí en Génesis 3 es una referencia al embarazo de una virgen (al nacimiento de la simiente de parte de
una mujer). La simiente que vencerá a la serpiente es la simiente de la mujer y no la del hombre. El
hombre no tendrá ninguna parte en el nacimiento del Salvador prometido. Por esto vemos la profecía de
Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su
He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios
205
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
El Mesías nacería de una virgen porque Él sería el Salvador, el cumplimiento de la promesa en Génesis
3.15. La concepción de Jesús no tuvo nada que ver con la simiente del hombre.
Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón. Respondiendo el ángel, le dijo: El
Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo
Es por esto que Dios se refiere a la simiente de la mujer en Génesis 3.15, a pesar de que la mujer no tiene
simiente. Observe también que el cumplimiento de esta parte de la profecía (del pacto, de la promesa)
tiene que ver con un nacimiento sobrenatural de un Hombre físico. La simiente de la mujer es Jesucristo,
El diablo también tiene una simiente y es el archienemigo de la simiente de la mujer. Es obvio que
Satanás tiene la capacidad de reproducirse (de procrear) porque el versículo dice que tiene simiente. Él
tomó un cuerpo físico (el de un hombre perfecto de 33 años y medio; 2Cor 11.14) para hablar con Eva.
Entonces, no es una sorpresa que su cuerpo tiene simiente y puede producir hijos (descendencia física).
Todos sabemos que la Biblia habla de hijos espirituales del diablo. Son todos los que no gozan de la
Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida
desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de
En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama
Sin embargo, Génesis 3.15 habla de una simiente física, un hijo físico tal como el Hijo prometido de Eva.
cuanto a la simiente del diablo tiene que ser igual porque así es la estructura gramatical del versículo. Es
No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran
Judas es esta simiente, el Anticristo, el hijo del maligno, el hijo del diablo. El mismo Cristo Jesús dijo que
Jesús les respondió: ¿No os he escogido yo a vosotros los doce, y uno de vosotros es diablo? Hablaba de
Judas Iscariote, hijo de Simón; porque éste era el que le iba a entregar, y era uno de los doce. [Juan 6.70-71]
Judas no era un hombre común y corriente. Hubo una relación extraña entre él y el diablo. Si comparamos
la Escritura con la Escritura, parece que Judas es su simiente. Observe que la Biblia dice que Judas era el
hijo de perdición, y este hijo de perdición (según Pablo) es el hombre de pecado que está por venir, el
Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y
ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese. [Juan 17.12]
Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el
Nos debería llamar mucho la atención que Dios usa la palabra hijo cuando se refiere al Anticristo en
estos pasajes porque el uso de esta palabra nos indica algo acerca de su origen. No es simplemente el
206
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
hombre de perdición. Dios escogió específicamente la palabra hijo para referirse al Anticristo. Hay
Vemos el cumplimiento de Génesis 3.15, la profecía de la simiente de Satanás, en otra profecía en los
Salmosen Salmo 109.1-19. Esta profecía trata de Judas, el traidor del Mesías (o sea, se trata del
Anticristo; para un estudio más detallado sobre la identificación de Judas como el Anticristo, vea mi
comentario sobre el Libro de Apocalipsis). David, el autor humano de este Salmo, es un cuadro doctrinal
de Cristo.
Oh Dios de mi alabanza, no calles; Porque boca de impío y boca de engañador se han abierto contra mí; Han
Toda la descripción de estos primeros dos versículos (el impío, el engañador, el de lengua mentirosa) se
refiere doctrinal y proféticamente a Judas, el Anticristo durante la primera venida de Cristo. Será también
Con palabras de odio me han rodeado, Y pelearon contra mí sin causa. [Sal 109.3]
La frase sin causa es una de las frases claves de la Biblia que se refiere a Cristo (ver: Juan 15.25). Así
que, vemos el cuadro desarrollándose un poco más porque alguien está persiguiendo (proféticamente) a
Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a
Satanás y los suyos (incluyendo a Judas, el Anticristo) son los adversarios de Cristo Jesús.
En este versículo (Sal 109.6) vemos una profecía del poder que controla al Anticristo. Es el mismo
Satanás. Él estaba a la diestra de Judas, listo para entrar en él, durante la última cena que Cristo celebró
con Sus discípulos. Cuando el diablo entró en él para controlarlo, Judas traicionó al Mesías.
Y cuando cenaban, como el diablo ya había puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, que le
Respondió Jesús: A quien yo diere el pan mojado, aquél es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote hijo de
Simón. Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: Lo que vas a hacer, hazlo más
Luego, en Salmo 109, se hace mención de que los días del Anticristo Judas (el traidor del Mesías) fueron
Y [Judas] arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó. [Mat 27.5]
Después el Salmo dice que otro tomaría su oficio. Así fue porque Matías fue escogido por Dios para ser el
Porque está escrito en el libro de los Salmos: Sea hecha desierta su habitación, Y no haya quien more en ella
[Sal 69.25); y: Tome otro su oficio [Sal 109.8]... Y orando, dijeron: Tú, Señor, que conoces los corazones de
todos, muestra cuál de estos dos has escogido, para que tome la parte de este ministerio y apostolado, de que
207
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
cayó Judas por transgresión, para irse a su propio lugar. Y les echaron suertes, y la suerte cayó sobre Matías;
Hechos 1.20 es el cumplimiento de dos profecías acerca del Anticristo: Salmo 69.25 y Salmo 109.8. Este
cumplimiento se realizó en la persona de Judas. O sea, puesto que Pedro cita los dos pasajes en el Libro
de Hechos y los aplica a Judas, sabemos que él (Judas) era, es y será el Anticristo profetizado a través de
la Escritura (Judas es el traidor del Mesías que se menciona en la profecía de estos dos Salmos). La
sentencia que Dios pronunció sobre él (el Anticristo, Judas) se ve en los siguientes versículos del Salmo
109 (del 9 a la primera parte del 14). Entre lo demás que Dios dice en estos versículos, hay algo que
sobresale.
Venga en memoria ante Jehová la maldad de sus padres, Y el pecado de su madre no sea borrado. [Sal
109.14b]
¿Qué tiene que ver el pecado de la madre de Judas, el Anticristo, con lo que él hizo? La respuesta a esta
pregunta es importante para entender la simiente del diablo que se menciona en la profecía mesiánica
de Génesis 3.15. ¿Qué hizo ella que tuvo que ver con Judas y que era tan grave que no será borrado?
Parece que ella tuvo relaciones físicas con Satanás y su hijo (Judas) era, es y será el Anticristo, la simiente
física de Satanás que se menciona en Génesis 3.15. Es por esto que la Biblia dice que Judas era diablo.
Es por esto también que los hijos de Dios (los ángeles caídos) cohabitaron con las mujeres de los días de
Así que, la segunda parte de la profecía y promesa de Génesis 3.15 tiene que ver con la enemistad que
Dios puso entre la simiente de la serpiente y la simiente de la mujer. Cristo es la simiente de la mujer. Él
es la descendencia literal, física y sobrenatural que nació de la simiente de una mujer (sin la simiente de
un hombre; o sea, se refiere al nacimiento por una virgen). Judas, el Anticristo, es la simiente del diablo
que se menciona en esta misma profecía. El Anticristo es la descendencia literal, física y sobrenatural de
la serpiente (Satanás). Nació por su simiente. El cumplimiento de la profecía en cuanto a la simiente del
diablo tiene que ser igual al de la profecía de la simiente de la mujer. Si la simiente de ella es Cristo (un
nacimiento sobrenatural de un Hombre especial), así la simiente del diablo será igual: Un nacimiento
sobrenatural de un hombre especial (diferente de todos los demás). Muchos quieren espiritualizar el
cumplimiento de la profecía acerca de la simiente del diablo, pero no pueden hacerlo si no espiritualizan
también lo que se dice de la simiente de la mujer. Son profecías (promesas) iguales en cómo se cumplen.
Las dos se cumplen en nacimientos sobrenaturales que resultan en hijos diferentes de todos los demás
En tercer lugar, además del temor de las mujeres a las serpientes y de la profecía acerca de las simientes,
en Génesis 3.15 podemos ver las dos venidas de Jesucristo profetizado. La segunda venida se menciona
primero en la frase que dice: ...esta te herirá en la cabeza... Se menciona antes de la primera venida
porque la victoria de Cristo siempre sobresale por encima de Sus padecimientos. Este evento (Cristo
hiriendo la cabeza de la serpiente) es todavía futuro. Sucederá después del arrebatamiento de la Iglesia y
Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies [así que, es un evento todavía futuro]. La
Con ira hollaste la tierra, Con furor trillaste las naciones. Saliste para socorrer a tu pueblo, Para socorrer a tu
ungido. Traspasaste la cabeza de la casa del impío, Descubriendo el cimiento hasta la roca. [Hab 3.12-13]
Cristo vendrá en Su gloria, sobre un caballa blanco. Vendrá para hacer guerra, matar y así establecer Su
reino sobre la tierra y regirlo con una vara de hierro. En el versículo 13 de Habacuc 3, vemos a Cristo
usando esta vara de hierro para traspasar la cabeza del Anticristo descubriendo el cimiento hasta la
roca. O sea, con Su vara de hierro, le maja la cabeza del Anticristo dentro de su cuello. Así se cumplirá la
208
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
La primera venida del Mesías se menciona en Génesis 3.15 también: ...y tú le herirás en el calcañar.
Esto es una profecía de la victoria que Cristo conseguiría a través de Su sufrimiento en la cruz.
Porque perros me han rodeado; Me ha cercado cuadrilla de malignos; Horadaron mis manos y mis pies. [Sal
22.16]
Horadaron los pies de Cristo en la cruz. O sea, el diablo le hirió en el calcañar. Traspasaron el
Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y
mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien
He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra
La maldición de la mujer
A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu
Esta parte del pacto de Adán se aplica a toda mujera todas las mujeres, tanto las inconversas como las
que tienen la salvación en cualquier dispensación después de Génesis 3 hasta el Milenio. Esta parte del
pacto es también incondicional. Las mujeres no tienen que hacer nada para participar en este acuerdo
que Dios está estableciendo con ellas en Génesis 3.16. Si les guste o no, les toca.
Se puede dividir esta parte del pacto de Dios con los mujeres en dos categorías. La primera tiene que ver
con la mujer dando a luz los hijos con gran dolor. Recuerde el principio de la ley de la cosecha (Gal 6.7-8;
Jer 21.14). ¿Por qué es que Dios le castiga a la mujer en esta área de la reproducción física? Si ella está
cosechando lo que sembró, ¿qué es lo que sembró? O sea, si Dios le está castigando a Eva conforme
a su pecado, puede ser que su pecado con el ángel de luz (Satanás disfrazado como Jesucristo; 2Cor
11.14) fue más que una conversación que terminó en comer una uva. Pablo se refiere a esto en 2Corintios:
Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen
pura a Cristo. Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna
La segunda categoría de la maldición sobre la mujer tiene que ver con una cadena de mando. La mujer
ya depende del hombre para su protección y provisión. Dios le da a la mujer una posición de sumisión en
el orden y en la estructura de la sociedad. La mujer debe someterse a la autoridad del hombre debido en
su vida (bien sea que es su papá, su marido o su pastor). Otra vez podemos ver la ley de la cosecha en este
castigo. Eva estaba sola cuando se metió en el pecado con la serpiente. No estaba bajo la cobertura (la
protección) del hombre. Entonces, esta parte del pacto es la cosecha de lo que ella sembró. Analicemos un
poco más a fondo esta parte del pacto de Adán que le toca a la mujer.
Primero que nada, el versículo dice que su deseo es para su marido. Una mujer, si no ha sido corrupta
por las filosofías de este mundo, quiere a un hombre en su vida para ser su líder. El problema es que
muchos de los hombres no son hombres (son suaves, débiles y afeminados), ni tampoco son líderes
porque no tienen rumbo en sus vidas, no sabe a dónde van en el plan de Dios. Entonces, por supuesto el
deseo de una mujer no será para este tipo de hombre. Sin embargo, así es su parte en el pacto de Adán.
Así que, en segundo lugar, el versículo dice que el hombre se enseñoreará de la mujer. Esto destaca la
rebelión en el corazón de la mujer natural. No quiere someterse al liderazgo del hombre. Como Eva, la
209
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
mujer natural cree que puede jugársela sola. Pero, si hace esto, no sólo está fuera de la voluntad de
Dios, sino que está también corriendo un gran riesgo de un ataque satánico (un ataque del estilo de
Génesis 3 y 6).
Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza [debe someterse a la autoridad debida del
Esta estructura y este orden se ven en varios pasajes de la Biblia. Uno de ellos es 1Corintios 11.2-16, un
pasaje que trata de la sumisión del hombre a la autoridad debida (no tiene nada que ver con el estilo de
pelo de uno, a pesar de lo que dicen los cristianos conservadores). Este pasaje dice que la cabeza de la
mujer es el hombre y ella nunca debe descubrir su cabeza. O sea, nunca debe salir de la cobertura que
es la autoridad del hombre en su vida. Pablo usa el pelo en 1Corintios 11 como un ejemplo y una
ilustración de este principio. Si es vergonzoso que la mujer anda rapada, que se cubra. Esto quiere decir
que es una vergüenza que una mujer manda en áreas donde el hombre debería ser líder.
Otro pasaje famoso acerca de este orden de autoridad es Efesios 5.21-33. Dios espera que la mujer casada
esté sujeta a su propio marido en todo. Si esto le parece injusto a alguien, debería recordar que forma
parte del castigo divino sobre la mujer. Eva sembró esta semilla cuando andaba fuera de la protección y
de la provisión de su marido, Adán. Esta estructura (el hombre siendo cabeza de la mujer) es la cosecha
de aquella semilla que se sembró en Génesis 3.1-6. Es parte de una disciplina divina y por lo tanto
Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto
apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados. [Heb 12.11]
Es interesante observar en este contexto que en Levítico 27 Dios da la estimación de personas para que
si alguien (bajo la ley de Moisés) quiere hacer un voto especial, sabrá cuánta plata debería dar. Vea cómo
Habló Jehová a Moisés, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguno hiciere especial voto a
Jehová, según la estimación de las personas que se hayan de redimir, lo estimarás así: En cuanto al varón de
veinte años hasta sesenta, lo estimarás en cincuenta siclos de plata, según el siclo del santuario. Y si fuere
Vemos aquí la estructura y el orden del hombre y de la mujer en el plan de Dios después de la caída en el
pecado. Dios vale al hombre a 50 siclos de plata y a la mujer a 30 siclos. Esto es simplemente otro
ejemplo del orden que Dios ha puesto en Su creación. No tiene nada que ver con la persona (o sea, Dios
no quiere al hombre más que a la mujer). Es simplemente una cadena de mando establecida por Dios.
Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él. [Gen 2.18]
Y tampoco el varón fue creado por causa de la mujer, sino la mujer por causa del varón. [1Cor 11.9]
Él hizo la mujer para ayudar al hombre en la misión que Él (Dios) dio al hombre (no a la mujer). Así que,
Dios espera que el hombre tenga la misión y el liderazgo en Su plan, y que la mujer le ayude.
Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo:
No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida...
Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues
210
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Lo que Dios dice a Adán en estos versículos se aplica a todo hombre, porque todos venimos de él. Como
todo lo demás de este pacto, lo que Dios promete al hombre es incondicional. No hay manera de evitarlo.
Observe que Dios, primero que nada, destaca el error de Adán que lo llevó a pecar con el árbol. Violó la
estructura ordenada por Dios y se sometió a los deseos de su mujer. Cuando le mandó a Adán a no comer
del árbol de la ciencia del bien y del mal (Gen 2.15-17), él estaba solo. Dios creó a Eva hasta después, en
el versículo 22 del mismo capítulo. Entonces, fue principalmente la responsabilidad del hombre, la de no
comer del árbol. Cuando Eva comió del fruto prohibido, ella le dio a Adán también para que él lo comiera
igual que ella (Gen 3.6). Cuando él lo hizo, se sometió a los deseos de su mujer y vez de obedecer a Dios
y seguir Sus palabras. Esto es lo que lo llevó a Adán a pecar comiendo del fruto del árbol prohibido.
El primer aspecto del castigo de Adán (el primer aspecto del pacto que Dios está estableciendo con el
hombre) tiene que ver con su trabajo. Con dolor el hombre come de la tierra (Gen 3.17). Otra vez vemos
que el castigo tiene que ver con lo que él hizo. Vemos la ley de la cosecha. Lo que Adán hacía antes para
proveer para su familia era andar por el huerto de Edén y agarrar fruto para comer de los árboles. Pecó
cuando agarró el fruto prohibido y se lo comió. Entonces, el castigo divino tiene que ver con lo que el
hombre hace para proveer para su familia. Tiene que ver con su trabajo. Antes era tan facil como andar
por un huerto y comer del fruto de los árboles (Gen 2.16). Ahora no es así. Bajo el pacto de Adán, el
hombre tiene la responsabilidad de sostener a su familia (él es la cabeza, el líder, el proveedor) y esto le
va a doler. Ahora el hombre tiene que trabajar duro para poner pan en la mesa y así sostener a su familia.
Ahora no es tan fácil como andar por un huerto y comer del fruto de los árboles. El hombre ahora tiene
que agacharse y trabajar duro para sacar su comida de la tierra (de ella dice el versículo). Su dieta ya no
es únicamente de frutas. Bajo el pacto de Adán, comen también vegetales que el hombre tiene que plantar,
cuidar y sacar de la tierra. Por esto ningún hombre tiene derecho de quejarse por el trabajo que tiene. Dios
nos prometió el duro trabajo, un trabajo que nos duele. Es un pacto incondicional y todavía está vigente.
Entonces, si usted tiene un buen trabajo que le gusta, qué dicha. Debería ser muy agradecido por él. Pero
si tiene un trabajo que es duro o que es un bostezo, no tiene derecho de quejarse. Es nuestro castigo
En Génesis 3.19 vemos otro aspecto del pacto de Adán que nos toca a los hombres. Con sudor el hombre
come de la tierra hasta que muera. Bajo este pacto incondicional (que todavía está vigente) el hombre
debe sudar en su trabajo y debe trabajar hasta el día de su muerte. Es intersante ver cómo el hombre hace
todo lo que pueda para evitar el cumplimiento de esta parte del pacto. El hombre caído no quiere sudar.
Inventa aire acondicionado y no quiere trabajar como obrero sino como hombre de oficina. Sin
embargo, si evitamos sudar, hay consecuencias que no podemos negar porque la Biblia dice que el
hombre sudará hasta que muera. Así que, si uno no quiere sudar, morirá más temprano. Nuestros cuerpos
necesitan sudar para sacar un montón de toxinas que de otras maneras no se salen del cuerpo. Si usted
tiene un trabajo, entonces, en que no suda, debería practicar algún tipo de deporte o algo parecido para
sudar. Si no lo hace, está viviendo con un montón de toxinas en su sistema que sólo salen en el sudor.
Además de procurar evitar el sudar, observe como el hombre caído no quiere trabajar hasta su muerte.
Casi todos piensan en jubilarse (pensionarse) un día para dejar de trabajar y así dejar de sudar. Pero, bajo
el pacto de Adán, uno debería trabajar y sudar hasta que vuelva al polvo de donde Dios lo sacó. Así es
cómo Dios nos ha diseñado. Entonces, si se pensiona, no se quede en la casa de vago. ¡Métase en la obra
Entremezclada con la maldición sobre el hombre está la maldición que Dios pronunció sobre la creación.
Puesto que Adán pecó con la creación que debiera haber cuidado, hubo consecuencias más allá de él y de
211
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
La maldición de la creación
Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo:
No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.
Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo. Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta
que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás. [Gen 3.17-19]
Hay algo malo en la tierra. Según Génesis 3.17, ella es maldita. La tierra (el polvo sobre el cual
caminamos todos los días) está bajo una maldición divina. Por esta maldición, la tierra ahora produce
espinos y cardos. Antes no era así, sino que la tierra sólo producía lo bueno, como un huerto siempre
limpio, perfecto y ordenado. Además, bajo el pacto de Adán todo lo que vienede la tierra muere.
Cualquier planta (árboles, matas, flores, etc.) tiene un lapso de vida limitado y después muere. Esto
también tiene algunas implicaciones serias para nosotros que comemos lo que crece de esta tierra maldita.
Estamos comiendo platas que vienen de una tierra que produce la muerte. La implicación es obvia: Si
usted come de lo que viene de la tierra (plantas o animales que comen las plantas), va a morir porque está
comiendo toxinas que causan la muerte. Hay algo malo en la tierra y todo lo que viene de ella causa la
muerte. Hoy, unos seis mil años después de Génesis 3, hay más toxinas aun en la tierra (por el uso de ella
y también por todos los productos secundarios y la contaminación). Entonces hay más problemas de salud
La Biblia dice que la creación está sujeta a esta maldición hasta que se manifieste la gloria de los hijos de
Dios.
Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Porque la
creación fue sujetada a vanidad [en Gen 3.17-19], no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó
en esperanza; porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad
La creación está sujeta a la maldición del pacto de Adán hasta la segunda venida de Cristo y el comienzo
del Milenio. Al final de nuestra época (la de la Iglesia) Jesucristo viene y redime nuestros cuerpos en el
arrebatamiento. Nos transforma los cuerpos muertos en cuerpos glorificados (como el cuerpo de Él).
Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el
cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por
el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas. [Flp 3.20-21]
Sin embargo, nos manifestaremos hasta la segunda venida cuando volvamos con Cristo, formando parte
Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. [Apoc
19.14]
Es en aquel momento, cuando Cristo vuelve a la tierra para establecer Su reino mesiánico, y en aquel
tierraen el planeta. Todas las criaturas (animales y hombres) volverán a comer sólo plantaso sea,
serán herbívoros.
Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león y la bestia
doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará. La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el
león como el buey comerá paja. Y el niño de pecho jugará sobre la cueva del áspid, y el recién destetado
extenderá su mano sobre la caverna de la víbora. No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la
tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar. [Isa 11.6-9]
El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá paja como el buey; y el polvo será el alimento
de la serpiente. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová. [Isa 65.25]
212
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Es en parte por esto (por el hecho de quitarle a la tierra la maldición) que la gente en el Milenio vivirá
No habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de
Si alguien muere con cien años de edad, será como si fuera un niño. Habrá gente viviendo hasta casi los
mil años de edad otra vez porque estarán comiendo comida pura y limpia debido a que viene de una tierra
que ya no tiene más maldición. En el Milenio, entonces, la sociedad se vuelve agraria. Habrá cuatro
cosechas durante el año, una en cada estación, y el fruto que se cosecha será enorme y abundante como
He aquí vienen días, dice Jehová, en que el que ara alcanzará al segador, y el pisador de las uvas al que lleve
la simiente; y los montes destilarán mosto, y todos los collados se derretirán. [Amós 9.13]
En resumen
Hay cinco cosas generales que vimos bajo el pacto de Adán. En la casa, el hombre debe ser el líder, la
cabeza, y debe guiar a su familia como Cristo guía la Iglesia, con amor y gracia no como un dictador. La
mujer debe tener hijos. Es natural que la mujer quiere hijos porque es cómo Dios la ha hecho. No es así
con el hombre. El hombre quiere ser líder, quiere conquistar un nuevo terreno y proteger a su familia
como el corazón valiente. Pero no la mujer; ella quiere criar a una familia. El hombre, entonces, debería
trabajar duro y sudar para poner pan en la mesa. Por esto, si alguien tiene un trabajo suave en el cual no
suda, debe meterse en algún deporte o pasatiempo que le hace sudar. Si no, morirá temprano. El cuerpo
necesita sudar para limpiarse de las toxinas que recibimos por lo que comemos de la tierra maldita. Otro
aspecto que vimos de este pacto es el hecho que morimos físicamente (volvemos al polvo de donde Dios
nos sacó). Y por último, la tierra está maldita debido al pecado de Adán y, por lo tanto, causa la muerte
El pacto de Adán, como hemos visto, es incondicional. Dios no pone ninguna condición en ninguna parte
de este acuerdo que hace con los hombres. Lo que Él dice, pasará. Además, todavía está vigente.
Después de establecer el pacto, Dios mata un animal para cubrir al hombre pecador.
Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió. [Gen 3.21]
El versículo dice que Dios hizo túnicas de pieles, no de pelo. No son de lana, sino de cuero. Dios tuvo que
derramar sangre inocente para cubrir a los pecadores. Él sacrificó lo mismo que Abel porque, ¿cómo sabía
Abel qué ofrecer si no lo sabía por el sacrificio que Dios mismo ofreció? Dios mató un cordero para
cubrir al pecador.
Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a
En cuadro vemos a Cristo Jesús, el Cordero de Dios que fue muerto para cubrirnos a nosotros, sacarnos
de este pacto y quitarnos toda la maldición que resultó del pecado de Adán y Eva. Sin embargo, aunque
tenemos la salvación y la esperanza segura de estar libres de este pacto, todavía estamos bajo este acuerdo
y estaremos así hasta el arrebatamiento de la Iglesia cuando recibiremos un nuevo cuerpo (uno que es de
213
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Entonces, los hombres siguen separados de Dios por lo que pasó en el huerto de Edén y lo que resultó
Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que
no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. Y lo sacó Jehová del
huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. [Gen 3.22-23]
Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a
Por lo tanto el hombre todavía corre el mismo peligro que Adán y Eva enfrentaron antes de la separación
(antes de que Dios los sacó del huerto), el de vivir para siempre en su condición de muerte espiritual.
Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego. [Apoc 20.15]
Hay otra cosa interesante al final de este pasaje de Génesis 3 que tiene que ver con el pacto de Adán y
vale la pena sacarla. Dios guardó el camino del árbol de la vida con una espada.
Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se
revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida. [Gen 3.24]
El camino de la vida todavía está guardada por una espada. Hoy es la Espada del Espíritu, la Palabra de
Dios.
Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios. [Ef 6.17]
Si alguien quiere la vida, si quiere salir de este pacto, tiene que nacer de nuevo por la Palabra.
Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y
Tiene que oír la palabra de salvación, el evangelio, y creerla. Al hacer esto, nace por el Espíritu y recibe la
En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo
creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la
Esta nueva vida (la vida eterna) viene a través de la circuncisión espiritual que Dios lleva a cabo con Su
Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir
el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
[Heb 4.12]
En él también fuisteis circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros el cuerpo
incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados. [Col 2.11-
13]
Habrá un cumplimiento en parte de este pacto durante el Milenio. O sea, Cristo quitará una buena parte de
la maldición de este pacto cuando venga la segunda vez. Esto es lo que vimos arriba en el contexto de la
maldición sobre la creación. Se quita cuando Cristo viene para establecer el Milenio (Isa 11.1-10).
214
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
No obstante, el pacto de Adán estará vigente hasta la renovación de la creación por fuego, porque Dios no
quitará toda la maldición (el contenido del pacto de Adán) hasta la eternidad, hasta después de la
Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán. [Apoc
Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y
los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. Puesto que
todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir,
esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán
Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y
ningún lugar se encontró para ellos [se destruyeron por fuego]... Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque
el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. [Apoc 20.11, 21.1]
La gran mayoría de lo que vemos en los pactos que Dios hace con los hombres antes de Génesis 12
todavía está vigente. Luego, a partir del llamamiento de Abraham en Génesis 12, vemos que Dios
empieza a establecer pactos con una familia (la de Abraham) y la nación que viene de esta familia (Israel).
Hasta entonces, sin embargo, los pactos son generales y por lo tanto se aplican a todos los hombres en
general.
En este aspecto de los pactos, entonces, vemos que a menudo ellos traslapan varias dispensaciones. Un
pacto puede comenzar una dispensación, pero no siempre termina con la misma. Una dispensación
mayordomo termine los pactos anteriores. Muy a menudo son dos cosas distintas y diferentes: Los pactos
incondicional, estará vigente a través de varias dispensaciones. Este es el caso con los pactos de Edén, de
Además, algunos de los pactos tienen que ver con una cabeza federal. El pacto de Adán es un pacto que
se estableció con una cabeza federal: Adán. Esto quiere decir que todos lo demás que venimos de la
cabeza, participamos en el pacto. La cabeza es el representante de los demás después de él. El pacto de
Noé es así, porque Dios lo estableció con la cabeza de todos los hombres. O sea, puesto que todos los
hombres venimos de Noé, a través de uno de sus tres hijos, todos participamos en el pacto que Dios
estableció con la cabeza (Noé). Este tipo de pacto, entonces, se establece con la cabeza federal y también
traslapa varias dispensaciones porque la descendencia de la cabeza todavía existe. Así que, al analizar el
Mas estableceré mi pacto contigo, y entrarás en el arca tú, tus hijos, tu mujer, y las mujeres de tus hijos
Dios estableció este pacto con Noé, la cabeza federal de todos sus descendientes físicos. Por esto se llama
el pacto de Noé, aunque todos los hombres participamos en el acuerdo. Dios aclara este asunto luego
cuando dice que el pacto no es sólo con Noé sino también con sus hijoscon sus descendientes físicos.
215
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Y habló Dios a Noé y a sus hijos con él, diciendo: He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con
Además, vemos que la cobertura de este pacto alcanza aun hasta los animales (todo ser viviente, toda
He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes después de vosotros; y con
todo ser viviente que está con vosotros; aves, animales y toda bestia de la tierra que está con vosotros, desde
todos los que salieron del arca hasta todo animal de la tierra. [Gen 9.9-10; ver también Gen 9.15-17]
Este pacto también es incondicional. Lo que Dios dice que hará, no viene con ninguna condición que el
hombre tenga que llenar. Dios lo hará, y punto. Esto implica que el pacto estará vigente hasta el límite de
Dios establece este pacto por el hecho de que el hombre es malo. Vea el porque en Génesis 8.21.
Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del
hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo
Dios decide tomar en cuenta el hecho que el hombre es malo por naturaleza. Cualquiera que nace de
mujer es inmundo. O sea, desde su nacimiento, el hombre es malo porque así es su naturaleza (Job
25.4-6). Por lo tanto, el hombre natural es una abominación delante de Jehová (Job 15.14-16) y con base
Esto también nos da una idea de la duración del pacto de Noé. Mientras que el hombre siga así de malo, el
pacto está vigente. Entonces, puesto que Dios no cambiará la naturaleza de todo hombre hasta después del
Milenio, vemos que este pacto traslapa cada dispensación desde la de Noé hasta el comienzo de la
eternidad.
Entienda, entonces, que como con el pacto de Adán, todo lo que vamos a ver en el contexto de este pacto
de Noé (tanto los resultados como también las responsabilidades) nos toca a nosotros. El pacto está
Las promesas acerca de la creación. Bajo el pacto de Noé, Dios promete que nunca más volverá a
maldecir la tierra.
Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del
hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud... [Gen 8.21a]
También promete que no volverá a destruir a todo ser viviente como acaba de hacer en el diluvio.
...ni volveré más a destruir todo ser viviente, como he hecho. [Gen 8.21b]
Esto no quiere decir que Él no volverá nunca a destruir a todo ser viviente. La promesa del pacto es que
no lo hará de la manera que lo hizo en los días de Noé, con un diluvio de aguas.
Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más
216
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Es obvio que Dios volverá a destruir a todo ser viviente, pero la próxima vez lo hará con fuego después
Además, dentro del límite de tiempo de este pacto (mientras que esta tierra esté aquí), siempre habrá
cosecha, siempre habrá estaciones y siempre habrá días y noches. O sea, no habrá otra catástrofe tan
Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y
Las promesas acerca del hombre. Las promesas del pacto de Noé vienen con una comisión, la misma que
Bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y llenad la tierra... Mas vosotros
Aunque Adán perdió el reino espiritual cuando pecó (porque murió espiritualmente), siguió con el reino
físico. Dios quiere que Noé siga con la comisión original porque el reino físico (que se llama el reino de
los cielos en la Biblia) pasó de Adán y sus descendientes a Noé y los suyos. El pacto de Noé, entonces,
viene con una comisión. Pero, entienda que la comisión no es una condición. Dios cumplirá con todas las
promesas aun si el hombre no es fiel para cumplir con la comisión (y de hecho fracasó en este asunto con
la torre de Babel).
Una de las promesas del pacto de Noé es la del dominio. Dios le da al hombre el dominio sobre todos los
animales.
El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo
lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados. [Gen 9.2]
Parece que en este momento algunos de los animales dejan de ser domesticados (dóciles) y llegan a ser
silvestres. Antes no tenían miedo del hombre, pero ahora sí. Sin embargo, Dios entregó todos los animales
en las manos de los hombres. El hombre tiene dominio sobre ellos. En esto vemos una provisión que Dios
La promesa de la provisión en el pacto de Noé tiene que ver con un cambio en la dieta del hombre.
Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he
dado todo. Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis. [Gen 9.3-4]
Después del diluvio Dios cambia la dieta (y muy probablemente el metabolismo) del hombre. Ya no come
sólo legumbres y plantas verdes. Ahora también come carne, y es por esto que vemos la promesa de la
Las promesas del pacto no vienen sin una prohibición: La sangre (Gen 9.4). Dios le prohíbe a los hombres
comer sangre bajo tres diferentes pactos a través de la historia de la Biblia. Se lo prohíbe aquí bajo el
pacto de Noé. Luego se lo prohíbe bajo el pacto de Moisés (Lev 17.11) y también lo hace en el Nuevo
Pacto (Hech 15.19-21). No obstante, hemos de prestar atención a las palabras de la prohibición aquí,
porque nos muestran la intención de Dios. Génesis 9.4 dice que la vida de la carne es su sangre. La vida
que corre dentro de un ser vivo es su sangre. Esto quiere decir que la sangre es vida. Entonces, ya vemos
por qué Dios le prohíbe al hombre comer la sangre. Está consagrándola porque a través la sangre (la
sangre de Dios, Su propia sangre según Hech 20.28), Él imparte vida eterna. En esto tenemos que tener
cuidado de no caer en el error de la transubstanciación de la Misa Católico. Para este fine, observe en el
pasaje que sigue de Juan 6 que Cristo está hablando simbólicamente acerca de Su carne y Su sangre.
Sabemos que está hablando así porque luego en el mismo capítulo explica lo que está diciendo. No es la
217
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
carne (ni la sangre) física que imparte vida. Está hablando de recibir la vida eterna recibiendo la Palabra
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no
tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día
El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y
Por esto, entonces, entendemos que Dios no está dándonos recetas de cocina en Génesis 9.4, aunque,
hasta donde sea posible, el hombre deberá comer la carne sin sangre porque la sangre está sumamente
sucia. Muchas enfermedades se transportan por medio de la sangre. Sin embargo, la prohibición aquí tiene
más que ver con ritos religiosos que con la dieta de uno. Tiene que ver con comer sangre para recibir la
vida eterna (la salvación) en un rito religioso. Por esto Dios nos prohíbe comer cualquier sangre (aun la
Las promesas del pacto de Noé vienen también con la responsabilidad de gobernar.
Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano
del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre. El que derramare sangre de
hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre. [Gen 9.5-6]
En este momento Dios le entrega al hombre el poder y la autoridad para gobernar sus sociedades. Con la
autoridad de quitarle al homicida la vida, Dios está otorgándole toda autoridad para gobernar. O sea, con
el máximo poder de la pena de muerte, Dios estaba también dándole al hombre el poder para gobernar
sobre todos los demás aspectos de su sociedad. Pablo se refiere a este pasaje en Romanos 13.
Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que
hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios
resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos. Porque los magistrados no están para
infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y
tendrás alabanza de ella; porque es servidor de Dios para tu bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en
vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo. Por lo cual es
necesario estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia. [Rom
13.1-5]
Entienda, entonces, que la pena de muerte no se trata de lo que los hombres quieren. Es un mandamiento
de Dios y forma parte del pacto de Noé que todavía está vigente. Dios nos da más detalles sobre Su deseo
30 Cualquiera que diere muerte a alguno, por dicho de testigos morirá el homicida; mas un solo testigo no
31 Y no tomaréis precio por la vida del homicida, porque está condenado a muerte; indefectiblemente morirá.
32 Ni tampoco tomaréis precio del que huyó a su ciudad de refugio, para que vuelva a vivir en su tierra, hasta
33 Y no contaminaréis la tierra donde estuviereis; porque esta sangre amancillará la tierra, y la tierra no será
expiada de la sangre que fue derramada en ella, sino por la sangre del que la derramó.
34 No contaminéis, pues, la tierra donde habitáis, en medio de la cual yo habito; porque yo Jehová habito en
Hay que decidir el asunto bien (v30). Quitarle la vida a un hombre no es nada frívolo, entonces tiene que
haber certeza de su culpabilidad. No deberían recibir plata por la vida del condenado (v31). O sea, él debe
morir sin demora y sin clemencia. La sociedad no debería darles a los homicidas un lugar donde vivir
218
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
seguros (como los que está en nuestras cárceles hoy bajo una sentencia de vida que dura, a veces, sólo
siete años; v32). Dios dice que la única manera de que la tierra será expiada de la sangre que fue
derramada en ella es por la sangre del que la derramó (v33-34). Esto quiere decir que la sociedad que no
ejerce la pena de muerte está acumulando contaminación y por lo tanto condenación divina. Si no matan a
los homicidas, Dios los castigará (a los que no matan a los homicidas; o sea, a los gobernadores que están
Porque he aquí que Jehová sale de su lugar para castigar al morador de la tierra por su maldad contra él; y la
tierra descubrirá la sangre derramada sobre ella, y no encubrirá ya más a sus muertos. [Isa 26.21]
Así que, bajo el pacto de Noé (que todavía está vigente) los gobernadores de cada nación son
responsables delante de Dios por cómo dirigen la sociedad. Un día de estos, como siervos de Dios (Rom
Y dijo Dios: Esta es la señal del pacto que yo establezco entre mí y vosotros y todo ser viviente que está con
vosotros, por siglos perpetuos: Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal del pacto entre mí y la
tierra. Y sucederá que cuando haga venir nubes sobre la tierra, se dejará ver entonces mi arco en las nubes.
[Gen 9.12-14]
Esta es la primera vez que un arco iris aparece en la historia del hombre. Antes, el arco iris no existía
Y toda planta del campo antes que fuese en la tierra, y toda hierba del campo antes que naciese; porque
Jehová Dios aún no había hecho llover sobre la tierra, ni había hombre para que labrase la tierra, sino que
subía de la tierra un vapor, el cual regaba toda la faz de la tierra. [Gen 2.5-6]
Antes del diluvio de Noé, no llovió sobre la tierra. Subía de la misma tierra un vapor que regaba la faz del
planeta. La atmósfera, entonces, después del diluvio es muy diferente de la que había antes. A pesar de
qué tan extraño nos parece, Génesis 7.12 fue la primera vez que los hombre vieron agua caer del cielo.
Además, hemos de entender que debido a este cambio Noé (el único hombre justo entre todos los
demás de sus días; Gen 6.9) se embriagó con vino. Noé no era ningún borracho común y corriente; era
justo en su andar. ¿Cómo es que se emborrachó, entonces? En primer lugar, Dios cambió el
metabolismo del hombre (Gen 9.3). Entonces, el cuerpo de Noé no procesaba los alimentos como antes
del diluvio. Además, el Señor cambió todo el medio ambiente después del diluvio, porque ya hay nubes y
lluvia. Es un medio ambiente muy diferente del de antes. Obviamente las plantas no seguían iguales
porque tuvieron que cambiar (adaptarse) para la nueva atmósfera. Así que, el proceso de fermentación, y
cómo el cuerpo reaccionaba al vino fermentado, le tomó a Noé por sorpresa y él quedó borracho.
Cada vez que hay un arco iris en algún lugar en la tierra, Dios se acuerda de Su pacto que hizo con los
hombres, de no matarnos otra vez como hizo con los del diluvio. Debería destruirnos, pero no lo hace.
Y me acordaré del pacto mío, que hay entre mí y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrá más
Las profecías del pacto: El contenido para los hombres según su descendencia
Y los hijos de Noé que salieron del arca fueron Sem, Cam y Jafet; y Cam es el padre de Canaán. Estos tres
son los hijos de Noé, y de ellos fue llena toda la tierra. [Gen 9.18-19]
219
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Puesto que el pacto de Noé tiene que ver con sus descendientes físicos, estas profecías también. Se
pronuncian sobre los tres hijos de Noé y son profecías acerca de las tres grandes razas humanas. Todos
somos de la misma sangre, porque todos somos del mismo hombrede Adán, a través de Noé.
Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les
Sin embargo, Dios estableció los límites de nuestras habitaciones. O sea, hay divisiones entre los
Para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de
El Señor hizo estas divisiones con el propósito de salvarnos. Él dividió las razas para mejor alcanzar a
Los orientales vienen de Sem. En el lenguaje representativo de Sem (que sería el hebreo), el nombre
Sem quiere decir gloria, renombre, el nombre. Es una indicación de que Dios puso Su nombre sobre
Sem y sus descendientes, escogiéndolos a ellos para entregarle al mundo Su pueblo escogido (Israel), Su
Palabra (la Escritura) y la salvación a través del Mesías (Jesucristo es un semita de la tribu de Judá). Los
africanos vienen de Cam. En su lenguaje representativo (el de Egipto), Cam quiere decir negro. Los
indoeuropeos vienen de Jafet y en su lenguaje representativo (el de los arios) Jafet quiere decir cabeza,
jefe y tiene el sentido de el que manda. La dispersión de los descendientes de Sem, Cam y Jafet forma
Por las profecías del pacto de Noé podemos entender unas diferencias generales entre las razas y las
culturas de los hombres. Entienda que este tipo de observación no se trata del racismo. El racismo tiene
220
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
que ver con la subyugación de los individuos de una raza debido a su descendencia física. Lo que se
puede ver en las profecías es una generalización (una tendencia general) de una raza, nada más. Por
supuesto hay excepciones y las habrá siempre porque cada individuo es diferente y toma sus propias
decisiones de qué hacer y cómo vivir. Sin embargo, las generalizaciones son la verdad y es obvio cuando
Y dijo: Maldito sea Canaán; Siervo de siervos será a sus hermanos. [Gen 9.25]
Los descendientes de Cam son los siervos de los siervos. ¿Quiénes serán? ¿Cuál raza ha sido más
abusada en esclavitud que cualquier otra? Es obvio: Los negros. La tierra de Cam es la tierra de Egipto
Después entró Israel en Egipto, Y Jacob moró en la tierra de Cam. [Sal 105.23]
Olvidaron al Dios de su salvación, Que había hecho grandezas en Egipto, Maravillas en la tierra de Cam,
Esta profecía de Génesis 9.25 no es una licencia para abusarse de la raza de África. Es simplemente una
Dijo más: Bendito por Jehová mi Dios sea Sem, Y sea Canaán su siervo. [Gen 9.26]
Sem recibe la bendición de Dios. Sem es el sacerdote, el espiritual entre los tres hijos de Noé. Los
descendientes de Sem son los orientales, tanto los del medio-oriente como también los asiáticos de China
y aun los de las Américas. La característica más destacada de Sem y de sus descendientes es su
Engrandezca Dios a Jafet, Y habite en las tiendas de Sem, Y sea Canaán su siervo. [Gen 9.27]
mandar. De Jafet vienen los europeos, los caucasianos, que siempre están ocupados con la extensión de
sus fronteras. Quieren más y cuando tienen más, quieren más aún. Los de Jafet, en general, son
materialistas y violentos. Al conquistar las Américas, Jafet (el europeo) cumplió con esta profecía porque
empezó a habitar en las tiendas de Sem (de los asiáticos que vivían en las Américas antes de Cristóbal
Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del
hombre; porque el intento del corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo
ser viviente, como he hecho. Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el
El pacto de Noé es incondicional. Dios cumplirá con lo que ha dicho en este pacto a pesar de lo que hacen
(o no hacen) los hombres. Sin embargo, Dios sí pone una limitación de tiempo a este pacto (mientras la
tierra permanezca), pero no es una condición de su cumplimiento. El pacto de Noé estará vigente hasta el
221
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Estará el arco en las nubes, y lo veré, y me acordaré del pacto perpetuo entre Dios y todo ser viviente, con
toda carne que hay sobre la tierra. Dijo, pues, Dios a Noé: Esta es la señal del pacto que he establecido entre
El pacto de Noé es un pacto perpetuo (y realmente la parte perpetua del pacto es la promesa de no
destruir otra vez todo ser viviente con un diluvio de aguas). El pacto no tiene condiciones de
cumplimiento y por lo tanto continuará a pesar de cambios de dispensación. Sin embargo, Dios fija el
límite de tiempo para este pacto. El pacto de Noé estará vigente mientras que esta tierra esté aquí,
mientras que haya estaciones y mientras que haya día y noche (Gen 8.22). Así que, el pacto estará vigente
a través de cada dispensación, empezando en Génesis 6.18, hasta el final del Milenio cuando Dios
destruirá la tierra y los cielos con fuego para crearlos de nuevo después (2Ped 3.10; Apoc 20.11). Después
No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los
Entonces, el pacto de Noé estará vigente hasta la destrucción de nuestra creación, pero ahí terminará. En
El pacto de Abraham es un acuerdo perpetuo que aun tiene ciertos aspectos que estarán vigentes en la
eternidad.
Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te
mostraré. Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición.
Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias
Este pacto empieza con Dios llamando a Abram (llamado luego Abraham) fuera de su tierra y de su
parentela. Al obedecer el llamamiento, Abram recibe las promesas del pacto. El pacto consiste en siete
promesas incondicionales que Dios hizo con Abram y con su descendencia. Si las promesas todavía no
son una realidad (si no se han realizado), serán una realidad en el futuro porque este es un pacto
incondicional y perpetuo. Luego, Dios agrega a este acuerdo otro pacto (como un sub-pacto) que tiene
En aquel día hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra, desde el río de
De Abraham y de su descendencia Dios hará (sin condiciones) una nación grande. La nación, por
supuesto, es Israel. Es la única nación en todo el mundo que puede trazar su linaje a un hombre. Hoy día,
hay otro pueblo que quiere decir que es la nación grande y escogida de Dios: El pueblo árabe
222
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
(específicamente los musulmanes). Sin embargo, la Biblia dice que la nación escogida por Dios no viene
a través de Ismael (el padre de los árabes), sino a través del hijo de Sara y Abraham, quien es Isaac.
Y dijo Abraham a Dios: Ojalá Ismael viva delante de ti. Respondió Dios: Ciertamente Sara tu mujer te dará a
luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y confirmaré mi pacto con él como pacto perpetuo para sus
descendientes después de él. Y en cuanto a Ismael, también te he oído; he aquí que le bendeciré, y le haré
fructificar y multiplicar mucho en gran manera; doce príncipes engendrará, y haré de él una gran nación.
[Gen 17.18-20]
Las promesas del pacto pasaron de Isaac a su hijo Jacob, también llamado Israel (Gen 28.10-14). De la
familia de Israel (sus 12 hijos) vino la nación de Israel con sus 12 tribus. La nación grande y escogida por
Todas las otras naciones no son nada (menos que nada, en realidad) en comparación con esta nación que
He aquí que las naciones le son como la gota de agua que cae del cubo, y como menudo polvo en las balanzas
le son estimadas; he aquí que hace desaparecer las islas como polvo. Ni el Líbano bastará para el fuego, ni
todos sus animales para el sacrificio. Como nada son todas las naciones delante de él; y en su comparación
serán estimadas en menos que nada, y que lo que no es. [Isa 40.15-17]
Israel, la nación que Dios haría de la descendencia de Abraham, no es contada entre las demás naciones.
Y él tomó su parábola, y dijo: De Aram me trajo Balac, Rey de Moab, de los montes del oriente; Ven,
maldíceme a Jacob, Y ven, execra a Israel. ¿Por qué maldeciré yo al que Dios no maldijo? ¿Y por qué he de
execrar al que Jehová no ha execrado? Porque de la cumbre de las peñas lo veré, Y desde los collados lo
miraré; He aquí un pueblo que habitará confiado, Y no será contado entre las naciones. [Num 23.7-9]
Esta promesa del pacto tiene más que ver con Abraham personalmente. Él recibió la bendición espiritual
la justificación para salvaciónde parte de Dios en Génesis 15.6 (Rom 4.1-3). También recibió la
bendición física (económica, de bienes) porque parte del pacto tiene que ver con este mundo físico (Gen
24.34-35). Además Dios le dio la tierra prometida, la tierra de Canaán (Gen 13.14-17; 15.18). Así que,
Dios ya cumplió con Su palabra. Le bendijo a Abraham mucho y de varias diferentes maneras.
El nombre Abraham es uno de los más conocidos en todo el mundo debido a que tanto los cristianos
como los judíos y aun los musulmanes trazan su linaje (físico y espiritual) a él. Entonces, después de casi
4.000 años, el nombre de Abraham sigue siendo grande. Además, Abraham (o Abram) aparece unos
Desde Génesis 12.2, entonces, Abraham y su descendencia forman la fuente de toda bendición de Dios en
esta tierra. Por ejemplo, desde este punto en adelante la salvación viene a través de Abraham y los suyos,
Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de los
223
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Aun nuestra salvación durante la dispensación de la Iglesia viene a través de los judíos. Cristo Jesús nació
Hay bendición para la descendencia espiritual de Abraham. Ellos son las estrellas del cielo.
De cierto te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a
la orilla del mar; y tu descendencia poseerá las puertas de sus enemigos. [Gen 22.17]
Una es la gloria del sol, otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas, pues una estrella es diferente
de otra en gloria. Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en
Entonces, en esta la frase de Génesis 22.17 acerca de la descendencia de Abraham, podemos ver un
cuadro de nosotros mismos. Los cristianos somos la descendencia espiritual de Abraham. Por eso, la
bendición que recibimos a través de él es espiritual también. Puesto que Cristo nos redimió de la
maldición y ahora estamos en Él, la bendición que Dios dio a Abraham y a su Simiente (Cristo Jesús) nos
alcanzó a nosotros.
Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo
el que es colgado en un madero), para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a
Note que nuestra bendición en Abraham es espiritual, no física. Recibimos la promesa del Espíritu Santo
de Dios (algo espiritual, no físico) y nuestra bendición no tiene que ver con lo físico porque, aunque
espiritualmente no somos ni judío, ni griego o ni varón, ni mujer, físicamente seguimos iguales como
antes de la salvación.
Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo,
de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en
Hay que entender esto porque hoy día en la Iglesia hay muchos que quieren tomar Romanos 2.28-29 y
aplicarlo a los cristianos diciendo que somos judíos espirituales y por lo tanto todas las bendiciones de
Abaham (tanto las espirituales como las físicas) son para nosotros. Pero, no es así porque el pasaje no
dice esto.
Pues no es judío el que lo es exteriormente, ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne; sino
que es judío el que lo es en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; la alabanza
espiritualmente (ver Gálatas 3.28 otra vez). Los judíos son los de la circuncisión físicadel linaje físico
¿Qué ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? Mucho, en todas maneras. Primero,
224
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Algunos de esta descendencia creen y otros no. Los que creen son los judíos que tiene también la
¿Pues qué, si algunos de ellos han sido incrédulos? ¿Su incredulidad habrá hecho nula la fidelidad de Dios?
[Rom 3.3]
Este pasaje, entonces, no tiene nada que ver con un cristiano tomando el lugar del judío en el plan de
Dios, ni mucho menos en el pacto que Dios hizo con Abraham y sus descendientes físicos. Nosotros no
Hay que tener cuidado también con este asunto de que la Iglesia ha reemplazado a Israel porque hay
algunos que quieren decir que la tierra prometida (en el medio-oriente) ya pertenece a la Iglesia. Pero, no
podemos reclamar la tierra prometida como la nuestra (como hicieron en las cruzadas de la Iglesia
Católica) porque aquella tierra siempre ha pertenecido a Israel, todavía le pertenece y le pertenecerá a ella
para siempre. Los judíos siguen siendo los que van a recibir todas las promesas de bendición física,
De cierto te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a
la orilla del mar; y tu descendencia poseerá las puertas de sus enemigos. [Gen 22.17]
Hay bendición para la descendencia física de Abraham. En la promesa que el Señor le dio a él acerca de
su descendencia, Dios compara los descendientes de Abraham con la arena que está a la orilla del mar. La
arena (algo físico en esta tierra) es un cuadro de la descendencia física de Abraham los que reciben la
bendición a través de él. Jacob (también llamado Israel) forma parte de esta descendencia física de
Abraham a través de Isaac. Él recibe la bendición física que Dios prometió a Abraham y además recibe la
tierra prometida que Él dio a la familia de Abraham a través de Isaac (Gen 35.9-12). Entonces, no son los
judíos espirituales que recibirán todas las bendiciones físicas, que incluyen también la tierra prometida.
Es la descendencia física de Israel las recibirá. Entienda, entonces, que puesto que esta bendición incluye
Génesis 12.3a: ...Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren madeciré...
El trato de Dios con las naciones forma parte de este pacto de Abraham también. Por esto, desde Génesis
12.1-3 en adelante, cada nación es juzgado por Dios según su trato con la nación de Israel. Ser enemigo
Oh Dios, no guardes silencio; No calles, oh Dios, ni te estés quieto. Porque he aquí que rugen tus enemigos,
Y los que te aborrecen alzan cabeza. Contra tu pueblo han consultado astuta y secretamente, Y han entrado en
consejo contra tus protegidos. Han dicho: Venid, y destruyámoslos para que no sean nación, Y no haya más
memoria del nombre de Israel. Porque se confabulan de corazón a una, Contra ti han hecho alianza. [Sal
83.1-5]
Este asunto será muy evidente en el juicio de las naciones después de la segunda venida de Cristo (Mat
25.31-46). Cada individuo de cada nación que existe en el momento de la venida del Señor, le rendirá
cuentas a Él por cómo trataron a los judíos. Su salvación en aquel entonces dependerá de esto.
Egipto y Edom fueron juzgados severamente por Dios porque maltrataron a los judíos.
Egipto será destruido, y Edom será vuelto en desierto asolado, por la injuria hecha a los hijos de Judá; porque
225
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
No se puede tocar la nación de Israel y salir limpio. Dios castigará a todos los que se oponen a Su pueblo
escogido. Así lo prometió en el pacto de Abraham y así lo ha hecho desde entonces y lo hará igual para
siempre.
Por tanto, vivo yo, dice Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, que Moab será como Sodoma, y los hijos de
Amón como Gomorra; campo de ortigas, y mina de sal, y asolamiento perpetuo; el remanente de mi pueblo
los saqueará, y el remanente de mi pueblo los heredará. Esto les vendrá por su soberbia, porque afrentaron y
Inglaterra en un buen ejemplo de esta promesa y su aplicación divina hoy en día. Después de la Primera
Guerra Mundial, en 1917 y 1918 d.C., Inglaterra sacó la Declaración de Balfour que le dio a Israel un
pedazo de tierra en Palestina. Pero luego, en 1921, durante una reunión con representantes de la Iglesia
Católica y la nación de Islam, Winston Churchill, el primer ministro de Inglaterra en aquel entonces,
cambió el trato y les quitó a los judíos la gran mayoría (unas dos terceras partes) de lo que se le dio bajo
la Declaración de Balfour. La tierra que él les quitó a los judíos, se la dio a los palestinos (árabes y
musulmanes, descendientes de Ismael y enemigos de Israel). Inglaterra le quitó a Israel la tierra que Dios
le dio a Jacob y sus descendientes físicos. Según las promesas del pacto de Abraham, Inglaterra se metió
Hoy día Inglaterra está infestado con musulmanes y ellos están destruyendo aquel país, su sociedad y
también la cultura. Considere lo que Dennis Lloyd escribió en un artículo para la revista The Stand:
Usted encontrará mezquitas de los musulmanes reemplazando iglesias cristianas. Pregúntele a cualquier
musulmán si se le permitiría a un cristiano hacer lo mismo en su país... Ahora existe una Asociación de los
Musulmanes de la Gran Bretaña y ellos invitaron a un Imam musulmán (un maestro del Corán) a darles una
charla sobre la necesidad de bombarderos suicidas. Su nombre era Yusu Al-Qaradawi. Le permitieron
quedarse en Londres y predicar sobre los beneficios de bombardear a los civiles. Él apareció en la Cámara de
la Municipalidad de Londres para la apertura del Concilio Europeo de Fatwa. Ahí dijo que Alá aprobaba el
Se roban 800 pasaportes ingleses cada día y los pasan a musulmanes en Argelia. Se robaron (o se
perdieron) 184.301 pasaportes en un año: 2003. Se falsificaron otros 837 pasaportes para llevar a
musulmanes a Inglaterra.
En Inglaterra hubo 12 homicidios de miembros de familias musulmanes en el año 2004. Por ejemplo, Abdulla
Yones vio a su hija de 15 años de edad hablando con otra niña que era cristiana. Le apuñaló a su hija 11 veces
y luego le cortó la garganta y la metió en la tina del baño. Él dijo que fue un honor matarla para redimir el
hombre de su familia.
Afuera de la mezquita Bakrl Mahoma de Londres está Abú Hamaz, un musulman devoto y leal. Él anima a
todos los musulmanes a cometer actos de terrorismo. Su grupo dice que las escuelas públicas de Inglaterra
son buenos blancos para atacar. También, Omar Bakri les anima a todos los musulmanes a ayudar con estos
actos de terrorismo. Sus miembros queman banderas de la Gran Bretaña. Omar Bakri es un empleado del
gobierno de Inglaterra. Recibe su salario de los impuestos pagados por los ciudadanos ingleses.
Poco a poco nuestra herencia nos la llevan los buenitos y los gobiernos de hoy.
Dan demasiados derechos a otras personas, quienes vinieron aquí para hacer lo que bien les parecía.
Ahora ellos tienen las leyes a su favor, los que no nacieron en este país.
Las cosas salieron mal en sus propios países, entonces ahora nosotros tenemos que acatar a sus órdenes.
Ellos vinieron como nuestros invitados; no hay nada más que decir; puesto que usted los llamaron así, todos
226
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Y es cierto. Es tiempo para pagar la cuenta en Inglaterra. Churchill, con el respaldo de su país, creó la
deuda en 1921. Desde entonces Dios ha estado tocando su puerta para que paguen, y están pagando con
creces. Es Gálatas 6.7-8, la ley de la cosecha, en acción. Ellos favorecieron a los musulmanes sobre los
judíos, y por esto quitaron a los judíos tierra para dárselo a los musulmanes. Así que, puesto que
sembraron para los musulmanes, ahora está cosechando musulmanes en su propio país. Dios paga
Los Estados Unidos está en lo mismo hoy porque no respalda la nación de Israel. Ellos están también
quitando más y más terreno a Israel para dárselo a los palestinos (árabes y musulmanes que llegaron a
la tierra de Israel en 1950 con el propósito de echar a los judíos por fuerza militar o por fuerza política).
Los Estados Unidos, entonces, está a penas empezando a cosechar lo que Dios tiene preparado para ellos,
La única solución de todos estos problemas es obvia y vamos a verla luego cuando estudiemos en más
detalle las promesas de Dios en cuanto a la tierra de Israel. Es una solución sencilla: Fuera con el árabe,
fuera con el musulmán. La tierra es de Israel y todos los demás son ilegales.
Dios hizo un pacto incondicional con Abraham y con sus descendientes (a través de su hijo, Isaac, y su
nieto Jacob quien se llamaba también Israel). Dijo en ese acuerdo: Bendeciré a los que te bendijeren, y a
los que te maldijeren maldeciré. Dios no miente. Más bien cumple con Su palabra al pie de la letra.
Porque no por la ley fue dada a Abraham o a su descendencia la promesa de que sería heredero del mundo,
Abraham es el heredero del mundo. Toda bendición para todo el mundo (gentiles, judíos y cristianos)
viene a través del pacto de Abraham. Vemos este aspecto del pacto en la frase el polvo de la tierra en
Génesis 28.
Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el
Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia. Será tu descendencia como el
polvo de la tierra, y te extenderás al occidente, al oriente, al norte y al sur; y todas las familias de la tierra
El polvo de la tierra también puede recibir bendición de Dios bajo este pacto. Esta es otra frase que se
usa para dar un cuadro de la descendencia de Abraham a través de Jacob (Israel). Será como el polvo de la
tierra. Las estrellas forman un cuadro de la descendencia espiritual o celestial de Abraham. Somos
nosotros, los que recibimos la bendición espiritual a través de la promesas que Dios dio a Abraham en
este pacto. La arena es un cuadro de los que reciben la bendición física a través de Abraham, los judíos.
Ellos también recibieron la tierra que Dios le dio a Abraham. El polvo, entonces, es un cuadro de todos
los demás (inconversos) que pueden ser descendencia de Abraham en el sentido que tienen la
oportunidad de ser bendecidos bajo este pacto. El polvo de la tierra es algo que se encuentra en cada lugar
y cada rincón de este planeta, exactamente como los hombres. Además, todos los hombres vienen del
polvo y así volverán (Gen 2.7; Ecl 3.20). Por esto creo que podemos ver en la frase el polvo de la tierra
un cuadro de todos los hombre que podrían recibir una bendición de Dios a través del pacto de Abraham.
Todas las familias de la tierra reciben la bendición de Dios a través de Abraham y por el pacto que Dios
hizo con él. Esto incluye a todos los hombres, salvos o inconversos. Y según lo que dice Génesis 12.1-3,
una nación (una familia) puede recibir bendición si trata bien a la nación (la familia) de Abraham.
Entonces, aun los inconversos (el polvo de la tierra) pueden ser bendecidos por Dios si bendicen a la
nación de Israel. Así que, Abraham es bendición a todas las familias y naciones de la tierra, tanto las que
227
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Esta tierra de Canaán se llama hoy día Palestina, el nombre que Roma le puso cuando sacó a los judíos
hace siglos. Además se puede referir a ella como el medio-oriente. Más abajo veremos los límites de
La tierra de Canaán pertenece a los judíos. Es la suya por razón de conquista, bajo el liderazgo de Josué
(Jos 11.20, 23). Es la suya por razón de tenencia (posesión): Israel estaba en la tierra por más de 1.500
años antes de que fueron quitados de ahí. Y más que nada, la tierra es de Israel porque Dios dijo que era la
suya. Fue una dádiva (un donativo) de Dios a Abraham y luego a sus descendientes. Dios hizo otro pacto,
como un sub-pacto bajo el pacto de Abraham, en que les dio a los descendientes físicas de él la tierra
del medio-oriente.
Y Jehová dijo a Abram, después que Lot se apartó de él: Alza ahora tus ojos, y mira desde el lugar donde
estás hacia el norte y el sur, y al oriente y al occidente. Porque toda la tierra que ves, la daré a ti y a tu
descendencia para siempre. Y haré tu descendencia como el polvo de la tierra; que si alguno puede contar el
polvo de la tierra, también tu descendencia será contada. Levántate, ve por la tierra a lo largo de ella y a su
Dios le dio la tierra de Canaán (el lugar que era de los descendientes de Canaán; Gen 13.12) a Abraham.
La posesión de dicha tierra pasaría de él a su descendencia para siempre. Así que, por la promesa de
Dios la tierra de Canaán es la de Israel y será la de Israel de por siempre. Nada ha cambiado (hoy la tierra
pertenece a Israel) y nada cambiará (le pertenecerá aun en el Milenio). La promesa es incondicional. No
importa lo que hagan los judíos, los gentiles o los cristianos. La tierra es y será de Israel.
Y le dijo: Yo soy Jehová, que te saqué de Ur de los caldeos, para darte a heredar esta tierra... En aquel día
hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra, desde el río de Egipto hasta el
En el primer versículo de este pasaje Dios vuelve a mencionar la tierra prometida. Luego, en el último
versículo, Dios entra en un pacto incondicional (es como un sub-pacto o pacto secundario al principal
de Gen 12.1-3) acerca de la tierra de Canaán. Jehová se la dio a Abraham y a sus descendientes físicos.
Note que puesto que no hay condiciones, ni siquiera el rechazo del Mesías puede cambiar este donativo a
Israel.
En Génesis 15.18 vemos también que Dios empieza a describir los límites de la tierra que le dio a
Abraham. La frontera sur es una línea que extiende del Río Nilo hasta el Río Éufrates por el Golfo
Pérsico. Otra vez, entonces, podemos ver el triángulo familiar. Es casi la misma área que vimos en el
triángulo de la dispersión de los hijos de Noé. También es casi la misma área del huerto de Edén en
Génesis 2.
228
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Este pacto que Dios hizo con Abraham es perpetuoes eterno. En primer lugar, el pacto original es
Y no se llamará más tu nombre Abram, sino que será tu nombre Abraham, porque te he puesto por padre de
muchedumbre de gentes. Y te multiplicaré en gran manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti. Y
estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo,
Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad
Toda bendición vendrá siempre a todas las familias de la tierra a través de los descendientes de Abraham.
Y el centro de operaciones de esta obra es la tierra de Canaán, la tierra prometida. Dicha tierra es la de
Hemos de aclarar que la tierra prometida de Canaán pertenece a la descendencia física de Abraham a
través de Isaac, no a través de Ismael. Acerca de Ismael, Dios dice ¡Échalo! Ni él ni sus descendientes
Y creció el niño, y fue destetado; e hizo Abraham gran banquete el día que fue destetado Isaac. Y vio Sara
que el hijo de Agar la egipcia, el cual ésta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac. Por
tanto, dijo a Abraham: Echa a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con
Isaac mi hijo. Este dicho pareció grave en gran manera a Abraham a causa de su hijo. Entonces dijo Dios a
Abraham: No te parezca grave a causa del muchacho y de tu sierva; en todo lo que te dijere Sara, oye su voz,
229
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Ismael es el hombre fiero que quiere pelear contra todos los demás, y todos los demás pelean contra él.
Además le dijo el ángel de Jehová: He aquí que has concebido, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre
Ismael, porque Jehová ha oído tu aflicción. Y él será hombre fiero; su mano será contra todos, y la mano de
todos contra él, y delante de todos sus hermanos habitará. [Gen 16.11-12]
Los descendientes de Ismael son los árabes y muchos de los musulmanes de hoy día. De hecho, Mahoma
mismo (el fundador de la nación de Islam, la religión musulmana) dijo que él era el septuagésimo
descendiente de Ismael. Preste atención, entonces, a las noticias. No es el judío que está causando los
problemas en el medio-oriente. Es el árabe. Son los musulmanes. Su mano está contra todos, exactamente
como Dios dijo en Génesis 16. Todos los problemas vienen de los musulmanes, los descendientes de
Ismael.
Observe también que Ismael es de Agar, la egipcia. Desde el principio (Gen 21.9) él ha sido en contra de
Y vio Sara que [Ismael] el hijo de Agar la egipcia, el cual ésta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su
Pero como entonces el que había nacido según la carne [Ismael] perseguía al que había nacido según el
Ismael habitaba en el desierto, igual que sus descendientes hoy día. También, note que él era un tirador de
Levántate [Agar], alza al muchacho [Ismael], y sostenlo con tu mano, porque yo haré de él una gran nación.
Entonces Dios le abrió los ojos, y vio una fuente de agua; y fue y llenó el odre de agua, y dio de beber al
muchacho. Y Dios estaba con el muchacho; y creció, y habitó en el desierto, y fue tirador de arco. Y habitó en
Ismael recibió sus propias promesas de parte de Dios, y es por esto que sus descendientes son tan
numerosos hoy a pesar de que todos los hombres están en contra de ellos.
Respondió Dios: Ciertamente Sara tu mujer te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y confirmaré mi
pacto con él como pacto perpetuo para sus descendientes después de él. Y en cuanto a Ismael, también te he
oído; he aquí que le bendeciré, y le haré fructificar y multiplicar mucho en gran manera; doce príncipes
engendrará, y haré de él una gran nación. Mas yo estableceré mi pacto con Isaac, el que Sara te dará a luz por
Sin embargo, las promesas del pacto de Abraham, incluyendo la tierra prometida de Canaán (el medio-
oriente), pasaron a Isaac, no a Ismael. La voluntad de Dios en cuanto a los musulmanes (los árabes, los
Mas ¿qué dice la Escritura? Echa fuera a la esclava y a su hijo, porque no heredará el hijo de la esclava con el
Ahora, hay otros hijos de Abraham que se mencionan en la Escritura. Él tenía más hijos de concubinas
(como Ismael, que era de una concubina; Gen 25.1-4). No obstante, Abraham le dio todo lo que tenía,
A todos los demás hijos, Abraham los echó de la tierra. Los envió lejos, hacia el oriente, a la tierra que
queda al oriente del Éufrates, porque la frontera de la tierra prometida llega hasta ahí.
Pero a los hijos de sus concubinas dio Abraham dones, y los envió lejos de Isaac su hijo, mientras él vivía,
230
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
En cuanto al pacto de Abraham y las promesas, Dios sólo reconoce a un hijo, la simiente de Abraham a
Y llamó el ángel de Jehová a Abraham por segunda vez desde el cielo, y dijo: Por mí mismo he jurado, dice
Jehová, que por cuanto has hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu único hijo; de cierto te bendeciré, y
multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar; y tu
descendencia poseerá las puertas de sus enemigos. En tu simiente serán benditas todas las naciones de la
Es obvio que la tierra prometida pasó de Isaac, la simiente y el único hijo de Abraham, a Jacob y sus 12
hijos.
Y dijo: Yo soy el Dios de tu padre, Dios de Abraham, Dios de Isaac, y Dios de Jacob. Entonces Moisés cubrió
su rostro, porque tuvo miedo de mirar a Dios. Dijo luego Jehová: Bien he visto la aflicción de mi pueblo que
está en Egipto, y he oído su clamor a causa de sus exactores; pues he conocido sus angustias, y he descendido
para librarlos de mano de los egipcios, y sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y ancha, a tierra que
fluye leche y miel, a los lugares del cananeo, del heteo, del amorreo, del ferezeo, del heveo y del jebuseo.
[Exod 3.6-8]
Dios empieza su declaración en Éxodo 3 con una referencia a Abraham, Isaac y Jacob. El pacto que Él
hizo, lo hizo primero con Abraham y luego con Isaac su hijo. Las mismas promesas pasaron de Isaac a su
hijo, Jacob. Así que, el pacto de Abraham no tiene nada que ver con ningún otro hijo de Abraham. Ismael
y sus descendientes no tienen nada que ver con la tierra que Dios prometió a Abraham, Isaac y Jacob.
Luego en Éxodo 3 Dios dice Mi pueblo. El pueblo que Dios escogió para Sí mismo es Israel. Las 12
tribus forman la nación que Dios le prometió a Abraham bajo este pacto (Gen 12.1-3). Él le dio a este
pueblo la tierra de Canaán (los lugares del cananeo). Todos los demás moradores de esta tierra tienen que
irse. Dios quiere que los judíos (los descendientes físicos de Abraham a través de los 12 hijos de Jacob)
estén ahí.
Aquí están dos otras referencias al pacto perpetuo que Dios hizo para darle a Israel la tierra prometida de
Se acordó para siempre de su pacto; De la palabra que mandó para mil generaciones, La cual concertó con
Abraham, Y de su juramento a Isaac. La estableció a Jacob por decreto, A Israel por pacto sempiterno,
Diciendo: A ti te daré la tierra de Canaán Como porción de vuestra heredad. [Sal 105.8-11]
Todo lugar que pisare la planta de vuestro pie será vuestro; desde el desierto hasta el Líbano, desde el río
Para saber qué tan importante es para Dios aquel pedazo de tierra en el medio-oriente, sólo tenemos que
fijarnos en cuantas veces se menciona en la Biblia. En la Escritura Dios se refiere más a la tierra
prometida de Canaán que al cielo, al infierno, a la salvación y a la primera venida del Mesías. Aquella
Así que, la solución de todo el conflicto en el medio-oriente es fácil de entender. Uno sólo tendría que
creer la Biblia y así echar a los árabes de la tierra para dejar allá sólo los judíos. La tierra pertenece a ella.
Circuncidaréis, pues, la carne de vuestro prepucio, y será por señal del pacto entre mí y vosotros. Y de edad
de ocho días será circuncidado todo varón entre vosotros por vuestras generaciones; el nacido en casa, y el
comprado por dinero a cualquier extranjero, que no fuere de tu linaje. Debe ser circuncidado el nacido en tu
casa, y el comprado por tu dinero; y estará mi pacto en vuestra carne por pacto perpetuo. Y el varón
incircunciso, el que no hubiere circuncidado la carne de su prepucio, aquella persona será cortada de su
231
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Bajo este pacto Dios manda circuncidar a cada hombre cuando llega a tener ocho días de edad. La
circuncisión es una marca que distingue a los judíos (la circuncisión) de todos los demás en la tierra
Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te
Hay una sola condición de este pacto, y no es una condición de su cumplimiento sino de su comienzo. La
condición es irse. Dios le dice a Abram (Abraham) que se vaya de su tierra. Si hace esto, en Génesis
12.2 dice que haré de ti... Dios entra en un pacto con Abram cuando él obedece al mandamiento de salir
de su tierra. Una vez que Abram sale, todo lo demás de este pacto es incondicional. Esto incluye el pacto
original de Génesis 12.1-3 y también la promesa de la tierra que fue agregada poco después en Génesis
12.7.
El pacto de Abraham se cumple, en parte, en el Milenio cuando los judíos habitan, cada tribu, su heredad
(Ezeq 47.13 - 48.29). Todavía Israel nunca ha poseído toda la tierra prometida. Hasta el Milenio lo harán.
Sin embargo, el pacto de Abraham en su totalidad es perpetuo y eterno. Continuará durante toda la
eternidad. Toda bendición, desde Génesis 12, viene y vendrá a través de Israel, la nación que Dios
prometió en el pacto de Abraham. Israel será cabeza de todas las demás naciones (familias en Gen
Lo que vio Isaías hijo de Amoz acerca de Judá y de Jerusalén. Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que
será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados,
y correrán a él todas las naciones. Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová,
a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion
saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos
pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra
Esto, entonces, nos da una idea de cómo será la estructura del gobierno en el futuro. Primero, los 12
Apóstoles judíos (incluyendo a Matías; Hech 1.26 con Prov 16.33) reinarán sobre las 12 tribus de Israel
Y Jesús les dijo: De cierto os digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de
su gloria, vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce
Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados
por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su
imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil
Israel, como cabeza de la naciones, reinará sobre todas las familias de la tierra (sobre los gentiles). Cada
bendición de Dios llega a los demás a través de Israel porque así es la estructura que Dios estableció en
Génesis 12.1-3 bajo el pacto perpetuo de Abraham. Las naciones formarán 12 grupos, según el número de
Cuando el Altísimo hizo heredar a las naciones, Cuando hizo dividir a los hijos de los hombres, Estableció los
límites de los pueblos Según el número de los hijos de Israel. [Deut 32.8]
232
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Así que, en la eternidad Cristo reina sobre toda Su creación y bajo Él están los 12 Apóstoles reinando
cada uno sobre una de las 12 tribus de la nación de Israel. Cada una de las 12 tribus estará a cargo (como
cabeza) de una de las 12 divisiones de las naciones gentiles. Y si alguien en la eternidad quiere ir a la
presencia de Dios, tiene que pasar por una de las 12 puertas sobre las cuales están escritos los 12 nombres
de las 12 tribus de Israel, y entrar en la Nueva Jerusalén que queda dentro de un muro que tiene 12
cimientos sobre las cuales está escritos los 12 nombres de los 12 Apóstoles judíos (Apoc 21.9-21).
El pacto que Dios hizo con Abraham en Génesis 12.1-3 es eterno. Nunca terminará. El pacto de Abraham
es la base de la estructura del Reino en la eternidad. Es la estructura tanto del gobierno como de la misma
sociedad.
Este pacto es condicional. Depende de la obediencia de los israelitas y por lo tanto lleva consecuencias
Hasta ahora Dios ha establecido los pactos con los individuos y de una manera general para todos los
hombres (los descendientes de los individuos). Este es el primer pacto que Él establece con una nación.
Pero, puesto que usa a Moisés como mediador entre Él y la nación, el pacto lleva su nombre: El pacto de
Moisés. Así que, aunque Abraham es el padre de la nación de Israel, Moisés es su fundador. Con
este pacto, Dios usa a él para formar la nación de Israel de las tribus de Israel. Hay dos capítulos
En Éxodo 19 vemos el comienzo del pacto antes de que Dios les dio la ley a los israelitas. En este
Y Moisés subió a Dios; y Jehová lo llamó desde el monte, diciendo: Así dirás a la casa de Jacob, y anunciarás
a los hijos de Israel: Vosotros visteis lo que hice a los egipcios, y cómo os tomé sobre alas de águilas, y os he
Dios inicia este pacto con los israelitas a través de Moisés. Es importante observar que en el contexto
vosotros son los hijos de Israel (Exod 19.1). Este pacto, con todo su contenido y todas sus
Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los
pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las
En los versículos 5 y 6 arriba, Dios pone delante de Israel las condiciones preliminares de entrar en este
pacto con Él. Si ellos no aceptan estas condiciones, no habrá pacto. También, antes de entrar en los
detalles, Dios quiere que ellos sepan lo que Él espera y esperará de ellos. Además les habla un poco
Realmente en todo este pacto sólo hay una condición con la cual hay que cumplir: Obedecer a Dios. Así
que, desde aquí y por el resto del Antiguo Testamento, vemos claramente que la salvación bajo este pacto
es por obras (fe más obras, porque hay que obedecer a Dios para participar en el pacto y no violarlo).
Dios también les habla de las consecuencias de su obediencia. La nación de Israel será única entre todas
233
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
las demás naciones porque será cabeza de ellas (sobre todos los pueblos dice el pasaje).
Específicamente, Dios les promete un reino físico, político y geográfico que serviría como intermediario
entre las demás naciones y Dios (o sea, será un reino de sacerdotes). Es por esto que Pedro, escribiendo a
judíos, dice que vosotros (los judíos) forman un real sacerdocio y que son una nación santa.
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que
anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable. [1Ped 2.9]
Esto no se trata de la Iglesia. Uno podría decir que la Iglesia es una nación espiritual y que en cierto
sentido somos sacerdotes porque intercedemos por la gente que no tiene a Cristo (llevándoles el
mensaje del evangelio y llevándolos a ellos a la presencia de Dios en Cristo). Pero, todo esto sería una
aplicación espiritual y personal del pasaje. Israel es la nación física que Dios apartó de todas las demás.
La nación de sacerdotes es la nación de Israel, no la Iglesia (a pesar de lo que dice la Iglesia en Roma).
Los israelitas aceptan los términos del acuerdo preliminar diciendo que harán todo lo que Dios ha dicho.
Entonces vino Moisés, y llamó a los ancianos del pueblo, y expuso en presencia de ellos todas estas palabras
que Jehová le había mandado. Y todo el pueblo respondió a una, y dijeron: Todo lo que Jehová ha dicho,
haremos. Y Moisés refirió a Jehová las palabras del pueblo. [Exod 19.7-8]
Después de esto, entonces, Dios les explica los detalles de la ley que Él espera que ellos guarden (en los
siguientes cuatro capítulos). Observe en este pasaje arriba lo que le importa a Dios más que nada en este
pacto: Las palabras. No es simplemente un mensaje general que Dios quiere comunicar a Israel. Les
entrega Sus meras palabras a ellos a través de Moisés. Luego escribe estas palabras para que no haya duda
Estas palabras habló Jehová a toda vuestra congregación en el monte, de en medio del fuego, de la nube y de
la oscuridad, a gran voz; y no añadió más. Y las escribió en dos tablas de piedra, las cuales me dio a mí. [Deut
5.22]
No se deje engañar, entonces, por las nuevas versiones de la Biblia que contienen la Palabra de
Dios (un mensaje general). Consiga la Biblia Reina-Valera que consta de las palabras de Dios y usted
podrá estar seguro que tiene todo lo que Dios quiere que tenga. Los judíos, entonces, habiendo oído las
palabras de Dios, dicen que lo harán todo. Pero, lastimosamente, ya sabemos que no es cierto. Ellos
violarían el pacto muy pronto (Deut 5.27-27; 31.16-30; pero, más sobre esto luego).
En Éxodo 20-23 vemos los detalles de la ley que Dios entrega a Israel a través de Moisés. Primero les da
un resumen de todo en los diez mandamientos (Exod 20). Luego les entrega todos los detalles de la ley
(Exod 21-23).
En Éxodo 19 Israel se comprometió con el trato general que Dios les ofreció. Ahora, en Éxodo 24, ya que
han recibido la ley (los diez mandamientos y todos los detalles en los siguientes capítulos), tienen que
confirmar su compromiso.
Y Moisés vino y contó al pueblo todas las palabras de Jehová, y todas las leyes; y todo el pueblo respondió a
una voz, y dijo: Haremos todas las palabras que Jehová ha dicho. [Exod 24.3]
234
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Otra vez vemos que Dios siempre trata con Su pueblo a base de Sus palabraslas que Él entrega a un
hombre quien luego las escribe. (Es igual para nosotros hoy en día; 2Tim 3.15-17.) Israel, entonces, se
El pacto de Moisés comienza en estos capítulos del Libro de Éxodo y continúa hasta la crucifixión de
Cristo Jesús (con ciertas consecuencias todavía activas hoy día, hasta la segunda venida de Cristo).
Entonces, la gran mayoría de la Biblia (casi tres cuartas de ella) se trata de este pacto.
Como acabamos de ver, Éxodo 20 destaca lo que Dios espera, a grandes rasgos, de Israel. Son los diez
mandamientos y forman lo que se podría llamar un resumen de los detalles de la ley que siguen en los
capítulos del 21 al 23 de Éxodo. Los detalles de la ley en estos cuatro capítulos se pueden agrupar en tres
categorías, aunque hay cierto traslapo de unas leyes en más de una categoría. Primero, hay leyes morales
que gobiernan la vida personal de los israelitas. Estas leyes muestran la justicia de Dios y por lo tanto Sus
expectativas para con Su pueblo. Son leyes que tienen que ver con el carácter y la conducta de los
israelitas delante de Dios y también el uno con el otro. En segundo lugar, hay leyes civiles que gobiernan
la vida social de Israel (por ejemplo, las leyes sobre ventas de propiedades). Además, la tercera categoría
consta de leyes ceremoniales que gobiernan la vida religiosa de Israel. Estas leyes establecen el
sacerdocio de Aarón y todo el sistema de sacrificios y ritos de la nación de Israel. El Libro de Levítico
Dios cambia un poco este conjunto de leyes (las de Éxodo 21-23) en el Libro de Números porque anticipa
Deuteronomio (el nombre quiere decir la segunda ley) es una repetición de toda la ley, con unos
cambios también para la vida doméstica en la tierra prometida. La ley se le entgrega a oficialmente otra
vez a la segunda generación de Israelitas después del éxodoes la generación que entrará para tomar
Entonces, además de los diez mandamientos, hay más de 600 otras leyes (edictos, mandamientos,
órdenes, etc.) en la ley que Dios entregó a Israel a través de Moisés. Son más de 600 leyes que vienen de
los diez mandamientos (600 leyes que son los diez mandamientos en detalle). Así que, podemos ver
otra vez con claridad que este pacto es condicional porque depende de la obediencia de los judíos a la ley
Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los
Por la palabra si en Éxodo 19.5, es obvio que desde el principio el pacto de Moisés viene con
condiciones. Hay dos capítulos en la Biblia que tratan totalmente de los detalles de las condiciones del
pacto de Moisés, y también de las consecuencias por haber llenado o no dichas condiciones. Son Levítico
26 y Deuteronomio 28. Dios le da a Israel ciertas promesas (les promete consecuencias) por su obediencia
(Lev 26.1-13; Deut 28.1-14) y otras por su desobediencia (Lev 26.14-46; Deut 28.15-68). Josué reconoció
que Dios fue fiel en cumplir con Sus promesas acerca de la bendición por obediencia y estaba seguro que
haría lo mismo con Sus promesas acerca de la maldición y el castigo por la desobediencia.
Y he aquí que yo estoy para entrar hoy por el camino de toda la tierra; reconoced, pues, con todo vuestro
corazón y con toda vuestra alma, que no ha faltado una palabra de todas las buenas palabras que Jehová
vuestro Dios había dicho de vosotros; todas os han acontecido, no ha faltado ninguna de ellas. Pero así como
ha venido sobre vosotros toda palabra buena que Jehová vuestro Dios os había dicho, también traerá Jehová
235
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
sobre vosotros toda palabra mala, hasta destruiros de sobre la buena tierra que Jehová vuestro Dios os ha
dado, si traspasareis el pacto de Jehová vuestro Dios que él os ha mandado, yendo y honrando a dioses
ajenos, e inclinándoos a ellos. Entonces la ira de Jehová se encenderá contra vosotros, y pereceréis
Los dos capítulos de Levítico 26 y Deuteronomio 28, entonces, son esenciales para entender la historia de
Israel desde el comienzo del pacto de Moisés y también para saber cuando es que este pacto termina.
Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los
pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las
Bajo el pacto de Moisés, Dios les promete a Israel que ella sería la cabeza de las demás naciones en el
plan de Dios. Es una promesa condicional porque depende de la obediencia de los judíos a la ley. Siempre
ha sido el deseo de Dios bendecir a Israel. Pero, puesto que Él es un Dios justo, jamás puede recompensar
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal,
Toda la bendición que Dios les prometió a los judíos bajo el pacto de Moisés, depende de su obediencia a
Acontecerá que si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, para guardar y poner por obra todos sus
mandamientos que yo te prescribo hoy, también Jehová tu Dios te exaltará sobre todas las naciones de la
tierra. Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, si oyeres la voz de Jehová tu Dios. Bendito
serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo. Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de
tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas. 5Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar.
6Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir. [Deut 28.1-4; ver también Lev 26.3-13]
Una vez más podemos ver la importancia de las palabras individuales que Dios entregó a Israel. La
promesa de bendición bajo el pacto de Moisés depende de la obediencia de los judíos a las palabras de
Dios (no sólo al mensaje general como dice muchos hoy en día).
Guardaréis, pues, las palabras de este pacto, y las pondréis por obra, para que prosperéis en todo lo que
Pero si no me oyereis, ni hiciereis todos estos mis mandamientos, y si desdeñareis mis decretos, y vuestra
alma menospreciare mis estatutos, no ejecutando todos mis mandamientos, e invalidando mi pacto. [Lev
26.14-15]
Dios también les promete a los israelitas cierto castigo si invalidan Su pacto desobedeciendo a los
mandamientos que Dios les entregó. Es importante notar aquí (y el pasaje entero es demasiado extenso
para citarlo todo, pero lo puede leer en su propia Biblia: Lev 26.14-46 y Deut 28.15-68) que a pesar de
que con la desobediencia Israel invalida (viola) el pacto, las promesas de castigo divino siguen vigentes
(activas) debido a la rebelión de la nación. Entonces, hasta que se cumplan las promesas de castigo, el
pacto está vigente (por lo menos esta parte del pacto que tiene que ver con las consecuencias que están
vigentes).
Algunas de estas promesas de castigo ya se han realizado en los castigos que Dios mandó sobre la nación
de Israel por su apostasía e idolatría. Sin embargo, todavía hay mucho que está por venir, especialmente
236
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
en la Tribulación (la septuagésima semana de Daniel; Dan 9.24-27). De todos modos, todo el castigo que
le viene a Israel es para que al final de todo Dios pueda hacerles bien restaurándolos y bendiciéndoles.
Que te sustentó con maná en el desierto, comida que tus padres no habían conocido, afligiéndote y
Este bien, por supuesto, no tiene que ver con el pacto de Moisés (porque Israel violó este pacto y lo
invalidó con su desobediencia). El bien que Dios hará a Israel tiene que ver con las promesas
incondicionales que Él dio en el pacto de Abraham. El castigo prometido bajo el pacto de Moisés servirá
para cumplir con las promesas del pacto de Abraham porque servirá para restaurar a Israel en
Esta restauración a través de la aflicción se ven en el Libro de Oseas, en el cuadro de la mujer adúltera. La
mujer infiel es un cuadro de Israel, la esposa de Jehová, que adulteró en apostasía e idolatría.
Por tanto, he aquí yo rodearé de espinos su camino, y la cercaré con seto, y no hallará sus caminos. Seguirá a
sus amantes, y no los alcanzará; los buscará, y no los hallará. Entonces dirá: Iré y me volveré a mi primer
Dios le rodeará a Israel de espinos en la Tribulación y este castigo servirá para volverla a su Marido en
arrepentimiento. Por esto (por todo el castigo y la restauración al final), vemos un buen cuadro de Israel
Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos. [Mal 3.6]
Ellos son quemados bajo el castigo de Dios a través de los siglos (y aun a veces son quemados
literalmente como en el Holocausto de Hitler en Alemania durante la Segunda Guerra Mundial), pero no
son consumidos. Israel nunca ha dejado de existir y nunca dejará de existir a pesar del fuego del castigo
divino. A pesar de toda su desobediencia y todos sus pecados, Israel será plenamente restaurada un día.
Digo, pues: ¿Han tropezado los de Israel para que cayesen? En ninguna manera; pero por su transgresión vino
la salvación a los gentiles, para provocarles a celos. Y si su transgresión es la riqueza del mundo, y su
defección la riqueza de los gentiles, ¿cuánto más su plena restauración? [Rom 11.11-12]
Las condiciones de su restauración son arrepentimiento y conversión (Deut 30.1-10; 2Cron 6.36-39).
convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su
Estas condiciones aun se aplican a los judíos hoy en día (Hech 3.19-21), pero todavía no lo han hecho.
Entonces todavía les espera el duro castigo de la Tribulación. Pero, ahí en su aflicción, ellos reconocerán
Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y
mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien
Dios es claro en cuanto a lo que quiere de Israel bajo el pacto de Moisés con respecto a la tierra
prometida, la tierra de Canaán. Quiere que los judíos entren allá y lo destruyan todo sin procurar la paz
237
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Guarda lo que yo te mando hoy; he aquí que yo echo de delante de tu presencia al amorreo, al cananeo, al
heteo, al ferezeo, al heveo y al jebuseo. Guárdate de hacer alianza con los moradores de la tierra donde has de
entrar, para que no sean tropezadero en medio de ti. Derribaréis sus altares, y quebraréis sus estatuas, y
Dios sacó a Su nación de Egipto y la sacó para mandarla a la guerra con los habitantes de la tierra
prometida.
Y luego que Faraón dejó ir al pueblo, Dios no los llevó por el camino de la tierra de los filisteos, que estaba
cerca; porque dijo Dios: Para que no se arrepienta el pueblo cuando vea la guerra, y se vuelva a Egipto. [Exod
13.17]
Los israelitas son, primero que nada, soldados que Dios ha mandando a la tierra de Canaán para sacar a
todos los moradores de ahí (o matarlos si ellos no quieren salir). En su tarea de echar fuera a los
moradores de Canaán (la tierra que se llama Palestina y el medio-oriente hoy día), son los mejores
Es por esto que cuando Dios sacó a Israel de Egipto, la sacó por sus ejércitos (Exod 6.26). Ellos
salieron para empeñar una campaña militar (una guerra) contra todos los moradores de la tierra
prometida.
Así que, podemos ver que las cruzadas (campañas militares para liberar la tierra prometida de la
ocupación de los paganos) forman parte del Antiguo Testamento porque tiene que ver con guerras físicas
para echar fuera a unos enemigos físicos de una tierra física que Dios prometió a Israel. Las cruzadas
no tienen nada que ver con la Iglesia porque nuestros enemigos son espirituales, igual que nuestra guerra
y nuestras armas en dicha guerra (Ef 6.12; 2Cor 10.3-4). Si hubiera alguna base bíblica para que la Iglesia
se metiera en una guerra física con los moradores de la tierra prometida (el medio-oriente), sería Génesis
12.1-3 y el pacto de Abraham. El propósito de una cruzada así, entonces, sería el de echar fuera a los
enemigos de Israel y darles a los judíos la tierra que Dios les prometió. La tierra de Palestina no
Al fin y al cabo, los moradores de la tierra prometida de Canaán serán echados físicamente porque Cristo
lo hará en Su segunda venida. E Israel habitará allí tranquilamente. Así prometió Dios bajo el pacto
incondicional de Abraham. Sin embargo, bajo el pacto de Moisés, la posesión de la tierra prometida es
condicional.
Guardad, pues, todos los mandamientos que yo os prescribo hoy, para que seáis fortalecidos, y entréis y
poseáis la tierra a la cual pasáis para tomarla; y para que os sean prolongados los días sobre la tierra, de la
cual juró Jehová a vuestros padres, que había de darla a ellos y a su descendencia, tierra que fluye leche y
La ocupación de la tierra prometido por los judíos depende de su obediencia a todos los mandamientos de
la ley. Ellos tomarán la tierra sólo si guardan los mandamientos. Además, prolongarán sus días en la tierra
si siguen en su obediencia (ver también: Deut 30.11-20). Con esta promesa viene otra que tiene que ver
con su desobediencia. Si no guardan todos los mandamientos de Dios, serán arrancados de sobre la tierra
prometida.
Así como Jehová se gozaba en haceros bien y en multiplicaros, así se gozará Jehová en arruinaros y en
destruiros; y seréis arrancados de sobre la tierra a la cual entráis para tomar posesión de ella. [Deut 28.63]
Entienda, sin embargo, que esto no quiere decir que la tierra ya no pertenezca a los judíos simplemente
porque ellos desobedecieron a Dios y Él los echó de ahí. Dios les dio la tierra prometida bajo el pacto de
Abraham, entonces es la suya para siempre. Sólo es que bajo el pacto de Moisés, la posesión (la
238
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
desobediencia de Israel, esparció a los judíos entre todas las naciones y dejó entrar a los musulmanes (los
enemigos de Levítico 26.32) en la tierra prometida, Él siempre cumplirá con las promesas que hizo con
Pero si no me oyereis, ni hiciereis todos estos mis mandamientos, y si desdeñareis mis decretos, y vuestra
alma menospreciare mis estatutos, no ejecutando todos mis mandamientos, e invalidando mi pacto... Asolaré
también la tierra, y se pasmarán por ello vuestros enemigos que en ella moren; y a vosotros os esparciré entre
las naciones, y desenvainaré espada en pos de vosotros; y vuestra tierra estará asolada, y desiertas vuestras
Esta es la condición (promesa) del pacto de Moisés que se realizará de último y por esto traslapa un poco
con el pacto de Abraham. O sea, bajo el pacto de Moisés, Dios le prometió a Israel castigo por su
desobediencia y hasta que se cumpla esta condición, el pacto está todavía vigente (todavía Israel llevará
palo, especialmente durante la Tribulación). Esta promesa (condición) traslapa con el pacto de Abraham
convierten de sus pecados, el pacto de Moisés ya se cumple e Israel entra en la bendición bajo el pacto de
Abraham (Gen 12.1-3). Israel no puede evitar el castigo, porque se rebelaron. Sin embargo, a la postre
Tú, pues, siervo mío Jacob, no temas, dice Jehová, ni te atemorices, Israel; porque he aquí que yo soy el que
tranquilo, y no habrá quien le espante. Porque yo estoy contigo para salvarte, dice Jehová, y destruiré a todas
las naciones entre las cuales te esparcí; pero a ti no te destruiré, sino que te castigaré con justicia; de ninguna
Es importante (e interesante) observar aquí que en la Biblia hay dos cautividades de Israel. Se menciona
dos veces que Israel fue arrancada de la tierra prometida (Deut 28.63), y por esto hay dos regresos a la
tierra prometida también. La primera cautividad tomó lugar al final del tiempo de los reyes de Israel
cuando Senaquerib rey de Asiria llevó a las diez tribus del norte (Israel) en cautividad (alrededor del año
721 a.C.; 2Rey 17) y Nabucodonosor rey de Babilonia llevó a las dos tribus del sur (Judá) en cautividad
(alrededor de 606 a.C.; 2Rey 24-25). El regreso de esta primera cautividad tomó lugar en dos etapas
también, primero bajo Esdras y luego bajo Nehemías. En el Libro de Esdras vemos que con la
construcción del templo, se prepara la tierra para el regreso de los judíos. Luego, Israel llega a ser una
nación otra vez cuando se separa de las otras naciones levantando el muro de Jerusalén y
reconstruyendo la ciudad.
La segunda vez que Israel fue arrancada de la tierra prometida tomó lugar al final de la primera venida de
Cristo Jesús en 70 d.C. cuando Roma esparció a los judíos por todo el mundo. Los romanos destruyeron
Jerusalén, mataron a más de un millón de judíos y llevaron en cautividad a otros 97.000 más. Luego, en
135 d.C., los judíos se rebelaron contra Roma y se estalló una guerra que duró unos tres años y medio.
Más de medio millón de judíos perdieron sus vidas y los demás israelitas fueron echados de la tierra
prometida y se les prohibió volver bajo pena de muerte. El emperador Romano de aquel entonces
(Hadrian / Adriano) trató de raer toda memoria aun del nombre de Jerusalén construyendo una nueva
ciudad ahí y poniéndole otro nombre. En aquel entonces, muchos judíos fueron vendidos como esclavos y
la tierra que habitaban fue completamente desocupada. Por esto, gentes de varios otros países se mudaron
ahí para vivir. Pero, los judíos no atrevían a volver a su tierra prometida por siglos. Hay un registro (algún
escrito de esta historia) de un judío de España que volvió a la tierra de Canaán (Palestina) en el siglo 12, y
dice él que sólo encontró alrededor de 200 judíos (y esto fue después de más de mil años desde la guerra
contra Roma). Cuando Dios les dijo a los israelitas que los arrancaría de la tierra si desobedecieran, Él no
estaba bromeando.
No obstante, igual que con la primera vez que fueron arrancados de la tierra prometida, Israel volvió la
segunda vez también (aun todavía está regresando). Este regreso, como el primero, tomó lugar en dos
239
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
etapas. Primero, después de la Primera Guerra Mundial, en 1917-18 d.C., se preparó la tierra para los
judíos con la Declaración de Balfour (fue una carta escrita de parte de Inglaterra que marcó las fronteras
de un pedazo del medio-oriente que sería para los judíos). La segunda etapa tomó lugar después de la
Segunda Guerra Mundial, en 1948 d.C., cuando los judíos volvieron a habitar la tierra y así Israel llegó a
ser una nación ya separada de las demás. Este regreso (que todavía está tomando lugar) es el comienzo
del cumplimiento de la profecía del valle de los huesos secos en Ezequiel 37.1-14. Terminará en la
segunda venida de Cristo. Este segundo regreso a la tierra prometida es la que se menciona en el capítulo
Asimismo acontecerá en aquel tiempo, que Jehová alzará otra vez su mano para recobrar el remanente de
su pueblo que aún quede en Asiria, Egipto, Patros, Etiopía, Elam, Sinar y Hamat, y en las costas del mar. Y
levantará pendón a las naciones, y juntará los desterrados de Israel, y reunirá los esparcidos de Judá de los
Los países que Dios menciona en este pasaje no tuvieron nada que ver con la primera cautividad (en
Asiria y Babilonia). También, la última frase dice que el regreso es de una cautividad mundial (de los
cuatro confines de la tierra; o sea, de todo lugar en el mundo). Este es el regreso que empezó en 1948 y
terminará en la segunda venida del Mesías que señala el comienzo del Milenio (Isa 11.6-10).
Otras referencias a este segundo regreso de una dispersión mundial son Isaías 6.9-13; 14.1-2; Jeremías
3.11-17; 12.14-17; 14.20-21 (note que este regreso está conectado con el glorioso trono, que es el trono
del Mesías en Jerusalén que Él toma por fuerza en la segunda venida; Mat 19.27-28; 25.31); Jeremías
16.14-15; 32.37-41 (señala el comienzo del Nuevo Pacto; ver los detalles de este último pacto más abajo);
Después de todo, el regreso de Israel a la tierra prometida y su posesión completa de ella señala el fin de
las obligaciones de Dios bajo el pacto de Moisés. Así que, el pacto termina en la segunda venida de
Cristo. Y con el fin del pacto de Moisés, vemos también la realización (el cumplimiento) de una parte del
pacto de Abraham. Israel poseerá la tierra porque Dios se lo prometió sin condiciones a Abraham, a Isaac
y luego a Jacob. No la van a poseer porque cumplieron con la ley de Moisés. Más bien, fueron echados de
la tierra porque no cumplieron con la ley de Moisés. Sin embargo, bajo este mismo pacto Dios promete su
Otras referencias al castigo de Israel (en el contexto de la tierra prometida) bajo el pacto de Moisés son
las siguientes. En Levítico 18.22-30 vemos que Dios echó a los israelitas de la tierra porque practiaron las
abominaciones de los moradores de la tierra de Canaán. Contaminaron la tierra con sus perversiones y por
esto la tierra los vomitó. En Deuteronomio 11.18-28 vemos que su posesión de la tierra (o su pérdida la
posesión de ella) siempre era un asunto de guardar las palabras de Jehová, no el mensaje general. O sea,
otra vez vemos la suma importancia de las palabras individuales de la Escritura en el trato de Dios con los
hombres.
El pacto de Moisés es condicional. No se cumplirá hasta que se llenen todas las condiciones, hasta que
Dios haya hecho todo lo que les prometió a Israel que haría debido a su obediencia o a su desobediencia.
En primer lugar, hay que entender que Israel invalidó este pacto quebrantando los diez mandamientos.
No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto;
porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová. [Jer 31.32]
Quebraron los primeros dos mandamientos cuando hicieron el becerro de oro y lo adoraban (Exod 32.1).
Al quebrar las dos tablas que tenían los diez mandamientos, Moisés estaba mostrándoles a los judíos lo
240
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
que acabaron de hacer (Exod 32.19): Quebraron la ley y por lo tanto quebraron el pacto. Desde este punto
en adelante, Dios no estaba obligado a cumplir con ninguna de Sus promesas que hizo con Israel bajo este
pacto.
Sin embargo, como ya hemos visto, en este pacto Dios estableció dos tipos de condiciones. Hay
condiciones que tienen que ver con bendición y otras que tiene que ver con castigo (Lev 26 y Deut 28).
Hasta que todas estas condiciones (promesas) se realicen, el pacto está todavía vigente (Dios está todavía
llevando a cabo lo que dijo que haría). Puesto que los judíos no obedecieron a la ley, ya perdieron la
oportunidad de experimentar las bendiciones que Dios les prometió en el pacto si le habrían obedecido. O
sea, puesto que Israel violó el pacto por su desobediencia, Dios no tiene que cumplir con Sus promesas de
bendición.
Pero, dentro de este mismo pacto Dios también prometió a Israel ciertos castigos por su desobediencia. Ya
que ellos llenaron la condición (desobedecieron a la ley), Dios cumplirá con esta parte del pacto, Sus
promesas de castigo. Por esto, el pacto de Moisés estará vigente hasta que Dios cumpla con todo lo que le
prometió a Israel en la ley acerca del castigo por la desobediencia. Esto quiere decir que el pacto de
Moisés estará vigente hasta el final de la Tribulación, hasta la segunda venida de Cristo cuando el Nuevo
Pacto (ver los detalles abajo) entre en vigencia para con los judíos que estarán vivos en aquel tiempo.
Porque, una vez que el Nuevo Pacto esté vigente, el de Moisés ya es viejo y estará por desaparecer.
Porque reprendiéndolos dice: He aquí vienen días, dice el Señor, En que estableceré con la casa de Israel y la
casa de Judá un nuevo pacto; No como el pacto que hice con sus padres El día que los tomé de la mano para
sacarlos de la tierra de Egipto; Porque ellos no permanecieron en mi pacto, Y yo me desentendí de ellos, dice
el Señor. Por lo cual, este es el pacto que haré con la casa de Israel Después de aquellos días, dice el Señor:
Pondré mis leyes en la mente de ellos, Y sobre su corazón las escribiré; Y seré a ellos por Dios, Y ellos me
serán a mí por pueblo; Y ninguno enseñará a su prójimo, Ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce al
Señor; Porque todos me conocerán, Desde el menor hasta el mayor de ellos. Porque seré propicio a sus
injusticias, Y nunca más me acordaré de sus pecados y de sus iniquidades. Al decir: Nuevo pacto, ha dado por
viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer. [Heb 8.8-13]
La Tribulación (la septuagésima semana de Daniel y aquellos días), entonces, es la culminación de todo
Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para terminar la prevaricación, y
poner fin al pecado, y expiar la iniquidad, para traer la justicia perdurable, y sellar la visión y la profecía, y
Con la Tribulación (la última semana de esta profecía, los últimos siete años), terminará la prevaricación
Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia
del Señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; a quien de cierto es
necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por
boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo. [Hech 3.19-21]
La segunda venida de Cristo Jesús, entonces, es la consumación de todo (Dan 9.27). Pone fin al castigo
que Dios prometió a Israel bajo el pacto de Moisés y también señala el comienzo del Nuevo Pacto
establecido con la misma nación (Israel) por la sangre de Cristo. Es en este entonces también que vemos
la plena manifestación (la consumación) del pacto que Dios hizo con Abraham.
Hay que entender aquí que, a pesar de que el pacto de Moisés termina en la segunda venida, los judíos
guardarán una parte de la ley de Moisés durante el Milenio como un recordatorio (como una ley
ceremonial). Un nuevo templo se construirá (Ezeq 40-42) y la gloria de Jehová, el Mesías, lo llenará
(Ezeq 43). Los judíos observarán la ley ceremonial, siguiendo el mismo sistema de ofrendas y sacrificios
que Dios estableció bajo el pacto de Moisés (Ezeq 44). Los levitas servirán en la ofrendas como bajo la
ley (Ezeq 44.10-11) y los sacerdotes que obedecían, se acercarán a Jehová para ofrecerle la sangre de
241
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
animales otra vez (Ezeq 44.15-16). Es obvio que estos sacrificios no son como los que ofrecían bajo la ley
de Moisés porque Hebreos 10 dice varias veces que Cristo fue sacrificado una vez para siempre y ya no
hay más ofrenda por el pecado (Heb 10.11-14, 18). O sea, los sacrificios en el Milenio no serán para
Además de guardar las leyes ceremoniales, los judíos en el Milenio guardarán, en cierto sentido, las
leyes morales y las civiles también. Esto es lo que vemos en el Sermón del Monte (Mat 5-7), que es
realmente la constitución del reino mesiánico (el Milenio). Un juego de frases que Cristo usa en este
discurso nos muestra el uso de la ley de Moisés durante este tiempo: Oísteis que fue dicho... pero yo os
digo... (por ejemplo: Mat 5.27-30). Cristo cita la ley de Moisés (oísteis que fue dicho) y luego aumenta
la responsabilidad de uno bajo dicha ley (pero yo os digo). Así será en el Milenio. La ley de Moisés
servirá como la base de las leyes que gobiernan la vida durante el Milenio, pero la responsabilidad de uno
Pablo se refirió a esto cuando dijo que lo de la ley (comida, bebida, días de fiesta, luna nueva y días de
Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,
todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo. [Col 2.16-17]
Note que con esta frase lo que ha de venir, podemos entender que cuando Pablo escribió tales palabras,
todo aquello era todavía para el futuro. O sea, es para el Milenio, no para la época de la Iglesia. La ley de
Moisés es la sombra de la ley que habrá en el Milenio. El Sermón del Monte en Mateo 5-7 es un vistazo
al cuerpo que hace la sombra (es la constitución del reino sobre la cual todas las demás leyes se
basarán).
El día de reposo (el rito de guardar santificado el sábado, el séptimo día de la semana) es una señal entre
Dios y los hijos de Israel. El siguiente pasaje es un poco extenso, pero vale la pena meterlo todo aquí y
hacer unos comentarios sobre lo que dice porque hay algunos en el cristianismo (como los adventistas
del séptimo día) que insisten en que el día de reposo es para nosotros hoy en la Iglesia. Al fijarnos en lo
que dice el pasaje de plena mención del día de reposo, es obvio que no es así.
13 Tú hablarás a los hijos de Israel, diciendo: En verdad vosotros [¡los hijos de Israel!] guardaréis mis días
de reposo; porque es señal entre mí y vosotros [¡los hijos de Israel!] por vuestras generaciones, para que
14 Así que guardaréis el día de reposo, porque santo es a vosotros [¡los hijos de Israel!]; el que lo profanare,
de cierto morirá; porque cualquiera que hiciere obra alguna en él, aquella persona será cortada de en medio de
su pueblo.
15 Seis días se trabajará, mas el día séptimo es día de reposo consagrado a Jehová; cualquiera [¡de los hijos
16 Guardarán, pues, el día de reposo los hijos de Israel [¡los hijos de Israel!], celebrándolo por sus
generaciones por pacto perpetuo [¡es un pacto con los hijos de Israel!].
17 Señal es para siempre entre mí y los hijos de Israel [¡los hijos de Israel!]; porque en seis días hizo Jehová
242
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Dios no puede ser más claro en que el día de reposoel guardar santificado el séptimo día de la semana
es para Israel, no para la Iglesia, ni para los gentiles. Desde este pasaje en adelante, entonces, el día de
reposo es únicamente para los hijos de Israel (para los judíos, para los descendientes físicos de Jacob). Y
aunque el pacto de Moisés no es perpetuo, la señal del día de reposo, sí, es para siempre (Exod 31.16-17).
Entonces, aunque Israel violó el pacto de Moisés, la señal del día de reposo todavía les pertenece a ellos.
Dios le dio a Israel esta señal del día de reposo como un recordatorio de Su gran obra de sacarlos de la
tierra de Egipto (y los sacó para entrar en pacto con ellos: Exod 19.4-6).
Acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, y que Jehová tu Dios te sacó de allá con mano fuerte y brazo
extendido; por lo cual Jehová tu Dios te ha mandado que guardes el día de reposo. [Deut 5.15]
Así que, el día de reposo es para el judío. Es una señal del pacto que Dios estableció con ellos a través de
Moisés.
Acuérdate del día de reposo para santificarlo. Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es
reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu
Puesto que el día de reposo forma parte de los diez mandamientos, a veces causa cierta confusión entre
los cristianos. Sabemos que los diez mandamientos forman una ley moral, una ley que también está
escrita en el corazón de cada ser humano y por lo tanto debemos usarla para evangelizar.
Pero sabemos que la ley es buena, si uno la usa legítimamente; conociendo esto, que la ley no fue dada para
el justo, sino para los transgresores y desobedientes, para los impíos y pecadores, para los irreverentes y
profanos, para los parricidas y matricidas, para los homicidas, para los fornicarios, para los sodomitas, para
los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina, según el
glorioso evangelio del Dios bendito, que a mí me ha sido encomendado. [1Tim 1.8-11]
De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe.
[Gal 3.24]
Además, como dijo Martín Lutero, la ley moral de Dios en los diez mandamientos sirve como un freno y
una guía para nosotros. Nos frena al viejo hombre con sus deseos pecaminosos y nos guía en el camino
Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. [1Ped 1.16]
Lo que tenemos que entender con el cuarto mandamiento (el del día de reposo) es que nosotros no
guardamos ese mandamiento como si fuera una ley ceremonial. La ley ceremonial (guardar el díael
El cuarto mandamiento (el de guardar el día de reposo) es el único de los diez que no se repite en los
mandamiento es la de guardar un día en siete para alabar a Dios y mostrarle su agradecimiento por todo lo
que le dio durante la semana. Según el patrón de las iglesias después de la resurrección de Cristo, los
Puesto que este asunto siempre causa confusión debido a la enseñanza de varias sectas falsas, vale la pena
243
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
El Apóstol Pablo es muy claro en que el día de reposo (guardar el séptimo día de la semana) no es para la
Iglesia.
Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo.
[Col 2.16]
Mas ahora, conociendo a Dios, o más bien, siendo conocidos por Dios, ¿cómo es que os volvéis de nuevo a
los débiles y pobres rudimentos, a los cuales os queréis volver a esclavizar? Guardáis los días, los meses, los
Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso
para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga. [Mat 11.29-30]
Así que, nuestro reposo es espiritual, porque nuestro reino es espiritual. No es un reposo físico como el de
los judíos quienes participaban en un reino físico y no espiritual. El día que un cristiano debería apartar
para el Señor, para congregarse, adorar al Señor y escuchar la predicación y la enseñanza de la Biblia es el
primer día de la semana, el día después del día de reposo. O sea, nuestro día es el domingo.
Pasado el día de reposo, al amanecer del primer día de la semana, vinieron María Magdalena y la otra María,
a ver el sepulcro. [Mat 28.1; al reunirnos el primer día de la semana, los que tenemos vida nueva celebramos
El primer día de la semana, reunidos los discípulos para partir el pan, Pablo les enseñaba, habiendo de salir al
Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo,
Decir que el día de reposo es para el cristiano es robarle al judío lo que Dios le dio únicamente a él (Exod
31.12-17). Una iglesia que guarda el día de reposo es una secta falsaes lo que la Biblia llama una
sinagoga de Satanás.
Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los que se dicen ser
Para terminar este asunto del séptimo día, hemos de entender que el día de reposo (el sábado) tampoco es
para el gentil (el que no es judío, ni cristiano). Los gentiles no recibieron la ley como los judíos. Así que,
puesto que el día de reposo forma parte de la ley (el pacto de Moisés), no es para los gentiles.
Porque todos los que sin ley [gentiles] han pecado, sin ley también perecerán; y todos los que bajo la ley
[judíos] han pecado, por la ley serán juzgados; porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino
los hacedores de la ley serán justificados. Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza
lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos. mostrando la obra de la ley escrita en
sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos. [Rom
2.12-15]
La ley que está escrita en el corazón del gentil es la ley moral y no hay más moralidad en guardar un
día sobre otra. Lo que Dios quiere es un día en siete para mostrarle agradecimiento.
244
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
El día de reposo es únicamente para Israel, los judíos, los descendientes físicos de Abraham, Isaac y
Jacob. No para nadie más. Decir lo contrario es decir que Dios mintió (ver otra vez Éxodo 31.12-17 y los
comentarios arriba).
Dios estableció el pacto con David a través del profeta Natan casi 500 años después del comienzo del
pacto de Moisés. Este pacto es básicamente una promesa que Dios hizo con un hombre: David.
Ahora, pues, dirás así a mi siervo David: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás
de las ovejas, para que fueses príncipe sobre mi pueblo, sobre Israel. [2Sam 7.8]
Es una promesa que tiene que ver con la familia de David (sus descendientes físicos), el trono de David
(el trono de Israel en Jerusalén) y el reino de David. En otras palabras, es un pacto que tiene que ver con
un rey y su reino. Así que, este pacto traslapa el pacto de Moisés hasta Jeconías en Jeremías 22.24-30,
cuando él perdió el trono de David por su apostasía e idolatría. También traslapa el Nuevo Pacto en el
Milenio porque Cristo es el cumplimiento de las promesas y el pacto que Dios hace con David aquí en
2Samuel 7.8-19. Se puede ver este cumplimiento profetizado en las palabras del salmista en Salmo 2.
Se repite el pacto como un poco más detalles en el Salmo 89. Así que, durante este análisis del pacto de
El versículo de resumen del pacto de David es 2Samuel 7.16. El pacto tiene tres categorías generales en
las cuales caben todas las promesas del acuerdo que Dios estableció con David.
Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.
[2Sam 7.16]
Primero, hay promesas en este pacto que tienen que ver con la casa de David. En segundo lugar, Dios le
hace promesas acerca de su reino. Y por último, Dios habla del trono de David.
Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el
cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino. El edificará casa [el templo] a mi nombre, y yo afirmaré
para siempre el trono de su reino. Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le
castigaré con vara de hombres, y con azotes de hijos de hombres; pero mi misericordia no se apartará de él
Siempre habrá alguien del linaje de David para seguir en su lugar como rey de Israel, como el líder
político del pueblo de Dios. El Señor nunca dejará la casa de David sin alguien que pueda ser el rey de
Israel. La descendencia física de David que, según esta promesa en este pacto, reinaría sobre Israel, es
Cristo.
Pero siendo profeta, y sabiendo que con juramento Dios le había jurado que de su descendencia, en cuanto a
245
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Cristo es del linaje de David, según la carne (Rom 1.3). Es de su casa. Según Mateo 1.6 y 1.16 (en la
genealogía de José), Jesús es el hijo de David a través de Salomón, pero por matrimonio (o sea, por el
Libro de la genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham... Isaí engendró al rey David, y el rey
David engendró a Salomón de la que fue mujer de Urías... y Jacob engendró a José, marido de María, de la
Jesús no fue el hijo natural de José, porque nació de una virgen. Pero, por el matrimonio de José y María,
Jesús forma parte del linaje de David a través de Salomón (o sea, forma parte del linaje de David por José
de una manera legal). En Lucas 3.23 vemos el comienzo de otra genealogía de Jesús pero esta vez es la
de María.
Jesús mismo al comenzar su ministerio era como de treinta años, hijo, según se creía, de José, hijo de Elí.
[Luc 3.23]
Dice que era hijo de José según se creía, porque no era el hijo natural de José. Los judíos no registran
las genealogías de las mujeres, entonces este linaje de María es según se creía, de José. No es de José,
sino de María. Según Lucas 3.31-32, Cristo es el hijo de David a través Natán por nacimiento.
Hijo de Melea, hijo de Mainán, hijo de Matata, hijo de Natán, hijo de David, hijo de Isaí, hijo de Obed, hijo
Así que, Cristo es de la casa real de David tanto por matrimonio (por José, hijo de David a través de
Salomón) como por nacimiento (por María, hija de David a través de Natán).
Este hijo de David era también el Señor de David. Cristo les hace una pregunta a los fariseos (los grandes
eruditos de Sus días) acerca de este asunto y ninguno de ellos pudo contestarle.
Y estando juntos los fariseos, Jesús les preguntó, diciendo: ¿Qué pensáis del Cristo? ¿De quién es hijo? Le
dijeron: De David. El les dijo: ¿Pues cómo David en el Espíritu le llama Señor, diciendo: Dijo el Señor a mi
Señor: Siéntate a mi derecha, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies? Pues si David le llama
Señor, ¿cómo es su hijo? Y nadie le podía responder palabra; ni osó alguno desde aquel día preguntarle más.
[Mat 22.41-46]
Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria. [2Tim
3.16]
Cristo es hijo de David porque nació físicamente del linaje de David. Pero también es el Señor de David
porque es Dios Jehová en la carne. El Rey que toma el trono es el Hijo de David y también es Jehová es
Jesucristo, Jehová en la carne. Esto se ve en muchos pasajes del Antiguo Testamento. En Isaías el Rey de
Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero,
Zacarías dice que en aquel día de la segunda venida, Jehová será el Rey que tomará el trono de David
Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre. [Zac 14.9]
246
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Además, el mismo profeta dice que todas las personas en la tierra durante el Milenio llegarán Jerusalén
Y todos los que sobrevivieren de las naciones que vinieron contra Jerusalén, subirán de año en año para
adorar al Rey, a Jehová de los ejércitos, y a celebrar la fiesta de los tabernáculos. Y acontecerá que los de las
familias de la tierra que no subieren a Jerusalén para adorar al Rey, Jehová de los ejércitos, no vendrá sobre
Este rey es el ungido (en hebreo: mesías). David era el ungido históricamente. Por esto él forma un
cuadro doctrinal de otro Ungido que vendría para tomar su trono. Este Ungido, el Mesías, fue
desechado por Dios cuando llevó la ira divino sobre nuestros pecados en la cruz. Es Cristo Jesús, el Rey
Mas tú desechaste y menospreciaste a tu ungido, Y te has airado con él. [Sal 89.38]
Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el
cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino. El edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre
el trono de su reino. Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le castigaré con vara
Dios prometió a David que su hijo (un descendiente físico de él) recibiría el reino que Él le había dado a
su padre. O sea, el hijo de David recibiría el territorio físico y el estado que Dios le había dado al rey
David. Recuerde que durante el Antiguo Testamento, la historia se trata del reino físico, no el reino
espiritual como hoy en día durante la época de la Iglesia. Así que, el reino de David es un reino físico
Históricamente, este hijo fue Salomón porque él recibió el reino cuando David murió. Cuando David le
Llegaron los días en que David había de morir, y ordenó a Salomón su hijo, diciendo: Yo sigo el camino de
todos en la tierra; esfuérzate, y sé hombre. Guarda los preceptos de Jehová tu Dios... para que confirme
Jehová la palabra que me habló, diciendo: Si tus hijos guardaren mi camino, andando delante de mí con
verdad, de todo su corazón y de toda su alma, jamás, dice, faltará a ti varón en el trono de Israel. [1Rey 2.1-4]
Es aquí en este pasaje cuando Salomón, el hijo de David, recibe el estado del reino de Israel (el reino
físico). Él también recibe el territorio del reino de David (casi toda la tierra que Dios prometió a Abraham
Y Salomón señoreaba sobre todos los reinos desde el Eufrates hasta la tierra de los filisteos y el límite con
Egipto; y traían presentes, y sirvieron a Salomón todos los días que vivió. [1Rey 4.21]
Así que, vemos que el reino que Dios prometió a David y a sus descendientes tiene que ver con la tierra
de Canaán (Palestina), y no sólo con un estado de Israel (una nación política). Sin embargo, antes de ver
este asunto de la tierra prometida en más detalle, hemos de entender que Salomón no es el pleno
El Hijo que cumple completamente con las promesas del pacto de David en 2Samuel 7.14 es Cristo Jesús.
Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino. [Heb 1.8]
247
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Salomón fue el cumplimiento histórico y su reino tuvo fin. Pero Jesucristo, el Mesías, es el cumplimiento
pleno y doctrinal, y Su reino no tendrá fin. Como ya hemos visto en las genealogías, Cristo Jesús es el
Hijo de David que tiene derecho al reino de Israel (Mat 1.1). Él es el Rey de los judíos, el Rey de los
Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos,
diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y
Este es el mensaje que Cristo predicó a Israel. Les ofreció a los judíos el reino eterno de David, con Él
siendo el Rey.
Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha
Los judíos también sabían lo que estaba pasando durante la primera venida. Sabían que el Heredero del
¡Bendito el reino de nuestro padre David que viene! ¡Hosanna en las alturas! [Mar 11.10]
Podemos ver un cuadro de Él en Salomón cuando reinaba sobre casi toda la tierra prometida. En este
aspecto Salomón es un tipo y cuadro de Cristo reinando sobre el reino de David en el Milenio (el tiempo
del pleno cumplimiento de este pacto). El único problema con la llegada del reino que Cristo ofrecía a
Israel (y el cumplimiento del pacto de David), es que los mismos que gritaron ¡Hosanna! también
gritaron ¡Crucifícale! unos días después (Mar 15.13). Lo rechazaron al Rey y por lo tanto Dios aplazó
el Reino unos dos mil años, para después de la época de la Iglesia (Hech 28.28).
Hemos de entender que este reino que Dios prometió a David y a su casa tiene que ver con el territorio
físico que Él dio a Abraham y a sus descendientes físicas a través de Isaac y Jacob (quien se llamaba
también Israel).
Además, yo fijaré lugar a mi pueblo Israel y lo plantaré, para que habite en su lugar y nunca más sea
removido, ni los inicuos le aflijan más, como al principio, desde el día en que puse jueces sobre mi pueblo
Israel; y a ti te daré descanso de todos tus enemigos. Asimismo Jehová te hace saber que él te hará casa.
[2Sam 7.10-11]
Entonces, cuando el Hijo de David se sienta sobre el trono de David para tomar control del reino de
David (su territorio y su estado), la primera cosa que hace es echar a los moradores actuales de la tierra
prometida (los árabes y los musulmanes). De esta manera establece a las 12 tribus de la nación de Israel
allá, cada una según su herencia. Los detalles de la guerra por la ocupación del medio-oriente se hallan en
Ezequiel 38-39 y también en Zacarías 14.1-3 (es una batalla contra el ejército de las naciones unidas).
He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos. Porque yo reuniré a todas las
naciones para combatir contra Jerusalén; y la ciudad será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las
mujeres; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad.
Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla. [Zac 14.1-3]
El hijo de David recibirá el trono del reino de Israel para siempre. O sea, su trono será estable a través de
toda la eternidad.
248
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el
cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino. El edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre
Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.
[2Sam 7.16]
Históricamente, Salomón es el que recibió el trono eterno de David (1Rey 2.45). Pero es el Mesías que
reinará sobre este trono para siempre, así cumpliendo con las promesas que Dios hizo en este pacto con
En el Salmo 89, se menciona una descendencia de este Rey prometido, el Mesías Jesucristo. Dice que Su
Pondré su descendencia para siempre, Y su trono como los días de los cielos. [Sal 89.29]
Su descendencia será para siempre, Y su trono como el sol delante de mí. [Sal 89.36]
Esta descendencia de Cristo Jesús somos nosotros (ver también los versículos 3-4, 28-29 y 34-37 de
este mismo Salmo 89). Si somos fieles en nuestras responsabilidades ahora, en este mundo, Dios nos
Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente
con él, para que juntamente con él seamos glorificados. [Rom 8.17]
Si sufrimos [según Rom 8.17], también reinaremos con él; Si le negáremos [el sufrir con Él], él también nos
negará [el reinar]. Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo [no se puede
Ver también: Proverbios 16.12; 20.8 (Prov 20.8a se cumple en Apoc 20.4; Prov 20.8b se cumple en Apoc
La provisión para sacerdotes según el orden de Melquisedec. Hay también en este pacto una provisión
para el rey David como si fuera un hijo de Dios (hijo adoptado, no por un nuevo nacimiento; nadie nació
Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le castigaré con vara de hombres, y con
Hay otro rey que aparece en la Escritura que es parecido a David en este aspecto: Melquisedec.
Entonces Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, sacó pan y vino. [Gen 14.18]
Melquisedec era rey de Salem (que quiere decir rey de paz). Primero que nada, hay que entender que
quiere decir rey (melqui) de paz (sedec). Es por esto que Melquisedec es el rey de Salemes
Además, siendo rey de Salem, él era rey de Jerusalén. En Salmo 76.2 se refiere a la ciudad Jerusalén
con el nombre Salem. Melquisedec, entonces, era el rey de la ciudad que sería luego la capital de Israel,
249
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Melquisedec era también sacerdote del Dios Altísimo (Jehová), y esto nos da una pista de quien era.
Probablemente era el que recibió la bendición de Dios en Génesis 9: Sem. Según Hebreos 7.4-10, él era
un patriarca aun más grande que Abraham. Después del diluvio de Noé y hasta Abraham, sólo había dos
hombres que eran más grandes que él: Noé y Sem. Él único que podría haber estado vivo en aquel
Melquisedec, entonces, el rey de Jerusalén y sacerdote de Jehová, es un tipo y cuadro de Cristo Jesús. El
pasaje de plena mención de Melquisadec es Hebreos 7. En Hebreos 7 vemos unos requisitos para ser
Porque este Melquisedec, rey de Salem, sacerdote del Dios Altísimo, que salió a recibir a Abraham que volvía
de la derrota de los reyes, y le bendijo, a quien asimismo dio Abraham los diezmos de todo; cuyo nombre
significa primeramente Rey de justicia, y también Rey de Salem, esto es, Rey de paz. [Heb 7.1-2]
En este pasaje vemos otra vez que Melquisedec es realmente un título: Rey de justicia o Rey de paz.
El sacerdote según el orden de Melquisedec es rey de Salem, rey de justicia y paz (y aun rey de la ciudad
Salem, Jerusalém).
El segundo requisito para un sacerdote según el orden de Melquisece es el de ser elegido por Dios.
Sin padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene principio de días, ni fin de vida, sino hecho semejante al
No constituido conforme a la ley del mandamiento acerca de la descendencia, sino según el poder de una vida
indestructible. Pues se da testimonio de él: Tú eres sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec.
[Heb 7.16-17]
Melquisedec era sin genealogía porque su sacerdocio no es por descendencia física como el de Aarón.
Más bien es por elección. El de Melquisedec es un sacerdocio sin fin, eterno, porque una vez que Dios
escoge a alguien para ser sacerdote según el orden de Melquisedec, es Su sacerdote para siempre
(comparar esto con Hebreos 6.20). Uno llega a ser un sacerdote según el orden de Melquisedec por el
Y esto no fue hecho sin juramento; porque los otros ciertamente sin juramento fueron hechos sacerdotes; pero
éste, con el juramento del que le dijo: Juró el Señor, y no se arrepentirá: Tú eres sacerdote para siempre,
El tercer requisito del sacerdocio de Melquisedec es que hay que ser hijo de Dios.
Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres; pero la palabra del juramento, posterior a la ley,
Cristo es el modelo. El juramento de Dios hace que el Hijo sea sacerdote para siempre según el orden
de Melquisedec. Hay que ser hijo entonces. Esto no tiene que implicar nacer de nuevo como un hijo de
Dios (como nosotros) porque hay varios hombres en la Biblia que son hijos por adopción (por la
Por todo esto podemos entender que existe la posibilidad que había otros sacerdotes según el orden de
Melquisedec y esta posibilidad tiene que ver con el pacto de David. El rey David llenó los requisitos para
ser un sacerdote según el orden de Melquisedec. Primero, él era rey de Salem (Jersusalén). También era
elegido por Dios (él y su descendencia, perpetuamente) en 2Samuel 7, bajo el pacto de David. Fue
elegido (adoptado) como un hijo en Salmo 89.26-27 (históricamente se refiere a David, doctrinalmente
se refiere al Mesías). Así que, exactamente como Melquisedec (de Génesis 14) era rey-sacerdote, así era
David. Él ofrecía sacrificios a Dios, fuera de la ley que Dios estableció en el Libro de Levítico para los
sacerdotes según el orden de Aarón (1Cron 16.2; David ofreció holocaustos y sacrificios de paz). Esto
250
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
podría explicar por qué Dios le quitó el reino a Saúl por haber hecho lo mismo (1Sam 13.9-14; ofreció
holocaustos y ofrendas de paz, igual que David). Puede ser que David era rey-sacerdote según el orden de
Melquisedec, y así pudo ofrecer sacrificios a Dios. Saúl era diferente. Dios no lo escogió, sino que fue el
pueblo quien eligió a Saúl como rey. Entonces, puesto que no fue escogido como hijo (como David y
Salomón también llenó los requisitos para ser un sacerdote según el orden de Melquisedec. Él, como su
padre, era rey de Salem (Jerusalén), escogido por Dios como rey y como hijo adoptado (2Sam 7.12-14).
Entonces, él, como David y Saúl, ofrecía holocaustos y ofrendas de paz, pero Dios se lo permitió. ¿Por
qué Salomón pudo ofrecer sacrificios pero no Saúl? Creo que vemos la explicación en el pacto de David.
Salomón y su padre eran especiales entre todos los demás reyes porque los dos eran escogidos
personalmente por Dios. Por esto, puede ser que eran sacerdotes según el orden de Melquisedec, igual que
Sem (el Melquisedec de Génesis 14) e igual que Jesucristo. No vemos esta elección especial con ninguno
de todos los demás reyes después de David y Salomón, hasta la llegada del Mesías.
Pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de Saúl, al cual quité de delante de ti. [2Sam 7.15]
El pacto de David contiene una provisión que se llama las misericordias fieles de David. Pablo
menciona estas misericordias en el Libro de Hechos y las aplica a nosotros los cristianos.
Y nosotros también os anunciamos el evangelio de aquella promesa hecha a nuestros padres, la cual Dios ha
cumplido a los hijos de ellos, a nosotros, resucitando a Jesús; como está escrito también en el salmo segundo:
Mi hijo eres tú, yo te he engendrado hoy. Y en cuanto a que le levantó de los muertos para nunca más volver a
corrupción, lo dijo así: Os daré las misericordias fieles de David. [Hech 13.32-34]
Esto puede causar un poco de confusión porque nosotros no participamos en este pacto de David. ¿Cómo
es, entonces, que Pablo aplica las misericordias de David a nosotros si ellas forman parte de dicho pacto?
Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros pacto eterno, las
Las misericordias de David no sólo tienen que ver con el pacto de él. También forman parte del pacto
eterno que Dios hace con Israel: el Nuevo Pacto. El Nuevo Pacto es uno que todavía estaba para el futuro
cuando Isaías escribió su profecía. Así que, el Nuevo Pacto se basa en la promesa de misericordia
perpetua (misericordias fieles) que Dios hizo con David bajo el pacto de David. Estas misericordias
se definen en Hechos 13. Después de mencionar las misericordias de David en los versículos del 32 al 34,
Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os anuncia perdón de pecados, y que de todo
aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree.
[Hech 13.38-39]
Las misericordias fieles de David se definen como el perdón de pecados y la justificación delante de Dios,
Entonces en Cristo recibimos las misericordias que Dios prometió a David y a su Hijo que se sentaría
sobre su trono. Puesto que estamos en Él (en el Hijo de David), participamos (en parte) en lo que Él
recibió como el Hijo de David. Además, en Cristo participamos (también en parte) en el Nuevo Pacto en
que nunca se pierde. Por esto, hemos de entender que las misericordias fieles de David sólo forman una
pequeña parte del pacto de David. Forman una parte más grande del Nuevo Pacto. (Otras referencias: Sal
251
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.
[2Sam 7.16]
No hay condiciones en este pacto. Es incondicional porque Dios prometió la casa, el reino y el trono a
David sin condición alguna y también para siempre. No hubo nada que David o sus descendientes
pudieron haber hecho para cambiar lo que Dios estableció en este pacto.
Para siempre le conservaré mi misericordia, Y mi pacto será firme con él. [Sal 89.28]
Dios nunca olvidará de lo que le prometió a David y a su casa. Sus promesas acerca de su casa y su trono
Así ha dicho Jehová: Escribid lo que sucederá a este hombre [Conías / Jeconías] privado de descendencia,
hombre a quien nada próspero sucederá en todos los días de su vida; porque ninguno de su descendencia
logrará sentarse sobre el trono de David, ni reinar sobre Judá. [Jer 22.30]
Por este versículo y esta maldición sobre el linaje de Salomón después de Jeconías, Dios trajo al Hijo de
La crucifixión tampoco afectó este pacto. A pesar de que en la primera venida perecía como si se
rompiera el pacto (Sal 89.38-40), no fue así. Dios está simplemente esperando hasta la segunda venida
para cumplir con Sus promesas que hizo a David y su pacto (Sal 89.34-37).
El pacto no se cumplió en la primera venida del Hijo de David, el Mesías, porque Su corona en aquel
Mas tú desechaste y menospreciaste a tu ungido, Y te has airado con él. Rompiste el pacto de tu siervo; Has
profanado su corona hasta la tierra. Aportillaste todos sus vallados; Has destruido sus fortalezas. [Sal
89.38-40]
Note la contradicción aparente en este pasaje del Salmo 89. Primero, en 2Samuel 7 Dios le dio a David un
pacto incondicional y en el Salmo 89.3-4, 28-29 y 34-37, Él dice que es para siempre. Pero, en el
versículo 38 del Salmo 89, dice que rompiste el pacto. Así es como parecía en la primera venida del
Mesías, porque los judíos lo rechazaron. Él vino como el Rey prometido, el Hijo de David, el Mesías.
Vino para ofrecerle a Israel el reino eterno que fue prometido bajo el pacto de David, con Él siendo el
Rey. Pero lo rechazaron y lo crucificaron. ¿Dónde está el Rey de Israel ahora? No está aquí en la tierra.
¿Quién está controlando la tierra prometida ahora? No es Israel. ¿Quién está reinando sobre el trono de
David ahora? Nadie. Así que, el Salmo dice: Rompiste el pacto. Y si sólo hubiera una venida del
Mesías, así sería para siempre (y Dios sería un mentiroso, porque dijo que era un pacto incondicional y
eterno).
252
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Tenemos que tomar esta profecía en su debido contexto. Tenemos que entender Salmo 89.38-40 (la
No olvidaré mi pacto, Ni mudaré lo que ha salido de mis labios. Una vez he jurado por mi santidad, Y no
mentiré a David. Su descendencia será para siempre, Y su trono como el sol delante de mí. Como la luna será
La primera venida no es la única en el plan de Dios, y Él cumplirá con Sus promesas a David, no en la
primero sino en la segunda. Esto no es, entonces, una contradicción en la Escritura. Es una profecía de los
sufrimientos de Cristo que sucedieron antes de Su venida gloriosa. Note que los sufrimientos de Cristo
vinieron antes de Su gloria cronológicamente. Sin embargo, en Salmo 89, estos dos eventos aparecen al
revés: la primera venida (v38-40) después de la segunda (v34-37). Pedro habló de este tipo de
confusión en su primera epístolaDios anunciaba los sufrimientos (la primera venida) y las glorias (la
Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca
de esta salvación, escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos,
el cual anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos. [1Ped 1.10-11]
El cumplimiento del pacto de David, entonces, empieza en la segunda venida, se realiza plenamente en el
Milenio y así sigue a través de toda la eternidad porque nunca terminará. Cuando Cristo venga y tome el
trono de David (realmente será el trono del mundo), nunca lo va a renunciar porque el pacto de David es
eterno. La sucesión de los eventos para el cumplimiento de este pacto sería como lo siguiente.
Al final de la Tribulación, las naciones unidas se reunirá para una batalla final contra los judíos que se
hallan en Jerusalén.
He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos. Porque yo reuniré a todas las
naciones para combatir contra Jerusalén; y la ciudad será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las
mujeres; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad. [Zac
14.1-2]
El Señor Jesucristo (Jehová en la carne) viene en Su segunda venida y pelea contra las naciones unidas.
Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla. [Zac 14.3]
Esta batalla se llama la batalla de Armagedón y resulta en miles y miles de muertos entre los del
Y fue pisado el lagar fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre hasta los frenos de los caballos, por mil
Es en este entoncesen la segunda venidacuando Cristo se sienta en Su trono de gloria, que es el trono
de David (Luc 1.32; Hech 2.30; según las promesas del pacto de David).
Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su
Por esto, los reinos del mundo (todos los reinos físicos: naciones, pueblos y lenguas) llegarán a ser del
Señor Jesucristo.
El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han
venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos. [Apoc 11.15]
253
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
El trono de David no será únicamente el trono de Israel. También será el trono de toda la tierra. Es el
trono sobre todos los pueblos y las naciones de los gentiles porque Israel será cabeza de las naciones (Isa
Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre. [Zac 14.9]
En la primera venida de Cristo, el Rey le ofreció a Israel el reino. Ellos podrían haberlo recibido
voluntariamente pero lo rechazaron. Así que, en la segunda venida de Cristo, Él establecerá el mismo
En el momento de acabar con el ejército de las naciones unidas, Jesucristo se sienta en el trono de David
para juzgar aquellas mismas naciones según su trato con Sus hermanos, los judíos.
Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su
trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta
Desde entonces, el Hijo de David reinará sobre el trono de David por los siglos de los siglos. Extenderá
Su reino desde Jerusalén y a través de toda la creación de Dios por toda la eternidad (Heb 1.8; Apoc
22.1-5).
Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre
Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no
tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia
desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto. [Isa 9.6-7]
31 He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de
Judá.
32 No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto;
porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová.
33 Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en
su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo.
34 Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová; porque
todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová; porque perdonaré la
La primera cosa que hemos de observar acerca del comienzo del Nuevo Pacto es que Dios lo hace con
Israel y no con nadie más (o sea, no es un pacto ni para los gentiles, ni directamente para los cristianos). A
la luz de esto, debemos entender que hay dos aplicaciones del Nuevo Pacto. Primero, hay una aplicación
nacionalj porque el Nuevo Pacto se aplica directamente a la nación de Israel. Segundo, hay una aplicación
internacional porque debido al rechazo del Nuevo Pacto por Israel, Dios se lo mandó (en parte) a los
254
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
gentiles. Pero, esta aplicación no se reveló hasta Hechos 8.26-35, cuando Dios le mostró a Felipe que
Entonces, analicemos estas dos aplicaciones en más detalle para que el asunto quede claro. El asunto es
este: El Nuevo Pacto es para Israel y Dios hace este pacto con Su pueblo escogido. No es un pacto que
Dios hace con la Iglesia (que en su mayor parte consta de gentiles y no judíos). ¿Cómo es, entonces, que
nosotros hemos llegado a participar directamente en el Nuevo Pacto sin necesidad de ir por medio de
Israel?
La aplicación nacional del Nuevo Pacto. El Mesías murió por los pecados de Israel. Es obvio por lo que
dice la Biblia que Dios hace el Nuevo Pacto únicamente con la nación de Israel. Fíjese en las palabras
He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de
Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días... [Jer 31.33]
El Nuevo Pacto y sus promesas incondicionales pertenecen a Israel, no a la Iglesia, ni tampoco a los
gentiles. En Jeremías 31.31-34 hay ocho promesas en total que Dios hace con la nación de Israel bajo este
Pacto.
1. Una nueva mente: ...Daré mi ley en su mente... (el pronombre su se refiere a la casa de
Israel),
2. Un nuevo corazón: ...y la escribiré en su corazón... (el pronombre su se refiere a la casa de
Israel),
3. La reconciliación: ...y yo seré a ellos por Dios... (ellos son los de la casa de Israel),
4. La restauración: ...y ellos me serán por pueblo... (ellos son los de la casa de Israel),
ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová... (no habrá enseñanza acerca de Jehová entre
6. El conocimiento innato de Dios: ...porque todos me conocerán desde el más pequeño de ellos
hasta el más grande, dice Jehová... (todos los judíos conocerán a Jehová desde su
nacimiento),
7. El perdón de los pecados: ...porque perdonaré la maldad de ellos... (ellos son los de la casa
de Israel),
8. El olvido de los pecados: ...y no me acordaré más de su pecado... (ellos son los de la casa de
Israel).
Isaías 53 trata del sufrimiento y de la muerte del Mesías, el evento que confirmó (comenzó, ratificó) el
Nuevo Pacto. Vemos lo mismo aquí en Isaías 53 que en Jeremías. El Mesías murió por los de Israel.
Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que
255
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Isaías escribió su profecía aquí hablando de nosotros (escondimos, estimamos, etc.). Nosotros en
este pasaje, entonces, se refiere a los israelitas, a los del pueblo de Isaías. Ellos escondieron del Mesías el
rostro. Ellos, los judíos, no lo estimaron. Entonces, son los mismos que se mencionan en los siguientes
versículos.
4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado,
5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre
6 Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el
El Mesías llevó nuestras enfermedadeslas de Israel (de los judíos; v4). El Mesías sufrió nuestros
doloreslos de Israel (v4). Nosotros, los judíos, tuvieron a Cristo por azotado y herido por Dios (v4).
Así que, Jesucristo fue herido por nuestras rebelioneslas de Israel (v5). Él fue molido por nuestros
pecadoslos de Israel (v5). El castigo de nuestra paz fue sobre Él (la paz de los judíos; v5). Por la
llaga del Mesías nosotroslos judíosfueron curados (v5). Dios cargó en Él el pecado de todos
Si todo esto no fue suficientemente claro, Dios dice en el versículo 8 de Isaías 53 que por la rebelión de
mi pueblo fue herido. El pueblo de Dios es Israel. Jesucristo, el Mesías prometido (y profetizado) en
Isaías 53, murió por los pecados de Israel. (Obviamente la vida y el sufrimiento del Señor Jesucristo pagó
por todos los pecados de todos los hombres, pero lo que queremos hacer aquí es fijarnos específicamente
en el comienzo del Nuevo Pacto y ver que la Biblia dice que era un pacto únicamente para Israel.) Es por
esto que Cristo dice, al final del Libro de Mateo, que Su sangre del Nuevo Pacto sería derramada por
Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados. [Mat
26.28]
En aquel entonces, antes de la revelación de la Iglesia (antes del último rechazo de parte de Israel), el
Nuevo Pacto fue únicamente para los judíos. No es hasta Hechos 8.26-35, después del último rechazo del
Pacto por Israel en Hechos 7, que vemos que Dios empieza a aplicar la muerte de Jesucristo a todos los
hombres de una manera personal e internacional (o sea, no sólo a los judíos de una manera nacional).
En la profecía de Zacarías, el padre de Juan el Bautista, en Lucas 1.67-79 (una profecía acerca de la
venida inminente de Jesucristo), vemos esta misma aplicación nacional del Nuevo Pacto. Dice que el
Bendito el Señor Dios de Israel, Que ha visitado y redimido a su pueblo. [Luc 1.68]
La redención que Cristo consiguió en la cruz (la redención bajo el Nuevo Pacto en Su sangre) era
primeramente para el pueblo de Dios, la nación de Israel. También, en el versículo 69 vemos que el
El pronombre nos en Lucas 1.69 se refiere a Zacarías y a los de su pueblo. O sea, se refiere a los
israelitas. Luego, en el versículo 71, Zacarías dice que la salvación que el Mesías conseguiría para la
nación de Israel incluiría la salvación política de sus enemigosde las naciones gentiles (ver el
versículo 74 también).
Salvación de nuestros enemigos, y de la mano de todos los que nos aborrecieron. [Luc 1.71]
256
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Así que, este aspecto nacional del Nuevo Pacto tiene que ver exclusivamente con Israel bajo el reinado de
Cristo como su Líder político (su Rey, como David y Salomón). Por esto podemos entender que el Nuevo
Pacto se realiza en conjunto con el pacto de David, cuando Cristo viene para tomar el trono de la nación y
ser Rey de la nación y también del mundo. Por supuesto este aspecto del Nuevo Pacto no se ha realizado.
Lo veremos hasta la segunda venida de Cristo (Zac 14.1-3, 12, 14, 16).
En la misma profecía de Zacarías, vea como el Nuevo Pacto tiene que ver con el pacto que Dios hizo con
Para hacer misericordia con nuestros padres, Y acordarse de su santo pacto; Del juramento que hizo a
El Nuevo Pacto hace posible el cumplimiento de todas las promesas que tiene que ver con el pacto
original de Abraham en Génesis 12.1-3. Estas promesas fueron pasadas de Abraham a Isaac y luego a
Jacob. Son las promesas que incluyen también la tierra de Canaán, la tierra que Dios prometió a la nación
Luego vemos que la venida del Mesías es el cumplimiento de las profecías de Isaías 53, porque Él murió
Para dar conocimiento de salvación a su pueblo, Para perdón de sus pecados. [Luc 1.77]
Él murió para establecer el Nuevo Pacto con Israel exactamente como Dios dijo en Jeremías 31.31-34.
Sin embargo, hasta la segunda venida se realizará todo lo que Dios prometió a la nación de Israel bajo el
Nuevo Pacto (Hech 3.19-21), porque debido al rechazo del Pacto por Israel en Hechos 7, ahora hay una
La aplicación internacional del Nuevo Pacto. Cristo murió por los pecados del mundo.
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él
Nosotros participamos en el Nuevo Pacto por dos razones principales. Primero, participamos en este
Por tanto, acordaos de que en otro tiempo vosotros, los gentiles en cuanto a la carne, erais llamados
incircuncisión por la llamada circuncisión hecha con mano en la carne. En aquel tiempo estabais sin Cristo,
alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.
Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la
Nosotros, los gentiles, éramos ajenos a todos los pactos que Dios había hecho con Israel desde Génesis 12
y el pacto de Abraham. Pero, ahora en Cristo, por Su sangre derramada en la cruz, es diferente porque
nacimos de nuevo y fuimos bautizados en Cristo Jesús (puesto en Él; 1Cor 12.13). Así que, en Él ya
hemos sido hechos cercanos. Ya somos hijos de Dios, miembros de Su familia y por esto participamos en
los pactos.
Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de
La segunda razón principal por la cual participamos en el Nuevo Pacto es para provocarle a Israel a celos
Digo, pues: ¿Han tropezado los de Israel para que cayesen? En ninguna manera; pero por su transgresión vino
la salvación a los gentiles, para provocarles a celos. Y si su transgresión es la riqueza del mundo, y su
defección la riqueza de los gentiles, ¿cuánto más su plena restauración? [Rom 11.11-12]
257
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Porque si su exclusión es la reconciliación del mundo, ¿qué será su admisión, sino vida de entre los muertos?
[Rom 11.15]
Pues como vosotros también en otro tiempo erais desobedientes a Dios, pero ahora habéis alcanzado
Puesto que ellos desobedecieron y rechazaron el ofrecimiento del Nuevo Pacto en Cristo Jesús, Dios nos
lo dio a nosotros los gentiles. Y lo hizo para provocarle a Israel, Su esposa, a celos. O sea, nos dio a
nosotros (los perros gentiles) una parte del Pacto que Él estableció con ellos para hacerles quererlo.
En todo esto, sin embargo, no pierda el hecho de que no recibimos todas las promesas del Nuevo Pacto.
El Pacto en su totalidad es para Israel. Dios nos permite a nosotros participar en una parte del pacto, pero
sólo son tres de los ocho aspectos del Pacto que pertenecen ahora a nosotros en Cristo. En Él tenemos la
reconciliación, el perdón de pecados y el olvido de pecados. Todo lo demás no tiene que ver con nosotros.
Cristo en la cruz, aunque sólo participamos en una pequeña parte de dicho pacto. Esto es lo que
Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi
sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí. [1Cor 11.25]
Por esto, Pablo dice que somos ministros de un nuevo pacto. Se está refiriendo al Nuevo Pacto que se
El cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque
Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros
mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los
Una vez que haya entrado la plenitud de los gentiles, Dios nos arrebatará y los gentiles tendrán que
conseguir la salvación a través de la nación de Israel otra vez (aunque habrá unas cuantas otras maneras
Así que, hay una aplicación internacional y personal del Nuevo Pacto ahora en nuestros días. Se aplica, en
parte y sólo por un tiempo, al pecador cuando se arrepiente de sus pecados y le pide a Dios la salvación
en Cristo Jesús. Entonces, ahora podemos entender porque Pablo dice que predicaba al judío
Porque no me averg:uenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al
El Nuevo Pacto se ofreció a Israel primero (Hech 3.19-21), pero puesto que ellos lo rechazaron, Dios lo
mandó a nosotros, los gentiles (Hech 28.28), para provocar a los judíos a celos (Rom 10.19; 11.11). No
obstante, esto no es nada nuevo porque desde Génesis 12.1-3 y el pacto de Abraham, toda bendición de
Dios viene a través de Israel. No es diferente con el Nuevo Pacto. Dios hace el Pacto con Israel y si otros
reciben bendición por las promesas de este Pacto, es a través de la nación escogida. Como en nuestro
caso, nosotros participamos en el Pacto en Cristo, en un judío (Cristo nació en la tribu de Judá). La
258
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque esto es mi sangre
del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados. Y os digo que desde ahora no
beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
[Mat 26.27-29]
Cuando Cristo menciona el Nuevo Pacto de Su sangre en este pasaje, la Iglesia es todavía un misterio no
revelado. Dios no reveló la Iglesia hasta después del último rechazo de Israel, y sólo entonces llamó a
Pablo para ser Su instrumento para revelar, establecer y edificar la Iglesia entre los gentiles (Ef 3.1-7). Si
los judíos hubieran aceptado el ofrecimiento del Pacto en los primeros capítulos de Hechos, no habría
habido una época de la Iglesia. Entonces, es obvio que Dios hizo este pacto con Israel, no con la Iglesia
Note en Mateo 26.29 que Cristo se refiere a vino nuevo en la copa. No es vino fermentado (o sea, vino
viejo). Él dice que es fruto de la vid lo que tiene en la copa. Es el jugo de uvas que Él mismo acaba de
exprimir en la copa. Es lo mismo que hacía el jefe de los coperos de Faraón (Gen 40.9-11). Esto es
Mantequilla de vacas y leche de ovejas, Con grosura de corderos, Y carneros de Basán; también machos
cabríos, Con lo mejor del trigo; Y de la sangre de la uva bebiste vino. [Deut 32.14]
La sangre de Cristo es como aquel vino nuevo que tenía en la copa, porque no es la misma sangre vieja
que se ofrecía siempre durante el Antiguo Testamento. Es algo nuevo, algo eterno.
Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el
Por esto, después de la muerte de Cristo (Mat 26.28), la remisión (el perdón) de pecados no se consigue
por la sangre de animales, sino por la sangre de Él, la que derramó en la cruz (el vino nuevo).
Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado. [Heb 10.18]
Este vino nuevo de la sangre de Cristo se echa en odres nuevos, no en los vasos viejos.
Ni echan vino nuevo en odres viejos; de otra manera los odres se rompen, y el vino se derrama, y los odres se
pierden; pero echan el vino nuevo en odres nuevos, y lo uno y lo otro se conservan juntamente. [Mat 9.17]
El cuadro aquí es el de la aplicación de la sangre de Cristo bajo el Nuevo Pacto. Para aplicar la sangre de
este pacto, Dios crea un vaso nuevo. Se echa el vino nuevo, entonces, en la nueva criatura del cristiano
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
También se echará este vino nuevo en el odre nuevo de Israel cuando ella nazca de nuevo en la segunda
venida de Cristo.
Y pondré mi Espíritu en vosotros, y viviréis, y os haré reposar sobre vuestra tierra; y sabréis que yo Jehová
259
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las
transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna. Porque
donde hay testamento, es necesario que intervenga muerte del testador. Porque el testamento con la muerte se
confirma; pues no es válido entre tanto que el testador vive. De donde ni aun el primer pacto fue instituido sin
Cuando el Nuevo Pacto se confirmó, reemplazó el primero (Heb 8.13; 10.8-9). O sea, el Nuevo Pacto
reemplaza el pacto que Dios hizo con Israel cuando ellos salieron de Egipto (Jer 31.31-32; reemplaza el
pacto de Moisés; ver también: Heb 12.18-24). Sin embargo, el Nuevo Pacto no se realizará plena y
completamente hasta la segunda venida de Cristo, hasta después de aquellos días (Heb 8.10).
Los pasajes principales del Nuevo Pacto son Jeremías 31.31-34, Hebreos 8.6-13 y Hebreos 10.11-18.
Podemos ver la mayoría del contenido del Nuevo Pacto en estos tres pasajes. Jeremías 31.31-34 es la
plena mención del Nuevo Pacto y en Hebreos 8 y 10 el Apóstol Pablo cita el pasaje de Jeremías 31 y lo
Cuando Dios establece el Nuevo Pacto, lo hace con ocho promesas. El número ocho en la Biblia es el
número de nuevos comienzos. Así que, el Nuevo Pacto tiene ocho promesas porque es un nuevo
Esto tiene que ver con la sexta promesa del conocimiento común e innato de Dios que los judíos tendrán
bajo este pacto. Dios dará Su ley en su mente, la mente de los de la casa de Israel. Sabrán la ley de Dios
Este aspecto del Nuevo Pacto no se aplica a nosotros, los cristianos, porque aunque tenemos la mente de
Cristo en la Palabra de Dios (1Cor 2.16), tenemos que aplicarla para renovar nuestras mentes.
No será así para los judíos en el Milenio. Ellos sabrán lo que Dios quiere que sepan, sin que nadie los
enseñe. Les da una nueva mente. Entienda también que esta promesa es únicamente para Israel, no para
los gentiles del Milenio. Ellos van a tener que aprender la Palabra de Dios de parte de los judíos (Isa
Un nuevo corazón
Además de dar Su ley en la mente de los judíos que participarán en el Nuevo Pacto, Dios escribiré la
misma en sus corazones. O sea, les dará un nuevo corazón y será uno lleno del temor de Jehová. Será de
carne, suave y sensible, y no de piedra como el que los hombres tenemos ahora (duro, terco y obstinado).
260
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Y haré con ellos pacto eterno, que no me volveré atrás de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de
Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio
Esta promesa, también, es únicamente para los judíos. Dios no nos ha dado a nosotros, los cristiano, Su
Palabra escrita en nuestros corazones. Tampoco se aplica a los gentiles en el Milenio (la plena
manifestación del Nuevo Pacto). Ellos no tendrán un nuevo corazón, como es evidente durante el Milenio
con su desobediencia a Dios y también al final del Milenio con su rebelión satánica contra Dios.
Esta será la pena del pecado de Egipto, y del pecado de todas las naciones que no subieren para celebrar la
fiesta de los tabernáculos. [Zac 14.19; habrá desobediencia de parte de los gentiles en el Milenio; no va a
Cuando los mil años se cumplan, Satanás será suelto de su prisión, y saldrá a engañar a las naciones que están
en los cuatro ángulos de la tierra, a Gog y a Magog, a fin de reunirlos para la batalla; el número de los cuales
La reconciliación de Israel
Esto habla de la reconciliación, de Israel dejando sus falsos dioses y volviendo a Jehová en
arrepentimiento. La reconciliación de Israel tomará lugar en la segunda venida de Cristo después de los
dos días de la época de la Iglesia (o sea, al comienzo del tercer día de mil años después de la
crucifixiónen el Milenio).
Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará. Nos dará vida después de
dos días; en el tercer día nos resucitará, y viviremos delante de él. Y conoceremos, y proseguiremos en
conocer a Jehová; como el alba está dispuesta su salida, y vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia
Nosotros, los gentiles, podemos participar en este aspecto del Nuevo Pacto a través de Cristo Jesús. En
Cristo, tenemos la reconciliación y por lo tanto Jehová es nuestro Dios (ya no más nuestro enemigo).
Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la
reconciliación; que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los
hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación. [2Cor 5.18-19]
Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando
En aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa,
sin esperanza y sin Dios en el mundo. Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos,
La restauración de Israel
Dios restaurará a Israel como Su propio pueblo bajo el Nuevo Pacto. Las promesas que Dios hace bajo el
Nuevo Pacto son para todos los del pueblo de Israel en el momento que este Pacto se realice totalmente.
Por lo cual, este es el pacto que haré con la casa de Israel: Después de aquellos días, dice el Señor: Pondré
mis leyes en la mente de ellos, Y sobre su corazón las escribiré; Y seré a ellos por Dios, Y ellos me serán a mí
261
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros
mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los
gentiles; y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de
Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos, Cuando yo quite sus pecados. [Rom 11.25-27]
Todos los judíos que están vivos en el momento de la segunda venida de Cristo, serán salvos bajo este
pacto. Este aspecto del Nuevo Pacto no tiene nada que ver con nosotros, los cristianos en la Iglesia,
porque Dios nos arrebata antes (en Romanos 11.25). Él hace el Nuevo Pacto con Israel, no con la Iglesia.
Nosotros participamos en una parte del Nuevo Pacto ahora, pero es sólo por un tiempo, hasta el
arrebatamiento. Luego, cuando Cristo venga (Rom 11.26), todos los judíos que estén vivos en aquel
También Isaías clama tocante a Israel: Si fuere el número de los hijos de Israel como la arena del mar, tan
Esto de todo Israel no quiere decir que todos los descendientes físicos de Israel serán salvos. Esto es
No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de Israel son israelitas. [Rom
9.6]
Todo israel se refiere al remanente fiel que estará vivo al final de la Tribulación cuando Cristo venga la
segunda vez. Será todo Israel porque habrá judíos de cada una de las 12 tribus en el remanente.
Entonces, en el momento de la restauración de Israel (todo Israel) en la segunda venida, el Nuevo Pacto
se manifestará plenamente y Dios (según Su promesa en Jeremías 31.31-34) les quitará sus pecados.
Israel restaurada llegará a ser la reina del mundo, la cabeza de las naciones (Isa 2.1-4; Sal 47.1-4; Zac
14).
Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a Jehová... [Jer
31.34a]
En la tierra de los judíos, el que profetiza durante el Milenio, lo hará a pena de muerte.
Y en aquel día, dice Jehová de los ejércitos, quitaré de la tierra los nombres de las imágenes, y nunca más
serán recordados; y también haré cortar de la tierra a los profetas y al espíritu de inmundicia. Y acontecerá
que cuando alguno profetizare aún, le dirán su padre y su madre que lo engendraron: No vivirás, porque has
hablado mentira en el nombre de Jehová; y su padre y su madre que lo engendraron le traspasarán cuando
Esto se debe al aspecto siguiente del Nuevo Pacto: El conocimiento innato de Dios entre los judíos. Todos
los judíos que viven en el Milenio, tendrán conocimiento de Dios. Entonces, cuando uno de ellos
Entienda que este aspecto sólo se les aplica a los judíos, no a la Iglesia hoy día, ni a los gentiles en el
Milenio. Dios nos manda hoy a enseñar a todo hombre Su Palabra (Col 1.28; 2Tim 2.2; 3.16-17). Durante
el Milenio, los judíos cumplirán con la Gran Comisión de ir de Jerusalén, Judea y Samaria hasta lo último
de la tierra (Hech 1.8) y hacer discípulos a todas las naciones (Mat 28.19-20; vea abajo, la sección que se
trata de la Gran Comisión y el Nuevo Pacto). Ellos van para enseñarles a los gentiles la Palabra de Dios.
Además, los mismos gentiles subirán de año en año a Jerusalén para recibir más enseñanza de la Palabra
262
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
...porque todos me conocerán desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová... [Jer
31.34b]
Esto se aplica únicamente a los judíos en el futuro bajo el Nuevo Pacto. No se puede aplicar esto a
nosotros hoy día en la Iglesia. Aunque nosotros tenemos la unción de la presencia del Espíritu Santo que
nos enseña todas las cosas (2Cor 1.21-22; 1Jn 1.20, 27), siempre ocupamos que alguien nos enseñe. O
sea, tenemos que aprender a través de la enseñanza de la Palabra de Dios, tanto por los hombres (Col
1.28; 2Tim 2.2; 3.16-17) como por el Espíritu Santo (Juan 16.13; 17.17).
No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová,
Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el mar. [Hab 2.14]
La tierra de Israel será llena del conocimiento de Dios porque todos los judíos, desde el bebé recién
nacido hasta el más grande, tendrán un conocimiento común e innato del Señor. Además, la tierra (el
planeta, todo el mundo) será llena del conocimiento de Jehová porque los judíos, bajo la dirección de los
12 Apóstoles (Mat 19.28; Apoc 20.4), estarán cumpliendo con la Gran Comisión de enseñarles a los
gentiles de las naciones (Mat 28.19-20; Hech 1.8). Los gentiles, sin embargo, tienen que aprender durante
el Milenio. Ellos no tendrán este conocimiento innato porque la promesa del Nuevo Pacto es únicamente
para Israel. Los gentiles tiene que ira a los judíos si quieren recibir el conocimiento de Dios (Isa 2.1-4).
El perdón de pecados
Este aspecto del Nuevo Pacto se trata de la remisión los pecados. Remisión es la acción o el efecto de
remitir o remitirse. Remitir, según el diccionario, es perdonar, alzar la pena, liberar de una obligación.
Cada siete años harás remisión. Y esta es la manera de la remisión: perdonará a su deudor todo aquel que hizo
empréstito de su mano, con el cual obligó a su prójimo; no lo demandará más a su prójimo, o a su hermano,
Uno hace remisión (v1) perdonando al deudor toda su deuda (v2). Cristo dijo lo mismo cuando declaró
que Su sangre del Nuevo Pacto sería derramada para remisión de pecados (para el perdón de los
pecados).
Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados. [Mat
26.28]
Así que, cuando estamos hablando del perdón de los pecados bajo el Nuevo Pacto, estamos hablando de
Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión. [Heb
9.22]
263
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Dios estableció unos sacrificios de sangre (la sangre inocente de animales) para que uno pudiera obtener
Y hará de aquel becerro como hizo con el becerro de la expiación; lo mismo hará de él; así hará el sacerdote
expiación por ellos, y obtendrán perdón. [Lev 4.20; Ver Levítico 16 para una explicación en detalle del rito
No obstante, la remisión bajo el pacto (y la ley) de Moisés era temporal y pasajera porque no le quitó el
pecado al culpable. O sea, la sangre de los animales cubría el pecado de los santos del Antiguo
Testamento, pero no se lo quitaba. Dios les perdonaba sus pecados bajo el pacto de Moisés con base en el
sacrificio sustituto e inocente de los animales. Sin embargo, no tomó al pecador por inocente porque él
Y pasando Jehová por delante de él, proclamó: ¡Jehová! ¡Jehová! fuerte, misericordioso y piadoso; tardo para
la ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la
rebelión y el pecado, y que de ningún modo tendrá por inocente al malvado; que visita la iniquidad de los
padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación. [Exod 34.6-7]
La sangre de los animales bajo el pacto de Moisés no pudo quitarles los pecados a los que tenían el
perdón.
Porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados. [Heb 10.4]
Es por esto que vemos un lugar en el corazón de la tierra llamado el paraíso. Cuando Cristo murió, se fue
Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en
Antes de morir, cuando estaba en la cruz, Él dijo que este lugar en el corazón de la tierra se llamaba
Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso. [Luc 23.43]
Este lugar de paraíso en el centro de la tierra se llamaba el seno de Abraham en Lucas 16.22 y era un
lugar de descanso y reposo para los que murieron con la salvación. Según Efesios 4.8-10, los santos de
Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los hombres. Y eso de que
subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra? El que
descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo. [Ef 4.8-10]
Desde el pecado de Adán, Dios aceptaba la sangre inocente de los animales en sacrificio por los pecados
de los hombres (por ejemplo: Gen 3.21; 4.4). Con base en el sacrificio de la sangre inocente, Dios
perdonaba los pecados al que se la ofreció, pero no pudo quitarle el pecado. O sea, el pecador tenía la
remisión (el perdón) de sus pecados, pero no fue tomado por inocente porque la paga del pecado es la
muerte, y si un hombre peca, un hombre tiene que morir. Un animal no es suficiente para pagar todo el
precio del pecado. Por esto, Dios tomó un cuerpo (fue hecho semejante a los hombres) y murió, el
Pero en estos sacrificios cada año se hace memoria de los pecados; porque la sangre de los toros y de los
machos cabríos no puede quitar los pecados. Por lo cual, entrando en el mundo dice: Sacrificio y ofrenda no
quisiste; Mas me preparaste cuerpo. Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron. Entonces dije:
He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, Como en el rollo del libro está escrito de mí. [Heb
10.3-7]
264
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Puesto que Cristo ya se ofreció en sacrificio por nuestros pecados (como nuestro sacrificio sustituto), bajo
Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las
transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna. [Heb
9.15]
Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el
acto de pagar el precio del pecado y así comprar a uno que está condenado bajo dicho pecado. Los santos
del Antiguo Testamento tenían la remisión (temporal y pasajera) de sus pecados, pero no tenían la
redención como ahora se puede obtener en Cristo Jesús. Jesucristo pagó todo el precio de todos nuestros
pecados y así nos redimió eternamente. Este es el propósito primordial del establecimiento del Nuevo
Pactoel de pagar, completa y eternamente, por los pecados y así conseguir la redención eterna.
Entonces, con la redención eterna viene la remisión eterna (permanente) porque es el perdón de todos los
pecados de uno (los pasados, presentes y futuros). O sea, ya no hay más ofrenda por el pecado porque el
sacrificio de Cristo fue suficiente para la remisión completa y eterna de todos los pecados. Él pagó el
Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado. [Heb 10.18]
Esto, entonces, es otro aspecto del Nuevo Pacto en que la Iglesia participa. En Cristo tenemos la eterna
De éste [Jesús de Nazaret] dan testimonio todos los profetas, que todos los que en él creyeren, recibirán
Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con
Otros pasajes que se tratan de lo mismo son Hechos 13.38-39, Efesios 1.7 y Colosenses 1.14.
Para Israel, este aspecto del Nuevo Pacto tomará lugar en la segunda venida de Cristo, después de
Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros
mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los
gentiles; y luego todo Israel será salvo, como está escrito: Vendrá de Sion el Libertador, Que apartará de
Jacob la impiedad. Y este será mi pacto con ellos, Cuando yo quite sus pecados. [Rom 11.25-27]
Después del arrebatamiento de la Iglesia (v25), todo Israel será salvo en la venida del Mesías (v26). En
aquel entonces Dios quitará a los israelitas sus pecados (v27). En aquel tiempo y aquel día (la
segunda venida de Cristo), Dios perdonará los pecados de Israel (la apostasía y la idolatría, entre otros).
En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la
purificación del pecado y de la inmundicia. Y en aquel día, dice Jehová de los ejércitos, quitaré de la tierra los
nombres de las imágenes, y nunca más serán recordados; y también haré cortar de la tierra a los profetas y al
Además de todo esto, la remisión (el perdón) de pecados bajo el Nuevo Pacto tiene otro aspecto. Dios
265
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Como acabamos de ver, bajo el pacto de Moisés había una provisión para el perdón de pecados. Pero,
cada año se hacía memoria de los pecados porque la sangre de los animales no pudo quitarselos a los
santos (Heb 10.3-4). Por esto no hubo olvido de los pecados bajo el pacto de Moisés. Pero ahora, bajo
el Nuevo Pacto, Dios ha prometido no acordarse nunca de los pecados de los que participan en dicho
Pacto. O sea, Dios nos perdona todo pecado y se olvida del asunto. Es por esto que en Cristo Jesús, bajo
el Nuevo Pacto en Su sangre, tenemos la eterna redención (Heb 9.12). Fuimos comprados por precio (la
sangre de Cristo).
Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los
Dios nos comprónos redimió. Así que, ya no estamos bajo la maldición del pecado. Dios se olvida de
los pecados de todos nosotros que participamos en el Nuevo Pacto porque el precio de nuestros pecados
ya se pagó. Cristo lo pagó todo en la cruz, entonces no hay por qué recordarlos.
Este aspecto del Nuevo Pacto, entonces, es otro en que la Iglesia participa. En Cristo, bajo el Nuevo Pacto
en Su sangre, tenemos el perdón de todos los pecados (Col 2.13; los pasados, presentes y futuros). Dios
ya no toma en cuenta los pecados de nosotros porque tenemos a Cristo como nuestro Salvador y
Redentor.
Que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus
Nos perdonó todos nuestros pecados. Nos redimió y nos reconcilió por Su sangre derramada en la cruz.
Israel participará en este aspecto del Nuevo Pacto también, pero hasta la segunda venida de Cristo.
Cuanto está lejos el oriente del occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones. [Sal 103.12]
Dios quitará el pecado a los israelitas y lo alejará de ellos, cuanto está lejos el oriente del occidente. Se
olvidará completamente de sus pecados. Él dice que echará tras Sus espaldas todos los pecados de Israel.
He aquí, amargura grande me sobrevino en la paz, mas a ti agradó librar mi vida del hoyo de corrupción;
porque echaste tras tus espaldas todos mis pecados. [Isa 38.17]
También sepultará las iniquidades de Israel, y echará en lo profundo del mar todos sus pecados.
El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar
Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia
del Señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; a quien de cierto es
necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por
boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo. [Hech 3.19-21]
En Hechos 3 Pedro está predicando acerca del Nuevo Pacto, anunciándolo delante de Israel antes del
comienzo de la época de la Iglesia. Él dijo que Dios borraría los pecados de los judíos en el momento de
su arrepentimiento y conversión. Esto señalará también la venida del Mesías (Su segunda venida) para
266
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
empezar los tiempos de refrigerio y la restauración de todas las cosas (el Milenio). Entonces, si los
Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros
todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. [Mat 28.19-20]
Cuando Cristo les dio la Gran Comisión a Sus Apóstoles, el Nuevo Testamento ya estaba vigente
porque el Testador (Cristo mismo) ya había muerto (Heb 9.15-17)ya había derramado Su sangre para
establecer el Nuevo Pacto. Sin embargo, como hemos visto varias veces en este libro, la Iglesia (el
Cuerpo de Cristo) entre los gentiles era todavía un misterio no revelado. Según Efesios 3.1-7, Dios le dio
esta revelación al Apóstol Pablo, y él no conoció a Jesucristo como Salvador y Señor hasta Hechos 9. Por
esto sabemos que los Apóstoles, durante los primeros capítulos de Hechos, estaban predicando el Reino y
no la Iglesia.
Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este
tiempo? Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola
potestad; pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en
Estaba anunciando la segunda venida de Cristo si los judíos lo aceptarían como el Mesías y el Rey
La Gran Comisión de Mateo 28.19-20, entonces, tiene una aplicación doctrinal fuera de la época de la
Iglesia. O sea, no es directamente para nosotros, los cristianos (aunque, por supuesto, es un buen resume
de nuestra misión hoy día de evangelizar para hacer discípulos y discipular para hacer evangelistas). La
Gran Comisión es principalmente para la nación de Israel porque ella será cabeza de las demás naciones a
las cuales Cristo envió a Sus Apóstoles. Esto es claro en Isaías 2.2-4 que se trata de Israel en el Milenio.
Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de
los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones. Y vendrán muchos pueblos,
y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y
caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. Y juzgará
Pero también la Gran Comisión es para todas las naciones porque ellas participarán (en parte) en el Nuevo
Pacto durante el Milenio. Estarán sujetas a Israel y tendrán que acercarse a Jehová a través de este pueblo
Pueblos todos, batid las manos; Aclamad a Dios con voz de júbilo. Porque Jehová el Altísimo es temible; Rey
grande sobre toda la tierra. El someterá a los pueblos debajo de nosotros, Y a las naciones debajo de nuestros
pies. El nos elegirá nuestras heredades; La hermosura de Jacob, al cual amó. [Sal 47.1-4]
Y todos los que sobrevivieren [la segunda venida] de las naciones que vinieron contra Jerusalén, subirán de
año en año para adorar al Rey, a Jehová de los ejércitos, y a celebrar la fiesta de los tabernáculos. [Zac 14.16]
La Gran Comisión, entonces, se cumplirá en el Milenio cuando los israelitas lleven la Palabra de Dios a
Nosotros, los cristianos, podemos aplicar la Gran Comisión de una manera personal porque, en Cristo,
participamos en varios aspectos del Nuevo Pacto, y Dios quiere que llevemos nuestro evangelio (basado
en el Nuevo Pacto) a los que nunca lo han oído. Sólo es que hemos de entender que esta es una aplicación
personal y no doctrinal, porque originalmente Cristo les entregó la Gran Comisión a Sus Apóstoles judíos
267
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
para alcanzar a los judíos primeramente y luego a las naciones (Hech 1.8; note el orden del alcance en
este versículo). Así que, podemos aplicar la Gran Comisión en cierta manera a nosotros hoy día en la
Iglesia porque nuestro evangelio también tiene que ver con el Nuevo Pacto. La gran diferencia es que
nuestra participación en el Pacto es limitada. Los Apóstoles de Cristo estaban anunciando el pleno
cumplimiento del Nuevo Pacto en la segunda venida del Mesías y en el establecimiento del Milenio (que
podría haber sucedido en los primeros capítulos de Hechos si los judíos hubieran recibido a Jesús como su
Otros pasajes proféticos que hablan del Nuevo pacto son los siguientes: Salmos 72; 79.8-9; 80.18-19; 85;
130.
Este pacto, en cuanto a su cumplimiento, es incondicional. Dios hará todo lo que dijo bajo este pacto y
nada que nadie pueda decir o hacer lo cambiará. En este sentido no será como el pacto de Moisés porque
No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto;
porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice Jehová. [Jer 31.32]
Sin embargo, hay condiciones para los que quieren participar en este pacto hoy día. Las promesas que
Dios dio bajo el Nuevo Pacto son incondicionales, pero no todos participan en el pacto, sólo los que
cumplen con la condición. La única condición hoy, durante la época de la Iglesia, de participar en el
Y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y
Otros pasajes que se tratan de la misma condición son los siguientes: Juan 3.18, 36; 7.38-39; Ef 1.13-14;
Rom 4.5, 22-25. La creencia en el corazón resultará en la confesión de la boca. O sea, cuando uno de
veras cree en Cristo como su propio Salvador personal, clama a Dios pidiéndole la salvación por los
...si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos,
serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. [Rom
10.9-10]
Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.
[Juan 1.12]
Esta creencia por supuesto incluye el arrepentimiento también porque es una conversión a Cristoun
se convierte del pecado al señorío de Cristo Jesús. Este es el mensaje del evangelio que nuestro Apóstol
Y cómo nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas, testificando a
judíos y a gentiles acerca del arrepentimiento para con Dios, y de la fe en nuestro Señor Jesucristo. [Hech
20.20-21]
Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en
todo lugar, que se arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia,
por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle levantado de los muertos. [Hech 17.30-31]
Sino que anuncié primeramente a los que están en Damasco, y Jerusalén, y por toda la tierra de Judea, y a los
gentiles, que se arrepintiesen y se convirtiesen a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento. [Hech
26.20]
268
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que
La participación en el Nuevo Pacto (y por lo tanto la salvación) no se trata de una religión, ni de ningún
rito religioso. Se trata de una relación personal con una Persona: Jesucristo.
Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo,
tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. [1Jn 5.11-12]
Dios. Los santos del Antiguo Testamento ya tenían la salvación por su fidelidad (por su fe más las obras
que Dios les exigía durante sus respectivas dispensaciones) y por esto estaban en el paraíso del seno de
Abraham esperando la eterna redención en Cristo, por Su sangre derramada para establecer el Nuevo
Pacto. Ellos participarán (los judíos completamente y los gentiles en parte) en el Nuevo Pacto, algunos en
el Milenio y todos en la eternidad (Apoc 20.4-5). Los judíos fieles de la Tribulación que formarán el
remanente, ellos participarán en el Nuevo Pacto también porque habrán perseverado hasta el fin (Mat
24.13; Rom 11.25-27). Además, durante el Milenio la participación (en parte) de los gentiles dependerá de
El Nuevo Pacto se manifestará plenamente en la segunda venida de Cristo, después de aquellos días de
la Tribulación.
Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su
mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. [Jer 31.33; ver
Porque muchos días estarán los hijos de Israel sin rey, sin príncipe, sin sacrificio, sin estatua, sin efod y sin
terafines. Después volverán los hijos de Israel, y buscarán a Jehová su Dios, y a David su rey; y temerán a
Israel recibirá la vida que Dios le prometió bajo el Nuevo Pacto después del tiempo de angustiadespués
Andaré y volveré a mi lugar, hasta que reconozcan su pecado y busquen mi rostro. En su angustia me
buscarán. Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará. Nos dará vida
después de dos días; en el tercer día nos resucitará, y viviremos delante de él. [Os 5.15-6.2]
Cuando el Nuevo Pacto entre en plena vigencia después de aquellos días, lo del pacto de Moisés
desaparecerá. O sea, las promesas de castigo bajo la ley de Moisés (Lev 26 y Deut 28) por fin se
Moisés desaparecerá porque habrá una parte de la ley que se observará durante el Milenio como un
Compare Ezequiel 36.24-29 con la plena mención del Nuevo Pacto en Jeremías 31.31-34. (Una
269
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
Ezequiel 36 Jeremías 31
24 Y yo os tomaré de las naciones, y os 31He aquí que vienen días, dice Jehová,
recogeré de todas las tierras, y os traeré a en los cuales haré nuevo pacto con la casa
25 Esparciré sobre vosotros agua limpia, y 32 No como el pacto que hice con sus
seréis limpiados de todas vuestras padres el día que tomé su mano para
espíritu nuevo dentro de vosotros; y 33 Pero este es el pacto que haré con la
padres, y vosotros me seréis por pueblo, y ellos hasta el más grande, dice Jehová;
31.31-34]
29 Y os guardaré de todas vuestras
36.24-29]
En este tiempo Israel volverá a la tierra prometida y la recibirá como su herencia perpetua ( Ezeq 36.24).
Y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo tomo a los hijos de Israel de entre las naciones a las
cuales fueron, y los recogeré de todas partes, y los traeré a su tierra; y los haré una nación en la tierra, en los
montes de Israel, y un rey será a todos ellos por rey; y nunca más serán dos naciones, ni nunca más serán
La nación entera será limpiada de sus inmundicias e idolatría, una vez para siempre (Ezeq 36.25; Zac
13.2).
Ni se contaminarán ya más con sus ídolos, con sus abominaciones y con todas sus rebeliones; y los salvaré de
todas sus rebeliones con las cuales pecaron, y los limpiaré; y me serán por pueblo, y yo a ellos por Dios.
[Ezeq 37.23]
En este tiempo los judíos recibirán un corazón nuevo y un espíritu nuevo (Ezeq 36.26-27; Ezeq 37.9-14).
Es importante observar aquí que Ezequiel 37.9-14 (el final de la profecía del valle de los huesos secos) es
el cumplimiento de lo que Cristo dijo a Nicodemo en Juan 3 acerca del nuevo nacimiento. En la segunda
venida de Cristo la nación de Israel nacerá de nuevo porque el Espíritu de Dios vendrá para morar en
ellos. O sea, en Juan 3 Cristo estaba refiriéndose a la profecía del valle de los huesos secos de Ezequiel
37.9-14 cuando hablaba con Nicodemo acerca del nuevo nacimiento por el Espíritu Santo. Es el tiempo
cuando Israel será resucitado, cuando los judíos vivirán (ver otra vez Oseas 5.15-6.3). Así que, todo Israel
estará lleno del Espíritu Santo y por lo tanto ellos andarán, por fin, en completa obediencia a Jehová.
Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán en mis preceptos, y mis
270
CAPÍTULO 7 LOS SIETE PACTOS
Israel en la tierra será por pueblo a Jehová y Él será a ellos por Dios (Ezeq 36.28; este es el cumplimiento
de Jeremías 31.33-34 y la realización del Nuevo Pacto). Este es el tiempo cuando Dios les perdonará
todos sus pecados y los borrará de Su memoria para siempre (Ezeq 36.29).
El Nuevo Pacto se manifestará plenamente, entonces, en el tiempo cuando Israel sea restaurada y
bendecida delante de todas las naciones (o sea, en el Milenio: Isa 61.8-11). Desde entonces, Dios pondrá
Habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos,
sus hijos y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será príncipe de ellos para siempre. Y haré
con ellos pacto de paz, pacto perpetuo será con ellos; y los estableceré y los multiplicaré, y pondré mi
santuario entre ellos para siempre. Estará en medio de ellos mi tabernáculo, y seré a ellos por Dios, y ellos me
serán por pueblo. Y sabrán las naciones que yo Jehová santifico a Israel, estando mi santuario en medio de
Jesucristo (Jehová en la carne) morará con los israelitas desde la segunda venida y para siempre. El
Una vez que el Nuevo Pacto se manifieste plenamente, no tendrá fin. Es un pacto perpetuo.
Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la
Porque yo Jehová soy amante del derecho, aborrecedor del latrocinio para holocausto; por tanto, afirmaré en
Y haré con ellos pacto eterno, que no me volveré atrás de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de
CONCLUSIÓN
Un pacto es un acuerdo entre dos personas. Es como un contrato. En la Biblia hay siete pactos principales
que Dios ha hecho con los hombres. Son siete ocasiones en que Dios ha entrado en un acuerdo con el
hombre, prometiéndole ciertas cosas y en algunos casos exigiéndole algo en cambio. Los siete pactos son
los siguientes.
1. El pacto de Edén
2. El pacto de Adán
3. El pacto de Noé
4. El pacto de Abraham
5. El pacto de Moisés
6. El pacto de David
7. El Nuevo Pacto
Hay unos principios importantes acerca de estos pactos que hemos de recordar para no torcer la Escritura.
Casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de
entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia
Algunos de los pactos son incondicionales. Esto quiere decir que, a pesar de lo que hace el hombre, Dios
va a cumplir con el acuerdo que hizo. Así que, hasta que el pacto se cumpla en su totalidad, estará vigente
271
EL ESTUDIO DE LOS SIETES CAPÍTULO 7
y por lo tanto se aplica a los hombres. Un ejemplo de este principio es el pacto de Adán en Génesis 3.
Este pacto está todavía vigente y por lo tanto nosotros estamos viviendo bajo sus promesas, provisiones y
maldiciones.
Recuerde también que algunos de estos pactos se hicieron con todos los hombres pero otros fueron
hechos con un grupo especial. Esto es muy importante cuando uno está analizando, por ejemplo, el pacto
de Moisés (Exod 19.5-8; 24.3-8) con su señal del día de reposo (Exod 31.12-17). Dios hizo este pacto, y
le dio la señal, a la nación de Israel. Así que, todas las promesas relacionadas con este pacto todavía
pertenecen a la nación de Israel. Nosotros, los cristianos viviendo en la época de la Iglesia, no debemos
confundirnos y aplicar a la Iglesia lo que Dios le dio únicamente a Israel. Este principio se aplica al pacto
La última cosa importante que hemos de recordar acerca de los pactos es el asunto del traslapo. Puesto
que unos pactos son incondicionales, cuando los hombres fracasan en su parte del acuerdo, el pacto sigue
vigenteno se invalida. Puede ser que su fracaso resultó en un cambio de dispensación (ver el capítulo 2
que trata de las siete dispensaciones), pero el pacto sigue vigente traslapando todos los pactos y todas
El conocimiento de los siete pactos nos ayuda a entender el trato de Dios con los hombres. También sirve
para darnos a nosotros (los cristianos que éramos antes gentiles) una perspectivas saludable de nosotros
mismos, de nuestra salvación y también de nuestra parte en el plan de Dios. Dios no hizo ningún pacto
con nosotros, los gentiles. Ni siquiera nos prometió la salvación (Ef 2.11-13). Nosotros recibimos la
salvación bajo el Nuevo Pacto en la sangre de Cristo Jesús por la pura gracia de Dios. Él hizo el pacto con
Israel (Jer 31.31-34), pero por un tiempo nos ha permitido a nosotros, los gentiles, entrar en Su provisión
de salvación. Así que, no debemos pensar que el plan de Dios gira alrededor de nosotros. No es así. El
plan de Dios gira alrededor de Israel. Aun nuestra salvación sirve para este fin, para provocarlos a celos
(Rom 11.11, 15). Entonces, no tenga más alto concepto de sí mismo que el que debe tener (Rom 12.3).
Al final de todo, después de un estudio profundo de la Palabra de Dios, es nuestra esperanza que lo que
usted aprendió de los siete pactos, y también de todo el sistema de sietes que Dios ha puesto en la
Escritura, quye sirva para motivarle a vivir para Él que dio Su vida por usted. Es lo único que vale la
pena.
Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron; y
por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.
[2Cor 5.14-15]
272