02 - Lynch 3 11
02 - Lynch 3 11
02 - Lynch 3 11
KEVIN LYNCH
M.1. T. Observar las ciudades puede causarun placer par-
ticular, por corriente que sea la vista. Tal como una
Diciembre de 1959
obra arquitect6nica, tambien la ciudad es una cons-
trucci6n en el espacio, pero se trata de una construcci6n
en vasta escala, de una cosa que s610se percibe en el
curso de largos lapsos. El disefio urbano es, por 10
I tanto, un arte temporal, pero que s610rara vez puede
usar las secuencias control ad as y limit ad as de otras
artes temporales, como la musica, por ejemplo. En
diferentes ocasiones y para distintas personas, las
secuencias se invierten, se interrumpen, son aban-
donadas, atravesadas. A la ciudad se la ve con dife-
II rentes luces y en todo tipo de tiempo.
En cada in stante hay mas de 10que la vista puede
ver, mas de 10que el oido puede oir, un escenario 0 un
panorama que aguarda ser explorado. Nada se ex-
perimenta en si mismo, sino siempre en relaci6n con
I
como el que describimos. En Estados Unidos, uno
siente la tentacion de citar partes de Manhattan,
San Francisco, Boston 0, tal vez,el frente lacustre de
Chicago.
Se trata de caracterizaciones que surgen de nuestras
definiciones. El concepto de imaginabilidad no deno-
ta necesariamente algo fijo, limitado, preciso, unifi-
IIla realidad esta guia. Los casos de lesiones cerebra-
les que se sefialan en el apendice A son muestras de
III ansiedad y los esfuerzos que acompafian a la
Ilbsoluta confianza en estos medios. Por otra parte,
IIIexperiencia completa de la interconexion, toda la
profundidad de una imagen vivida, se pierde.
Asimismo, se puede adiestrar al observador. Brown
cado u orden ado regularmente, si bien puede tener a observa que un laberinto que se hacia recorrer a
veces estas cualidades. Tampoco significa que se Hujetos de experimentacion con los ojos vendados,
trate de algo patente al primer vistazo, evidente, 1m, parecia a estos al comienzo un problema ininte-
claro 0 simple. El medio ambiente total que hay que rrumpido. Al repetirse el experimento, ciertas partes
modelar es sumamente complejo, en tanto que la de la pauta, en especial el comienzo y el fin, se hacian
imagen evidente aburre a poco y solo puede destacar I'llmiliares y asumian el caracter de localidades. Por
unos cuantos rasgos del mundo vivo. (lltimo,cuando los sujetos deexperimentacionpodian
La imaginabilidad de la forma de la ciudad cons- recorrer ellaberinto sin cometer errores, todo el sis-
tituira el eje del estudio que va a continuacion. Existen tema parecia haberse convertido en una 10calidadH•
otras propiedades basicas en un medio ambiente I)e Silva describe el caso de un chico que parecia
poseer una orientaci6n direccional "automatica", ganizar y representar visualmente un medio ambiente
pero que result6 haber sido adiestrado desde la pri- urtificial en una escala tan grande; pese a 10 cual
mera infancia (por una madre que era incapaz de nuestras actividades nos empujan a ello. Curt Sachs
distinguir entre derechae izquierda) para responder du un ejemplo de incapacidad para establecer cone-
a instrucciones como "el costado este del p6rtico" 0 xiones mas alla de determinado nive164• La voz y el
"el extremo sur del aparador"'l. Hondel tambor de los indios norteamericanos siguen
La descripci6n hecha por Shipton de la labor de "tempos" absolutamente diferentes, percibiendoselos
reconocimiento para la ascensi6n al Everest brinda independientemente. En pos de una analogia musi-
un ejemplo muy elocuente de esta clase de aprendi- cnl entre nosotros, este autor menciona nuestros ser-
zaje. Al aproximarse al Everest por una nueva direc- vicios religiosos, en los que no pensamos en coordi-
ci6n, Shipton (rec,onoci6inmediatamente los princi- nar el cora del interior con las campanas que repican
pales picos y pasos que conocia desde el costado 1m la cupula.
norte. Pero el guia sherpa que Ie acompanaba, quien En nuestras vastas superficies metropolitanas no
conocia muy bien ambos lados, no se habia dado Iigamos el cora y las campanas; como el sherpa, s610
cuenta jamas de que tenian los mismos rasgos y vemos los costados del Everest y no la montana.
recibi6 la revelaci6n con sorpresa y deleite'(). I~Jxtendery profundizar nuestra percepci6n del medio
Kilpatrick describe el proceso de aprendizaje per- umbiente equivaldria a prolongar un dilatado desa-
ceptivo impuesto a un observador por estimulos nue- rrollobio16gicoy cultural que ha ido desde los sentidos
vos, que no se ajustaban ya a imagenes previas11• Se de contacto a los sentidos de distancia, y desde los
inicia con formas hipoteticas que explican concep- sentidos de distancia ha pas ado a la comunicaci6n
tualmente los nuevos estimulos, en tanto que la ilusi6n simb61ica. Nuestra tesis es la de que ya estamos en
de las antiguas formas persiste. condiciones de desarrollar nuestra imagen del medio
La experiencia personal de la mayoria de entre umbiente mediante acci6n sobre la forma fisica ex-
nosotros da testimonio de esta persistencia de una terior asi como mediante un proceso interno de apren-
imagen ilusoria mucho despues de advertirse con- dizaje. A decir verdad, la complejidad de nuestro
ceptualmente su inexactitud. Fijamos la vista en la media ambiente nos impone ahora proceder de este
selva y s610 vemos la luz del sol sobre las h0jas modo. En el capitulo 4 se examinara de que modo
verdes, pero un ruido nos precave de que hay un soria posible llevar a cabo esta tarea.
animal oculto alli. El observador aprende entonces a El hombre primitivo estaba obligado a perfeccio-
interpretar la escena mediante la selecci6n de claves nar su imagen ambiental mediante la adaptaci6n de
"reveladoras" y volviendo a meditar sobre senales till percepci6n al paisaje que tenia ante si. Podia
precedentes. El animal camuf1adopuede ser aprehen- efectuar cambios secundarios-en su medio ambiente
dido ahora por el reflejo de sus ojos. Finalmente, con montones de piedras para hacer senales, con
mediante la experiencia reiterada se modifica toda utalayas u hogueras, pero en materia de claridad
la pauta de percepci6n y el observador ya no necesita visual 0 de interconexi6n visuallas modificaciones
buscar conscientemente datos reveladores ni agregar importantes estaban limitadas a los solares de las
nuevos datos a un marco antiguo. Ha llegado a lograr cusas 0 los recintos religiosos. S610las civilizaciones
una imagen que Ie servira eficazmente en la nueva poderosas pueden empezar a actuar sobre su medio
situaci6n, pareciendole natural y correcta. Muy subi- tlmbiente total en una escala considerable. La remo-
tamente el animal oculto aparece entre las hojas, dolaci6n consciente del media fisico en gran escala
"tan claro como el dia". ,.610 se ha hecho posible recientemente y, par 10tanto,
Del mismo modo, tenemos que aprender aver las el problema de la imaginabilidad ambiental es nuevo.
formas ocultas en la extensa desorganizaci6n de 'IYJcnicamente, podemos hacer paisajes completa-
nuestras ciudades. No estamos acostumbrados a or- mlJnte nuevos en un breve lapso, como en el cas a de
los "polders" holandeses. Aqui, los disenadores ya
se hallan ante el problema de c6mo formar la escena
total de modo que Ie resulte sencillo al observador
humano identificar sus partes y estructurar el con-
junt030•
Con rapidez vamos erigiendo una nueva unidad
funcional, la regi6n metropolitana, pero aun nos
queda por aprehender que tam bien esta unidad debe
tener su imagen correlativa. Suzanne Langer plantea
eI pro,?lema en ~u suci~ta definici6n de la. arquitec-
ltura: Es el medlO amb1ente total que ha s1dohecho
visible"42.