Cultura Africana Del Siglo IV

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Unidad 1: Vida de San Agustín Temática 2: La patria de San Agustín

Lección 2: Cultura africana del siglo IV

Aspecto socioeconómico

En Tagaste existían tres clases sociales definidas:

• La clase alta: conformada por los grandes ricos con muchas posesiones y
grandes mansiones. Vivían en la ciudades y solo hablaban el latín.
• La clase media: entre la clase alta y la clase baja se conformaba la clase
media africana de origen, más romana de formación y de mentalidad,
insertada ya en la organización del imperio. Era la clase de los pequeños
propietarios que participaban en la dirección de los asuntos públicos y
aspiraban a hacer que sus hijos recorrieran todos los grados de las
instrucciones con el fin de convertirlos en magistrados, retóricos y juristas. San
Agustín pertenecía a esta clase social.
• La clase baja: eran muy pobres. Vivían en los campos o en los cordones de
miseria alrededor de las mansiones de los ricos. Solo hablaban y entendían el
púnico.

Lengua
• Las ciudades y ambientes cultos hablaban y escribían latín.
• El púnico fue traído por los fenicios y parece haberse mantenido en la costa
mediterránea.
• La periferia de la ciudad de Hipona en las regiones interiores, más
particularmente las zonas númidas, se hablaba una lengua de origen líbico,
que se encuentra en inscripciones y epitafios, una especie de mezcla de
elementos cartaginenses y berberiscos.
• Los númidas, moros y getulos que habitaban las mesetas y la montaña
hablaban bereber (lo que en un principio significa bárbaro, deformado en
bereber, o sea, no latino).
• En las ciudades de la costa sobretodo, el público de las iglesias entendía latín;
la porción menos culta y más modesta está compuesta de fieles venidos del
campo, de las mesetas o son descendientes de inmigrados mediterráneos.
Vivienda
Las diferencias sociales eran muy marcadas en la época de San Agustín y esto
se puede ver reflejado en la forma de sus viviendas.
La mapalia era una choza o cabaña hechas de maderos, adobe y esteras
donde vivía la clase baja. El amo vivía en un enorme castillo, mientras los
obreros temporales moraban en chabolas de paja.

En la ciudad como en el campo, bellas residencias contrastaban por su lujo y


confort con los tugurios ahumados donde vivían la mayoría de las personas
humildes que componían las comunidades cristianas. Las casas modestas,
sobretodo el campo, eran construidas con piedras juntadas con un mortero
hecho a base de barro.

Las casas africanas se parecen todas; difieren principalmente por el lujo y las
dimensiones, según la cantidad de dinero de los propietarios. Disponen de
cuartos alrededor de un espacio interior descubierto, con jardín y piscina para
los más ricos. Más allá de la entrada única, se abre un vestíbulo que lleva al
patio, el cual es rectangular o cuadrado, cercado con pórticos donde hay una
o varias fuentes que le dan frescura; plantas y flores le dan un clima más
familiar. A la izquierda del patio había una sala común y a la derecha varios
cuartos con mosaicos monumentales.

Casa africana de planta circular con una Casa africana con patio interior, fuente,
estructura de palos y hojas cubierta de plantas y mosaicos. Tomado de
barro, y el techo cónico con paja. Tomado https://lagavetavoladora.com/
de https://www.africaclub.com/africa.htm

Una de las características de las casas africanas era que el nombre del
propietario o inquilino estaba grabado en la entrada principal en los dinteles y
los fieles grababan un versículo de la Escritura.

Alumbrado
La producción de aceite permitió que África resolviera uno de sus problemas
cotidianos: el alumbrado. Gracias a la riqueza de África, Agustín encontró en
Hipona lo que no logró en Milán: tiempo para trabajar de noche.

La fabricación de lámparas era una industria particularmente desarrollada, ya


que África las exportaba a Sicilia, Cerdeña e Italia. Las lámparas africanas eran
hechas en arcilla gris y parda, de forma redonda y mechero corto, con un disco
interior que presentaba un motivo con círculo decorativo con temas
mitológicos y divinidades. Las lámparas contemporáneas de Agustín
representaban motivos específicamente bíblicos o cristianos como el sacrificio
de Abraham.

Casa africana con patio interior, fuente, plantas y mosaicos. Tomado de


https://lagavetavoladora.com/

Vestido
Para la época existían varias y diversas influencias entre ellas las de Fenicia,
Roma, Chipre y Libia. El tertuliano dejó la toga romana y vistió el himation
griego, el cual es una especie de abrigo.

La túnica clásica se convirtió en el traje habitual tanto de hombres libres como


de esclavos, en casa como en el campo. Para el trabajo o cuando se viajaba, el
africano la levanta por medio de un cinturón. Debajo, se llevaba una túnica
más ligera, verdadera camisa de lino trasparente que se guardaba para dormir.

La gente de condición modesta no lleva otro vestido que la túnica, incluso en


la calle. Los menos civilizados seguían cubriéndose con pieles curtidas de
animales.

El hombre distinguido se sirvió de una túnica como vestido de andar en la


casa. Afuera, añade el abrigo, que para la época era una tela rectangular,
abrochada en el hombro por medio de una fíbula. Las dalmáticas y abrigos son
de lana de ovejas y carneros.

El abrigo de gala de seda se enriquecía con dibujos de monstruos marinos y


escenas de la biblia.

Túnica clásica de lino con Himation griego.


abrigo de seda.

Tanto en la ciudad como en el campo, el africano andaba con la cabeza


descubierta; solo los pescadores llevaban un sombrero de paja de anchas
alas. Las bragas o calzones ceñidos al estilo europeos llegan a África no antes
del final del siglo IV, la época de Agustín. Antes de ir a pie o a caballo, el
africano tenía los muslos desnudos. Se contentaba con polainas en las
pantorrillas para cazar o trabajar en el campo.

El calzado es el signo por excelencia de la elegancia. Se reconocía a un


senador por sus mulas rojas: eran una especie de botines que cubrían el pie
salvo los dedos y estaban ornados con una lúnula de marfil, fáciles de
reconocer en las estatuas de la época. Los ciudadanos comunes llevaban
babuchas sin ornamento o sandalias enlazadas al estilo espartano o
totalmente descubiertas como las sandalias saharianas.
Los cabellos se llevaban cortos. El emperador Adriano había sentado escuela
con su barba corta. Constantino repuso la moda del afeitado.

El vestido femenino había sufrido la misma evolución que el de los hombres:


las mujeres usaban túnicas ajustadas, ornadas y cubiertas de bordados; la
camisa era de lino y la túnica de lana. Para ir de paseo, la mujer se contentaba
con poner otra túnica más gruesa encima de la primera o envolverse en un
abrigo en forma de chal. El velo es signo de consagración.

La higiene era comparable a lo que conocemos hoy en día; para esta época no
se conocía el jabón y lo suplían los aceites perfumados, importados de Arabia.
El dentrífrico (crema dental) era hecho con plantas exóticas y dejaban los
dientes brillantes y limpios. Los más humildes usaban el carbón.

Hombres y mujeres utilizaban el engaste del anillo como sello.

Alimentación
La cena era la comida principal en África y se realizaba al caer la tarde. Los
hombres eran quienes iban hacer el mercado y cargaban las canastas.
Compraban pescado, huevos, pan, legumbres, frutas y trigo. Los habitantes
del campo vivían de los productos del suelo. El aceite y los olivos estuvieron
presentes en la gastronomía africana.

La pesca en la costa y la caza en los lugares montañosos y las mesetas


permitía diversificar y enriquecer la comida ordinaria. Para mejorar su menú, la
gente pobre recogía caracoles, saltamontes y langostas y sacaban raíces del
suelo o hervían cardos.

La harina de trigo era la base de la alimentación: caldos, pastas, pasteles y


principalmente el pan. El puche africano era una mezcla de cereales y de agua
al que se le podía añadir trigo fresco, miel y un huevo.

La carne era signo de riqueza, pues se servía en la mesa de gente acomodada;


entre los pobres, era señal de fiesta. Ninguna carne era prohibida y el vino era
parte de todas las comidas.
La alimentación en Tagaste se basaba en verduras y frutas. Las carnes como
pescado, langosta, codornices, gacela y cabrito también hacían parte de la
gastronomía africana. Tomado de: https://www.lebabi.net/

El menú se componía por lo general de verduras y frutas. La alcachofa era una


legumbre muy apreciada en África. Las frutas más consumidas eran higos,
manzanas, peras, uvas y nueces. Las carnes como pescado, langosta,
codornices, gacela y cabrito también hacían parte de la gastronomía africana.

La cena era preparada por la sirvienta en casa de ricos y la señora en casa del
pobre. Utilizaban el fogón o el fuego en medio de piedras, o un hueco en
alguna piedra. Allí también se tostaba el trigo, se preparaba pan y se asaba la
carne.
Los comensales usaban cuchara. En la mesa de los ricos los utensilios eran en
plata y los platos de mármol o madera.

Las clases sociales modestas utilizaban una cerámica tosca, modelada sin
arte, rudimentaria.
Tabernas
Alrededor del foro de Hipona, se encontraban unos bares muy similares en
estilo a los cafés públicos de la época; estos sitios servían para la política y se
permitía que los candidatos expusieran sus programas con argumentos en
mano.

Los clientes de las tabernas estaban sentados a la turca, es decir, en cuclillas,


en unas bancas-mesa con alto respaldo. El centro de la pieza está reservado
para el servicio y las atracciones. Los sirvientes pasaban entre las mesas
cargando sus bandejas con pasteles o panes.

Cualquier pretexto era válido para beber, incluso las fiestas religiosas.
Juegos
Los dados eran el juego de mayor atracción
para los africanos. Se jugaba con tres dados
y luego con dos; el dado era de hueso de
marfil. Este juego se realizaba con fichas y en
un tablero, similar al del chaquete. En este
tipo de juegos se podría perder todo el
dinero, incluso llegar a la ruina.
Normalmente estaban prohibidos en los
lugares públicos y para los esclavos.
Dados antiguos de marfil.

Caza y pesca

La caza era el deporte para los ricos y ocupaba un lugar considerable en la


vida y los tiempos libres de los grandes señores. Era defensa en las
plantaciones para los campesinos y una necesidad para los pobres.

El cazador usaba vestido corto, ajustado al cuerpo, que le permitía moverse


con facilidad; en los pies usaban polainas o semibotas; a caballo, llevaba un
abrigo flotante. Los militares eran empleados en la captura de animales
salvajes destinados a los juegos del circo.

Las armas que usaban para la caza eran el mazo, el hacha, el venablo (lanza) y
el chuzo de dos picos conjugados. Para la caza de aves empleaban el arco y la
ballesta. Las redes servían para la caza y la pesca.

Representación de la pesca en África en la Edad Media. Tomado de:


http://ambiental.iesgrancapitan.org/

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