Analisis Jurisprudencial

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 2

Especialización en Contratación Estatal

Universidad de Medellín
Oscar Alberto Bastidas Guerrero

ANÁLISIS JURISPRUDENCIAL

La jurisprudencia seleccionada para realizar el análisis sucinto de la ratio


decidendi es la sentencia del Consejo de Estado con radicación No.
25000232600020010290601 la cual contrapone dos procesos del derecho
administrativo que pueden ser utilizados para dirimir conflictos en la
contratación estatal y que se pueden derivar del perfeccionamiento del contrato
en sí; la sentencia motivo de análisis hace una aclaración especifica del medio
de control de controversias contractuales y un posible enriquecimiento sin
causa por parte de la entidad estatal demanda, que para el caso es INVIAS.

El planteamiento del caso se puede ver de manera sencilla en primer término,


ya que se puede tratar de una controversia contractual al evidenciar que la
entidad estatal faltó a sus obligaciones al no cancelar los emolumentos por
concepto de honorarios a la abogada que prestó sus servicios profesionales en
la representación judicial de los casos laborales donde la entidad demanda era
parte; pero al no contar con un contrato se prestación de servicios, la abogada
opta por solicitar de manera subsidiaria en su proceso que se declare la
existencia de un enriquecimiento sin causa por parte de la entidad pública al no
efectuar el pago de honorarios por el concepto e representación judicial.

En este punto, el H. Consejo de Estado tiene dos criterios para analizar, el


primero es la procedencia del medio de control de controversias contractuales,
ante esto, la sala cita el artículo 87 del Código Contencioso Administrativo que
consagra esta acción y establece que cualquiera de las partes de un contrato
estatal, podrá pedir que se declare su existencia o su nulidad y que se hagan
las declaraciones, condenas o restituciones consecuenciales, que se ordene su
revisión, que se declare su incumplimiento y que se condene al responsable a
indemnizar los perjuicios y que se hagan otras declaraciones y condenas. Pero
la jurisprudencia ha sido muy reiterativa en el hecho de que este medio de
control solo se aplica en los casos donde se ha perfeccionado el proceso
contractual en sus etapas precontractual, contractual y postcontractual, así lo
manifiesta el artículo 39 de la Ley 80 el cual dispone que el contrato estatal
constarán por escrito y el artículo 41 establece que los contratos del Estado se
perfeccionan cuando se logra acuerdo sobre el objeto y la contraprestación y
éste se eleva a escrito; sin el cumplimiento de estos requisitos, el medio de
control no se puede invocar.

Para el caso, la abogada dedujo, como se haría en el derecho privado, que por
el simple hecho de firmar poderes en su favor se sobre entendía la existencia
de un contrato estatal, y por ende podría reclamar bajo el medio de control de
controversias contractuales el pago de los honorarios adeudados y los
perjuicios que fueron ocasionados por la demora en los mismos pagos; pero en
este tenor, el H. Consejo de Estado cita los requisitos en el evento de requerir
Especialización en Contratación Estatal
Universidad de Medellín
Oscar Alberto Bastidas Guerrero

los servicios de un profesional del derecho para la representación judicial, aquí


surgen dos actuaciones distintas: de una parte, la del apoderamiento o
procuración y de otra, el negocio jurídico que le da piso o justificación al mismo.
Y es en este punto donde la abogada no se percató que para poder ejercer su
representación y poder percibir el pago de sus honorarios, era necesario la
suscripción del segundo requiso el cual se constituye en el contrato como tal,
que para este caso es un contrato estatal.

Teniendo en cuenta lo anterior y como consecuencia de la inexistencia del


Contrato Estatal entre las partes, no es procedente interponer el medio de
control de controversias contractuales y por ende esta pretensión fue
rechazada en el fallo fuente de análisis; pero ante este posible hecho, la
abogada, en forma subsidiaria, invoco la declaración de un enriquecimiento sin
causa por parte de la entidad demanda y en contra de la demandante.

La demandante adujo que la entidad pública se enriqueció sin justa causa al


beneficiarse de los servicios que ella prestó, al representar judicialmente en
varios procesos laborales que se adelantaban en contra de la entidad estatal, y
no reconocerle a cambio los honorarios a que tenía derecho y los gastos en los
que debió incurrir para el cumplimiento de dicha representación, lo que produjo
su empobrecimiento. Aunque si continuamos con la premisa del argumento
anterior es claro que la profesional del derecho incurrió en un error que, dada
su formación, se presumiría como grave; al ser una abogada en pleno uso de
sus facultades profesionales, debe conocer de antemano que para poder llevar
la representación judicial, debe mediar un contrato que genere las obligaciones
son su representado, y se vuelve mas indispensable aun, si la entidad que va a
representar es de derecho público. En la misma sentencia de análisis, el H.
Consejo de Estado argumenta que todos los que pretendan intervenir en la
celebración de un contrato estatal, tienen el deber de acatar la exigencia legal
del escrito para perfeccionar un negocio jurídico de esa estirpe sin que sea
admisible la ignorancia del precepto como excusa para su inobservancia.

De los argumentos del H. Consejo de Estado y al tenor de los hechos


presentados por las diferentes partes en el proceso, es evidente que la
profesional del derecho incurrió en un error al pasar por alto un requisito
fundamental para poder acceder a un contrato estatal el cual es su solemnidad
por escrito; al obviar este paso, asumió de manera directa las consecuencias
contractuales y es evidente que la abogada demandante equiparó el contrato
estatal con un contrato privado, aun cuando es sobre entendido que los
contratos estatales tiene una legislación propia y unos requisitos que son
ineludibles para cualquiera de las partes.

Por las razones expuestas, la sentencia fuente de análisis fue desfavorable a la


demandante.

También podría gustarte