Parte 4 La Política Como Proceso Actitudes Valores.
Parte 4 La Política Como Proceso Actitudes Valores.
Parte 4 La Política Como Proceso Actitudes Valores.
*Para
saber
cómo
entienden
los
actores
individuales
la
política
y
cómo
la
practican,
necesitamos
examinar
sus
actitudes
previas
ya
que
le
orientaran
en
su
comportamiento
político.
*Estas
actitudes
son
a
menudo
compartidas
por
un
colectivo
numeroso,
que
se
identifica
a
veces
por
una
comunidad
política
o
grupo
social,
y
nos
conduce
al
estudio
de
las
culturas
políticas.
*La
evolución
de
estas
actitudes
y
valores
sociales
completan
la
descripción
del
contexto
cultural
del
proceso
político.
Capítulo 18=>
* Los
elementos
culturales
se
transmiten
mediante
los
procesos
de
socialización
y
comunicación
política.
1
La
política
es
una
práctica
colectiva,
constituida
por
un
tejido
de
actividades
desarrolladas
por
individuos
y
grupos.
Estas
actividades
-‐o
formas
de
intervenir
en
el
proceso
político-‐
son
variadas:
manifestación
de
una
opinión,
la
participación/abstención
electoral,
la
negociación
de
un
acuerdo
o
la
profesionalización
como
dirigente
o
como
funcionarios.
La
política,
por
tanto,
se
presenta
como
un
proceso
o
una
secuencia
de
actividades
que
se
encadenan
y
se
influyen
recíprocamente.
Hay
dos
modelos
ideales
para
explicar
la
acción
política
y
sus
diferencias.
1) Modelo
económico
=>
Cada
individuo
es
un
actor
racional,
con
preferencias
definidas,
y
que
persigue
un
objetivo
claro,
que
cuenta
con
información
veraz
sobre
los
costos
y
los
beneficios
de
cada
decisión
y
que
conoce
qué
medios
necesita
para
hacerla
efectiva.
El
individuo
se
movilizará
solo
si
entiende
que
de
su
actividad
ha
de
seguirse
un
efecto
positivo
para
su
objetivo.
2) Modelo sociocultural
Ciudadanos
y
ciudadanas
guían
sus
acciones
según
las
normas,
los
valores
y
os
usos
que
han
ido
integrando
progresivamente
a
lo
largo
de
su
vida,
mediante
un
proceso
de
socialización
La
acción
del
individuo
responde
a
la
adaptación
a
la
norma
social
que
ha
interiorizado
-‐mediante
la
socialización-‐
.
Esta
adaptación
le
lleva
a
desarrollar
identidades
con
un
grupo
de
referencia.
Visión
ceremonial
de
la
acción
política
(es
el
resultado
de
una
adhesión
a
una
identidad
colectiva)
Un
filtro
de
predisposiciones
El
filtro
está
constituido
por
un
conjunto
de
propensiones
u
orientaciones
que
el
individuo
ha
interiorizado
previamente
y
que
le
ayudan
a
definir
su
intervención
en
el
proceso
político.
2
• No
son
perceptibles
directamente.
Solo
son
registrables
a
partir
de
las
conductas
repetidas
por
el
sujeto.
• Presentan
distintos
grados
de
intensidad
en
cada
individuo.
• Suelen
darse
correlaciones
o
concomitancias
entre
actitudes
que
se
combinan
frecuentemente
entre
sí,
mientras
que
otras
suelen
excluirse
como
incompatibles
entre
sí.
-‐ Orientaciones
cognitivas,
que
incluyen
lo
que
el
ciudadano
conoce
de
primera
mano
y
lo
cree.
-‐ Orientaciones
afectivas,
que
están
en
la
raíz
de
las
reacciones
emocionales.
-‐ Orientaciones
valorativas,
que
predisponen
para
emitir
un
juicio
de
valor
sobre
el
objeto.
-‐ Orientaciones
intencionales,
de
las
que
nace
la
tendencia
a
actuar
en
un
sentido
o
en
otro.
¿Cómo
se
forman
y
por
qué
cambian
las
actitudes
políticas?
-‐ La
formación
y
la
modificación
de
las
actitudes
políticas
se
atribuye
a
las
experiencias
de
carácter
personal
que
un
individuo
acumula
a
lo
largo
de
su
existencia.
-‐ La
generación
de
estas
predisposiciones
personales
también
se
vincula
a
la
pertenencia
del
sujeto
a
un
determinado
colectivo.
-‐ Las
actitudes
también
pueden
ser
el
resultado
de
la
influencia
del
propio
contexto
institucional.
Las
actitudes
políticas
de
un
individuo
no
siempre
están
organizadas
con
un
cierto
orden
y
coherencia
y
a
menudo
presentan
contradicciones
que
llevan
al
individuo
a
estar
sometido
a
tensiones
internas.
Estas
incongruencias
internas
producirán
malestar.
De
este
modo,
el
individuo
intentará
recomponer
el
equilibrio
de
sus
orientaciones,
buscando
la
coherencia.
¿De
qué
modo?
En
cada
individuo
puede
llegar
a
identificarse
un
determinado
sistema
de
actitudes
o
predisposiciones
que
suele
ser
compartido
por
varios
sujetos.
De
esta
forma:
• La
cultura
política
es
el
atributo
de
un
conjunto
de
ciudadanos
que
siguen
una
misma
pauta
de
orientaciones
o
actitudes
ante
la
política.
• Las
orientaciones
o
actitudes
que
se
combinan
en
una
cultura
política
son
:
cognitivas,
afectivas,
evaluativas
e
intencionales.
• Se
puede
medir
o
verificar
la
existencia
de
una
misma
cultura
política
a
partir
de
los
datos
obtenidos
en
encuestas
que
identifican
las
actitudes
individuales
de
los
3
encuestados.
La
repetición
de
pautas
o
combinaciones
actitudinales
a
nivel
individual
nos
da
a
entender
la
presencia
de
una
cultura
política.
• En
relación
al
concepto
de
cultura
política
es
importante
evitar
dos
confusiones:
o La
cultura
política
no
equivale
a
una
mayor
o
menor
acumulación
de
conocimientos
sobre
la
política.
o La
cultura
política
es
siempre
un
atributo
colectivo
que
corresponde
a
un
grupo,
no
a
un
individuo.
Culturas,
subculturas
:
¿de
dónde
proceden?
• La
reproducción
de
culturas
y
subculturas
políticas
es
tarea
de
las
agencias
de
socialización,
que
se
encargan
de
transmitir
pautas
de
conducta
específicas
entre
los
miembros
del
colectivo.
A
partir
del
siglo
XX,
esta
labor
corresponde
a
la
escuela,
los
medios
de
comunicación,
los
partidos
políticos
de
masas,
las
iglesias
y
organizaciones
religiosas,
los
sindicatos,
etc.
• Las
culturas
políticas
están
sujetas
a
modificación.
Las
influencias
de
la
tecnología,
,de
la
estructura
productiva
o
de
la
misma
acción
de
las
instituciones
políticas
acaban
alterando
-‐a
medio
o
largo
plazo-‐
algunos
elementos
esenciales
de
esta
pauta
de
actitudes,
y
por
lo
tanto,
de
la
cultura
política.
Según
sea
el
sistema
de
actitudes
políticas
predominante
en
cada
sociedad
variará
la
conducta
de
los
actores
y
su
forma
de
reacción,
en
función
de
cómo
entienden
la
política
y
cómo
se
sitúan
ante
ella.
De
esta
forma,
la
cultura
política
incide
en
el
rendimiento
y
estabilidad
de
un
sistema
institucional.
Es
importante
identificar
la
cultura
política
que
comparten
las
elites
de
cada
comunidad
y
si
esta
cultura
se
relaciona
con
un
interés
social
general,
que
va
más
allá
del
que
se
atribuye
a
su
propio
grupo,
clan,
partido,
etc.
En
caso
afirmativo,
el
ejercicio
del
poder
no
se
convertirá
en
un
aprovechamiento
de
los
recursos
públicos
en
beneficio
personal
o
familiar.
La
cultura
política
del
conjunto
social
y
de
las
élites
tienen
gran
influencia
en
el
desarrollo
del
sistema
político.
Cultura
política,
capital
social,
confianza
interpersonal
Existe
un
relación
entre
las
culturas
políticas
y
la
estabilidad
y
el
rendimiento
de
los
sistemas
políticos
democráticos:
• Hay
autores
(Banfield,
Almond-‐Verba,
Inglehart,
Putnam)
que
constatan
que
las
democracias
son
más
estables
donde
existe
una
mayor
densidad
de
un
capital
social
que
se
genera
en
la
tendencia
de
los
ciudadanos
a
asociarse
en
entidades
económicas,
culturales,
cívicas
…etc.,
constituyendo
una
tupida
red
de
conexiones
interpersonales.
Esta
actitud
a
la
cooperación,
también
llamada
confianza
social
(social
trust
en
inglés)
expresaría
la
confianza
en
que
los
demás
van
a
reaccionar
también
de
forma
cooperativa,
en
lugar
de
hacerlo
en
beneficio
propio.
En
consecuencia,
cuanta
más
confianza
social,
más
capital
social
y
mejor
preparada
estaría
una
sociedad
para
obtener
un
buen
rendimiento
de
las
instituciones
democráticas.
4
• Para
otros
autores,
(Ostrom,
Rothstein),
la
confianza
social
que
fundamenta
las
democracias
más
estables
se
relaciona
más
con
el
grado
de
igualdad
socioeconómica
de
una
sociedad
que
con
su
densidad
asociativa.
A
más
igualdad,
mayor
confianza
interpersonal
y
con
ella
un
mayor
compromiso
con
el
funcionamiento
de
las
instituciones
responsables
de
los
asuntos
comunes.
• El
capital
social,
por
tanto,
expresa
la
existencia
de
un
conjunto
de
valores
compartidos
que
se
aproxima
a
la
noción
de
cultura
política
cívica
o
participativa
(según
Putnam).
En
este
sentido,
la
noción
de
capital
social
serviría
para
conciliar
la
explicación
del
interés
propio
y
la
explicación
del
valor
de
la
solidaridad.
El
altruismo
-‐a
corto
plazo-‐
que
lleva
a
cooperar
se
combinaría
con
la
utilidad
-‐a
largo
plazo-‐
de
conservar
la
cohesión
social
y
la
estabilidad
de
las
instituciones
(Ostrom).
Capítulo
18.
Los
valores
y
las
ideologías
Valores
y
sistema
de
valores
• Definimos
valor
como
la
cualidad
atractiva
o
deseable
que
asignamos
a
determinadas
situaciones,
acciones
o
personas.
• Los
valores
han
sido
presentados
como
herramientas
que
generan
coherencia
en
el
sistema
de
actitudes
de
un
sujeto
y,
en
consecuencia,
como
los
últimos
factores
explicativos
de
sus
comportamientos.
o Ej.
Divisoria
tradicional
entre
izquierda
y
derecha=>
Para
la
derecha,
el
acento
se
pone
en
los
valores
de
libertad
y
seguridad.
Para
la
izquierda,
se
priman
los
valores
de
igualdad
y
justicia
=>
Estos
valores
orientan
los
fines
de
la
actividad
de
los
individuos/grupo
y,
con
ello,
la
dirección
de
su
conducta.
• La
adhesión
estable
a
unos
valores
nos
ayuda
a
procesar
y
a
ordenar
los
datos
variables
de
la
información
política
recibida.
• En
el
terreno
del
comportamiento
político
nos
interesan
los
valores
como
fenómenos
sociales
y
históricos.
Los
valores
no
son
construcciones
individuales:
son
el
resultado
de
un
diálogo
colectivo
en
el
seno
de
un
grupo
generacional,
familiar,
religioso,
social,
etc.
5
• Cuando
un
sistema
de
valores
se
debilita,
aquellas
conductas
e
instituciones
empiezan
a
ser
percibidas
como
rechazables
y
pueden
llegar
a
desaparecer
del
panorama
político.
• Las
grandes
mutaciones
técnicas
y
económicas
han
comportado
cambios
en
los
sistemas
de
valores
dominantes.
En
menos
de
cien
años
hemos
asistido
a
dos
grandes
transformaciones.
o Tránsito
de
sociedades
agrarias
a
sociedades
industriales
o Tránsito
de
sociedades
industriales
a
sociedades
postindustriales
o
de
la
información.
• En
sociedades
agrarias
predomina
cuadro
de
valores
=>
respeto
a
la
tradición,
el
orden,
la
jerarquía,
la
deferencia
ante
la
autoridad,
la
visión
religiosa
del
mundo,
o
la
solidaridad
familiar
entre
otros.
• En
sociedades
industriales
predominan
valores
=>
Basados
en
las
necesidades
básicas
del
individuo:
seguridad
física
y
económica;
valores
de
progreso
y
cambio,
competitividad
socioeconómica,
productivismo,
racionalidad
y
secularidad,
solidaridad
de
clase
social,
afán
de
bienestar
material
inmediato,
libertad
política,
etc.
• En
sociedades
postindustriales
predominio
de
valores
=>
realización
personal,
diferenciación
individual
frente
al
grupo,
autonomía
en
el
trabajo,
libertad
en
las
formas
de
relación
social
y
sexual
mayor
preocupación
por
la
calidad
de
vida
y
la
preservación
del
medio
…etc.
• Contraste
entre
valores
materialistas
(sociedad
industrial)
y
postmaterialistas
(sociedad
postindustrial)
(Inglehart,
1977).
En
una
misma
sociedad
suelen
coexistir
sistemas
de
valores
diferentes,
que
se
disputan
la
hegemonía
entre
la
población.
Esta
disputa
es
política,
y
expresa
un
conflicto
entre
los
valores
o
sistemas
de
valores
que
una
sociedad
alberga.
Esta
tensión
se
produce
tanto
en
el
interior
de
una
misma
comunidad
política
como
en
el
plano
planetario,
es
lo
que
algunos
llamaron
“choque”
de
civilizaciones
(S.P.
Huntington,
1996).
Ideologías: los sistemas de valores como instrumento para la acción
• Entendemos
por
ideología
política
un
conjunto
compartido
de
conceptos
y
valores
que
pretenden
describir
el
universo
político,
señalar
objetivos
para
intervenir
en
el
mismo
y
definir
las
estrategias
necesarias
para
alcanzarlos.
• Las
ideologías
pretenden
explicarnos
la
realidad
social
y
política
tal
como
creen
que
es
y,
al
mismo
tiempo,
nos
señalan
cómo
debería
ser.
6
• Sostener
un
determinado
punto
de
vista
sobre
la
capacidad
de
la
acción
política
para
influir
sobre
el
desarrollo
de
cada
sociedad.
• Para
la
visión
más
extendida,
el
factor
determinante
en
la
formación
de
una
ideología
es
la
defensa
de
los
intereses
propios
=>
un
grupo
sostiene
una
determinada
ideología
como
la
más
recomendable
para
todos,
porque
-‐sin
tener
clara
conciencia
de
ello-‐
resulta
ser
la
más
conveniente
para
su
propia
situación.
• Otras
aproximaciones
prefieren
localizar
el
origen
de
una
ideología
en
una
situación
histórica
determinada
en
la
que
las
aspiraciones
mayoritarias
de
la
sociedad
no
son
satisfechas
por
el
sistema
político.
1) Los
liberalismos
=>
Se
originan
en
la
Ilustración
europea
como
propuesta
a
un
orden
político
diferente
al
de
las
monarquías
absolutas
de
corte
tradicional.
Resaltan
el
protagonismo
del
individuo:
su
libertad
es
el
valor
supremo,
sin
otro
límite
que
la
libertad
de
los
demás.
LA
autoridad
política
debe
limitarse
a
garantizar
las
reglas
básicas
para
que
se
de
la
competencia
entre
individuos
libres
y
racionales.
2) Los
convervadurismos
=>
Aparecen
como
la
reacción
al
liberalismo
por
parte
de
quienes
se
sienten
amenazados
en
su
condición
social
privilegiada:
nobleza
terrateniente,
jerarquías
eclesiásticas.
El
orden
social
se
basa
en
el
respeto
a
las
tradiciones
par
parte
de
todos
los
actores
y
manifiesta
poca
o
nula
confianza
en
el
progreso.
3) Los
socialismos
=>
Reaccionan
contra
los
resultados
del
liberalismo:
explotación,
desigualdad,
marginación.
El
orden
social
no
se
basa
ni
en
la
competencia
libre
ni
en
la
tradición:
se
basa
en
la
solidaridad
humana
y
en
una
comunidad
igualitaria
de
bienes
y
recursos.
Hay
que
actuar
para
conducir
a
las
sociedades
a
nueves
estadios
de
desarrollo
que
aseguren
su
bienestar
colectivo.
Para
alcanzar
este
orden
solidario,
la
intervención
de
autoridad
política
es
decisiva.
4) Los
anarquismos
=>
Entienden
que
una
sociedad
libre
y
armónica
ha
de
ser
resultado
del
acuerdo
voluntarios
entre
sujetos.
Cualquier
forma
de
autoridad
o
coacción
perturba
el
orden
social.
5) Los
fascismos
=>
Se
presentaron
como
una
solución
al
enfrentamiento
entre
liberales
y
socialistas.
Promovían
una
visión
del
mundo
político
en
la
que
el
individuo
se
debe
a
la
comunidad
nacional
y
al
líder
indiscutible
que
la
encarna.
6) Los
nacionalismos
=>
La
nación
-‐como
comunicad
con
pasado
histórico
propio
y
como
proyecto
colectivo
común-‐
se
convierte
en
expresión
simbólica
central
y
protagonista
de
la
acción
política.
7) Los
fundamentalismos
religiosos
=>
El
sujeto
político
principal
está
constituido
por
la
comunidad
de
los
creyentes
de
una
determinada
confesión
religiosa.
Las
creencias
que
unen
a
los
miembros
de
esta
comunidad
determinan
sus
formas
de
organización
familiar,
económica
y
política.
7
8