Derecho Del Consumidor
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Recomendaciones
3. Las fechas de publicación de los trabajos académicos (PRIMER AVANCE Y TRABAJO ACADÉMICO) en el
Aula Virtual de la Plataforma Blackboard están definidas de acuerdo al cronograma académico 2020-1.
No se aceptarán trabajos extemporáneos.
4. Recuerde que no debe copiar de internet. Las copias de internet son verificadas con el Sistema
1. Explique Ud. el rol de INDECOPI frente al consumidor; redacte un caso.
Mínimo 20 líneas. ( 05 puntos)
2. Transcribiendo y analizando la Resolución 2249-2012/SC2-INDECOPI y su
EXPEDIENTE 229- 2011/PS-INDECOPI-PIU, responda: (05 Puntos) A.) Cuáles
son las normas, jurisprudencias, casos y otros utilizados para la expedición de
la presente resolución, desarrollándolas cada una de ellas. B) Su comentario
respecto de lo resuelto
3.Transcribiendo y analizando la Resolución 1008-2014/SPC-INDECOPI y su
EXPEDIENTE 77- 2013/CPC-INDECOPI-LAL, responda:(05 Puntos) A) Cuáles
son las normas, jurisprudencias, casos y otros utilizados para la expedición de
la Resolución antes indicada, desarrollándola cada una de ellas. B) Su
comentario y apreciación sobre la Resolución en mención.
4.Desarrolle Ud. las directrices de las Naciones Unidas, para la protección del
consumidor.( 05 puntos)
DESARROLLO:
1.- En caso de que un consumidor considere que ha sido vulnerado sus
derechos como consumidor, puede presentar una denuncia ante INDECOPI
por dos vías:
MEDIDAS CORRECTIVAS:
2.-
Se declara fundado el recurso de revisión planteado contra la
Resolución 21-2012/INDECOPI-PIU, toda vez que la Comisión de la Oficina
Regional del Indecopi de Piura interpretó erróneamente los artículos 186º
y
189º de la Ley del Procedimiento Administrativo General, debido a que el
desistimiento convencional puede realizarse en cualquier instancia y no
es
incompatible con la naturaleza del procedimiento sobre protección al
consumidor iniciado por denuncia de parte.
3.-
Se confirma la resolución venida en grado, en el extremo que declaró
improcedente la denuncia interpuesta por la señora Rosa Marisol Castro
Salinas contra Pontificia Universidad Católica del Perú por el presunto
cobro indebido de una deuda, toda vez que a la fecha de presentación de
la denuncia, la potestad del Indecopi para sancionar dicha conducta
había prescrito.
Las normas, jurisprudencias, casos utilizados dentro de la emisión de la
presente resolución fueron la infracción continuada ya que son aquellas
infracciones cuya realización se prolonga en el tiempo mientras se persista en
la condición que establezca el supuesto infractor. Ejemplo de este tipo de
infracción sería el no llevar los libros y registros contables de acuerdo a las
normas legales pertinentes.
Artículo 121º de la Ley 29571 cual dispone que la acción para sancionar las
infracciones a dicha norma prescribe a los dos (2) años de cometidos dichos
ilícitos.
1. CONCEPTO:
En 1985 nuestra lucha en favor de la protección y defensa de los
consumidores obtuvo un gran desarrollo cuando Naciones Unidas
aprobó las Directrices para la Protección de los Consumidores en el
ámbito internacional. Estas Directrices actúan como un referente
internacional del movimiento de consumidores, pero con los nuevos
avances en tecnología y prácticas de negocios, hay una fuerte
sustentación para proceder a revisarlas a fin de asegurar que siguen
siendo eficaces para los desafíos que enfrentan los consumidores. Las
Directrices fueron adoptadas por la ONU en 1985 después de 10 años
de trabajo de campaña de CI, otorgándole una importante legitimidad a
los principios de los derechos del consumidor y sirviendo asimismo
como guía para el desarrollo de legislaciones nacionales de protección
al consumidor. En 1999 las Directrices fueron actualizadas con una
nueva sección sobre Consumo y Producción Sustentables (sección G)
para reflejar las preocupaciones ambientales que surgieron durante la
década de 1990.Las Directrices han sido interpretadas por CI y
traducidas en claros derechos de los consumidores:
2. DIRECTRICES
Las siguientes directrices serán aplicables tanto a los bienes y
servicios producidos en el país como a los importados.
Al aplicar cualesquiera procedimientos o reglamentos para la
protección del consumidor, deberá velarse por que no se
conviertan en barreras para el comercio internacional y que sean
compatibles con las obligaciones del comercio internacional.
A. Seguridad física
Los gobiernos deben adoptar o fomentar la adopción de medidas
apropiadas, incluidos sistemas jurídicos, reglamentaciones de
seguridad, normas nacionales o internacionales, normas
voluntarias y el mantenimiento de registros de seguridad, para
garantizar que los productos sean inocuos en el uso al que se
destinan o normalmente previsible.
Se deben adoptar medidas adecuadas para garantizar que los
artículos producidos por los fabricantes sean inocuos para el uso
al que se destinan y para el normalmente previsible. Los
responsables de introducir los artículos en el mercado, en
particular los proveedores, exportadores, importadores, minoristas
y similares (en lo que sigue denominados “distribuidores”) deben
velar por que, mientras están a su cuidado, esos artículos no
pierdan su inocuidad debido a manipulación o almacenamiento
inadecuados. Se deben facilitar a los consumidores instrucciones
sobre el uso adecuado de los artículos e información sobre los
riesgos que entraña el uso al que se destinan o el normalmente
previsible. Dentro de lo posible, la información de vital importancia
sobre cuestiones de seguridad debe comunicarse a los
consumidores mediante símbolos comprensibles
internacionalmente.
Se deben adoptar medidas adecuadas para que los fabricantes o
distribuidores notifiquen sin demora a las autoridades
competentes y al público, según proceda, la existencia de peligros
no previstos de que se hayan percatado con posterioridad a la
introducción de los productos en el mercado. Los gobiernos
también deben estudiar los métodos para garantizar que los
consumidores estén debidamente informados sobre esos
peligros.
Los gobiernos deben adoptar, cuando proceda, políticas en virtud
de las cuales, si se descubre que un producto adolece de un
defecto grave y/o constituye un peligro considerable aun cuando
se utilice en forma adecuada, los fabricantes y/o distribuidores
deban retirarlo y reemplazarlo o modificarlo, o sustituirlo por otro
producto; si no es posible hacerlo en un plazo prudencial, debe
darse al consumidor una compensación adecuada.
B. Promoción y protección de los intereses económicos de los
consumidores
Las políticas de los gobiernos deben tratar de hacer posible que
los consumidores obtengan el máximo beneficio de sus recursos
económicos. También deben tratar de alcanzar las metas en
materia de producción satisfactoria y normas de funcionamiento,
procedimientos adecuados de distribución, prácticas comerciales
leales, comercialización informativa y protección efectiva contra
las prácticas que puedan perjudicar los intereses económicos de
los consumidores y la posibilidad de elegir en el mercado.
Los gobiernos deben intensificar sus esfuerzos para impedir el
empleo de practices que perjudiquen los intereses económicos de
los consumidores, garantizando que los productores, los
distribuidores y cuantos participan en la provisión de bienes y
servicios cumplan las leyes y las normas obligatorias vigentes. Se
debe dar aliento a las organizaciones de consumidores para que
vigilen prácticas perjudiciales como la adulteración de alimentos,
la comercialización basada en afirmaciones falsas o capciosas y
los frauds en la prestación de servicios.
Los gobiernos deben elaborar, reforzar o mantener, según
proceda, medidas relatives al control de las prácticas comerciales
restrictivas y otras de tipo abusivo que puedan perjudicar a los
consumidores, así como medios para hacer efectivas esas
medidas. Al respecto, los gobiernos deben guiarse por su
adhesión al Conjunto de principios y normas equitativos
convenidos multilateralmente para el control de las prácticas
comerciales restrictivas, aprobado por la Asamblea General en su
resolución 35/63, de 5 de diciembre de 1980.
Los gobiernos deben adoptar o mantener políticas que
especifiquen las responsabilidades del fabricante para asegurar
que los artículos satisfagan los requisitos normales de
durabilidad, utilidad y fiabilidad y sean aptos para el fin a que se
destinan y que el vendedor vele por que estos requisitos se
cumplan. Las mismas políticas deben regir la prestación de
servicios.
Los gobiernos deben alentar la competencia leal y efectiva a fin
de brindar a los consumidores la posibilidad de elegir productos y
servicios dentro del mayor surtido y a los precios más bajos.
Los gobiernos deben velar, si procede, porque los fabricantes o
minoristas aseguren la disponibilidad adecuada de un servicio
confiable posterior a la venta y de piezas de repuesto.
Los consumidores deben gozar de protección contra abusos
contractuales como el uso de contratos uniformes que favorecen
a una de las partes, la no inclusión de derechos fundamentales en
los contratos y la imposición de condiciones excesivamente
estrictas para la concesión de créditos por parte de los
vendedores.
Las prácticas de promoción empleadas en la comercialización y la
venta deben basarse en el principio del trato justo de los
consumidores y deben satisfacer los requisitos jurídicos. Ello
requiere el suministro de la información necesaria para que los
consumidores puedan tomar decisiones bien fundadas e
independientes, así como la adopción de medidas para asegurar
la exactitud de la información suministrada.
Los gobiernos deben alentar a todos los interesados a participar
en la libre circulación de información exacta sobre todos los
aspectos de los productos de consumo.
Debe procurarse que los consumidores tengan más acceso a
información inequívoca sobre los efectos de los productos y los
servicios en el medio ambiente, recurriendo a medios como la
elaboración de perfiles ambientales de los productos, la
presentación de informes sobre el medio ambiente por parte de la
industria, el establecimiento de centros de información para los
consumidores, la ejecución de programas voluntarios y
transparentes de etiquetado ecológico y los servicios de consulta
telefónica directa sobre los productos.
Los gobiernos, en estrecha colaboración con los fabricantes, los
distribuidores y las organizaciones de consumidores, deben
adoptar medidas contra las afirmaciones o la información
capciosas en relación con el medio ambiente en las actividades
de publicidad y otras actividades de comercialización. Debe
fomentarse la elaboración de códigos y normas de publicidad
adecuadas para reglamentar y verificar las afirmaciones que se
hacen en relación con el medio ambiente.
Los gobiernos deben, dentro de sus propios países, promover la
formulación y aplicación por parte de las empresas, en
colaboración con las organizaciones de consumidores, de códigos
de comercialización y otras prácticas comerciales para asegurar
una adecuada protección del consumidor. También pueden
concertarse acuerdos voluntarios conjuntos por parte de las
empresas, las organizaciones de consumidores y otras partes
interesadas. Estos códigos deben recibir una publicidad
adecuada.
Los gobiernos deben examinar periódicamente las normas
jurídicas relacionadas con pesas y medidas y determinar la
eficacia de sus mecanismos de aplicación.
C. Normas para la seguridad y calidad de los servicios y bienes de
consumo
Los gobiernos deberán, según proceda, formular o promover la
formulación y aplicación, en los planos nacional e internacional,
de normas, voluntarias o de otra índole, de seguridad y calidad de
los bienes y servicios y dar a dichas normas la publicidad
apropiada. Las normas y reglamentaciones nacionales relativas a
la seguridad y calidad de los productos deberán revisarse de
tanto en tanto para cerciorarse de que, en lo posible, se ajusten a
normas internacionales de aceptación general.
Cuando debido a las condiciones económicas locales se aplique
una norma de nivel inferior al de una norma internacional de
aceptación general, deberán hacerse todos los esfuerzos
necesarios para elevar dicho nivel lo antes posible.
Los gobiernos deben fomentar y garantizar la disponibilidad de
servicios para ensayar y certificar la seguridad, la calidad y el
buen funcionamiento de los servicios y bienes de consumo
esenciales.
D. Sistemas de distribución de servicios y bienes de consumo
esenciales
Cuando proceda, los gobiernos deberán examinar la posibilidad
de:
a) Adoptar o mantener políticas para asegurar la distribución
eficiente de bienes y servicios a los consumidores; cuando
proceda, deberán estudiarse políticas especiales para
asegurar la distribución de bienes y servicios
absolutamente esenciales cuando dicha distribución se vea
amenazada, como podría ocurrir, sobre todo, en el caso de
las zonas rurales. Tales políticas podrían incluir la
prestación de asistencia para la creación de instalaciones
apropiadas de almacenamiento y venta al por menor en los
centros rurales, la estimulación del autovalimiento del
consumidor y el perfeccionamiento del control de las
condiciones en que se suministran los bienes y servicios
esenciales en las zonas rurales;
b) Fomentar la creación de cooperativas de consumidores y
las actividades comerciales afines y la información al
respecto, especialmente en las zonas rurales.
E. Medidas que permiten a los consumidores obtener compensación
Los gobiernos deben establecer o mantener medidas jurídicas o
administrativas para permitir que los consumidores o, en su caso,
las organizaciones competentes obtengan compensación
mediante procedimientos oficiales o extraoficiales que sean
rápidos, justos, poco costosos y asequibles. Al establecerse tales
procedimientos deben tenerse especialmente en cuenta las
necesidades de los consumidores de bajos ingresos.
Los gobiernos deben alentar a todas las empresas a solucionar
las controversias con los consumidores en forma justa, rápida y
exenta de formalidades, y a crear mecanismos voluntarios, como
servicios de asesoramiento y procedimientos extraoficiales para
presentar reclamaciones, que puedan prestar asistencia a los
consumidores.
Se debe facilitar a los consumidores información sobre los
procedimientos vigentes y otros procedimientos para obtener
compensación y solucionar controversias.
F. Programas de educación e información
Los gobiernos deben formular o estimular la formulación de
programas generales de educación e información del consumidor,
incluida la información sobre los efectos en el medio ambiente de
las decisiones y el comportamiento de los consumidores y de las
consecuencias, incluidos costos y beneficios, que pueda tener la
modificación de las modalidades de consumo, teniendo en cuenta
las tradiciones culturales del pueblo de que se trate. El objetivo de
tales programas debe consistir en capacitar a los consumidores
para que sepan discernir, puedan hacer elecciones bien fundadas
de bienes y servicios, y tengan conciencia de sus derechos y
obligaciones. Al formular dichos programas, debe prestarse
especial atención a las necesidades de los consumidores que se
encuentran en situación desventajosa, tanto en las zonas rurales
como urbanas, incluidos los consumidores de bajos ingresos y
aquellos que sean casi o totalmente analfabetos. Los grupos de
consumidores, las empresas y otras organizaciones pertinentes
de la sociedad civil deben participar en esa labor de educación.
La educación del consumidor debe, si procede, llegar a formar
parte integrante del programa básico del sistema educativo, de
preferencia como componente de asignaturas ya existentes.
Los programas de educación e información del consumidor deben
abarcar aspectos de la protección del consumidor tan importantes
como los siguientes:
a) Sanidad, nutrición, prevención de las enfermedades
transmitidas por los alimentos y adulteración de los
alimentos;
b) Peligros de los productos;
c) Rotulado de productos;
d) Legislación pertinente, forma de obtener compensación y
organismos y organizaciones de protección al consumidor;
e) Información sobre pesas y medidas, precios, calidad,
condiciones para la concesión de créditos y disponibilidad
de los artículos de primera necesidad;
f) Protección del medio ambiente;
g) Utilización eficiente de materiales, energía y agua.
Los gobiernos deben alentar a las organizaciones de
consumidores y a otros grupos interesados, incluidos los medios
de comunicación, a que pongan en práctica programas de
educación e información, incluso sobre los efectos de las
modalidades de consumo en el medio ambiente y las
consecuencias, incluidos costos y beneficios, que pueda tener la
modificación de esas modalidades, particularmente en beneficio
de los grupos de consumidores de bajos ingresos de las zonas
rurales y urbanas.
El comercio, cuando proceda, debe emprender programas
objetivos y pertinentes de educación e información del
consumidor, o participar en ellos.
Teniendo en cuenta la necesidad de llegar a los consumidores
rurales y a los consumidores analfabetos, los gobiernos deberán,
cuando proceda, formular o alentar la formulación de programas
de información del consumidor destinados a los medios de
comunicación de masas.
Los gobiernos deben organizar o alentar la organización de
programas de formación para educadores, profesionales de los
medios de comunicación de masas y consejeros del consumidor,
que les permitan participar en la ejecución de los programas de
información y educación del consumidor.