20-Ajo, Cebolla, Miel y Limon

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Cápsulas de gelatina

Se consiguen en los negocios naturistas y farmacias. Son económicas y fáciles de digerir.


Resultan efectivas para ayudar en el tratamiento de la diabetes. Por su poder reductor de las
grasas y los triglicéridos en sangre, se indican para contribuir a regular los casos de
hipercolesterolemia y aterosclerosis. Dan buenos resultados, además, en casos de problemas
nerviosos, depresión, ansiedad, falta de memoria e insomnio.

Píldoras
Las píldoras de ajo se utilizan casi en la misma forma que las cápsulas de gelatina, aunque la
dosis que contienen es menor. Se consiguen en las farmacias y negocios naturistas.

La cura tibetana del ajo


No se sabe con precisión quién creó la cura tibetana del ajo, pero se conoce gracias a una receta
encontrada en un monasterio budista del Tíbet, hacia el año 1972. Según su autor, el preparado
“ayuda a limpiar el organismo de grasas y lo libera de cálculos. Mejora el metabolismo y, en
consecuencia, todos los vasos sanguíneos se hacen elásticos. Disminuye el peso del cuerpo
llevándolo a su peso normal. Deshace los coágulos de la sangre, cura el diafragma y las
enfermedades de miocardio, la arteriosclerosis, la isquemia, la sinusitis, la hipertensión y las
enfermedades broncopulmonares. Hace desaparecer por completo el dolor de cabeza, cura
trombosis del cerebro, la artritis, la artrosis y el reumatismo. Cura la gastritis, la úlcera de
estómago y las hemorroides. Absorbe todo tipo de tumores internos. Cura los disturbios de vista
y oído, la impotencia y todo el organismo se recupera”. A pesar del optimismo de quien escribió
esas palabras, lo cierto es que la cura del ajo es una gran ayuda para la salud, pero de ninguna
manera constituye una cura milagrosa ni mucho menos un reemplazo a los tratamientos
tradicionales. Por ejemplo, estudios recientes parecen asociar el consumo del ajo con la
inhibición del cáncer, lo cual no significa que, como dice el autor de la receta, la cura tibetana
“absorba todos los tumores”. Según la ciencia, los compuestos azufrados parecen ser los
responsables en la lucha contra la aparición de células cancerosas en estómago, hígado, pecho y
otras partes del cuerpo.
Hasta tanto no se terminen de estudiar todas las propiedades del ajo y se pueda saber a ciencia
cierta si la cura tibetana es aplicable a todas las patologías para las cuales fue creada, es
recomendable realizar la cura sin dejar de lado las indicaciones de nuestro médico. Hecha esta
aclaración, podemos adentrarnos en la receta:

Ingredientes:
350 gramos de ajos crudos, pelados y triturados.
¼ de litro de aguardiente o alcohol de 70º para uso interno.
Preparación:
Colocar los ajos triturados y el alcohol en un frasco de cristal. Cerrar bien y dejar el frasco en la
heladera, durante 10 días. Al cabo de ese tiempo, filtrar con un colador de gasa o tela fina (por
ejemplo, utilizando una media de mujer). Colocar el líquido resultante nuevamente en el frasco y
guardar en la heladera dos días más.

Modo de empleo:
El preparado se toma en gotitas con un poco de agua o leche, antes de las tres comidas
principales siguiendo las pautas de la siguiente tabla
DÍAS DESAYUNO ALMUERZO CENA

1 1 gotas 2 gotas 3 gotas

2 4 gotas 5 gotas 6 gotas

3 7 gotas 8 gotas 9 gotas

4 10 gotas 11 gotas 12 gotas

5 13 gotas 14 gotas 15 gotas

6 16 gotas 17 gotas 18 gotas

7 17 gotas 16 gotas 15 gotas

8 14 gotas 13 gotas 12 gotas

9 11 gotas 10 gotas 9 gotas

10 8 gotas 7 gotas 6 gotas

11 5 gotas 4 gotas 3 gotas

12 2 gotas 1 gotas 25 gotas

A partir del día 12, tomaremos 25 gotas tres veces al día hasta terminar el frasco. El manuscrito
aclara que la cura puede realizarse una sola vez cada 5 años. Científicamente, sin embargo, no
existe ninguna contraindicación para realizar el tratamiento con mayor frecuencia, siempre que
se consulte con el médico.

Consejos y precauciones
Quienes poseen un estómago muy débil o fácilmente irritable deberán estar atentos a la
respuesta del organismo ante el preparado e interrumpir su consumo ante la aparición de
síntomas. Tampoco deben tomarlo quienes padecen úlceras intestinales. A su vez, las personas
que se encuentran tomando medicamentos (sobre todo anticoagulantes) deben consultar
especialmente a un médico antes de llevar a cabo la cura. Incluso quienes toman aspirina con
frecuencia deben prestar atención a posibles inconvenientes, ya que se trata de un fármaco que
licúa la sangre. Otras personas que tienen que evitar la cura son quienes sufren hipertiroidismo y
quienes vayan a someterse a una intervención quirúrgica.
Capítulo 3
El segundo pilar de la salud total: La cebolla
La cebolla (Allium cepa) es uno de los vegetales de uso más difundido en todo el mundo. Este
vegetal bulboso, de sabor acre y tallo muy largo, no es comúnmente reconocido por su poder
fitomedicinal. Sin embargo, es uno de los vegetales con mayor riqueza en principios activos
medicinales. Originaria de Persia, ha sido a lo largo de la historia una de las plantas comestibles
más conocidas y apreciadas, por lo que cosechó una merecida fama como producto alimenticio y,
en muchas culturas, también gracias a sus usos medicinales.
Conocedores de sus propiedades biológicas, curativas y preventivas, los egipcios, sumerios,
asirios, babilonios, hebreos, griegos y romanos comían cebolla en grandes cantidades. El estudio
de las inscripciones encontradas en las tumbas faraónicas deja constancia de la presencia de esta
hortaliza en el Antiguo Egipto: se servía como alimento a los constructores de pirámides y los
faraones se la ofrecían a los dioses en sus ofrendas. En Persia era considerada una planta mágica
y sagrada. En Grecia, los atletas que participaban en las duras competiciones de los juegos
olímpicos, consumían kilos de la hortaliza, tomaban su jugo y untaban sus cuerpos con
ungüentos elaborados con ella. En ese contexto escribió Pitágoras un libro sobre esta hortaliza y
algunas de las 250 variedades que ya se conocían. En la Edad Media era un alimento
imprescindible que tanto podía formar parte de los menúes palaciegos como de los platos más
modestos e, incluso de los brebajes mágicos que preparaban brujas y alquimistas.
Principalmente, se aprovechaban sus propiedades antisépticas contra la peste y el cólera.
El cultivo de la cebolla no requiere cuidados muy específicos, por lo que resulta muy fácil
encontrarla en distintos y variados puntos del Planeta. Existen infinidad de clases de este bulbo,
dependiendo de su país y región de origen, que se diferencian tanto por su forma, como por su
color y sabor.
Es posible adquirir cebollas aplanadas (como los echalotes o cebollas escalonia), alargadas
(como la cebolla tierna) y redondas. Esta última –con mayor o menor diámetro– es la forma más
característica de esta hortaliza.

Composición química de la cebolla


Un primer análisis químico del bulbo de la cebolla muestra una gran abundancia de sales
minerales (potasio, azufre, fósforo, cloro, calcio, sílice, sodio, magnesio, hierro, aluminio,
manganeso, cobre, boro, cobalto, cromo y yodo), vitaminas (A, B1, B2, B3 y C), oxidasas,
diastasas, glúcidos, nitrógeno y grasa. Asimismo, contiene un aceite altamente volátil llamado
alicina –que también está presente en el ajo– que le confiere cualidades antibactericidas y
antifungicidas. La alicina es la responsable de la irritación que genera el lagrimeo cuando se la
corta cruda. Este fenómeno se produce porque la alicina es irritante para las mucosas
conjuntivales y las vías aéreas superiores, además de provocar fotofobia (intolerancia a la luz)
con estornudos y secreción nasal abundante. Este principio activo de la cebolla es el que utiliza
la homeopatía para el tratamiento de la rinitis, sinusitis y conjuntivitis. Es una de las pocas
hortalizas de color blanco por su contenido en antoxantonas. Está formada mayoritariamente por
agua, alrededor de un 88 por ciento, lo que contribuye al equilibrio hídrico del organismo y
explica su bajo contenido en calorías (25 por cada 100 gramos consumidos). Por eso la cebolla es
un alimento adecuado en las dietas de adelgazamiento. Es interesante su contenido en
glucoquinina, una sustancia hipoglucemiante considerada la “insulina vegetal”, pues ayuda a
combatir la diabetes. Sus enzimas favorecen la fijación de oxígeno por parte de las células,
colaborando en la función respiratoria.
Los componentes principales de la cebolla son: agua (89%), glúcidos (8,6 g), fibra (1,6 g),
proteínas (1,2 g) y grasas (0,2 g), con 38 calorías por 100 g. La mejor manera de comer esta
hortaliza es cruda, en forma de ensalada y antes de las comidas, pues estimula la secreción
salival y gástrica y prepara al organismo para la digestión.

Todas las propiedades


La cebolla tiene gran poder terapéutico y es uno de los alimentos más saludables que existen:

Aumenta las defensas


Muchas de las acciones terapéuticas de la cebolla son comparables a las que produce el ajo, en
especial en lo que hace a estimular el apetito y favorecer la digestión. Cuando los principios
activos de la cebolla llegan a la sangre, actúan como un amplificador del sistema inmunológico,
fortaleciéndola contra las posibles infecciones.

Efectiva contra el resfrío


Debido a que los sulfóxidos de la cebolla –sustancias antibióticas y expectorantes– se eliminan
por el aliento, esta hortaliza se ha utilizado tradicionalmente como remedio para curar el resfrío y
la bronquitis.

Es laxante
A pesar de que posee muy poca fibra, ésta es insoluble en agua, por lo que previene el
estreñimiento y regula las funciones intestinales.

Resulta efectiva en el tratamiento contra la diarrea


Tomar en forma de caldo vegetal. Este remedio puede completarse con el consumo diario de
cebollas crudas, un excelente desinfectante intestinal.

Protege los huesos


Un estudio químico analítico de la cebolla nos muestra una composición rica en elementos que
resaltan sus cualidades únicas de alimento protector del organismo. Su contenido en calcio y
fósforo resulta de gran importancia para el mantenimiento de los huesos.

Favorece la piel
Su elevado contenido de sílice contribuye al mantenimiento del tejido conjuntivo y de las fibras
colágenas, que forman la piel. Rica en potasio, es un vegetal especialmente indicado para
prevenir trastornos en las mucosas y dérmicos. En cosmética su aplicación tópica se utiliza para
hacer desaparecer manchas en la piel.

Antibiótico natural
La cebolla es también conocida como un poderoso “fitoncida”, es decir, sus brotes poseen
propiedades antibióticas naturales, y por esa razón sus efectos son adecuados para el organismo.
Combate enfermedades infecciosas como el resfrío, la bronquitis y las infecciones gástricas.

Tiene una reconocida acción sobre el funcionamiento renal


Por el hecho de contener sales alcalinas de potasio y de cloruro de sodio, interactúa con el
equilibrio ácido/base de la sangre, evitando peligrosos excesos de acidez o de alcalinidad.
Además, contiene compuestos orgánicos efectivos contra los cálculos de vesícula y riñón,
problemas de próstata, gota, reumatismo, várices y mala circulación. Por su composición salina,
favorece la diuresis.

Ayuda a conciliar el sueño


La cebolla actúa como tranquilizante sobre el sistema nervioso y relajante de las fibras
musculares lisas –responsables de los movimientos involuntarios– y por este motivo es
recomendable ingerirla en la cena, ya que predispone favorablemente para lograr un sueño
tranquilo y reparador. Este efecto tranquilizante transforma a la cebolla en un eficaz inductor
normalizador del sueño para aquellas personas que padecen problemas de insomnio.

Es buena para los diabéticos


La cebolla contiene glucoquinina, una hormona hipoglucemiante que es considerada la insulina
vegetal. Por lo tanto, la cebolla es excelente para tratar la diabetes.

Alivia la constricción bronquial


Sus enzimas permiten la fijación del oxígeno por parte de las células y juegan un papel
importante en el sistema respiratorio. Estudios científicos defienden el uso tradicional de la
cebolla recién cortada para prevenir el asma.

Es ligeramente hipotensora y flexibiliza las arterias


Cuando existen problemas cardiovasculares declarados, en altas dosis se la usa como
purificante, lo mismo que en casos de colesterolemia crónica (elevado nivel de colesterol en
sangre) ya que combate el aumento de esta grasa en la sangre. El nivel de colesterol y la
tendencia a formar coágulos de sangre suele aumentar tras la ingesta comidas de alto contenido
graso, efecto que reduce la inclusión de cebolla cruda o cocida. En un estudio realizado en 1995,
la cebolla redujo la hipertensión arterial en trece personas de veinte y el nivel de colesterol en
nueve de los dieciocho voluntarios.

Posee compuestos específicos que molecularmente son semejantes a ciertas hormonas


sexuales femeninas
Por esta razón actúa estimulando de modo natural las funciones de los ovarios. El caldo de
cebollas ofrece sorprendentes resultados en los atrasos menstruales, menstruaciones dolorosas y
síntomas de menopausia.

Favorece la resistencia al cáncer


Los consumidores regulares de cebolla tienen menos riesgo de padecer cáncer, quizá debido a
los compuestos del género allium y a los flavonoides presentes en la cebolla.
Otros beneficios
Los minerales presentes en la cebolla aseguran la elasticidad de los tejidos, equilibran la flora
bucal o intestinal, fluidifican y sanan la sangre, favorecen la fijación del calcio y el fósforo en las
células óseas, el equilibrio del medio interior y del plasma sanguíneo y la regularidad de las
secreciones endócrinas. El uso externo de su jugo es excelente para todo tipo de dolor reumático
y picaduras de insectos.
¿Cruda o cocida?
Los estudios indican que el consumo regular de 60 gramos de cebolla cruda o cocida junto con
la comida, o una media cebolla al día, surte efectos positivos para la salud. Comiendo más, sus
efectos medicinales no aumentan en la misma proporción.
Las cebollas crudas recién cortadas son las que poseen propiedades medicinales más amplias
y fiables, pero las cebollas cocidas también son beneficiosas. La actividad bactericida y
anticolesterol de esta hortaliza es efectiva esencialmente en la cebolla cruda, aunque los platos
ricos en cebolla cocida reducen los efectos perjudiciales de las comidas muy ricas en grasas.
Se atribuyen a la cebolla cocida propiedades calmantes de la mucosa digestiva, una propiedad
depurativa poco estudiada (aunque probable ya que aumenta la sudoración y la cantidad de
orina) y una propiedad suavizante de la piel y reductora de abscesos. Aunque los compuestos
azufrados de la cebolla (el metil y propil sulfóxido y sus derivados) se modifican en parte con
la cocción, siguen presentes en la cebolla cocida, que conserva la propiedad expectorante de la
cruda.
¿Por qué la cebolla hace llorar?
La cebolla contiene derivados metílicos y propílicos del sulfóxido de cisteína, sustancias que
se transforman por fermentación en otros compuestos –cepaenos–, responsables de las
lágrimas. Estos compuestos se modifican por acción del calor y, por ello, al cocinar una
cebolla ya no lloramos. Como están contenidos en el tejido celular del vegetal, es necesario
cortar la cebolla para que se liberen (si la desmenuzamos capa por capa nos hace llorar menos
que cortada a través). Y si la remojamos se diluyen en agua y también experimentamos menos
picazón. Lo mismo sucede cuando conservamos la cebolla en la heladera.
Capítulo 4
Remedios caseros con ajo y cebolla
Artritis
Para aliviar los dolores y molestias se recomienda tomar diez cápsulas diarias de ajo.

Colesterol alto
Para reducir el colesterol, las tabletas de polvo de ajo que se venden en las dietéticas son muy
efectivas y su uso continuado, seguido de una dieta adecuada, lo disminuyen en un 12%.
También puede preparar usted mismo las píldoras de ajo:
 Coloque en un recipiente una parte de ajo picado.
 Añada un poco de polvo de hojas de olmo (hojas secas y luego trituradas).
 Agregue un poco de raíz de malvavisco rallada (no debe exceder el 10% de la
preparación) y un poco de agua destilada.
 Para que la pasta tome consistencia y quede dura una vez seca, coloque una
cucharadita de goma arábiga disuelta en agua hirviendo.
 Ubique la preparación en moldes tan pequeños como sea posible. Puede utilizar
como molde el blister vacío de algún remedio industrial. Deje secar. Tome 4 por día.

Desinfectante
La cebolla es eficaz en la habitación de una persona resfriada. Basta con colocar varias rodajas
de cebolla con unos pocos clavos de olor. Además de actuar como aromatizador será un
ambientador medicinal.

Diabetes
Es efectivo y contribuye al tratamiento tomar tres cápsulas de ajo diarias. También se
recomienda la raíz, el jugo, el té, la sopa y el vino de ajo. La pimienta de Cayena potencia la
acción del ajo, por lo que es bueno ingerirla en la comida cuando se hace el tratamiento.

Diarrea
Se aconseja tomar dos tabletas diarias de ajo deshidratado. Otra opción es comer caldo de
cebollas. Este remedio puede completarse con el consumo diario de cebollas crudas, ya que
resultan un excelente desinfectante intestinal.

Falta de energía
Un remedio alternativo y eficaz es beber licor de ajo. La preparación es la siguiente:
 En un bol, coloque 8 dientes machacados de ajo fresco. Vierta dos litros de vino tinto
de buena calidad.
 Coloque cerca de una ventana para que le dé la luz del sol. Tape con un film plástico.
 Durante dos horas diarias quite también el film para que se produzca la evaporación
del alcohol y remueva un poco la preparación con una cuchara de madera.
 Repita esta operación durante unos 40 a 45 días. Al cabo de ese tiempo cuele la
preparación y colóquela en una botella de vidrio oscuro. Cierre bien.
 Tome dos gotas el primer día de tratamiento, cuatro el segundo y seis el tercero,
hasta llegar a 24. En ese momento comience a hacer el mismo proceso en sentido
inverso hasta llegar nuevamente a dos.

Fatiga
Se aconsejan dos cápsulas diarias de extracto de ajo de Japón. La esencia, el extracto, el licor, el
vinagre y el vino de ajo son también buenos controladores de la función respiratoria.

Hemorroides
Siga una alimentación natural a base de caldos oxidantes, ensaladas de verduras y frutas frescas,
y por supuesto, cebolla. También puede realizar baños de asiento de agua de cebolla. Coma
cebollas a diario crudas o beba caldo de cebollas con jugo de limón. Se puede lavar el área
afectada con agua tibia y jabón neutro, y aplicar luego jugo de ajo con un algodón. Dejar el
algodón entre tres y cinco minutos. Otra posibilidad es realizar baños de asiento con 2 litros de
agua tibia y 4 dientes de ajo machacados.

Inflamación renal
Una buena solución es triturar y macerar dos cebollas medianas durante seis días en un litro de
vino blanco seco. Una vez filtrado, se obtiene vino de cebolla del que deben tomarse unos 80 ml
diarios durante una semana. Otra opción es cortar una cebolla en rodajas, cocinar en medio litro
de agua con miel y colar la decocción. Se debe tomar una taza por la mañana y otra por la noche.
Tomada cocida, repercute favorablemente en el proceso digestivo.

Herida sangrante en un animal


Lavar bien con agua y jabón. Hervir medio kilo de ajos en un litro de agua, dejar reposar una
hora, añadir unas gotas de jugo de limón. Con la preparación humedezca una gasa y aplíquela
sobre la herida.

Hígado
Para problemas en el hígado se utiliza ajo en forma de extracto, cápsulas, infusión, tabletas y
tintura.

Hipertensión
Tome tres a cuatro cápsulas diarias de ajo. También se lo puede aprovechar en forma de
tabletas, aceite y extracto. Un baño parcial caliente con ajo –de más de 35 grados– de diez
minutos, dos veces por día, puede repercutir positivamente en los problemas de hipertensión.
Además, es útil para el alivio de los trastornos de la menopausia.

Hongos
Tome seis cápsulas diarias de ajo. Paralelamente, realice baños locales en las áreas afectadas,
utilizando una infusión de cuatro dientes de ajo en un litro de agua hirviendo que deberá entibiar
antes de aplicar.

Laringitis
El jarabe de ajo es muy bueno para tratar problemas de inflamación de la laringe. Si se trata de
niños, dele una cuchara de té cada seis horas. En adultos, una cuchara sopera cada tres horas está
bien. Prepare el jarabe de la siguiente manera:
 Coloque 15 dientes de ajo pelados en una ollita. Agregue miel hasta cubrir los ajos.
 Cocine durante 20 minutos a mínimo, revolviendo continuamente. Si se pega,
agregue un poquito de agua.

Otitis
Ponga cinco gotas de aceite de ajo en una cuchara y caliente un poquito. Mientras todavía estén
tibias, vierta las gotas en el oído. Para el resto de las aplicaciones debe utilizarlo a temperatura
ambiente.

Parásitos
Comer ajo crudo o ingerir 6 pastillas por día. Para utilizar dosis pediátricas de las pastillas,
consulte al médico. Cortar una cebolla grande pelada en trozos pequeños y pasarlos por la
licuadora. Mezcle con jugo de limón en iguales proporciones y beba una tacita por la mañana, en
ayunas.

Picaduras de insectos
Aplique ajo bien machacado sobre la zona afectada. Alterne la aplicación con paños fríos. Frote
media cebolla cruda sobre la picadura.

Piojos y liendres
Luego de lavar y enjuagar el cabello, aplique una infusión de ajo muy concentrada (½ kilo de
ajos en 1 litro de agua) a la que le agregará 2 cucharadas soperas de vinagre blanco y algunas
gotas de esencia de rosas. Seque y pase el peine fino.

Problemas de la piel
Acné: Para combatir este trastorno, tome seis tabletas diarias de cápsulas de ajo. La aplicación
de infusión de ajo en forma de compresa también puede ayudar.

Pústulas: aplique alcohol boricado –mitad de alcohol fino y mitad de agua destilada– mezclado
con la pulpa de ajos machacados. Esta preparación debe dejarse macerar dos días antes de ser
utilizada.

Para purificar el cutis: prepare una mascarilla facial con cebolla cocida y aplique sobre la piel.
Permite mantener la elasticidad y ayuda a depurar.

Forúnculos: hacer cataplasmas de bulbo de cebolla triturada y cocida en agua.

Sabañones: hacer emplastos con jugo de cebollas crudas con un poco de sal y miel.

Quemaduras: bañar con aceite de oliva o jugo de papas. Luego aplicar sobre la zona quemada
una cataplasma de cebolla machacada con un poco de sal.

Bronquitis
Ingerir todas las mañanas una ensalada de cebolla cruda con lechuga, rábanos y apio, aliñando
todo con jugo de limón y aceite de oliva. La cebolla con jugo de limón da resultados
sorprendentes. Haga defumaciones con ajo. Si hay indicios de asma, fúmelo con hojas de
eucalipto. Los baños calientes de ajo también pueden ayudar: levantan vapor con olor a ajo, lo
que beneficia el aparato respiratorio y mejora todas sus posibles disfunciones.

Dolor de garganta
Consuma cebolla cruda en ensalada: despeja las amígdalas así como todo el tramo respiratorio.

Catarros
Conviene hacer las defumaciones con hojas de menta.

Tabaquismo
Mezcle con hojas de lobelia o tabaco indio. Los componentes sulfúricos del ajo reducen la
dependencia respecto de la nicotina e incluso pueden llegar a producir rechazo por ella.

Tensiones y estrés
Es bueno hacer baños con ajo y hojas de menta. Coloque estos ingredientes en agua tibia. Esto
provocará un efecto de relax. Un baño parcial frío (es decir, el agua hasta las piernas) de apenas
unos minutos dos veces al día puede ayudar a calmar el dolor de cabeza y a conciliar el sueño.

Trastornos en las vías urinarias


Uno de los productos más idóneos para prevenir problemas en las vías urinarias es consumir
cebolla: tiene efecto limpiador. Consuma ensalada de cebolla, rábano, apio y jugo de limón y
abundante cantidad de caldo de cebolla. Esto limpiará los riñones. Para ayudar a esta curación se
aconseja consumir ajo, jugo de limón, puerro y baños de sol.
Capítulo 5
Ajo y cebolla para la belleza
Tanto el ajo como la cebolla son alternativas ideales para realizar tratamientos de cosmética
natural. Ricos en componentes que favorecen el cuidado de la piel, tienen un poderoso efecto que
puede ser aprovechado con la elaboración de máscaras faciales, lociones y jabones líquidos. El
único efecto indeseado que tienen el ajo y la cebolla en cosmética es, sin dudas, el olor que los
caracteriza. Sin embargo, puede neutralizarse fácilmente con esencias aromáticas.

Jabones líquidos para limpiar el cutis


La limpieza del cutis es el primer paso de la belleza en cosmética. Los siguientes preparados
deben utilizarse por las noches, antes de acostarse. Lo ideal es realizar la limpieza todos los días,
momento en el cual se quitará el maquillaje.

Jabón líquido a la manzanilla


10 cucharadas de glicerina
10 gotas de aceite de manzanilla
10 gotas de jugo de ajo
10 cucharadas de jabón líquido, neutro
½ litro de agua destilada

Mezcle los ingredientes y colóquelos en un envase. Este jabón, además de limpiar el cutis, tiene
un efecto suavizante.

Loción con manzanilla


100 ml de infusión de manzanilla
100 ml de infusión de ajo
2 gotas de aceite esencial de sándalo

Prepare la infusión de manzanilla con medio litro de agua y tres cucharadas de flores secas. En
un recipiente aparte elabore la infusión de ajo, utilizando un litro de agua y ½ kilo de la hortaliza.
Aplique sobre la piel limpia. El efecto de esta loción es energizante.

Loción para poros abiertos


100 ml de infusión de ajo
100 ml de hamamelis
4 gotas de aceite esencial de rosas.
Aplique con suaves golpeteos con una mota de algodón, luego de haber limpiado bien la piel.
Esta loción tiene efecto astringente.

Tónico iluminador
10 gotas de jugo de ajo (prepárelo con 4 dientes de ajo machacados dentro de una gasa).
100 ml de infusión de ajo
2 gotas de aceite esencial de rosas

Aplique con una mota de algodón sobre la piel bien limpia. El tónico iluminador brinda un
mejor aspecto a la piel opaca, rejuveneciéndola.

Loción depurativa
1 cucharada de lavanda
1 cucharada de espliego
1 cucharada de milenrama
1 cucharada de romero
1 litro de agua
10 gotas de jugo de ajo
10 cucharadas de jabón líquido neutro
10 cucharadas de glicerina

Prepare un té con las hierbas. Deje enfriar y luego agregue el jugo de ajo y el jabón.

Loción exfoliante de almendras


4 gotas de aceite de almendras
10 gotas de jugo de ajo
10 cucharadas de almendras
10 cucharadas de jabón líquido neutro

Triture las almendras en un mortero o utilizando la procesadora. Agregue el resto de los


ingredientes hasta obtener una mezcla uniforme. Aplique sobre el rostro, dejando actuar al
menos durante veinte minutos.

Lociones para tonificar


Luego de la limpieza, el segundo paso es realizar una correcta tonificación con lociones
especialmente diseñadas para cada tipo de piel: grasa, seca, normal y mixta. La tonificación le
brinda un mejor aspecto al rostro, otorgando suavidad, brillantez y fuerza.

Loción para piel grasa


10 gotas de jugo de ajo
1 cucharada de jugo de limón
10 cucharadas de agua destilada

Mezcle los ingredientes de manera uniforme y aplique sobre la piel.

Loción para piel seca


10 gotas de esencia de limón
2 cucharadas de agua de azahar
2 cucharadas de agua de rosas
2 cucharadas de extracto de avellana
9 gotas de jugo de ajo

Mezcle los ingredientes de manera uniforme y aplique sobre la piel.

Loción para piel normal


1 cucharada de miel
1 cucharadita de clavo de olor machacado
1 cucharadita de ralladura de cáscara de limón
1 cucharadita de ralladura de cáscara de naranja
1 cucharadita de ralladura de cáscara de pomelo
½ cucharadita de benjuí
½ cucharadita de nuez moscada rallada
10 cucharadas de agua de rosas
10 cucharadas de agua destilada
10 cucharadas de jugo de ajo
2 cucharaditas de semillas de cilantro
3 cucharadas de agua de azahar
8 cucharadas de alcohol

Coloque todos los ingredientes en un recipiente y déjelos macerar durante una semana. Luego,
cuélelos y enváselos. Agite la preparación antes de usar y aplique sobre la piel.

Loción para piel mixta


1 diente de ajo machacado
½ litro de agua destilada
2 cucharadas de vinagre blanco
3 cucharadas de hojas de menta picadas

Coloque en un recipiente las hojas de menta, el vinagre y el ajo. Cierre bien, deje macerar una
semana. Filtre la preparación y agregue el agua destilada.
Máscaras naturales
El tercer paso para un correcto cuidado del cutis es la humectación, que puede realizarse
mediante la aplicación de máscaras faciales.

Crema de almendras anti-age


1 cucharadita de jugo de ajo
2 cucharadas de aceite de almendras
2 cucharadas de cera de abeja rallada
2 cucharadas de manteca de cacao

Funda a baño María la cera de abeja y la manteca de cacao. Añada el aceite y el ajo y mezcle
bien hasta formar una crema homogénea. Deje enfriar. Aplique suavemente sobre el cutis.

Crema humectante de rosas


1 cucharadita de cera de abeja rallada
½ cucharadita de miel
10 gotas de jugo de ajo
3 cucharadas de aceite de almendras
4 cucharadas de agua de rosas

Caliente a baño de María la cera, el aceite y la miel hasta que se derritan. Retire del fuego,
agregue el agua de rosas y el jugo de ajo y revuelva hasta que la mezcla se enfríe un poco. Luego
aplique sobre la piel.

Crema exfoliante de rosas


2 cucharadas de ajo en polvo
2 cucharadas de germen de trigo
3 cucharadas de agua de rosas.

Mezcle bien todos los ingredientes y aplique sobre la piel bien limpia con movimientos
circulares.
De esta forma eliminará células muertas y su piel quedará más diáfana y brillante.

Crema Astringente
1 clara de huevo
5 gotas de jugo de limón
5 gotas de zumo de ajo (dos ajos machacados y exprimidos dentro de una gasa).
Aplique esta máscara sobre la piel bien limpia evitando la zona de los ojos. Deje actuar 20
minutos, retire con un algodón y agua tibia.

Hidroterapia
La hidroterapia utiliza el agua como herramienta de sanación, mediante baños, chorros, lavados
y otras técnicas.
En combinación con el agua, el ajo y la cebolla resultan un complemento ideal en tratamientos
cosméticos con hidroterapia.

Baño de leche
10 gotas de jugo de ajo
1 taza de miel
1 litro de leche
8 cucharadas de sal común de cocina
3 gotas de su aceite esencial favorito
Coloque todos los elementos en la bañera y forme espuma con el chorro de la ducha. Esta
fórmula está especialmente indicada para pieles muy secas.

Baño suavizante
1 cabeza de ajo machacada
1 litro de leche

Coloque estos elementos en la bañera y abra la canilla de agua tibia. Este baño es especial para
pieles secas y normales. Además, está indicado en el tratamiento de problemas de circulación.
Debe realizarse una vez por semana.

Baño nutritivo
10 gotas de jugo de ajo
10 cucharadas de aceite de trigo
15 cucharadas de leche
2 cucharadas de jabón líquido
2 huevos
4 cucharaditas de miel
8 cucharadas de aceite de almendras
8 cucharadas de alcohol

Coloque directamente todos estos ingredientes en la bañera llena con agua tibia y tome un baño
de por lo menos una hora y media. El poder del ajo, las almendras y la miel hacen de este baño
un arma perfecta para combatir la sequedad de la piel. Utilícelo una vez por semana.

Baño de Hierbas
10 gotas de jugo de ajo
3 cucharadas de lavanda
3 cucharadas de romero
3 cucharadas de rosas
3 cucharadas de tomillo
4 cucharadas de menta

Coloque estos ingredientes en 1 litro de agua, prepare con ellos un té y agréguelo al agua del
baño. Este baño es depurativo y relajante. Utilícelo una vez por semana.

Cremas nutritivas para manos


Crema humectante
1 cucharada de aceite de almendras
1 cucharada de aceite de sésamo
1 cucharada de glicerina
1 cucharadita de miel
2 cucharadas de aceite de oliva
7 gotas de jugo de ajo

Caliente la miel a baño María y agregue la glicerina y los aceites. Mezcle bien. Aplique sobre
las manos y cúbralas con guantes de algodón. Deje actuar toda la noche. El aceite de oliva, las
almendras y el ajo hacen de esta crema una fórmula eficaz para pieles dañadas por productos
detergentes y lavandina. Utilícela a diario.

Suavizante y anti-arrugas
25 cc de jugo de cebolla
3 cucharadas de miel
50 cc de leche de almendras
1 cucharada de cebolla deshidratada

Mezcle todo, menos la cebolla. Trate de obtener una crema homogénea. Luego añada la cebolla
y vuelva a mezclar.

Tratamiento anti-celulitis
Los masajes, la aplicación de compresas localizadas y el consumo de una infusión constituyen
los tres pilares de un tratamiento natural para combatir la “piel de naranja”. Las tres técnicas
deben complementarse entre sí y sus efectos se potencian si son realizadas diariamente.

Masajes con aceite


1 cucharada de jugo de naranja
10 cucharadas de aceite de coco
10 gotas de jugo de ajo
3 cucharadas de aceite de limón

Prepare la receta y aplíquela con suaves masajes sobre las piernas, una vez por día,
preferentemente antes de irse a dormir. El aceite actuará así durante toda la noche.

Compresas suavizantes
1 taza de algas fucus (se consiguen en los negocios naturistas)
1 taza de hojas de hiedra fresca
4 cabezas de ajo bien machacado

Hierva una pava con agua y viértala sobre las hojas de hiedra y las algas. Deje reposar por lo
menos cuatro horas. Caliente el agua nuevamente. Por otro lado, triture bien las algas y la hiedra
con un cuchillo. Si lo desea puede procesarlas. Colóquelas sobre el líquido. Aplique la
preparación sobre la zona afectada mediante un paño embebido. Moje otro paño grande en la
preparación restante y cubra la zona sobre la que ya hizo la primera aplicación.
Dejar actuar durante una hora, luego retire las compresas y enjuague con agua bien fría. Las
compresas deben colocarse sobre las zonas con adiposidades, una vez por semana. El yodo
contenido en las algas es un poderoso anticelulítico que se potencia con el ajo.

Infusión anti-celulitis
1 cucharada de lúpulo
1 cucharadita de menta
1 litro de agua hirviendo
2 dientes de ajo pelados

Coloque el agua hirviendo sobre todos los ingredientes juntos. Permita que reposen durante una
hora. Cuele la preparación y bébala durante el día. Beba todos los días una taza de este té.
Capítulo 6
Recetas de cocina con ajo y cebolla
Disfrutar de los beneficios del ajo y la cebolla es muy fácil. Además, puede resultar una
experiencia deliciosa. En la cocina, tanto el ajo como la cebolla tienen muchísimas aplicaciones:
el ajo, por ejemplo, es el condimento perfecto para la carne de cordero, carnero y cabrito. Es el
ingrediente principal de muchos platos de la cocina mediterránea: allioli, pesto, gazpacho,
sopas... Ajo y cebolla se usan en las cocinas de casi todos los países en salsas, sopas, pescados y
mariscos, carnes, y vinagretas.
Existen muchas maneras de incluirlos en la dieta de todos los días:

Combinado de ajo y cebolla


 Pele una cebolla y córtela en cuatro partes o en trozos aún más pequeños, según el
tipo de juguera que utilice.
 Lave algunas cebollas de verdeo.
 Prepare el jugo con las cebollas de verdeo y la cebolla común.
 Por separado, lave y pele algunos dientes de ajo y prepare el jugo con ellos.
 Combine ambos jugos.
 Para lograr un mejor sabor, prepare también otro jugo con ½ atado de perejil o con
algunas hojas de acelga o espinaca, y luego mézclelo con el jugo de ajo y cebolla.

Una alternativa interesante es preparar un jugo con zanahoria, tomate, 2 ramilletes de brócoli, 1
trocito de cebolla, 1 diente de ajo y 1 pizca de pimienta de Cayena. En algunas personas, el jugo
de ajo crudo puede producir reacciones adversas.

Jugo suave de tomates

Ingredientes (rinde 3 tazas)


3 tazas de jugo de tomate.
/ taza de vinagre de vino.
1
3

1 cucharadita de jugo de ajo.


2 tomates maduros grandes cortados en 4 partes.
1 pepino pelado y cortado en rodajas de aproximadamente 2 cm.
1 cebolla pequeña cortada en 4 partes
1 pimiento verde cortado en 4 partes (sin quitar las semillas).

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Jugo de tomate (otra variedad)

Ingredientes (rinde 3 tazas)


½ taza de jugo de tomate.
½ taza de apio (con las hojas).
2 cucharadas de pimiento.
/ taza de zanahorias.
1
3

2 cucharadas de cebolla.
1 cucharadita de jugo de ajo.
1 ½ taza de cubitos de hielo.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Cocktail energético de espinacas

Ingredientes (rinde 2 ½ tazas)


1 cucharadita de jugo de ajo.
1 taza de jugo de tomate bien frío.
1 taza de té de menta frío.
1 taza de hojas de espinaca fresca.
1 taza de cubitos de hielo.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Refresco de pepinos y yogur

Ingredientes (rinde 1 ½ taza)


½ taza de yogur sin sabor.
1 taza de pepino pelado y cortado en rodajas de aproximadamen- te 2 cm.
1 cucharada de cebolla.
½ taza de cubitos de hielo.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Tónico de verduras del huerto

Ingredientes (rinde 2 tazas)


1 ½ taza de jugo de zanahoria.
2 tazas de coliflor hervido al vapor, frío.
2 ramitas de apio con las hojas.
½ diente de ajo.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Cocktail de hojas verdes

Ingredientes (rinde 1 ½ taza)


½ taza de yogur sin sabor.
½ taza de pepino pelado y cortado.
¼ taza de brócoli.
½ taza de arvejas (hervidas y enfriadas, o de lata).
¼ taza de cebolla.
1 cucharadita de jugo de ajo.
½ taza de cubitos de hielo.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Trago caliente de ajo y cebolla


Ingredientes (rinde 4 tazas)
4 tazas de agua mineral hirviendo.
1 zanahoria mediana cortada en rodajas de aproximadamente 2 cm.
1 ramita de apio (con las hojas).
2 o 3 cebollas de verdeo.
5 cubitos de caldo.
1 cucharadita de jugo de ajo.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Trago tipo sopa (de arvejas)

Ingredientes (rinde 1 ½ taza)


1 taza de caldo hirviendo, de pollo o de verduras.
1 cucharadita de jugo de ajo.
½ taza de arvejas congeladas (descongelarlas antes de usar).
1 rodaja de pimiento verde, de aprox. 2 cm de grosor.
1 rodaja de zanahoria, de entre 3 y 5 cm de grosor.
1 pizca de pimienta negra.
1 pizca de orégano.

Preparación
 Coloque todos los ingredientes en la juguera en el orden en que aparecen.
 Prepare el jugo con la juguera en velocidad alta.
 Sírvalo inmediatamente.

Escabeche de ajíes, apio, echalotes y frambuesas

Ingredientes
1 ají rojo y 1 ají verde chicos cortados en bastones gruesos.
1 blanco de apio cortado en rodajas.
8 dientes de echalotes pelados enteros.
1 tacita de vinagre de manzana.
Agua, cantidad necesaria.
1 ramita de orégano, romero y tomillo.
1 cucharadita al ras de azúcar integral rubia.
10 frambuesas y 1 tacita de aceite de oliva extra virgen.
Al servir, agregar 1 cucharadita de aceite de nuez por comensal.

Preparación
 En un recipiente coloque las verduras y el vinagre. Agregue agua hasta cubrir las ¾
partes, incorporar las hierbas y el azúcar.
 Mezcle bien. Tape y cocine a fuego mínimo hasta que estén tiernas. Agregue las
frambuesas.
 Cocine 1 minuto más. Incorpore el aceite de oliva. Deje entibiar y lleve a la heladera.

Escabeche de zanahorias y endivias

Ingredientes
2 zanahorias chicas cortadas en bastones gruesos.
2 nabos cortados en bastones gruesos.
3 dientes de ajo cortados en mitades.
2 plantas de endivias.
4 granos de pimienta negra y 4 de bayas de enebro.
¼ de cucharadita de jengibre y ¼ de cúrcuma en polvo.
1 cucharadita de miel de cebada.
1 tacita de jugo de limón.
Agua, cantidad necesaria.
1 tacita de aceite de oliva extra virgen.
1 cucharada colmada de algas Nori, en hojuelas (se consiguen en tiendas naturistas).
1 cucharadita de orégano y de salvia frescos.

Preparación
 Coloque las zanahorias, el nabo, los ajos, los condimentos y la miel en un recipiente.
Agregue el jugo de limón y agua hasta cubrir las ¾ partes. Mezcle bien.
 Tape y cocine a fuego mínimo hasta que estén tiernas.
 Agregue las hojas de endivias hasta que apenas se ablanden.
 Incorpore el aceite, las algas y las hierbas.
 Deje entibiar y lleve a la heladera.

Escabeche de cebollas, hinojos y apio a la melisa fresca

Ingredientes
1 cucharada de jengibre fresco cortado en finas láminas.
1 cebolla chica, 1 hinojo y 1 blanco de apio cortados en rodajas.
2 clavos de olor y 3 granos de pimienta de Cayena.
1 cucharadita al ras de azúcar integral rubia.
1 tacita de vinagre de arroz
1 cucharada de aceto balsámico.
Agua, cantidad necesaria.
1 cucharada de melisa fresca.
1 cucharadita de hojitas de hinojo.
1 cucharadita de semillas de hinojo.
10 avellanas partidas al medio.
1 tacita de aceite de oliva extra virgen.
Al servir agregar 1 cucharadita de aceite de avellanas por comensal.

Preparación
 En un recipiente coloque el jengibre, las verduras, las especias, el azúcar, el vinagre
y el aceto.
 Agregue agua hasta cubrir las ¾ partes. Mezcle bien.
 Tape y cocine a fuego mínimo hasta que estén tiernas.
 Agregue las hierbas, las semillas, las avellanas y el aceite.
 Deje entibiar y lleve a la heladera.

Escabeche de porotos al azafrán y alcaparras

Ingredientes
½ taza de porotos negros cocidos.
½ taza de porotos blancos cocidos.
2 cebollas de verdeo, 1 zanahoria chica y ½ ají rojo cortados en bastones.
3 estigmas de azafrán.
1 cucharadita de miel de cebada.
½ tacita de jugo de limón y ½ de vinagre de arroz.
Agua, cantidad necesaria.
6 dientes de ajo asados y hechos puré.
1 cucharadita de semillas de coriandro, de pimentón y cúrcuma en polvo.
1 cucharada de perejil bien picado.
2 cucharadas de alcaparras.
1 tacita de aceite de oliva extra virgen.

Preparación
 En un recipiente coloque las verduras, el azafrán, la miel, el jugo de limón y el
vinagre. Agregue agua hasta las ¾ partes.
 Mezcle bien y cocine a fuego mínimo hasta que estén tiernas. Agregue los porotos y
cocine un minuto más.
 Incorpore el aceite, los ajos, las especias, el perejil y las alcaparras. Deje entibiar y
lleve a la heladera.

La Gratinée

Ingredientes
6 cebollas medianas.
100 g de queso emmental rallado.
4 rebanadas de pan tostado.
1 litro de agua.
2 dientes de ajo.
1 ramita de tomillo, pimienta y nuez moscada, aceite de oliva y sal a gusto.

Preparación
 Freír las cebollas –que previamente habremos picado muy finas– en una sartén a
fuego lento y con muy poco aceite de oliva.
 Añadir el agua y la sal y dejar cocinar todo junto durante unos cinco minutos.
 Una vez cocido, servir en platos individuales, como si fuera una sopa, añadiendo a
cada uno de ellos una rebanada de pan integral tostado que se habrá untado
previamente con ajo crudo.
 Cubrir con el queso emmental rallado y gratinar unos minutos en el horno. Debe
servirse en el acto, ya que se enfría rápidamente.

Tortitas de trigo con cebolla

Ingredientes
4 cebollas medianas.
200 g de granos de trigo.
1 manojo de perejil picado.
3 huevos, aceite de oliva, sal y pimienta al gusto.

Preparación
 Cocinar los granos de trigo en agua salada –empleando una taza de trigo por cada
dos tazas y media de agua– hasta que la hayan absorbido.
 Luego, picar finamente las cebollas y freír con una cucharada de aceite de oliva.
Cuando estén doradas, mezclar con el trigo cocido, el perejil picado y los huevos
batidos, formando una masa.
 Moldear las cuatro tortitas y freír a fuego lento con poco aceite, hasta que queden
doradas de ambos lados.
 Servir espolvoreadas con perejil crudo finamente picado.

Pollo al ajillo

Ingredientes
1 pollo.
1 vaso de jerez.
6 cucharadas de aceite de oliva.
1 cabeza de ajo.
3 hojas de laurel.
1 ramita de romero y 1 pizca de tomillo.

Preparación
 Cortar el pollo en pequeñas presas y ubicarlo en una cacerola o cazuela honda.
Agregarle el vaso de jerez, las 6 cucharadas de aceite de oliva, 1 cabeza de ajo con
los dientes pelados y enteros, las hojas de laurel, una ramita de romero y una pizca
de tomillo.
 Dejar macerar durante 3 horas (mejor si se deja así hasta el día siguiente). Freír las
presas de pollo en abundante aceite de oliva hasta dorar. Ubicarlas en una fuente.
Calentar 5 minutos el jugo que quedó del adobo del pollo. Verterlo sobre las presas.
Servir caliente o tibio.

Bacalao al tomate

Ingredientes
Bacalao seco, 1 kg.
1 taza de mayonesa.
1 clara de huevo.
½ kg de tomates.
1 cabeza de ajo.
3 terrones de azúcar.
2 cucharadas y cantidad necesaria para freír de aceite de oliva.
Harina, cantidad necesaria para rebozar.
Sal y pimienta, a gusto.

Preparación
 Pelar los tomates (deben estar bien maduros) y picarlos o rallarlos para que queden
bien desmenuzados. Cocinarlos en una sartén junto con los 3 terrones de azúcar y las
2 cucharadas de aceite. Salpimentar a gusto. Dejar que la salsa de tomates se reduzca
a la mitad y retirar del fuego.
 Cortar el bacalao (previamente remojado y lavado) en trozos rectangulares. Pasar
cada trozo por harina y freírlo en aceite bien caliente de ambos lados, para dorar.
 Envolver la cabeza de ajo en papel de aluminio y asar en el horno o la hornalla hasta
que los ajos estén tiernos. Dejar enfriar.
 Pelar los ajos, pisarlos y agregarlos a la mayonesa. Batir la clara a nieve y mezclarla
a la preparación de mayonesa.
 Ubicar en una fuente para horno la salsa de tomates. Colocar encima los trozos de
bacalao y cubrir cada trozo con la salsa de claras y mayonesa.
 Gratinar en el horno caliente y servir enseguida.

Bouillabaisse

Ingredientes
½ taza de aceite mezcla o de girasol.
1 cebolla.
3 dientes de ajo.
3 tomates.
1 kg de filetes de lenguado.
1 vaso de vino blanco seco.
1 ramito de hierbas aromáticas.
1 cucharada de perejil picado.
1 puerro.
1 pizca de azafrán.
2 l de caldo de pescado (o agua).
½ kg de langostinos.
½ kg de mejillones.
½ kg de camarones.
Sal y pimienta, a gusto

Preparación
 Poner en una cacerola el aceite y rehogar la cebolla y los ajos finamente picados.
 Añadir los tomates previamente pelados y picados. Incorporar los filetes de lenguado
cortados en trozos. Dejar hervir unos minutos e incorporar el vino blanco, el ramo de
hierbas aromáticas, el perejil, el puerro picado, el zafrán y el caldo de pescado.
Salpimentar a gusto.
 Tapar y dejar hervir a fuego fuerte durante 10 minutos. Agregar los langostinos y los
camarones limpios y los mejillones con su caparazón.
 Dejar hervir unos minutos más y servir en sopera o cazuela.
Conejo a la mostaza

Ingredientes
1 conejo de 1 kg y ½ aproximadamente.
2 cucharadas de manteca.
3 echalotes.
¼ litro de vino blanco.
1 litro de caldo de pollo.
¼ litro de crema de leche.
2 cucharadas de mostaza de Dijon.
10 champiñones.
Sal y pimienta, a gusto.

Preparación
 Cortar el conejo, saltearlo en manteca, agregarle los echalotes picados, el vino
blanco, el caldo de pollo, la sal y la pimienta. Cocinar durante 40 minutos. Sacar la
carne y reservar.
 Colar la salsa y reducirla. Agregar la crema de leche y condimentarla.
 Incorporar un poquito de mostaza arriba del conejo y agregarlo a la salsa.
 Acompañar con champiñones.

Calamares con tomate

Ingredientes
75 g de calamares pequeños.
3 cebollas.
2 dientes de ajo.
1 hinojo.
1 zanahoria.
3 cucharadas de aceite de oliva.
100 g de manteca.
4 cucharadas de coñac.
4 tomates grandes.
Tomillo picado.
Sal y pimienta, a gusto.

Preparación
 Pele las cebollas y los dientes de ajo. Limpie el hinojo y la zanahoria y píquelos.
 En una sartén, caliente el aceite, incorpore la mitad de la manteca y los calamares
limpios, salpimente y déjelos freír unos 5 minutos. Vierta el coñac sobre los
calamares y retírelos del fuego.
 Derrita en otro recipiente la manteca restante y rehogue las verduras picadas y
tapadas durante 10 minutos.
 Pele los tomates, córtelos en 8 trozos y añádalos a los calamares junto con el tomillo
y las verduras rehogadas.
 Deje proseguir la cocción con el recipiente tapado de 20 a 25 minutos, según el
tamaño de los calamares. Se puede acompañar el plato con arroz hervido.

Musaka

Ingredientes
2 berenjenas grandes.
½ kg. de cebollas medianas.
¼ kg. de carne picada.
2 tomates medianos.
2 huevos.
100 ml de vino blanco.
½ litro de salsa bechamel.
100 g de queso rallado.
1 cucharada de manteca.
2 cucharadas de pan rallado.
Perejil.
Aceite para freír, cantidad necesaria.
Sal y pimienta, a gusto.

Preparación
 Cortar las berenjenas en rodajas gruesas, espolvorearlas con sal y dejar reposar
durante una hora para que escurran el jugo amargo. Luego lavar, escurrir y secar.
Dorar la cebolla picada en la manteca, agregar la carne picada y 2 cucharadas de
agua.
 Saltear todo junto unos minutos.
 Después regar con el vino, adicionar los tomates pelados y picados sin semillas y el
perejil picado. Salpimentar y cocer durante 45 minutos a fuego lento. Retirar del
fuego y añadir el pan rallado y una clara de huevo ligeramente batida.
 En otra sartén, freír las berenjenas (o asarlas a horno fuerte hasta que se doren).
Después colocar en una fuente rectangular una capa de la verdura, otra de carne
picada, y así dos veces más. Agregar 2 yemas y 1 huevo a la besamel, la mitad del
queso rallado y cubrir la musaka. Espolvorear el resto del queso y gratinar en el
horno hasta que se dore.
Recomendaciones al usar ajo
Un bulbo del ajo entero se llama cabeza y las partes se llaman dientes (en algunos países de
Latinoamérica le dicen clavos).
Para usarlo, separe los dientes necesarios de la cabeza.
Retuerza el diente entre sus dedos y el pulgar para aflojar la cáscara y quítele la fina piel.

A plastar el diente usando un cuchillo afilado. Para aplastarlo, presionar por completo con la
hoja del cuchillo.
Si se quiere un resultado más suave, hacer una pasta, frotando sal en el diente.
Para condimentar una preparación, úselos enteros y después retírelos.
En los guisos se usa más bien picado o molido en la licuadora o en el mortero.

T enga en cuenta que, cuanto más tiempo hierve, su sabor es más suave. Mientras que si el ajo
se quema, se vuelve amargo.
Cómo utilizar la cebolla
Pele la cebolla, retirando la raíz y la cáscara de consistencia de papel.
Lavar la cebolla, luego cortarla al medio desde una punta a la otra.

C ortar la cebolla por las marcas desde el extremo de la raíz hasta el otro extremo, haciendo
los cortes más cercanos o más alejados según cuán fina se quiera la cebolla picada.

D ar vuelta la cebolla y volver a cortar, de modo que estos cortes queden en ángulo recto con
respecto a los primeros.
La dieta del Mediterráneo
Italia, Grecia, España y otros países bañados por el mar Mediterráneo, tienen algo en común:
su amor por la buena cocina. Los ingredientes típicos de esta cocina son el ajo, la cebolla, el
aceite de oliva, las frutas, las verduras y legumbres, los cereales y los frutos de mar. En todos
los casos, se trata de alimentos exquisitos que, además, se caracterizan por sus beneficios para
el organismo. De hecho, hace tiempo que se vienen realizando estudios que demostraron las
propiedades de la cocina mediterránea para prevenir las enfermedades coronarias y prolongar
la vida.
Capítulo 7
El tercer pilar de la salud total: la miel
El uso medicinal de la miel y otros productos elaborados por la abeja se remonta a la Antigua
China de hace 2000 años. Sobre ella escribió también el padre de la medicina, Hipócrates, y
existen registros en la Biblia y el Corán, hasta nuestros días. Del latín apsis (abeja), la apiterapia
tiene una larga tradición como remedio popular para la artritis y otras enfermedades
degenerativas. Resulta interesante saber que recientemente se le han asignado propiedades
antiinflamatorias, analgésicas e inmunoestimulantes. Estos atributos terapéuticos comprueban su
eficacia en el tratamiento de una gran variedad de enfermedades.
La miel es un gran reconstituyente que tiene importantes propiedades medicinales. De hecho,
más de 100 sustancias forman parte de este producto, lo que la declara un alimento muy
completo.
Sus ingredientes básicos nos permiten reconocer el gran aporte curativo que tiene. La miel
contiene:

 Ácidos orgánicos.
 Agua.
 Aminoácidos.
 Azúcares.
 Enzimas.
 Levaduras.
 Minerales.
 Oligoelementos.
 Polen.
 Propóleo.
 Proteínas.
 Sustancias antibióticas.
 Sustancias aromáticas.
 Sustancias hormonosímiles.
 Vitaminas.
Con tal cantidad de nutrientes, la miel es un tonificante natural de la masa muscular, un antídoto
muy efectivo contra el insomnio, y, por sobre todo, un estimulante y un regenerador que ayuda a
eliminar las toxinas alojadas en el organismo. Una opción más saludable que el azúcar blanca
para endulzar bebidas y alimentos, la miel es además un producto con innumerables propiedades
curativas, que van desde el tratamiento de los resfríos y la tos hasta la eliminación de eczemas y
várices.

Enfermedades que alivia la miel


La medicina actual ha determinado científicamente que la miel contiene elementos que alivian
ciertas dolencias:

Gastritis
Los fitonutrientes de la miel ayudan a aliviar este mal, reduciendo sus efectos sobre el cuerpo,
de la misma manera que el agua oxigenada contenida en el producto lleva a cabo una acción
antibacteriana, que también puede ayudar a casos de duodenitis.

Gastroenteritis
Cuando se trata de niños afectados por este mal, la miel pura crea una efecto antibacteriano en
el organismo, atacando bacterias como la escherichia coli y la salmonella, afecciones muy
comunes. Como la miel funciona como un buen sustituto de la glucosa, dosis diarias pueden
reducir la diarrea producida por esta afección.

Resaca
El efecto de la fructosa que contiene la miel sobre el hígado humano ayuda a aliviar los efectos
del alcohol, ya que acelera su oxidación dentro de este órgano. Tras pasar esta etapa, la resaca
pierde fuerza, ya que la mayoría de los componentes alcohólicos fueron asimilados por el cuerpo
humano.

Úlceras de estómago
Nuevamente, las cualidades antibacterianas de la miel ayudan a eliminar al helicobacter pylori,
la bacteria causante de esta condición (al menos, en la mayoría de los casos). Sin embargo, no
todos los tipos de miel tienen el mismo efecto, y es la miel de manuka la que mejor trabaja contra
las úlceras.

La miel en la infancia
Beneficiosa para todos los adultos, en los últimos años han surgido opiniones contradictorias
con respecto al uso de la miel en los niños; de la indiferencia se pasó a la adopción de la miel
como sustituto del azúcar, pero surgieron dudas de los especialistas acerca de si es conveniente
incluirla en la dieta infantil antes de cierta edad.
Sin embargo, universalmente se le han reconocido a la miel propiedades eutróficas, que
favorecen el crecimiento y el metabolismo, lo que la convierte en un alimento indicado durante
la gestación, la infancia y en las convalecencias.
Respecto del uso del azúcar en la alimentación infantil, la miel tiene sobre aquél la ventaja de
que está menos sujeta a la fermentación en los intestinos, y gracias a sus enzimas favorece la
digestión y la absorción, sobre todo de la leche de vaca, frecuentemente mal tolerada o indigesta
para el aparato digestivo infantil. El consumo de miel mejora el apetito como consecuencia de
una acción sinérgica sobre el aparato digestivo y sobre el sistema nervioso de los niños; para los
niños cansados o con retraso en el desarrollo físico la miel ejerce una acción fundamental.
La miel, sobre todo si es oscura (sin que la causa del oscurecimiento provenga del
recalentamiento excesivo de la misma), ejerce también una acción antianémica y recalcificante,
lo que es siempre importante para los niños, particularmente para los que viven en la ciudad y
pasan el invierno dentro de casa.
Entre las mieles más adecuadas para la infancia, merece especial atención la de tomillo. Es muy
oscura, muy aromática y proviene de las colinas áridas de las regiones marinas. Por su acción
antiséptica es útil contra todas las enfermedades e infecciones que encuentran en los niños fácil
presa.
También es especialmente indicada para los niños la miel de romero, que además de las
acciones señaladas cumple también la de ser un eficaz desintoxicador (hepático, renal e
intestinal), y las de eucalipto, muy útil con las enfermedades invernales.

Polen, propóleo y jalea real


Además de elaborar la miel, las abejas son las encargadas de la producción de otros alimentos
igualmente sanos: el polen, el propóleo y la jalea real. Cada uno de ellos tiene distintas
propiedades para la salud y son altamente nutritivos.

Polen, el alimento total


El Polen de abeja es un derivado de la parte más vital de la planta. Es la fuente primaria de
proteínas para las abejas obreras. Se dice que el polen es el único alimento perfectamente
completo: los científicos demostraron que contiene todas las vitaminas y minerales que necesita
el ser humano. De hecho, fue por años muy utilizado entre los atletas de alta competición. Las
abejas son las responsables de elaborar este tesoro natural. Este polvillo producido por los
órganos masculinos de las plantas, encargado de fecundar los órganos femeninos, es recogido
por las abejas con sus patas. Lo humedecen con néctar dándole forma de pequeñas bolas que
transportan a la colmena para alimentar a las abejas obreras. Mediante estos viajes de flor en flor
contribuyen, desinteresadamente, a la polinización de muchas especies.
El hombre obtiene el polen situando unos cajones con rejillas en la entrada de la colmena. El
polen se deshidrata para que no fermente ni se enmohezca. Son muchas sus propiedades:
 Ayuda a recuperarse en casos de anemia o debilidad.
 Aumenta la resistencia ante las enfermedades.
 Es un buen regulador intestinal
 Se recomienda en el embarazo y la lactancia por su gran poder remineralizante.
 Aconsejable frente a la apatía sexual y problemas de próstata por su gran riqueza en
Zinc.
 Ayuda a recuperar el apetito en personas convalecientes.
 Regula el peso corporal tanto en obesidad como para la delgadez.
 Alimento ideal para deportistas ya que aumenta la resistencia ante el esfuerzo físico.
 Refuerza la memoria.
 Muy útil para los diabéticos ya que ayuda a regular los niveles de glucosa.
 Ayuda a mejorar la visión, por su contenido en Riboflavina, vitamina A y Zinc.
Gracias a su alto porcentaje en hidratos de carbono, el polen es un complemento alimenticio
ideal en periodos de escasa energía. Contiene un 20% de proteínas (indispensables para el buen
funcionamiento del organismo) y un gran número de minerales y oligoelementos que ayudan a la
función celular, muscular y esquelética. Su aporte en vitamina A lo hace un aliado en fases de
crecimiento y la vitamina B equilibra el sistema nervioso.

Propóleo, el gran desinfectante


El Propóleo o “penicilina rusa” es un producto elaborado por las abejas con la resina de los
árboles para mantener la colmena estéril. Exámenes de laboratorio señalan que es un bactericida,
antiviral y fungicida muy potente. Es comúnmente utilizado para el dolor de garganta, faringitis,
bronquitis y amigdalitis, pero también como tópico para lesiones en la piel. Médicos rusos y
chinos dirigen procesos clínicos utilizándolo en tratamientos de hipercolesterol.
Ayuda a la formación de anticuerpos y estimula el sistema inmunológico, es anestésico,
anttinflamatorio y cicatrizante. Es indicado en el tratamiento de aftas, inflamación de encías por
hongos, abscesos, forúnculos, verrugas, callos, acné y psoriasis.

Jalea real, energía y poder


La Jalea Real es la sustancia con que se alimenta la Abeja Reina, que le permite convertirse en
un insecto genéticamente completo. Esta es la única diferencia en la creación de una Abeja
Reina, cuya expectativa de vida es de 3 a 6 años y de una abeja obrera, con una longevidad de
tan solo 6 a 8 semanas.
El origen de este alimento es una secreción. Las abejas obreras segregan un fluido para
alimentar a las larvas de la colmena durante sus tres primeros días de edad y a la Reina durante
toda su vida. Se crea en sus glándulas faringeales a partir de miel, néctar y agua que recogen del
exterior, mezclándose con saliva, hormonas y vitaminas en su interior.
Se destaca por su rica composición. La jalea real contiene un gran número de proteínas y
vitaminas del grupo B, las cuales nos ofrecen una acción renovadora desde un punto de vista
físico y psíquico.
Su concentración en fósforo y azufre la convierten en un complemento importante para el
crecimiento y la energía intelectual. Además, posee aminoácidos esenciales para el buen
funcionamiento del organismo. La jalea real proporciona vitamina E, especialmente necesaria en
la reproducción y el embarazo. Aunque en menor cantidad, también posee vitaminas A, C y D.
Tiene propiedades antisépticas y bactericidas que refuerzan el organismo ante las agresiones
externas.
 Es energética y estimulante.
 Ofrece mayor resistencia mental en periodos de estrés o fatiga.
 Utilizada en afecciones gastrointestinales por su aporte de vitamina PP.
 Retarda los efectos de envejecimiento prematuro.
 A pesar de su aporte en azúcares, tiene propiedades antidiabéticas.
 Recomendada en estados post-operatorios por su gran riqueza en vitaminas,
minerales y oligoelementos. Además ayuda a recuperar el apetito y mejora el sistema
inmunológico.

Cera, emulsionante natural


La Cera de Abeja es la base para las más finas cremas faciales. Constituye un fino emulsificador
que posee pequeñas cantidades de polen. Como medicamento interno, sirve como vacuna contra
la alergia al polen.

Todos los tipos de miel


Existen distintos tipos de miel y, si bien todos comparten las mismas características, de acuerdo
a su variedad pueden destacarse en diferentes propiedades para la salud:
 Abeto: Antiséptico de las vías respiratorias. Desodorante.
 Acacia: Antiinflamatorio de la garganta. Desintoxica el hígado. Regula los intestinos.
 Alfalfa: Energética.
 Alholva: Depurativa. Elimina el acné y los forúnculos.
 Anís: Alivia el sistema digestivo.
 Azahar: Relajante. Elimina las migrañas y el insomnio.
 Brezo: Desinfectante de las vías urinarias.
 Castaño: Regula los intestinos. Activa la circulación. Estimulante.
 Colza: Tratamiento de las enfermedades cardiovasculares.
 Diente de león: Depurativo. Protector hepático. Tónico.
 Espino albar: Tratamiento de la hipertensión. Tratamiento de la arteriosclerosis. Cura
el insomnio.
 Eucalipto: Antiséptico.
 Girasol: Estimulante. Diurético. Disminuye la fiebre en los niños.
 Lavanda: Analgésica. Bactericida. Antiséptica. Cura quemaduras, llagas y picaduras.
 Madroño: Depurativa. Diurética.
 Milflores: Energética.
 Romero: Reconstituyente tónico. Es altamente energetizante. Elimina las
flatulencias.
 Tilo: Calmante. Cura el insomnio.
 Tomillo: Antiséptica. Ayuda la digestión. Energizante.
 Zarzamora: Antiinflamatoria. Antidiarreico.
Cómo elegir y conservar la miel
A la hora de elegir la mejor miel, es importante observar su apariencia: el contenido del
recipiente de miel debe ser totalmente homogéneo y no presentar un aspecto líquido en la
parte superior y sólido en la inferior: esto evidencia una mezcla de mieles, una miel dañada o
demasiado húmeda. Conserve siempre la miel lejos de la luz y el calor. También evite
comprar la que se almacena en el supermercado en una zona con estas características. El
envase más seguro es el vidrio; prefiera los tarros de miel antes que las que vienen en
contenedores de plástico o cartón.
Es mejor evitar la miel esponjosa o espumosa; no se trata de miel en mala calidad, pero indica
que está fermentando y no es del todo apropiada para el consumo humano. Prefiera la miel
ecológica, que no tiene pesticidas, antimicóticos o antibióticos, muy comunes en la miel de
origen tradicional.
El color de la miel puede oscilar entre el amarillo pálido y el amarillo intenso, entre un color
ámbar claro y el castaño acaramelado muy oscuro; tenga en consideración que cuanto más
oscura es, más abunda en minerales.
Un afrodisíaco natural
Entre las innumerables virtudes que posee la miel está la de ser un buen afrodisíaco, no sólo
porque mejora la salud en general, sino porque también ayuda al organismo a estar más
saludable en este aspecto. El uso constante de la miel en la alimentación, y sobre todo para
endulzar alguna tisana tónica y afrodisíaca, dará resultados muy satisfactorios.
Según los hindúes, el poder afrodisíaco de la miel es tan intenso que los sacerdotes deben
abstenerse de consumirlo. Los antiguos romanos, en sus relaciones amorosas, acostumbraban
tomar una bebida de satureja hortensis endulzada con miel. Y es más: en los harenes, el placer
de los sentidos estaba continuamente estimulado con miel, interna y externamente.
Cómo agregar miel a su dieta
En la práctica, la miel resulta un buen endulzante natural, que se absorbe más fácilmente que
el azúcar, por lo que una dieta que la incluya seguramente no carecerá de variedad. Por otro
lado, un porción de solo 100 gramos contiene alrededor de 280 calorías, haciéndola poco
recomendable para personas con problemas de sobrepeso.
Se puede utilizar en las bebidas, pero también es buena como edulcorante de cereales, es
exquisita cuando se la unta en galletitas o tostadas como si fuera mermelada, puede endulzar
postres elaborados y hasta es un buen condimento para la carne.
Las abejas no pican, curan
Contrariamente a lo que se suele creer, el 95% de la población no es alérgica a las picaduras
de abeja. Es la avispa la que frecuentemente puede causar reacciones alérgicas. Muchos
insectos tienen aguijones venenosos, pero debido a que la abeja de la miel se ha domesticado
y es fácil de tratar, se usa para la mayoría de los tratamientos.
El veneno es analgésico, antinflamatorio, circulatorio, anticoagulante, baja la tensión arterial,
sube las defensas, eleva los componentes de la sangre, es antibiótico, tiene funciones de
vacuna y defensa y es indicado en todo tipo de lesiones, accidentes y procesos degenerativos.
Además, resulta muy beneficioso en el tratamiento de enfermedades de los huesos como
artrosis, reuma, esguinces y fracturas. El veneno de abeja tiene también un efecto benéfico
sobre la esclerosis múltiple. Si bien no puede eliminar la enfermedad, detiene su progreso.
Capítulo 8
Remedios caseros con miel
Abscesos gingivales
Colocar al fuego una olla pequeña con una cucharada de miel y otra de agua; calentar hasta
obtener un caramelo oscuro, casi quemado. Aplicarlo, lo más caliente que se pueda resistir, sobre
el absceso. Esta cataplasma favorecerá que el absceso desaparezca, lo desinfectará y facilitará
una rápida cura.

Acné
La miel es una sustancia básica en cosmética por sus excelentes virtudes en el cuidado del
aspecto personal, como lo acredita su uso, desde tiempos inmemoriales, para mantener la belleza
de la piel. Su acción emoliente es evidente, y a ésta se une un gran número de notables
propiedades antisépticas y revitalizantes. Para atacar el acné del rostro con los beneficios de este
producto, es necesario realizar y aplicar una pasta de miel como sigue:
 Poner un poco de miel de salvia en la palma de la mano y agregarle la pulpa de un
durazno hervido hasta formar una masa blanda.
 Después de haber lavado y enjuagado cuidadosamente el cutis con una esponja muy
caliente, aplicar la pasta, insistiendo particularmente en los lugares más afectados por
el acné.
 Dejar actuar una media hora en un ambiente cálido y húmedo.

Arritmia
La miel reequilibra la actividad cardiaca. Disolver 3 cucharaditas de miel de tilo o de lavanda en
medio litro de agua y beber a lo largo del día.

Asma
Calentar a baño María o al vapor una cucharada de miel hasta que se vuelva líquida, agregar
después (gota a gota) una cucharada de aceite de ricino, mezclándolo hasta obtener un
compuesto homogéneo. Por la mañana, recién levantado, y por la noche, antes de acostarse,
tomar una cucharadita y dejarla en la boca un rato antes de tragarla.
Los aceites esenciales contenidos en la miel y el aceite de ricino calmarán la irritación y
facilitarán la tranquilidad del enfermo durante algunas horas.

Bronquitis
Preparar una tisana con brotes de abeto y dejar en infusión 15 minutos en agua hirviendo. Filtrar
y endulzar con abundante miel de abeto.
Es el mejor remedio para la bronquitis. También se puede aprovechar la propiedad desinfectante
de la miel de tomillo.

Calambres
Generalmente debidos a la carencia de algún oligoelemento, pueden prevenirse y aliviarse con
una cura de miel: las personas que sufren frecuentes calambres (en el embarazo, durante períodos
de cansancio o inapetencia), deben tomar dos cucharadas de miel en cada comida, y en unos días
desaparecerán.

Colesterol
De color amarillo intenso y de consistencia bastante espesa, la miel de girasol, que se produce
en las zonas llanas, tiene, entre otras, una acción particularmente apreciada, ya que reduce el
colesterol.

Dentición dolorosa
Para los que tienen un niño menos de 2 años es aconsejable tener siempre a mano miel “rosada”,
con la cual masajear las encías doloridas del bebé durante la dentición.
 Recoger unos pétalos de rosa rosada y ponerlos en una taza de agua hirviendo, en la
cual se habrá disuelto un grano de sal gruesa. Los pétalos deben ser suficientes para
saturar completamente el agua.
 Después de 24 horas, colar el líquido, triturando bien los pétalos, pesarlo y mezclarlo
con igual cantidad de miel.
 Dejar en la heladera un par de semanas. Cuando el niño se queja, pasarle con el dedo
la miel sobre las encías, lo cual le producirá un gran alivio.

Eczemas
Para clamar el dolor y el punto de los eczemas escamosos o secos, impregnarlos con miel y
masajear suavemente.

Estreñimiento
La miel es, seguramente, el laxante más antiguo que se conoce: su uso regular garantiza una
actividad intestinal intensa. En los casos de estreñimiento esporádico y obstinado, empapar en
miel una bolita de algodón, aplicarla en el esfínter anal y dejarla toda la noche. Por la mañana, el
estreñimiento no será ya un problema.

Estrés
En los períodos de mucho trabajo, en los que la persona se siente cansada y nerviosa, lo mejor
es mezclar una cucharada de miel y una de agua de melisa (agua del Carmen, se compra en las
farmacias) y beberla para sentirse reconfortado. La miel favorece la actividad psicofísica e
intelectual, por su riqueza en el aporte tanto de azúcares como de fósforo.
Faringitis
Poner en maceración durante 15 minutos la corteza de una naranja en una taza de agua
hirviendo, endulzar con miel y utilizar para hacer gárgaras cuando se tenga dolor de garante o
afonía.
De la misma manera, se puede emplear un colutorio preparado con dos cucharaditas de miel
disueltas en dos de vinagre.

Fatiga
La miel de trébol es particularmente energética, lo que la convierte en muy adecuada para
quienes practican una actividad deportiva, ya sea usada como edulcorante o como ingrediente en
la preparación de integrados energéticos o bebidas.

Fiebre
La miel no baja ni hace desaparecer la fiebre, pero ayuda al organismo a soportarla mejor.
Disolver una cucharada de miel en dos cucharadas de agua caliente y beber a pequeños sorbos.

Gastritis
Para los que sufren trastornos digestivos o digestiones pesadas, nada mejor que poner un
cucharadita de miel en un vaso de agua antes de acostarse y beberlo por la mañana, cuando la
miel se haya disuelto totalmente; de esta manera se prepara el estómago para su actividad, ya que
la miel mejora la secreción de los jugos gástricos, el peristaltismo y la absorción intestinal.

Heridas
El fuerte poder antiséptico de la miel puede utilizarse también en las heridas, provocando una
disminución del dolor y la formación de queloides en las cicatrices. Después de haber lavado
cuidadosamente la herida y la zona circundante, recubrirla con una gasa embebida en miel, que
deberá cambiarse dos veces al día.

Incontinencia
Quien sufra este desagradable trastorno puede utilizar la acción hidroabsorbente de la miel y
tomarla antes de acostarse, pues retiene los líquidos. Con este fin es especialmente apta para los
niños.

Infecciones bucales
La miel tiene una acción desinfectante muy eficaz en las afecciones bucales. Disolver una
cucharada de miel en medio vaso de agua tibia y hacer buches. Si la infección es localizada,
como en el caso de aftas, es aconsejable disolver miel en jugo de limón y efectuar aplicaciones
locales.

Insomnio
En este trastorno la miel puede obrar milagros; es suficiente tomar una gran cucharada antes de
acostarse. Obviamente, la acción sedante es mayor en la miel de azahar y de tilo. Las sales
minerales contenidas en la miel pueden actuar mejor si se las suma al calcio y lo minerales que
contiene la leche. Por lo tanto, siguiendo al tradición, se aconseja beber leche con miel una
media hora antes de acostarse.

Intoxicación hepática
La miel es un poderoso agente protector hepático, y actúa como depurativo, aunque también
puede tomarse con fines preventivos. Lo mejor es, por la noche y antes de acostarse, beber una
cucharadita de miel de romero disuelta en una bebida caliente.

Laringitis
Disolver una cucharada de miel de romero y una de salvado en un vaso de agua. Hacer gárgaras.

Migrañas
Preparar una infusión con flor de tilo (dos cucharadas puestas en maceración por 15 minutos en
una taza de agua hirviendo) y endulzarla con miel de tilo. Beberla muy caliente y muy despacio.

Ojos irritados
En los casos de irritación diluir una cucharadita de miel en medio vaso de agua hirviendo;
empapar una gasa y poner como compresa en los ojos, dejándola por lo menos 10 minutos.

Quemaduras
Para desinfectar y ayudar a la cicatrización de las quemaduras, aplicar sobre éstas una capa de
miel purísima, recubriendo después con una gasa estéril. Este tratamiento es válido sólo para
pequeñas quemaduras.

Resaca
Si siente la cabeza pesada, una buena manera de despejar los vapores del alcohol y hacer que los
efectos de éste desaparezcan más rápidamente es tomar 3 ó 4 cucharadas de miel disueltas en un
vaso de agua.

Resfrío
Producirá cierto alivio tener en la boca el mayor tiempo posible una cucharadita de miel en
bruto que, gracias a la cantidad de polen y a los aceites esenciales, descongestionará la nariz del
enfermo y disminuirá la irritación de las mucosas.

Reumatismo
Calentar a fuego bajo ½ kilo de miel con 1 kilo de frutos de saúco, removiendo hasta que se
forme un compuesto homogéneo. Verter luego en un frasco y tomar 2 cucharadas al día en
períodos de dolores reumáticos, o como preventivo.
Tos
Probablemente no existe mejor calmante que la miel para las mucosas inflamadas; los remedios
recomendados tradicionalmente con este fin son muy numerosos. Algunos de ellos son:
 Picar lo más finamente posible ½ kilo de cebollas, ponerlas en un frasco de vidrio y
recubrirlas de miel. Después de 24 horas, pasar por un colador, recoger
cuidadosamente el poso que queda y administrar una cucharada cada hora.
 Preparar una infusión de tomillo muy concentrada, dejándola reposar una media
hora, filtrar después y pesar el líquido recogido. Agregarle igual peso de miel y
tomar una cucharada 2 veces al día.
Hay que recordar que las mieles de eucalipto, tomillo, castaño, pino y lavanda tienen
particulares propiedades expectorantes y sedantes de la tos, sobre todo si están disueltas en un
líquido caliente, como puede ser la leche o una infusión de hierbas, especialmente de tomillo y
salvia.

Tos ferina
Cortar un limón por el medio y recubrir las dos mitades con una cucharadita de azafrán,
haciendo que se adhiera bien. Al mismo tiempo, poner a calentar en una olla de fondo grueso ½
kilo de miel, removiendo. Cuando la miel esté bien caliente, echarle el limón, que se irá
aplastando hasta secarle todo el jugo. Recoger luego la miel en un frasco y darle al enfermo una
cucharadita cada hora para aliviarle los accesos de tos.

Várices
Tomar una infusión preparada con pulpa de castaña de la India (8 gramos), hojas de hamamelis
(8 gramos), flores de Artemisia vulgaris (8 gramos) y endulzarla con abundante miel de abeto. Al
mismo tiempo, masajear la parte afectada, en dirección hacia el corazón, con miel de romero y
miel de blanda que, en el caso de las várices ulceradas, ayudarán a la cicatrización (en este caso,
aplicar cataplasmas).
Capítulo 9
Recetas de cocina con miel
La miel es dulce y deliciosa, pero no siempre sabemos cómo utilizarla más allá de agregarla al
té para endulzar, o colocarla sobre las galletitas. La miel es un alimento muy nutritivo que debe
estar presente en la dieta de todos los días. Cuantas más formas encontremos de utilizarla, más
energía y beneficios recibirá nuestro organismo.
Afortunadamente, existen muchas recetas para preparar comidas con miel, tanto de postres
como de platos principales.

Pan de Miel

Ingredientes
250 g de harina.
¼ de litro de leche.
½ taza de miel.
2 huevos.
2 cucharadas de levadura en polvo.
Semillas de girasol y cebada.
Pan rallado.
Manteca.

Preparación
 Hierva la leche y la miel hasta que se disuelvan. Retire del fuego y reserve.
 Cierna la harina con el polvo de levadura y mezcle con los huevos, agregando
lentamente la leche y la miel reservadas.
 Bata hasta obtener una masa esponjosa. Engrase un molde rectangular para pan,
espolvoree el fondo con las semillas y cubra con el pan rallado.
 Vierta en el molde la masa anterior e introduzca en el horno a temperatura moderada,
durante 30 minutos.
 Saque del horno y, antes de desmoldar, dejar enfriar.

Bizcocho de Dátiles

Ingredientes
400 g de dátiles.
1 rodaja de ananá.
150 g de harina.
150 g de fécula de maíz.
260 g de azúcar.
8 huevos.
1 cucharadita de ralladura de limón.
Vasito de licor de cereza (Kirsch).
Manteca.
Miel.

Preparación
 Ponga los dátiles en remojo unos 30 minutos en el licor.
 Bata enérgicamente las yemas de los huevos junto con el azúcar y la ralladura de
limón.
 Bata las claras a punto de nieve y añada suavemente a la mezcla, removiendo. Eche
las 2 harinas en forma de lluvia y mezcle para que resulte una masa homogénea y
espumosa.
 Unte una fuente redonda con un poco de manteca y vierta la masa. Coloque la rodaja
de ananá en el centro y los dátiles. Bañe todo con la miel y hornee unos 30 minutos a
temperatura moderada.

Copas de fruta y frutos secos

Ingredientes
175 g de higos secos.
Una pizca de canela.
225 g de tofu.
2 cucharadas de puré de manzana.
1 o 2 cucharadas de castañas de Cajú.
Una pizca de canela.
2 cucharadas de miel.

Preparación:
 Ponga los higos en remojo hasta que se hinchen. Luego, píquelos y guarde el jugo.
 Mezcle bien los higos con el resto de los ingredientes, hasta lograr la consistencia
deseada, añadiendo el jugo de los higos si se desea.

Torta de yogur y tofu

Ingredientes:
150 g de tofu fresco.
1 yogur.
50 g de queso cremoso.
Una cucharadita de azúcar.
3 cucharadas de miel.
100 g de pasas de uva.
Una base de bizcocho o bizcochuelo.

Preparación:
 Bata el yogur, el queso cremoso, el azúcar y la miel hasta formar una crema.
 Agregue las pasas y el tofu. Unte sobre el bizcocho.
 Deje enfriar en la heladera.

Galletitas de miel y canela

Ingredientes
500 g de harina 0000.
1 cucharadita de bicarbonato de sodio.
2 cucharaditas de canela.
1 lata de leche condensada.
50 g de manteca.
100 cm de miel.
3

1 cucharadita de ralladura de limón.

Preparación
 Mezcle la harina con el bicarbonato y la canela.
 En una cacerola aparte coloque la leche condensada, la manteca y la miel. Lleve a
fuego moderado y revuelva.
 Añada la ralladura del limón y los ingredientes secos. Forme un bollo y deje
descansar 10 minutos.
 Estire hasta lograr un espesor de 4 mm. Corte con diferentes formas y cocine durante
10 minutos.

Helado con Nuez y Miel

Ingredientes
1 taza de miel.
½ taza de nuez.
4 bolas de helado de vainilla.

Preparación
 Ponga al fuego una taza de miel. Cuando hierva, deje calentar por 3 minutos más y
retire del fuego.
 Deje enfriar y agregue las nueces, mezclando bien. Sirva sobre helado de vainilla.

Alfajores de Miel

Ingredientes
100 g de manteca.
150 g de almendras
2 huevos.
2 yemas
250 g de harina leudante.
50 g de miel
Mermelada de frutas, cantidad necesaria.
1 cucharadita de ralladura de limón
150 g de azúcar impalpable

Preparación
 Procese las almendras junto con el azúcar impalpable. Luego mezcle con la harina ya
tamizada.
 En bol aparte haga una crema con la manteca y la miel, incorpore los huevos, las
yemas y la ralladura de limón. Agregue a la harina mezclando bien.
 Forme un bollo y deje reposar un tiempo en frío. Luego estire la masa.
 Corte las tapas de los alfajores y colóquelos en el horno. Cocine hasta que estén
secos y deje enfriar.
 Rellene con una mermelada de frutos rojos.

Postre de manzanas y miel

Ingredientes
4 manzanas verdes.
4 cucharadas de miel.
¼ de vaso de licor de Marrasquino.
¼ de vaso de licor de cacao.
½ vaso de coñac.
4 cucharadas de crema chantilly.

Preparación
 Corte las manzanas en rodajas chicas.
 Rocíe con bastante miel y bañe con un poco de marrasquino, licor de cacao y coñac.
 Cocine al horno durante unos 15 minutos.
 Sirva tibio acompañado de crema chantilly.

Alas de pollo picantes con miel

Ingredientes
2 cucharadas de jengibre rallado.
½ cucharadita de ralladura de naranja.
½ kg de alas de pollo.
1 cucharada de salsa de chiles o ajíes picantes.
150 g de miel.
2 cucharadas de salsa de soja.
60 g de mostaza de Dijon.
3 cucharadas de aceite vegetal.

Preparación
 Coloque las alas de pollo en una fuente.
 Mezcle todos los ingredientes y viértalos sobre las alas.
 Deje marinar la preparación durante toda la noche.
 Precaliente el horno, escurra la marinada y consérvela aparte.
 Coloque las alas de pollo en una sola capa en una bandeja alargada, forrada de papel
de aluminio. Vierta sobre ellas la marinada guardada.
 Cocine 40 o 45 minutos hasta que las alas estén doradas.

Arroz con miel

Ingredientes
½ Kg de arroz.
½ Kg de miel.
1 cucharadita de ralladura de limón.
Canela en rama.
Una pizca de azafrán.
Agua, cantidad necesaria.

Preparación
 Hierva el arroz en agua unos 15 minutos.
 En jarro aparte, hierva la miel durante 3 ó 4 minutos.
 Agregue el arroz, bien escurrido, sobre la miel.
 Agregue la ralladura del limón, la canela y el azafrán tostado previamente.
 Deje hervir 5 minutos.
 Colocar el preparado en un plato grande, alisar la superficie y dejar enfriar.

Cerdo con miel

Ingredientes
100 g de carne de cerdo (preferentemente, solomillo)
2 vasos de caldo.
2 cucharadas de aceite.
1 cucharada de salsa de soja.
1 cucharada de miel.
1 cucharada de azúcar
1 cucharada de sal.

Preparación
 Mezcle bien todos los ingredientes, a excepción del cerdo.
 Coloque el cerdo en un recipiente y bañe con la salsa.
 Tape y deje 2 horas en adobo.
 Coloque la carne en una fuente para horno y bañe con la salsa.
 Hornee a 220º C, durante 1 hora y media.
 Acompañe con arroz blanco.
Capítulo 10
El cuarto pilar de la salud total: el limón
Como todos los cítricos, el limón (Citrus limonum) es originario de la India y archipiélago Indo-
Malayo, en el sudeste de Asia. Los sucesivos periplos recorridos por grandes conquistadores
como Alejandro Magno o las Cruzadas, fueron llevando al limón hasta distintas tierras del
mundo. Se cree que fue el rey de Macedonia quien, en el siglo II después de Cristo, levó al limón
a la zona del Mediterráneo. Los musulmanes, por su parte, fueron los responsables de la
aparición de este cítrico en Italia, durante los siglos IX y X. Algo similar ocurrió con la llegada
del limón a América, de la mano de los colonos españoles.
El limón fue tan bien conocido en la antigüedad que una de sus variedades es la primera de las
frutas agrias descriptas por griegos y romanos. Se trata de la cidra (Citrus medica L.). Los
científicos creen que la mayoría de los cítricos, incluido el limón, son variedades originadas a
partir del cidro. La leyenda cuenta que en el antiguo Egipto dos delincuentes fueron condenados
a morir mordidos por el áspide, una fiera venenosa de colmillos como sables. Camino a la
ejecución se les dio a comer cidra. Para sorpresa de los condenados, después de ser mordidos por
el animal no sintieron ningún dolor ni herida. Al día siguiente, las autoridades ordenaron realizar
un experimento: a uno de los condenados se le dio de comer cidra, mientras que al otro le
prohibieron el fruto. El resultado fue el esperado: el que comió la cidra sobrevivió al ataque del
áspide y fue puesto en libertad; el otro murió en pocos segundos.
Las leyendas en torno al limón son abundantes: el nombre “hesperidio” con el que también se lo
conoce proviene de la mitología griega, que cuenta la existencia del Jardín de Hespérides repleto
de manzanas de oro y custodiado por un furioso dragón. El semidiós Hércules dio muerte al
dragón y se apoderó de las manzanas de oro. Se cree hoy en día que aquellas manzanas de oro no
eran otra cosa que limones, de ahí la difusión del nombre hesperidios.

La más saludable
El limón es, sin dudas, la más saludable de todas las frutas. Rico en nutrientes, depurador de
toxinas y poderoso bactericida, debe gran parte de su fama a su alto contenido en vitamina C.
En 1928 se descubrió la vitamina C, conocida como ácido ascórbico, aislándose de las naranjas,
los pimientos rojos y posteriormente del jugo de otros cítricos (fundamentalmente el limón)
donde existía la mayor concentración. Una de las propiedades más destacadas de esta vitamina es
su capacidad de prevenir el escorbuto, una enfermedad asociada a la carencia de vitamina C que
produce anemia, raquitismo, hemorragias, úlceras en las encías y otros síntomas. Antiguamente,
el escorbuto era muy frecuente entre los tripulantes de los barcos que permanecían varios meses
en alta mar, donde era imposible hallar frutas. Con el tiempo y a partir de 1928, la relación entre
esta enfermedad y la vitamina C terminó con su avance.
Aunque hay estudios que afirman lo contrario, existe clara evidencia acerca de los efectos que el
ácido ascórbico tiene sobre el organismo, particularmente en la prevención de resfríos, ronquera,
amigdalitis, pulmonías, bronquitis, congestiones, gripe, pleuresías, asma y otros problemas
respiratorios. La vitamina C posee gran poder desinfectante y tiene además una acción antitóxica
frente a los venenos microbianos y medicamentosos. En cualquier parte del organismo donde se
encuentren las toxinas, ya sea en la sangre, en los órganos, o en los tejidos, el limón disolverá sus
acumulaciones. En casos de intoxicación gastrointestinal por consumir alimentos en mal estado,
así como en digestiones pesadas, actúa normalizando las funciones alteradas, neutralizando las
toxinas y ayudando en su eliminación. Además, los bioflavonoides de la pulpa y la cáscara
protegen a la vitamina C de la oxidación y la hacen veinte veces más eficaz que cualquier otra.
Otro de sus nutrientes, la vitamina P, ayuda a tonificar los capilares y vasos sanguíneos. Una de
sus funciones es otorgar permeabilidad a los capilares sanguíneos, de manera que su carencia los
vuelve frágiles y puede ocasionar pequeñas hemorragias. También colabora en la cicatrización
de heridas. Otras vitaminas presentes en esta fruta son las del complejo B (B1, B2, B3, B5, B6 y
PP).
La vitamina B1 (tiamina) previene y cura la enfermedad del beriberi, cuyos síntomas son
parálisis, edema e insuficiencia cardiaca. Interviene además en el metabolismo de los hidratos de
carbono. La vitamina PP (niacina) previene contra la piel áspera y la pelagra, un mal
caracterizado por la inflamación de la piel, la mala digestión y alteraciones mentales. Su
consumo previene otros trastornos dermatológicos, digestivos y neurológicos.
Entre los minerales, el limón es rico en potasio, magnesio, calcio y fósforo, aunque también
presenta cantidades menores de sodio, hierro y flúor.

Pocas calorías
El limón contiene, cada 100 gramos crudos, tan sólo 14 calorías y, quizás lo más importante,
aporta 53 mg de vitamina C: tan sólo la naranja (que aporta 54 mg por cada 100 g de peso neto)
lo supera en cuanto a contenido de este valiosísimo nutriente. Pero, además, el limón nos brinda
otros importantes elementos esenciales para el correcto funcionamiento del organismo. Por cada
100 gramos crudos, los limones contienen:

 140 mg de potasio.
 7 g de carotenos.
 27 mg de calcio.
 2 g de hidratos de carbono.
 1 g de fructosa.
 0,2 g de grasa.

A la hora de disfrutar de estos beneficios, también se recurre a las naranjas, los pomelos o las
mandarinas. Y aunque es verdad que su intenso contenido de ácido cítrico (casi el 5%) hace que
no sea muy agradable comerlo crudo, el limón se puede incorporar a numerosas y deliciosas
recetas para aprovechar sus propiedades naturales y valores curativos.

Todos sus beneficios


El limón es uno de los alimentos que más usos tiene en torno al cuidado de la salud. Incorporar
sus beneficios a la dieta diaria siempre será una buena medida porque, además de favorecer
como todos los cítricos a la absorción del hierro y a la eliminación de toxinas, posee una fuerte
acción astringente y bactericida. Es desinfectante, antioxidante, antiinfeccioso, antiséptico,
digestivo, cicatrizante y estimulador del sistema inmunitario. Evita la formación de cálculos
biliares, previene la aterosclerosis y el riesgo cardiovascular. Puede aliviar una bronquitis, una
sinusitis o una angina. Detiene la diarrea, tiene propiedades alcalinizadoras de la orina, ayuda a
eliminar el ácido úrico y se usa en casos de gota o hiperuricemia. Incluso, es un aliado de los
deportistas porque repone el equilibrio hídrico en forma rápida y se utiliza para paliar el estrés.
El listado total de sus beneficios incluye:
 Favorece la absorción del hierro y la eliminación de toxinas
 Previene la aterosclerosis y el riesgo cardiovascular
 Alivia bronquitis, sinusitis o anginas
 Es un estimulador natural del sistema inmunitario
 Evita la formación de cálculos biliares porque es antiséptico y tiene propiedades
alcalinizadoras de la orina
 Acompaña casos de gota o hiperuricemia
 Cicatriza lastimaduras de la piel
 Limpia y suaviza la piel
 Sirve para adelgazar
 Detiene la diarrea
 Se utiliza en casos de otitis o conjuntivitis
 Alivia el estrés y el dolor de cabeza
 Es digestivo
 Repone el equilibrio hídrico en forma rápida
 Estimula la acción del páncreas y del hígado

Recomendaciones
Aunque es un alimento natural lleno de beneficios, no se recomienda el consumo excesivo de
limón en ciertos casos. Por ejemplo, entre quienes padecen desmineralización, descalcificación o
fragilidad de los huesos; en casos de anemia y raquitismo; si hay inflamación de las encías,
dientes flojos, llagas en la boca o la garganta, así como grietas en la lengua; y en personas con
insomnio, sensibilidad a los ácidos, estreñimiento crónico e inflamación de la próstata, de la
matriz, la vejiga o el esófago. La cantidad a consumir depende de cada individuo y de su
organismo. Quienes poseen una constitución fuerte pueden consumir mayores cantidades de este
cítrico que los ancianos y los niños. Lo mismo ocurre con las personas robustas, con respecto a
los más delgados. Además, es asimilado de mejor manera por el cuerpo en época de verano.
Teniendo en cuenta estos factores, es posible utilizar el limón como remedio casero consumiendo
desde pequeñas dosis de jugo hasta dos o tres limones por día. Como siempre advertimos, lo
mejor es consultar con un médico.
Es necesario saber que cuando se consume embotellado o enlatado mantiene la vitamina C, la
vitamina P y el potasio, pero no los bioflavonoides que están presentes en la cáscara. Los jugos
concentrados tienen cuatro veces más calorías y nutrientes, siempre y cuando sean naturales. Las
bebidas gaseosas con sabor a limón, por lo general no contienen vitaminas en cantidad
importante y están elaboradas a base de agua, azúcar y saborizantes artificiales.
Cómo elegir un buen limón
Cuando se trata de elegir el mejor limón, no siempre es recomendable dejarse llevar por las
apariencias. Que el fruto sea grande, brilloso y de intenso color no significa que sea bueno. Lo
importante es que tenga una gran cantidad de jugo, para lo cual conviene elegir ejemplares
que, aunque sean pequeños, sean pesados para su tamaño. Descarte los que presenten la piel
seca y dura al tacto, así como los que estén demasiado blandos. Por lo general, suelen ser
mejores los limones con cáscara fina y de color verdoso.
Para conservarlos frescos y en buen estado, lo mejor es mantenerlos a temperatura ambiente
hasta quince días. En la heladera pueden durar hasta cinco semanas, siempre que los guarde en
una bolsa plástica. Un consejo: si se sumerge cinco minutos en agua caliente se le extrae
mayor cantidad de jugo.
Capítulo 11
Remedios caseros con limón
Anemia
Bata una yema de huevo con el jugo de 1 limón. Agregue 1 cucharada de melaza y la pulpa
sobrante del limón. Tome la mezcla 3 veces por día, 3 veces por semana.

Antibiótico
Exprima y caliente el jugo de dos limones. Machaque los dientes de ajo, mezcle con la pulpa del
limón que ha quedado en el exprimidor y agregue al jugo. Endulce con una cucharadita de miel y
haga varias gárgaras, escupiendo el líquido usado. Beba el sobrante.

Arrugas
Deje macerar 15 días la ralladura de 1 limón mezclada con aceite de germen de trigo. Aplíquelo
sobre las arrugas.

Bronquitis
Tome el jugo de dos limones en ayunas. Hierva las cáscaras y la pulpa sobrante en agua, cuele y
agregue una cucharadita de miel. Beber en el desayuno. Combine con la aplicación de compresas
de jugo de limón sobre el pecho.

Calambres
Ingiera 1 litro de agua mineral mezclada con media cucharadita de bicarbonato, el jugo de 2
limones y media cucharada de miel de romero.

Caspa y caída del cabello


Frotar el cuero cabelludo con la pulpa de un limón mezclada con cebolla rayada.

Ciática
Masajee la zona afectada con jugo de limón.

Diarrea
Añada a 1 litro de agua mineral sal, azúcar, bicarbonato y el jugo de 3 limones. Tome de a
sorbos.

Dolor de cabeza
Aplique compresas de limón en la sien, sustituyéndolas por otras a medida que se van
calentando.
Dolores
Caliente unas rodajas de limón en la sartén. Colóquelas dentro de un paño y utilícelas como una
cataplasma, sobre la cara, la espalda, las piernas o cualquier zona afectada. También se puede
masajear con jugo de limón.

Estreñimiento
Tome en ayunas, durante una semana, el jugo de medio limón mezclado con dos cucharadas de
aceite de oliva.

Estrías
Triture la corteza de 1 limón y añada 1 yema de huevo bien batida. Cubra con la mezcla recién
preparada sus senos o la zona afectada durante varios minutos y luego enjuague con agua.

Exfoliación de piel
Corte rodajas de limón y de pomelo y cúbralas con bicarbonato. Aguarde 3 minutos para que se
impregnen y colóquelas sobre la piel 5 minutos. Antes de retirarlas, frote suavemente la piel.
Lave su cara con agua tibia.

Gases intestinales
Tome una infusión caliente preparada con corteza de limón y granos de anís.

Gastroenteritis
Exprima 2 limones, agregue medio vaso de agua y una pizca de bicarbonato y de sal. Beba
varias veces al día.

Inapetencia
Tome el jugo de uno o dos limones antes de cada comida.

Lastimaduras
Corte un limón por la mitad y colóquelo sobre la herida. Arde, pero la herida cicatrizará de
manera óptima, evitando infecciones.

Lumbalgia
También se puede masajear con jugo de limón.

Mal aliento
Mezcle el jugo de medio limón con dos cucharadas de aceite de oliva. Tome en ayunas durante
3 días.
Manchas de la edad
Prepare una mascarilla con 2 cucharadas de harina de centeno, el jugo de 1 limón y 1 cucharada
de miel. Aplique sobre las manchas 10 minutos y luego enjuague.

Manchas solares
Mezcle el jugo de 1 limón con una cucharada de aceite de oliva. Aplique sobre las manchas.

Obesidad
Tome el jugo de un limón en ayunas diariamente y, cuando beba agua, hágalo de una jarra que
contenga rodajas de limón en su interior.

Peeling
Diluya 2 cucharadas de azúcar en el jugo de 1 limón y aplíquelo en el rostro durante 20 minutos.
Luego, enjuáguese con agua fresca.

Picaduras de insectos
Mezcle el jugo de medio limón con 1 cucharadita de vinagre y una pizca de sal. Aplique sobre
la picadura.

Piel suave
Coloque en un vaso agua, el jugo de un limón y perejil picado finamente. Deje macerar durante
1 noche y aplique a la mañana siguiente, con un algodón.

Para piel seca o deshidratada


Agregue a una crema base neutra el jugo de tres limones. Conserve en la heladera. Aplique fría
sobre la zona afectada.

Sabañones o reumatismos
Frote la zona con una rodaja de limón.

Vómitos
Mezcle el jugo de 1 limón con medio litro de agua mineral con gas. Tome de a sorbitos.
Hemorroides, várices y golpes
Se puede elaborar una pasta de limón para el tratamiento de hemorroides, várices y golpes. Se
prepara con 25 g de vaselina, 25 g de manteca de cacao, aceite de oliva extra virgen y la
corteza rallada de 2 limones. Coloque la ralladura de los limones en un tarro, cúbralo con
aceite y ciérrelo. Deje macerar durante 15 días. Coloque, a baño María, la vaselina y la
manteca de cacao para que se fundan. Mezcle con el oleato macerado y guarde en un tarro
limpio y etiquetado. La pasta de limón se utiliza fría y es de uso externo.
Gotas anti-infecciones
Ideal para casos de gripes, resfríos, anginas o infecciones leves, las gotas de limón se preparan
con medio litro de alcohol 70º y la cáscara de 2 limones. Coloque la cáscara del limón en el
alcohol en un frasco cerrado y deje macerar durante 15 días. Cuele y guarde el líquido en un
gotero esterilizado. Tome dos gotitas puras o disueltas en la menor cantidad de agua posible,
durante los días que se presente el malestar.
El jengibre, un aliado del limón
De sus múltiples beneficios, el limón y el jengibre comparten uno: el tratamiento de la gripe.
Por sus efectos estimulantes, el jengibre; y por su alto contenido de vitamina C, el limón, se
los puede combinar en un preparado especial para combatir esta enfermedad.
Tome un diente de ajo mediano machacado, una cantidad igual de jengibre rallado y el jugo
de un limón recién exprimido, y mezcle todo con una cucharadita de miel. Vierta luego la
preparación en una taza de agua muy caliente, aunque no hervida; revuelva bien, hasta
conseguir una bebida uniforme. Tome hasta 3 tazas de este preparado por día, hasta que la
gripe desaparezca.
También es posible preparar un tónico para tratar los estados de debilidad general: tome 1
gramo de ginseng en polvo, y cantidades equivalentes de jengibre crudo rallado, jugo de limón
y miel; mezcle bien en un recipiente todos los ingredientes y póngalos a hervir. Luego,
disuelva la preparación en una taza de agua y tome este tónico hasta 3 veces al día.

La cura del Limón


Numerosas investigaciones científicas han afirmado que el limón puede ser usado para la cura
de todas las enfermedades, principalmente por su acción bactericida y depurativa de la sangre. Su
uso preventivo es del mismo modo fundamental, convirtiéndose en una barrera tanto contra las
enfermedades febriles y contagiosas como contra las epidémicas, como el sarampión o la
rubéola. Como neutraliza el ácido úrico, el limón es de gran ayuda en casos de reumatismo, gota
y artritis. Lo usan asmáticos y previene la bronquitis, la sinusitis y la gripe. El limón cura la
sífilis, desórdenes estomacales, gases intestinales, indigestión, acidez, obesidad, enfermedades
del corazón, de los riñones, del hígado y de la vejiga. Quita el dolor de cabeza, corta
hemorragias, detiene el insomnio… La lista es infinita.
Es importante que realice la cura sin agregar agua o endulzantes al limón. Además, tome su
dosis diaria en ayunas y respete las proporciones, son necesarias para que el organismo reciba la
cura adecuadamente. Siempre, el limón se ingiere en forma de jugo y se exprime inmediatamente
antes de tomarse. No puede reservarse con anterioridad. Esta cura moviliza el organismo desde
lo más profundo. Como reacción, este puede liberar, a través de diferentes expresiones, aquello
que mantenía latente, oculto o sin síntoma. Por ese motivo, es posible que cuando realice la cura,
se presenten erupciones en la piel parecidas a la urticaria, señal de que el limón está purificando
la sangre. También puede provocar disfonía, sed o cambios en el humor.
Por último, siempre que consuma limón puro, lave sus dientes inmediatamente para no arruinar
el esmalte dental.
Día 1: tome el jugo de un limón.

Día 2: tome el jugo de dos limones.

Día 3: tome el jugo de tres limones.

Día 4: tome el jugo de cuatro limones.

Día 5: tome el jugo de cinco limones.

Día 6: tome el jugo de seis limones.

Día 7: tome el jugo de siete limones.

Día 8: tome el jugo de ocho limones.

Día 9: tome el jugo de nueve limones.

Día 10: tome el jugo de diez limones.

Día 11: tome el jugo de nueve limones.

Día 12: tome el jugo de ocho limones.

Día 13: tome el jugo de siete limones.

Día 14: tome el jugo de seis limones.

Día 15: tome el jugo de cinco limones.

Día 16: tome el jugo de cuatro limones.

Día 17: tome el jugo de tres limones.

Día 18: tome el jugo de dos limones.

Día 19: tome el jugo de un limón


Capítulo 12
Recetas de cocina con limón
El limón, por su fuerte y ácido sabor, suele quedar relegado a no ser más que un condimento en
frituras y un frecuente aderezo de ensaladas. Sin embargo, es posible aprovechar su característico
sabor y todos sus beneficios para la salud, incorporándolo en la alimentación de todos los días.
¿De qué manera lograrlo? Existen muchas recetas deliciosas que utilizan al limón: postres,
pescados, carnes, salsas y aceites pueden llevarnos su poder sanador a la mesa.

Pollo al limón

Ingredientes
2 pechugas de pollo medianas, sin piel.
1 diente de ajo.
1 cucharadita de sal.
1 cucharadita de ralladura de limón.
1 cucharadita de jengibre, fresco, rallado y pelado.
1 cucharada de aceite de sésamo.
El jugo de 1 limón, recién exprimido.

Preparación:
 Machaque el ajo y la sal hasta que formen un puré uniforme, y luego mézclelo con la
ralladura y el jugo de limón, el aceite de sésamo y el jengibre.
 Coloque las pechugas en una fuente no muy profunda y cúbralas con la preparación
anterior. Deje en adobo por 30 minutos.
 Precaliente el horno por 25 minutos y cocine las pechugas en la misma fuente hasta
que estén listas. Si lo prefiere, puede freír las pechugas en seco en una sartén.

Granizado de limón

Ingredientes:
150 ml de agua.
60 g de fructosa.
50 ml de jugo de naranja, recién exprimido.
75 ml de jugo de limón, recién exprimido.
3 cucharadas de jugo de lima, recién exprimido.

Preparación:
 Disuelva la fructosa en el agua caliente, aunque no hervida. Luego, mézclela bien
con el resto de los ingredientes y coloque la preparación en una sorbetera (o algún
recipiente metálico con tapa, apto para congelar).
 Cuando ponga la sorbetera en el congelador, reduzca la temperatura del mismo al
mínimo posible.
 Deje la preparación por algunas horas, hasta que casi esté congelada. Entonces,
retírela y mezcle bien una vez más.
 Repita el punto anterior hasta que la preparación esté bien congelada. Recuerde que
el granizado nunca será del todo sólido, incluso recién salido del congelador.

Sopa de limón

Ingredientes:
1 cucharada de ralladura de limón.
¼ taza de jugo de limón colado.
/ pan de manteca.
1
3

1 cucharada de perejil picado.


1 cucharada de cilantro picado.
1 cucharada de ajo finamente picado.
1 ½ litro de caldo de pollo.
Sal y pimienta, a gusto.

Preparación:
 Caliente la manteca a fuego bajo, agregue el perejil y cocine.
 Añada cilantro y ajo, saltee.
 Agregue el caldo, el jugo y la ralladura de limón; revuelva luego de cada
incorporación.
 Deje enfriar y salpimiente. Sirva con perejil y tiras de cáscara de limón.

Chauchas al limón

Ingredientes:
400 g de chauchas.
1 diente de ajo.
1 ramillete de perejil.
1 ramillete de albahaca.
3 cucharadas de aceite.
El juego de un limón.
2 cucharadas de vinagre.
Preparación:
 Cueza las chauchas con agua y sal. Escurra. Pique finamente el perejil, la albahaca y
el ajo.
 Agregue un poco de aceite en una cacerola e incorpore el ajo, saltee un poco y añada
las chauchas y las hierbas. Riéguelas con el jugo de limón y el vinagre. Saltéelo y
sirva bien caliente.

Bocaditos de limón y naranjas

Ingredientes:
100 g de manteca blanda.
100 g de azúcar.
125 g de harina 000.
2 huevos batidos.
1 cucharada de jugo de naranja.
1 cucharada de jugo de limón.
1 cucharadita de polvo de hornear.
½ cucharadita de sal.
Ralladura de ½ limón y ½ naranja.
Azúcar impalpable, cantidad necesaria.
Jugo de naranja, a gusto

Preparación:
 Mezcle el azúcar con la manteca blanda. Agregue de a poco los huevos batidos.
 Incorpore la harina, el polvo de hornear, el jugo de naranja y limón, las ralladuras y
la sal. Mezcle con movimientos envolventes hasta que quede una preparación
homogénea. Bata.
 Para el glace, mezcle bien dos cucharadas de azúcar con el jugo de naranja. Hornee
los bocaditos en un horno moderado a una temperatura media. Terminado el
horneado, agregue el glace por arriba.

Pescado frito con salsa de limón

Ingredientes:
Cáscara rallada y jugo de un limón.
700 g de lenguado cortado en tiras.
¼ taza de jarabe de maíz.
2 cucharadas de harina.
2 cucharadas de semillas de girasol tostadas.
½ cucharadita de páprika o pimentón.
½ cucharadita de sal de cebolla.
3 cucharadas de aceite vegetal.
Salsa de limón, cantidad necesaria.

Preparación:
 Precaliente el horno a 260 grados centígrados con un plato para hornear dentro.
 Espolvoree la cáscara y el jugo del limón encima del pescado. En un plato hondo,
combine el aceite de maíz, la harina, las semillas de girasol, la páprika y la sal de
cebolla.
 Cubra el pescado con la mezcla de jarabe de maíz y espere a que se asiente.
 Retire con cuidado el plato del horno y cubra el fondo con aceite. Sumerja el pescado
en el aceite para que se empape de todos los lados.
 Hornee al descubierto de ocho a diez minutos o hasta que se dore ligeramente.
 Sirva con salsa de limón.

Para la salsa de limón:


En una cacerolita mezcle los siguientes ingredientes y caliéntelos:

¼ taza de agua.
2 cucharadas de salsa de soja.
2 cucharadas de jerez seco.
Ralladura y jugo de medio limón

Lemon Pie

Ingredientes

Masa:
200 g de harina 000.
100 g de manteca.
2cdas. soperas de azúcar.
½ cucharadita de sal.
2 yemas.
1 cucharadita de polvo de hornear

Relleno:
1 yema.
100 g de azúcar.
2 cdas. de fécula de maíz.
30 g de manteca.
250 cc de agua fría.
Ralladura de limón, a gusto.
Jugo de 1 limón.

Merengue:
3 claras.
6 cucharadas de azúcar.

Preparación:

Masa:
 Mezcle en un bol la harina, la manteca, el azúcar, la sal, las yemas, el polvo para
hornear y la ralladura de limón. Una vez unidos todos los ingredientes, amase hasta
lograr una pasta homogénea. Estírela dejando medio centímetro de espesor.
 Cubra el molde, lleve al horno y cocine a fuego medio hasta que la masa se dore
levemente.

Relleno:
 En un bol agregue la yema, el azúcar, la maicena, la manteca, el agua, la ralladura y
el jugo del limón. Cocine a fuego lento hasta lograr una consistencia espesa. Dejar
enfriar.
 Agregue luego esta preparación sobre la masa ya cocida.

Merengue:
 Bata las 3 claras junto a las 6 cdas. de azúcar hasta lograr una mezcla consistente.
 Lleve al horno a temperatura baja durante unos 20 o 25 minutos. Deje enfriar.

Abadejo con salsa de limón

Ingredientes
800 g de abadejo en filetes.
Sal.
Jugo de limón, cantidad necesaria.
Rocío vegetal.

Para la salsa:
2 cucharaditas de miel.
1 pocillo de jugo de limón.
Ralladura de piel de limón.
4 cucharadas de agua.
1 cucharada de perejil fresco picado.
2 dientes de ajo picados.
 Marine el pescado con sal y el jugo limón y deje reposar durante 2 horas en la
heladera.
 Mientras reposa el pescado, reserve el perejil y procese el resto de los ingredientes
para la salsa, vierta en una salsera y agregue el perejil picado.
 Caliente una sartén, cubra los filetes con rocío vegetal y cocine a fuego lento,
dándolos vuelta con una espátula.
 Coloque una porción de pescado en cada plato y cubra con la salsa.

Mermelada de limón

Ingredientes
12 limones.
Azúcar, cantidad necesaria.

Preparación
 Lavar los limones, cortarlos por la mitad y retirarles las semillas.
 Sumergirlos en agua con una cuchara de sal gruesa y dejarlos reposar durante 2 días.
Cambiar el agua dos veces por día, para quitarles el sabor amargo.
 Retirarlos, enjuagarlos bien y pelarlos, quitar la parte blanca a la cáscara y cortarla
en juliana.
 Picar la pulpa, pesar las cáscaras y la pulpa picada y calcular la misma cantidad de
azúcar. Colocar todo en un recipiente y cocinar a fuego lento hasta que la mermelada
esté a punto, revolviendo de vez en cuando con cuchara de madera.
 Para saber si está lista la mermelada, ponga un poco en un plato, deje enfriar y fíjese
si se desliza. Si queda firme es que está en su punto. Si se corre, deje cocinar unos
minutos más. Envase en frascos esterilizados dejando 1 cm libre entre el contenido y
la boca del frasco.

Arroz al jugo de limón

Ingredientes
Una taza y media de arroz.
2 cucharadas de coco desecado.
2 tazas y ½ de agua.
1 cucharadita de cúrcuma.
2 cucharadas de leche de coco.
1 ají picante verde sin semillas, picado.
Media taza de ghee.
1 limón.
2 cucharadas de castañas de cajú machacadas.
/ cucharadita de semillas de mostaza.
1
3

Preparación
 En una cacerola, cocine el arroz con el agua y la cúrcuma a fuego fuerte hasta que
hierva, tápelo bien y deje cocer a fuego lento durante 15 minutos.
 Humedezca el coco desecado con la leche.
 Tueste el ají, las castañas y las semillas de mostaza con el ghee.
 Agregue el coco, el arroz y el jugo de limón.
 Tape la cacerola y deje cocer el arroz durante otros 10 minutos hasta que se consuma
el líquido. Puede servirse con el resto del limón cortado a rodajas finas.
Anexo
Más alimentos para la salud
Aunque el ajo, la cebolla, la miel y el limón se destacan por sobre el resto de los alimentos, hay
muchos otros que resultan indispensables para la salud. Los productos que presentamos a
continuación fueron sometidos a estudios científicos y se demostró su importancia en la dieta,
tanto gracias a sus nutrientes como a las propiedades medicinales que poseen para el buen
funcionamiento del organismo.

Aceite de oliva
Mucho se habló de las propiedades del aceite de oliva durante los últimos años. Rico en
vitaminas A, D y K, tiene también una mayor proporción de vitamina E, cuya función más
importante es actuar como sustancia antioxidante y combatir la formación de radicales libres
responsables del envejecimiento. Gracias a los polifenoles que contiene, es reconocido como uno
de los alimentos naturales más efectivos para controlar los niveles de colesterol, así como reducir
la hipertensión arterial. Recientes investigaciones demostraron que, además, el aceite de oliva es
efectivo en la prevención del cáncer de colon. Sus propiedades cosméticas también son
reconocidas. El aceite de oliva es una fuente muy rica en ácidos grasos (Omega 9) esenciales que
contribuyen a restaurar los niveles naturales de humedad de la piel. También tiene propiedades
suavizantes, relajantes y tonificantes. Se trata del aceite más sano y el que menos se degrada con
la cocción, tornándose menos nocivo para la salud que otros aceites.

Levadura de cerveza
Es un complemento rico en proteínas y vitaminas del grupo B, ideal como suplemento en dietas.
Es de fácil digestibilidad y rápida absorción por el organismo. Su gran importancia como
suplemento nutritivo radica en que sus proteínas contienen todos los aminoácidos considerados
esenciales por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones
Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Las proteínas de la levadura presentan elevada cantidad de lisina (generalmente, ausente en los
cereales), isoleucina y treonina. El contenido de aminoácidos es muy similar a los de las
proteínas de la soja. Además, posee ácidos nucleicos (principalmente ARN). Por eso es necesario
recomendar una restricción en su consumo en pacientes con aumento del ácido úrico. La ingesta
de 20 gramos por día corresponde al 17% de la dosis diaria recomendada (DDR) de 65 gramos
por día de proteínas para un hombre adulto de 70 kilos. De ahí que la levadura de cerveza es un
suplemento proteico muy útil para dietas hipocalóricas y para aquellas deficitarias en proteínas.
Contiene una importante cantidad de vitaminas del complejo B, indispensables para el normal
desarrollo de las funciones celulares durante el crecimiento y la reproducción. De hecho, el
consumo de 20 gramos diarios cubre buena parte de las necesidades de vitaminas del complejo
B. En la levadura de cerveza virgen predominan los fosfatos y el potasio, que cubren una cuota
importante de la DDR en el hombre, 34% y 21% respectivamente con la ingesta de 20 gramos de
levadura. También es relativamente alto el contenido de azufre, magnesio y calcio. Es muy rica
en fibra, siendo ideal para reducir el colesterol.
Pescados grasos
El gran porte del pescado graso (salmón rosado, arenque, atún, sardina, entre otros) es un
descubrimiento más o menos reciente llamado Omega 3. Este compuesto es un ácido graso
benigno que ayuda a prevenir infartos y arteroescleroris, debido a que colabora en la reducción
de los triglicéridos, la grasa que circula en la sangre. Además, beneficia el sistema inmunológico.
Cuando el organismo dispone de ácidos grasos Omega 3, las membranas celulares que fabrica
son flexibles y elásticas. Cuando el organismo no tiene a su disposición los aceites Omega 3,
recurre a las grasas saturadas para formar sus membranas. La diferencia entre ambas es que las
membranas celulares fabricadas con grasas saturadas son más rígidas, menos flexibles, y dan
lugar a tejidos de menor calidad. En el caso de los vasos sanguíneos, unas membranas celulares
poco elásticas y flexibles están relacionadas con mayor riesgo de hipertensión, arritmia y otros
problemas cardiovasculares. Por lo tanto, desde el embarazo hasta la tercera edad, el consumo de
pescado azul (de una a tres veces por semana) está relacionado con menor riesgo de
enfermedades y de mortalidad prematura. En cambio, el pescado blanco (merluza, lenguado,
bacalao) con mucho menor contenido en aceite Omega 3, no produce los efectos benéficos de sus
parientes. Cuanto más graso es el pescado, mayor es su concentración de aceite Omega 3.

Té verde
El té se elabora a partir de las hojas más recientes y tiernas del árbol del té. Las múltiples
variedades de té existentes son producto de los diferentes tratamientos a los que se someten las
hojas. El té sin fermentar se denomina “té verde”. Brinda un enorme bienestar a nuestro
organismo: contiene vitaminas, derivados del té, aceites esenciales y fluoruro. También tiene
propiedades diuréticas y se le atribuye la capacidad de mejorar la visión y la atención, por lo que
los chinos creen que quienes lo consumen habitualmente gozan de una vida más larga. De hecho,
se han comprobado científicamente sus propiedades medicinales, y sus efectos beneficiosos
sobre el cuerpo humano. El té disfruta, por tanto, de un reconocimiento generalizado como
alimento natural y saludable. Pero existen dos variedades especialmente beneficiosas, cuyas
propiedades resultan impresionantes: el té rojo (o Pu-erh) y el té verde, ricos en aminoácidos,
minerales, polifenoles y vitaminas. Estas variedades, consumidas con regularidad, reducen el
riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, disminuyen los niveles de glucosa e insulina
en sangre, refuerzan el sistema inmunológico, previene la retención de líquidos y favorecen la
circulación.

Vinagre de manzana
El vinagre es mucho más que un aderezo. Son muchas las propiedades y su acción es útil para
ayudar a prevenir la obstrucción de las arterias a causa del calcio. El calcio llega a la sangre en
gran cantidad cuando la persona tiene una dieta excesiva en proteínas. Se deposita en las arterias
y allí se acumula, obstruyendo estos conductos del mismo modo que lo hace el colesterol. Esta
acumulación puede interferir con la normal circulación de la sangre y derivar en arteriosclerosis.
El vinagre disuelve estos depósitos de calcio por la acción de sus ácidos naturales y del potasio,
que promueve su absorción. La relación existente entre el vinagre y el calcio se traduce en su
capacidad para prevenir la aparición de la osteoporosis, una enfermedad caracterizada por la
deficiencia de calcio en los huesos, muy frecuente en la edad adulta, sobre todo en las mujeres.
El vinagre constituye una gran ayuda para combatir los males típicos del paso de los años, al
combatir a los radicales libres. El vinagre de manzana también contiene pectina, una fibra que
envuelve al colesterol para que luego el organismo lo convierta en ácido biliar. Otra de sus
propiedades es su capacidad de aumentar la producción de saliva en la boca, colaborando con la
digestión. El consumo de vinagre favorece también el funcionamiento de los riñones y la vejiga;
reduce las inflamaciones intestinales y ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo, ya que combate
las bacterias y gérmenes del tracto urinario.

Vino tinto
El vino tinto constituye una de las fuentes de salud más completas. Recientes investigaciones
pusieron en evidencia que el vino tinto es el producto natural que contiene el rango más amplio
de sustancias que protegen el organismo. Se trata de los polifenoles, responsables de que el
consumo moderado de vino disminuya el riesgo de mortalidad por cualquier causa,
especialmente por afecciones relacionadas con el corazón y las enfermedades de las arterias.
La acción farmacológica de los polifenoles se conoce desde la antigüedad y se aplica en
fitoterapia con efectos expectorantes, laxantes, purgantes, astringentes, antiinflamatorios,
vasoconstrictores, antioxidantes, antibacterianos, antifúngicos, antihelmínticos y estrogénicos.
Varios estudios comprobaron que dos copas diarias de vino en el caso de los hombres y una copa
en las mujeres, protege al ADN de la oxidación y disminuye el riesgo de arteriosclerosis. Los
polifenoles del vino no sólo son buenos para prevenir enfermedades cardiovasculares, sino que
también tienen una acción antiproliferativa tumoral, convirtiéndose en protectores contra el
cáncer. Gracias a sus compuestos antioxidantes, desempeña un papel preventivo, eliminando
metabolitos responsables del estrés oxidativo y presentando efectos antiinflamatorios. El vino es
tan importante para la salud como antioxidante, que un solo vaso equivale a siete vasos de jugo
de naranja, veinte de jugo de manzana o cinco cebollas. La acción del vino es, asimismo,
importante frente a la bacteria Helicobacter pylori (HP), responsable de algunas enfermedades
gastroduodenales como la úlcera gastroduodenal y algunos tipos de gastritis. El efecto
bactericida del vino tinto sobre el HP se produce en los primeros cinco minutos, a diferencia de
otras sustancias que producen un descenso lento y progresivo del HP en las 24 horas, pero de
forma más lenta que el vino tinto. Otros mecanismos que podrían contribuir al efecto protector
del vino frente e ciertas infecciones gastrointestinales podrían ser el aumento de la secreción
ácida y un  aumento en la motilidad intestinal.

Yogur
El consumo diario de doscientos gramos de yogur vivo que contenga la bacteria Lactobacillus
acidophilus ha demostrado reducir el colesterol de la sangre en más de un tres por ciento y el
colesterol de lipoproteínas de baja densidad –LDL– en más de un cuatro por ciento. Se cree que
las bacterias se fijan al colesterol en el intestino y reducen su absorción. Cada reducción de un
uno por ciento del colesterol de la sangre está asociada con una reducción estimada del dos al
tres por ciento en el riesgo de enfermedades cardíacas. Algunos científicos sugieren que el
consumo diario de yogur vivo puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas entre un siete y
un diez por ciento y eso explicaría por qué los pueblos que tradicionalmente consumen mucho
yogur son longevos. Se ha demostrado que las bacterias llamadas Lactobacillus GG, que se
añaden a algunos yogures, no se digieren y colonizan las paredes del intestino grueso. Estas
bacterias combaten a las bacterias perjudiciales, incluyendo aquellas que suelen provocar diarrea
después de una cura de antibióticos. En ciertos ensayos con seres humanos, el lactobacillus GG
detuvo la diarrea en personas que habían estado enfermas por esta causa durante varios meses.
También en caso de infecciones bacterianas o de infecciones por hongos como la candidiasis se
suele recomendar yogur, ya que este alimento estimula al intestino para que aumente el número
de bacterias probióticas o “buenas”, y ayuda a prevenir el crecimiento de las bacterias
perjudiciales.
Palabras finales

Ajo, cebolla, miel y limón son los cuatro pilares de la salud total. Ricos en nutrientes y con
cientos de propiedades para la salud, no deben faltar en la mesa ni en un botiquín natural para
sanar las enfermedades más comunes. Pero es preciso tener en cuenta algo muy importante: a
pesar de todos sus beneficios, es necesario entender lo que significa ser un pilar para la salud. Ser
“pilar” quiere decir ser la base sobre la cual se asentará una alimentación más sana, una vida
fértil sin malos hábitos que nos enferman. De nada servirá consumir todos los ajos, todas las
cebollas, todos los limones o todas las mieles del mundo, si continuamos llevando adelante una
vida llena de estrés, preocupaciones, malas costumbres y pensamientos equivocados. Los cuatro
pilares de la salud total no son milagrosos y nada pueden hacer contra la necedad del ser
humano. Fumar, consumir drogas, pasarse las tardes frente al televisor, abarrotarse de trabajo
duro, llevar ira en el corazón, reprimir los sentimientos, permanecer mudo ante las injusticias,
negar al espíritu que mora dentro de cada uno de nosotros, ahogarse de gula el cuerpo, descreer
del amor, perseguir el dinero ante todas las cosas, son algunos de los caminos equivocados ante
los cuales nada podrán hacer unos pocos alimentos. Adoptar el ajo, la cebolla, la miel y el limón
para la alimentación cotidiana y utilizarlos como remedios caseros, debe ser el comienzo de un
camino de transformación integral en donde la actividad física, la meditación y una dieta
equilibrada constituyan esa ansiada pirámide que nos acerque cada vez más al cielo. El camino
puede ser largo, pero la recompensa nunca dejará de valer la pena.
Glosario de ingredientes
Abadejo: pez similar al bacalao, que mide de 7 a 8 metros.
Aceto balsámico: vinagre añejado originario de la ciudad italiana de Módena.
Alcaucil: alcachofa.
Arvejas: guisantes.
Batata: boniato, camote.
Bechamel: salsa blanca elaborada con leche, manteca y harina.
Castaña de cajú: marañón, nuez de cajú.
Cebolla de verdeo: cebolleta, cebolla de almácigo.
Crema chantilly: crema batida con azúcar.
Coñac: brandy.
Coriandro: semillas del cilantro.
Champiñón: seta de París.
Chauchas: judías.
Damasco: albaricoque.
Durazno: melocotón.
Fructosa: levulosa, forma de azúcar que se encuentra en las frutas.
Frutillas: fresas.
Ghee: manteca clarificada.
Jengibre: kión.
Langostino: gamba.
Lenguado: nombre que se le da a una amplia familia de peces planos que habitan los
fondos marinos.
Manteca: mantequilla.
Mostaza de Dijon: mostaza originaria de la ciudad francesa del mismo nombre, de
sabor pronunciado y algo picante.
Pimienta de cayena: cayena.
Porotos: alubias, frijoles.
Queso cremoso: queso de origen argentino de pasta blanda y sabor algo ácido.
Queso ementhal: queso de origen francés de pasta semi blanda con agujeros similar
al gruyere.
Repollo: col.
Rocío vegetal: spray vegetal.
Salchicha: Frankfurter.
Tabla de equivalencias
Medidas
1 onza: 28,349 gramos (0,28 kilogramos).
1 libra: 453,592 gramos (0,453 kilogramos = ½ kg aproximadamente).
1 pulgada: 2,54 centímetros (25,4 mm).
1 pie: 30,4 centímetros (0,30 metros).

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