Caso Clinico - Semana 7
Caso Clinico - Semana 7
Caso Clinico - Semana 7
TEMA:
CASO CLÍNICON° 07
ALUMNOS:
CURSO:
5368
DOCENTE:
PIURA – PERÚ
2020
INTRODUCCIÓN
CASO CLÍNICO N° 7
Trastornos de la digestión o absorción de carbohidratos
● Niña de 3 años que es llevada a la consulta porque la madre refiere que después de la
ingesta de leche o derivados presenta molestias como dolor en hipogastrio y meteorismo,
y en oportunidades deposiciones líquidas sin moco ni sangre. Se le solicita examen
coprofuncional que demuestra pH ácido y presencia de azúcares reductores.
Existen tres tipos de intolerancia a la lactosa. Hay diferentes factores que producen la
deficiencia de lactasa no diagnosticada en cada tipo.
Este es el tipo más frecuente de intolerancia a la lactosa. Las personas que tienen
intolerancia a la lactosa primaria comienzan su vida produciendo mucha lactasa, la
cual es necesaria para los bebés, quienes obtienen toda su alimentación a partir de la
leche. A medida que los niños reemplazan la leche por otros alimentos, su producción
de lactasa normalmente disminuye, pero se mantiene lo suficientemente alta como
para digerir la cantidad de productos lácteos presentes en una dieta típica de adultos.
En la intolerancia a la lactosa primaria, la producción de lactasa disminuye
drásticamente, lo que hace que los productos lácteos resulten difíciles de digerir en la
edad adulta. Este tipo de intolerancia a la lactosa se determina de manera genética y
afecta a una gran proporción de personas con ascendencia africana, asiática o hispana.
Esta afección también es frecuente entre aquellas personas que tienen ascendencia
mediterránea o del sur de Europa.
Es posible (pero poco frecuente) que los bebés nazcan con intolerancia a la lactosa a
causa de una ausencia total de actividad de la lactasa. Este trastorno se transmite de
una generación a otra, en un patrón de herencia llamado autosómico recesivo, lo que
significa que tanto la madre como el padre deben transmitir la misma variante
genética para que un niño o una niña padezca esta afección. Los bebés prematuros
también pueden tener intolerancia a la lactosa debido a un nivel insuficiente de
lactasa.
FACTORES DE RIESGO
Los siguientes son factores que pueden hacer que tú o tu hijo sean más propensos a
padecer intolerancia a la lactosa:
● Dado que el déficit de lactasa puede ser poco o muy importante, los síntomas pueden ser
escasos o sustanciales. En general la intolerancia a la lactosa se caracteriza por episodios
de intensidad variable de hinchazón abdominal, ruidos frecuentes de tripa, flatulencia
(gases), dolor de tripa (retortijones), náuseas, vómitos y diarrea. Generalmente aparecen
tras el consumo de leche, de derivados de la leche o de productos que tengan lactosa en su
composición.
Los pacientes con intolerancia a la lactosa pueden pasar temporadas en las que la toleran
mejor y otras en las que la toleran peor, por lo que de nuevo, el diagnóstico puede ser a
veces complicado. Por ejemplo, las infecciones intestinales pueden empeorar
temporalmente una intolerancia a la lactosa.
Los niños con intolerancia a la lactosa pueden tener diversos grados de malnutrición y un
crecimiento lento.
9. ¿Cuáles son las pruebas diagnósticas de deficiencia de lactasa?
El tratamiento se basa más que todo en evitar los productos lácteos, consumir productos libres de
lactosa o tomar suplementos de lactasa.
● Enfermedad celíaca
● Tuberculosis intestinal
● Diarrea del viajero
● Parásitos
● Insuficiencias pancreáticas:
● fibrosis quística
● Pancreatitis crónica
● Cáncer de páncreas
a) Intolerancia a la leche
La causa de la intolerancia a la leche es la intolerancia a la lactosa la cual sucede por un
déficit de una enzima llamada lactasa que es la encargada de romper este azúcar (lactosa)
en sus dos componentes fundamentales: la glucosa y la galactosa. Cuando la lactosa queda
sin digerir, por no haberse dividido, aparecen síntomas como digestiones pesadas,
flatulencia, diarreas y dolor abdominal. La intensidad y el número de síntomas varían
según el nivel de deficiencia de lactasa y la cantidad de alimento ingerido.
b) Alergia a la leche
En el caso de alergia a las proteínas de la leche el organismo produce anticuerpos IgE
específicos anti-caseína, anti-betalactoglobulina y/o anti-alfalactoalbúmina, y las
manifestaciones clínicas son inmediatas, apareciendo a los pocos minutos de la ingesta por
el proceso de la desgranulación de mastocitos y la liberación de histamina y serotonina
mediada por estos anticuerpos IgE específicos dirigidos contra caseína, alfalactoalbúmina
y betalactoglobulina. Esto se acompaña con las manifestaciones clínicas usuales de las
alergias que se evidencian a nivel del sistema digestivo, respiratorio o dermatológico, y
cuya intensidad varía en cada caso.
13. ¿Cuál es la frecuencia de intolerancia a la lactosa? Haga una encuesta rápida entre
sus compañeros y señale la frecuencia de deficiencia de lactasa
● Es un tipo de intolerancia muy poco común en la que el bebé nace incapaz de digerir
la lactosa debido a un defecto genético que impide la producción de la enzima lactasa.
Este tipo de intolerancia es irreversible y la persona la sufrirá a lo largo de toda su
vida. Es necesario mantener una dieta libre de lactosa durante la etapa lactante para
prevenir lesiones intestinales y problemas en su desarrollo. Ha sido descrito
principalmente en Finlandia. Se caracteriza clínicamente por diarrea acuosa al
alimentarse con leche materna o con una fórmula que contenga lactasa.
Ahora que ya sabemos que es la sacarosa, la intolerancia a ella consiste en una alteración
que se produce a nivel digestivo, concretamente en la zona intestinal, esto se da debido
a la ausencia o escasa presencia de la enzima o proteína encargada de separar las dos
moléculas de la sacarosa y que se denomina “sacarasa” o “sucrasa”. Sin la acción de
esta enzima, la sacarosa no se puede digerir y, por tanto, absorber. Esta es incapaz de
atravesar la pared del intestino, las moléculas de sacarosa prosiguen su camino por
hasta el intestino grueso hasta ser eliminadas por vía anal.
● Espasmos estomacales
● Vómitos, náuseas
● Diarreas
● Dolores de cabeza
● Bajadas de azúcar (hipoglucemia)
● Ansiedad, taquicardias, arritmias, inquietud
● En casos más graves se puede llegar a la desnutrición, deshidratación, pérdida de
peso (por la mala absorción de los alimentos)
DISCUSIÓN
En este caso clínico podemos ver en la paciente de 3 años que presenta una intolerancia a lactosa
es por ello que presenta dolor, molestia abdominal, diarrea. Esto se da por la deficiencia de lactasa
que es una beta galactosidasa y se encuentra en el intestino delgado. Se puede presentar en
cualquier edad, pero como podemos ver en este caso; más común la encontramos en los niños
usualmente porque ellos son los que consumen más en esta etapa de vida.
La lactosa al no ser digerida, normalmente en el intestino delgado, llega hasta el ciego y la
microbiota intestinal actúa sobre esta; transformando en gas hidrógeno y ácidos grasos de cadena
corta para poder digerir y esto es lo que genera malestares estomacales, el meteorismo y diarrea.
El médico para dar el diagnóstico en este caso pidió un examen coprofuncional que es un conjunto
de pruebas que brinda la información del paciente con respecto a la diarrea e inflamación crónica;
relacionado con el caso clínico genera un resultado de pH ácido y presencia de azúcares reductores
tales como la sacarosa; lo que nos va a confirmar un caso de intolerancia de la lactosa.
Referencias bibliográficas
Video https://www.youtube.com/watch?v=lJnHZ6PWWZM