Apuntes Asturiano
Apuntes Asturiano
Apuntes Asturiano
Diptongación
El asturiano diptongó Ě, Ŏ, breves tónicas latinas, en sílaba libre y trabada
(coincidiendo con el castellano pero a diferencia del gallego-portugués), y también ante
yod1 (a diferencia del castellano): pueblo, fuente, tierra, nueite, nueche, ‘noche’, tienga,
etc.
Se pueden señalar casos de ausencia del diptongo extendidos por todo el dialecto:
Pola < PŎPULAM, (no Puebla). También hay casos de no diptongación ante -NT- o
ante -N-, sobre todo en el centro y oeste de Asturias: bono (extendido por todo el
dominio, en coincidencia con su abundancia en testimonios del castellano medieval),
trono, fonte, ponte, vento, dente, etc.
Diptongación de Ǒ
El diptongo procedente de Ŏ fue ue, junto a ua y uo; todavía hoy, en el occidente
del dominio asturiano persisten uo, ua, junto al más general ue.
Además, en las comarcas del dominio asturiano central que presentan metafonía,
hoy hallamos ui (puirtu), procedente de ue.
Diptongación de Ě
La forma ie convive desde antiguo con ia y hoy se hallan restos de ia solo en el
asturiano occidental: pia, tiampus, amariallos, ya < ĚT, yara < ĚRAT, ya < ĚST. La zona
de mantenimiento de ia coincide aproximadamente con la uo, ua; el uso de ia se reduce
a unos cuantos casos: conjunción copulativa, ya, presente e imperfecto del verbo ser, ia,
ya,’es’, yara, ‘era’, PĚDEM > pia, DĚCEM > diaz, BĚNE > bian, TAM BĚNE >
tambián. En algunas de las comarcas que conservan ia se ha producido una dislocación
acentual, pasando el acento a la vocal más cerrada, deshaciéndose el diptongo: pía, díaz,
ía, yía, ‘es’.
En las hablas asturianas se ha producido la diptongación de algunas formas del
verbo ser, ĚS, ĚST, ĚRAM, yes, ye, yera, yeras, y de la conjunción copulativa ĚT, que
no suelen diptongar en otras lenguas romances. El fenómeno de diptongación de las
formas del verbo ser (con resultados en ie, ia: ye, yes, yera, ya, yara) es propio del
asturiano central y occidental. El área de diptongación de ĚT, ye, ya, es más reducida,
pues ocupa el occidente de Asturias.
1
YOD: elemento semiconsonántico o semivocálico palatal de un diptongo (p. ejemplo ciego, reino) que
unido a una consonante puede provocar su palatalización ( VINEA> viña, MULIERE > muller). NǑCTE >
noite, nueite; ǑCULUM > oilo, ollo, uello, güello, ueyo, güeyo.
1
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
La metafonía vocálica
Antes de caracterizar el fenómeno de la metafonía extrema asturiana, sería
conveniente hacer alguna precisión de tipo terminológico. Como señala C. Fernández
Juncal 1999: 145-155), para la denominación de este uso lingüístico se han empleado
tres términos: armonización, inflexión y metafonía. Los tres sirven para referirse a la
modificación y cierre del timbre de la vocal por influjo de otra, también cerrada. Ahora
bien, hay algunas pequeñas diferencias de matiz entre los tres términos:
La armonización hace referencia a un fenómeno más general, que consiste en la
igualación de timbre (apertura o cierre) de los sonidos vocálicos dentro de la palabra,
fundamentalmente, pero no siempre, por la influencia de la vocal tónica: añidir por
añadir, lición por lección, pulítica por política, etc.
La inflexión hace referencia sobre todo al cierre de una vocal, sea por influjo de
la vocal final, sea por el de un sonido vecino: jibia < SEPIA, etc.
Metafonía se ha utilizado como sinónimo de los dos anteriores, pero en la
dialectología hispánica se ha especializado para remitir al fenómeno propio del dialecto
asturiano, especialmente en Asturias. Es un fenómeno que consiste en el cambio de
timbre de las vocales tónicas, que se aproximan progresivamente al siguiente grado de
cierre por la influencia de una vocal final cerrada (-u, -i en todas sus variantes).
Fernández Juncal caracteriza la metafonía por las siguientes notas:
a) Las vocales ó y é inflexionan en ú e í respectivamente: putru, ‘potro’, tsubu,
‘lobo’, pirru, ‘perro’, diniru, ‘dinero’.
La vocal á puede cerrar hacia la serie palatal (kerru, ‘carro’, zapetu,
‘zapato’) o hacia la serie velar (rou, ‘rabo’, sopu, ‘sapo’). Esta distinción
permite diferenciar dos zonas de metafonía: el paso a > e está más
extendido y aparece con más frecuencia en la zona del Caudal mientras que
la transformación de a > o es propia de la cuenca del Nalón.
La reducción de la vocal tónica ocurre también si esta forma parte de un
diptongo: we > wi y je > i (o ji): pañuilu, ‘pañuelo’, abirtu, abierto’. Y lo
mismo cuando la vocal va en hiato: peezu, ‘pedazo’, fuíu, ‘fuego’, etc.
No se produce homonimia ni homofonía entre términos en conflicto porque
el cierre afecta a todos, de manera que palo es pelu pero el pelo es pilu.
b) La metafonía demuestra su vitalidad en que afecta a las formas tradicionales
de las palabras (por ejemplo, a los diptongos je, we) y a voces de
incorporación reciente al dialecto. Tiene que darse la condición de que la
2
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
vocal final sea –u, es decir que –o se convierta en –u: silicusu, ‘que padece
silicosis’, roseriu, ‘rosario’, etc.
c) Se cierran las vocales tónicas de los participios, puistu, y en los infinitivos
con el enclítico lu: voy dexelu, ‘voy a dejarlo’, etc.
d) La influencia metafónica es también marca de singular y de masculino en el
asturiano; allí la terminación –u del singular se opone a la del plural –os, que
no provoca metafonía: guetu / gatos, pirru / perros; y lo mismo ocurre con la
distinción de género: guetu / gata, pirru / perra.
e) No hay metafonía cuando la vocal final es –o, vocal que aparece en algunos
préstamos (radio, teléfono, etc.), en la 1ª pers. sing. del presente (cato, fago,
etc.) y en un grupo de palabras que designan tiempo (febrero, ogaño, etc.).
En las zonas en que se da el neutro de materia, que veremos más adelante,
con la oposición morfológica –o / -u nos encontraremos con oposiciones del
tipo arroz bueno – un pirru buinu; el queso blanco – un quisu blancu.
Asturias central:
Gozón, Carreño: en esta zona se produce el cambio de timbre de la vocal tónica
por efecto de la vocal final cerrada. En 1955 Rodríguez Castellano concretó el área de
inflexión en el centro-sur de Asturias y estableció la distinción entre la cuenca del
Caudal, con los municipios de Lena, Quirós, Riosa, Morcín, Mieres y Aller, en la que
3
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
por influjo de la –u final á > é (guetu) frente a la cuenca del Nalón, con los municipios
de Sobrescobio, Laviana, San Martín del Rey Aurelio y Langreo, en la que á > ó (gotu).
Incluyó también en el área los municipios de Bimenes y Siero, cuya metafonía tiene la
misma forma que la cuenca del Nalón.
Asturias oriental:
Cabrales, Peñamellera Baja, Llanes, Amieva, Piloña, Ribadesella y Caso. En el
oriente de Asturias la metafonía NO llega al grado extremo, es decir, no se produce
cambio de timbre en la vocal tónica.
Cantabria:
Valle de Pas, Selaya, Villacarriedo, Luena, Soba, Arredondo, Saro, Santa María
de Cayón, Penagos, Liérganes, Riotuerto, Ruesga, Voto, Campoo de Yuso, Santiurde de
Reinosa, Tudanca, Cabuérniga y toda la parte oriental (con distinta intensidad y
resultados, que van desde la armonización en el cierre al cambio de timbre).
Penny (1970: 61-65) estudió la metafonía en los valles altos de los ríos Pas,
Miera, Asón y las aldeas de Espinosa que limitan con los valles de Pas y de Soba y halló
que por influjo de –u, á > á (a palatal), é > í, wé > wi, ié > ií, ó > ú: babiru, ispiju,
frisnu, nigru, cistu, agüilu, güibu, puiblu, suigru, abjirtu, njitu, agustu, arruyu, golusu,
muzu, etc.
Fernández Juncal (1999) publicó su estudio sobre el oriente de Cantabria y
señaló que pueden encontrarse distintos grados de metafonía en esta zona. En el más
extremo, con cambio de timbre de la tónica, tenemos los siguientes resultados: á > é, é
> í, ó > ú, ié > í, ué > uí: guetu, quisu, usu, hilu, ‘hielo’, pañuilu. Pero, además, existen
casos de cierre de la vocal tónica sin llegar a convertirse en otro fonema y otros en los
que se produce un simple “oscurecimiento” del timbre de la vocal originaria. Estos tres
grados de inflexión conviven con la pronunciación que sigue las pautas normativas, que
es evidentemente la más prestigiosa y la que demuestra más empuje en la zona.
Vocales finales
Como en todas las hablas occidentales, en las asturianas hay una fuerte tendencia
al cierre de las vocales finales –o > -u, -e > -i.
En general, en todo el dominio asturiano –o tiende a cerrarse, lo mismo que –e,
presentando el cierre diversos grados que van desde -o, -e hasta –u, -i, con grados
intermedios.
Por lo que se refiere a Asturias, aunque los datos son ya antiguos, se suelen
distinguir apartados distintos, de los que nos interesan sobre todo dos:
4
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
5
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
6
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
ye? (para preguntar por una persona) frente a ¿Cuálo ye más güeno? (para
preguntar por dos telas).
7
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
Conservación de –e tras –d
Un fenómeno vocálico relativamente frecuente en asturiano, aunque esporádico,
es la conservación de –e tras –d, que aparece sobre todo en comarcas occidentales de
Asturias, con terminación en –e, -i: parede, paredi, rede, redi, etc. Hoy en buena parte
de esta zona se conserva la vocal final solo cuando la tónica es é: rede, sede, parede,
céspedi, huéspede, etc.
F- inicial latina
En el siglo XX la conservación de F- comprendía el asturiano occidental y
central mientras que se aspiraba, confundiéndose la aspiración con la velar fricativa
sorda /x/, en el oriental.
Palatalización de L-
La palatalización de [l-] inicial latina, común a todo el dominio asturiano leonés
bajo distintos resultados fonéticos, es uno de los rasgos más definitorios de la variedad
frente a los romances vecinos. En el siglo XX la palatalización de L- inicial se
mantenía, con variantes fonéticas: [l̮ ], [y], [ŝ], [ĉ], [ḓ] cacuminal.
La palatalización en [y] corresponde a una zona del gallego-asturiano occidental:
Coaña, Armental, Villacondide y Navia: yareira, yingua, yao, ‘lado’, etc.
La palatalización en [l̮ ], palatal lateral sonora, es propia del área más extensa: en
el gallego-asturiano desde el Porcia hasta el Navia, en la parte nororiental de la variedad
asturiana occidental, en el asturiano central y oriental: llado, llargo, llombo, lluz,
llamber, llengua, llobo, lluna, etc.
Otras soluciones a las que ha llegado la primitiva palatalización de L- inicial son
las soluciones africadas sordas, que van de la dentoalveolar a la palatal propiamente
dicha. Estas soluciones son propias de una gran parte del asturiano occidental y del
asturiano central meridional.
La articulación primitiva debía de ser [ŝ], pero por influencia de [ĉ],
característico de la lengua oficial (procedente de otras etimologías) y también del propio
dialecto, la [ŝ] y la [ĉ] se han interferido con frecuencia, dándose en unos casos la
asimilación de [ŝ] a [ĉ], que ha sido lo más frecuente, y en otros casos la asimilación
contraria. Dado el estado de confusión, ya hace muchos años que Rodríguez Castellano
señaló que posiblemente en una generación más el fonema /ŝ/ desaparecería, sustituido
por / ĉ /, lo que no ha sucedido hasta ahora. Ejemplos: ŝinu, ‘lino’, chobu, ŝobu, ŝingua,
ŝaciana, ŝana, ŝuiñi, ‘lejos’, chombu, ‘lomo’, etc.
Hay que tener en cuenta que el mismo fenómeno (realización [ŝ], [ĉ]) se da en
numerosas palabras con –LL- latina y /l̮ /, palatal lateral sonora, en castellano, en
posición intervocálica, e incluso en palabras que en castellano tienen [x], velar fricativa
sorda, procedente de –LY-, -C’L- y –G’L-, de modo que confluyen en un mismo
resultado chobu, vache, ovecha, ‘lobo’, ‘valle’, ‘oveja’.
Por lo que se refiere al asturiano, Viejo (2005: 240) destaca que en la mayor
parte del occidente y zonas del asturiano central la palatalización de [l-] inicial latina
presenta como resultado la llamada che vaqueira, “denominación bien confusa que
esconde en realidad varias articulaciones fonéticas distintas que reduzco a dos tipos
básicos: la más extendida ͡ʦ/ [ŝ], prepalatal-alveolar, junto con su correspondiente
sonora /ʣ̑/”. En su opinión, el valor fonológico de las soluciones de /l-/ por los distintos
subsistemas locales tiene que entenderse en relación con otros fonemas palatales,
históricamente originados en distintas unidades o grupos latinos con los que, en alguna
ocasión, converge o diverge; se refiere a los resultados de [-ll-] y de [-lj-, -k’l, -g’l-]. Es
interesante destacar su observación de que en el área de la llamada che vaqueira, este
8
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
resultado puede convivir con [l̮ ]. “En alguna ocasión – señala – la alternancia de [ŝ] y [l̮ ]
se rige por la variable de edad, siendo la segunda más propia de generaciones más
jóvenes. En otros casos, [l̮ ] muestra un mayor grado de penetración en el habla de villas
cabeza de comarca o lugares cercanos (más afines, por tanto, a los usos del asturiano
central, frente a otros lugares más rurales de su entorno […] Otras veces son diferencias
locales de registro estilístico las que favorecen [l̮ ]”.
Otra solución, menos frecuente, es la retrofleja o cacuminal [ḓ], que aparece en
parte de los concejos suroccidentales de Degaña y San Antolín de Ibias (Sisterna, El
Bao, Tablado, El Corralín) y en el sur del concejo centro asturiano meridional de Aller
(Felechosa y Casomera). Esta solución presenta dos variantes:
- oclusiva, fundamentalmente sonora, típica de Sisterna [ḓ]: ḓuna, ḓeiti, ḓabrar,
ḓingua; lo mismo sucede cuando se trata de –LL- latina, vaḓi, ‘valle’.
- africada semisorda o sorda, característica del sur del concejo de Aller (Felechosa y
Casomera) [dŝ]: dŝeña, dŝau, dŝimaz, ‘limaco’; también en posición intervocálica
procedente de –LL- latina, vadŝe, ‘valle’.
Recordemos que la solución retrofleja se da también, en las mismas
circunstancias, en sardo y en siciliano y que la africada palatal sorda, procedente de
otras etimologías, se halla también en el Alto Aragón.
Palatalización de N-
Palatalización paralela a la anterior, si bien de carácter esporádico, de la que
encontramos ejemplos en Juan del Enzina y Lucas Fernández: ño, ñascer, ñombre,
ñubloso. Lo más probable es que el fenómeno estuviera reducido a algunas palabras, es
decir que estuviera lexicalizado, y que fuera propio, más que del dialecto, del castellano
vulgar de todas las regiones, ñudo, ñuca, ñogal.
El fenómeno tiene una cierta vitalidad en el centro y oriente de Asturias, a partir
de Pola de Lena, sobre todo en Piloña, Infiesto, Cangas de Onís y Cabranes: ñarigudu,
ñeñu, ñata, ñudu, ñegru, ñube, ñaide, etc.
J-, G+e, i
El asturiano, de acuerdo con la generalidad de las lenguas románicas, pero en
oposición al castellano, conserva ante vocal de la serie anterior la consonante palatal
nacida de G+ e, i, J- iniciales latinas. El dialecto antiguo daba a estos sonidos la solución
palatal fricativa sonora, lo mismo que el portugués y, por lo que respecta a J-, tanto si le
seguía vocal anterior como posterior, mientras que en castellano la solución es distinta
según sea la vocal anterior o posterior. (Recordemos GENESTA > hiniesta, ‘retama’;
GENUCULU > hinojo; JENIPERU > enebro; JECTARE > echar, pero JURARE >
jurar; JUGU > yugo; JAM > ya, etc.)
El asturiano moderno, lo mismo que el gallego, ha ensordecido la palatal.
Actualmente /š/, grafía x, es normal en todo el asturiano: xelar, xente, xineru,
xineiru, xinoyu, xigante, xudiu, xueves, xuncir, etc.
9
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
El límite oriental de PL-, CL-, FL > /ĉ/ no está muy bien establecido pero
sabemos que en la mayor parte del asturiano central hay /l̮ /, palatal lateral sonora,
solución que es la única en la parte oriental. En el Alto Aller la solución castellana, que
es la primitiva, ha dado lugar a la palatal central, es decir, hay yeísmo: yorare, yaneza.
Ejemplos del asturiano occidental son chanu, chenu, chamar, chover, chantén, chamar,
chegar,etc.
Sonidos o secuencias de sonidos que dan la solución /š/, prepalatal fricativa sorda,
(en posición interior o inicial).
Este fonema, tan característico del asturiano y de las hablas altoaragonesas, es el
resultado de la neutralización de /ž/ y de /š/ en un solo fonema, el fonema sordo, que no
evolucionó a /x/, velar fricativa sorda, en áreas dialectales.
Procede de los siguientes sonidos o grupos latinos:
1º) De /ks/ (x ortográfica en latín): dixo, deixar, coxo, enxame, ‘enjambre’, etc.
2º) De –SS-: baixo, baxo, paxaru, etc.
3º) De –SC + e, i-: pexe, peixe, eixada, ‘azada’.
4º) De J-, G + e, i-, iniciales o mediales: xente, fuxir.
En la actualidad /š/ tiene bastante vitalidad en Asturias.
-LL- latina
En parte del gallego-asturiano, de Castropol a Tapia, -LL- > /l/, como en gallego
y portugués: bulir, portela, martelo, amarelo, etc.
En Asturias, de Tapia a Navia –LL- > / l̮ /, palatal lateral sonora; en el resto de
Asturias puede aparecer /y/ donde –C’L-, -G’L- y –LY- > /y/ y /ŝ/, /ĉ/ donde –C’L-, -
G’L- y –LY- dan /ŝ/, /ĉ/.
Un caso especial es el de Sisterna donde –LL- coincide con L- en el resultado
cacuminal: gaḓía, ‘gallina’, vaḓi, ‘valle’, gaḓegu, ‘gallego’, etc.
10
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
-CT-, -ULT-
La solución –it- ha sido siempre occidental en el dominio asturiano.
Actualmente la mayor parte del dominio presenta la solución /ĉ/, con la variante
/ŝ/ en algunas zonas donde aparece este fonema. Solo la franja más occidental a lo largo
del dominio conserva –it-: Luarca, Pola de Allande, Santa Olaya, Villaoril, alto curso
del Narcea, Somiedo, Sisterna: feito, tseite, truita, peito, oito, feleitu, ditu, etc.
11
Dialectología Sincrónica del español 2019-2020
BIBLIOGRAFÍA CITADA
12