Bicentenario Cofradía

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DOSCIENTOS AÑOS DE TRAYECTORIA ECLESIAL

En el Bicentenario de la erección de la Cofradía del Santísimo Sacramento de El Valle

Se me ha pedido reseñar brevemente los 200 años de nuestra apreciada Cofradía del Santísimo
Sacramento. Hablaré pues como Cofrade de muchos años y también como vallero. Comienzo por
agradecer al P. Douglas Buenaño y demás organizadores de este acto, la oportunidad y el honor
que me han brindado. Dice el salmista:

“Es bueno dar gracias al Señor y tocar para tu nombre, Oh Altísimo” Salmo 91

Y más adelante:

“¡El Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres!” Salmo 125

Ciertamente, hoy compartimos complacidos un momento de júbilo de esta iglesia. En rigor


histórico la Cofradía del Santísimo de la parroquia de La Encarnación de El Valle ha cumplido ya
200 años de actividad. Hasta ahora tuvimos siempre como fecha de la fundación el Domingo 23 de
Junio de 1811. Recientes indagaciones de los hermanos Juan Gil y Lorenzo Reyes, en el Archivo
Arquidiocesano; han ubicado sus inicios en 1809. Sabemos por la historia que la expedición de
Diego de Lozada, que venía desde El Tocuyo, acampó en esta zona para la Semana Santa de 1567
(1) y que decidió fundar aquí el pueblo del Valle de la Pascua Florida. De manera que la de El Valle
precedió a la fundación de Caracas. Esta fue pronto una comunidad con vida propia, cercana a la
capital y al borde de la carretera que comunicaba con los fértiles valles del Tuy medio.

Para el decreto de la Cofradía se invocó una cédula real del 31 de Enero de “mil ochocientos y
seis”, dictada por el Rey Carlos IV de España. Eran tiempos del Papa Pio VII (1800-1823) y era
Arzobispo de Caracas el sacerdote catalán, Narciso Coll y Prat (1808-1822), quien no había tomado
posesión del cargo para esa fecha. La parroquia era regida por el Presbítero Juan Henrique de
Illescas, quien fue por tanto primer Capellán de la cofradía.

Después de un combate contra indios teques y mariches, ”continúa Lozada su camino hacia el
Valle de San Francisco y en vez de seguir por las riberas del río Guayre -temeroso de emboscadas-
se dirige por el abra de Caricuao, llegando a El Valle los primeros días de Abril de 1567. Lo llama
Valle de la Pascua, porque su arribo se realiza en los días de la Pascua de Resurrección” Oviedo y
Baños 1885 En: Barreto M y col. El Valle y sus cercanías. 1986: 12

Decía el P. Illescas en su petición al Doctor Don Santiago de Zuloaga, Tesorero de la Iglesia


Metropolitana y Gobernador del Arzobispado: “Inmediatamente que entré a servir el curato del
pueblo del Valle de la Pascua, encontré vecinos fervorosísimos en erigir y fundar una Cofradía
del Santísimo Sacramento. No puedo menos que apoyar sus deseos…” El Acta de Instalación de
la Cofradía, en la Iglesia parroquial del Curato y Pueblo del Valle de la Pascua tiene fecha lunes 17
de Abril de 1809 (cf. p. 12 de la Memoria parroquial) y fue refrendada días más tarde, según
juridicidad de la época, por el Gobernador y Capital General de la Provincia de Venezuela Vicente
de Emparan. Formaron parte del grupo fundador los señores Domingo Acosta, Juan Miguel
Chapellín, Andrés y Pedro Vicente Díaz, Juan y Miguel González, Francisco López, Toribio Marrero,
Juan Ojeda, Agustín Pérez y Vicente Robles. Si no estoy equivocado es la primera vez en dos siglos
que sus nombres vuelven a resonar en este hermoso templo.
Dos detalles llamaron mi atención, al revisar la Memoria de la fundación, que envió el P. Carlos
Chuecos al Arzobispado:

En el Estatuto, ordena el Obispo que la Cofradía se integre con 30 seglares Numerarios, “los cuales
deberán ser hombres blancos, indios o mestizos, honrados, de buena vida y costumbres. Vestirán
en los actos una túnica encarnada, con cuello blanco y llevarán medalla de plata al cuello,
pendiente de cinta blanca. Pueden agregarse hermanos Supernumerarios, sin derecho a votar, que
pueden ser hombres o mujeres. Por tanto la incorporación de mujeres en el último cuarto de siglo,
no es nada nuevo.

A finales del siglo XIX, el P. Chuecos informa que la Cofradía estaba integrada por 11 hombres y 16
mujeres. Un poco antes, en 1886, el párroco Antonio Llamozas certifica que la Cofradía posee casa,
donada por la parroquia, cuya ubicación y destino no conocemos. Sin embargo, poco después, se
asegura que la institución carece de bienes materiales y que “celebraba sus fiestas con la
contribución de los cofrades” tal como ha sido en esta última centuria.

De las venerables tradiciones de El Valle y la magnífica talla de sus imágenes de la Pasión; se


deduce la devoción de sus pobladores. A la Cofradía del Santísimo siguieron las sociedades de:
Humildad y Paciencia (1868), Santo Sepulcro (1869) y una hoy desaparecida, del Mártir del
Gólgota, en 1882; como testimonia el párroco Llamozas, en nota al Arzobispo, de Mayo 1886. Al
padre Llamozas le sucedió el presbítero Carlos Chuecos, nombre con que se designó durante
muchos años nuestra plaza principal. Recibió la parroquia en 1886 y la pastoreó hasta 1910,
cuando falleció y fue enterrado en este presbiterio. En nota manuscrita al Arzobispo Críspulo
Uzcátegui, señala el P. Chuecos que “el número de sus miembros, entre hombres y mujeres,
alcanza a unas 27 personas”

REINSTALACIÓN
Para noviembre de 1891 solo se mantenía activa la cofradía, la cual entró en receso en Abril de
1900, por lo que deducimos que no actuó en la Semana Santa de aquel año. En ese entonces,
regía la Iglesia el Papa San Pio X (1903-1914) y la arquidiócesis de Caracas, el gran Apóstol de la
Eucaristía Mons. Juan Bautista Castro. Para la fiesta de la Ascensión del Señor, el jueves 5 de Mayo
de 1910, el padre Chuecos anuncia la reinstalación de la Cofradía y convoca a varios caballeros
para el día siguiente, cuando se celebra la sesión. La directiva fue encabezada por el hermano
Germán Rodríguez Lange. Estimo oportuno recordar que durante muchos años la elección de
autoridades se efectuaba el domingo siguiente al de Resurrección, a las 4 de la tarde, en la casa
parroquial. La Directiva tomaba posesión el primer domingo de Mayo y en la Sesión Solemne se
leía el Acta de la Reinstalación. Al respecto me permito recomendar al P. Douglas y demás
directivos de la Cofradía, que se ponga todo empeño en recuperar esos libros de Actas, que
podrían aportarnos interesantísimos datos históricos.

Al P. Chuecos le sucedió el P. Antonio Luis Mendoza, hombre de firmes convicciones, quien incluso
sufrió prisión, por expresar ideas contrarias al régimen del General Juan Vicente Gómez. La
Cofradía vivió un nuevo receso, hasta 1926, en tiempos del padre José María Aranaga.

Creo no equivocarme al afirmar que la Cofradía del Santísimo tuvo momentos de máximo
esplendor, durante el presbiterado de Mons. Alejandro Rodríguez Morín (1934 - 1970)
Contribuyeron a ello diversas circunstancias y personas. Era hombre de gran humildad, entregado
a su ministerio y a su parroquia, de admirable fidelidad a la Iglesia, en la persona del Sumo
Pontífice y del Arzobispo de Caracas. Muchos recordamos y valoramos el celo de este sacerdote
por glorificar a Dios y por servir a sus parroquianos, de manera indiscriminada, como lo
reconocieron incluso notables valleros de todas las tendencias políticas y de todos los estratos
sociales. La Semana Santa se vivía intensamente y cuando llegaba el Viernes Santo ya Mons.
Rodríguez mostraba afonía y agotamiento, por el esfuerzo rendido, desde el Viernes de Concilio,
en consecutivas e intensas jornadas. Estaba pendiente de todo, aun cuando delegaba parte del
quehacer en su vicario, sus sacristanes y monaguillos y sobre todo: en sus sociedades religiosas,
que eran su timbre de orgullo, tanto como este hermoso templo que reedificó, agrandó y
embelleció, en los años 50’ y que luego tuvo que restaurar, debido a los graves daños causados
por el terremoto de Julio de 1967, cuando se habló incluso de derribarlo.

¿Cómo era la Cofradía modelada por aquel inolvidable párroco? Más de la mitad del centenar
de cofrades con quienes compartí hermosas jornadas, desde 1959, cuando ingresé a la institución;
no conocimos a otro párroco antes de él. Eso quiere decir que nuestro accionar era fruto de su
predicación, del afecto y del testimonio evangélico de aquel gran sacerdote. Las fiestas religiosas
de El Valle tenían renombre en toda la ciudad: fueran Misas de Aguinaldo, Navidades, Cuarenta
Horas, Semana Santa, Corpus, Coronación de la Virgen o Fiestas Patronales. El Lunes Santo lo
organizaba Nicolás Ortega, pero el resto de los días contaba con una sociedad responsable por el
brillo de los actos, la música para el templo y la procesión. Con mucha antelación se invitaban
sacerdotes para las Eucaristías solemnes y las predicaciones. Para el domingo anterior a Ramos,
bajo la dirección de Gonzalo Carrasquel y las orientaciones del párroco; se instalaba en la nave
derecha aquella Ultima Cena monumental, que tanto recordamos.

El Miércoles Santo se adquirían y arreglaban las flores para el Monumento, el altar y la


venerada talla del Crucificado. Al cerrarse la iglesia esa noche, se iniciaba el adorno del Cristo. La
Eucaristía del Jueves Santo, que antes era matutina y que luego la reforma litúrgica ubicó en la
tarde; culminaba con la Procesión del Santísimo hasta el atrio y de allí al Monumento.
Inmediatamente salía el Cristo en procesión por la Calle Real, hasta la Jefatura Civil, regresando
luego por la Calle de Atrás. Eso sí, debía estar en el templo a las 10 de la noche, por el compromiso
con la emisora radial La Voz de la Patria, que retrasmitía el sermón o conferencia para caballeros,
que desde 1933 dictaba desde el púlpito, el insigne predicador Mons. Doctor Jesús María Pellín.

Cada primer domingo la Misa de Minerva se celebraba a las 6.30 de la mañana y la procesión
recorría el contorno de la plaza, en medio de una larga fila de hombres, con cirios en las manos.
Para 1968 la nómina pasaba de ciento sesenta cofrades. La asamblea de cofrades que la seguía,
fue el recurso promovido por el Párroco, para que las sociedades religiosas mantuviesen presencia
a lo largo del año y no fuese necesario convocarlas apresuradamente para la Semana Mayor. Por
eso la Sociedad del Divino Redentor, responsable de la fiesta del Miércoles Santo, también adoptó
esa sesión mensual, cuando se decidió restructurarla y fortalecerla, bajo la mirada atenta de su
presidente emérito, el hermano Armando Castrillo.

SESQUICENTENARIO
En ese clima llegaron las celebraciones del Sesquicentenario de fundación de la Cofradía y
Cincuentenario de la Reinstalación, que tuvieron lugar entre 1960 y 1961. La Comisión
preparatoria fue presidida por Émilio González, insigne cofrade, formado en las filas de la Acción
Católica y quien fue Presidente de la Unión Arquidiocesana de Cofradías. Nos reuníamos
semanalmente, en la casa de Jesús María Herrera, de Caraqueña a Muñingal. Para recolectar
fondos se organizaron vermouth dominicales, a las 11 de la mañana en el desaparecido cine
Jardines. Las películas eran seleccionadas por Gonzalo Carrasquel, quien –por razón de su trabajo-
mantuvo estrechos vínculos con salas de cine y empresas distribuidoras.

La Eucaristía solemne fue presidida por el señor Arzobispo, Cardenal José Humberto Quintero,
desbordado el templo de feligreses y adornado con flores y pendones y la magistral música de un
coro que dirigía el tenor Elio Malfatti. La Sesión de Gala tuvo lugar en casa de Jesús María Herrera,
el 24 de Junio de aquel año. Intervinieron como oradores Antonio Vitriago, Presidente de la
Cofradía, Mons. Rodríguez su Director, Juan José Domínguez, Secretario de Actas de la Unión
Arquidiocesana y Emilio González, quien como dijimos, presidía la Comisión Organizadora.

A la muerte de Mons. Rodríguez, el 12 de mayo de 1970, fue sepultado su cuerpo en la nave


derecha de la iglesia. El señor Arzobispo designó como sucesor a su propio secretario, Mons.
Carlos Rosales, a quien sucedieron luego los padres Angel María Nieves (1972), William Delgado
(1977), Henry Padilla (1982), Antonio Acurero (1997) y Douglas Buenaño, el párroco actual. El
resto de la historia lo conocen ustedes, mejor que yo, porque como digo muchas veces,
complacido, soy hombre del siglo pasado.

Nos preparamos ahora para la solemne celebración Eucarística del Bicentenario, que presidirá
nuestro amado Arzobispo, Eminentísimo Cardenal Jorge Urosa Sabino. En el Evangelio
recordaremos aquella frase de Jesús: “¡Animo, Soy yo! ¡No teman! (Evangelio de San Mateo 14,
27) dicha también para nosotros Finalizo pidiendo al Señor Sacramentado, larga vida para nuestra
institución y recomendando a la generación presente que sean consecuentes con esta honrosa
trayectoria eclesial y pongan el mayor empeño en acrecentar la devoción y el culto al Santísimo
Sacramento en esta querida parroquia de la Encarnación de El Valle. Muchas gracias a todos.

Luis Herrera García


El Valle, Agosto 7 del año 2011

ANEXOS

Real Decreto del Rey Carlos IV firmado en Aranjuez, Enero 31 de 1806

“… Y tercero: que a los Indios y gentes que acrediten ser pobres, no se exijan por las diligencias
que para la fundación se practicaren, derechos ni otro gasto que el importe de papel y escrito; y
que se exijan solo en las parroquias, sin permitir en ellas cofradías de diversa clase, hasta que se
halle verificada y perfecta la sacramental. Lo que os participo para que como os lo ruego y
encargo tenga puntual cumplimiento esta mi Real resolución.-
Fecho en Aranjuez a treinta y uno de Enero de mil ochocientos y seis.- Yo el Rei

Por mandato del Rei Nuestro Señor Silvestre Collar. Se hallas tres rúbricas señales de firma.
Concuerda con la Real Cédula original en su contenido, existente en la Secretaría Arzobispal de mi
cargo… Caracas cinco de Abril de mil ochocientos y nueve.
DECRETO. Caracas, seis de Abril de mil ochocientos nueve.—Visto: fórmense constituciones para la
Cofradía del Santísimo Sacramento, que se intenta fundar en la Iglesia parroquial del Curato y
Pueblo del Valle de la Pascua ad instar de las aprobadas para el pueblo de Maracai, añadiéndose o
quitándose lo que convenga según las circunstancias locales.

1910 -
INGRESO DE COFRADES 1963

AÑO NOMBRE FECHA MUERTE


1910 Germán Rodríguez Lange Abr. 05
Félix González May-05 1962
Cirilo Freites May-05 1959
Juan España May-05 1950
Diego Jimenez May-14 1950
1926 Alfredo Plaza Jun-10
Eugenio Carrasquel
Cipriano Alvarez
Tomás Eduardo Meza 1960
José López García 1963
1928 Martín Lorenzo Mar-08
1931 Néstor Rodríguez Pérez Feb-22
Gonzalo Carrasquel Abr-12 1966
1934 Emilio González Moreno May-06 1967
1935 Juan Santiago Mujica May-15
Concepción Díaz Abr-12
1937 Teodoro Fernández Jun-06
1940 Héctor Alvarez Abr. 07
1941 Toribio Acosta Abr-13
1944 Juan López Abr-09
1946 Alberto Pérez May-05 1967
Delio Alayón Abr-21
1948 Gilberto González Abr-04
Félix Sanoja May-02
1949 Jesús María Herrera Urbaneja 1987
Antonio Vitriago May-01
Enrique Gómez Chapellín Ago-07
Mariano Moronta
1950 Eduardo Saavedra Mar-05
Ramón Eduardo González Abr-16
1952 Juan Delhón May-04
Manuel Marea
1953 Elio Rivas
1954 Darío Fabro Jul-04
Alí González
1955 Antonio Antor Yamín Abr-09 1973
Antor Antor Yamín
Pedro Moreno Jun-05

1956 Reyes Rivero


Oswaldo González
1957 Anor Antor Mar-03
1958 Alberto Plaza
Mario Herrera, William Perdigón,
1959 Luis Herrera García Jun
José María García Jul-05
Néstor Rodríguez Romana Jul-05
Elio Rivas hijo Ago-02
Héctor Julio Caspers
César Vallenilla Rodríguez Ago-02
Juan Rafael Musso Quintero Oct-04
Waldemar Pitters Dic-06
1960 Enrique Musso Quintero Mar-06
Omar Rodríguez Romana
José Andrade Abr-03
Sebastian Giglio
Alí José Medina Jul-03
Jesús Mendoza Dic-04
1961 Luis Alberto Rodríguez
Fernando Alvarez Mar-05
Lucas Guevara Mar-05 1973
Ernesto Tacoronte May-07
Francisco Escalona Jul-02
Félix Escalona Jul-02
José Antor Yamín Ago-06
1962 Luis Alberto Pernía Abr-01
Rosario Grassi May-13
Antonio Rendón Ago-05
Juan Tachón Sep-02
Omar Herrera
1963 Juan Correa Abr-21
Rafael Pérez Avilán Jul-07
Neptalí Vera
Francisco García Rivas Oct-06

Relación elaborada por Luis Herrera García, con base en los Libros de Actas de la Cofradía.

EL TEMPLO: “La vieja iglesia de una nave, con paredes de tapia y mampostería, con techo de
tablas cubierto de tejas; se desplomó totalmente con el terremoto de 1812. Para 1886 estaba
construido este nuevo templo de tres naves.”

Barreto M, Caremis y col. El Valle y sus cercanías. Fundarte, 1986: 18

DOCUMENTO 05084:

Nómina de las Cofradías i demás


Sociedades religiosas instaladas en esta parroquia de El Valle de la Encarnación

Cofradía del Santísimo Sacramento instalada el 14 de julio de 1809 por el Señor Prov. Dr.
Vicente Hernández, casa propia que fue de esta parroquia La componen 24 miembros

Sociedad de la Humildad y Paciencia…… en el año de 1868, la componen 62 miembros


Sociedad Benéfica del Santo Sepulcro, instalada por el Rv. Antonio Llamozas, Cura
párroco i el Sr. Esteban Martínez en el año de 1869, la componen 54 miembros.

Sociedad de El Rosario,……… … la componen 40 miembros.

El Corazón de María para las fiestas de Mayo, instalada por la señora Dolores
en el año de 1848, la componen 80 miembros.

El Corazón de Jesús…… en el año de 1879, la componen 45 miembros.

Sociedad Mártir del Gólgota…… el dia 22 de abril de 1882, la componen 50 miembros.

El Valle 6 de mayo de 1886


El Cura párroco
Rv. Antonio Llamozas

UNIÓN ARQUIDIOCESANA DE COFRADIAS. 1955


Presidentes: Domingo Vega, El Prado 1955-1962. Emilio González El Valle 1962-1967

UNIÓN NACIONAL DE COFRADÍAS 1974 (no tengo otros datos)

Luis Herrera García. Caracas Junio 2011

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