MODA SOSTENIBLE Fernández Matilla, María Del Arrabal
MODA SOSTENIBLE Fernández Matilla, María Del Arrabal
MODA SOSTENIBLE Fernández Matilla, María Del Arrabal
Universidad de León
Albert Einstein.
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
INDICE DE CONTENIDOS
1. RESUMEN ............................................................................................................... 4
2. INTRODUCCIÓN .................................................................................................... 5
3. OBJETIVOS ............................................................................................................. 7
4. METODOLOGÍA ..................................................................................................... 8
1
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
CONCLUSIONES .......................................................................................................... 63
REFERENCIAS ............................................................................................................. 65
2
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
INDICE DE CUADROS
Cuadro 6.1: Diferencias entre el sistema fast fashion y el sistema slow fashion ........... 21
INDICE DE FIGURAS
Figura 7.1: Los límites del planeta. Un espacio seguro de funcionamiento para la
humanidad ...................................................................................................................... 41
Figura 8.2: Flujo mundial de los materiales utilizados en la ropa durante el año 2015 . 55
INDICE DE GRÁFICOS
Gráfico 7.1: Brecha existente entre salario mínimo legal y salario digno en Asia en el
año 2015 ......................................................................................................................... 37
3
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
1. RESUMEN
El modelo productivo fast fashion ha democratizado la moda a un coste muy elevado para
el medioambiente y para la sociedad. La industria de la moda es la segunda más contami-
nante del mundo, contribuyendo al cambio climático y al deterioro de los ecosistemas. En
el ámbito social, esta industria es responsable de gran parte de la esclavitud moderna
existente, con empleados trabajando en condiciones muy precarias y con escasos o ningún
derecho humano ni laboral. En este marco, la sostenibilidad se posiciona como una vía
de futuro tanto para las empresas como para el medioambiente y la sociedad. En el pre-
sente trabajo se analizan las diversas razones económicas y morales que justifican la elec-
ción de una moda sostenible así como se plantean los retos económicos, sociales y me-
dioambientales más relevantes a los que el sector ha de enfrentarse para conseguir que
esta elección sea fructífera.
ABSTRACT
The fast fashion productive model has allowed the democratization of fashion but a very
high cost for the environment and for society. The fashion industry is the second most
polluting industry in the world, contributing to climate change and the deterioration of
ecosystems. In the social sphere, this industry is responsible for a large part of the existing
modern slavery, with employees working in very precarious conditions and with barely
human or labor rights. In this framework, sustainability is positioned as a successful op-
tion for companies, environment and society. Several economic and moral reasons that
justify the preference for a sustainable fashion are analyzed in this work, as well as the
most relevant economic, social and environmental challenges that the sector has to face
in order to make this election fruitful.
4
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
2. INTRODUCCIÓN
En la Edad Media, la ropa era un artículo muy caro sólo al alcance de las personas más
adineradas, razón por la cual las mujeres confeccionaban su indumentaria en casa. Este
trabajo era laborioso, por lo que la ropa solía ser hosca y simple y se heredaba durante
generaciones. En el siglo XVIII se eliminó la distinción de clases, surgiendo la oportuni-
dad de vestir libremente, sin el seguimiento de estrictos protocolos impuestos por la exis-
tencia de las jerarquías. Asimismo, la apertura de las primeras fábricas permitió el acceso
de la indumentaria al público general. A mediados del siglo XX, la producción y el con-
sumo habían evolucionado de tal forma que era posible adquirir una gran variedad de
prendas a bajo coste a la par que el consumidor disponía de capacidad adquisitiva para
comprar y desechar cuantos productos desease (Ozdamar Ertekin y Atik, 2015).
En este breve resumen sobre la historia de la industria de la moda puede percibirse una
evolución en el valor intrínseco de la indumentaria, yendo en detrimento en sentido in-
verso al beneficio de las empresas. En la actualidad, los excesos cometidos, tanto por la
industria como por el consumidor, han ocasionado profundas secuelas en el medioam-
biente y en la sociedad, las cuales exigen medidas más respetuosas con el entorno y con
las personas. Con los efectos del cambio climático, acelerado por una industrialización
incontrolada, el número de voces que han empezado a preocuparse por la sostenibilidad,
ha ido en aumento acrecentado, en el caso de la moda, por el interés en el coste real que
esconde la oferta de ropa tan barata. En el ámbito empresarial, la RSC ya no es un com-
plemento en la estrategia sino que se ha filtrado a todas las capas de su actividad, siendo
el elemento raíz que acompaña a toda estrategia corporativa y competitiva. La sostenibi-
lidad no está de moda, es necesaria para que la moda siga existiendo y, actualmente, está
atravesando un momento histórico en su evolución que marcará una nueva era en la in-
dustria del vestuario.
5
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Finalmente, el interés por seleccionar este tema se debe también a la existencia de una
creciente sensibilización de la población frente al impacto que origina la industria de la
moda sobre los recursos del planeta y el bienestar de los trabajadores. Estas personas
rechazan toda actividad empresarial exenta de principios morales con lo que la moda sos-
tenible les supone una posibilidad de alinear sus valores con sus acciones y, por lo tanto,
dan origen a una oportunidad económica como nuevo mercado que las empresas en el
sector no deben ignorar.
6
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
3. OBJETIVOS
El principal objetivo que se pretende alcanzar con el presente trabajo es conocer la situa-
ción actual y de futuro de la industria de la moda en un contexto de sostenibilidad. Para
lograrlo, se plantean una serie de objetivos secundarios que permitan la consecución del
primero.
En primera instancia, se tratará de conocer el sector, tanto a nivel global como nacional,
para enmarcar las características y tendencias que lo definen. El segundo objetivo será
realizar una primera aproximación al concepto de moda sostenible a través de sus dos
componentes. En tercer lugar, se desarrollarán diversas razones de índole económica y
moral en favor de una moda sostenible. En el último de los objetivos secundarios se pre-
tenderá mencionar algunas de las evoluciones del sector hacia la sostenibilidad y se es-
bozarán, en lo posible, los retos a los que se enfrentará la industria del futuro para poder
continuar por esta senda.
Finalmente, tras haber elaborado los objetivos secundarios, se estará en mejor disposición
para dar respuesta al objetivo principal, en las conclusiones, ya que se habrá conseguido
un conocimiento más profundo de la temática propuesta.
7
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
4. METODOLOGÍA
Para la realización de este trabajo se ha partido del concepto teórico de sostenibilidad para
luego identificar y poner en valor la necesidad de una moda sostenible, viendo su aplica-
ción específica en el sector en general y en casos concretos. A partir de una extensa reco-
pilación de información se pretende sentar la base de una nueva forma de entender la
moda y su industria, más amigable con el entorno y con una visión largoplacista de los
recursos empleados.
8
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
5. EL SECTOR DE LA MODA
En consecuencia, algunas empresas llevan a cabo complejos análisis, publicando las con-
clusiones más relevantes, de gran valor para directivos, inversores y, en general, para
cualquier usuario interesado en conocer la situación actual del negocio de la moda. Este
apartado ha tomado como referente a dos prestigiosos informes dentro del sector, The
state of fashion correspondientes a los años 2017 y 2018 para la descripción de la industria
a nivel global y el Informe económico de la moda en España 2016, último publicado en
el ámbito nacional.
La moda es una de las industrias más importantes del mundo. Tal es su magnitud que en
el año 2016 fue capaz de generar un valor de 2,4 trillones de dólares, lo que equivaldría
a la séptima economía más grande del mundo, en el caso de que esta cifra representase
un PIB nacional (The Business of Fashion y McKinsey&Company, 2016).
9
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Para tener una visión holística y ordenada de la situación de la industria a nivel mundial
se han establecido cuatro grandes bloques, diferenciando entre el desempeño económico,
el comportamiento del consumidor, las estrategias llevadas a cabo por la empresa y las
disrupciones más destacadas que se podrán experimentar a partir del año 2018.
Para los siguientes datos, en el informe The state of fashion se ha utilizado el Índice Mun-
dial de la Moda de McKinsey (McKinsey Global Fashion Index, abreviado MGFI) el cual
está compuesto por las 450 empresas —públicas y privadas— que componen el 50% de
empresas más grandes del mundo. Este índice monitoriza el desempeño de la industria
mediante las ventas, el beneficio operativo (EBITA) y el beneficio económico —coste
explícito más coste de oportunidad— obtenido desde el año 2005 (The Business of
Fashion y McKinsey&Company, 2016).
Como resultado en el desempeño de las ventas se obtuvo que, entre el año 2005 y el 2015,
el crecimiento medio anual de las mismas fue del 5,5%, por encima del crecimiento del
PIB mundial. Sin embargo, en el 2016 esta cifra descendió hasta el 2-2,5% como conse-
cuencia de un año convulso en el que se produjeron cambios bruscos en el ritmo de la
economía o shocks económicos debido a una gran inestabilidad política y social. Para el
año 2018, se espera un aumento de las ventas del 3,5-4,5% como consecuencia del desa-
rrollo de los mercados emergentes, como el Asia Pacífica, Europa del Este y Latinoamé-
rica, que aportarán tasas de crecimiento en las ventas del 5-7,5% (The Business of Fashion
y McKinsey&Company, 2016, 2017).
10
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
A nivel corporativo, las empresas se han visto forzadas a emprender duras reestructura-
ciones y un exhaustivo control de costes con el fin de mantener el margen de beneficios,
desprendiéndose de las marcas menos rentables y aumentando las fusiones y adquisicio-
nes, construyendo fuertes conglomerados que dominen el mercado. La cultura del des-
cuento, consistente en ofertar precios cada vez más bajos respecto a los de la competencia,
está poniendo en riesgo los márgenes de beneficio augurando, para el año 2018, una sa-
turación del mercado europeo y norteamericano y posible canibalización en las ventas.
11
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Los mercados emergentes serán el nuevo foco de las estrategias de crecimiento previén-
dose, para el año 2025, una cuota del 55% de las ventas globales en estos mercados. A
nivel geoestratégico, las megacuidades — núcleos urbanos de rápido crecimiento— están
desplazando las estrategias de satisfacción de la demanda hacia las exigencias de los usua-
rios de una metrópoli y no de todo un país, como se ha hecho hasta ahora. Entre estas diez
megaciudades destacan, por su tamaño e importancia para la industria de la moda, Nueva
York, Los Ángeles y Tokio y, por su rápido crecimiento, las ciudades emergentes Beijing,
Bombai y Shanghai.
Respecto al futuro de la industria, éste pasa por instaurar la metodología de las startups1
adoptando su agilidad, capacidad de colaboración y apertura mental. El cambio de men-
talidad incluye la adopción de fuentes de talento procedentes de cualquier tipo de indus-
tria, trabajar de forma distinta —mediante equipos autogestionados y redes interactivas
que mejoren la velocidad, la flexibilidad y la innovación—, desarrollar colaboraciones
que ayuden a aumentar el ritmo de las innovaciones y buscar fuentes de inversión no
tradicionales de las grandes empresas, como el capital riesgo o venture capital, utilizado
habitualmente para financiar las startups. Se crearán nuevos modelos de negocio como
alquiler de ropa de lujo2, compra y venta de ropa de segunda mano3 o estilistas online con
envío de los artículos recomendados a domicilio4. (The Business of Fashion y
McKinsey&Company, 2016, 2017). En cuanto al actual sistema fast fashion, éste aumen-
tará su velocidad para convertirse en ultra fast fashion, acortando los tiempos de la cadena
de suministro a mínimos próximos al tiempo real, como Missguided5, que en sólo una
semana diseña, produce y entrega sus diseños —frente a las doce semanas de la industria
tradicional o las cinco de Zara—. La sostenibilidad ya está transformando la industria a
un nivel muy profundo. En producción los principios de la economía circular están trans-
formando el sistema lineal actual hacia un sistema circular, donde los residuos cierran el
círculo de la cadena de valor al reincorporarse nuevamente al inicio del proceso como
nueva materia prima mientras que, en consumo, las nuevas demandas del usuario están
1
Una startup es una empresa de nueva creación con opciones de crecimiento y escalabilidad.
2
VillageLuxe (https://villageluxe.com/)
3
Grailed (https://www.grailed.com/)
4
Stitch Fix (https://www.stitchfix.com/)
5
Missguided (https://www.missguided.com/es/)
12
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
haciendo virar la estrategia empresarial hacia objetivos más inclusivos, considerando las
peticiones de los distintos stakeholders en el diseño de los mismos.
En el plano del consumidor, éste es cada vez más exigente, más selectivo en sus compras
y su conducta menos predecible. En concreto, el usuario de los países emergentes pasa
largas horas al día conectado a la Internet donde se comunica con otros a través de las
redes sociales y visualiza opiniones y campañas de marketing, lo que influye notable-
mente en su comportamiento de compra. Por su parte, los millenials, además de ser muy
sensibles al precio, tienen unas expectativas muy elevadas sobre los requerimientos que
ha de tener una empresa, exigiendo un producto que satisfaga sus necesidades, que sea
novedoso y de calidad y que, al mismo tiempo, consiga alinear sus valores con los de la
empresa.
Por otro lado, la industria de la moda está logrando captar acertadamente la cultura y el
estilo de vida del consumidor ofreciendo productos adaptados a sus necesidades. Por
ejemplo, actualmente existe una oferta más variada de productos para las tallas extra o
grandes así como una moda adaptada a ciertas demandas particulares, como las derivadas
de la cultura islámica. El segmento del estilo deportivo o athletic wear surgió como res-
puesta a una mayor preocupación por la salud y el bienestar. De hecho, ha experimentado
un incremento destacado, con un crecimiento del 10% en tan sólo una década —entre el
2005 y el 2015—, mientras que el resto de ropa y calzado ha aumentado un 4% (The
Business of Fashion y McKinsey&Company, 2016). Sin embargo, tras alcanzar esta cima,
el aumento en las ventas se han ralentizado hasta el 7,5-8,5% en el año 2017 y se prevé
que, para el año 2018, éstas sean del 6-7% (The Business of Fashion y
McKinsey&Company, 2017). La búsqueda del bienestar físico, mental, espiritual, emo-
cional y medioambiental ha supuesto un nicho de mercado para aquellas empresas capa-
ces de convertir al usuario en una versión mejorada de él mismo a través de experiencias
transformativas, como Nike, que ofrece un servicio de entrenamiento virtual, Nike+Run
Club, además de organizar eventos para corredores y brindar consejos diversos (Nike,
2017). La personalización será la clave para el usuario del 2018, el cual demandará mayor
atención —vía asesoramiento, productos personalizados o campañas con las que se sienta
identificado— centrada en realzar su autenticidad para diferenciarse del resto de usuarios.
13
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
14
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
15
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
En el sector textil, confección, cuero y calzado, en el año 2015 la cifra de negocio era de
14.068 millones de euros, un 0,6%, más que el año anterior. Por su parte, el beneficio
obtenido en 2015 ascendió hasta los 395,5 millones de euros, un 17%, más que en el
ejercicio anterior. Por otro lado, el comercio textil facturó en 2015 un 7,7% más que en
el año anterior —evolucionando las ventas en positivo tras siete años de descensos con-
secutivos— hasta alcanzar la cifra de 17.743 millones de euros (Modaes.es, 2016).
5.2.2. Empleo
16
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Por otro lado, las importaciones de moda representaban, en 2015, el 9% del total de los
bienes adquiridos, una décima más que el en el periodo anterior, con un valor superior al
de la mercancía remitida al exterior. Los principales países desde los que se adquieren los
bienes son China, Italia, Bangladesh, Turquía y Marruecos (Modaes.es, 2016). El valor
de estas importaciones en 2015 fue de 18.176 millones de euros, aumentando un 8% en
el 2016 hasta llegar a los 19.635 millones de euros (Pinker Moda, 2017).
En España, el tejido empresarial del textil, confección, cuero y calzado está conformado,
según datos del año 2015, mayoritariamente por pequeños empresarios que no cuentan
con asalariados (45,7% de las empresas) o que emplean entre una y nueve personas
(39,6%) bajo las formas jurídicas de sociedad limitada (45,9%) o la persona física
(41,7%). En cuanto a los formatos comerciales, los grandes almacenes, hipermercados y
otras superficies han ido dando paso a las tiendas especializadas, las tiendas multimarca
y los outlets. Precisamente este formato ha conseguido copar el 15,1% de la cuota de
mercado frente al 5% del año 2006.
17
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Para definir la moda sostenible es preciso entender por separado estos dos conceptos:
moda y sostenibilidad. A continuación se expone una aproximación de cada uno de ellos
antes de llegar al cometido inicial.
6.1. MODA
Para entender qué es la moda, la RAE (2017) propone las siguientes definiciones:
1. “Uso, modo o costumbre que está en boga durante algún tiempo, o en determi-
nado país”.
2. “Gusto colectivo y cambiante en lo relativo a prendas de vestir y complementos.”
3. “Conjunto de la vestimenta y los adornos de moda.”
Pero la moda no es sólo aquella vestimenta y accesorios que pueden llevarse en un área
geográfica determinada y durante un periodo de tiempo concreto. Históricamente la in-
dumentaria ha sido utilizada para transmitir información social y personal; es, por tanto,
capaz de reflejar un contexto social, político y económico así como tiene poder para co-
municar, de forma no verbal, los gustos, deseos, clase social, profesión, edad o proceden-
cia, entre otros, de la persona que la lleva (Jenkyn Jones, 2007). Casablanca y Chacón
(2014) proponen una definición más holística de la moda al sintetizar que es “un meca-
nismo interdisciplinar donde confluyen fenómenos económicos, sociológicos, etnológi-
cos, psicológicos, estéticos, antropológicos, ecológicos y medioambientales y comunica-
tivos”. Esta definición sintetiza situaciones como la vivida durante la Segunda Guerra
Mundial, en la que se establecieron cupones de ropa y racionamientos en el tejido que
obligaron tanto a modificar estilos como a reciclar materiales (BBC Mundo, 2015; The
History Style, 2011). Por el contrario, en los años sesenta la indumentaria se volvió más
colorida y liberal, con la aparición de la minifalda y los pantalones de campana, marcando
así un cambio generacional caracterizado por una sociedad más reivindicativa e idealista.
La moda es, por tanto, una forma de entender la sociedad y su contexto, además de ser
una poderosa herramienta de lenguaje no verbal.
18
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
En 1983 se creó la Comisión Mundial del Medio Ambiente y del Desarrollo como con-
secuencia de un crecimiento económico desmedido, asentado sobre la creencia de que los
recursos son ilimitados. En 1987, la ex-ministra noruega, Gro Harlem Brundtland, pre-
sentó ante esta comisión el informe Nuestro futuro común, más conocido como Informe
Brundtland, en el cual se definió la sostenibilidad por primera vez: El desarrollo sosteni-
ble es el “desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente sin compro-
meter la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades”
(Naciones Unidas, 1987, p. 23). Este concepto contiene un enfoque a largo plazo y encie-
rra tres componentes: el económico, el social y el medioambiental.
Como aclaración final, decir que, según la UNESCO (2017) la diferencia entre sostenibi-
lidad y desarrollo sostenible radica en la temporalidad de las acciones; mientras que la
primera se concibe como una meta a largo plazo, la segunda consiste en la consecución
de aquellos procesos que permitirán alcanzar la primera.
19
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
La moda sostenible es aquella rama de la industria de la moda que tiene en cuenta el coste
económico, social y medioambiental que conlleva la producción de la moda (Henninger
E., Alevizou J., y Oates J., 2016). Ésta tiene su origen en el movimiento slow fashion el
cual reivindica la ralentización del actual ciclo industrial, conocido como fast fashion y
que basa su modelo productivo en una rápida captura de las tendencias para transformar-
las en productos baratos y de escasa calidad para que sean vendidos de forma masiva. Por
el contrario, el movimiento slow fashion pretende conseguir, por un lado, una reducción
de la producción con el fin de evitar la sobreexplotación de los recursos naturales y hu-
manos, y por el otro, una disminución del consumo mediante la elongación de la vida
útil de las prendas (Jung y Jin, 2014). Este movimiento se inspira en el movimiento slow
food, que pone el foco en la calidad y procedencia de los alimentos que comemos y con-
lleva un compromiso tanto con la comunidad como con el medioambiente (Jung y Jin,
2014; Sanz, 2017).
Desde el auge del sistema fast fashion, los cambios ocurridos en la industria se han pro-
ducido a una velocidad exponencial: deslocalización de la producción hacia países en
desarrollo, aumento del número de temporadas propuestas por año, reducción de los pla-
zos de entrega en la cadena de suministro, obsolescencia prematura de los productos,
incremento vertiginoso de la frecuencia de compra, etc. Como contracorriente a la acele-
ración tóxica que esta vía conlleva, el movimiento slow fashion empezó a concretar las
ideas que lo sustentan en acciones concretas de producción y consumo hasta tal punto que
hoy día la moda sostenible se ha convertido en una alternativa que permite la continuidad
de las empresas existentes y la base de la futura industria de la moda. Las diferencias más
notables entre ambos sistemas de moda se pueden visualizar en la tabla 6.1.
20
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Cuadro 6.1: Diferencias entre el sistema fast fashion y el sistema slow fashion
21
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
La primera vez que emergió la moda sostenible fue en la década de los sesenta, cuando
los consumidores empezaron a ser conscientes del impacto que generaba la producción
de las prendas sobre el medioambiente. Ya por entonces se instaba a llevar a cabo un
cambio en las prácticas de esta industria. En las décadas de los ochenta y noventa se
emprendieron numerosas campañas anti-piel, como las protagonizadas por la organiza-
ción por los derechos de los animales Lynx, basadas en un gran impacto visual y eslóganes
como “Se necesitan hasta 40 indefensos animales para hacer un abrigo de piel. Pero sólo
uno para llevarlo”(Allisonsmf, 2012), que asociaba la vestimenta de este tipo de prendas
con una elección moralmente incorrecta. Finalmente, en los años noventa empieza a sur-
gir un interés por la moda ética, la cual se asoció con condiciones laborales justas, un
modelo de negocio sostenible, materiales orgánicos y ecológicos, certificaciones y traza-
bilidad (Henninger E. et al., 2016). Actualmente, diversos estudios confirman que la sos-
tenibilidad en la industria de la moda futura seguirá fortaleciéndose (Modaes.es, 2016;
The Business of Fashion y McKinsey&Company, 2016, 2017).
La industria textil es la segunda más contaminante del mundo, por detrás de la petrolera.
Esta afirmación está sustentada en datos como, por ejemplo, que el 20% de los vertidos
tóxicos al agua proceden de este sector, que la fibra de poliéster tarda 200 años en des-
componerse o que la producción de algodón acapara el 11% de los pesticidas y el 24% de
los insecticidas utilizados en el mundo6. (BBC Mundo, 2017; Sánchez, 2016). Desde el
punto de vista social, el triunfo del fast fashion, precipitado por la globalización, ha des-
tacado por infringir sistemáticamente los derechos laborales y humanos de quienes fabri-
can las prendas con el fin de conseguir costes de producción cada vez más bajos. Si se
reflexiona sobre estos datos es posible concluir la necesidad de reconocer, por parte de
las entidades, un compromiso más allá del exigido por los accionistas de las mismas.
6
Estas cifras pueden variar ligeramente en función de la fuente consultada.
22
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
y las condiciones del ser humano” (Forética, 2016). De esta forma, las entidades empre-
sariales no sólo velan por el beneficio económico sino también por el bienestar social y
medioambiental, asumiendo la fracción correspondiente a los efectos del desarrollo de su
actividad y obrando en consecuencia. Las razones que sustentan esta necesidad de una
responsabilidad social y medioambiental por parte de la empresa tienen una doble natu-
raleza, económica y moral, cada una de las cuales se justifica, a su vez, por diversos ar-
gumentos (Crane y Matten, 2016).
A continuación se van a analizar estas dos razones partiendo de una breve descripción
general del argumento en cuestión para luego extrapolarlo al sector de la moda y, final-
mente, identificar las razones concretas que han llevado a determinadas compañías, to-
madas como ejemplo, a decantarse por la sostenibilidad.
Para el año 2030, las entidades de moda dispondrán de un 63% más de consumidores a
los que satisfacer cuyas demandas y expectativas están mostrando una notoria tendencia
hacia la sostenibilidad (Global Fashion Agenda y The Boston Consulting Group, 2017).
En un futuro cercano, las empresas que deseen sobrevivir a la competencia deberán incluir
la RSC en la estrategia empresarial dado que los activos intangibles, entre los que se
encuentra la sostenibilidad, ya están acaparando la práctica totalidad del valor de mercado
23
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
24
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
mundial, con tendencia histórica creciente —el crecimiento de respuestas afirmativas en-
tre el año 2013 y el 2015 fue del 16%—.
7
Traducido al español, “probando una manera mejor”.
8
Ordenadas por volumen de facturación, El Naturalista, Art y Neosens.
25
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
atractivo tanto para el consumidor como para los inversores, socios comunitarios y fuerza
laboral potencial.
26
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Esta gestión del riesgo ha ido tomando diferentes sendas a lo largo de los años. En la
década de los noventa surgió una nueva forma de entender el negocio de la moda enca-
minada a proteger la rentabilidad de la incertidumbre de la demanda a través de una rápida
comprensión de los gustos del consumidor para trasladarlos inmediatamente a la cadena
de valor, reduciendo así el riesgo tanto de ruptura de stock como de exceso de inventario.
La moda rápida o fast fashion está basada en la teoría lean, la cual considera un desper-
dicio todo aquel gasto incapaz de generar valor para el consumidor final, es decir, se
elimina aquella mercadería poco o nada deseada por el consumidor y se invierten esos
recursos en aumentar la reserva de los productos aceptados (De Marcos, 2009). El fast
fashion busca satisfacer casi de inmediato una demanda cambiante ofreciendo productos
de moda fabricados rápidamente a precios bajos o muy bajos, utilizando para ello la tec-
nología más avanzada y controlando la cadena de suministro. Para poder seguir el ritmo
creciente de la demanda, la cual busca novedad a precios cada vez más reducidos, las
empresas comenzaron a externalizar parte de las actividades que realizaban a países en
27
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
desarrollo, consiguiendo no sólo disminuir los costes sino también el riesgo asociado a la
actividad.
Este modelo de negocio, liderado durante años por las distribuidoras H&M y Grupo In-
ditex (Ventura, 2017), recibió una sacudida sin precedentes el 24 de abril de 2013 tras el
desplome del edificio Rana Plaza en Dacca, capital de Bangladesh, en el que fallecieron
1.134 personas y unas 2.500 resultaron heridas (G. Barbero, 2015). El edificio, de ocho
plantas de altura, había sido diseñado para albergar tiendas y oficinas, no talleres textiles,
siendo muy probable esa la causa del grave daño estructural que sufría el inmueble en el
momento del derrumbe. El estado del edificio ya había sido denunciado en numerosas
ocasiones por los trabajadores, incluido el día anterior al accidente, en el que se habían
escuchado sonidos similares a una explosión e importantes grietas en paredes y tejados.
Sin embargo, todas las advertencias fueron omitidas tanto por el propietario del edificio,
Sohel Rana, como por los dueños de las fábricas, obligando a los trabajadores a acudir a
sus puestos al día siguiente. Aunque no fue el primer caso de este tipo, sí fue el más
dramático y mediático, conociéndose el nombre de las firmas que fabricaban allí sus pro-
ductos, como Mango, C&A, Zara, Carrefour o El Corte Inglés, dañando seriamente su
imagen (Labowitz, 2017). Como respuesta, tanto el Gobierno de Bangladesh como los
propietarios de las fábricas y empresas llevaron a cabo diversas medidas, entre las que se
encuentra el Acuerdo para la seguridad en edificios y contra incendios firmado por dos-
cientas marcas, distribuidores e importadores con el fin de evitar una situación similar
(Sotillo, 2017; Trillas, 2016). Desde entonces, las empresas han hecho importantes es-
fuerzos por recuperar la confianza del consumidor adhiriéndose a otros acuerdos y pactos,
mostrándose más transparentes en las operaciones que realizan y tomando el control del
aprovisionamiento para poder preservar la paz laboral y así disminuir riesgos en la cadena
de valor (Silvia Riera, 2016a). Por su parte, el Parlamento Europeo (2017) aprobó una
resolución, no vinculante, en la que se proponen diversas medidas destinadas a evitar
situaciones similares a las ya acontecidas. Entre ellas se encuentra la creación de una
propuesta legislativa alineada con las directrices de la OCDE (2017) en la que se tengan
en cuenta determinadas consideraciones antes de realizar cualquier acuerdo comercial a
lo largo de toda la cadena de distribución o que la Unión Europea ha de mostrar ejempla-
ridad en los contratos de compra textil.
28
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Las entidades de moda han de adelantarse a la opinión pública para no dañar su prestigio
y, además, marcar el camino que preceda a la legislación para no perder su independencia.
Incorporar la RSC en las empresas supone disminuir los riesgos asociados a las distintas
actividades que realizan así como anticipar posibles situaciones de incertidumbre, neu-
tralizando o minimizando su impacto.
La moda sostenible tiene capacidad para reforzar o desarrollar la economía local a través
de centros de producción próximos al consumidor consiguiendo, además, una ventaja
competitiva con los recursos disponibles en ese entorno (MTS LifeStyle, 2014). Por el
contrario, la deslocalización de la producción hacia países en desarrollo lleva años siendo
asociada a precarias condiciones de seguridad e higiene de los trabajadores. Ya en 1974,
Estados Unidos, la Comunidad Europea y otros países industrializados, crearon el
Acuerdo Multifibras con el fin de proteger la industria local mediante el establecimiento
de cuotas máximas a las importaciones de industrias emergentes, como China. La medida
fracasó ya que las importaciones se desviaron hacia países no anexos al acuerdo, como
Sri Lanka, Filipinas, Tailandia, Indonesia o Bangladesh. Con la llegada de la globaliza-
ción, en la década de los noventa, el comercio y las finanzas se liberalizaron con lo que
condujo a un aumento en la externalización de la producción hacia estos países, cuyos
costes laborales eran mucho más reducidos, tal y como hizo el Grupo Inditex, entre otros
muchos casos. Finalmente, en el año 2005 este acuerdo expiró, y la externalización se ha
convertido en la norma de las grandes empresas, lo que ha multiplicado las situaciones de
tensión y protesta de los trabajadores de esos países como consecuencia de las precarias
condiciones laborales y salariales que sufren (Carro de combate y Coordinadora Estatal
de Comercio Justo, 2015).
29
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Mientras tanto, las zonas afectadas por la deslocalización han sufrido un debilitamiento
de la infraestructura instalada, tal como se ha producido en Europa y, en concreto, en
Galicia desde que Inditex decidiera desviar la mayor parte de su producción a países como
Marruecos, Bangladesh o India a finales de los años noventa tras una explosión de for-
mación de cooperativas destinadas a abastecer a un presumible flujo continuo de pedidos
de producción. Las exigencias, por parte de la entidad, eran cada vez más severas, con
acortamiento de los plazos de entrega y bajadas en las tarifas por prenda acabada (Ribeira,
2017).
Con un consumidor cada vez más preocupado por las condiciones bajo las que se confec-
cionan los artículos de moda, apuestas como la de Latitude resultan muy atractivas para
el futuro del contexto local. Esta empresa de confección gallega está rescatando el textil
de esta zona creando una red de talleres a partir de otros existentes o rehabilitados. Se
caracteriza por elaborar productos de calidad bajo condiciones de trabajo dignas y respe-
tando el medioambiente valiéndose para ello de los recursos humanos y materiales dis-
ponibles en el entorno (López Escorial, 2017) y reduciendo la huella de carbono derivada
de un uso menos intensivo del transporte. Esta empresa busca transformar la forma de
entender y de llevar a cabo la industria textil, integrándose en el entorno para mejorarlo,
consiguiendo la aceptación de la comunidad y obteniendo beneficios positivos para am-
bas partes.
En otro caso, la empresa El Naturalista fabrica su producto entre La Rioja y Tánger, re-
giones de tradición zapatera, lo que le permite establecer un vínculo más profundo con la
comunidad al ayudar a dar continuidad a una actividad representativa de la cultura local
a la par que la empresa mantiene ventajas competitivas como productos fabricados con
mayor calidad o la oportunidad de desarrollar innovaciones en el proceso productivo, todo
ello gracias a la experiencia y habilidad de la fuerza laboral. Además del beneficio eco-
nómico, ambas partes también consiguen ventajas derivadas del aprendizaje mutuo, con
lo que se consigue, además, una relación armónica entre la entidad y su entorno más
próximo (El Naturalista, 2017).
Tanto El Naturalista como Latitude ayudan a reactivar la economía local, generando una
riqueza más distributiva y mejorando el bienestar de los ciudadanos a través de iniciativas
de transformación social, con colaboraciones con instituciones educativas en diversos
30
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
proyectos o mediante acciones de reinserción social, entre otras prácticas. Las empresas
brindan así una solución a problemas clave de sus stakeholders, entre los que se encuen-
tran la precariedad laboral o la marginación social, situándolos en una posición preferente
dentro de la hoja de ruta de la compañía.
Las razones morales cuestionan qué acciones de las empresas están bien o mal en función
de los valores y creencias de los grupos de interés con los que interactúa la compañía.
Conociendo estas razones, las entidades pueden racionalizarlas a través de principios y
reglas específicas que, posteriormente, determinen planes de acción moralmente acepta-
bles. Se dan tres argumentos morales básicos sobre los que se sostiene la aplicación de
la RSC en las empresas, que son: el argumento de las externalidades, el argumento del
poder y el argumento de la dependencia (Crane y Matten, 2016). Cada uno de ellos será
desarrollado, primeramente, desde una óptica general, después, a través de la industria
textil y, finalmente, mediante la aplicación de casos concretos, en la medida de lo posible.
Las externalidades son impactos negativos o positivos que genera la actividad de la em-
presa sobre la sociedad o el medioambiente, causando costes o beneficios no reflejados
por los precios de mercado. Por lo tanto, estas externalidades —negativas y positivas—
deben implicar, necesariamente, una responsabilidad moral por parte de la empresa que
los genera.
a) Externalidades negativas
El actual sistema de moda fast fashion requiere de un continuo consumo de recursos ma-
teriales y humanos para poder mantener el incesante flujo de nuevos productos que lo
caracteriza, ocasionando efectos de mayor o menor intensidad centrados, principalmente,
en el ámbito laboral y medioambiental. Ozdamar y Atik (2015) agrupan las externalidades
originadas por este sistema en tres bloques: consecuencias para el bienestar del consumi-
dor, consecuencias para el bienestar del trabajador y consecuencias para el medioam-
biente.
31
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Si bien es cierto que las causas pueden ser diversas, los adolescentes son un segmento
potencialmente influenciable por la industria de la moda al promover un estilo de con-
sumo cimentado en ideales de belleza que realzan la delgadez extrema y la perfección
estética, además de hipersexualizar tanto a mujeres como a niñas. La compañía francesa
Yves Saint Laurent se ha visto envuelta, en numerosas ocasiones, en escándalos mediáti-
cos por sus campañas publicitarias. En el año 2002 (Clarin.com, 2014), una modelo com-
pletamente desnuda publicitaba uno de sus perfumes, en una pose de éxtasis personal.
Otra de sus campañas (Pagespetit, 2017) exhibían a mujeres extremadamente delgadas,
con atuendos y poses degradantes, más propios del sector pornográfico que de una firma
32
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
de ropa femenina de lujo. Pero una de las campañas más polémicas sobre delgadez ex-
trema la protagonizó Ralph Lauren (El País, 2009) en la que mostraba a una modelo cuyo
cuerpo había sido retocado hasta el extremo de ser anatómicamente irreal. Dolce & Ga-
banna (Guallart, 2007) sufrió otro escándalo al publicitar su vestuario mediante la repre-
sentación de una mujer siendo sometida por un hombre a la par que varios de ellos obser-
van la escena impasibles. En el ámbito infantil, la revista francesa Vogue París Cadeaux
(20minutos.es, 2011) publicó varias fotos de niñas, con edades comprendidas entre los
cinco y siete años, que fueron vestidas con prendas de lujo y alta joyería, maquilladas y
con tacones, emulando jugar a ser mayores aunque tanto las poses como composición de
la escena más bien mostraba una sexualización temprana de estas niñas. Los casos en los
que las firmas de moda envían mensajes tóxicos al consumidor son innumerables. La
mujer, delgada, bella, sumisa, cosificada y sexualizada hasta tal punto que roza lo porno-
gráfico. El hombre, musculoso, heterosexual, conquistador, poderoso, seguro de sí mismo
y dominante. Los niños también son vulnerables a la influencia de estos valores a través
de ciertas campañas, como la de Gap Kids (Infobae América (I), 2016), en la que una
niña, vestida con una sudadera rosa y diadema con orejas de gato, es acompañada por un
texto que alude al estereotipo de niñas bonitas y sociables mientras que en el cartel del
niño, que viste una camiseta con la cara de Albert Einstein estampada, se destaca su inte-
ligencia y el inicio de una carrera de éxito. En esta línea, Zara tuvo que acabar retirando
del mercado unos bodies de bebé en los que se leía “Bonita y perfecta – Eso dice papá”
para la versión femenina y “Divertido e inteligente – Eso dice mamá” en la masculina
(M. Gayo, 2015), perpetuando así los estereotipos asociados a cada género.
33
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
De hecho, los problemas más frecuentes que se dan en la industria de la confección, desde
la llegada de la globalización y la externalización de procesos, son los bajos salarios, que
no llegan a alcanzar el mínimo necesario para subsistir, las largas jornadas laborales, que
suelen superar las doce horas diarias, y la falta de libertad de asociación y de negociación
colectiva, que es reprimida con amenazas e incluso con violencia física. De estos tres
problemas —bajos salarios, largas jornadas laborales y falta de libertad de asociación—
se derivan otros, como enfermedades laborales no reconocidas como tal y sin cobertura
sanitaria, falta de atención y educación de los hijos de las trabajadoras o dificultad para
emprender cambios en favor de los trabajadores, al no existir una verdadera representa-
ción de sus intereses y con el poder suficiente para cambiar la situación. De esta forma,
la compañía externaliza la responsabilidad —legal y moral— de lo que sucede en los
talleres a la par que consigue reducir sus costes de producción.
34
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
La industria textil acumula cientos de casos de violación de los derechos humanos y la-
borales. Detrás de ellos se esconde la lucha por la competitividad, lo que implica reducir
los costes laborales para las grandes corporaciones para evitar que esa producción sea
trasladada a otro país más competitivo. En Haití, uno de los países más pobres del mundo,
los empleados protestan para conseguir mejoras salariales a la par que los gestores de las
fábricas amenazan con deslocalizar la producción por un posible descenso del beneficio
(Modaes, 2017a). Los haitianos piden incrementar el salario mensual de los 128€ actuales
a 341€. En Camboya se prevé una ralentización del crecimiento de las exportaciones
como consecuencia del aumento del mínimo salarial. En 2018 cobrarán 170$ al mes un
lugar de los 153$ actuales, lo que ha supuesto la oposición de la patronal de la industria
de la confección, que alega pérdida de competitividad frente a otros países productores
de bajo coste (modaes, 2017). En Bangladesh, tras el derrumbe de Rana Plaza, se empe-
zaron a tomar numerosas medidas paliativas y preventivas con resultados de éxito varia-
bles. La mayoría de estas medidas estaban centradas en la infraestructura y la seguridad,
olvidando la cuestión de los salarios. Tras despedir a 121 trabajadores en el centro de
producción de Ashulia (Bangladesh), se produjo una importante huelga, que movilizó a
decenas de miles de empleados, reivindicando mejoras salariales. Durante una semana 59
fábricas se vieron forzadas a detener su actividad hasta que intervino la policía, produ-
ciéndose detenciones masivas entre los que se incluían varios dirigentes sindicales y un
reportero, siendo acusado de difamaciones y provocación. La cifra de despidos tras la
huelga varía entre las 1.600 personas, según fuentes policiales, y las 3.500, que recopila
la Federación de Trabajadores de la Industria del Vestido de Bangladesh. El salario actual
en Bangladesh es de 97 dólares al mes, unos 82 euros (E.D.G., 2016; EFE, 2017).
35
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
En países asiáticos, como Bangladesh, Sri Lanka o Camboya, converge una situación de
pobreza extrema, el silencio de las administraciones y el poder de las multinacionales,
existiendo un amplio desfase entre el salario mínimo legal y el salario digno. Un salario
digno se basa en la siguiente estructura de gasto (McMullen, 2014):
Por el contrario, el salario mínimo legal puede llegar a ser la quinta parte del necesario
para sobrevivir. A pesar de los incrementos salariales conseguidos en algunos países pro-
ductores de textil, éstos llegan a ser insuficientes para alcanzar el nivel del salario digno,
menos incluso si se tiene en cuenta que, tal como ocurre en Bangladesh, la inflación su-
pera al incremento salarial, produciéndose una pérdida real del poder adquisitivo (Todo
por hacer, 2017). La clave de estos salarios mínimos se esconde en la competitividad de
los precios y el poder de negociación de las empresas. Si los salarios se dignificasen, la
producción sería llevada de inmediato —y sin coste para la compañía— a destinos con
regulaciones más laxas, como Etiopía o Sudáfrica (Castro, 2017).
En el gráfico 7.1 se puede apreciar el desfase entre uno y otro tipo de salario en algunos
países de Asia (Modaes, 2016a). Los tres países donde hay una brecha mayor son Sri
Lanka, que tendría que aumentar su mensualidad un 80,46% hasta llegar al salario digno,
Bangladesh, alejado un 79,36% del mínimo necesario para subsistir, y Camboya, con una
distancia del 65,65%.
36
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Gráfico 7.1: Brecha existente entre salario mínimo legal y salario digno en Asia en el año 2015
Bangladesh
Camboya
China
Filipinas
India
Indonesia
Malasia
Pakistán
Sri Lanka
Tailandia
Vietnam
0€ 50 € 100 € 150 € 200 € 250 € 300 € 350 € 400 € 450 € 500 € 550 €
Vistos estos datos, cabe preguntarse si un salario digno supondría un gran impacto sobre
el beneficio empresarial. Según el informe Salarios dignos (McMullen, 2014), en una
camiseta convencional de 29 euros, el coste destinado al salario del trabajador es de 18
céntimos de euro mientras que el coste de la venta al por menor asciende a 17 euros,
incluidos todos los costes comerciales —coste del personal, alquileres, beneficio de la
tienda, IVA, etc.— . En el gráfico 7.2 se muestra el porcentaje que abarcan las distintas
variables de costes de la camiseta tomada como ejemplo.
Beneficio de la fábrica
proveedora 8%
Intermediarios
12%
Gastos de transporte
59%
12%
Gastos materiales
Beneficio de marca
37
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
En definitiva, puede entenderse que el bienestar del trabajador ha sido relegado en gran
medida a un segundo plano en favor del beneficio económico. Éstos son los que sufren
las consecuencias más directas del sistema de moda actual, son vulnerables y no tienen
poder ni capacidad para empoderarse a través de la representación sindical. Mientras
tanto, algunos gobiernos velan por el bien del país, favoreciendo a las grandes corpora-
ciones a costa del bienestar individual. Por su parte, son numerosas las empresas alegan
9
Massimo Dutti pertenece al grupo Inditex
10
Veraluna es una empresa de Comercio Justo
38
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
la necesidad de ahorrar costes para cumplir con las demandas del consumidor, incurriendo
para ello en conductas sobre las que es posible exigir una responsabilidad moral.
1. Cambio climático. Una de las causas que producen este cambio está en las altas
concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera, las cuales conducen a un
calentamiento global, desencadenando el deshielo de los casquetes polares y el
aumento del nivel del mar. La destrucción de las selvas tropicales constituye otro
factor clave ya que la cantidad generada de dióxido de carbono excede a la capa-
cidad de absorción de la vegetación a través del ciclo del carbono.
2. Cambio en la integridad de la biosfera. Esta transformación se origina por una
creciente demanda de alimento, agua y recursos naturales, provocando graves pér-
didas de diversidad biológica y provocando alteraciones en los ecosistemas11.
3. Disminución de la capa de ozono. El ozono filtra la radiación ultravioleta (UV)
procedente del sol. Sin esta protección, la probabilidad de padecer cáncer de piel
aumenta, además de dañar el sistema biológico marino y terrestre.
4. Acidificación de los océanos. Cuando el dióxido de carbono de la atmósfera entra
en contacto con el agua de los mares, se forma ácido carbónico, descendiendo el
pH de la superficie del agua. Las consecuencias resultantes son dramáticas para
la vida marina, como complicaciones en la formación de esqueletos y conchas de
11
Según la RAE (2017), el ecosistema está formado por la “comunidad de los seres vivos cuyos procesos
vitales se relacionan entre sí y se desarrollan en función de los factores físicos de un mismo ambiente”.
39
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
12
Un ciclo biogeoquímico es, en palabras de la RAE (2017) un “movimiento cíclico de los elementos que
forman los organismos biológicos (bio-) y el ambiente geológico (geo-) e interviene un cambio químico”,
es decir, es el proceso mediante el cual la naturaleza recicla sus elementos para volver a incorporarlos en el
ecosistema.
13
El término aerosol hace referencia a micropartículas de sólidos o líquidos en el aire u otro gas (Real
Academia Española, 2017).
40
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Figura 7.1: Los límites del planeta. Un espacio seguro de funcionamiento para la humanidad
Actualmente, ya se han traspasado cuatro de los nueve límites marcados: el cambio cli-
mático, la integridad de la biosfera —ambos cruciales a la hora de conducir al planeta
hacia un nuevo estadio—, el cambio del sistema de la tierra y los ciclos biogeoquímicos
del fósforo y nitrógeno. En el caso del sistema de moda actual, el impacto generado se
produce tanto por la fase de producción como por la del consumo del producto, desta-
cando el consumo de agua, la emisión de gases de efecto invernadero, la producción de
sustancias químicas peligrosas y la generación de importantes cantidades de residuos
(The Business of Fashion y McKinsey&Company, 2016) además del uso de la tierra
(Global Fashion Agenda y The Boston Consulting Group, 2017).
41
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Consumo de agua
El agua dulce es un bien cada vez más escaso. De hecho, Naciones Unidas (2017b) estima
que, para el año 2050, al menos el 25% de la población a nivel mundial esté sometida a
un continuo estrés hídrico. La industria de la moda consume unos 79 billones de litros14,
lo que equivale a treinta y dos millones de piscinas olímpicas, y se espera que este con-
sumo aumente un 50% para el año 2030 (Global Fashion Agenda y The Boston
Consulting Group, 2017). El cultivo de materias primas constituye una de sus principales
aplicaciones, especialmente del algodón, aunque existen otras etapas del ciclo de vida del
producto, como el lavado de la lana en bruto, el procesamiento de las fibras, el tintado del
tejido o el lavado de las prendas por parte del consumidor final, que ocasionan un gran
impacto en los niveles hídricos del planeta.
Según la ONG Comercio Justo (2015), se requieren unos 7.000 litros de agua para pro-
ducir un par de pantalones vaqueros. Dentro de este consumo se incluyen las fases de
cultivo del algodón, blanqueo, teñido y prelavado. En el caso de una camiseta, ésta deja
una huella hídrica15 de 2.500 litros. No obstante, este impacto varía en función de diversos
parámetros, como el sistema de irrigación utilizado, las características de la zona de cul-
tivo y de la semilla seleccionada, la elección de los colores para el tintado, el tipo de
acabado diseñado en la prenda o la frecuencia de lavado por parte del consumidor final.
El Mar Aral es un ejemplo dramático de la inadecuada planificación hídrica en función
de las peculiaridades geográficas. Este mar interior está ubicado entre Kazajistán y Uz-
bekistán, en Asia Central, y llegó a ocupar el cuarto puesto, a nivel mundial. El proyecto
llevado a cabo por la antigua Unión Soviética, en los años 40, consistía en desviar el
caudal de dos ríos adyacentes para aumentar la superficie del mar con el objetivo de im-
pulsar la producción del algodón, planta intensiva en regadío. Actualmente, su superficie
se ha reducido un 90%, dejando un desierto árido, aguas muy salinas contaminadas por
los fertilizantes y pesticidas, tormentas de polvo y elementos tóxicos y una climatología
muy extrema (Amazings y NCYT, 2014).
14
Datos para el año 2015.
15
La huella hídrica es una medida de la cantidad de agua utilizada para producir bienes y servicios que
aporta información desagregada relevante (Water footprint network, 2017).
42
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Desde el año 1990, las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera han aumentado
un 50% (Naciones Unidas, 2017a). Actualmente, ya se ha traspasado el límite de salubri-
dad en un 20% y se espera que para el año 2030 las emisiones aumenten más del 60%,
esto es, 2.800 millones de toneladas por año o, lo que es lo mismo, el equivalente a las
emanadas por 230 millones de coches en un año (Global Fashion Agenda y The Boston
Consulting Group, 2017).
3%
13%
Materia prima
Hilatura/Tisaje
Confección
20% Distribución
52% Venta
Uso
5% Reciclado
5%
2%
16
Una tonelada de 𝐶𝑂2 ocupa un volumen de 530 metros cúbicos o, lo que es lo mismo, la cantidad emitida
por un vehículo que realice cuatro trayectos entre Barcelona y Copenhague (Álvarez, 2010).
43
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
la etapa posterior a la compra, como consecuencia del uso intensivo de aparatos que con-
sumen gran cantidad de luz, el agua necesaria en cada lavado y los detergentes vertidos a
las aguas residuales (The Carbon Trust, 2011).
En cuanto al sector del cuero y calzado, la curtiduría ejerce un gran impacto en el me-
dioambiente a causa del uso intensivo de sustancias contaminantes —sulfuros, cloruros,
sulfatos, cromo, metales nitrogenados, residuos orgánicos de la piel y pelo, etc.— a lo
largo de todo el proceso, principalmente en la fase de conversión de la piel en bruto en
piel. El método de curtido al cromo, en el que el cromo III se convierte en cromo VI a
causa de las altas temperaturas que se alcanzan en el proceso, es cancerígeno, además de
contaminar las aguas residuales (Kant Prasad, Raaj, y Pieper, 2016) que acaba afectando
a los depósitos de agua de la región y a toda la cadena trófica. India, China y Bangladesh
son países curtidores cuya falta de estándares medioambientales sólidos está permitiendo
que las sustancias utilizadas en estos procesos dañen seriamente la tierra, el agua y la
salud de todas las especies que habitan la zona (Cocodrilo, 2017).
17
Las acepciones para la palabra escorrentía, según la RAE (2017), son:
1. “Agua de lluvia que discurre por la superficie de un terreno”
2. “Corriente de agua que se vierte al rebasar su depósito o cauce naturales o artificiales.”
18
La eutrofización, según la RAE (2017), es el “incremento de sustancias nutritivas en aguas dulces de
lagos y embalses, que provoca un exceso de fitoplancton”.
44
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Generación de residuos
A lo largo del proceso de fabricación de los artículos, se han podido llegar a utilizar hasta
2.000 sustancias químicas que requieren de una ingente cantidad de agua, la cual se vierte
toxificada al medioambiente. Estos vertidos contienen impurezas naturales, sales, tintes
y metales pesados que modifican el pH y la temperatura del agua, suponiendo una grave
amenaza para la vida acuática. Las sustancias químicas evaporadas pueden ser inhaladas
o absorbidas a través de la piel, provocando cáncer o alergias. El aire contaminado puede
condensarse en la superficie terrestre o acuática, adicionándose a los residuos sólidos que
pueden viajar largas distancias (Yacout y Hassouna, 2016).
45
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
donde se albergan hasta 700 curtidurías cuyos residuos se vierten directamente al río,
contaminándolo con restos sólidos y sustancias altamente tóxicas como son el ácido sul-
fúrico, el arsénico y el mercurio. Sus aguas no son aptas ni para el consumo ni para la
vida acuática, lo que supone un serio reto a resolver tanto para las administraciones loca-
les como para su población (Conaway, 2015).
Uso de la tierra
Los bosques devastados para utilizar esa tierra con otros fines como, por ejemplo, el cul-
tivo del algodón, ya han superado los límites de seguridad del planeta en un 17%. Para el
año 2030, se prevé que la industria de la moda ocupe más de 115 millones de hectáreas
en la producción de materias primas de origen vegetal y animal, en las que se incluye un
aumento del 35% de la superficie destinada al cultivo de algodón (Global Fashion Agenda
y The Boston Consulting Group, 2017).
En el caso del Mar Aral, localizado entre Kazajistán y Uzbekistán (Asia Central), la de-
sertización del mismo ha conducido a reducir su volumen un 90%. En los años 40, la
antigua Unión Soviética llevó a cabo un proyecto consistente en desviar el caudal de dos
ríos adyacentes para aumentar la superficie del mar e impulsar así la producción del
algodón, planta intensiva en regadío. La orografía, climatología y uso del terreno a lo
largo de todos estos años ha convertido la zona en un desierto altamente salino, con aguas
contaminadas por los pesticidas y fertilizantes y con frecuentes tormentas de polvo y ele-
mentos tóxicos (Amazings y NCYT, 2014).
19
Las fibras artificiales, al igual que las naturales, tienen un origen vegetal o animal. Sin embargo, es nece-
sario llevar a cabo una manipulación química para obtenerlas.
46
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Vistos los efectos que la industria de la moda está causando al medioambiente, es sensato
pensar que, tanto productores como consumidores, tienen una responsabilidad moral so-
bre estos impactos, empezando por la externalización de importantes costes —monetarios
y no monetarios— que se originan a lo largo del ciclo de vida del producto.
b) Externalidades positivas
Al igual que con las externalidades negativas, el sector moda también puede desencadenar
impactos, esta vez positivos, que beneficien a su entorno.
Históricamente, las tendencias de moda se filtraban desde las capas más altas de la socie-
dad hacia abajo. Con la llegada de la globalización y el modelo productivo fast fashion,
las tendencias se hacen más accesibles en cuanto a oferta, localización y precio. Son los
propios consumidores los que marcan el estilo de las pasarelas, democratizando la moda
hasta tal punto que las diferencias culturales y regionales se diluyen (Ruíz Molina, 2011).
Adicionalmente, ahora existe un mejor acceso a determinadas tallas de ropa y su coste es
más asequible e incluso existe una mayor oferta adaptada a las distintas morfologías del
cuerpo, lo que antes sólo era posible mediante la confección a medida (Trelles, 2013).
Esta adaptación al mercado incide positivamente en la autoestima del consumidor lo que
puede repercutir, en los casos más extremos, en un menor gasto sanitario derivado de
problemas mentales y desórdenes alimentarios. Psicológicamente, un consumidor más
feliz no sólo mejora su calidad de vida sino la de quienes se ven afectados por su estado
de ánimo. Además, ayuda a eliminar estereotipos sobre un único canon de belleza me-
diante el ejemplo de la autoaceptación.
La industria de la moda también supone un medio para contribuir a finalidades más in-
clusivas o reivindicativas. Por ejemplo, tanto en Bolivia como en Panamá, la moda es una
vía de escape para las reclusas, proporcionándoles una fuente de ingresos, la oportunidad
de tener un oficio digno al salir de la cárcel y mejorando su autoestima mientras llega ese
momento (EFE, 2016; Trend In, 2014). Y en Kenia, la moda ha ayudado a las mujeres de
la tribu Maasai a empoderarse a través de la del bordado artesanal de sandalias, permi-
tiéndoles obtener una fuente de ingresos estable y la oportunidad de mejorar las condi-
ciones de vida de la comunidad (SinEmbargo, 2013).
47
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
La moda puede llegar a ser algo más que una mera industria, para algunas personas su-
pone una segunda oportunidad en sus vidas y una alternativa de desarrollo en regiones
azotadas por la pobreza. Pero saber cómo funciona realmente la industria ha sensibilizado
al ciudadano de tal forma que ésta evolucione hacia un punto en el que el beneficio de la
empresa, las personas y el planeta, salgan ganando.
Desde la época de las colonias, en el siglo XV, las empresas han tenido capacidad para
condensar gran cantidad de poder. En la época actual, a partir de la crisis del 2008 esa
concentración se hizo más intensa hasta tal punto que, de las 100 principales entidades
económicas del mundo, 69 son empresas y 31 son países20 (Galindo, 2017). En la indus-
tria de la moda se da la misma tendencia, en la que un 20% de las empresas genera el
144% del valor de la industria (The Business of Fashion y McKinsey&Company, 2017),
lo que hace plantearse de qué forma se va a gestionar. En palabras de Íñigo de Miguel
Beriain y en relación al accidente del edificio Rana Plaza, en Bangladesh: “donde hay
poder, hay responsabilidad” (de Miguel Beriain, 2013, p. 131).
20
Se toma como unidad de medida la cifra de negocios, para las empresas, y los ingresos consignados en
los presupuestos, para los países.
48
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Por un lado, el consumidor actual está muy digitalizado y es sensible a las prácticas que
realizan las empresas a lo largo de toda su actividad. Son capaces de recibir y generar
abundante información a nivel global en muy poco tiempo, tanto positiva como negativa.
Es por ello que la entidad ha de considerar sus demandas y tratar de satisfacerlas mediante
una relación transparente que afiance su vínculo. Por otro lado, la moda de hoy en día
depende en gran medida de los medios de comunicación y éstos tienen la capacidad para
dañar o beneficiar la imagen de la misma casi de inmediato, como en el caso de la dise-
ñadora Pepa González, que llegó a agotar ciertas prendas en horas porque los hijos de los
Duques de Cambridge, de la Casa Real de Inglaterra, fueron fotografiados con algunos
de sus diseños. La firma, Pepa & Co, llegó a crecer hasta un 140% en tan sólo un año
(Villardón, 2017). Por el contrario, Zara acabó pidiendo disculpas y retirando un artículo
de su stock tras numerosas propuestas, que se hicieron virales, al ofrecer una camiseta
infantil de rayas horizontales con, lo que ellos denominaban, la estrella de un sheriff de
Oeste. Los clientes asimilaron el atuendo al llevado por los judíos en los campos de con-
centración, con Estrella de David en el pecho (Emergui, 2014). Cliente y medios de co-
municación forman un tándem muy poderoso a los que no hay que subestimar, y cuyas
demandas no han de ser desestimadas sin una reflexión previa.
49
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Sin embargo, las suplicas de otros stakeholders también han de ser tenidas en considera-
ción, como los empleados, activos valiosos sobre el que hay que trabajar la confianza y
la escucha activa para evitar reacciones hostiles y baja productividad. O los proveedores,
los cuales han protagonizado innumerables espacios de noticiarios por diversos acciden-
tes y tragedias que atacan directamente a la reputación de la empresa y, en segundo caso,
a la de la industria textil en general. Adicionalmente, al hilo de estas tragedias, numerosas
ONG han surgido para reivindicar cambios en el ámbito social y medioambiental, cuyos
informes y planes de acción pueden ser muy incómodos para la compañía, a menos que
ésta considere sus pretensiones y las contemple como un aliado con el que unir fuerzas.
Por su parte, los inversores pueden ver peligrar sus activos si la imagen de las empresas
se ve perjudicada por la difusión de escándalos que las involucran, con lo que se pondría
en jaque la capacidad de mantenimiento y crecimiento de la empresa.
La moda sostenible ha pasado de ser una quimera, en los años sesenta, a transformarse en
una de las tendencias globales del sector que más intensidad está adquiriendo. En España,
el negocio de la moda sostenible está logrando buena aceptación entre el consumidor
gracias a firmas como ECOALF, Skunkfunk o El Naturalista. A pesar de los numerosos
avances que se han alcanzado, a la industria aún le quedan importantes retos que afrontar.
Desde la Revolución Industrial, la capacidad del ser humano para utilizar y transformar
los recursos del entorno en su beneficio ha sido tan prodigiosa como nociva. Este desa-
rrollo ha ido erosionando paulatinamente el medioambiente produciendo serios desequi-
librios en el planeta. Con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), los estados
miembros de las Naciones Unidas pretenden poner fin a la huella medioambiental provo-
cada por el hombre y, además, erradicar la pobreza extrema y la injusticia social que ha
originado el crecimiento económico. El Programa de las Naciones Unidas para el Desa-
rrollo (PNUD) ha constituido un ambicioso proyecto de 17 ODS en cual se involucra a
gobiernos, sector privado, sociedad civil —ONG, sindicatos, organizaciones religiosas,
asociaciones, etc. — y ciudadanos en la consecución de un planeta más sostenible que
permita a futuras generaciones seguir cubriendo sus necesidades (PNUD, 2017). Estos
objetivos están recogidos en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible cuyas direc-
trices giran en torno a las 5 P: Planet, People, Prosperity, Peace, Parthership (planeta,
50
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Según el informe Pulse of the fashion industry (2017), si la industria de la moda sigue
con el actual sistema de producir, usar y tirar, sus beneficios se verán reducidos en 45.000
millones de euros al año, lo que equivale a un 3% menos en el 2030 como consecuencia
de, entre otros problemas, la lucha por la escasez de los recursos, que elevará los costes
productivos, o de los costes laborales, que se incrementarán gracias a la mediatización de
las irresponsabilidades cometidas por la industria. Mediante la integración de la sosteni-
bilidad en la cadena de valor, este informe predice que, hasta el año 2030, la industria de
la moda tiene la oportunidad de captar 160.000 millones de euros al año.
51
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Frente al modelo lineal del sistema fast fashion, basado en producir, usar y tirar, han ido
surgiendo otras alternativas en las que la producción y el consumo se orientan a minimizar
el impacto ambiental y social como, por ejemplo, alquiler de prendas, reparación y cus-
tomización de artículos o tiendas de ropa de segunda mano. Todos ellos tienen una idea
en común, cerrar de algún modo el círculo del consumo volviendo a generar nuevos ciclos
de vida con esas prendas. La economía circular supone una disrupción al actual modelo
económico que concierne tanto a productores como a consumidores.
21
El Índice Higg ha sido desarrollado por Sustainable Apparel Coalition, ONG formada por una coalición
de firmas, proveedores, asociaciones comerciales, ONG e instituciones académicas con el fin de ayudar a
la industria de la moda a orientar sus esfuerzos hacia la sostenibilidad.
52
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
El ciclo biológico está formado por los flujos de materias renovables, como el
algodón, la lana o la viscosa, los cuales son consumidos y reintroducidos al sis-
tema mediante el compostaje22 o la digestión anaerobia23.
En el ciclo técnico no hay consumo, hay uso. Se usan las materias no renovables,
como el poliéster, metales o plásticos, y se reincorporan al sistema mediante la
reutilización, la reparación, la remanufactura o el reciclaje.
Los principios que guían la economía circular, son los siguientes (Fundación Ellen
MacArthur, 2017b):
22
El compostaje es “la elaboración ce compost”, es decir, ”humus obtenido artificialmente por descompo-
sición bioquímica en caliente de residuos orgánicos” (Real Academia Española, 2017).
23
La digestión anaerobia es la descomposición de la materia orgánica, en ausencia de oxígeno, mediante la
actuación de determinadas bacterias obteniendo, por un lado, un producto gaseoso y, por el otro, un pro-
ducto formado por minerales y compuestos de difícil degradación (BiodiSol, 2017).
53
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
3. Fomentar la eficacia de los sistemas. La economía circular elimina del diseño fac-
tores que potencialmente puedan ejercer externalidades negativas como pueden
ser daños en los sistemas alimentarios, la educación o la sanidad a la par que ges-
tiona factores externos como la contaminación acuática, el vertido de sustancias
tóxicas o la utilización del suelo.
La moda circular constituye un reto para la industria ya que, al final de la vida útil de la
prenda, se estima que menos del 1% de los materiales utilizados en la fabricación de las
vuelven a formar parte de nuevos artículos (Fundación Ellen MacArthur, 2017b), el 12%
entra en una cascada de reciclaje hacia aplicaciones de menor valor y el 2% se pierde
durante el proceso de recogida y procesamiento, mientras que el 73% de la ropa acaba en
un vertedero o incinerada. La ilustración 8.2 muestra más detalle del estudio realizado
sobre el flujo de los materiales que componen las prendas.
Por otro lado, existen detractores del actual modo de entender la moda circular, como
Greenpeace, que cuestiona la reincorporación al sistema de materiales contaminantes,
como el plástico, en lugar de eliminarlos completamente de la cadena, con lo que no se
24
Existen cinco niveles de certificación, ordenados de menor a mayor puntuación: Basic, Bronze, Silver,
Gold y Platinum (básico, bronce, plata, oro y platino, respectivamente (Cradle to Cradle Products
Innovation Institute, 2017).
54
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
consigue una solución a largo plazo para este problema. Además, considera que la moda
circular puede eliminar la culpa de la conducta de compra del consumidor, con lo que no
se llegaría a detener el verdadero problema: el sobreconsumo (Cobbing y Vicaire, 2017).
Figura 8.2: Flujo mundial de los materiales utilizados en la ropa durante el año 2015
Fuente: A new textiles economy: Redesigning fashion’s future (Fundación Ellen MacArthur, 2017b)
Parte de la población ya está cambiando sus patrones de consumo, como los que defien-
den el slow fashion como alternativa al fast fashion, dando prioridad a la calidad y la
durabilidad de las prendas por encima de la cantidad y la tendencia. Sin embargo, existe
un segmento de la población que aún se muestra reticente a adoptar la moda sostenible.
Los motivos más frecuentes suelen ser (Ozdamar Ertekin y Atik, 2015):
55
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
La ONG Fashion Revolution define transparencia como “la divulgación pública de las
políticas, procedimientos, metas y compromisos de las marcas, el desempeño, el progreso
y los impactos reales sobre los trabajadores, las comunidades y el medio ambiente” (Ditty,
2017, p. 12). A medida que los stakeholders demandan mayor información sobre las con-
diciones bajo las que se elaboran los productos y el impacto generado, las empresas han
ido ampliando la información publicada con informes de sostenibilidad y compromisos
varios. La trazabilidad o seguimiento del producto desde el origen hasta su distribución a
56
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Uno de los retos de la industria radica en alcanzar un consenso sobre estándares comunes
que midan el desempeño y las condiciones bajo las que se ejerce la actividad —como el
ya mencionado Índice Higg— con el fin de tener un marco de referencia que permita
identificar fortalezas y debilidades para poder tomar acciones concretas de forma efi-
ciente. Respecto a la cadena de suministro, la presión ejercida de forma conjunta por todas
las PYMES, exigiendo las mismas medidas de sostenibilidad que las grandes corporacio-
nes, contribuiría al logro de una mayor transparencia en la misma. En este aspecto, la
trazabilidad también ha de implementarse mediante tecnologías que ayuden a un mejor
seguimiento del proceso (Global Fashion Agenda y The Boston Consulting Group, 2017).
Uno de los cambios más destacados que se han producido hasta ahora en la industria de
la moda es el mayor poder que ha ido adquiriendo las ONG para presionar a las empresas
y obtener resultados. A medida que los escándalos de la industria de la moda se han ido
conociendo, la labor de las ONG y alianzas internacionales ha sido más intensa. La ONG
Asia Floor Wage Alliance (AFWA) (2017) lucha por la implantación de un salario digno
en la industria de la confección a través de la alianza, a nivel internacional, de sindicatos
y activistas laborales. Entre la extensa lista de sus integrantes se encuentra la ONG Clean
57
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Clothes Campaign (Campaña Ropa Limpia), la cual ha conseguido logros como el com-
promiso de más de 200 empresas a adherirse al Acuerdo para la seguridad en edificios y
contra incendios en Bangladesh, aprovechando la repercusión mediática del derrumbe
del Rana Plaza. Este acuerdo es legalmente vinculante y con vigencia de cinco años
(Campaña Ropa Limpia, 2017), cuyo propósito consiste en garantizar la seguridad de los
empleados en sus puestos de trabajo mediante inspecciones periódicas a las fábricas y
planes de medidas correctivas (Accord on Fire and Building Safety in Bangladesh, 2017).
Éste es el primer acuerdo jurídicamente vinculante que obliga a las empresas a ayudar a
sus proveedores a solucionar los problemas estructurales, eléctricos y de incendios de los
edificios que albergan a sus empleados —unos 2,3 millones de personas—. Hasta octubre
de este año, 1.800 instalaciones han sido examinadas, se han detectado 118.500 riesgos y
500 fábricas han realizado más de un 90% de las correcciones detectadas (IndustriALL,
2017b). Dado que este acuerdo vence en mayo de 2018, ya se ha iniciado un segundo
acuerdo, también vinculante, que mejora la protección de los trabajadores y exige mayor
transparencia (IndustriALL, 2017a).
Comercio Justo dispone de un sello que puede ser utilizado por las empresas en sus pro-
ductos y beneficiarse así de la confianza que genera esta entidad en el consumidor, ya que
es garantía del cumplimiento de determinadas prácticas de sostenibilidad social.
58
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Iniciativas como las descritas circulan por la senda de la redistribución de los beneficios
de la industria de una forma más equitativa, la protección de los derechos de la fuerza
laboral y mayor compromiso y transparencia en la relación de las corporaciones con sus
proveedores. Aun así, la industria de la moda tiene que realizar mayores esfuerzos por
mejorar ciertas prácticas, como:
59
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Crear un marco legal de aplicación para toda la industria que obligue a todas las
empresas a actuar bajo los mismos parámetros, evitando así desequilibrios de po-
der y situaciones laborales como las existentes.
En el futuro, los recursos del planeta se verán seriamente comprometidos lo que pondrá
en riesgo a todas las industrias. La huella que la moda ha dejado sobre el medioambiente
ha sido profunda e irreversible aunque esta situación está cambiando favorablemente. Son
cuantiosos los avances conseguidos hasta la fecha, sobre todo cuando las acciones van
acompañadas de la tecnología. A continuación se mencionan algunos de estos progresos:
60
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
el efecto desgastado, mientras que los detalles menores y las roturas se realizan
de forma automática (itfashion, 2017).
Cerrando el ciclo. En la etapa final del producto, la distribuidora sueca H&M ha
desarrollado un método para poder reciclar los tejidos y reincorporarlos de nuevo
al ciclo productivo, convertidos en nuevos hilos y materiales, cuya trascendencia
reside en la capacidad de separar la mezcla de algodón y poliéster presente en la
mayoría de los tejidos (Modaes, 2017b).
Resumiendo, son numerosos los avances que se han conseguido en materia de optimiza-
ción de los recursos utilizados, disminución de la huella hídrica y de carbono o reciclaje
y reutilización de sustancias y materiales. A ello hay que sumar iniciativas como el Plan
de acción europeo sobre la ropa (European clothing action plan o ECAP) (2017), el cual
destina 3,6 millones de euros, entre septiembre de 2015 y marzo de 2019, a fomentar la
implementación de la moda circular en la industria europea. El proyecto también ofrece
acciones que apoyan los ODS 9 (industria, innovación e infraestructura), 12 (producción
y consumo responsables), 13 (acción por el clima), 15 (vida de ecosistemas terrestres) y
17 (alianzas para lograr los objetivos).
61
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
62
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
CONCLUSIONES
A parte de las consecuencias económicas que puede suponer adoptar o rechazar la soste-
nibilidad en la industria de la moda, existen ciertas cuestiones morales que actúan como
una brújula para la definición de las prácticas de RSC. La primera gira en torno a las
externalidades que genera la actividad empresarial sobre el entorno en el que opera. En
la industria de la moda, por desgracia, pesan más las externalidades negativas que las
positivas, razón de más para implicarse en la sostenibilidad. Por el lado optimista, la moda
puede contribuir al desarrollo e independencia económica de ciertas áreas así como a
derribar barreras culturales y estereotipos. Sin embargo, la huella que hasta ahora ha pro-
vocado la moda en el medioambiente y la sociedad es severa. Considerada la segunda
63
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
industria más contaminante del mundo, las repercusiones sobre el medioambiente han
sido descomunales, abusando de los recursos naturales y poniendo en riesgo la viabilidad
de los mismos para futuras generaciones. En el ámbito social, esta industria ha contribuido
a generar grandes desigualdades, con empleados en condiciones de esclavitud mientras
algunas corporaciones iban aumentando en poder y rentabilidad. El consumidor tampoco
está exento de las externalidades ya que ha sido arrastrado a una rueda de consumismo e
insatisfacción continua. En este sector, por tanto, existen actores cuya acumulación de
poder podría contribuir a cambiar la situación actual o a perpetuarla. La interdependencia
de grupos de interés ayuda a limitar este poder, supeditando las decisiones directivas al
criterio de otros participantes capaces de dañar la viabilidad de la empresa.
Por todo lo anterior, puede concluirse que la salida más óptima para el futuro de la indus-
tria se encuentra en adoptar la RSC como la estrategia que guíe la actividad empresarial
hacia la sostenibilidad. Para ello, ha de hacerle frente a importantes retos, como adaptar
la incipiente economía circular al sector, con especial énfasis en reducir la huella me-
dioambiental, o garantizando la justicia social a lo largo del desempeño de su actividad.
64
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
REFERENCIAS
Accord on Fire and Building Safety in Bangladesh. (2017). [Sitio web oficial].
Recuperado 5 de diciembre de 2017, a partir de http://bangladeshaccord.org/
Allisonsmf. (2012, marzo 3). The Rise of the Anti-fur Movement [Mensaje en un blog].
Recuperado 29 de agosto de 2017, a partir de
https://allisonsmf.wordpress.com/2012/03/03/the-rise-of-the-anti-fur-movement/
Álvarez, C. (2010, abril 20). Una tonelada de CO2 [Mensaje en un blog]. Recuperado
28 de noviembre de 2017, a partir de http://blogs.elpais.com/eco-lab/2010/04/una-
tonelada-de-co2.html
Amazings, y NCYT. (2014, marzo 11). La progresiva desaparición del Mar de Aral.
Noticias de la ciencia y la tecnología. Recuperado a partir de
http://noticiasdelaciencia.com/not/9796/la_progresiva_desaparicion_del_mar_de_a
ral/
Anastasia. (2016, septiembre 6). Moda Zero Waste o Cero Residuos [Mensaje en un
blog]. Recuperado 5 de diciembre de 2017, a partir de
http://www.nastasianash.com/moda-zero-waste-o-cero-residuos/
Asia Floor Wage. (2017). [Sitio web oficial]. Recuperado 5 de diciembre de 2017, a
partir de https://asia.floorwage.org/
B. Schuch, A. (2017, junio 19). Moda Circular & Big Players [Mensaje en un blog].
Recuperado 5 de diciembre de 2017, a partir de
https://www.slowfashionnext.com/blog/2017/06/19/moda-circular-big-players/
BBC Mundo. (2015, marzo 7). Cómo la Segunda Guerra Mundial cambió la moda. BBC
Mundo. Recuperado a partir de
http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/03/150305_finde_moda_segunda_guerr
a_mundial_np
65
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
BBC Mundo. (2017, marzo 12). ¿Sabes cuál es la industria más contaminante después
de la del petróleo? BBC Mundo. Recuperado a partir de
http://www.bbc.com/mundo/noticias-39194215
Better Cotton Initiative. (2017). [Sitio web oficial]. Recuperado 5 de diciembre de 2017,
a partir de https://bettercotton.org/
Black, S. (2012). The Sustainable Fashion Handbook. Londres: Thames & Hudson.
Cadenas, L. (2017, junio 23). Orgánicas y reciclables, así son las nuevas camisetas de
C&A. Itfashion. Recuperado a partir de http://www.itfashion.com/moda/organicas-
y-reciclables-asi-son-las-nuevas-camisetas-de-ca/
Campaña Ropa Limpia. (2017, abril 21). Cuatro años tras el derrumbe del Rana Plaza
poco ha cambiado para las trabajadoras de Bangladesh. Campaña Ropa Limpia.
Recuperado a partir de https://ropalimpia.org/noticias/cuatro-anos-despues-del-
derrumbe-del-rana-plaza-poco-ha-cambiado-para-las-trabajadoras-de-bangladesh/
Carbon Disclosure Project, y World Wide Fund. (2013). The 3% solution. Driving
profits through carbon reduction. Nueva York: CDP y WWF. Recuperado a partir
de
https://c402277.ssl.cf1.rackcdn.com/publications/575/files/original/The_3_Percent
_Solution_-_June_10.pdf?1371151781
66
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Carro de combate, y Coordinadora Estatal de Comercio Justo. (2015). Tira del hilo...
elige comercio justo (Cuaderno de Comercio Justo, n. 5, mayo 2015). Madrid:
CECJ. Recuperado a partir de http://comerciojusto.org/wp-
content/uploads/2015/04/CUADERNO-TEXTIL-CASTELLANO.pdf
Castro, N. (2017, octubre 26). Inditex: la empresa que entendió que el negocio está en
vender ropa y no en producirla. El Salto. Recuperado a partir de
https://www.elsaltodiario.com/inditex/inditex-zara-empresa-negocio-amancio-
ortega-vender-ropa-producirla
Clarin.com. (2014, agosto 18). Las 10 campañas de moda más polémicas de la historia.
Clarín. Recuperado a partir de https://www.clarin.com/sociedad/campanas-moda-
polemicas-historia_0_HJ4exPq5PXx.html
Cocodrilo. (2017). Cómo el cuero esta matando lentamente a las personas y los lugares
donde se fabrica [Mensaje en un blog]. Recuperado 27 de noviembre de 2017, a
partir de https://www.cocodrilobazar.cl/como-el-cuero-esta-matando-lentamente-a-
las-personas-y-los-lugares-donde-se-fabrica
Conaway, C. (2015). The Ganges River Is Dying Under the Weight of Modern India.
Newsweek, 165(12).
67
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Correa, A. (2016, mayo 31). ¿Cuántos árboles hay en tu armario? "it. Recuperado a
partir de http://www.itfashion.com/moda/eco-eco/cuantos-arboles-hay-en-tu-
armario/
Cradle to Cradle Products Innovation Institute. (2017). [Sitio web oficial]. Recuperado
5 de diciembre de 2017, a partir de http://www.c2ccertified.org/
Crane, A., y Matten, D. (2016). Business ethics: managing corporate citizenship and
sustainability in the age of globalization (4.a ed.). Oxford: Oxford University Press.
68
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
E. Girón, M. (2017, agosto 25). La moda y el lujo serán sostenibles o no. Forbes
México. Recuperado a partir de https://www.forbes.com.mx/la-moda-y-el-lujo-
seran-sostenibles-o-no-seran/
EFE. (2016, abril 2). De la cárcel a la pasarela de moda: una apuesta por la reinserción
en Bolivia. eldiario.es. Recuperado a partir de
http://www.eldiario.es/politica/carcel-pasarela-apuesta-reinsercion-
Bolivia_0_501150272.html
EFE. (2017, febrero 24). Liberados los sindicalistas de Bangladesh tras la presión de las
grandes firmas textiles. Público. Recuperado a partir de
http://www.publico.es/economia/liberados-sindicalistas-textil-bangladesh-
inditex.html
El País. (2009, octubre 14). La modelo retocada por Ralph Lauren declara que la
despidieron por «estar gorda». El País. Recuperado a partir de
https://elpais.com/elpais/2009/10/14/actualidad/1255502931_850215.html
Emergui, S. (2014, agosto 27). Zara retira una camiseta parecida al uniforme judío en el
Holocausto. El Mundo. Recuperado a partir de
http://www.elmundo.es/internacional/2014/08/27/53fdc343ca4741305a8b4584.htm
l
69
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Euratex. (2016b). Time for energy efficiency in textile SMEs. Bruselas: Euratex.
Recuperado a partir de
http://euratex.eu/fileadmin/user_upload/documents/Library/R_D/SET_Final_Repor
t_Web.pdf
European Clothing Action Plan. (2017). [Sitio web oficial]. Recuperado 6 de diciembre
de 2017, a partir de http://www.ecap.eu.com/
Fondo para los Objetivos de Desarrollo Sostenible. (2016, abril 26). ODS, una
oportunidad para abordar los desafíos sistémicos de toda la industria a través de la
colaboración. Recuperado 5 de diciembre de 2017, a partir de
http://www.sdgfund.org/es/ods-una-oportunidad-para-abordar-los-desafíos-
sistémicos-de-toda-la-industria-través-de-la
Forética. (2015). Informe Forética 2015 sobre el estado de la RSE en España. Madrod:
Forética. Recuperado a partir de
http://www.foretica.org/informe_foretica_2015.pdf
Fuente de noticias ONU. (2017, junio 21). La población mundial aumentará en 1.000
millones para 2030. Naciones Unidas. Recuperado a partir de
https://www.un.org/development/desa/es/news/population/world-population-
prospects-2017.html
70
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Fundación Ellen MacArthur. (2015). Hacia una economía circular: motivos económicos
para una transición acelerada. Ellen MacArthur Foundation. Recuperado a partir
de
https://www.ellenmacarthurfoundation.org/assets/downloads/publications/Executiv
e_summary_SP.pdf
G. Barbero, I. (2015, abril 23). Rana Plaza:La vida tras el derrumbe. El País.
Recuperado a partir de
https://elpais.com/elpais/2015/04/21/planeta_futuro/1429615729_279538.html
Galindo, C. (2017, noviembre 5). Cuando las empresas son más poderosas que los
países. El País. Recuperado a partir de
https://elpais.com/economia/2017/11/03/actualidad/1509714366_037336.html
García del Junco, J., Palacios Florencio, B., y Espasandín Bustelo, F. (2013). Manual
práctico de responsabilidad social corporativa : gestión, diagnóstico e impacto en
la empresa. Madrid: Pirámide.
Global Fashion Agenda, y The Boston Consulting Group. (2017). PULSE OF THE
FASHION INDUSTRY. Copenague: Global Fashion Agenda. Recuperado a partir
de https://www.copenhagenfashionsummit.com/wp-
content/uploads/2017/05/Pulse-of-the-Fashion-Industry_2017.pdf
Global Organic Textile Standar. (2017). [Sitio web oficial]. Recuperado 5 de diciembre
de 2017, a partir de http://www.global-standard.org/es/
Grupo Banco Mundial. (2015, marzo 23). Proyecto Nacional de la Cuenca del Río
Ganges. Grupo Banco Mundial. Recuperado a partir de
http://www.bancomundial.org/es/news/feature/2015/03/23/india-the-national-
ganga-river-basin-project
71
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Guallart, E. (2007, febrero 20). Polémico anuncio de Dolce & Gabbana. Trendencias.
Recuperado a partir de https://www.trendencias.com/publicidad/polemico-anuncio-
de-dolce-gabbana
Henninger E., C., Alevizou J., P., y Oates J., C. (2016). What is sustainable fashion?
Journal of Fashion Marketing and Management: An International Journal, 20(4),
400-416. https://doi.org/10.1108/JFMM-07-2015-0052
IndustriALL. (2017a, septiembre 8). Sindicatos mundiales exigen que un número mayor
de marcas firme el Acuerdo de Bangladesh de 2018. IndustriALL. Recuperado a
partir de http://www.industriall-union.org/es/sindicatos-mundiales-exigen-que-un-
numero-mayor-de-marcas-firme-el-acuerdo-de-bangladesh-de-2018
Infobae América (I). (2016, agosto 1). Empresa de ropa enfurece a las redes por
supuesta campaña sexista. El Comercio. Recuperado a partir de
http://www.elcomercio.com/tendencias/polemica-sexismo-publicidad-ropa-
ninos.html
itfashion. (2017, noviembre 17). La primera planta de lavado de jeans que no contamina
es española. Itfashion. Recuperado a partir de http://www.itfashion.com/moda/la-
primera-planta-de-lavado-de-jeans-que-no-contamina-es-espanola/
Ivars, C. (2017, enero 14). Los casos de trastornos de la conducta alimentaria siguen
creciendo en Aragón. Heraldo. Recuperado a partir de
http://www.heraldo.es/noticias/aragon/2017/01/14/los-casos-trastornos-conducta-
alimentaria-siguen-creciendo-aragon-1153243-300.html
Jung, S., y Jin, B. (2014). A theoretical investigation of slow fashion: sustainable future
of the apparel industry. International journal of consumer studies, 38(5), 510-519.
72
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Kant Prasad, S., Raaj, V., y Pieper, A. (2016). Se dejan la piel. Vulneraciones de los
derechos laborales en la industria del cuero y del calzado india. Federación
SETEM. Recuperado a partir de https://ropalimpia.org/wp-
content/uploads/2017/08/Informe_Se-dejan-la-piel.pdf
Labowitz, S. (2017, abril 24). «We have one eye open and one eye closed»: The dirty
labor secrets of fast fashion. Quartz. Recuperado a partir de
https://qz.com/967197/fourth-anniversary-of-rana-plaza-disaster-fast-fashions-
dirty-secrets/
Lara, L. (2015, diciembre 4). El sector de la Moda en España: apuestas para 2020
[Mensaje en un blog]. Recuperado 9 de agosto de 2017, a partir de
http://www.kpmgblogs.es/el-sector-de-la-moda-en-espana-apuestas-para-
2020/#sthash.bDZ5z-TA1.dpuf
López Escorial, M. (2017, abril 26). España y la revolución del textil (sostenible). El
País. Recuperado a partir de
https://elpais.com/elpais/2017/04/25/planeta_futuro/1493138799_237897.html
M. Gayo, C. (2015, abril 10). Zara retira de sus tiendas los bodies sexistas para bebés.
El Comercio. Recuperado a partir de
http://www.elcomercio.es/sociedad/201504/10/ninos-inteligentes-ninas-guapas-
20150409134714.html
Matten, D., y Crane, A. (2007). Business Ethics: Managing Corporate Citizenship and
Sustainability in the Age of Globalization (4.a ed.). Oxford: Oxford University
Press.
73
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
modaes. (2017, octubre 31). Camboya prevé aflojar el ritmo de sus exportaciones
textiles en 2017 con un alza del 5%. Modaes.es. Recuperado a partir de
https://www.modaes.es/entorno/camboya-preve-aflojar-el-ritmo-de-sus-
exportaciones-textiles-en-2017-con-un-alza-del-5.html
Modaes. (2016a, junio 2). Bangladesh, Sri Lanka y Camboya encabezan la brecha entre
salario mínimo y digno. Modaes.es. Recuperado a partir de
https://www.modaes.es/entorno/bangladesh-sri-lanka-y-camboya-encabezan-la-
brecha-entre-salario-minimo-y-digno.html
Modaes. (2017a, junio 27). El textil de Haití, en pie de guerra por el salario mínimo.
Modaes.es. Recuperado a partir de https://www.modaes.es/empresa/el-textil-de-
haiti-en-pie-de-guerra-por-el-salario-minimo.html
Modaes. (2017b, septiembre 13). H&M da con la fórmula del ‘close the loop’ para
reciclar tejidos sin perder calidad. Modaes.es. Recuperado a partir de
https://www.modaes.es/back-stage/hm-da-con-la-formula-del-close-the-loop-para-
reciclar-tejidos-sin-perder-calidad.html
74
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Molina, L. (2017, junio 27). Los ‘hubs’ de la moda suspenden en derechos laborales.
Modaes.es. Recuperado a partir de https://www.modaes.es/back-stage/los-hubs-de-
la-moda-suspenden-en-derechos-laborales.html
MTS LifeStyle. (2014, mayo 22). Empieza a cobrar fuerza la moda de proximidad
[Mensaje en un blog]. Recuperado 14 de noviembre de 2017, a partir de
http://blog.movestoslow.com/empieza-a-cobrar-fuerza-la-moda-de-proximidad/
Naciones Unidas. (2017a). Objetivo 13: Adoptar medidas urgentes para combatir el
cambio climático y sus efectos. Recuperado 27 de noviembre de 2017, a partir de
http://www.un.org/sustainabledevelopment/es/climate-change-2/
75
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Parlamento Europeo. (2017, abril 27). Importaciones textiles: PE pide reglas europeas
para atajar explotación laboral. Recuperado 17 de noviembre de 2017, a partir de
http://www.europarl.europa.eu/news/es/press-
room/20170424IPR72039/importaciones-textiles-pe-pide-reglas-europeas-para-
atajar-explotacion-laboral
Pinker Moda. (2017, febrero 27). Textil y confección en España: 2016 versus 2015.
Pinker Moda. Recuperado a partir de http://pinkermoda.com/textil-confeccion-
espana-2016/
Planeta Moda. (2016, abril 9). Certificados de moda sostenible [Mensaje en un blog].
Recuperado 6 de diciembre de 2017, a partir de http://planetamoda.org/tercera/
76
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Riaño, P. (2016, octubre 24). Cisma en El Naturalista: Invulsa rompe con Pablo de la
Peña, que sale de la empresa. Modaes.es. Recuperado a partir de
https://www.modaes.es/empresa/cisma-en-el-naturalista-invulsa-rompe-con-pablo-
de-la-pena-que-sale-de-la-empresa.html
Ribeira, R. (2017, octubre 26). Así se tejió el imperio de Inditex: miles de mujeres
gallegas sin derechos. El Salto.
Riera, S. (2016b). Luz suave y madera sostenible, las claves de la tienda «eco». Modaes,
(marzo), 36-37.
Riera, S. (2016c). Una empresa que apuesta por la sostenibilidad a largo plazo sí o sí
tiene que ganar. Modaes, (Marzo), 20-21.
Riera, S. (2017, noviembre 29). La industria de la moda en Europa crea empleo por
primera vez este siglo. Modaes. Recuperado a partir de
https://www.modaes.es/entorno/la-industria-de-la-moda-en-europa-crea-empleo-
por-primera-vez-este-siglo.html
77
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Sotillo, B. (2017, mayo 1). Los consumidores exigen transparencia a la industria textil.
Noticias de Gipuzkoa. Recuperado a partir de
http://www.noticiasdegipuzkoa.com/2017/05/01/sociedad/los-consumidores-
exigen-transparencia-a-la-industria-textil
Sun, Y. (2017, noviembre 15). Alibaba inyecta inteligencia artificial en tiendas y logra
batir su récord del Día de los Solteros. MIT Technology Review. Recuperado a
partir de https://www.technologyreview.es/s/9747/alibaba-inyecta-inteligencia-
artificial-en-tiendas-y-logra-batir-su-record-del-dia-de-los
The Carbon Trust. (2011). Clothing. Londres: The Carbon Trust. Recuperado a partir de
https://www.carbontrust.com/media/38358/ctc793-international-carbon-flows-
clothing.pdf
78
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
The History Style. (2011, noviembre 7). La Moda durante la Segunda Guerra Mundial
[Mensaje en un blog]. Recuperado 4 de agosto de 2017, a partir de
https://thehistorystyle.wordpress.com/2011/11/07/la-moda-durante-la-segunda-
guerra-mundial/
Todo por hacer. (2017, febrero 4). Tras las apariencias. Nuevas huelgas en el sector de
la confección en Bangladesh. Todo por hacer. Recuperado a partir de
https://www.todoporhacer.org/tras-las-apariencias-nuevas-huelgas-sector-la-
confeccion-bangladesh/
Trelles, D. (2013, marzo 11). La moda rápida: lo bueno y lo malo. Gestión. Recuperado
a partir de http://blogs.gestion.pe/modainc/2013/03/la-moda-rapida-lo-bueno-y-
malo.html
Trend In. (2014, octubre 8). Reinserción a través de moda. Diario Libre. Recuperado a
partir de https://www.diariolibre.com/estilos/trend-in/reinsercin-a-travs-de-moda-
FCDL827561
Trillas, A. (2016, mayo 4). ¿Qué fue del textil de Bangladesh tras la tragedia del Rana
Plaza? eldiario.es. Recuperado a partir de
http://www.eldiario.es/alternativaseconomicas/textil-Bangladesh-tragedia-Rana-
Plaza_6_512408771.html
Ventura, M. (2017, mayo 29). Del diseño a la venta en catorce días: llega la era del
‘ultrafast fashion’. Modaes. Recuperado a partir de https://www.modaes.es/back-
stage/del-diseno-a-la-venta-en-catorce-dias-llega-la-era-del-ultrafast-fashion.html
Villardón, M. (2017, mayo 6). Pepa González (Pepa & Co): «Siempre es un honor vestir
a los pequeños de la Casa Real de Inglaterra». ok diario. Recuperado a partir de
https://okdiario.com/economia/emprendedores/2017/05/06/pepa-gonzalez-pepa-co-
siempre-honor-vestir-pequenos-casa-real-inglaterra-967981
79
Trabajo Fin de Grado Mª del Arrabal Fernández Matilla
Wicker, A. (2017, septiembre 6). Your clothes might be destroying the rainforest. Fast
Company. Recuperado a partir de https://www.fastcompany.com/40448774/your-
clothes-might-be-destroying-the-rainforest
World Fair Trade Organization. (2017). [Sitio web oficial]. Recuperado 5 de diciembre
de 2017, a partir de https://wfto.com/
80