El Cultivo Del Geranio
El Cultivo Del Geranio
El Cultivo Del Geranio
El geranio pertenece a un género que comprende numerosas plantas vivaces y perennes, originarias
de la región sudafricana del Cabo, casi siempre de porte arbustivo.
1. Taxonomía y origen
2. Morfología
2.1. Particularidades
3. Requerimientos edafoclimáticos
4. Propagación
5. Técnicas de cultivo
6. Plagas y enfermedades
6.1. Plagas
6.2. Enfermedades
7. Fisiopatías
1. TAXONOMÍA Y ORIGEN
Familia Geraniaceae
Género Pelargonium
Pelargonium grandiflorum
Pelargonium graveolens
Especie Pelargonium inquinans
Pelargonium zonale
Pelargonium peltatum
Nombre común Geranio, Pelargonio, Malvón
- Tallo: Presentan un tallo grueso, ramificado desde la base y cubierto por pelos glandulares.
- Hoja: Las hojas pueden ser opuestas o alternas, simples o compuestas, ligeramente lobuladas o con
bordes serrados, pecioladas, con pelos glandulares, y generalmente con estípulas en la base. La
superficie de la hoja es curvada, de manera que el agua se desliza hacia el peciolo de la misma. El
color de ésta depende de la variedad, pudiendo presentar bandas de distintos colores (negro, castaño,
rojizo, amarillo, etc.).
Hoja de geranio. Fotografía: Eamon Curry
Las flores pueden ser simples con cinco pétalos, semidobles de 6 a 15 pétalos y dobles de más de 16
pétalos.
2.1. Particularidades
- Pelargonium x peltatum: Los híbridos de P. peltatum son de porte bajo y colgante, con hojas y tallos
desnudos y flores con una amplia gama de colores. Algunos de los cultivares más conocidos son: `Roi
des Balcons´ (rosa), `Scarlet Crousse´ (rojo), `Super Rose´, `Le Richelieu´ (rojo), `Rouletta´ (rojo y
blanco), `Tavira´ (rojo vivo)
Pelargonium peltatum. Fotografía: Alejandro Bayer Tamayo
Existe un cruce entre los dos tipos anteriores conocido como P. x peltato zonale, de características
intermedias. `Belle de Granges´ (rojo ½ doble).
- Geranios de pensamiento, P. x grandiflorum o P. x domesticum: Generalmente son de porte rastrero y
con forma de mata. Presentan hojas con borde dentado y grandes flores (de 2 a 3cm) de dos colores
(rojo y blanco). Son también un complejo de híbridos, con algunas especies más reconocidas como
parentales, tales como P. grandiflorum, P. cucullatum y P. angulosum. Algunos de los cultivares más
conocidas son: `Grand Slam´ (blanco y rojo) y `Pastel´ (rosa vivo).
Pelargonium grandiflorum. Fotografía: Dorota
2. Pelargonios de hojas olorosas, `Lady Plymouth´ (malva). Aunque no es frecuente encontrarlas en los
comercios, estas especies de floración poco vistosa pero de follaje oloroso son muy
interesantes: Pelargonium capitatum, cuyas hojas presentan un aroma similar al de las rosas; P.
crispum, de hojas rizadas con olor a limón; P. x fragrans, fragante, de flores blancas con nervios
rojos; P. graveolens, geranio o pelargonio rosa, es el más frecuente como planta de interior, con follaje
de color verde y flores de color rosado o púrpura; P. odoratissimum, geranio con aroma a limón y flores
blancas o rosadas; P. radens, de hojas con aroma a rosa, flores de color púrpura pálido con nervios
más oscuros. P. tomentosum, de hojas suaves y aterciopeladas con olor a menta piperita y diminutas y
bonitas flores blancas. Algunas de estas especies, como P. graveolens, se cultivan en países como la
India (Kalra et al., 1999) para obtener de ellas aceites esenciales.
Pelargonium graveolens. Fotografía: Dornenwolf
3. REQUERIMIENTOS EDAFOCLIMÁTICOS
- Temperatura: El rango óptimo para el cultivo de pelargonio oscila entre 16 y 24ºC, siendo perjudiciales
los cambios bruscos entre el día y la noche, disminuyendo así, la calidad de la planta. Temperaturas
por debajo de los 12ºC y por encima de los 28ºC disminuye el crecimiento vegetativo.
- Humedad: La humedad relativa óptima se encuentra en torno al 60%. Valores por encima del 80%
aumentan el riesgo de enfermedades.
- Luz: La intensidad de la luz influye de forma directa en la floración. El rango óptimo durante el cultivo
oscila entre 35000 y 45000 lux, pudiendo llegar a tolerar hasta los 60000 lux. No obstante, a partir de
dicha intensidad, es conveniente sombrear.
- Sustrato: Esta planta requiere un sustrato suelto y con buena capacidad de drenaje. Un buen sustrato
puede estar compuesto por turba, arena y arcilla, con un pH de 6,5-7, al cual se le puede añadir alguna
enmienda calcárea. La conductividad eléctrica de éste debe oscilar entre 1,5 a 3mS/cm.
- Riego: El riego se debe aportar en función del ritmo de desarrollo, siendo más frecuente en verano. El
riego por goteo permite conjugar riegos y fertilización (a título informativo se puede aportar 0,2 litros de
agua por maceta y día en verano y 0,1 litros en invierno).
4. PROPAGACIÓN
La propagación del geranio se realiza generalmente por esquejes o a partir de semillas obtenidas de
plantas F1.
- Propagación por esquejes: Esta técnica consiste en obtener esquejes a partir de una planta madre.
Para la obtención de plantas madre se practica el “indexing”. Es un sistema de cultivo que consiste en
la multiplicación de estas plantas a través del cultivo de meristemos para garantizar la sanidad vegetal,
especialmente en cuanto a bacterias como Xanthomonas campestris pv. Pelargonii y hongos
como Verticillium, los cuales una vez introducidos en el cultivo son difíciles de erradicar. Se llevan a
cabo procedimientos de análisis de bacterias y virus mediante técnicas sofisticadas de laboratorio como
el test ELISA, fluorescencia, etc. Tras dos o tres generaciones de aislamiento de material vegetal sano
se crea el núcleo base, que se mantiene aislado y controlado con frecuencia. De este núcleo se
obtienen los esquejes para los diferentes campos de producción de plantas madre, los cuales son
sometidos a rigurosos controles sanitarios y estrictas normas de higiene (aislamiento del suelo,
desinfección de herramientas, entrada restringida de personal, etc.).
Posteriormente, se colocan sobre un sustrato (compuesto de turba y perlita en una proporción 1:1) y en
un túnel de PE para recubrir los esquejes. La temperatura de fondo debe oscilar en torno a los 18-20ºC,
mientras que la ambiental en torno a los 15-16ºC con una humedad relativa del 70-80%. Para aumentar
el porcentaje de enraizamiento, se pueden emplear hormonas de enraizamiento. En estas condiciones,
enraizará entre los 20-25 días.
- Propagación a partir de semillas F1: Para este tipo de propagación se utilizan semillas procedentes de
híbridos F1, ya que ofrecen una serie de ventajas tales como: vigor, abundante y homogénea floración y
uniformidad en el porte.
Las semillas utilizadas proceden de casas comerciales, las cuales deben llegar limpias, cubiertas por
un producto fungicida y escarificadas para asegurar una rápida germinación.
El desarrollo de las plantas se produce en semilleros, normalmente en bandejas cubiertas por una
ligera capa de turba (3/4) y arena compactada. La temperatura óptima de germinación oscila entre los
22 y 25ºC, siendo temperaturas inferiores a 19ºC o superiores a 30ºC, desfavorables para la
germinación. La humedad relativa debe encontrarse en torno al 90%.
Al cabo de diez días de la siembra, cuando se han desarrollado los cotiledones y el sistema radicular es
pequeño, se debe realizar el trasplante.
* Rojos: `Mustang´, `Ringo´, `Sprinter´, `Red Elite´, `Orbite´, `IFI´, `Pack star´, `Miss´, `Pulsar´.
* Rosas: `Chérie´, `Salmon flash´, `Ringo´, `Smash Hit´, `Orbite´, `Miss´, `Pulsar´.
* Blancos: `Snowdown´, `Capri´.
5. TÉCNICAS DE CULTIVO
Las técnicas de cultivo varían en función de la variedad. No obstante, de forma general siguen el
siguiente patrón de cultivo:
- Pinzado: Esta labor se debe realizar a las 2-3 semanas de la plantación, cuando la planta aún no está
muy desarrollada. Con el pinzado se busca la ramificación de la misma.
Se puede efectuar de forma manual o química. Para realizarlo químicamente se debe llevar a cabo un
primer tratamiento a las tres semanas aproximadamente después del trasplante, seguido de un
segundo a los 15 días de éste y, eventualmente un tercero para adelantar la floración y obtener plantas
más robustas y ramificadas. Normalmente, el fitorregulador empleado es Cycocel a una concentración
de 0,1-0,2% o Bonzi a 0,5% en pulverización.
6. PLAGAS Y ENFERMEDADES
6.1. Plagas
El control químico resulta complicado debido a que es una plaga de carácter endófito (vive dentro de la
planta), por lo que resulta difícil que el plaguicida entre en contacto con la oruga. Sin embargo, en el
caso de realizar tratamientos químicos, éstos se deben realizar con productos sistémicos.
Las medidas preventivas, como la utilización de esquejes libres de esta plaga y la eliminación de las
partes de la planta afectadas, son de especial importancia.
Para evitar/prevenir el ataque severo de mosca blanca se deben colocar trampas cromotrópicas de
color amarillo en la planta y eliminar las malas hierbas existentes en el invernadero.
Cuando aparecen los primeros individuos, se recomienda recurrir a la lucha biológica con la suelta de
depredadores como Encarsia formosa o Amblyseius swirskii.
Cuando la incidencia sea mayor, será necesario recurrir al tratamiento químico con productos
fitosanitarios compatibles con la fauna auxiliar.
Para evitar la propagación de esta plaga se deben llevar a cabo una serie de medidas preventivas:
Otro método de control es la lucha biológica mediante la utilización del ácaro depredador Phytoseiulus
persimilis.
6.2. Enfermedades
- Mancha foliar del geranio (Alternaria alternata): Esta enfermedad, por lo general, aparece cuando las
condiciones son estresantes para la planta. Los síntomas que se manifiestan son pequeñas manchas
acuosas con forma de ampollas en el envés de las hojas senescentes. Estas manchas, al madurar, son
de color marrón y de 2-3cm de diámetro apareciendo con forma hundida. Finalmente, alcanzan también
el haz de las hojas.
Como medidas preventivas se debe: evitar el estrés por temperaturas inadecuadas y los periodos
prolongados de baja humedad ambiental, utilizar material vegetal sano, eliminar plantas infectadas,
desinfectar el sustrato, herramientas, etc.
El control de este hongo es muy importante debido a su capacidad para sobrevivir como saprófito. Se
debe evitar el exceso de humedad, ya sea disminuyendo la dosis y frecuencia de riego, espaciando las
plantas o ventilando. También es conveniente retirar tejidos enfermos, cortándolos a ras de tallo y
utilizando siempre herramientas desinfectadas.
Existe una creciente investigación para obtener cultivares más resistentes a este hongo. Los genotipos
diploides ensayados son más resistentes que los tetraploides. Por ejemplo, los cultivares de P.
peltatum son más resistentes que los obtenidos de P. x hortorum (Uchneat et al., 1999a; Uchneat et al.,
1999b).
También existen nuevos experimentos (Bi et al., 1999) a partir de los cuales se han obtenido plantas
transgénicas de Pelargonium, con genes “antimicrobianos” de cebolla y de Agrobacterium, capaces de
mostrar una elevada resistencia a Botrytis cinerea.
- Roya del geranio (Puccinia pelargonii-zonalis): Se trata de una roya específica del geranio, que afecta
principalmente a Pelargonium zonale. Los síntomas se manifiestan como manchas blancas o amarillas
a ambos lados de las hojas, de manera que se van agrandando poco a poco hasta formar pústulas
cloróticas con aspecto de ampolla. Transcurridos entre 10-14 días de la infección, estas pústulas se
abren dejando al descubierto uredosporas (esporas binucleadas) de color pardo. Las hojas gravemente
infectadas se vuelven cloróticas y finalmente caen.
Para evitar la propagación de este hongo se debe: utilizar material vegetal sano, eliminar plantas
infectadas, desinfectar el sustrato y los útiles de trabajo, inspeccionar de forma continua las plantas,
evitar el mojado del follaje para reducir el potencial de germinación de las uredosporas, etc.
Los síntomas en Pelargonium x hortorum se manifiestan mediante una decoloración de color marrón
claro difícil de distinguir, un relativo marchitamiento foliar y una clorosis general.
El control químico para esta enfermedad no es muy efectivo, ya que no se han encontrado fungicidas
que proporcionen una adecuada protección contra dicha enfermedad. Se recomienda hacer un buen
uso de las medidas preventivas, tales como: utilización de material vegetal sano, eliminación de plantas
sintomáticas, desinfección del sustrato (pasteurización con vapor) y herramientas de poda, reducción
de las poblaciones de insectos que puedan ser vectores, etc.
- Pie negro (Pythium sp.): Esta enfermedad es típica de esquejes recién enraizados. Se desarrolla
principalmente en suelos húmedos. Los síntomas se manifiestan con la podredumbre de la raíz y el
tallo de la planta, que se traducen en amarillamiento, raquitismo o marchitamiento de la parte aérea de
la misma. El hongo puede avanzar varios centímetros desde el sistema radical hasta el tallo,
produciendo una podredumbre o chancro del tallo o de la corona.
El control se lleva a cabo mediante tratamientos preventivos (desinfección del sustrato y herramientas
de poda, material vegetal sano, agua de riego libre de patógenos, etc.). Cuando la incidencia es severa
se recurre al control químico.
Para combatir esta enfermedad solamente se puede recurrir a la eliminación de plantas infectadas,
pues el tratamiento químico no resulta efectivo.
Existen estudios recientes que tratan de ver la influencia de los niveles de CO 2 en el crecimiento
de Xanthomonas sobre hojas de Pelargonium, para así determinar si niveles elevados de CO 2 podrían
disminuir los daños ocasionados por la bacteria y poder así desarrollar un método de reproducción más
eficaz y con menos problemas fitosanitarios (Jiao et al., 1999).
- Virus del arrugamiento del geranio o Pelargonium leaf curl tombusvirus: Los síntomas que ocasiona
este virus son muy característicos, aunque varían mucho con la edad de la planta y el periodo del año.
Por lo general, se manifiestan manchas decoloradas de pequeño tamaño sobre las hojas, en ocasiones
transparentes con forma estrellada. Estas manchas suelen aparecer rodeadas de un halo de color claro
y difuso, que a menudo se necrosa en su parte central. Finalmente, la planta puede sufrir la interrupción
brusca del crecimiento.
Por lo general, el virus se suele transmitir a través de aguas residuales o soluciones nutritivas
recicladas.
- Virus de las manchas anulares del Pelargonio: Los síntomas suelen presentarse en las hojas
senescentes en invierno o principios de primavera y desaparecen normalmente en verano bajo el
efecto de una fuerte fertilización nitrogenada. Éstos se manifiestan como manchas foliares con forma
de anillos concéntricos o de media luna. Como consecuencia de la reducción de la superficie foliar, se
origina el retraso del crecimiento de la planta, el retraso de la floración y la reducción del número de
flores.
- Virus del variegado floral del geranio o Pelargonium flower break carmovirus (PFBV): Loa síntomas
más comunes que ocasiona este virus aparecen sobre los pétalos de los cultivares de color rosa que
presentan decoloraciones en estrías. Este variegado suele estar acompañado por un aspecto rugoso
de los pétalos, cuyos bordes quedan ligeramente dentados. Estos síntomas se manifiestan en cualquier
época del año. Los síntomas foliares, se manifiestan en invierno originando manchas cloróticas.
Esta enfermedad puede ser transmitida por: 1) trips ( Frankliniella occidentalis), 2) esquejes de plantas
madre infectados y 3) herramientas de corte no desinfectadas.
Para el control de la virosis, se deben llevar a cabo una serie de medidas preventivas como:
7. FISIOPATÍAS