Mercurio 209-Whitman
Mercurio 209-Whitman
Mercurio 209-Whitman
es narrativa
Luis Landero
Kaouther Adimi
Jenny Erpenbeck
Elvira Navarro
Elisa Levi
Félix J. Palma
Karina Sainz Borgo
FUNDACIÓN JOSÉ MANUEL LARA Edurne Portela
UNIVERSO
poesía
Ada Salas
Andrés Neuman
Raquel Lanseros
WHITMAN
Álvaro Salvador
Javier Vela
entrevista
Elvira Sastre
PREMIO BIBLIOTECA
BREVE 2019
“La memoria es un
truco para seguir
viviendo lo que se
ha perdido”
ILUSTRACIÓN: MIGUEL SÁNCHEZ LINDO
ARTÍCULOS
EDUARDO LAGO
ANTONIO RIVERO TARAVILLO
ANTONIO LUCAS
TONI MONTESINOS
EDUARDO MOGA
contenidos 3
Número 209 | Marzo 2019
Mercurio se distribuye
Lecturas 15 Narrativa. Luis Landero. Kaouther Adimi. Jenny Erpenbeck
gratuitamente en librerías y grandes Elvira Navarro. Elisa Levi. Félix J. Palma. Karina Sainz Borgo
superficies de ámbito nacional Edurne Portela
Más información en:
www.revistamercurio.es 18 Entrevista con Elvira Sastre, Premio Biblioteca Breve 2019
— Guillermo Busutil
© FUNDACIÓN JOSÉ MANUEL LARA
Edificio Indotorre. Avda. de Jerez, s/n.
41012 Sevilla | Tel: 95 450 11 40
“La memoria es un truco para seguir viviendo lo que
[email protected] se ha perdido”
@revistamercurio
25 Ensayo. Eduardo Lago. Amartya Sen. Juan Cruz Ruiz
revistamercurio.es
Alberto González Troyano. Jonathan Haidt. Jesús Marchamalo
Envío de libros para reseñas:
Revista Mercurio 31 Poesía. Ada Salas. Andrés Neuman. Raquel Lanseros
Fundación José Manuel Lara Álvaro Salvador. Javier Vela
Para publicidad en Mercurio:
36 Infantil y juvenil— Reseñas de Antonio A. Gómez Yebra
Marcos Fernández
[email protected] Geronimo Stilton: El tesoro de Rapa Nui / Lo que yo pienso
Tel: +34 660 42 63 77 (de todo) / Mi elefante no quiere irse a la cama / El lobo con
La dirección de esta publicación no comparte
botas
necesariamente las opiniones de sus
colaboradores. Tampoco mantiene Firma invitada 42 Whitman y la naturaleza— Eduardo Moga
correspondencia sobre artículos no solicitados
Para Whitman, la naturaleza, intacta, grandiosa,
palpitante, define el Nuevo Mundo que se ha propuesto
cantar. Lejos de la condición petrificada y ornamental que
advierte en las líricas precedentes, la naturaleza ha de
La Obra Social de la Caixa colabora con la
presentarse “sin freno, con su energía primigenia”
revista Mercurio para el fomento de la lectura
Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por
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El poeta de
la democracia
E
n mayo se cumplirán doscientos años del nacimiento de Walt
Whitman, pionero de la literatura estadounidense —estricto
contemporáneo de Melville, formó parte de la segunda gene-
ración de escritores nacidos en el país, continuadora de los
Emerson, Hawthorne, Poe y compañía— que dentro y fuera de
sus fronteras es con razón considerado uno de los padres fundadores de la
poesía moderna. Su influjo, reconocido por autores españoles e hispanoa-
mericanos de la talla de Lorca, Borges o Neruda, ha sido tan universal como
su obra, en la que se cumple un empeño totalizador que pretendía recoger
la voz de una nación y ha acabado por dársela a la humanidad entera.
Para Eduardo Lago, el autor de Hojas de hierba encarnó al Poeta con ma-
yúscula que había reclamado para América el filósofo trascendentalista,
asumiendo la misión de crear “un Nuevo Canto para un Nuevo Mundo”. Su
ascendiente es comparable al que tuvieron Homero, Dante o Shakespeare,
que fueron además de la Biblia las lecturas esenciales del poeta en sus años
de formación, tanto en sus ámbitos lingüísticos respectivos como fuera de
ellos. La forma, famosamente libre, y el contenido, orientado a celebrar la
democracia en todos los órdenes, señalaron una novedad que ha tenido un
recorrido inagotable, aunque como también señala Lago su celebración no
era acrítica y por otra parte el país, que carga con sus propios demonios,
no siempre ha estado a la altura del ideal de Whitman. El sucesor de Poe,
escribe Antonio Rivero Taravillo, fue un poeta de corte muy distinto, solar, El influjo de
abierto a los otros, deseoso de representarlos en ese “mí mismo” que une Whitman, reconocido por
en una sola las tres personas gramaticales, las personas del verbo. El hom- Lorca, Borges o Neruda, ha sido
bre común era el destinatario natural de su obra, una colección de poemas
incesantemente reelaborada desde su primera edición en 1855, que se ha tan universal como su obra, en
beneficiado, apunta Rivero, del uso del versículo flexible, no sometido a la que se cumple un empeño
constricción métrica, a la hora de ser traducida a otros idiomas sin necesidad totalizador que pretendía
de soluciones forzadas.
La libertad y la plenitud, la igualdad y la justicia están en la raíz del dis- recoger la voz de una nación
curso de Whitman, que como afirma Antonio Lucas tiene su centro en la idea y ha acabado por dársela a la
de fraternidad y busca la adhesión de otros seres —y el amor de otros hom- humanidad entera
bres, desde una perspectiva homoerótica previsiblemente condenada por
los moralistas— que son, como el hipócrita lector de Baudelaire, semejantes
y hermanos. Cuerpo y espíritu, propios y ajenos, se funden en una suerte
de misticismo que invita a la vitalidad y pregona la alegría, para devolver al
universo cuanto de él han recibido. El yo es nosotros y es todo, incluida la
vasta geografía americana donde se proyecta el anhelo de continuidad y de
infinitud, de convivencia, diálogo y encuentro, de comunión casi religiosa
con la especie. Consta que el propio Whitman era consciente de su grandeza
y así lo atestiguan los textos en los que escribió de su obra, a menudo, como
señala Toni Montesinos, de forma anónima y bien poco pudorosa, como
un embozado agente comercial que se asegura los elogios escribiéndolos él
mismo, ansioso del reconocimiento que de todos modos merecía.
La exuberante naturaleza de América es el otro gran tema de Whitman o
mejor dicho su formidable escenario, que abarca la gran ciudad de Nueva
York, los bosques y lagos y cordilleras y toda la fauna y la flora del conti-
nente. En línea con Emerson, dice Eduardo Moga, el poeta de Long Island
le atribuye un alma, un impulso del que participan el hombre y todo lo que
existe, una energía primordial que remite también al deseo. El amor es la
fuerza que mueve el mundo y su imperio, felizmente, no conoce barreras. n
UNIVERSO
alguien de su peso, figuras del calibre de
Eliot y Pound, los dos pilares de la poesía
en lengua inglesa del siglo XX se rendirán
ante la magnitud de su legado. Pound lle-
L
pervisada por el autor desde su lecho de
a publicación de Hojas de conscientemente, todos buscan lo mismo. muerte. Como en el caso de Henry James,
hierba en 1855 cierra el lustro Lo que Emerson plantea en El poeta es lo fue un proceso extenuante, y no siempre
prodigioso del que surgieron que Melville y Hawthorne llevan a cabo positivo. La fuerza incomprensible, colo-
las líneas maestras que deter- en sus obras narrativas, cristalización de sal, de su genio, el milagro de escuchar y
minarían el futuro de la litera- facto de algo que décadas después dará en registrar la canción que lo habitaba, tuvo
tura norteamericana. En 1849 fallece Poe, conocerse como “la gran novela america- lugar principalmente entre los treinta y
el padre del cuento. El ensayo encuentra na”. Hojas de hierba es su equivalente en los cincuenta años de la vida del poeta.
su forma en la figura de Emerson, que poesía. Posteriormente, Whitman perdió el con-
publica Hombres representativos en 1850. La primera edición del libro consta- tacto consigo mismo y con los hilos que
Una nueva manera de entender la novela ba de doce poemas sin titular en los que lo conectaban a lo sagrado, pese a lo cual
arranca con la aparición ese mismo año Whitman proclama jubilosamente su poé- siguió interviniendo en su poemario.
de La letra escarlata, seguida de la de Moby tica, celebrando su país como la encarna- Para entender lo que se proponía ha-
Dick, un año después. Poco antes, en 1844, ción de la idea misma de democracia. El cer es preciso leer con atención el prefacio
Emerson había publicado El poeta, ensayo poemario busca ser un instrumento capaz de la edición original, en el que presenta
en el que proclama la necesidad que tie- de absorber el ser político, geográfico y so- como credencial su condición de “ameri-
ne la nación de dar con una voz capaz de cial de la nación. Para lograr su propósito cano”, manifestación cósmica y adámica
representarla con autenticidad. Whitman de crear un Nuevo Canto para el Nuevo de un nuevo hombre en una nueva tierra
tenía 25 años cuando leyó el ensayo y se lo Mundo, Whitman se ve obligado a revi- y en posesión de una palabra enteramente
tomó como si Emerson le estuviera enco- sar los modos de la tradición europea en nueva. Su intención explícita es dar forma
mendando una misión. Su respuesta llegó la que se ha formado. La fuerza desafora- a un gran poema capaz de representar y
nueve años después, con Hojas de hierba, da de su verbo dificulta su encaje históri- encarnar la esencia de la democracia nor-
obra que completa el estallido fundacional co, pero no es exagerado decir que en su teamericana, cuyo depositario ha de ser
de la literatura norteamericana, suman- contexto el impacto de Whitman sobre el el ciudadano de a pie: “El genio de los Es-
do a las facetas del cuento, la novela y el canon es comparable al que tuvieron en tados Unidos no es mejor ni más elevado
ensayo la de la poesía. Consciente o in- sus coordenadas Homero, Dante o Shakes- en sus ejecutivos ni en sus legisladores
ni en sus embajadores
o autores, ni tampoco
en sus universidades,
iglesias o foros, ni si-
quiera en sus periódi-
cos o en sus inventores
[…] sino que siempre
llega a lo más en la
gente común”.
Al trazar el retrato
de su país Whitman
no quiere omitir nada.
Junto al cuerpo social,
la ambición del poe-
ma es cantar y cele-
brar “la geografía y la
vida natural del país,
sus ríos y lagos”. Esti-
lísticamente, el valor
máximo es el ideal de
sencillez: “El arte del
arte, la gloria de la ex-
presión y el brillo solar
de la luz de las letras es
la simplicidad. No hay
nada mejor”. En cuanto
a la misión del poeta,
Whitman señala: “El
bardo americano ha
de ser la encarnación
del kosmos [sic]. El
marinero y el viajero,
el anatomista, el quí-
mico, el astrónomo, el
geólogo, el frenólogo,
el espiritualista, el ma-
temático, el historia-
dor y el lexicógrafo no ASTROMUJOFF
Q
esta en otra mediante el roce de caminar
ué habría escrito Edgar Allan muchos de esos acontecimientos, y aun- en una misma dirección o, también, en la
Poe, el crítico prolífico que que no luchara en la Guerra de Secesión efusión erótica. La suya fue homosexual,
dejó reseñas en tantas cabece- auxilió por igual a heridos de la Unión que quizá habría que definir mejor como
ras de Nueva Inglaterra y otros y de la Confederación. Le honra y nos homofílica, porque Eros es solo uno de
Estados acerca de su sucesor conmueve. John Ford, nacido dos años los elementos que intervienen en ese
en el trono de la poesía de los EE UU? La después de que muriera Whitman, cantó amor, no solo físico, al otro, al prójimo.
pregunta es, por supuesto hipotética, en celuloide con idéntica ecuanimidad a Fue tildado de indecente y la dudosa mo-
puesto que el autor de “El cuervo” murió grises y azules en una película formidable, ralidad de los que lo acusaron de inmoral
antes de que Walt Whitman empezara a lo asedió, y llegó a perder por
publicar Leaves of Grass en sucesivas edi- ello un empleo. No importa,
ciones, hasta la conocida como deathbed, Whitman no es poeta de torre tuvo otros. Uno, nada baladí,
definitiva, y se convirtiera en el bardo de fue el de impresor, oficio que
la nación estadounidense. Son poetas muy de marfil, acepta la alteridad y se hace lo hace ser colega del padre
diferentes ambos: el primero volcado ha- altruista, comprende que el límite de la patria estadounidense y
cia las pesadillas interiores y la soledad; de la piel es muy corto si no se prolonga asimismo del género autobio-
el segundo, solar y abierto a los otros, gráfico: Benjamin Franklin.
con una camaradería, con un abrazo, im- en otra mediante el roce de caminar También, entre nosotros, fue
posibles de atisbar en el primero. Por si en una misma dirección o, también, compañero en la distancia
esto fuera poco, Poe era un enamorado de en la efusión erótica — antecesor— de poetas im-
W
tronomía que tiene su eje en el ser huma-
alt Whitman es el pri- plena en lo inmediato. Porque los mús- no, en la maravilla de la hermandad, en
mer poeta moderno culos no están separados de los signos. el intercambio. En el prólogo a la edición
que habilitó la poesía Porque en Hojas de hierba se canta la de- de Hojas de hierba de 1855 escribió esto:
como una herramien- mocracia, no exactamente como sistema “La prueba de un poeta es que su país lo
ta de exaltación de sí político sino como espacio de encuentro, absorba sentimentalmente de la misma
mismo en el confín de su propia biogra- como celebración, como éxtasis, como forma que él absorbió a su país”. Y tam-
fía. Asumió el poema como un proceso en liturgia que sustituye lo finito por lo infi- bién por eso podemos asumirlo más como
marcha que toma cuerpo, forma, sentido y nito. La democracia es un tema literario, un sujeto de sustrato divino que como un
vuelo, según la vida va cumpliendo su pro- como lo son en Borges los espejos. ¿Es li- poeta naturalmente religioso. Él funde los
pósito. Walt Whitman se reconoce ínti- instantes de intensidad y los
mamente como una materia humana apta ofrece como un Yo, como un
para licuarse en todas las combinaciones, En ‘Hojas de hierba’ se canta la Nosotros, como un Todo im-
para hablarle al mundo sin interferencias pulsado por un instinto pleno
entre el todo y él. Un poeta que entiende democracia no como sistema político de felicidad, grandeza, fuer-
el papel primordial de su misión como sino como espacio de encuentro, como za, amanecer, ventana. De ser
la manera de comunicar algo que aún no celebración, como éxtasis, como liturgia americano. De ser el mediador
se ha dicho. O no ha sido enunciado de entre el hombre y América. De
ese modo. Walt Whitman es el poeta sor- que sustituye lo finito por lo infinito. ser el filósofo de la desmedi-
prendido en todo momento de habitar ese La democracia es un tema literario, da, pero también el padre de
nombre suyo: Walt Whitman. como lo son en Borges los espejos una nueva urbanidad que tie-
Una de las primeras grabaciones de voz ne como horizonte el orgullo
que se conserva es la suya recitando el de lo común, la fortuna de la
poema “América”. Sabemos por ese regis- convivencia y bucolismo ac-
tro cómo sonaba Whitman. Qué voz tenía. Whitman busca la intimidad con tivo que se hace de mil san-
Cómo sonaba un hombre de su tiempo. los semejantes sin más intermediación gres juntas, del proyecto de
Aquella grabación es un canto donde quie- humanidad. A la manera de
re convocarlo todo y a todos. Ese poema es
que las palabras. En su misticismo Lucrecio, también puede de-
la fundación de un tiempo nuevo, de una no hay tesis ni antítesis, dificultad ni cir que cuando la necesidad
expresión hasta entonces inédita. Colosal. propiedades. El hombre es todos los nos arranca palabras since-
Las aportaciones más plenas de su escritu- ras, cae la máscara y aparece el
ra vienen del pensamiento totalizador de
hombres. Verbo y gesto son una unidad hombre formando un mismo
una realidad extensible, abrazadora, un- material y esencial todo acerca de la naturaleza
tuosa, pero también del hallazgo de unos de las cosas. “Nacido aquí de
recursos técnicos propios donde el poema padres cuyos padres nacieron
es erupción y hermandad, canto sublime aquí y / Cuyos padres también
de la anatomía y la moral. El poder está en aquí nacieron. / A los treinta
el ritmo, en la comunión que este impone bre el hombre que duerme y sueña? Del y siete años de edad, gozando de perfecta
a quien se acerca. En el contagio de ese mismo modo que lo es quien se entrega salud, / Comienzo y espero no detenerme
entusiasmo por decir, por dejar rastro, por a los caminos buscando la adhesión de hasta morir. / Que se callen los credos y las
hacer casi rehenes que son, como el poeta, otros seres, el amor de otros hombres —el escuelas, / Que retrocedan un momento,
hombres que estiman la libertad y la ple- homoerotismo no como ardor, sino como conscientes de lo que son y / Sin olvidarlo
nitud, la igualdad y los derechos. Porque acuerdo, como equilibrio, como fiesta sin nunca. / Me brindo al bien y al mal, me
la suya no es una percepción parcial de lo más nomenclatura que la complicidad y el permito hablar hasta correr peligro. / Na-
real, sino una inaplazable intervención deseo—, la intimidad con los semejantes turaleza sin freno, original energía”.
En recensiones anónimas que escribía él que todo el mundo había de tener siempre
cerca: “Leerás estas Hojas de hierba al aire
mismo, publicaba en los diarios e incorporó libre, en todas las estaciones de todos los
a las sucesivas ediciones de su obra, Whitman años de tu vida”.
Convocar al lector a que acompañe su
reflejó su ansiedad por el reconocimiento libro es una treta fabulosa con la que lo-
gra dirigirse a las generaciones venideras,
C
que enarbola por escrito podría
onsciente de que cuestionarse desde el momen-
G. FRANK E. PEARSALL
estaba escribiendo to en que el ofrecimiento de su
algo nuevo, Walt poesía generaba también una
Whitman prepa- campaña de autopromoción
ró, incluso desde engañosa por hacerla de modo
la portada de su primer libro y anónimo, o bien por intentar
mediante sus componentes ti- dirigir opiniones ajenas para su
pográficos, que tan bien conocía propio beneficio y enaltecerse,
gracias a su experiencia en im- cual agente comercial del siglo
prentas, una exposición pública XXI. Él mismo, en una nota anó-
en calidad de poeta deslizando, nima para la primera edición de
en paralelo, una manera de des- Hojas de hierba, se describió así:
tacar, admirar y proteger su pro- “¡Por fin un bardo americano!
pia poesía para con ello compen- Uno de los personajes burdos,
sar los comentarios despectivos grande, orgulloso, afectuoso,
que pudieran originarse. De tal comiendo, bebiendo y engen-
modo que elaboró una estrategia drando, su vestimenta varonil y
de autodefensa y autopublicidad libre, su rostro quemado por el
única e impudorosa, a veces con sol y barbado, sus gestos fuertes
un tono exagerado en la prensa, y erguidos”.
y otras a modo de reflexión lite- Whitman invita a que le admi-
raria más sutil, sobre todo en los ren desde “Canto de mí mismo”,
extensos prefacios que incorpo- que ocupaba más de la mitad del
ró a las diferentes ediciones de libro en su primera edición, a la
Leaves of Grass. cual le seguiría una segunda, a
Lo hizo mediante dos cami- finales de 1855, acompañada de
nos: hablando de manera pio- sus propias reseñas, para inten-
nera e hiperbólica de la gran- tar reavivar unas ventas que ha-
deza de su país y de sus gentes, bían sido casi inexistentes. Eran,
y deseando la llegada de un claro, recensiones anónimas que
poeta que estuviera acorde con el poeta había escrito, después
tamaña grandeza. Creaba así una comu- de lograr publicar textos laudatorios en
nicación estrecha entre el público que El poeta de Long Island periódicos con cuyos directores tenía
necesitaba a su nuevo cantor y el poeta confianza, o bien escribiendo él mismo los
que había aparecido para satisfacer ese intentó atraer a cualquier ser elogios sin firmar, o bien dando indicacio-
vacío, que no era otro que Walt Whitman. humano diciéndole que todo nes para que se redactaran reseñas óptimas
Al referirse a un país entero y a sus nece- cuanto hiciera o pensara era con —�todo estaba hábilmente planifica-
sidades espirituales y literarias, no dejaba do— algún comentario negativo para evitar
de hablar de sí mismo: de su fe en la eter- importante, que un gran poema dar la imagen de una flagrante propaganda
nidad del ser humano, de su actitud de era para todas las épocas y para que, en cualquier caso, le dio un excelente
profeta con claros elementos jesuíticos. Y todas las personas, para todos resultado. n
como equiparando las sagradas escrituras
que enfatizan su mensaje de bondad y en- los estados y caracteres Toni Montesinos es autor de El dios
más poderoso. Vida de Walt Whitman,
trega a los demás, ofrecía su propia biblia de próxima publicación en Ariel.
IGNACIO F. GARMENDIA
Hija de la luz
Mary Shelley
(Londres, 1797-1851)
ta de intención vagamente
filosófica que también se ha
convertido, a menor escala,
en un libro de culto— el logro alcanzado con Frankenstein
o el moderno Prometeo, en 1818, al hilo de cuyo segundo
B ritánicos en España ha habido muchos, viajeros
o residentes, y si se hiciera una biblioteca espe-
cífica con los testimonios de los que han dejado
sus impresiones del país, esta ocuparía un buen puñado
de estanterías. Muy pocos, sin embargo, han llegado a
retratada por Richard centenario ha publicado la poeta y ensayista británica alcanzar la comprensión profunda de Gerald Brenan,
Rothwell en 1839. Fiona Sampson una nueva biografía —En busca de Mary autor de páginas fundamentales que siguen siendo va-
NATIONAL PORTRAIT Shelley (Galaxia Gutenberg)— que se centra sobre todo en liosas para entender el laberinto español, su rica y variada
GALLERY, LONDON
la primera etapa de su itinerario. Apoyándose en los dia- cultura y su trágica historia contemporánea. Gracias a
rios y cartas de la autora, contrastados con el testimonio su albacea, Carlos Pranger, hijo de Lynda Nicholson
de sus contemporáneos, Sampson se propone desvelar el —íntima amiga de Brenan en el último periodo de su
enigma —la vida interior— de la mujer, oscurecido por vida— y custodio de un legado en el que sigue quedando
la sombra de las celebridades con las que convivió, por abundante material desconocido, en particular la co-
la pérdida de parte de sus escritos autobiográficos y por rrespondencia, podemos ahora acceder a una selección
su propia reticencia; en parte también por su fidelidad de ensayos y artículos inéditos en castellano —Cosas de
al recuerdo idealizado de Percy Bysshe, pese a que este España (Fórcola)— en los que don Geraldo da muestras
no le había dado lo que se dice una buena vida. La forma de una familiaridad que trasciende, porque fue no sólo
del relato, estructurado en cuadros con saltos cronológi- erudita, sino vivida, la manoseada etiqueta de hispanis-
cos, así como el trabajo documental y de interpretación ta. Hay algunos textos autobiográficos y otros, la mayo-
y la buena escritura, hacen que leamos la biografía de ría, críticos, pero más allá de las aportaciones concretas
Sampson con interés y provecho, pero la imagen final no sobresale en Brenan la mirada de conjunto, por su afán
se aleja del retrato ya establecido. Dotada de indudable abarcador —sus intereses literarios se extienden a los
genio, Mary Shelley fue una mujer avanzada a su tiempo, terrenos del arte, la antropología o la cultura popular—
compleja y paradójica. La “hija de la luz”, como la llamó el y por su independencia de criterio, que como recalca
poeta, conoció —y supo sobrevivir, y explicarse a través Pranger es indisociable de la rara libertad de sus juicios
de ellas— muy de cerca las tinieblas. y de su propio estilo de vida. n
L
JUAN MANUEL PRATS
√
sueños, talentos
y voluntades, y se convierte en
NARRATIVA
una lacerante cartografía de activismo literario para criticar la
Y
STEVE BISGROVE
√
historia central protagonizada los otros para recordarse
por Richard, un catedrático de a sí mismo. Porque, al igual
filología clásica de la Alemania del que los inmigrantes, él es un
Este. Richard, al jubilarse, decide sonámbulo que busca su lugar en
emplear su tiempo ayudando en Jenny Erpenbeck pone delante el mundo. Mientras reconstruye
un campo de refugiados de Berlín del lector el drama de la las vidas ajenas, Richard
y en un juego especular se sentirá rememora la suya en la que, junto
tan extranjero en la Alemania
inmigración y la crisis de los al recuerdo del omnipresente
reunificada como los inmigrantes. refugiados proponiendo un muro, sin cuya presencia se
Conocerá y entablará amistad con chequeo moral del que no se siente desorientado, siempre
varios de ellos que huyen de la sale indemne. Es de esos libros está su mujer enferma a la que
guerra y la miseria, fugitivos de que agitan, interrogan, traicionó con una amante. Yo voy,
ese no-lugar llamado África. Un incomodan y cuyas páginas tú vas, él va es una novela espejo
caleidoscopio de historias que no son inocentes llena de dolor, pero también de
se entrecruzan para conformar esperanza. n
IVÁN GIMÉNEZ
actitud al final acabas convertido en una
√
Foenkinos que me ha inspirado mucho.
conmovido y representa ese sueño y esa —El personaje de Gael es escultor.
resistencia frente a la ausencia. ¿Eligió esta disciplina artística porque el
—¿Si no existe ese amor del que amor y la memoria se moldean?
habla, los ausentes se convierten —Es verdad lo que dices pero escogí
en fantasmas que son habitaciones En el mundo hace falta de base la escultura de manera aleatoria porque
cerradas, como dice en la novela? que nos eduquen emocionalmente quería indagar en el arte como un modelo
—Así es, los fantasmas son espacios y nos den clases de inteligencia de canalizar las emociones. Para unos
vacíos que escuchan a los vivos, que los emocional porque mucha gente en es la música o la pintura, para mí es la
expulsan de sus lugares y de sus hábitos lugar de intentar vivir con los poesía y para el personaje la escultura. Lo
compartidos, y los obligan a seguir problemas lo que hace es ir poniendo importante es crecer con un arte dentro
adelante con la responsabilidad de estar de ti que te permita sentir y pensar las
capas encima de cada dolor”
vivo, que no es poco. emociones.
—En ese sentido usted habla de que lo —En este caso, incluso acariciarlas,
peor es vivir con miedo. algo que Rosa Montero, jurado del
—Creo que todas las emociones son aprende más educando a la vez que se premio, dijo que haces con el lenguaje.
buenas hasta que se enquistan. El miedo aprende. —Llevo escritos seis libros de poesía y
es una de las más difíciles de sacar de —Mi padre es maestro, como mi es cierto que no puedo ni quiero librarme
dentro de uno, y si no se afronta envenena abuela, y me lo enseñó de pequeña. de esa manera de tratar las palabras. Para
todo lo que haces y nunca se sale de él. Siempre me ha hecho buscar el porqué mí la escritura es una caricia que me gusta
—El personaje de Dora es maestra, y de las preguntas, el de las respuestas, cuidar y sentir porque es importante tratar
representa aquellos que opinan que se y de aquello que me impulsa a hacer bien el lenguaje. n
√
bien controlada inventiva
retuerce los límites de la
realidad común, descubre
circunstancias inusuales
y muestra seres humanos Uno de los mejores libros de
sujetos a condicionantes cuentos que he leído desde
peculiares y un tanto
excepcionales.
hace mucho tiempo. Elvira
Lo primero que llama la Navarro mira el mundo con
atención en el conjunto de ojos vigilantes que son
los once cuentos del libro capaces de descubrir y mostrar
Elvira Navarro. es la decidida voluntad lo que hay en él de misterio,
de contar sucesos de sorpresa, de injusticia,
interesantes, de dotarlos de esa de seres humanos sujetos
LA PERIFERIA materia narrativa suficiente que
requiere todo relato, aunque hoy
a condicionantes peculiares
y un tanto excepcionales
DE LA REALIDAD se aplauda la inanidad anecdótica.
Cada cuento se sostiene en una
buena historia, concentrada, He detallado un poco “Encía”
cuya conclusión suele buscar el porque ejemplifica lo mejor de
desenlace insospechado, aunque la poética de Elvira Navarro. Sus
SANTOS SANZ La isla de los conejos en ocasiones el final consista en cuentos producen un intenso
VILLANUEVA Elvira Navarro un punto y seguido. efecto realista por la notación
Random House Algunas historias son de detalles (lista de cementerios
160 páginas | 17,90 euros corrientes: una pareja rompe madrileños, comprar en Carrefour,
su relación en un albergue desayunar en Viena Capellanes,
cutre; dos amigas recuperan las etc.) pero el verismo funciona
experiencias infantiles tras seis como pértiga para alcanzar la
A punto estuve de ni
siquiera comenzar La
isla de los conejos. Tal
impulso se debió a la extenuante
palabrería de la cubierta del libro:
años sin dirigirse la palabra. Una
se abre a lo mítico y fabulístico:
un archiduque obsesionado en
Mallorca por el “myotragus”. Otra
explora el insondable humus
dimensión enigmática de la
vida. La narradora de “París”
anda sonámbula y solitaria por
los suburbios urbanos. Podría
extenderse la imagen al conjunto
“la autora desnuda los mimbres de onírico en agudo contraste con la de cuentos de Navarro porque
lo real por medio de una escritura anodina vigilia y habla de soñar en ellos hace incursiones en la
sutil y llena de clarividencia, que sueños que otros han soñado. Una periferia de la realidad, en la
transgrede los significados y nos más entra de lleno en la locura con tangente donde lo empírico roza
entrega, a cambio, una hiriente alucinaciones que no diferencian con lo enigmático; también con
lucidez”. Por suerte anestesié marcianos y ángeles. Las nuevas el terror y la degradación porque
semejantes vaciedades engoladas tecnologías estimulan novedosas el libro abunda en la imaginería
y antepuse la positiva imagen situaciones: una madre fallecida naturalista del mal y de lo
de escritora interesante y con le escribe por facebook a la hija; nauseabundo. n
NARRATIVA
LEXATÍN, No entre en estas páginas quien
soslaye la tristeza, aunque sea
su progenitora y sus hermanas la
entiendan.
E mpezó en la poesía y
su prosa aún destila
sinestesias. De ahí que su
protagonista llore, como lo hacen
las urbes, los seres animados e
entender el bastón que suponen
para el dolor vital fármacos legales
y pautados como el válium, el
rivotril, orfidal, trankimazín...
La novela, también, retuerce a
incomunicación general colabora
la ciudad elegida para situar la
novela, Tokio, una capital futurista
y casi distópica, en la que se
evidencia la dificultad de Ada para
inanimados con “alma” tal y como Tolstói, recordando su comienzo transmitir sus sentimientos. Una
quien supura lírica sabe... porque popularizado por Jared Diamond: mujer con la que se identifica la
la vida le propondrá millones de “Todas las familias felices se escritora, que escribe de sí misma
interrogantes y darles respuesta parecen unas a otras, pero (en tercera persona) y que ha
conllevaría ingresar en una edad cada familia infeliz lo es a su peleado con su cuerpo, ha bebido
adulta que escuece, abruma y manera”... Levi deja claro que la y ha fumado y se ha medicado. En
desborda; elonga los huesos, consanguinidad puede convertirse pocas literaturas uno se siente tan
el corazón, los sentidos y sus en un infierno que cada miembro rápida y plenamente a gusto como
alrededores. contribuye a crear. No en vano, en la suya. Es como llegar a un
Una mujer de 28 años, Ada, en estas páginas, se reflejan sitio gratamente ingrato, donde
viaja a Tokio para hacerse cargo abusos sexuales y se subrayan las a uno lo atienden de maravilla,
del cadáver y de las últimas problemáticas relaciones entre porque le comprenden, y donde
voluntades de Denis, algo más una madre que no acepta cómo los asientos son cómodos y la
que su mejor amigo, un hermano vive su hija y una hija que no conversación es tan provechosa
casi, que se ha suicidado tras una hace ningún esfuerzo para que como profunda. n
decepción amorosa. Un hecho tan
dramático le sirve a la escritora
como hilo conductor para edificar
un duro relato generacional sobre
la dificultad de adaptarse a la
vida del final de la juventud, una
etapa que, tras su exuberante
apariencia, esconde todos los
demonios interiores de los seres
humanos.
Durante todo el viaje hacia
Japón, nuestra protagonista
—�adicta a los ansiolíticos y con un
severo problema con el placer—,
que ve su vida a través de una
lente como si fuera un personaje
del séptimo arte, mostrará al
lector su ansiedad, que se resume
en un tic: rozar su dedo pulgar
por las yemas de los dedos, como
si contara algo. La familia, la
amistad, las drogas, el sexo y la
homosexualidad, son algunos de
los asuntos sobre los que pivota
el libro de Levi, en sus reflexiones
pesimistas que también reflejan
las dudas y la incomprensión que
genera el mundo contemporáneo. Elisa Levi.
√
‘El abrazo del monstruo’ es
una indagación en nuestros
lugares oscuros, cuando no
siniestros; es un ‘thriller’
y es una novela negra, una
novela sobre la impotencia
y el miedo, tiene ribetes de
literatura fantástica y ofrece
regocijos del lenguaje
BREVE
FICCIÓN
Hola, Melón
(El grifo del Rompeolas)
Karina Sainz Borgo. Cristóbal Ruiz
Ediciones de aquí
perder a su madre, la persona 536 páginas | 19,90 euros
√
los desencuentros del deseo,
de los silencios, de los egoísmos,
ENSAYO
especialista en literatura profundidad y, lo que parece más
E n el entorno de la
Ilustración europea, una
serie de pensadores de
fenomenal talla, entre los que
cabe citar los casos de John Locke,
la mujer en Wollstonecraft), en
todos ellos subyacía la idea de
privilegiar los hechos positivos y
tangibles de la vida real en lugar
de orientar sus análisis hacia la
obra tan vasta como diáfana.
Sen logra en ella no sacrificar la
ambición del asunto al aspecto
pedagógico con que organiza su
discurso. Ello añade valor a un
Inmanuel Kant y Jean-Jacques búsqueda trascendental de una texto que, al tiempo que indaga
Rousseau, se empeñó en señalar sociedad perfectamente justa. en la constelación de sentido
los esquemas institucionales En consecuencia, lo que a estos de las más grandes palabras
justos para la sociedad. Este autores les interesaba no era tanto (justicia, libertad, igualdad, razón,
√
enfoque, que Amartya Sen califica democracia, derecho, deber,
de institucionalismo trascendental responsabilidad), acompaña
en su esclarecedor La idea de la al lector sin abandonarle a la
justicia, concentró su atención dialéctica de los discursos hueros
en identificar qué cosa fuera Amartya Sen consagra su y los formalismos inanes. Lo cual,
una justicia perfecta, antes que libro a defender la convicción huelga decirlo, no es el menor
en comparaciones relativas a mérito de un libro repleto de
propósito de qué cosa fueran lo
de que la significación de ellos, consagrado como está a
justo y lo injusto. El punto focal nuestras vidas no se puede defender la convicción de que la
de esta perspectiva no tenía guardar en la pequeña caja significación de nuestras vidas no
pues que ver con la comparación de los niveles de ingreso se puede guardar en la pequeña
entre sociedades reales, sino o de satisfacción, sino que caja de los niveles de ingreso o
que su búsqueda se orientó debe atender a la relevancia de satisfacción, sino que debe
hacia la naturaleza de la justicia, vital de los valores que atender a la relevancia vital de
primando por ello el hallazgo de los valores que mueven a las
mueven a las personas
las instituciones adecuadas para personas. n
que sus ideales se encarnasen.
Estas evidencias, que hallaron
su precedente en el Leviatán
de Thomas Hobbes e informan
en nuestros días el trabajo de
pensadores como John Rawls o
Ronald Dworkin, establecieron
un hipotético contrato social,
comprometido como alternativa
ideal al caos que de otra forma
regiría las sociedades, de modo
que los contratos apuntaran, en su
mayoría, no tanto a la discusión
en torno a las sociedades
empíricas existentes como a la
elección de las instituciones que
mejor satisficieran las condiciones
de ese pacto entre el individuo y
los poderes.
En contraste con este
institucionalismo trascendental,
Sen menciona el trabajo de otros
teóricos de la Ilustración, entre
los que insinúa los nombres Amartya Sen.
P or su reflejo más o
menos feliz en el arte y
la literatura, la imagen
de Andalucía como territorio no
sólo histórico sino cultural, en un
construida por visitantes foráneos
—Byron, Gautier, Mérimée, Ford—
y asumida, pese a su declarado
“afán corrector”, por costumbristas
nativos como Estébanez Calderón
al conjunto de la identidad
española o de puertas adentro
la propia idea de la identidad
—�vicio, desde luego, no exclusivo
de los andaluces— como algo
sentido amplio que comprende o Fernán Caballero, que del mismo fijo e inamovible, son algunas
la realidad, la idealización y la modo que otros autores del XIX de las cuestiones tratadas por
caricatura, no es un tema que —Alarcón, Valera— incidieron González Troyano, que señala el
ataña únicamente a los andaluces, en una mirada inocua y en el activo papel de los naturales de
aunque son estos los que han fondo complaciente, ajena a la la región en la perpetuación de
o hemos tenido que lidiar con conflictividad que latía tras las los estereotipos y de otro lado
una serie de tópicos que en escenas pintorescas. Cadalso o las razones que han sustentado,
muchos casos siguen vigentes, Blanco White habían hilado más desde fuera, una deformación
a veces con justicia y otras de fino, pero ya el primero trazaba interesada. Situándose al margen
manera infundada. Los pintores, en sus Cartas marruecas un cuadro tanto del “narcisismo colectivo”
los poetas, los viajeros han premonitorio donde aristócratas, que también diagnosticara Ortega
retratado el lado más luminoso señoritos y flamencos encarnaban como de cierta tendencia a la
de una tierra solar, “hermana los valores castizos. La alianza autoflagelación, el autor condena
de la primavera y de todas las entre nobles y majos —Ortega la difusión de lo que Caro Baroja
revelaciones”, como la calificara lo llamó plebeyismo— dio forma llamó una “imagen vulgarizada”,
Cansinos en su prosa encendida. a una reacción antiilustrada desconfiando con Braudel de
A rastrear los “estereotipos y que defendía las tradiciones las generalizaciones abusivas.
prejuicios” de su cara oscura populares, el baile, el cante, los Debieran leerlo quienes siguen
dedica este ensayo un excelente toros, frente a la contaminación de hablando de la proverbial desidia
conocedor de la materia, Alberto la modernidad. de los habitantes del Mediodía,
González Troyano, que reformula El debate, por obra de los que acaso, por eludir el examen
en no demasiadas páginas el regeneracionistas, tomaría crítico, no revelan otra cosa que su
resultado de décadas de trabajo otro rumbo cuando al hilo de propia indolencia. n
ENSAYO
elección por uno u otro equipo, Si la izquierda solo pone en
√
cariño de los votantes
sensatos —y no sensatos,
añadiríamos— por la
autoridad y el orden,
Haidt deduce de sus trabajos y la desconfianza que
que los fundamentos morales de suscitan aquellos que
no son como nosotros,
la política se basan en el valor sean o no de la tribu, es
que atribuyamos al dolor de los decir, sean extranjeros o
vulnerables, a los sentimientos Jonathan Haidt. personas que no dan la
de lealtad y traición, al respeto talla moral medida por
por la tradición y la tendencia a con la derecha; en un régimen este rasero. No defiende que los
la subversión, a la consideración democrático, habría que añadir. políticos deban aprovechar estos
por los símbolos Es un enfoque psicológico sentimientos profundos para
cuyas conclusiones se inspiran lanzar sus mensajes divisorios e
en las encuestas realizadas inflamables. Pero, si son eficaces
un gran impacto en el ámbito por Haidt y por sus colegas y y si de conseguir el poder se trata,
anglosajón cuando se publicó en colaboradores. De ellas deduce ¿por qué no? ¿O es que hay algo
2012, ya con la maquinaria de la que los fundamentos morales de más?
agresión verbal contra el enemigo la política se basan en el valor Si hacemos caso a Haidt, esa
como instrumento cotidiano de que atribuyamos al dolor de los idea fantástica de los politólogos
los políticos, y que ahora llega a vulnerables, al castigo de los según la cual el ciudadano
España en un panorama igual de tramposos que se benefician de deposita su voto como expresión
desquiciado. la cooperación y el trabajo de de un juicio sobre el grado de
Haidt supone que todas las los demás, a los sentimientos de cumplimiento de las promesas de
personas juegan en una área lealtad y traición, al respeto por los políticos, se disuelve como un
o en otra dentro del campo la tradición y la tendencia a la azucarillo en el agua en el amplio
de la política, y añade que si subversión, a la consideración por campo semántico de la palabra
bien la genética inclina a la los símbolos. prejuicios. n
√
Groenlandia a lo largo de unos
POESÍA
seres queridos, se pierde el yo y se
pierde el ser. En la segunda parte,
titulada “Oratorio”, ofreciéndose
como testigo de las otras voces
que intervienen en el drama:
Nicodemo, María de Cleofás,
María, Juan, María Magdalena,
José de Arimatea, María Salomé,
un criado, unas mujeres o un
coro. Una de estas últimas se
pregunta qué hay de “noble en / la
soledad” o “qué hay de sagrado /
en / el sufrimiento” y otra “qué
tiene / la belleza / que la hace
tan triste”. También aparecen un
“puñalito / abriendo una granada”,
una “bola de escarcha” (la del
amor) que se entierra para que
se funda, alguien que se come
un corazón (un tema antiguo del
que hay abundantes iconografía
Ada Salas. y bibliografía) y varias reflexiones
TODOS ESTAMOS
MUERTOS
tan solipsista, tan feroz, tan
laberíntica, tan oscura y tan
universalmente partidaria del
“No”. Y con significados sólidos
(los troncos de una balsa que,
√
Ada Salas dialoga con ‘El
descendimiento’ de Van der
en este contexto, recuerda el
famoso cuadro de Géricault
Weyden dándose voz a sí
La balsa de la Medusa) que nos misma para ahondar desde
JESÚS AGUADO Descendimiento permitan sobrellevar el naufragio dentro en la compasión, y
Ada Salas de una existencia donde el ofreciéndose como testigo de
Pre-Textos conocimiento no es posible, las otras voces que intervienen
90 páginas | 16 euros el amor es un término que no en el drama: Nicodemo, María
se encuentra en el diccionario de Cleofás, María, Juan, María
(y es un lujo), la belleza y el
Magdalena, un criado, unas
sufrimiento son ilusorios,
D
RAMÓN L. PÉREZ
√
moral (“Oscuro a
medias”), aunque se
ocupen sobre todo
de la problemática
Un magnífico libro de Andrés del escritor frente
Neuman, que lo sitúa también a sus recursos.
Se suceden así
como uno de los poetas más un homenaje a
intensos e innovadores de su la capacidad de
generación. Y de los más narrar (“Ficción
inteligentes, porque al fin y de vista”), otros
al cabo “vivir de oído” es algo modos de nombrar
parecido a seguir adelante el eclecticismo (“La
a pesar de los golpes que la otra vía”, “Bacanal
ambidextra”)
vida nos tiene destinados
Andrés Neuman. y finalmente la
reivindicación
poemas: “Conversación en tres uno tras otro, libros diferentes, contenida, elegante, de la
tiempos”, “Ocho, etcétera”, “El adscritos a muy distintas emoción en “Casi conmovido” o
kilómetro extra”, “Pesimismo del tendencias estéticas. El libro “Movilidad de lo otro”.
entendimiento…”, “Regreso de presente, supone un paso más En definitiva, un magnífico
la hoja”, “Ese viento obstinado”, en ese camino de fusión, puesto libro de Andrés Neuman, que
“Inventos…”, etc, que pueden que las distintas tendencias se lo sitúa también como uno
resumirse en dos versos mezclan en sus versos, llegando a de los poetas más intensos e
ciertamente memorables: “Ese conseguir efectos sorprendentes innovadores de su generación. Y
viento obstinado era deseo. / que Neuman buscaba ya, sin de los más inteligentes, porque
Ese empecinamiento se llamaba duda, desde sus inicios. Así, al fin y al cabo “vivir de oído” es
vida”. También, en buena lógica el mundo de los objetos y algo parecido a seguir adelante
sentimental, se remonta a los de las relaciones domésticas a pesar de los golpes que la vida
orígenes y a los ancestros por el se armoniza sin fisuras con nos tiene destinados. n
EL MAPA DE
LA MEMORIA
sentimiento elegíaco una
celebración del mundo que en los
comienzos del libro instala una
exaltación de la belleza natural
que recuerda a Claudio Rodríguez
√
La imaginación, la libertad
creadora se ponen al servicio
—“Y qué gozosamente, con
qué brío / uno se da de bruces
de este mapa en el que se
con el mundo / y antes de consignan las raíces, los afectos,
FRANCISCO Matria comprenderlo ya lo ama” (“Cielo el papel de la memoria como
DÍAZ DE CASTRO Raquel Lanseros arriba”)— y una afirmación de patria íntima, el compromiso
Visor la poesía como “escudo ante la con la realidad histórica, el
110 páginas | 20 euros mentira” y como “destacamento sentimiento ambivalente del
rumbo a la verdad” (“¿Para qué tiempo y la experiencia en vivo
la poesía?”). La reflexión sobre
de la maternidad
la temporalidad, sin embargo,
U n preciso viaje de
ida y vuelta entre la
finitud que nos define
y la infinitud que nos alienta”:
así definía Raquel Lanseros la
introduce constantes sombras
en el conjunto. El emotivo
poema “Fría como el dolor”
proyecta sobre la figura de la
abuela muerta un razonamiento
familiares —“Padre” es uno de
los muchos poemas memorables
del conjunto—, la evocación
de la infancia y, sobre todo, la
poesía en la presentación de Esta existencial que se resume en experiencia de la maternidad
momentánea eternidad (Poesía “Potencialidad y biografía” vuelven sobre la intimidad propia
reunida 2005-2016) y ese doble como “las cenizas que, para una compleja exploración en
itinerario sigue siendo el signo consolarnos, llamamos biografía”. claroscuro, como lo efímero de la
que orienta su escritura en Matria, Con el uso del unamuniano inocencia a que aboca “Jugar a las
un libro cuya variedad se muestra matria, el conjunto se abre a la muñecas” o, en fin, el recuerdo
como una magnífica suma de afirmación de las propias raíces de los cuentos infantiles que
todos sus temas y recursos. La personales: los espacios vividos, la deviene una especie de historia
imaginación, la libertad creadora lengua, la historia, la familia, los de terror en primera persona
se ponen al servicio de este mapa amores, la memoria. “Defiendo la (“Cuatro dedos”) y que, en
en el que se consignan las raíces, memoria como la patria íntima”, “Suspiro progenitor”, proyecta
el sentido de pertenencia, los dice en “Promesas que cumplir”, hacia el sentimiento de la muerte
afectos, los lazos familiares, el una especie de retrato de tono la conciencia gozosa del propio
papel de la memoria como patria machadiano que cierra el libro. cuerpo en gestación: “Mi pedazo
íntima, el compromiso con la También de tono machadiano de tiempo no ha variado, / es
realidad histórica, el sentimiento son las sentenciosas “Coplas más, se va encogiendo cada
ambivalente del tiempo y del pensamiento poliédrico”: vez / pero ahora les ha dado por
la experiencia en vivo de la “Cada ángulo de visión / aglutina dolerme / no sabes cómo astillan
maternidad. dos enteros / un axioma y y se clavan / todos esos días tuyos
La conciencia aguda de su contrario / son igual de que no voy a vivir” (“Suspiro
la finitud equilibra con un verdaderos”. progenitor”). n
LAS CARAS
DE LA VIDA
colección Juancaballos de poesía
de la Fundación Huerta de San
Antonio que, bajo el título de
Caras B, basado, según explica
en el prólogo el profesor Miguel
√
En ‘Caras B’ se habla del cambio
climático, se denuncian el
Ángel García, en un “juego
conceptual con la música, en
maltrato, la tortura, el asesinato
concreto el pop o el rock and roll”, y las guerras, mediante una
JAVIER LOSTALÉ Caras B sin olvidar el tango y el bolero, permanente interrogación sobre
Álvaro Salvador cuyas letras en algún momento el comportamiento de las
Fundación Huerta escribió Álvaro Salvador. Música madres de los protagonistas
de San Antonio a la que en su día también se de tanta maldad
112 páginas | 12 euros refirió Ángel González como “la
presentación pautada, iterativa,
rítmica de ciertas preocupaciones veneno”. Contraposición que nos
POESÍA
donde todo es textualmente de Machado), Juan Panadero
FALSIFICAR posible.
Lo interesante del proceder
(personaje inventado por Rafael
Alberti), Josep Torres Campalans
INFANTIL
Y JUVENIL
GERONIMO STILTON ANTONIO A. en ellos se plantean dos o tres Tiene mucho mérito ese
El tesoro de Rapa Nui GÓMEZ YEBRA elementos esenciales: el hecho papá, tan protagonista como la
(y la profesión) de escribir, el niña y el elefante. Es un papá
Elisabetta Dami amor, y la amistad. doméstico, acostumbrado a
Destino Es también una especie de complacer a su hija en todo lo
128 páginas | 9 euros
diario, una guía para torpes (y que ella solicite. Un papá como
El ratón más famoso del mundo superdotados), para jóvenes no hay muchos (¿o sí?). n
literario, Geronimo Stilton, se que empiezan y tropiezan, para
pone en marcha para intentar los que descubren la vida y el
recuperar a su hermana Tea, que amor, que siempre presenta El lobo con botas
se ha metido en una aventura muchas aristas y da pocas
El Hematocrítico
de la cual no encuentra la salida. pistas. Es un libro donde está Ilus. Alberto Vázquez
Para ello se desplazará a la isla el Jordi esencial, el que conoce Anaya
de Pascua con Wild Willie, su como nadie a los adolescentes, 72 páginas | 12,95 euros
primo Trampitas, y la fotógrafa y propone fórmulas magistrales
Ratana. Tampoco en esta para que sobrelleven la carga de Los niños conocen
ocasión Geronimo da muestras la edad inmadura. perfectamente a los personajes
de mucho valor, pero hace lo Y no menos el observador de los cuentos tradicionales,
que debe hacer para encontrar a de cada día y de cada momento y muchos han visto películas
su hermana y, de paso, localizar histórico, el que ha visto con donde algunos de ellos tienen
un valioso tesoro, que motivó ojos discretos, y escuchado con mayor o menor protagonismo.
la presencia de Trampitas. Los oídos atentos el palpitar del Caperucita, El lobo feroz, El gato
protagonistas se encontrarán mundo. n con botas, son objeto continuo
en la famosa isla con los de revisión y actualización en
moai, y con Vaiatea, una guía todo el mundo.
turística que los acompaña en la Mi elefante no quiere El año pasado, de la mano
búsqueda de Tea y el tesoro. irse a la cama de “El Hematocrítico”, surgió
Otro libro de aventuras esta aventura en forma de
con el antihéroe director del Cee Neudert historieta, con pastas duras,
Ilus. Susanne Göhlich
periódico más importante de Juventud donde Lobo Feroz, que ha
Ratonia, que, como siempre, no 32 páginas | 14 euros decidido ser bueno, ha montado
parece dispuesto a involucrarse una sastrería. Pero no es buen
en otra aventura. Pero llegarán. Los niños buscan mil excusas negocio, de modo que tiene
Al final del libro se apunta para no acostarse cuando que idear algún plan para poder
una nueva, en la que se verá corresponde. Son capaces de sobrevivir.
involucrado, ¿y triunfante? n dar vueltas y vueltas, implicar Y no puede salirle mejor,
a otros, esconderse, con tal porque, advirtiendo que su
de alargar el momento de ir sobrino, Lobito, tiene un póster
Lo que yo pienso a la cama. Igual que Ana, una de El gato con botas en su
(de todo) muchachita algo traviesa, que habitación, se le ocurre que
busca la complicidad de su puede reconvertir su negocio,
Jordi Sierra i Fabra elefante de peluche, al que usa y para ello va fabricando, con
Kalandraka
112 páginas | 12 euros de escudo para no acostarse notable éxito, algunos de los
todavía. objetos propios del héroe que
Jordi Sierra i Fabra es el autor Por eso, su papá (el papá es encandilan a los chicos del
más reconocido y admirado por el manitas de la casa) tendrá entorno.
los jóvenes. Su nueva entrega, que solucionar todos y cada uno Un libro donde se delata el
Lo que yo pienso (de todo) es de los problemas que Ana, a consumismo, donde se señala
una especie de totum revolutum favor de su elefante, aduce. la pérdida de los juegos de los
escrito por un alter ego, Javier Habrá que prepararle niños, y donde se aboga por la
Pinto Trapa, que repasa su vida alguna ensalada, conseguir una imaginación y el compañerismo.
de escritor, y va dejando caer cantidad de agua apropiada La obra, destinada a chicos
apuntes de todo tipo, desde a la enorme sed del elefante, entre cinco y doce años,
los recuerdos de niño hasta localizar un cepillo de tamaño hace reflexionar sobre lo
los pensamientos de quien adecuado para los dientes del más importante, que no es
escribe sin saber dónde va, ni paquidermo, y, desde luego, precisamente poseer cosas,
el camino que debe seguir, pero solucionar el sofocante tema de sino tener amigos y disfrutar
descubriéndolos en cada paso. la caca, algo que hará sonreír una vida sencilla, como la de
La mayor parte de los textos a cualquier lector (niños bien los habitantes de ese pueblo
son breves epigramáticos, y pequeños, desde luego) del libro. próximo al bosque. n
Detroit
Llibres
FELIP PINEDA
Miradas de escritor
para adentrarse en su última novela, Las
hijas del capitán, con la que se traslada al
Nueva York de los años treinta de la mano
de tres jóvenes emigrantes malagueñas.
A través de las miradas y las vivencias de
Antonio Orejudo, Cristina López Barrio, las hermanas Arenas, el libro aborda la
María Dueñas y Javier Sierra han participado vida de la nutrida colonia española que
por entonces residía en la ciudad: sus ba-
este año en la VI edición del ciclo rrios, sus trabajos y negocios, sus afanes
cotidianos y la manera en la que mitiga-
ban la nostalgia, con espectáculos entre
N umeroso público se ha congrega- interpretación de la misma, no sólo desde los que el flamenco tenía una presencia
do en las sesiones, organizadas el ámbito académico, sino desde la pala- muy significativa.
por el Museo Carmen Thyssen bra, desde el mundo de las ideas y la ima- El ciclo lo cerró Javier Sierra, que ha-
Málaga con la colaboración de la Funda- ginación”. El Auditorio de la pinacoteca se bló sobre el cuadro La Anunciación, de
ción José Manuel Lara, en las que autores ha quedado pequeño para acoger el ciclo, Jerónimo Ezquerra. “El arte como puerta
de reconocido prestigio abordaron la rela- consolidado en la agenda cultural mala- a otros mundos” fue el título de su in-
ción entre la pintura y la literatura a partir gueña, para el que las dos instituciones tervención, en la que analizó cómo una
de las obras de la Colección permanente implicadas están trabajando ya de cara a de las funciones del arte ha sido la de
del museo malagueño. la edición del próximo año. hacer visible lo invisible. Para el gana-
La directora artística del Museo Car- La primera conferencia, “El arte de la dor del Premio Planeta en 2017, el arte y
men Thyssen Málaga, Lourdes Moreno, travesura”, corrió a cargo de Antonio Ore- su objetivo mágico se “inventaron” en
ha destacado la importancia de que reco- judo, que eligió la obra Travesuras de la la Prehistoria y sus efectos llegan hasta
nocidos escritores dirijan, una vez más, modelo de Raimundo de Madrazo y Garreta nuestros días, como demostró repasan-
su mirada hacia la Colección permanente, (1885). El autor de Los cinco y yo habló de do otros cuadros famosos de la historia
“enriqueciendo con sus aportaciones la “una obra aparentemente costumbrista de la pintura. n
T raductora y pro-
fesora de Filolo-
gía Inglesa en la
Universidad de Sevilla,
Yolanda Morató (Huelva,
—Mi primer libro era,
en realidad, una recopi-
lación de tres; había es-
crito los sesenta poemas
entre 1994 y 2004. Aun-
1976) sorprendió con su que me parezca mentira,
primer libro, Nadie ven- algunos están ya a un
drá a salvarnos (2015), y cuarto de siglo de dis-
confirma en esta segun- tancia. Así que imagino
da entrega, publicada que lo que más han cam-
por Vandalia, la fuerza biado son mis intereses
y la originalidad de su y mi acercamiento a la
voz poética. Concebido escritura, el hacha con la
como ajuste de cuentas que podo lo que escribo.
con el presente, Ahora Ahora está más afilada
es el reconocimiento de y siente mucha menos
la necesidad de encon- compasión.
trar formas de superar —¿Cuáles son sus
las pequeñas y grandes influencias y lecturas?
maldades que vivimos —Leo toda la poesía
día a día, pero también que puedo; también me
es un canto a la satis- gusta releer, en especial
facción de poder vivir. a autores a los que des-
Si en sus poemas ante- cubrí en mis años de
riores proponía Morató instituto y universidad:
una reflexión sobre los Garcilaso y Quevedo,
lazos invisibles que a T.S. Eliot y Jaime Gil de
veces nos amarran al Biedma, Felipe Benítez
pasado, Ahora es la tijera Reyes y Juan Bonilla, y
que intenta cortarlos. En a cuatro poetas que me
un momento en el que encantan: Anne Sexton,
la mal llamada autofic- Dorothy Parker, Wisława
ción está en auge, dice Szymborska y Ana Isabel
la autora, estos versos, Yolanda Morató. Conejo.
limpios, afilados y de —Alterna la poesía
singular profundidad, muestran la cara B a la vida se está perdiendo con la traducción, ¿qué le
del proceso de escritura: en el ahora, ya mucho, pero quien cante por aportan ambas facetas?
nadie es quien fue. cantar, sin ser consciente de —La traducción ofrece una
lo que implica, quizás se lleve doble vertiente: por un lado,
—Cómo surge Ahora? ¿Qué hilo conduc- un chasco cuando se dé cuen- se suele asumir ilusoriamen-
tor tiene el libro? ta de que, como todos, está te que al traductor le benefi-
—Surge de un expolio, de ver el conte- condenado a desafinar de vez cia el hecho de no tener que
nido de la casa de una anciana esparcido en cuando. erigir un texto desde cero;
entre escombros en un contenedor de —¿Hasta qué punto es au- por otro, te limitan esos sóli-
obra. Ese es el primer poema del libro y el tobiográfico? ¿Cuánto hay en dos cimientos que, por ética y
que abre paso a todo lo que viene después. la reflexión de su propia experiencia? profesionalidad, no puedes alterar y por
El hilo conductor, como indica el título, —Hay poemas que parten de expe- los que terminas reconstruyendo prácti-
es el presente. riencias personales, como “Biografía no camente todo lo demás. Pero es una labor
—¿Qué temas predominan en el poe- autorizada”, que está dedicado al con- tan exigente como satisfactoria; una es-
mario? tenedor del que hablaba y con el que pecie de vicio que nunca he sido capaz de
—Diría que el tema que predomina es me topé un día de camino al trabajo; o abandonar. En cuanto a la poesía, escribo
el reciclaje vital, la necesidad de volver a el que describe mi incapacidad para oír desde que era niña, así que supongo que
empezar una y otra vez. Quien no cante (“Risa ahogada en el silencio”) y los que más que una satisfacción es un hábito. n
EDUARDO MOGA
Whitman y la naturaleza
primigenia”, como dice en el poema 2 de Canto de mí mis-
mo. Y también con ubicuidad, porque la naturaleza está
en todas partes, habla en todas partes. La realidad natu-
ral se impone, en la poesía de Whitman, con la frescura
de su inmediatez, de su aquí y ahora, de la multitud de
formas y colores de un mundo exuberante y contradic-
torio —lo que la distingue, por ejemplo, de las román-
ticas “A una alondra”, de Shelley, y “Oda a un ruiseñor”,
de Keats, en las que predomina el ensimismamiento—,
pero convive o está impregnada de trascendencia. En Ho-
jas de hierba comparecen los paisajes de Norteamérica
—esos paisajes que vio poco, pero de los que supo por
lecturas e informaciones que se procuraba con afán—,
los bosques y cordilleras, los lagos y costas, las pra-
deras y los campos, y todos sus habitantes, desde el
trébol hasta la ballena, junto con ese otro elemen-
to propio de la modernidad literaria que es la ciudad.
Whitman incorpora la gran urbe de Nueva York a la na-
turaleza naciente y desaforada que entendía metáfora
—o correlato— del hombre nuevo llegado con la instau-
ración de una América no sujeta a las convenciones y je-
rarquías de la aristocrática Europa, libre, unida, plural y
democrática. Su incorporación de la fauna y la flora a la
literatura que escribía obedece también a un impulso con-
temporáneo: el reconocimiento de la alteridad animal, su
constatación del valor ontológico de la vida salvaje. Ese re-
conocimiento, sin embargo, no es pleno todavía; no podía
serlo. Whitman sigue subordinando el cosmos natural al
ASTROMUJOFF
L
man, inspirada por Emerson, tiene alma, como el universo
a experiencia de la naturaleza, que tiene un mismo: todo participa de un principio espiritual único, al
papel fundamental en Hojas de hierba, provie- que también se supedita el hombre. La naturaleza, como el
ne de la infancia de Walt Whitman. Nacido en universo, es fluida, cambiante: evoluciona. Pero persigue
West Hills, un caserío rural de Huntington, en un propósito: una perfección futura, que resulta coherente
el centro de Long Island (Nueva York), el futuro con la visión del progreso aceptada en su época. La fuerza
poeta experimentó desde sus primeros años el deslum- que alienta ese propósito, no obstante —y por creerlo así
bramiento y los placeres de una naturaleza agreste, cuyo recibió críticas feroces—, es sexual: el amor —su personal
protagonista era el mar. Luego se movería poco —solo hizo adhesividad— conduce a la unión, tanto de los individuos
un viaje largo por los Estados Unidos: en 1848, a Nueva como de la sociedad. La naturaleza, en fin, es divina y
Orleans, a donde había sido enviado para lanzar un nuevo benévola: “la Naturaleza continúa”, escribe Whitman en
periódico, el Daily Crescent, que le dio a conocer los vastos “Canción a la puesta de sol”, “la gloria continúa, / [...] por-
paisajes del Misisipi y, a su regreso, los Grandes Lagos y la que no veo ni una sola imperfección en el universo”. n
Bahía del Hudson—, pero aquellos paseos y excursiones
por los campos y playas de Paumanok (como él llamaba,
con el nombre algonquino, que significa “con forma de
pez”, a Long Island), en los que, “descalzo, con los pan- Para Whitman, la naturaleza,
talones arremangados”, almejeaba, y cazaba anguilas, intacta, grandiosa, palpitante,
y cogía huevos de gaviota, y que recordaría tanto en su define el Nuevo Mundo que se ha
poesía como en Días ejemplares de América, marcaron para
siempre su visión del mundo. propuesto cantar. Lejos de la condición
Para Whitman, la naturaleza, intacta, grandiosa, pal- petrificada y ornamental que advierte
pitante, define el Nuevo Mundo que se ha propuesto en laslíricas precedentes, la naturaleza
cantar. Whitman abomina de la naturaleza petrificada
y ornamental que advierte en las líricas precedentes. La ha de presentarse “sin freno, con su
naturaleza ha de presentarse “sin freno, con su energía energía primigenia”
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