Caso Texaco - Medio Ambiente

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UNIVERSIDAD NACIONAL

” PEDRO RUIZ GALLO”


Facultad de Ingeniería Civil, Sistemas y Arquitectura

TEMA:
 Caso Texaco Ecuador
CURSO:
 Medio Ambiente
ALUMNOS:
 Cornejo Effio, Luis Fernando
 Liza Reque, Alex Omar
DOCENTE:
 Cueva Campos, Hamilton Vladimir
CICLO:
 2020 - I

Lambayeque, octubre de 2020


1. Antecedentes

En 1964, el Estado ecuatoriano entregó en concesión aproximadamente 1’500.000 de ha


al consorcio Texaco-Gulf para la exploración y explotación petrolera en la Amazonía
Ecuatoriana. En el primer trimestre del año 1967, se inició la etapa de producción en el
campo Lago Agrio. Luego de varias modificaciones contractuales y cambios en el sistema
jurídico hidrocarburífero, el 4 de agosto de 1973 el Estado suscribió un nuevo contrato
con la petrolera limitando el área de concesión a 491.355 ha. A esta fecha, la petrolera
Texaco había perforado más de doscientos pozos y construido la mayor parte de la
infraestructura petrolera existente en la zona, incluido el Oleoducto trans-ecuatoriano
desde la Amazonía hasta la Costa del Ecuador.

En los treinta años de explotación petrolera a cargo de Texaco, se utilizaron tecnologías


obsoletas y altamente contaminantes. Se destacan la construcción de piscinas sin
recubrimientos, el vertimiento de las aguas de formación a las fuentes de agua naturales,
el regado de petróleo crudo en las carreteras para evitar el polvo, la quema incompleta
del gas y el ocultamiento de los derrames en vez de limpiarlos.

Esta situación es aún más grave si se toma en cuenta que esta empresa entre 1971 y 1974
había obtenido patentes en EUA sobre mejoras tecnológicas para la reinyección de las
aguas de formación; lo que evidencia que teniendo la capacidad de evitar daños
ambientales no tuvieron la voluntad de hacerlo generando problemas ambientales en la
zona de explotación a su cargo.

Los efectos locales de las actividades petroleras son desastrosos. La explotación petrolera
en el norte de la Amazonía ecuatoriana es responsable de la deforestación de 2’000.000
de ha. Más de 650.000 barriles de crudo han sido derramados en bosques, ríos y esteros.

Sustancias tóxicas producto de la explotación petrolera, así como metales pesados


provenientes de las aguas de formación, han contaminado las fuentes de agua de la
región. Varias etnias indígenas, como los cofanes, sionas, secoyas, kichwas y waoranis han
sido afectadas hasta convertirse, en algunos casos, en minorías en peligro de desaparición
y dos nacionalidades indígenas (tetetes y sansahuaris) fueron borradas de la faz de la
tierra.

Concomitante al proceso de contaminación ambiental se produjeron serias violaciones a


los derechos humanos de la población que vivía en el área de explotación. Entre los
principales tenemos:
 Violencia sexual: De los estudios realizados y que constan en el informe pericial global
solicitado por la Corte Superior de Justicia de Nueva Loja (hoy Corte Provincial de
Justicia de Sucumbíos), al ingeniero Richard Cabrera, quien en base a la prueba
existente y a investigaciones realizadas por un equipo de científicos internacionales,
menciona que uno de cada veinte entrevistados durante el proceso de investigación y
levantamiento de datos dice tener conocimiento de que se cometieron abusos
sexuales tanto a mujeres adultas como a menores de dieciocho años.
 Discriminación: De las entrevistas llevadas a cabo, aproximadamente el 50% de los
encuestados afirma haber sido víctima de conductas hostiles por parte de trabajadores
de Texaco Petróleum Company (Texpet). Principalmente los indígenas reportan haber
sufrido discriminación consistente en conductas engañosas, aprovechamiento de las
comunidades, burlas sobre sus vestimentas y manifestaciones culturales.
 Pérdida de tierra: Un 74,1% de entrevistados señalaron haber perdido tierras como
consecuencia de la contaminación o la explotación petrolera. La afectación fue mayor
en las comunidades indígenas sometidas a las pérdidas de territorios y contaminación
de tierra y agua.
 Desplazamiento forzado: El impacto negativo de la explotación petrolera en tierra o
ríos, el ruido, la contaminación, la incompatibilidad de la agricultura con el petróleo,
enfermedades graves, destrucción de propiedades, accidentes, violencia y problemas
legales ocasionaron desplazamientos de asentamientos en las zonas en las que operó
Texaco. Los grupos indígenas fueron mucho más propensos a migrar que los mestizos.
 Impacto cultural y cohesión comunitaria. Proceso de aculturación que buscaba la
implantación de referentes y prácticas culturales occidentales, tales como el dinero, el
alcohol y hasta el idioma español. Violencia, inseguridad, discriminación, conducta
hostil.

2. Demanda en EEUU

El litigio contra la compañía Texaco se planteó inicialmente en la ciudad de Nueva York,


EEUU, el día 3 de noviembre de 1993; por parte de representantes de aproximadamente
treinta mil ecuatorianos entre indígenas y colonos, afectados por las actividades
operativas de Texaco. Los demandantes esperaban que los tribunales estadounidenses,
debido a su amplia experiencia en juicios de contaminación ambiental, aceptaran dar
trámite a este caso.
Los demandantes confiaban que sus derechos podían ser amparados bajo la jurisdicción
estadounidense debido entre otros argumentos a que:

 En 1993, la empresa Texaco ya no operaba en el Ecuador.

 Todos los bienes de la empresa Texaco se encontraban domiciliados en EEUU.

 Las principales decisiones con respecto a la operación de la Compañía se tomaron


desde EEUU.

Sin embargo, el 16 de agosto de 2002, la Corte de Apelaciones del Distrito Sur de Nueva
York, luego de nueve años de batalla legal en EUA, resolvió:

 Que los demandantes tenían derecho a un juicio, por lo que dispuso que Texaco
debía someterse a la justicia ecuatoriana y cumplir con cualquiera sentencia en su
contra, argumentando que este era un foro más adecuado para este caso en
razón de que en el Ecuador se encontraban los documentos, testigos y demás
evidencia.

 Concedió el plazo de un año para que los demandantes hagan efectivas sus
acciones legales ante el tribunal ecuatoriano, durante el cual dispuso que Texaco
no podía alegar prescripción extintiva de acciones.

 La sentencia que dictare la justicia ecuatoriana será ejecutable ante la justicia


norteamericana.

3. Demanda ante tribunales locales

El 7 de mayo de 2003, se iniciaron las acciones legales contra la petrolera en la Corte


Superior de Justicia (actual Corte Provincial) de Sucumbíos. Los fundamentos legales de la
demanda se sustentan en el Código Civil ecuatoriano que concede acción popular “en
todos los casos de daño contingente que por imprudencia o negligencia de alguno
amenace a personas indeterminadas” y, en la Ley Orgánica de Gestión Ambiental que
determina el procedimiento a seguir en los litigios de carácter ambiental.

La demanda alega que Texaco provocó daños al medio ambiente por la utilización de
tecnología obsoleta y prácticas contaminantes, violando la ley ecuatoriana, que
demandaba evitar los daños al ecosistema y la utilización de tecnología moderna y
eficiente. La compañía argumenta que estos eran los métodos utilizados por la industria
petrolera, pese a que la legislación de Texas desde 1919 y de Louisiana desde 1953,
prohibían la contaminación de las fuentes de agua dulce.

El objetivo de la demanda es lograr que la empresa asuma los costos de la reparación


integral del daño ambiental causado. Entre otras cosas se espera que la Texaco limpie y
descontamine el suelo, el agua superficial y subterránea que contiene hidrocarburos, que
se implementen sistemas de agua, salud, de recuperación de la vida tradicional de los
pueblos indígenas, etcétera.

4. Argumentos de la demanda

4.1. Incumplimiento de obligaciones legales:

En el desarrollo del proceso legal en la Corte de Justicia de Sucumbíos, se ha


demostrado el incumplimiento por parte de la empresa Texaco de las siguientes
obligaciones, entre otras:

 Ley de Yacimientos (1921). Derecho de uso de aguas para fines de


explotación y en la cantidad necesaria.

 Ley de Hidrocarburos (1971, 1974 y 1978). Obliga a los contratistas a


“Emplear maquinaria moderna y eficiente, adoptar las medidas necesarias
para la protección de la flora, fauna y demás recursos naturales, [...] evitar la
contaminación de las aguas, de la atmósfera y de las tierras”. Texaco no
adoptó ninguna medida de protección de la flora y fauna, del área de
concesión, a cambio plantó árboles en una avenida de la ciudad de Quito.

 Ley de Aguas (1972). Prohíbe “toda contaminación de las aguas que afecte la
salud humana o el desarrollo de la flora y de la fauna”.

 Contrato Texaco-gobierno (1964 y 1973) “Los contratistas adoptarán las


medidas convenientes para la protección de la flora, fauna y demás recursos
naturales, así como también evitarán la contaminación de las aguas, de la
atmósfera y de la tierra”.

 Ley para la Preservación y Control de la Contaminación Ambiental (1976).

4.2. El derecho de los actores para demandar

El Estado ecuatoriano suscribió, el 4 de mayo de 1995, un contrato de remediación


ambiental con Texaco, el cual sirvió de base para que el 30 de septiembre de 1998,
liberara a Texaco de toda responsabilidad ambiental, luego del presunto
cumplimiento de dicho contrato. El Estado ecuatoriano hizo la liberación expresando
con total claridad que quedaban a salvo derechos de terceros, y así lo han reconocido
todas las Cortes de EUA donde Chevron ha intentado extender la liberación de
responsabilidades inclusive a reclamos de terceros. Además, no existe ningún
concepto jurídico válido que permita a gobierno alguno negociar, disponer ni
renunciar a los derechos fundamentales de sus ciudadanos, como son el derecho a
vivir en un medio ambiente sano, y el derecho de acción y petición. El litigio fue
planteado por ciudadanos particulares del Ecua dor, que no formaron parte de ese
contrato de liberación de responsabilidades y quienes no están limitados por él en el
uso de sus derechos. El Estado ecuatoriano no es parte procesal, bajo la Ley del
Ecuador y la Constitución.

4.3. El daño fue causado por las operaciones de Texaco

Revisando todos los contratos que existieron, se comprueba que la única operadora
del área concesionada fue la empresa Texaco, en ningún momento ni Gulf ni CEPE,
operaron el área. Fue Texaco la empresa responsable de todas las operaciones del
consorcio, por lo que le correspondió decidir qué técnicas implementar para extraer
el petróleo. Los pasivos ambientales fueron generados por Texaco con una clara
intención de reducir sus gastos, e incrementar sus ganancias económicas; el daño
producido no es consecuencia de un accidente, es parte inherente del diseño y
ejecución de las operaciones de Texaco.

4.4. La remediación ambiental no cumplió con su objetivo

El contrato de remediación ambiental está viciado de enormes errores que


benefician a Texaco y perjudicaron al Estado ecuatoriano, y sobre todo a la población
que habita en la Amazonía ecuatoriana. Las escasas tierras presuntamente limpiadas
por Texaco siguen dramáticamente contaminadas, según la prueba y evidencias que
existen en la corte.

4.5. Sí existían disposiciones ambientales vigentes en la época de


operación

Más allá de su deber bajo la ley de no causar daño en sus operaciones, existían
diversos cuerpos legales que prohibían la contaminación ambiental, además del
contrato de operación, el cual disponía que debieran utilizar la mejor tecnología
disponible.

4.6. Uso de prácticas operacionales en forma discriminatoria

Para extraer el crudo en el Ecuador, Texaco implementó técnicas distintas a las que
utilizaba en otros lugares del mundo donde operaba. Posiblemente esta aplicación de
técnicas baratas tenía dos objetivos:

 Disminuir los gastos de la empresa, aumentando así las ganancias

 Desconocer los derechos y existencia de los pueblos amazónicos.

Los técnicos de la misma empresa habían participado en la redacción de un libro que


ilustraba e instruía a las empresas petroleras sobre la forma cómo operar y extraer
hidrocarburos sin contaminar el ambiente, pero esas técnicas jamás fueron puestas
en práctica en el Ecuador por parte de Texaco.

4.7. Existencia de tóxicos en el suelo y agua

El hecho de haber utilizado una técnica inadecuada, ha provocado que parte de los
suelos y aguas de la Amazonía ecuatoriana estén contaminados con hidrocarburos. El
haber arrojado el 100% del agua de formación a las fuentes naturales de agua ha
provocado la contaminación permanente del agua, tanto superficial como
subterránea. Dentro del proceso judicial existen más de ochenta mil resultados de
análisis químicos, de distintos expertos y laboratorios y en su gran mayoría se detecta
la existencia de productos tóxicos, tanto en el suelo como en el agua, los cuales
continúan afectando el medio ambiente.

4.8. Prueba del daño ambiental

Dentro del proceso judicial existen varios tipos de prueba sobre la existencia del daño
ambiental, la responsabilidad que tiene la petrolera demandada sobre la misma, los
mecanismos de reparación del daño y el costo que deberá ser invertido para reparar
el daño en lo que es posible. Uno de los componentes más fuertes de la prueba
consiste en el cuerpo de resultados químicos. Hasta ahora existen aproximadamente
ochenta mil, resultados de miles de muestras de suelo, agua superficial, agua
subterránea y sedimentos que se han tomado en el área. Estas muestras fueron
tomadas en distintos sitios inspeccionados, muchos de ellos por el mismo Juez de la
causa y sus expertos.

5. Otras pruebas parte del proceso


Junto a la prueba química existen otras investigaciones científicas, testimonios y
documentos que deben ser considerados por el Juzgador para emitir su fallo en el
presente litigio.

En este sentido, se han incorporado al proceso siete estudios de impacto ambiental:

5.1. Unión de Promotores Populares de Salud de la Amazonía


Ecuatoriana (UPPSAE) 1993:

Estudio realizado sobre 1.465 personas cuyos principales resultados fueron:

 En las comunidades de la Región Amazónica donde hay contaminación de


petróleo la población infantil tiene niveles de desnutrición importantes (43%)
frente a la población que habita lejos de la actividad petrolera (21,5%), y hay una
mortalidad infantil de un 143 / 1.000 nacido.

 Las mujeres que beben agua a menos de 200 m de las instalaciones petroleras
tienen 147% más de abortos que aquellas que habitan donde no hay
contaminación.

 La mortalidad general es el doble en las comunidades donde hay actividad


petrolera y que las causas más frecuentes son cáncer, violencia y accidentes.
 La anemia estaba presente en un niño de cada tres, pero que en adultos era en
uno de cada dos, y que era más frecuente en hombres mayores de treinta años y
que trabajaban en actividades de limpieza de crudo.

 La población que había trabajado limpiando crudo tenía más de un 70% de


problemas de piel, pero en aquellos que trabajaban más de un mes en la limpieza
de crudo comenzaban a tener problemas neurológicos, intoxicaciones
respiratorias, molestias digestivas, articulares y malestar general.

5.2. Estudio Jochnick-1994.

Este estudio realizado sobre treinta y dos muestras de agua demostró que las
concentraciones de hidrocarburos policíclicos aromáticos (HPA) en agua potable de la
zona estaban incrementadas varias veces por encima de los niveles permitidos por la
Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA). Estas cifras incluían los
análisis de agua lluvia recogida en los tanques de agua de la población.

5.3. Estudio San Sebastián-2005.

Este estudio realizado sobre quinientas personas confirmaba que la presencia de


abortos y cáncer era significativamente superior en comunidades expuestas a la
contaminación petrolera que aquéllas que vivían a distancia de esta actividad. Los
abortos eran un 150% más frecuentes y el cáncer 130% más frecuente, con un riesgo
de mortalidad de 260% más alto que en la ciudad de Quito.

5.4. Estudio Maldonado-Narváez-2003.

Realizado sobre 1.520 personas y 342 visitas a instalaciones petroleras determinó


que:

 El 100% de las personas que viven cerca de las estaciones de petróleo refieren
estar sufriendo problemas por la contaminación, proveniente en el 57% de las
piscinas de petróleo o de aguas de formación, 56% de los pozos y 42% de la
quema de gas en los mecheros.

 La contaminación es permanente, creciente y acumulativa. Las instalaciones


petroleras están en territorios que fueron indígenas.

 La actividad petrolera afecta las bases de la subsistencia campesina e indígena. El


94% de la población encuestada ha sufrido pérdidas de animales.

 Los animales mueren tras beber agua con crudo, caer a las piscinas o asfixiados
por el gas. Sin embargo, un porcentaje de la población consume estos animales
muertos, los venden o los regalan para ser consumidos.

 Las poblaciones indígenas perdieron la cacería. Los animales silvestres son


especialmente sensibles a la contaminación, al ruido y a la deforestación.

 Igualmente se afectan los cultivos. La media es de 2,6 ha dañadas por cada


familia. Esto va a generar desnutrición debido a la pérdida de productividad de la
tierra.

 El 82,4% de la población se ha enfermado en alguna ocasión por la contaminación.


5.5. Informe Yana Curi.

Este estudio demostró que existe un elevado riesgo en la salud de animales y


poblaciones humanas al estar expuestos a los diferentes tóxicos producidos por la
actividad petrolera. Estos graves efectos como el cáncer, abortos espontáneos y
problemas de salud reproductiva constituyen un problema de salud pública. Encontró
además una tasa de abortos espontáneos 2,5 veces más alta en comunidades de la
Amazonía ecuatoriana que están expuestas a contaminación petrolera que en
comunidades similares que no lo están. En el estudio se investigaron otros factores
como edad en el embarazo, orden del embarazo y estado socioeconómico,
determinándose la contaminación como la única diferencia significativa entre las
comunidades.

5.6. Estudio de Miguel San Sebastián y Anna-Karin Hurtig.

Los científicos determinaron incidencias de leucemia en cuatro provincias de la


Amazonía ecuatoriana, algunas en zonas de explotación petrolera y otras en áreas
libre de explotación. Ellos encontraron tasas de leucemia en niños de cero a cuatro
años de edad que viven en zonas de explotación petrolera, tres veces más altas que
en otras partes del país. Estos mismos científicos publicaron un artículo en el
“Internacional Journal of Epidemiology” en el cual establecen la existencia de cáncer
en residentes que viven cerca de pozos petroleros 150% más alta que en residentes
en zonas sin actividades petroleras. En su investigación, San Sebastián y Hurtig
estudiaron personas que vivían cerca de las actividades petroleras por al menos
veinte años. El estudio concluyó que hay una importante relación entre incidencias
de cáncer y proximidad a pozos petroleros.

5.7. Informe cáncer en la Amazonía del Ecuador (1985-1998).

Determina que las poblaciones que viven en cantones con explotación petrolera
tuvieron un mayor riesgo de padecer cáncer que aquéllos que viven en cantones
donde no existe. La creación del registro nacional de tumores en 1984, delata un
incremento progresivo de casos nuevos de cáncer de los residentes de las provincias
de Napo y Sucumbíos. Según la localización del cáncer y el período de diagnóstico, en
las dos provincias, se registra mayor incidencia de cáncer de cuello de útero,
estómago, sistema hematopoyético y retículo endotelial, cuello uterino, piel y
ganglios linfáticos.

6. Conclusiones
Revisando la historia de Texaco, hoy Chevron en el Ecuador, es evidente que la petrolera
es la responsable de un proceso continuo, prologando y grave de violación de los
derechos ambientales que comprometieron además derechos fundamentales de miles de
personas que vivían en las zonas de explotación concesionadas. Entre los actos más
sobresalientes constan:

 Desplazamiento de los pueblos indígenas que ancestralmente ocupaban sus territorios.

 Afectación a la cultura y tradiciones de los pueblos indígenas.

 Introducción de enfermedades entre las comunidades indígenas.


 Vertimiento de desechos tóxicos al ambiente, lo que ha provocado una grave
afectación al derecho a la vida, salud, educación, paz y desarrollo económico de los
pobladores.

 Afectación a los servicios básicos elementales de los pobladores.

 Desinformación a los pobladores de la Amazonía sobre los componentes tóxicos que


utilizaron y sus efectos en la salud humana.

 Dilatación innecesaria del proceso judicial y con ellos denegación al derecho a la


justicia de más de treinta mil seres humanos.

 Afectación a la honra y reputación de los ciudadanos de la Amazonía ecuatoriana.

 Abuso indiscriminado de su poder económico e influencias políticas para tratar de


evitar que se aplique el debido proceso y por ende lograr la impunidad ante el daño
causado.

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