Calles y Barrios de Guadalajara
Calles y Barrios de Guadalajara
Calles y Barrios de Guadalajara
Barrios
Barrio de Analco
El Barrio de Analco es el barrio más antiguo de Guadalajara, cuyo nombre significa "al otro lado del río", ya que
precisamente lo separaba de la ciudad el Río de San Juan de Dios.
Analco fue originalmente un pueblo de indios que nació al igual que Guadalajara en el Valle de Atemajac en
1542. Este asentamiento fue hecho con el fin de congregar a los indios que andaban dispersos y ayudar a
formar la ciudad de Guadalajara.
En este lugar, Fray Antonio de Segovia construyó el Convento Franciscano de Analco, lugar en donde se edifica
la Parroquia de San José de Analco.
Barrio de Mexicaltzingo
El barrio de Mexicaltzingo fue fundado entre el 14 y 16 de Febrero de 1542, por indios traídos del Valle de
México por el Virrey Antonio Mendoza, esto debido a que se intentaba combatir la rebelión cazcana del Mixtón
con ayuda de dichos indígenas. No obstante, después de ganar la guerra, quisieron quedarse y formaron una
nueva población, a la que se le dio el título de “San Juan de Mexicaltzingo". Mexicaltzingo sólo tenía una
pequeña ermita o capilla de adobe y zacate, con una plazuela frontal para los tianguis. El pueblo de
Mexicaltzingo fue un lugar independiente de la ciudad de Guadalajara hasta 1667; sin embargo, fue hasta 1821
cuando se le declaró oficialmente barrio de la ciudad.
Barrio de Mezquitán
Antes de que fuera fundada la ciudad de Guadalajara, el pueblo de Mezquitán ya existía y pertenecía a Tonalá.
Su población original prácticamente desapareció a raíz de la conquista, se volvió a poblar dándole tierra en
comunidad a los indios para servicio y usufructo de los encomenderos.
En 1645 se comenzó a edificar el templo de San Miguel de Mezquitán. A mediados del siglo XIX , era tanta la
pobreza en la que habían caído los vecinos de Mezquitán, que hasta la iglesia estaba casi en ruinas. Más tarde,
durante las guerras presentadas en la región, el templo fue semidestruido, quedando casi en las ruinas.
El barrio de Mezquitán se extendía, desde la calle de Jesús García donde iniciaba el puente de Mezquitán, hasta
Atemajac del Valle.
En Mayo de 1726, según distintos historiadores, se levantó el templo Santa Veracruz tal y como se conoce hoy
en día.
El barrio de San Juan de Dios alberga grandes joyas de arquitectura como lo es el Instituto Cabañas y lugares
folclóricos como el Mercado Libertad y la Plaza del Mariachi.
Barrio de Santuario
El núcleo de este barrio fue el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, el cual se comenzó a construir el 7
de Enero de 1777. Este Santuario, que es el más significativo de la ciudad, fue fundado por el obispo Fray
Antonio Alcalde en el año de 1781.
A los alrededores del Santuario, fueron construidas y equipadas las famosas "cuadritas" que eran vivienda para
familias pobres.
En el siglo pasado, el ritmo de expansión de este barrio se mantuvo, pero en el último tercio de este siglo se
quiso convertir en una zona residencial, por lo que comenzaron a levantarse casas muy suntuosas para ricos
hacendados, familias ricas, etc., en la parte que se conoce como Santa Mónica, Pedro Loza, Alcalde, Reforma,
Garibaldi y Angulo, entre otras. A pesar de esto, el barrio mantuvo su carácter predominante de clase media.
La gran fiesta anual de este barrio se celebra el 12 de Diciembre, en honor a la Virgen de Guadalupe, patrona
del templo principal del barrio.
En el atrio de dicho Santuario había un cementerio llamado de Guadalupe, el cual estaba a servicio de la
comunidad, especialmente para aquellos de bajos recursos en la época colonial.
Al jardín del santuario se le llamó Hidalgo, porque frente a la iglesia existió una estatua del Padre de la Patria,
figura que tenía una mano hacia arriba y en la otra portaba un estandarte guadalupano; era de barro y al paso
del tiempo unos jóvenes la destruyeron a pedradas.
La Orden del Carmen se instaló en un enorme terreno que les fue donado y que abarcaba desde el actual jardín
del Carmen hasta la avenida Enrique Díaz de León.
Las obras terminaron en 1758, todos los testimonios históricos referente al convento e iglesia están de acuerdo
en la hermosura y riqueza que llegó a poseer el Carmen de Guadalajara; éste era el centro religioso preferido
de las familias más aristocráticas las cuales se comenzaron a instalar a los alrededores de dicho convento y
daban grandes donaciones a la Orden del Carmen.
El 27 de Octubre de 1860, los liberales sitiaron la ciudad y durante dos días cañonearon el Carmen, Santo
Domingo y San Francisco. Ni el Carmen ni Santo Domingo, lograron recuperarse al 100%, ya que su mayoría
fue destruida quedando así parte del convento y la capilla de la iglesia (actual templo del Carmen); de Santo
Domingo no queda nada.
Lo que quedó de pie del Carmen se utilizó por muchos años como cuartel. Cuando se abrió la avenida Juárez en
la gobernatura de Jesús González Gallo, lo que había sido una suntuosa y rica iglesia quedó convertida en un
llano.
En 1912 Guadalajara fue testigo de una larga serie de sismos que lastimaron aún más las ruinas del Convento
del Carmen.
El Pilar fue un barrio principalmente de españoles y su fiesta religiosa era del 12 de Octubre, donde era
homenajeado a través de música, fuegos artificiales y trajes típicos de España.
Su templo se reconstruyó y amplió en el 6 de Octubre de 1882. Hoy, el templo del Carmen es uno de los más
codiciados por los tapatíos para contraer nupcias, bautismos, confirmaciones y comuniones; tiene como vecino
al ex Convento del Carmen.
Este barrio se caracterizó por su tranquilidad y su ambiente familiar. Durante el último tercio del siglo XIX se
fue extendiendo hasta llegar al poniente de la avenida Enrique Díaz de León y el 15 de Agosto de 1895, se
colocó la primera piedra del templo Expiatorio.
Desde las ordenanzas de Felipe II se había dicho que las industrias contaminantes debían estar río abajo, es
por ello que las actividades principales del barrio han sido las tenerías o curtidurías.
Actualmente, se conserva la calle "La leña", llamada así por que de ahí entraban los arrieros con leña y
además, es de trascendencia histórica porque en esa calle y la de Hospital fue donde mataron al siempre bien
recordado padre Galván en la época cristera, cuya canonización sigue en proceso.
Calles
Av. Américas
En un plano hecho en 1908, aparece esta arteria con el nombre de “México”. Iniciaba en lo que fueron los
tanques de agua del poniente y se desplazaba hacia el norte, hasta las bardas de la antigua Hacienda Leal en la
calle Juan Manuel o Camino de Tepic, donde terminaba. En varios planos publicados en 1910 se omite y vuelve
a aparecer con el mismo nombre de “México” en los planos de 1912.
Para 1920 dicha artería tomó el nombre de “Unión”, ésta estaba todavía cerrada en Juan Manuel hacia el norte,
pero prolongada al sur hasta la avenida del Bosque (hoy José Guadalupe Zuno), terminando donde estaba el
antiguo campo deportivo Guadalajara.
Por iniciativa del Ingeniero Arnulfo Villaseñor en 1927, el entonces gobernador José Gpe. Zuno, la prolongó
hasta el cruce del camino de Los Colomos y se le dio el nombre oficial de Calzada Reforma, pero la gente le
siguió llamando Avenida Unión Norte. La anchura original era de 25 metros en la parte sur y 30 en la sección
norte.
En 1958, el Club Rotario sugirió que se le cambiara el nombre por el de Avenida de las Américas. Esta petición
se debió a que los Clubes Rotarios del continente habían donado bustos broncíneos de personalidades de su
país para ser colocados en los camellones centrales de Avenida México a Circunvalación.
Av. Chapultepec
Nació con el nombre de Lafayette, el cual se mantuvo por muchos años en boca de los tapatíos, después
cambió de nomenclatura a Chapultepec.
En 1948, durante el gobierno de Jesús González Gallo se efectúa la urbanización de la colonia, así como la
construcción de la avenida, costando todo el conjunto cuatro millones y medio; la avenida es obra del
Arquitecto Julio de la Peña.
Nace en la confluencia de Av. México y termina en la Av. Washington; en toda su trayectoria alberga una gran
cantidad de monumentos de excelente hechura.
El gran atractivo de esta avenida son sus fuentes. La idea original era colocar 22 fuentes en once cruceros, en
el extremo norte entre Av. Chapultepec y Av. México una gran fuente y en el extremo sur, un espejo de agua
de la Av. Niños Héroes a Vidrio, que reflejaría al monumento de la Madre Patria; sin embargo, a falta de
presupuesto se redujo a sólo ocho fuentes y el espejo de agua quedó en el olvido.
Av. Juárez-Vallarta
A mitad del Siglo XX el Lic. Jesús González Gallo tuvo la visión, el coraje y la habilidad para realizar la
ampliación de la Avenida Juárez, partiendo en dos el centro de la ciudad. Además, se logró que el costo de los
trabajos y el importe de las indemnizaciones fueran cubiertos por los dueños de las fincas ubicadas en la zona,
a través de un pago extra denominado plusvalía.
La Avenida Juárez-Vallarta es una de las más tradicionales y hermosas de Guadalajara, recorrer esta avenida
realmente se convierte en uno de los paseos más recomendables de la ciudad. La belleza de esta avenida
radica, no sólo en sus amplios espacios arbolados, sino también en la belleza de sus construcciones que
muestran lo histórico y lo moderno de esta gran urbe.
Este recorrido inicia en la Plaza Universidad del Centro Histórico en el que se pueden apreciar construcciones de
los siglos XVII y XVII, continúa por la zona de Chapultepec en donde son típicas las casonas del siglo XIX y
principios del XX, y termina en la zona de la Fuente Minerva rodeada de construcciones modernas.
Esta calle comienza en la Calzada Independencia, teniendo por vecino en el norte al Parque Morelos y en el sur
las tradicionales neverías, que han acompañado a los tapatíos por muchos años.
En la esquina de Santa Mónica y Juan Manuel está una casa de cantera donde vivió Don Juan Manuel Caballero,
considerada por muchos años como la mejor finca particular de esta ciudad (hoy la parte inferior son locales
comerciales). El señor Caballero vino de España en la segunda mitad del siglo XVIII, fue comerciante, político,
prior del Gran Consulado de Guadalajara e intervino en la construcción del actual convento franciscano de
Zapopan. Cuando falleció en Marzo de 1837, dejó toda su fortuna para obras benéficas en esta ciudad tapatía.
Por su generosidad y filantropía esta calle lleva su nombre.
Calzada independencia
Lo que ahora se conoce como la Calzada Independencia fue en algún momento el extenso río San Juan de Dios,
que nacía en los manantiales del parque Agua Azul y cuyos cauces naturales llegaban hasta la barranca de
Huentitán, para convertirse en afluente del río Santiago. Las mujeres acudían a la orilla del río para lavar la
ropa de la familia.
En 1910, cuando Guadalajara tenía alrededor de 120 mil habitantes que se desplazaban por el sistema de
tranvías eléctricos, el gobernador del estado, Miguel Ahumada, propuso entubar el río San Juan de Dios y
formalizar un paseo que honraría con su nombre al presidente Porfirio Díaz.
El río fue embovedado desde el puente de Medrano hasta la terminación de la Alameda, aunque seguía
descubierto en los manantiales del Agua Azul hasta la calle de Medrano.
Fue en 1933 cuando el regidor tapatío Cosme Sáinz anunció la finalización de las obras de construcción del arco
de la revolución que se ubicaba al inicio de la Calzada y servía para marcar la entrada al parque Agua Azul.
Además se construirían los camellones, arboledas y se instalaría el alumbrado.