Valores y Principios de Enfermería
Valores y Principios de Enfermería
Valores y Principios de Enfermería
TRAMO 2 OPSP
INTRODUCCIÓN
La Moral.
Valores.
Los valores son aquellos principios, virtudes o cualidades que caracterizan a una
persona, una acción o un objeto que se consideran típicamente positivos o de gran
importancia por un grupo social.
Principios.
Los principios son reglas o normas que orientan la acción de un ser humano
cambiando las facultades espirituales racionales. Se trata de normas de carácter
general y universal, como, por ejemplo: amar al prójimo, no mentir, respetar la vida
de las demás personas. Los principios morales también se llaman máximas o
precepto constitucional.
La moralidad comprende las normas morales y los actos relacionados con ellas.
Al conjunto de las normas morales se le llama moralidad objetiva porque esas
normas existen independientemente de que un sujeto quiera acatarlas o no. Los
actos mediante los cuales el hombre acata o infringe la norma moral constituyen la
moralidad subjetiva, porque únicamente los realiza un sujeto humano.
MORALIDAD. Al obrar el hombre siempre se mueve por fines. Todo el que hace
algo lo hace con un fin, a menos que este distraído o no controle su razón, como es
el caso del demente, el furioso, el que se encuentra bajo el efecto de una droga u
otros casos similares. Fin es aquello que se pretende lograr por sí mismo, y medio
es lo que se emplea para obtener el fin. Es frecuente que nuestros actos se
produzcan en una serie de medios y fines: el último de estos, en cierto modo, es un
fin último, pero de esa serie. En este caso, toda la serie se convierte en medio para
emprender otra serie, que también tendrá su meta o último. Todo individuo mira a
un objetivo final que le está dando sentido a su vida. Conciencia Psicológica y
conciencia Moral; esta última presupone la primera. Cuando decimos que alguien
está consciente o no de lo que hace, nos referimos a la conciencia psicológica. Esta
consiste en darnos cuenta de lo que hacemos y su función es solo contemplar sin
dar alguna opinión al respecto. La conciencia moral puede valorar y ordenar. La
conciencia moral opina y aprueba o reprueba, opina y ordena que se continúen o
se interrumpan. Es un juicio de valor, al cual llegamos en base al conocimiento que
tenemos. CONCIENCIA.
La moral existe como norma y la norma es la costumbre hecha consciente; la
actitud de las personas con respecto a las costumbres y tradiciones, que de hecho
son normas morales, se llama moralidad y permite al ser humano hacer y modificar
con su actividad la norma moral. La moral se relaciona con el concepto de lo bueno
y lo malo, de lo que se debe o no se debe hacer. Este concepto está muy ligado a
las costumbres, lo que permite deducir que la moral no es una (permanente), sino
muchas (variable). En otras palabras, dado que la costumbre es cambiante, la moral
también lo es. Como dice Malherbe, las morales son relativas a las sociedades y a
las épocas que las estructuran, las cuales son múltiples. En cambio, la ética, que es
la exigencia maestra del ser humano en cuanto tal, es única. Dos ejemplos: la
antropofagia era costumbre corriente entre los caníbales y el aborto es aceptado en
algunos países; ambos actos eran lícitos moralmente para quienes los ejecutaban,
porque la costumbre así lo imponía, pero eran susceptibles de cuestionamiento
ético.
Dilema Ético.
La palabra dilema expresa un punto de decisión, donde hay que elegir entre dos
cosas. Un dilema es una elección entre dos alternativas desagradables y que
plantean problemas éticos. Un Dilema se define como aquella situación que refleja
posiciones y/o argumentos en conflicto que presenta más de dos alternativas de
solución que pueden ser o no satisfactorias Estamos frente a un verdadero dilema
ético cuando no se está seguro de lo que corresponde hacer y no resulta claro
separar lo correcto de lo incorrecto. Es una situación en la que el individuo se
encuentra, ante una verdadera e inevitable situación conflictiva, en la cual se
pueden presentar muchos cuestionamientos que inviten a reflexionar, a argumentar
moralmente y hacer un análisis antes de tomar una decisión. Según Banks, (2005:
1011). Un dilema ético supone «una situación de toma de decisiones que conlleva
una difícil elección entre dos alternativas igualmente no deseables y en la que no
está claro qué elección es la correcta» Los profesionales de enfermería que prestan
sus cuidados se enfrentan a dilemas casi todos los días: tantos, de hecho, que sería
imposible exponerlos aquí completamente. Pero muchos dilemas que se
experimentan con frecuencia implican confidencialidad, derechos del paciente y
aspectos del fallecimiento y la muerte. El profesional de enfermería debe usar guías
éticas y legales para tomar decisiones sobre las acciones morales cuando presta
asistencia en estas situaciones y en otras. Por ejemplo, el derecho a la intimidad y
la confidencialidad crean un dilema cuando entran en conflicto con el derecho del
profesional de enfermería a la información que pueda afectar a la seguridad
personal. Esto puede ocurrir cuando el profesional de enfermería no conoce el
estado del paciente respecto al VIH. La ley exige, en la mayoría de los casos, que
puedan darse los resultados de la prueba del VIH a otra persona sólo si el paciente
da su consentimiento escrito para liberar tal información.
Dilema hipotético
Este tipo de dilema ético se refiere a una situación que es muy poco probable
que suceda en la vida real. No representan eventos imposibles, pero sí representan
circunstancias en la que la decisión tomada es imperativa; por ello, son el tipo de
dilema ideal para un experimento. Al ser hipotéticos, no es necesario que la persona
a quien se le plantea el dilema sea la protagonista de este, ya que se le puede
preguntar lo que según ella debería hacer el personaje.
Dilemas completos
Son dilemas en los que al ser planteados, le son dichas a la persona a la que se
le plantea todas las consecuencias de las acciones que puede tomar el protagonista
del dilema.
Dilemas incompletos
Este tipo de dilema ético es lo opuesto al tipo anterior; las consecuencias de las
acciones no son explícitas, y por ende la solución depende de la habilidad de la
persona para imaginar ventajas y desventajas para valorarlas.