Dossier Frankenstein
Dossier Frankenstein
Dossier Frankenstein
INTRODUCCIÓN
En el verano de 1816, Mary Wollstonecraft Godwin, de dieciocho años, estaba pasando el
tiempo en una casa de lago en Suiza con su amante y futuro marido, Percy Bysshe Shelley, el
famoso poeta inglés, Lord Byron, el doctor del mismo, John Polidori, y algunos otros. Fueron
unas vacaciones bastante deprimentes, pues tras la erupción del volcán indonesio Tambora en
1815 hubo disturbios climáticos tan graves que 1816 se llegó a conocer como "el año sin
verano".
Así pues, si te aburres como hongo en una casa junto al lago con dos de los escritores más
famosos de la literatura inglesa, ¿qué haces?
Organizas un concurso de historias de fantasmas.
Lord Byron desafió a todo el mundo a escribir la historia más escalofriante y extraña que
pudiera inventarse. A Polidori se le ocurrió El vampiro, una de las primeras historias de
vampiros sexy del idioma inglés. Byron escribió unos fragmentos. Y Mary Godwin tuvo una
visión (eso decía) la cual convirtió en una de las historias de terror más famosas de la literatura
inglesa: Frankenstein o el moderno Prometeo.
Retrocedamos un momento: Mary Wollstonecraft Godwin no era cualquier muchacha de
dieciocho años. Era la hija de dos personas muy inteligentes: Mary Wollstonecraft, que escribió
lo que viene a ser el primer libro feminista inglés (ni qué decir un montón de filosofía política
sobre los derechos humanos en general); y William Godwin, un ateo, anarquista y radical que
escribió novelas y ensayos que atacaban el conservadurismo y la aristocracia (y cuyo Caleb
Williams probablemente influyó en Frankenstein). Imagina las conversaciones que tenían
durante la cena.
Lo que queremos decir es que Mary Godwin no era cualquier muchacha que escribía ficción
gótica en su LiveJournal. Puede que solo tuviera dieciocho años, pero se interesaba en
cuestiones intelectuales de peso en aquel momento, como:
GÉNERO
Frankenstein se ha considerado una novela perteneciente al género de la novela gótica, una
modalidad narrativa que surge como reacción contra los ideales ilustrados que pretendían
ofrecer una explicación racional de los comportamientos humanos. La novela gótica muestra lo
raro, lo inexplicable, lo terrorífico y fantasmal en una ambientación nocturna, tenebrosa y
macabra.
Sin embargo, Frankenstein, aunque se inspira en ella se aleja de este tipo de narrativa: la
mayoría de las novelas góticas se localizan en lugares remotos en la época medieval y su
ambientación resulta bastante artificiosa. Mary Shelley sitúa su novela en el siglo XVIII en
Suiza, Escocia e Inglaterra y las descripciones paisajísticas proceden de su experiencia personal,
por lo que resultan muy realistas.
ESTRUCTURA Y PUNTO DE VISTA
Los hechos son contados por tres narradores siguiendo la técnica de las “cajas chinas” (cada
una guarda en su interior otra de tamaño más pequeño): tenemos el relato de Robert Walton
(de forma epistolar, a través de las cartas que le envía a su hermana desde Rusia), que
contiene dentro el de Frankenstein y este, a su vez, contiene el relato de la Criatura.
Además de la historia principal, Frankenstein y de la Criatura incluyen en sus relatos otras
historias:
- Frankenstein cuenta la historia de su infancia feliz y las circunstancias por las que Elisabeth
Lavenza pasa a formar parte de su familia. Además, transcribe una carta de esta en la que se
relatan las circunstancias vitales de Justine, la criada que finalmente será ajusticiada, acusada
del asesinado de William.
- La Criatura, en su estancia en el cobertizo de la familia De Lacey, conoce y relata la historia de
Safie, la hija de un mercader turco encarcelado injustamente en París. Félix, uno de los
moradores de la casa en la que se resguarda la Criatura, en su intento de ayudarlo, acaba
perdiendo su patrimonio y debe exiliarse. Pero Safie hará todo lo posible para localizarlo, ya
que ambos están enamorados. La historia remata felizmente.
Con este juego de narradores se consigue dar verosimilitud al relato, ya que no hay un único
punto de vista, sino tres versiones sobre los hechos. Cada uno de los narradores ofrece una
visión diferente sobre aspectos como la vida, la muerte, el conocimiento, la venganza, la
justicia, el bien o el mal. De esta manera podemos hablar de la modernidad de la obra, cuya
autora consigue entretejer coherentemente diferentes puntos de vista que ofrecen una visión
de conjunto al lector.
Indignado por este engaño, Zeus prohibió a los hombres el fuego. Prometeo decidió robarlo,
así que subió al monte Olimpo y lo cogió del carro de Helios o de la forja de Hefesto, y lo
consiguió devolver a los hombres en el tallo de una cañaheja, que arde lentamente y resulta
muy apropiado para este fin. De esta forma la humanidad pudo calentarse y utilizarlo para
llevar a cabo sacrificios de animales.
En otras versiones (notablemente, el Protágoras de Platón),
Prometeo robaba las artes de Hefesto y Atenea, se llevaba
también el fuego porque sin él no servían para nada, y
proporcionaba de esta forma al hombre los medios con los
que ganarse la vida.
Para vengarse por esta segunda ofensa, Zeus ordenó
a Hefesto que hiciese una mujer de arcilla llamada Pandora.
Zeus le infundió vida y la envió por medio de Hermes al
hermano de Prometeo, Epimeteo, en cuya casa se
encontraba la jarra que contenía todas las desgracias
(plagas, dolor, pobreza, crimen, etcétera) con las que Zeus
quería castigar a la humanidad. Epimeteo se casó con ella
para aplacar la ira de Zeus por haberla rechazado una
primera vez (a causa de las advertencias de su hermano de
no aceptar ningún regalo de los dioses; en castigo Prometeo
sería encadenado). Pandora terminaría abriendo el ánfora, tal y como Zeus había previsto.
Tras vengarse así de la humanidad, Zeus se vengó también de Prometeo e hizo que lo llevaran
al Cáucaso,[3] donde fue encadenado por Hefesto con la ayuda de Bía y Cratos. Zeus envió
un águila (hija de los monstruos Tifón y Equidna) para que se comiera el hígado de Prometeo.
Siendo este inmortal, su hígado volvía a crecer cada noche, y el águila volvía a comérselo cada
día. Este castigo había de durar para siempre, pero Heracles pasó por el lugar de cautiverio de
Prometeo de camino al jardín de las Hespérides y lo liberó disparando una flecha al águila. Esta
vez no le importó a Zeus que Prometeo evitase de nuevo su castigo, ya que este acto de
liberación y misericordia ayudaba a la glorificación del mito de Heracles, quien era hijo de
Zeus. Prometeo fue así liberado, aunque debía llevar con él un anillo unido a un trozo de la
roca a la que fue encadenado.
La Biblioteca mitológica recoge una versión según la cual Prometeo fue el creador de los
hombres, modelándolos con barro. Prometeo se ofreció ante Zeus para cambiar su mortalidad
por la inmortalidad de Quirón cuando este fue herido accidentalmente por Heracles, lo que le
produjo una herida incurable.
Capítulo 1
En este primer capítulo se observa a Víctor Frankenstein comentándole a Walton sobre sus
orígenes en Ginebra, y también le indica que su padre llamado Alphonse Frankenstein era un
hombre bastante poderoso y con un honor y respeto que lo caracterizaba por haber rescatado
a la que era su madre llamada Caroline, de una terrible pobreza que la sacó antes de poder
casarse con ella. Caroline era hija de Beufort, un viejo amigo de su padre que por cosas del
destino ha perdido su riqueza, avergonzado por este hecho huyó a un lugar donde nadie lo
conociese.
Alphonse viaja para poder ver a su viejo amigo Beufort y su hija bajo la idea de ayudar a su
amigo y a su hija, pero cuando llega a su casa se encuentra con que Beufort había muerto y
Caroline estaba sola y en total bancarrota. Alphonse agarró a Caroline y se la llevó a Ginebra
con él, para que un par de años más tarde contrajeran matrimonio, considerando que esta era
muchísimo más joven, ella lo amaba profundamente lo que hacía su relación feliz y amorosa.
Tiempo más tarde tendrían su primer hijo llamado Víctor, el cual nació mientras viajaban por
Italia, y aunque Caroline deseaba tener una hija hembra, no pudo concebirla en un lapso de al
menos 5 años, fue entonces cuando mientras visitaba a los pobres en las calles de Italia
encontró a Elizabeth Levenza, era una niña que se encontraba en situación de orfandad, por lo
que la adoptó y la llevo ante la familia Frankenstein.
Capítulo 2
En este capítulo Víctor hace una descripción de lo tranquila que fue su infancia junto a sus
hermanos menores y cómo su relación junto a Elizabeth era una de las mejores, él la describe
como su complemento, Víctor era un hombre bastante reservado, no llegando a tener
comunicación de su vida con casi ninguna persona más que su hermana Elizabeth y su
compañero de la escuela Henry Clerval puesto que eran como sus mejores amigos. A los 13
años Víctor se comenzó a interesar por diversos temas, entre ellos la evolución del ser
humano, él decía que, para él, el universo estaba repleto de muchos secretos que él quería
descubrir.
Capítulo 3
Una vez que Víctor cumple sus 17 años, va hacia la ciudad de Ingolstadt para continuar con sus
estudios cuando, Elizabeth se enferma por la fiebre escarlata (escarlatina), mientras se
recuperaba Caroline, quien era la que constantemente se hacía cargo de sus cuidados, se
enferma terriblemente. En su lecho de muerte Caroline dice a Víctor y a Elizabeth que uno de
sus mayores sueños era que se casaran. Pasó cierto tiempo donde le guardaron luto a Caroline,
más tarde Víctor se dirige hacia Ingoltadt para volver a sus estudios, sin embargo lo invadió el
sentimiento de miedo al no contar con apoyo de nadie, este sentimiento desaparece una vez
que conoce a M. Waldman donde este le inculcó que tiene que salir adelante a pesar de todas
las circunstancias.
Capítulo 4
Continuando el recorrido por esta obra, Víctor sigue estudiando acerca de las teorías y
orígenes de la vida. Una vez que han pasado un par de años estudiando, tuvo la idea de
regresar a su casa, puesto que tenía demasiados conocimientos, llegando al punto en donde ya
sentía que no podía avanzar más de allí, sin embargo antes de que eso pasara, Víctor pudo
descubrir cuál era la esencia de la vida, siendo este uno de los misterios que mantuvo en
secreto sin que Walton lo descubriese para que de esta manera no siguiera su “pobre ejemplo”
él dijo “Aprende de mí, sino de mis preceptos, así sean de mis ejemplos, que tan peligroso
puede ser adquirir conocimiento y que tan feliz es el hombre que cree que su ciudad nativa es
el universo que el que aspira a convertirse más grande de lo que su naturaleza lo permite”.
Una vez que descubre lo que le da vida, Víctor se dedicó a crear un ser humano, construyendo
un hombre de al menos 2,5 m de altura con bastante fuerza y resistencia, todas las partes
sacadas de cadáveres de humanos. La construcción de este proyecto lo mantuvo en secreto y
mientras trabajaba en su proyecto la correspondencia con su familia paró, su salud empezaba
a verse afectada por pasar tantas horas construyendo este espécimen, pero él nunca paró
hasta poder terminarlo.
Capítulo 5
Finalmente llegaría una fría noche de otoño en donde Víctor ha dado por terminada su
creación, pero todas las buenas ilusiones que tenía sobre este proyecto se derrumbaron al ver
semejante ser horripilante que habría creado. Él había elegido piezas que creía perfectas y
hermosas pero no contaba con que el resultado de todo esto no sería lo que esperaba, Víctor
corrió a su laboratorio donde finalmente se desmaya. Al despertar de su pesadilla lo primero
que vio es a la bestia que había creado parado frente a él sonriendo con unos espantosos
labios negros, Víctor enterrado en pánico huye hacia el pueblo donde se topó con su amigo
Henry con el que habla por un momento.
Víctor por un momento se habría olvidado de lo que había creado, por lo que él y Henry
volvieron a su casa y se dio cuenta que la bestia no estaba, tras este hecho, la salud de Víctor
comienza a deteriorarse y empezaba a tener alucinaciones y no pasó mucho antes de que
cayera en cama con fiebre. Henry se quedó con Víctor durante el transcurso de esta
enfermedad. Víctor continuaba hablando dentro de sus sueños respecto al monstruo, pero
Henry pensó que era uno de los efectos de la fiebre, cuando Víctor comenzó a recuperarse
Henry le dio una carta de Elizabeth.
Capítulo 6
Elizabeth al recibir dicha carta, le suplicaba a Víctor que redactara una carta para su familia
donde les dijese que se encontraba bien, sabiendo esto, él escribió una carta a su familia
indicándoles que se encontraba bien, y que su salud ya había mejorado considerablemente.
Luego de este hecho, Frankenstein presentó a Henry con varios profesores en la universidad ya
que él iba a estudiar ahí, pero muchas veces evitaba hablar de sus estudios, puesto que le
traían a la mente la creación horripilante que había hecho. Después que pasó cierto tiempo, él
y Víctor desean volver a casa pero su regreso sería pospuesto por al menos 7 meses hasta que
él y Henry fueron a un tour por Ingolstadt.
Capítulo 7
Una vez que Víctor se encuentra con la letra de su padre Alphonse, la carta no decía otra cosa
más que informar que su hermano William había sido asesinado, la familia caminaba por el
bosque cuando William desapareció, por lo que empezaron la búsqueda y cuando finalmente
lo encontraron observaron que presentaba signos de estrangulación. Elizabeth tuvo cierta
preocupación puesto que le había prestado un collar que perteneció a su madre y al momento
que pudieron encontrar a William, el collar ya no estaba, por lo que pudieron aseverar que
esta era la razón por la que lo habían matado.
Víctor se dirige a Ginebra rápidamente para poder confortar a su familia, pero pensó que el
regreso a su hogar luego de haber pasado 6 años lo asustaba por todos los cambios que se
pudieron haber generado en ese sitio, por lo que decidió detenerse unos días antes de llegar a
Ginebra para que así el paisaje de su país lo pueda tranquilizar, una vez que llega a Ginebra
pudo darse cuenta que las puertas de la ciudad estaban cerradas, por lo que tuvo que pasar la
noche en un pueblo cercano.
Luego Víctor decide ir al lugar en donde fue asesinado William, por lo que emprende el
recorrido y rápidamente una tormenta azota la montaña, un relámpago lo deslumbra y ante el
aparece un ser, al admirar lo enorme que era, su deformidad y el aspecto físico que tenía, no
tuvo dudas de que se trataba del monstruo que él había creado, y a la vez el asesino de
William. Víctor no podía decirle a nadie que el monstruo había matado a William por la sencilla
razón de que todos dirían que estaba loco, además si le creyesen, nadie se enfrentaría al
monstruo, por lo que decide quedarse callado sobre esto y una vez que llega a Ginebra, se
entera que Justine estaba siendo acusada por el homicidio de William, puesto que el collar de
Elizabeth fue encontrado dentro de su vestido.
Capítulo 8
En el juicio Justine pudo explicar todo lo sucedido excepto el collar, Víctor sabía que el
monstruo lo había puesto en su vestido para incriminarla de la muerte de William. Elizabeth
segura de la inocencia de Justine pidió al jurado la declarasen inocente al igual que Víctor pero
esto no fue suficiente. Justine fue declarada culpable y ejecutada, Víctor sabía ahora que había
dos muertes en su conciencia pero no sabía cómo podía solucionarlo.
Capítulo 9
De inmediato Víctor comenzaba a preocuparse por esto, lo que hizo que su salud volviese a
decaer; su padre creyó que todo esto era por la muerte de su hermano, pero en realidad Víctor
estaba demasiado mal por sentirse culpable por las muertes de William y Justine y también del
estado emocional de su padre y Elizabeth. Ni su familia ni sus amigos lo podía ayudar a superar
esto, puesto que nadie estaba claro de lo que en realidad habría pasado, ninguno de ellos
sabía que Víctor habría creado un espécimen monstruoso, por lo que Frankenstein decidió
hacer un viaje a Chamounix para escapar nuevamente.
Capítulo 10
Capítulo 11
Acto seguido el monstruo le empezaba a contar a Víctor como sus sentidos se fueron
desarrollando desde que despertó en el laboratorio, y como él no podía diferenciar los cinco
sentidos ni tampoco entre la luz y oscuridad cuando parpadeaba. Una vez que logra escapar
del laboratorio estuvo merodeando por el bosque, comiendo frutos y nueces hasta que un día
pudo descubrir el fuego que una persona habría dejado, desde ese día pudo ver cuán útil era
tener fuego, y también descubrió los peligros del mismo, mantuvo la llama encendida para
poder cocinar sus nueces, cuando se acabó la comida empezó de nuevo a caminar por el
bosque en busca de más.
Llegaría la temporada de invierno y entró en una cabaña, al entrar en ella el hombre salió
corriendo espantado por el aspecto del monstruo, la cabaña le gustó mucho ya que fue el
primer refugio que tuvo después del invierno, posteriormente caminaría hacia un pueblo
donde lo recibieron con palos y piedras por su aspecto, corriéndolo del lugar, esto trajo como
consecuencia que el monstruo tuviera miedo de los humanos, siguió caminando y encontró
una cabaña donde refugiarse, pero luego se refugiaría en un granero, estuvo allí un tiempo y
mediante un agujero en la pared pudo ver que allí vivía una familia, pero no quería que se
enterasen que estaba allí, puesto que lo correrían.
Capítulo 12
Con el pasar del tiempo el monstruo continuaba viendo por el agujero a la familia Lacey, a lo
que pudo darse cuenta de que se sentían tristes, pudo deducir que esto era el resultado de ser
una familia pobre, y también pudo darse cuenta que de todos, Félix era el más triste pero sin
saber exactamente cuál era la razón. El monstruo comenzaría a palear la nieve y también a
hacer trabajos de jardinería para que así la familia tuviese más tiempo de trabajar por su
familia. Escucharlos todos los días hizo que el monstruo aprendiera palabras como leche,
queso y pan. Pudo darse cuenta que cuando Félix leía en voz alta en realidad estaba
observando símbolos que pasaban por palabras, el monstruo quería aprender a comunicarse
para así poder hablar con la familia De Lacey’s para que estos no llegasen a odiarlo ni
rechazarlo por ser tan feo, ya que pudo ver el reflejo de su rostro en un río, él quería ser amigo
de esta familia.
Capítulo 13
Llegaría la primavera y el monstruo no se sentía feliz, tampoco la familia Lacey lo estaba, pero
de pronto llegaría una mujer morena que no hablaba la misma lengua que ellos, y que hablaba
francés, Félix estaba perdidamente enamorado de ella, y ella también de él, entonces la familia
la recibió con brazos abiertos y le enseñó a hablar francés, el monstruo pudo aprender junto
con ella y comenzó a entender sus conversaciones y diversas lecturas de algunas historias,
pero en todos esos relatos nunca oía hablar de alguien como él lo cual le produjo mucha
curiosidad, cómo es que fue creado o de dónde venía, estas preguntas trajeron como
consecuencia que el monstruo se sintiese aún más alejado de la sociedad.
Capítulo 14
Capítulo 15
Desde este momento se sintió decidido a buscar la compañía de la familia De Lacey, así que
esperó hasta que el padre que era ciego estuviera solo y de esta forma podría entablar una
conversación con él. En un principio demostró amabilidad con el monstruo, pero él sabía que
debía esperar a que llegue el resto de la familia para intentar hacer amigos con ellos, una vez
que esto sucede, Safie se desmaya y Félix lo había perseguido lejos de la casa.
Capítulo 16
Una vez que esto sucede, el monstruo comienza a caminar por el bosque maldiciendo y
gritando en ira por el hecho de que su vida fuese tan miserable, justo en esa ocasión fue
cuando toma la decisión de declararle la guerra a toda la humanidad y por sobre todas las
cosas, a su creador Víctor, por haberlo hecho tan espantoso. En esa ocasión parte hacia a
Ginebra donde pudo admirar el paisaje por un momento hasta que lo calmó, hasta que un día
intento salvar una niña de un río y fue herido por un disparo al haberlo considerado como una
amenaza. Con esa herida terminó de darse cuenta que la humanidad es una basura y tenía que
matarlos a todos.
Más adelante cuando se encontraba en camino a Ginebra, pudo encontrar un pequeño niño y
pensó que este joven no tenía madurez suficiente como para odiarlo, por lo que decide
secuestrarlo para que sea su amigo, pero este gritaría y se opondría al rapto, entonces su
padre se daría cuenta de ello, era nada más que Alphonse Víctor y lo iba hacer pagar por eso,
al darse cuenta de que el niño tenía una relación con Víctor, lo asesinó y agarró el collar que le
pareció puesto que le parecía muy bonito y corrió hacia un granero cercano en donde
encontró a Justine durmiendo. En ese momento es donde pone el collar en el vestido de
Justine para que así ella fuera culpada por el homicidio. Una vez que termina de contar su
historia, el monstruo hizo su demanda, afirmando que solo alguien tan horrible como él podría
quererlo, por lo que le dice a Víctor que tenía que crear un ser igual a él.
Capítulo 17
Luego de haber dicho esto, ambos empezaron a debatir sobre la posible creación de un
compañero para el monstruo. Víctor creía que si creaba este otro ser el monstruo tendría un
compañero para destruir el mundo, a lo que el monstruo le prometería que, si con la creación
de un compañero se acaban sus rechazos y se le levanta el ánimo, los motivos para destruir la
humanidad desaparecerían. Una vez dicho esto, Víctor acepta crear una mujer para el
monstruo a lo cual el monstruo le diría que lo estaría vigilando de cerca para saber si en verdad
está avanzando en su progreso y que en realidad le entregue a su nueva pareja.
Capítulo 18
En principio Víctor no podía siquiera comenzar este trabajo, ya que le parecía completamente
horripilante volver a crear un monstruo de esos, cosa que llevó a enfermarlo muchas veces. Su
padre Alphonse pensó por un momento que esto era resultado de que Víctor no quería casarse
con Elizabeth, pero él le aseguró que él la amaba y que solo se casaría con ella, por lo que
Alphonse creyó más conveniente que se casaran de una vez. Frankenstein le dijo que antes de
casarse tenía que viajar a Inglaterra, puesto que tenía conocimiento de que tenía que terminar
un segundo monstruo, así que hace el viaje para terminar el monstruo y así volver con su
familia y amigos.
Capítulo 19
En este capítulo Víctor se encontraría con un amigo de la infancia llamado Henry, de allí van
hasta Escocia en donde Víctor aún con ciertas dudas se traslada hasta las islas Orkney para
empezar a construir el otro monstruo. Víctor empezaría a desarrollar su trabajo y aunque
melancólico por crear a la compañera del monstruo se encontraba con mucho temor por no
saber dónde se encontraba el monstruo y si le estaba creando un daño a la sociedad, pero
empezaba a pensar en su familia y este era el motivo que lo hacía continuar su trabajo.
Capítulo 20
En este capítulo se aprecia como Víctor ya estaba a punto de terminar la compañera del
monstruo, pero aún tenía mucho miedo, ya que creía que el monstruo que él creara pudiese
tener la decisión de ser independiente y por lo tanto no querría estar con el otro o tal vez
podría reproducirse y generarían una raza de monstruos, eran muchas hipótesis que
agobiaban la mente de Víctor, a la vez que el primer monstruo miraba por la ventana como
Víctor tomaba la decisión de no terminar a la criatura, destrozándolo en pedazos. Esto hizo
que el monstruo fuese hasta el apartamento de Víctor, pero él no cambió de opinión, a lo que
el monstruo le diría que tomaría venganza con él y además estaría presenciando su boda,
yéndose después de haber dicho esto.
Sucedido todo esto, Víctor recibió una carta de Henry la cual indicaba que vaya a verlo, puesto
que había tomado la decisión de mudarse a la India. Entonces Víctor recogería sus cosas y las
guardaría para proceder a eliminar los restos del monstruo que estaba construyendo, solo para
tomar un bote e ir a donde Henry lo esperaba, mientras se dirigía al lugar, una terrible
tormenta arropó los cielos. Víctor por un momento creyó que iba a morir, hasta que logró
avistar a lo lejos un pequeño puerto. Al anclar fue recibido por un grupo de personas que a
simple vista parecían irlandeses, estos lo llevaron ante los tribunales locales, allí se enteraría
de que era acusado por el asesinato de un hombre la noche anterior.
Capítulo 21
Acá el juez le indica que varios hombres pudieron avistar el cuerpo de un hombre muerto que
flotaba en la costa y un barco que tenía bastante similitud con el de Víctor alejarse a lo lejos,
una vez que le muestra el cuerpo, Frankenstein se dio cuenta de que era Henry, en ese
momento empezó a tener delirios y recaería inmediatamente. El juez finalmente lo declararía
inocente e hizo que lo trataran, también contactó a su padre para acudieran a hacerse cargo
de él. Víctor aún bastante grave de salud, se regresa con su padre hacia Ginebra.
Capítulo 22
Una vez que se encontraba descansando en Francia, Víctor recibe una carta de Elizabeth
diciéndole que ella lo amaba pero que si existía otra mujer en su vida ella lo entendería y que
él no debía sentirse comprometido al matrimonio. Con mucho miedo por lo que le habría
dicho el monstruo, le dijo a Elizabeth que ella era la única mujer a la que podía amar y que era
la mujer con la que se iba a casar una vez que llegase a Ginebra. La fecha de la boda estaría
pautada para unos 10 días, y mientras la fecha llegaba Víctor pasaba el día con un arma y una
daga en su humanidad caso tal que el monstruo decidiera adelantar la fecha. Lo que sí es
cierto es que nada de lo que hiciera Víctor lo iba a preparar para lo que el monstruo en
realidad estaba pensando. La noche de la boda llegó y mientras viajaban hacia su luna de miel
Elizabeth apreciaba todos los paisajes que aparecían en el exterior, a la vez que Víctor se ponía
más nervioso a medida que la noche avanzaba.
Capítulo 23
Justamente en esa noche, empezó a caer una terrible tormenta lo cual hizo que Víctor
estuviera realmente asustado, ocasionando que Elizabeth también se pusiera nerviosa por
verlo de esa forma, Víctor al notar todo esto, le dice a Elizabeth que vaya a su habitación y
duerma un momento, poco tiempo más tarde escucharía un grito desde la habitación, y al
entrar se daría cuenta de que Elizabeth estaría estrangulada y muerta, al ver la ventana notaría
la aparición de una silueta la cual era la del monstruo.
Con total molestia intenta perseguirlo, pero no lo consigue. En ese mismo instante decide ir a
buscar a su padre y hermano, puesto que eran los únicos miembros de la familia que le
quedaban. Una vez que su padre escucha lo que ha pasado, se queda impactado, cosa que hizo
que su salud fuera de mal en peor y ocasionando su muerte un par de días más tarde en los
brazos de Víctor. Ante esta situación, Víctor jura que dedicaría su vida a encontrar y eliminar al
monstruo que había creado.
Capítulo 24
Finalmente, en este último capítulo se puede apreciar la lectura del diario de Robert Walton,
quien aparece como el narrador indirecto de la obra y quien describe como la persecución del
monstruo haría que Víctor se traslade hasta el polo norte, donde finalmente serían separados
por un gigante trozo de hielo. En ese instante pudo encontrar a Walton en su barco, a quien
intentaría convencer para que puedan perseguir al monstruo, todo transcurrió de esa forma
hasta que un día, ya con su salud bastante deteriorada Víctor muere.
Al día siguiente Walton encontró al monstruo encima del cuerpo de Víctor implorándole
perdón por las acciones que había realizado, e incluso trató de justificar sus acciones ante
Walton. En este instante Walton no estaba seguro si debía matar al monstruo como lo quería
hacer Víctor, entonces el monstruo le diría que iría al polo norte donde y allí se quemaría de
manera tal que no quedara rastro alguno de él, acto seguido se va y salta del barco,
desapareciendo para siempre.
TEMAS E INTERPRETACIONES
A pesar de conocerse como “Frankenstein” la novela, también tiene el nombre de El moderno
Prometeo, sirviendo este nombre como la base de la inspiración del autor. Una de las obras
favoritas de Byron era la obra teatral de Esquilo, y también el mismo Percy Shelley estuvo a
cargo de escribir sobre este tema. Prometeo está presentado muchas veces como el escultor
de la humanidad, un titán que de acuerdo a diversas leyendas, creó al hombre por medio de la
arcilla. La novela no es una simple reescritura del mito clásico, ya que, a diferencia del titán, el
moderno Prometeo nunca es castigado por los dioses, sino por su propia creación.
De cierta manera, Frankenstein puede ser vista como una alegoría de la perversión que puede
traer el desarrollo científico; el cual ha sido concebido y escrito durante las fases tempranas de
la revolución industrial, siendo esta una época de cambios dramáticos, detrás de los
experimentos de Víctor Frankenstein se tiene en cuenta la búsqueda de un poder divino, en tal
caso se expresa que: ¿qué mayor poder que el propio acto de creación de la vida?
De este modo, el gran desprecio que muestra Frankenstein por la naturaleza puede ser
considerado como símbolo de aquellas fuerzas imperiosas que son desatadas por el constante
capitalismo naciente, el cual no respeta la dignidad básica del ser humano. Sin lugar a dudas la
rebelión de la criatura contra Víctor es un claro mensaje del castigo que es consecuencia del
uso irresponsable de la tecnología y la ciencia, siendo el mal simplemente una consecuencia
directa de estos recursos.
En otro punto de vista literario, se puede descubrir en él, una alegoría del embarazo y de
aquellos miedos frecuentes que las mujeres en aquellos tiempos de Shelley sobre el
nacimiento, ya que esto acarreaba una consecuencia bastante grave para la madre y también
para los fetos prematuros. Esta interpretación se toma como base en el hecho de que Mary
Shelley había tenido un parto prematuro un poco antes de que comenzara el verano en 1816.
Así, al igual que Mary, Víctor estaba muy obsesionado por el simple hecho de pensar que la
criatura se volviera independiente y de esta manera pudiese ejercer el libre albedrío en un
mundo que le afectaría desde diversos puntos de vista. El argumento de este análisis como tal,
es que el personaje de Víctor tiene miedo a lo largo de toda la novela puesto que la criatura
puede destruirle su vida matando a todos los que él más quiere y aprecia.
La problemática que se puede encontrar en “Frankenstein” podría trasladarse a la que hoy día
existe en torno al asunto de la clonación. Primero se empezó por clonar animales. Lo siguiente
sería hacer copias exactas y perfectas de los órganos humanos, bajo la excusa de que esto
sería un gran avance para la ciencia en caso de que una persona necesite de un trasplante, que
de este modo se salvarían muchas vidas. En lo que a este punto se refiere, se hizo la
determinación de que la técnica de la clonación no sería aplicada para crear seres humanos
con totalidad, de este modo no se podría substituir la reproducción humana por medio del
embrión, por otra completamente artificial.
Víctor se inspira en los flamantes científicos en quienes ha adivinado ese poder ilimitado para
ocupar el rol de Dios en cuanto a la creación de su monstruo. Al hacer eso no solamente ha
logrado acceder a la naturaleza, sino también a aquel poder de procreación por tener en sus
manos la creación de una nueva especie para alimentar el hambre de llamar la atención y ser
reconocido como una de las personas creadoras de otros seres humanos. Pero pronto se
frustran sus ambiciones, ya que el monstruo que ha creado se le rebela. Es sólo entonces
cuando Frankenstein comienza a plantearse el verdadero alcance y la repercusión de su obra,
siendo ya demasiado tarde para arreglarlo.
PERSONAJES PRINCIPALES
Víctor Frankenstein: es el protagonista de una historia que lleva el subtítulo de “el moderno
Prometeo”. En la mitología griega, Prometeo encarna la ambición de los hombres al desear
aquello que solo les estaba reservado a los dioses. Creó el primer hombre modelándolo con
arcilla y le robó el fuego a Zeus para dárselo a los hombres. A causa de su osadía es cruelmente
castigado: es encadenado a una roca y un águila todos los días le devora el hígado, ya que, al
ser inmortal, este se le regenera continuamente. Para Percy Shelley, autor del poema
“Prometeo encadenado”, este dios simboliza la lucha del hombre por escapar de la tiranía, a la
vez que el genio creador que no se somete a ningún orden o norma.
Víctor se obsesiona con crear un ser con miembros de diferentes cadáveres, desatendiendo los
consejos de sus profesores. Su desmedida ambición tendrá un resultado funesto del que se
sentirá culpable. Víctor logra equipararse a Dios creando un ser, pero desde el punto de vista
moral fracasa porque es incapaz de atender las necesidades de su “creación”. Su atrevimiento
al querer equipararse a Dios le lleva a la perdición. Pero, a pesar de su arrogancia y de su
fracaso con la Criatura, se convierte en un héroe ya que, una vez que esta es creada, Víctor
destinará su vida a la tarea de destruirla para salvar al resto de la humanidad. Sin embargo,
esta heroicidad se ve empañada por los muchos errores que comete:
- Abandona a su familia: no contesta a sus cartas ni muestra interés por evitarles el
desasosiego que les provoca su actitud. Tampoco comparte con ellos ni sus proyectos ni el
resultado de estos.
- A pesar de las amenazas de la Criatura no toma medidas eficaces para proteger a su familia y,
aunque sabe que Justine no asesinó a Williams, Víctor no cuenta lo que sabe porque teme que
lo tomen por loco.
La Criatura: es el prototipo de personaje maldito del Romanticismo. Carece de nombre, ya que
su creador, Víctor Frankenstein, lo abandona a su suerte. En su relato a Frankenstein, la
Criatura insiste en su bondad inicial, pero el desamparo del que es objeto provoca que se
convierta en un ser malvado y cruel. Así es el prototipo de ser maldito que debe pasar la vida
huyendo sin conocer ni su origen ni el sentido de su existencia. Lo que más duele a la Criatura
es el abandono de su creador; si este se hubiera hecho cargo de él, la Criatura no habría
matado a nadie a pesar del rechazo de los demás a causa de su apariencia. Lo que más lo
atormenta es la soledad, por eso le pide a Víctor una compañera y, al no concedérsela, la
Criatura mata a Elisabeth, pues no puede soportar que su creador sea feliz y él no.
Robert Walton: la primera parte de la novela la constituyen las cartas que este personaje
escribe a su hermana Margaret. Watson, como Frankenstein, es un personaje ambicioso que
emprende un arriesgado viaje al Polo. Allí descubre al protagonista de la historia, que viene
huyendo de su Criatura, y en seguida siente una gran empatía hacia él porque ambos
comparten un mismo objetivo: son seres solitarios, idealistas e inquietos que, a través de
conocimientos científicos, pretenden lograr algún beneficio para la humanidad. Al final,
después de sus conversaciones con Víctor, entenderá que el ser humano no puede poner en
riesgo la vida de los demás en beneficio de una ambición personal, y abandona su misión en el
Polo. Sin embargo, no es capaz de cumplir la petición que le hace Víctor, la de matar a la
Criatura.
Henry Clerval: es el mejor amigo de Frankenstein. Su actitud serena y responsable contrasta
con el ímpetu y desasosiego del protagonista. Su amistad incondicional lo hará víctima de la
Criatura.
Elizabeth Lavenza: es la abnegada novia (y prima) de Víctor. Era huérfana y fue adoptada
siendo niña por los Frankenstein. Aparece totalmente idealizada, es rubia, de ojos azules, llena
de ternura y bondad. Parece un ángel. Será fiel a Víctor aun sin entender las actuaciones de
este.
Estos dos últimos, junto con los padres de Víctor y la familia De Lacey encarnan valores
positivos: amor, afecto, sencillez, solidaridad, educación, gratitud, etc. Su papel en la obra es
contrastar con la negatividad que transmiten tanto la actitud de Víctor como la de su criatura.
Representan un mundo ideal.
Por suerte, Frankenstein nos ofrece una descripción detallada de su personalidad de niño. Él
dice: "The world was to me a secret which I desired to divine" (2.1); "Curiosity, earnest
research to learn the hidden laws of nature … are among the earliest sensations I can
remember"; "It was the secrets of heaven and earth that I desired to learn" (2.4).
¿A que tiene un tonito de científico loco (mad scientist)? En otras palabras, Victor nos dice (1)
que es una persona curiosa, y más aún (2) que siempre ha sido así. Insiste tanto en que ha
sentido curiosidad desde pequeño, que prácticamente no podemos culparlo por sus actos. Así
nació.
Victor incluso nos da una prueba más de que es una víctima de la genética señalando que tuvo
una infancia feliz:
"My parents were possessed by the very spirit of kindness and indulgence. We felt that they
were not the tyrants to rule our lot according to their caprice, but the agents and creators of all
the many delights which we enjoyed. When I mingled with other families I distinctly discerned
how peculiarly fortunate my lot was, and gratitude assisted the development of filial
love" (2.3).
¿Pero es esto convincente? ¿Victor de verdad está tratando de absolverse de cualquier
responsabilidad insistiendo en que simplemente no podía evitarlo?
No del todo, porque también parece culpar a su padre y a sus maestros. Cuando comienza a
obsesionarse por el alquimista Cornelius Agrippa, culpa a su padre de no molestarse por
explicarle que los principios de Agrippa habían sido explotados por completo ("tak[ing] the
pains to explain to me that the principles of Agrippa had been entirely exploded") (2.7) y de
haberlo dejado luchando con la ceguera de un niño ("struggle with a child's blindness") (2.9).
Después, cuando por fin se va a la universidad, su profesor de filosofía natural, el señor
Krempe, es un retaco de voz ronca y semblante repulsivo ("little squat man with a gruff voice
and repulsive countenance") (3.12), lo que hace que decida ir a estudiar química con el sensual
señor Waldman de inmediato:
This professor was very unlike his colleague. He appeared about fifty years of age, but with an
aspect expressive of the greatest benevolence; a few grey hairs covered his temples, but those
at the back of his head were nearly black. His person was short but remarkably erect and his
voice the sweetest I had ever heard. (3.14)
Una vez más, Victor inventa excusas. No pudo evitar interesarse por la química porque el señor
Krempe era feo y el señor Waldman era casi casi George Clooney. No pudo evitar querer saber
los secretos de la naturaleza. No pudo evitar que su padre no le hubiera dicho que no perdiera
el tiempo con los alquimistas. Todo es culpa del destino: "Destiny was too potent, and her
immutable laws had decreed my utter and terrible destruction" (2.12). ¿Te suena esto a las
palabras de un hombre que se arrepiente de haber creado un terrible monstruo (de varias
maneras)?
Asumir la responsabilidad
A nosotros nos parece que no mucho, aunque hacia el final de su historia sí parece considerar
que podría tener algo de responsabilidad por sus actos. El momento clave es cuando decide
destruir a la sra. Monstruo:
"Had I right, for my own benefit, to inflict this curse upon everlasting generations? I had before
been moved by the sophisms of the being I had created; I had been struck senseless by his
fiendish threats; but now, for the first time, the wickedness of my promise burst upon me; I
shuddered to think that future ages might curse me as their pest, whose selfishness had not
hesitated to buy its own peace at the price, perhaps, of the existence of the whole human
race." (20.1)
¿Suena lógico? Tal vez, pero mira cómo lo expresa: le preocupa que la gente se moleste con él.
No dice nada de si está equivocado, sino que le preocupa que otros lo perciban así. No sé tú,
pero no nos suena muy maduro.
Luego fíjate en uno de sus últimos discursos, cuando dice: "Never will I give up my search until
he or I perish; and then with what ecstasy shall I join my Elizabeth and my departed friends,
who even now prepare for me the reward of my tedious toil and horrible pilgrimage!" (24.11).
Por una parte, bien: aceptamos que está listo para ir a la caza de este asesino despiadado. Por
otra parte, "tedioso esfuerzo" y "horrible peregrinaje" suenan a que se considera de alguna
manera un mártir, cuando en realidad toda esta situación se dio por culpa suya.
Lo sentimos, Frankenstein. No nos convences.
Mamita querida
El monstruo se refiere a Frankenstein como su creador, así que tendemos a verlo como una
figura paterna y hablamos de las maneras en las que es un mal padre. Pero no nos parece que
esto sea del todo preciso. Nos parece que es más probable que Shelley lo viera como una mala
madre.
Ahora, no queremos ponernos a psicoanalizar a los autores, pero cuando se trata
de Frankenstein, muchos estudiosos creen que hay buenas razones para hacerlo. Verás, Mary
Wollstonecraft, madre de Mary Shelley, era una chica radical que insinuaba que las mujeres
podían hacer mucho más ("do a lot more") que rizarse el pelo y tener bebés. Incluso
conmocionó a, bueno, todos exhibiendo en público varias aventuras amorosas poco
convencionales antes de casarse con el filósofo ateo William Godwin y morir de
complicaciones después de dar a luz a Mary.
La misma Mary Shelley tuvo tres embarazos durante y cerca del periodo en el que escribió
Frankenstein (un hijo, una hija y un aborto natural), así que tiene lógica que sintiera algo de
nerviosismo si de partos se trataba. Veamos un segmento en el que Frankenstein describe la
creación del monstruo:
"My cheek had grown pale with study, and my person had become emaciated with
confinement … the moon gazed on my midnight labours, while, with unrelaxed and breathless
eagerness, I pursued nature to her hiding-places… My limbs now tremble, and my eyes swim
with the remembrance; but then a resistless and almost frantic impulse urged me forward; I
seemed to have lost all soul or sensation but for this one pursuit." (4.9)
En el siglo XIX (y en muchos otros) las mujeres, o al menos las adineradas, se "encerraban"
durante las últimas etapas del embarazo: se recluían en sus habitaciones ya fuera por la idea
que el encierro protegería al bebé o porque los buenos modales prohibían que las señoras
decentes mostraran pruebas de haber tenido relaciones sexuales. La palidez y el aspecto
demacrado habrían sido efectos secundarios comunes de embarazos difíciles y, bueno, no
tenemos que explicar aquello de los "partos nocturnos".
¿No te convence? Extremidades temblorosas, impulsos frenéticos, perder el alma y la
sensación: todas son experiencias similares a las de una mujer en trabajo de parto. Entonces,
¿qué hace Frankenstein cuando por fin ve que su creación respiró profundo y un movimiento
de convulsión agitó sus extremidades? ("breathed hard, and a convulsive motion agitated its
limbs") (5.1). Se queda dormido: "At length lassitude succeeded to the tumult I had before
endured" (5.3).
Nos parece que este acto de creación científica tiene un sospechoso parecido con el embarazo,
el encierro, el trabajo de parto y el nacimiento. La pregunta es: ¿qué significa? ¿Está diciendo
que Frankenstein está aún más trastornado de lo que pensamos porque está tratando de crear
vida sin una mujer? ¿Está insinuando Shelley que este tipo de búsqueda científica es de alguna
manera femenina? ¿O está usando a Frankenstein para analizar sus problemas con la
maternidad y el hecho de ser madre?
Qué romántico
El trasfondo de todo esto es el siguiente: Percy Bysshe, esposo de Shelley, era uno de los Seis
Grandes, un grupo de poetas ingleses que más adelante terminaría siendo aclamado como el
único Romantic movement en literatura. (En ese momento quizás no se consideraban los Seis
Grandes, pero se tenían en muy buena estima). ¿Qué hacía falta para ser un poeta romántico?
(1) Muchos sentimientos; (2) un sentido de vanidad; (3) la idea de uno como individuo solitario
que sale a repartir conocimientos y sabiduría al resto del mundo; (4) la capacidad de sentir lo
sublime en la naturaleza.
¿Te suena? Victor Frankenstein podría ser el romántico perfecto. (Hablaremos de cómo el
monstruo puede ser una figura romántica en su propio "Character Analysis". Ya sabemos que
es un soñador con un gran ego. Veamos cómo se siente acerca de la naturaleza:
"During this short voyage I saw the lightning playing on the summit of Mont Blanc in the most
beautiful figures. The storm appeared to approach rapidly, and, on landing, I ascended a low
hill, that I might observe its progress. It advanced; the heavens were clouded, and I soon felt
the rain coming slowly in large drops, but its violence quickly increased. While I watched the
tempest, so beautiful yet terrific, I wandered on with a hasty step … This noble war in the sky
elevated my spirits; I clasped my hands, and exclaimed aloud, "William, dear angel! this is thy
funeral, this thy dirge!" (7.22-24)
Victor parece ver la naturaleza como algo que está fuera de su control. Es enorme,
abrumadora, aterradora, pero de alguna manera "hermosa". En otras palabras, es sublime.
Pero incluso aquí nos parece que Victor no es precisamente honesto consigo mismo. Cuando
llega al valle, conversa con la naturaleza: "Dear mountains! my own beautiful lake! how do you
welcome your wanderer? Your summits are clear; the sky and lake are blue and placid. Is this
to prognosticate peace, or to mock at my unhappiness?" (7.20).
Fíjate cómo no puede evitar hablar de "sus" montañas y lago, como si la naturaleza existiera
solo para hacerlo sentir mejor. De acuerdo, le podemos perdonar eso, pero luego nos
acordamos de que describe su deseo constante de penetrar los secretos de la naturaleza
("penetrate the secrets of nature") (2.7).
No es que seamos aficionados a Freud, pero no podemos evitar pensar que cabe la posibilidad
de que el Dr. Frankenstein tenga todavía algunos problemas que resolver y, a juzgar por lo que
le ocurre a este perfecto romántico y a todo el que ama, quizás Mary Shelley tenga algunos
problemas de los que debería hablar con su marido.
El monstruo
Supérheroe
En el "Character Analysis" de Victor insinuamos que Shelley lo escribió basándose en las ideas
románticas de su esposo y sus amigos: un individuo que abandonó las normas de la sociedad
para llenarnos de sabiduría a nosotros, los pobres mortales. Y vimos lo bien que eso le resultó
a Victor. Pero, ¿qué si viéramos al monstruo también como una figura romántica? Mira esta
descripción que hace de sí mismo:
"I was dependent on none and related to none. The path of my departure was free, and there
was none to lament my annihilation. My person was hideous and my stature gigantic. What
did this mean? Who was I? What was I? Whence did I come? What was my destination? These
questions continually recurred." (15.5)
Si dejamos de lado lo de persona "espantosa", esta es la descripción perfecta de un héroe
romántico: un tipo independiente radical que no dejará que el hombre le diga qué hacer. Una
especie de superhéroe que se dispone a resolver los misterios de la vida.
Y si quieres más pruebas de que Shelley puede haber querido que el monstruo fuera heroico,
lee esta descripción de su fortaleza:
"I was not even of the same nature as man. I was more agile than they and could subsist upon
coarser diet; I bore the extremes of heat and cold with less injury to my frame; my stature far
exceeded theirs." (13.17)
¿Monstruo? Quizás. Pero si cerraras los ojos, parecería más bien una versión mejorada de la
humanidad.
El llanero solitario
Pero ser un superhéroe no es todo lo que parece. En la cima se está muy solo y no solamente
porque el monstruo es rechazado y odiado por los hombres ("shunned and hated by all
mankind") (17.5). Es rechazado y odiado también por todas las mujeres. Según él, "Shall each
man find a wife for his bosom, and each beast have his mate, and I be alone?" (20.11). Esta
súplica llega al corazón de incluso los más fríos. Ruega a Frankenstein para que le haga una
compañera y parece sincero al decir que solo quiere irse a Sudamérica a comer bellotas y
bayas ("acorns and berries") (17.9).
(Una idea interesante: Percy Shelley era defensor del vegetarianismo, y al hacer que el
monstruo diga que no destruirá corderos o chivos para saciar su apetito ("destroy the lamb
and the kid to glut [his] appetite") (17.9) suena como que él es en realidad una especie de
humano superior, ¿no?)
En esencia, el monstruo no tiene una comunidad. Incluso Satanás, dice, tenía otros ángeles
caídos, pero el monstruo está solo por completo. Con razón se quiere morir.
¿Adán o Satanás?
OTROS TEMAS
♣ La obsesión por saber: el doctor Frankenstein está obsesionado por conocer los secretos de
la vida y, a pesar de los consejos de sus maestros, no descansa hasta conseguir crear un ser. Su
ambición acaba condenándolo. Mary Shelley pretendía con esto criticar el pensamiento
ilustrado, que pretendía racionalizar todos los misterios humanos. La novelista defiende así
que es mejor renunciar al conocimiento racional de ciertas parcelas que no son competencia
humana.
♣ La rebeldía: Víctor, con su actitud, pretende suplantar a Dios en la tarea de dar y quitar la
vida a través de la ciencia y el conocimiento. Se rebela contra el Creador. Pero la Criatura
también se rebela contra su creador, ya que no soporta la situación de abandono y soledad a la
que ha sido condenado.
♣ La bondad innata del ser humano: la Criatura no nace mala pero se va volviendo vengativo y
malvado al verse abandonado por su creador y al verse rechazado por los demás a causa de su
apariencia física. Mary Shelley comparte así las ideas que J.J. Rousseau exponía en su Emilio, el
ser humano es bueno por naturaleza pero la sociedad lo corrompe.
♣ El aprendizaje de la vida y el paraíso perdido: el relato de Frankenstein es la historia de un
aprendizaje de vida ya que el sentido de la narración es explicar por qué el protagonista ha
llegado a tan desesperada situación (Walton lo encuentra en un lamentable estado y, aunque
se recupera para contar su historia, no tarda en morir). Víctor comienza su narración
retrotrayéndose a una infancia feliz e idílica que va desapareciendo a medida que el
protagonista va sintiendo más ansias de conocimiento. Llegará a decir: “Más feliz vive quien
cree que su pueblo natal es el mundo que aquel que aspira a ser más grande de lo que su
naturaleza puede permitir”. Por otra parte, la Criatura se ve abocada a realizar sola su
aprendizaje vital añorando una felicidad que le es totalmente negada.
Frankenstein ha hecho una valiosa aportación a la literatura de terror. Sin duda, su argumento
está a la altura de otras novelas inigualables como puede ser la más tardía obra de Bram
Stoker Drácula (1897). Su presencia ha sido constante desde que se escribió y las secuelas que
ha tenido son innumerables. Como antes he tenido ocasión de comentar, la síntesis de
elementos que hace le otorga una novedad temática en el género. Su tema y la forma en la
que está narrado hace que se despierten emociones nuevas y, sin lugar a dudas, aporta
conocimientos parciales de la naturaleza humana al ponerla en situaciones límite cuando
enfrenta temáticamente los entornos vitales de Víctor y de su criatura: más que decir que
ambos son protagonistas cabría decir que los dos son antagonistas y que, por eso, su
encuentro no puede acabar más que con su mutua destrucción.
También ha sido fuente de numerosas reflexiones al haber hecho pensar sobre la importancia
de lo que podríamos llamar el “límite ético” en la elaboración de la ciencia y en sus
aplicaciones tecnológicas. Además lo hizo en el momento oportuno: cuando la especie
humana comenzaba a pensar que el conocimiento científico le podía dar el dominio absoluto
sobre la naturaleza. En esos momentos comienzan los albores del positivismo y la pretensión
de que sólo la ciencia puede ser guía de la humanidad y sólo a través de ella se puede alcanzar
lo que ellos mismos denominaron como “orden y progreso”. Decir, en ese momento, que
también la ciencia puede llevarnos a la ruina y causar la mayor de las desgracias supone ir más
allá del horizonte intelectual de su tiempo y situarse ante él con una mirada crítica. ¿Cuál es el
límite ético que Mary señala en su obra? Mary no critica de Víctor su pasión por el
conocimiento ni su afán de contribuir con grandes obras a la humanidad, tampoco el
experimento en sí mismo. Lo que critica es no haber pensado que su experimento era la
creación de una persona y que, en consecuencia, aquello que iba a ser su resultado debía ser
acogido como algo único tanto por él como por toda la humanidad. Mary pone los límites de la
actividad científica en el respeto a la dignidad de la persona, signifique esto lo que pueda
significar. El largo debate suscitado y que promovió Frankenstein ha cuajado en una toma de
postura social ante la ciencia y la técnica y ha abierto campos como pueden ser, entre otros, la
política científica o la bioética. A este respecto, las reflexiones que se realizan en la novela
pueden ser de interés para profundizar en lo que desde la década de 1950 se conoce como
transhumanismo.
Pero aún creo que hay una tercera aportación que hace Frankenstein a la historia de la
humanidad y que toca muy de cerca a los seres humanos del siglo XXI. Frankenstein es un
experimento que ahora estamos comenzando a comprender y sobre el que quiero llamar la
atención para fomentarlo: Frankenstein nos hace ver la realidad desde el punto de vista de la
diferencia. Eso, aunque parezca una simple palabra, supone una aportación esencial que voy a
explicar de manera breve aún a riesgo de caer en simplificaciones.
Dicho de otra manera: ser diferente debería ser lo normal. Nadie tiene que avergonzarse de no
ajustarse a la norma porque lo realmente falso es la norma.
Es en esa dimensión donde Frankenstein tiene mucho que aportar todavía. Al hablarnos de la
experiencia de un monstruo, al hablarnos incluso el monstruo en primera persona, nos está
hablando lo diferente desde su punto de vista y nos suministra elementos para que lo
podamos comprender de forma adecuada: comprender sus pensamientos y sentir sus
sentimientos. Pensar en la identidad de un monstruo es pensar en la identidad de aquello que
es diferente. Incluso el Diccionario de la RAE cae en el prejuicio esencialista al definir al
monstruo como una “producción contra el orden regular de la naturaleza”. Le falta decir,
permítanme la ironía, que hay que entenderlo como un error de la naturaleza. En Frankenstein
ese “error” habla en primera persona y nos llama a escuchar las características con las que
quiere ser recibido por el mundo de las personas que se ajustan a la norma.
¿Cómo entendemos habitualmente nuestra identidad? La filosofía ha sido rica en enumerar los
parámetros a través de los cuales nos comprendemos a nosotros mismos. La memoria destaca
entre ellos: somos nuestra historia recordada, dar cuenta de nosotros es narrarnos a través
del tiempo del que guardamos memoria. Y sin embargo, la criatura viene al mundo con plena
conciencia pero sin contenidos dentro de ella. Y la narración que cuenta es su lucha contra
aquellos que no le reciben por no ser normal, su identidad es una identidad negativa: soy lo
que no son los demás o, incluso, soy contra los demás. Otro parámetro es el cuerpo: yo soy mi
cuerpo, un conjunto de materia a través de la cual me expreso de forma unitaria. Pero la
criatura tiene un cuerpo deforme y fuera de medida y, si seguimos la imagen habitual del mito,
es un mixtum compositum de cadáveres humanos. ¿Cuál es su identidad corporal? Otro
parámetro de identidad es nuestra relación con los otros en sus diferentes niveles: la familia
de la que heredamos los apellidos, los amigos con los cuales nos socializamos, la comunidad
política que nos acoge como ciudadanos, la comunidad humana que nos acoge como personas,
etc. Y, sin embargo, ¿qué identidad social tiene la criatura? Sin familia que lo reciba y eduque,
sin amigos ni iguales entre los que crezca la autoestima, sin nación y sin comunidad que lo
reciba como persona, siendo él el único de su especie.
La novedad de Frankenstein es que nos hace ver al otro no desde el punto de vista de aquello
en lo que coincidimos con él sino escuchar su propia voz desde la diferencia que expresa. Y la
conclusión a la que se llega, aunque pueda estar oculta por el desenlace final de la novela en la
que el mundo de la normalidad burguesa representada por Viktor es aniquilado junto al
mundo de la excepción representado por la criatura, es que lo diferente tiene derecho a ser,
aunque para aceptarlo tal y como es tengamos que crear un lenguaje nuevo, hacer nuevas
categorías de lo humano para poder integrar dentro de ellas a todo lo que hasta ahora ha sido
injustamente excluido. Hay que crear una nueva humanidad. Creo que, aunque desde el punto
de vista dramático tenga la novela que terminar en tragedia, eso nos está llamando a que no
ocurra lo mismo en nuestra sociedad, que aquí no se admite esa conclusión y que debemos
actuar para que el final social de lo diferente no sea su aniquilación sino su presencia
enriquecedora de aquello común que nos caracteriza. Esa lectura de Frankenstein le presta
total actualidad a la obra de Mary Shelley de manera que sus pensamientos son todavía
operantes para construir futuro.
Prezi: https://prezi.com/zz49crobfa7m/analisis-literario-de-frankenstein/
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