V-168-2018 Apelación

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TRIBUNAL : PRIMER JUZGADO DE LETRAS EN LO CIVIL DE ARICA

ROL : V-168-2018
CARATULADO : “CLAROS BALDERRAMA ASTERIA ESTHER”
CUADERNO : PRINCIPAL

RECURSO DE APELACIÓN.-

S. J. L. EN LO CIVIL (1º)

JUAN CARLOS JIMÉNEZ TAPIA, Abogado, por la parte solicitante, en autos


voluntarios sobre solicitud de administración extraordinaria y autorización para enajenar
bienes raíces sociales, caratulados “CLAROS BALDERRAMA ASTERIA ESTHER”, Causa
Rol Nº V-168-2018, a V.S. respetuosamente digo:
Que, vengo a interponer recurso de apelación en contra de la sentencia de fecha 20
de agosto de 2018, que resolvió rechazar la solicitud de otorgamiento de administración
extraordinaria de la sociedad conyugal en favor de doña Asteria Claros Balderrama, y su
petición subsidiaria de autorizar la enajenación de los bienes sociales individualizados en el
libelo de fojas 1 y siguientes de autos, en razón de los argumentos de hecho y de derecho
que paso a exponer a continuación:

I.- ANTECEDENTES DE LA SENTENCIA:


El fallo funda el rechazo a la solicitud de mi representada en que a juicio del
sentenciador, la prueba incorporada al proceso resultaría insuficiente para acceder a dicha
petición. Indica que si bien la solicitante argumenta que su marido se trasladó al extranjero
el año 1972, solo rindió prueba testimonial para acreditar tal hecho, debiendo, en concepto
del sentenciador, haberse rendido prueba documental o haberse oficiado a la Policía de
Investigaciones de Chile u otra institución para que informara acerca de las salidas y
entradas al país de don Macario Vargas Tarqui y de su domicilio actual.
Luego, señala que para que un juez pueda autorizar la venta de un bien inmueble,
deben especificarse a lo menos las condiciones de la venta del bien raíz, indicando como
mínimo el precio y al potencial comprador, lo que no se verificó en autos. Finalmente,
arguye que no se aclara el motivo por el cual se requeriría enajenar todos los inmuebles,
pudiendo ser suficiente la enajenación de uno solo.

II.- EN CUANTO A LA SUPUESTA FALTA DE PRUEBA:


En el juicio se rindió información sumaria de testigos, en donde don Eduardo
Enrique González Montaño, declaró que hace 30 años que conocía a la señora Asteria
Claros Balderrama, por cuanto eran vecinos y le consta que ella vivió siempre sola con sus
dos hijas y nunca vio la presencia del padre de ellas, quien nunca estuvo presente. Inclusive,
indica que vino a saber después que era casada, pues su madre la visitaba y conocía por más
de 50 años. Agrega, que mi representada es quien ha trabajado siempre y adquirido sus
bienes, gracias a su esfuerzo, teniendo locales y casas para atender sus negocios. No
obstante, se encuentra enferma, con problemas en sus rodillas, hipertensión, serios
problemas al corazón y que le consta todo lo señalado además, porque es quien la atiende
para llevarla al médico y trasladarla, necesitando además vender porque económicamente
sus negocios no han estado bien.
Por su parte, doña María Angélica Zavala Mamani, declara que la conoce por más
de 20 años a mi representada, por razones de trabajo, ya que es su contadora y le consta que
vive sola con sus dos hijos y que jamás le había conocido un esposo o padre de los hijos.
Todo lo que adquirió lo hizo gracias a su propio esfuerzo y tesón, sin necesitar ayuda de
nadie. Señala que este esposo, jamás se ha aparecido y menos ha estado presente, estando
sola la señora Asteria. Indica además que mi representada cuenta con propiedades a su
nombre y necesita vender o traspasarlas para sus hijos, por cuanto su salud está bastante
deteriorada, tiene muchas enfermedades, es de edad avanzada con más de 70 años y debe
cubrir sus gastos médicos. Agrega que paga muchas contribuciones, requiriendo entonces
autorización judicial para administrar sus propios bienes, y enajenarlos, por cuando se ha
vuelto insostenible para ella mantenerlos, debido a su avanzada edad y más, por la ausencia
del esposo.
De esta forma, las declaraciones transcritas resultan ser contestes, dando razón de
sus dichos, de manera que cumplen con los caracteres de suficiencia que el sentenciador
decide restar. Inclusive, tratándose de una gestión voluntaria, en donde se rinde prueba
mediante informaciones sumarias, de aplicarse la valoración de la prueba testimonial
dispuesta en los juicios de carácter contencioso, constituiría plena prueba, de conformidad
al artículo 384 Nº 2 del Código de Procedimiento Civil.
Por otra parte, el artículo 138 del Código Civil, establece que se suspenderá la
administración de la sociedad conyugal por parte del marido en caso de que a éste último
afecte impedimento de larga o indefinida duración, esté prolongadamente ausente o hubiere
desaparecido, debiendo aplicarse lo preceptuado en el artículo 1758 del referido cuerpo
legal, en cuanto prescribe que la mujer, en caso de interdicción del marido o larga ausencia
de éste sin comunicación con su familia, tendrá por el mismo hecho la administración de la
sociedad conyugal.
En consecuencia, con la información sumaria de los testigos se acreditó
suficientemente el hecho de que el marido lleva ausente 20 años, sin contacto con sus hijos
ni la solicitante, y esta última ha sido quien se ha encargado en los hechos de los negocios y
los bienes de su familia. En tales circunstancias, oficiar a la Policía de Investigaciones de
Chile u otra institución para verificar las salidas y entradas al país del marido de mi
representada y su domicilio actual no viene al caso, toda vez que lo que debe acreditarse es
alternativamente su interdicción, o su desaparecimiento o su prolongada ausencia,
verificándose esta última circunstancia con las declaraciones de los testigos contestes y los
títulos de dominio, todos inscritos a su nombre. En cualquier caso, V.S. podía también
haber ordenado como medida para mejor resolver oficiar a la Policía de Investigaciones
de Chile, en virtud de lo dispuesto en el artículo 820 del Código de Procedimiento Civil,
que señala: “Asimismo decretarán de oficio las diligencias informativas que estimen
convenientes”, de manera que el sentenciador, de considerar de suma importancia el oficio
a la Policía de Investigaciones, debió decretar de oficio dicha diligencia.
Cabe señalar, siendo una circunstancia trascendente para la presente gestión
voluntaria, que el Defensor de Ausentes nombrado por este propio Tribunal, en la calidad
en que compareció, aceptando su cargo, jurando su fiel desempeño y con una vasta
experiencia en el ejercicio de esta labor, concluyó en su informe de fecha 29 de junio de 2018,
que “NO ADVIERTE INCONVENIENTE en que se CONCEDA LA ADMINISTRACIÓN
EXTRAORDINARIA DE LA SOCIEDAD CONYUGAL, a doña ASTERIA ESTHER CLAROS
BALDERRAMA, y se ACOJA la solicitud de AUTORIZACIÓN PARA ENAJENAR LOS
BIENES RAÍCES PROPIOS, por ignorarse el paradero o si está vivo su marido, don MACARIO
VARGAS TARQUI (…)”, pasando luego a individualizar los respectivos inmuebles, para
afirmar también que: “(…) quedando suficientemente justificada con la prueba rendida,
debido a que se han adjuntado documentos oficiales fidedignos que constituyen la
información sumaria, y sobre todo la testimonial rendida por los testigos don EDUARDO
ENRIQUE GONZALEZ MONTAÑO y doña MARÍA ANGÉLICA ZAVALA MAMANI ante el
ministro de fe, a su haber el Receptor Judicial de Arica, don LUIS CARRASCO VERGARA, quien
examinó su cualidad y tuvo por acreditada su identidad por medio de su cédula de identidad vigente
exhibida al momento de su declaración, según lo dispuesto en el artículo 913 del Código de
Procedimiento Civil, que están contestes en conocer a la solicitante, que vive con sus hijos y que jamás
han conocido a su esposo, adquiriendo con su esfuerzo bienes patrimoniales, que necesita vender o
traspasar a sus hijos, por su salud deteriorada, avanzada edad y cubrir sus gastos médicos, debido a
que su marido don MACARIO VARGAS TARQUI, luego de convivir siete años con ella, se fue hace
más de 45 años, abandonándola y nunca más se supo de su persona, ignorando su actual paradero o
si está vivo”. De esta forma, quien podía haberse opuesto a las solicitudes efectuadas por
nuestra parte en estos autos, en interés del ausente, no obstante fue del parecer de que se
accediera a la petición de mi representada. Sin embargo, la sentencia que se impugna no
hace referencia a cuáles serían las razones por las cuales no se valoró ni apreció el informe
del Defensor de Ausentes, al punto de derechamente no pronunciarse sobre el mismo ni
tomarlo en consideración en la decisión final.
Por estas consideraciones, debió acoger la solicitud de que se concediera la
administración extraordinaria de la sociedad conyugal a mi representada.
III.- EN CUANTO A LA NO AUTORIZACIÓN DE LA VENTA DE LOS BIENES
INMUEBLES:
Al respecto, es necesario reiterar lo ya señalado en el acápite anterior a propósito de
la prueba testimonial, documental -entre ellos el elevado costo de las contribuciones que mi
representada debe pagar-, y sobre todo el informe favorable del Defensor de Ausentes, todos
los cuales acreditan y disponen en favor de mi representada, que se autorice a ésta para
enajenar los bienes raíces individualizados en la solicitud.
Por lo demás, el artículo 1759 del Código Civil, luego de señalar que la mujer
administrará la sociedad conyugal con iguales facultades del marido, establece que sin
autorización judicial, previo conocimiento de causa, no podrá enajenar o gravar
voluntariamente ni prometer enajenar o gravar los bienes raíces sociales. A contrario sensu,
puede enajenarlos o gravarlos, con la autorización judicial respectiva previo conocimiento
de causa.
En este sentido, se inició una gestión voluntaria en la cual se rindió información
sumaria de testigos, se acompañó prueba documental y se contó con un informe del
Defensor de Ausentes nombrado por V.S., favorable a la pretensión de mi representada,
siendo las exigencias que establece el sentenciador innecesarias, en cuanto afirma que para
que un juez pueda autorizar la venta de un bien inmueble “…deben especificarse a lo menos las
condiciones de la venta del bien raíz, es decir, debe indicarse como mínimo el precio y al potencial
comprador…”. Dichas exigencias no se encuentran consagradas en la ley, y por tanto, no
procede aplicarlas en autos. Es más, el artículo 891 del Código de Procedimiento Civil,
dispone en sus últimos tres incisos que, en todo caso, se oirá el dictamen del respectivo
defensor de ausentes antes de resolver en definitiva, informe que se rindió y fue favorable;
y si se concediera la autorización, fijará el tribunal un plazo para que se haga uso de ella, y
en caso de no fijar plazo alguno, se entenderá caducada la autorización en el término de 6
meses.
Por tanto, bastaba que se concediera la autorización con la prueba rendida en estos
autos voluntarios, pudiendo mi representada proceder a las respectivas enajenaciones
dentro del plazo máximo de 6 meses, en caso de que V.S. no limitara por un tiempo menor
a proceder a las respectivas transferencias.
En consideración a lo expuesto precedentemente, debió V.S. acceder a la petición de
autorización judicial a mi representada para enajenar los bienes raíces sociales, una vez
concedida la administración extraordinaria de la sociedad conyugal en favor de ella.

POR TANTO, en virtud de las razones aducidas en el cuerpo de esta presentación,


RUEGO A V.S.: Se sirva tener por interpuesto recurso de apelación en contra de la
sentencia de fecha 20 de agosto de 2018, notificada a nuestra parte con fecha 27 de agosto en
curso, concederlo y elevarlo ante la Ilustrísima Corte de Apelaciones respectiva, a fin de que
dicho Ilustrísimo Tribunal, conociendo del recurso de apelación, lo acoja, revocando la
sentencia del tribunal a quo, y concediendo, en su lugar, la administración extraordinaria
de la sociedad conyugal a doña ASTERIA ESTHER CARLOS BALDERRAMA, como
asimismo, la autorización judicial para enajenar los bienes raíces sociales individualizados
en la solicitud de fojas 1 y siguientes de autos.

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