Cultura Castrense
Cultura Castrense
Cultura Castrense
El origen de la cultura castrense se sitúa entre la transición de la Edad de Bronce y la Edad de Hierro 500 a. c.
El mundo castrense tendrá su máximo apogeo en los siglos anteriores el proceso de dominación romana de
Galicia s. I a. c.
La cerámica castrense es muy variada pero con una abundante decoración geométrica: vasos, vajillas, jarras,
etc.
La metalurgia se desenvuelve tanto como en el trabajo de bronce como en el del hierro que se introduce en
estos momentos.
El oro también fue muy utilizado para la joyería; pendientes, brazaletes, espirales, etc.
Dentro del mundo castrense, destaca en su arte la escultura con representación de cabezas de guerreros o
guerreros de cuerpo entero o de animales.
Economía castrense:
El clima era semejante al actual, la vegetación era mas espesa y la fauna mas abundante.
La economía se basaba en la agricultura y la ganadería. Predominaba el cultivo de los cereales; trigo, maíz y
leguminosas.
Las prácticas agrícolas, estaban a cargo de las mujeres, al igual que la recolección de frutos silvestres.
La ganadería se basaba en una cabaña mixta de: ovejas, cabras, cerdos, vacas y caballos.
El ganado vacuno se utilizaba como animal de tiro y para la producción de leche, carne y piel.
En la cultura castrense la caza era muy abundante como: ciervos, jabalís, etc.
Hay una gran explotación de yacimientos auríferos (oro) con gran cantidad de objetos de orfebrería y también
se localizaron hornos de fundición en los castros.
El comercio por trueque, consistía en el intercambio de metales, productos agrícolas, ganaderos y marinos.
Se exportaban metales a las regiones meridionales (Sur) de la península, donde estaban asentadas colonias
púnicas y romanas.
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Se importaban cerámica, vidrio y objetos de valor.
Sociedad castrense:
Se trata de una sociedad gentilicia, es una sociedad carente de Estado. Había un cierto equilibrio social y
económico entre los hombres y las mujeres, estas poseían las tierras pero los hombres el ganado y la
autoridad.
La estructura de esta sociedad estaba formada por unos círculos concéntricos en los que se situaban los grupos
sociales según el número de sus miembros.
La unidad social inferior era el clan, era una familia con un antepasado común y muy solidarios entre si.
La segunda unidad de acuerdo con el numero de sus miembros seria la centuria era una unidad de carácter
político−militar.
Cada una de ellas, poseía un jefe. La centuria era una agrupación de hombres.
Varias centurias se agrupaban formando un pópulos que poseía unos límites territoriales claramente definidos.
Dentro de esta sociedad castrense existía una aristocracia guerrera de origen celta con jefes pero sin rey, cuyas
mujeres serían las propietarias de las tierras y bajo este grupo una población numerosa que trabajaría las
tierras de la aristocracia.
Religión castrense:
En primer lugar tenemos las divinidades del poder, aquí situamos al Dios castrense Júpiter que recibía culto en
las cimas de los montes.
Dentro de este grupo tenemos a Mercurio (Dios de los caminos) a los Lares Viales (dioses de carácter
funerario) que eran los encargados de dirigir las almas de los muertos.
La Galicia romana.
En el momento de la conquista los pueblos gallegos poseían una uniformidad socio−económica y cultural.
Sobre estos pueblos del Norte (Cántabros, Astores y Galaicos) va a incidir la maquinaria militar, y
administrativa del Imperio Romano.
Después del desembarco en Ampurias para expulsar a los cartaginenses de la península ibérica su conquista
del sur y Lusitania, Roma decide trasladar su base de operaciones a las tierras del norte.
Las referencias sobre los galaicos aparecen unidas a su riqueza minera y su carácter guerrero.
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La conquista la inicia Décimo Julio Bruto en el año 137 a. c. y la termina César Augusto en el 20 a. c., con la
incorporación de Galicia y Asturias.
Romanización:
Por romanización se entiende un proceso de larga duración a través del que los elementos indígenas del
mundo castrense irán absorbiendo progresivamente los elementos de la cultura romana hasta terminar
totalmente integrados en ella.
La penetración de objetos romanos ya sea de carácter utilitario o artístico. Estos sólo son disfrutados por una
minoría de población que los adquieren por que ya están romanizados.
• COMERCIO: la densidad del comercio romano fue débil, aunque la Torre de Hércules nos permite suponer
un cierto desenvolvimiento de las rutas marítimas.
• LATÍN: la progresiva imposición del latín como lengua oficial en Galicia Romana, constituye un fenómeno
de gran importancia histórica y hace desaparecer las lenguas indígenas anteriores de las cuales únicamente
sobrevive algún rasgo en la lengua gallega.
Economía:
La Aristocracia indígena romana era también poseedora de estas villas se introdujeron nuevas formas de
explotación agrícola.
El interés económico más importante para los romanos fue la explotación de recursos mineros. La explotación
de recursos auríferos en Galicia determinó en tres siglos se removieran 600 Mm³. de mineral aurífero rumbo a
Roma. Siendo las minas propiedad del Estado las distintas zonas auríferas eran divididas en distritos mineros
dirigidos por procuradores del metal también se explotaban los depósitos de estaño, hierro, granito y pizarra.
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• libres
• esclavos
• condenados a trabajos forzados
A finales del s. II desaparece el cargo de procurador que indica una cierta decadencia en la explotación del
mineral, escasez de mano de obra o a la crisis social.
Sociedad:
El mundo galaico−romano no poseía un carácter militario sino que permanecía superpuestas dos
civilizaciones diferentes:
El Mundo Paleocristiano:
Fueron varias las circunstancias que determinaron la difusión del cristianismo en Galicia. La Romanización
siempre estuvo unida a sus creencias religiosas, durante la crisis del Imperio Romano s III.
Su religión perderá consistencia y el cristianismo empezará a extenderse como oposición a la religión oficial
romana.
Los primeros testimonios de la religión romana aparecen a finales del s. III y principios del s. IV y con una
mayor extensión con el Edicto de Milán (313).
Una prueba fue Prisciliano s. IV, que fue nombrado Obispo de Ávila, su predicación se caracterizó por
introducir prácticas mágicas, ascética y darle a la mujer un importante papel religioso (fue condenado a
muerte por hereje).