Cardiovascular-Respiratorio Geriatria
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FACTORES DE RIESGO
CARDIOVASCULAR: HIPERTENSIÓN
ARTERIAL M.ª Eugenia Soto Martín
Patricia Gili Martínez-Meco
Y DISLIPEMIAS
Gabor Abellán van Kan
HIPERTENSIÓN ARTERIAL por las cuales los ensayos clínicos sobre terapia antihi-
pertensiva en este grupo de edad tendrían más razón
Introducción de ser por su relevancia y su aplicabilidad. La primera,
El aumento de la esperanza de vida y el incremen- los ancianos, por definición, presentan el más elevado
to de la presión arterial (PA) con la edad están ocasio- riesgo absoluto de eventos cardiovasculares y muerte;
nando que la hipertensión arterial sistémica (HTA) sea por lo tanto, el tratamiento sería más costo-efectivo en
uno de los principales motivos de consulta de la ellos (presumiendo que tienen una reducción del ries-
población geriátrica en la práctica médica, así como go relativo con el tratamiento similar a los jóvenes
uno de los mayores problemas de salud pública. La adultos). La segunda razón es la duración media de la
Organización Mundial de la Salud (OMS) concluyó, mayoría de los ensayos clínicos que es de cuatro a
recientemente, que la HTA es la causa más común cinco años; período de tiempo que representa la
atribuible a muerte prevenible en los países desarrolla- mayor proporción de la expectativa de vida activa para
dos (1). Por otro lado, el principal factor de riesgo de un anciano de 80 años, por lo que habría que adaptar
muerte, de muerte cardiovascular y de hipertensión en dichos ensayos a este grupo de población.
la población general es la edad (2). La hipertensión En cuanto al control de la HTA en la población de
constituye el principal factor de riesgo de la enferme- mayor edad, ha sido publicado recientemente un
dad cerebrovascular y uno de los principales de la estudio epidemiológico cuyo objetivo era analizar el
enfermedad coronaria en los ancianos. Datos epide- grado de control de HTA en una amplia muestra de
miológicos demuestran que la principal causa de pér- españoles mayores de 65 años asistidos en Atención
dida funcional, con impacto nefasto en la calidad de Primaria. Las conclusiones fueron que sólo tres de
vida y sobrecarga de uso de los servicios sanitarios y cada 10 hipertensos mayores de 65 años tenían un
sociales, y de muerte de los ancianos, son la enfer- control óptimo de su HTA. Las variables que más se
medad coronaria en hombres y la enfermedad cere- asociaban con el mal control eran la diabetes, el con-
brovascular en las mujeres (3, 4). sumo elevado de alcohol y el tabaquismo. Por último,
La peculiaridad de la HTA en el anciano no puede la conducta terapéutica del médico ante el mal control
ser tan sólo explicada por la alta incidencia y preva- de la PA era demasiado tolerante (5).
lencia de esta enfermedad en las edades más avan-
zadas, sino también por la complejidad clínica relacio- Fisiopatología de la HTA esencial en el anciano
nada con la presencia de distintos grados de
La PA está determinada por el gasto cardiaco (volu-
comorbilidad y discapacidad, de polifarmacia, con
men latido por frecuencia cardiaca) y la resistencia
mayor riesgo de efectos adversos, estado social y fra-
periférica total. Existen considerables diferencias res-
gilidad característicos en esta población. Todos estos
pecto a las características hemodinámicas, humorales
factores contribuyen a definir una entidad distinta a la
y morfológicas de la hipertensión esencial o primaria
observada en los adultos más jóvenes, que requiere
del anciano en comparación con los adultos de edad
un manejo terapéutico más complejo y global, resulta-
media:
do de la valoración geriátrica integral (VGI). Sin embar-
go, es escasa la información basada en la evidencia 1. Hemodinámicas: el anciano hipertenso tiene
científica de que se dispone para un óptimo trata- mayores resistencias periféricas, menor frecuen-
miento de la HTA en el paciente muy anciano; la cia cardiaca, menor volumen latido y, por tanto,
ausencia de ensayos clínicos aleatorizados metodoló- menor gasto cardiaco.
gicamente correctos que incluyan a pacientes mayo- 2. Humorales: el anciano hipertenso tiene una
res de 80 años o ancianos frágiles no permite a los menor actividad de renina plasmática, menor
geriatras aplicar resultados de la medicina basada en producción de prostaglandinas renales y mayo-
la evidencia en estos pacientes. Existen dos razones res niveles de catecolaminas circulantes.
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
3. Morfológicas: el anciano hipertenso presenta un tar tanto el inferior como el superior. Como resul-
mayor tamaño de la masa ventricular izquierda y tado, un descenso súbito de la PA puede provo-
una menor distensibilidad de las grandes arterias. car una disminución precoz del flujo cerebral y
desarrollar eventos cerebrovasculares isquémicos
Estudios epidemiológicos demuestran que la hiper-
por hipoperfusión cerebral, particularmente en
tensión sistólica aislada (HSA) es la forma más común
ancianos con patología vascular cerebral. Por otra
de HTA en el anciano, y que ésta predice con mayor
parte, cuando la PA sobrepasa el límite superior
potencia la mortalidad por enfermedad coronaria y por
de autorregulación se produce un aumento del
accidente cerebrovascular que el componente diastóli-
flujo cerebral, lo que, unido al aumento de la per-
co (6). La elevación aislada de la PA sistólica suele ser
meabilidad y a la rotura de la barrera hematoen-
consecuencia del aumento de la rigidez y de la pérdida
cefálica, así como de las dilataciones de los vasos
de elasticidad de la pared de las arterias, consecuencia
intracraneales, facilita los eventos hemorrágicos.
de la disfunción endotelial sustrato de la arteriosclerosis,
• Arterias: se produce disfunción endotelial (con
como ocurre en el proceso del envejecimiento y de la
vasoconstricción) y remodelado estructural (con
acción de otros factores de riesgo cardiovascular modi-
proliferación e hipertrofia de la media) originando
ficables, como la coexistencia de diabetes o hipercoles-
elevación de las resistencias periféricas y apari-
terolemia. Así, en el anciano suele haber una elevación
ción de arteriopatía periférica.
progresiva de la PA sistólica (PAS) con una estabiliza-
ción e incluso disminución de la PA diastólica (PAD). De Es necesario comentar el fenómeno de hipotensión
este fenómeno surge el concepto de Presión de Pulso ortostática, definida como la caída de la PA sistólica en
(PP): resultado de la diferencia entre ambos componen- más de 20 mmHg y/o de la PA diastólica en más de
tes de la PA. 10 mmHg con el cambio postural a bipedestación y
que se acompaña de mareos o de desvanecimiento,
incluso síncopes con riesgo de caídas. La hipotensión
Afectación de órganos diana
postural es más común en ancianos con HSA, diabé-
La HTA mantenida tiene repercusión sobre distintos ticos, en pacientes con otras patologías que causen
órganos con consecuencias clínicas diversas, que van disautonomía o en aquellos tratados con diuréticos,
a determinar el pronóstico y la actitud terapéutica de la vasodilatadores venosos (nitratos, alfabloqueantes) y
HTA. Los órganos más frecuentemente afectados son: algunos psicotropos.
• Corazón: es el órgano que más sufre las conse-
cuencias de la HSA y de la PP. Se producen
La hipertensión como factor de riesgo
modificaciones funcionales y estructurales que
cardiovascular (FRCV)
incluyen el desarrollo de la disfunción diastólica y
de la hipertrofia ventricular izquierda (HVI). La importancia de la PA en la edad anciana radica
• Riñón: la HTA origina nefroangiosclerosis, y ésta en que es uno de los factores que más aumentan el
conduce a microalbuminuria (factor de riesgo riesgo cardiovascular y en la alta frecuencia de la HTA
cardiovascular independiente y marcador de en esta población. Diversos estudios epidemiológicos
daño renal), proteinuria y, finalmente, insuficiencia prospectivos han mostrado un ascenso del riesgo de
renal crónica progresiva. mortalidad total y cardiovascular al ir aumentando los
• Cerebro: la enfermedad cerebrovascular es el niveles de presión arterial (diastólica y sistólica). En
trastorno clínico asociado a la HTA más frecuente concreto, según el estudio Framingham (6), la HTA,
en el anciano hipertenso. El flujo sanguíneo cere- específicamente la HSA, aumenta de dos a tres veces
bral está controlado por un mecanismo de auto- el riesgo de todas las enfermedades cardiovasculares
rregulación que mantiene constante el flujo, a arterioscleróticas, en especial la enfermedad cerebro-
pesar de las fluctuaciones en la PA sistémica. El vascular y la insuficiencia cardiaca. Por lo tanto, la
mecanismo regulador de la circulación cerebral HSA debe ser tratada de forma efectiva, disminuyen-
consiste en modificar activamente el calibre de los do, de esta forma, la ocurrencia de las enfermedades
vasos cerebrales, produciéndose vasoconstric- cardiovasculares, especialmente la enfermedad cere-
ción cuando la PA aumenta y vasodilatación brovascular. Así, el control de la PA aparece como la
cuando ésta disminuye. Existe un límite superior medida más prioritaria para la prevención de la enfer-
de PA sobre el que el flujo sanguíneo cerebral medad cerebrovascular. Para enfatizar aún más la
aumenta al elevarse la PA, y un límite inferior por importancia que supone un óptimo control de la HTA,
debajo del cual disminuiría el flujo al descender la la OMS publicó en 2002 el riesgo poblacional atribui-
PA. En el anciano, y en especial en el hipertenso, ble que indica la proporción de pérdida de DALYs
la capacidad de autorregulación se altera y se (Disability Adjusted Life Years) o años de vida saluda-
produce un desplazamiento de los límites de ble que serían evitables al desaparecer un factor de
autorregulación cerebral en el sentido de aumen- riesgo vascular (7). Así, el mayor riesgo atribuible de
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Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
* Clasificación determinada por la categoría más alta de PA y según el promedio de dos o más lecturas efectuadas en cada una de dos
o más visitas después de una detección selectiva inicial. JNC: Joint National Committee.
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
nos hipertensos. Una de ellas es la presencia de una MAPA el que mejor se corresponde con las lesiones
brecha auscultatoria que puede resultar en observacio- orgánicas causadas por la HTA, por encima de los
nes erróneas de la PAS. Para evitar lecturas de PAS valores obtenidos en la consulta. Las personas que no
por debajo de los niveles reales se recomienda inflar el presentan descensos de PA de un 10 a un 20%
manguito del esfingomanómetro sobre los 250 mmHg durante las horas de la noche corren más riesgo de
y luego desinflarlo lentamente. Por otro lado, el proce- complicaciones vasculares.
so de arteriosclerosis hace los vasos del anciano muy
rígidos y difíciles de ocluir al inflar el manguito, existien-
Autocontrol de presión arterial
do la posibilidad de que aparezcan niveles de PA falsa-
mente elevados. Este fenómeno se llama «pseudohi- La automedición domiciliaria puede ser útil para
pertensión» y da lugar al tratamiento indebido de estos diagnosticar la HTA de bata blanca, valorar la res-
pacientes, añadiendo el peligro de inducir hipotensión. puesta al tratamiento y aumentar la responsabilidad y
Una manera sencilla de detectar esta anomalía es usar participación activa del paciente en su enfermedad.
la maniobra de Osler. Se palpa la arteria radial distal al Hay que comprobar de forma periódica la exactitud de
manguito. Si la arteria no se colapsa al inflar el mangui- estos aparatos.
to, la prueba es positiva y puede hacerse el diagnósti-
co de «pseudohipertensión».
Estudio del anciano con hipertensión
Los objetivos del estudio de pacientes ancianos
Monitorización ambulatoria de la presión arterial
con hipertensión comprobada son los siguientes:
(MAPA)
1. Evaluar los hábitos de vida potencialmente
La MAPA proporciona información sobre la PA
modificables.
durante las 24 horas y, por lo tanto, durante las activi-
2. Excluir o detectar causas de HTA secundarias
dades cotidianas y el sueño, pero no está recomen-
(tabla 3).
dada como procedimiento de rutina en la evaluación
3. Examinar la presencia de otros FRCV (tabla 4).
inicial del hipertenso. Sus indicaciones son:
4. Examinar la presencia o ausencia de lesiones
1. Detectar la HTA de «bata blanca» (reacción de orgánicas secundarias a la HTA y de enfermeda-
alerta) cuando no exista ninguna lesión en los des cardiovasculares (trastornos clínicos asocia-
órganos diana. dos [TCA] a la HTA) (tabla 5).
2. Estudio de los pacientes con síntomas de hipo- 5. Determinar la estratificación del riesgo vascular a
tensión con la medicación antihipertensiva, partir de los puntos 3 y 4.
hipertensión episódica o pacientes con disfun- 6. Evaluar otras enfermedades concomitantes.
ción autónoma. 7. Y, finalmente, realizar una VGI, incluyendo los
3. Estudio de aparente resistencia terapéutica (con aspectos de funcionalidad, cognición y situación
tres o más fármacos antihipertensivos, siendo social.
uno de ellos un diurético y con persistencia de
La información obtenida de los anteriores puntos va
mal control de la PA).
a determinar el pronóstico de la HTA y a orientar los
En general, los valores ambulatorios de la PA son objetivos terapéuticos, siempre individualizados, en
más bajos que los de la consulta, siendo el valor de la cada anciano.
300
Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
Hipertensión.
Tabaquismo.
Diabetes mellitus.
Dislipemia: colesterol total > 250 mg/dl, HDL < 40 mg/dl hombres y < 50 mg/dl mujeres.
Sedentarismo (menos de 90 minutos de ejercicio/semana).
Obesidad abdominal: perímetro abdominal 88 cm mujeres, 102 cm hombres.
Edad (> 55 años para varones y > 65 para mujeres).
Antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular prematura (< 55 varones, < 65 mujeres).
Microalbuminuria.
Hipertrofia ventricular izquierda.
Cl: aclaramiento de creatinina, Crp: creatinina plasmática, AIT: accidente isquémico transitorio, ECG: electrocardiograma, ETT: ecotras-
torácico, HVI: hipertrofia ventricular izquierda.
Los datos pertinentes se extraen de la anamnesis, de albúmina o del cociente albúmina/creatinina y pro-
de la exploración física, de las pruebas sistemáticas teinuria), perfil lipídico (niveles de c-HDL, c-LDL y tri-
de laboratorio y de otros procedimientos diagnósticos. glicéridos), hematocrito, hemoglobina glicosilada, si
La anamnesis debe incluir antecedentes personales coexiste diabetes mellitus, electrocardiograma (ECG) y
y familiares de TCA, FRCV, hábitos de vida (ejercicio, radiografía de tórax. La baja sensibilidad del ECG en la
dieta), otras patologías y consumo de fármacos. detección de la hipertrofia ventricular izquierda (HVI),
La exploración física: medición correcta de la PA unida al importante valor pronóstico de ésta, hace del
con verificación del brazo contralateral, peso, talla, ecocardiograma (ETT) una prueba importante en la
índice de masa corporal (IMC), perímetro abdominal, evaluación y estratificación del riesgo cardiovascular
fondo de ojo, auscultación cardiaca y pulmonar, así del anciano hipertenso. Sin embargo, no debe reali-
como de soplos carotídeos, abdominales o femorales. zarse como procedimiento de rutina en el estudio ini-
Palpación del tiroides y del abdomen en busca de cial. Las indicaciones de ETT en el estudio de la HTA
nefromegalias, masas o pulsación anómala de la son: alta sospecha de cardiopatía, HTA severa de difí-
aorta. Palpación de los pulsos de miembros inferiores, cil control y criterios ECG de HVI.
de edemas y, finalmente, una exploración neurológica. En principio, no es necesario un estudio más pro-
Pruebas de laboratorio y otros procedimientos fundo de la HTA en la evaluación inicial, salvo que no
diagnósticos: creatinina e iones (K+, Na+, Cl+, Ca+2), se controle la PA o aparezcan datos clínicos, explora-
urea, glucemia, ácido úrico, orina de 24 horas (aclara- torios o complementarios que sugieran la presencia
miento de creatinina, medición de la excreción urinaria de una causa secundaria de HTA (tabla 3). En el
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
paciente anciano cabe destacar la HTA vasculorrenal, dencia científica, las recomendaciones terapéuticas
ya que es la causa más frecuente de HTA secundaria actuales para los ancianos hipertensos, incluso para
en esta edad. Se entiende como HTA vasculorrenal aquellos con HSA, siguen los mismos principios gene-
aquella provocada por hipoperfusión renal debido a la rales que la población adulta más joven, con ciertas
estenosis de la arteria renal principal o una de sus modificaciones comentadas a continuación. Los obje-
ramas (por arteriosclerosis en el anciano). Señalar que tivos generales del tratamiento antihipertensivo son
estas estenosis ateromatosas son una complicación reducir la morbimortalidad de las enfermedades car-
de la HTA esencial, y la mayoría de los ancianos con diovasculares y, por la tanto, evitar la pérdida de auto-
HTA vasculorrenal ya presenta cierto grado de nefro- nomía funcional del anciano, conservando la calidad
angiosclerosis (insuficiencia renal secundaria a HTA de vida de éste y, en último término, la dignidad. Por
esencial) y lesiones arterioscleróticas en otros territo- otro lado, es imprescindible optimizar el tratamiento
rios vasculares (claudicación intermitente, cardiopatía antihipertensivo, evitando los frecuentes efectos
isquémica...). Así, en la mayoría de los casos la HTA adversos de éste en los ancianos, como el ortostatis-
vasculorrenal es indistinguible de la HTA esencial. Hay mo, teniendo en cuenta que la mayoría de estos
que sospechar HTA vasculorrenal cuando la HTA se pacientes van a requerir al menos dos antihipertensi-
inicia después de los 50 años, ante un aumento de vos para alcanzar los objetivos específicos de PA. En
cifras de PA por encima del 15% en seis meses duran- general, estos objetivos son:
te un período de tratamiento estable en ancianos con
1. PA menor de 140/90 (prevención primaria).
HTA esencial y sin causa evidente, resistencia al trata-
2. PA menor 130/80 en diabéticos, nefropatía cró-
miento o una excelente respuesta a los inhibidores de
nica y otros trastornos clínicos asociados como
la enzima convertidora de la angiotensina (IECA) o a
insuficiencia cardiaca, cardiopatía isquémica,
los antagonistas de los receptores de la angiotensina II
infarto cerebral... (prevención secundaria de
(ARAII), deterioro de la función renal ante el inicio del
enfermedades vasculares ya establecidas).
tratamiento con IECA o ARAII (estenosis bilateral de la
3. PA menor de 125/75 para pacientes con insufi-
arteria renal o unilateral de riñón único), ante episodios
ciencia renal y proteinuria mayor de 1g/día (pre-
frecuentes de insuficiencia cardiaca o edema agudo
vención terciaria de insuficiencia renal estable-
de pulmón, especialmente en aquellos en los que la
cida).
función renal se deteriora con diuréticos, despropor-
cionalmente a la ausencia de cardiopatía estructural Sin embargo, estos objetivos deben establecerse
significativa (presentando disfunción diastólica con o según la VGI, comorbilidad no vascular, y tras realizar
sin HVI leve y función sistólica conservada) y la pre- la estratificación del Riesgo Vascular (tabla 6). Por lo
sencia de soplo abdominal en el área renal. Ante la tanto, el objetivo específico de PA a alcanzar en cada
sospecha de HTA vasculorrenal, las pruebas diagnós- paciente anciano debe ser individualizado.
ticas más indicadas en la actualidad son el renograma
— Riesgo bajo: riesgo de padecer enfermedad
isotópico (gammagrafía renal basal y poscaptopril) y el
cerebrovascular clínica (ECV) o infarto agudo de
eco-Doppler de las arterias renales.
miocardio (IAM) durante los próximos 10 años
inferior al 15%.
Tratamiento — Riesgo medio: riesgo de padecer ECV o IAM
durante los próximos 10 años entre el 15-20%.
Varios factores dificultan la elección del tratamiento
— Riesgo alto: riesgo de padecer ECV o IAM
antihipertensivo más óptimo en el anciano. El principal
durante los próximos 10 años entre el 20-30%.
es la carencia de datos basados en la evidencia cientí-
— Riesgo muy alto: riesgo de padecer ECV o IAM
fica, a pesar de la relevante información epidemiológi-
durante los próximos 10 años superior al 30%.
ca existente sobre HTA y población anciana. No hay
ensayos aleatorizados controlados sobre tratamiento
antihipertensivo en ancianos por encima de 80 años.
Medidas no farmacológicas
Cabe mencionar el estudio HYVET (The Hipertension
in the Very Elderly Trial) iniciado en 2001 y que conclu- Los cambios de los hábitos de vida son imprescin-
ye en el presente año, 2005, donde 2.001 pacientes dibles para prevenir la HTA y representan una parte
mayores de 80 años han sido aleatoriamente divididos fundamental del tratamiento desde el inicio. Estos
en dos grupos: un grupo con tratamiento con un IECA cambios incluyen la pérdida ponderal en ancianos con
más un diurético y el otro con dos placebos, seguidos sobrepeso u obesidad, el ejercicio físico (30 minutos
durante cinco años. Este estudio debería responder a de deambulación al día, como mínimo), la reducción
la pregunta de si el tratamiento antihipertensivo activo de la ingesta de sodio (a 2 g por día), el cese del hábi-
está asociado a una reducción en la morbimortalidad to tabáquico y el consumo moderado de alcohol.
cardiovascular como se ha observado en población Estos hábitos saludables reducen la TA, aumentan la
anciana más joven (10). Así, y en espera de futura evi- eficacia de los antihipertensivos y reducen el riesgo
302
Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
FRCV: factores de riesgo cardiovascular, DM: diabetes mellitus, LOD: lesión órgano diana, TCA: trastorno clínico asociado.
PA: presión arterial; HTA: hipertensión arterial; IECA: inhibidor de la enzima convertidora de la angiotensina; ARA: antagonista de los
receptores de la angiotensina; BB: beta-bloqueantes; AC: antagonista del calcio.
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
cardiovascular. Estas medidas son particularmente hora de prevenir las complicaciones cardiovasculares
beneficiosas en el anciano. El JNC VII recomienda ini- de la HTA (11). Sin embargo, otro estudio realizado en
ciar tratamiento no farmacológico, los hábitos saluda- ancianos varones blancos demostró una ligera eficacia
bles, desde el estadio de pre-hipertensión (PA sistóli- superior del tratamiento IECA frente al diurético (12).
ca 120-139 o PA diastólica 80-89), así como en el Los diuréticos tiazídicos aumentan la eficacia antihi-
estadio 1 durante tres meses, siempre y cuando no pertensiva de los tratamientos múltiples y son más
existan LOD ni TCA, que obligaría a iniciar el trata- baratos y asequibles que otros antihipertensivos.
miento farmacológico desde el principio junto con los Según las directrices del JNC VII (ver figura 1), en la
hábitos saludables. HTA en estadio 1 los diuréticos tiazídicos deberían
administrarse como tratamiento inicial en la mayoría
de los pacientes hipertensos o bien en combinación,
Tratamiento farmacológico
cuando se trate de HTA en estadio 2, con algún repre-
El manejo y las indicaciones de las distintas clases sentante de los otros grupos que ha mostrado efecto
de antihipertensivos en la población anciana son simi- beneficioso en ensayos controlados y aleatorizados:
lares al recomendado en el resto de la población adul- betabloqueante (BB), AC, IECA o antagonista de los
ta. El principal objetivo es el control de la PA sistólica, receptores de la angiotensina (ARA). Basados en
que si éste se consigue, la PA diastólica se controla ensayos clínicos, se recomienda el uso preferente de
igualmente. Sin embargo, en la HSA puede que se algunos antihipertensivos en determinados estados de
reduzca la PA diastólica a cifras excesivamente inferio- alto riesgo por comorbilidad vascular asociada. La
res, siendo un factor de riesgo vascular cuando cae tabla 7 contiene una relación de las indicaciones
por debajo de 60 ó 55 mmHg (al aumentar la PP). Se donde se prefiere el uso de otros antihipertensivos, no
inicia siempre tratamiento farmacológico en la HTA tiazídicos, como tratamiento inicial. Igualmente, es
cuando coexisten tres o más FRCV, LOD, TCA o dia- preferible el tratamiento con alfa-bloqueantes en el
betes mellitus, ya que suponen un riesgo vascular alto prostatismo (ante riesgo de ortostatismo se aconseja
o muy alto (ver tabla 6). Los diuréticos tiazídicos han iniciar con dosis bajas y siempre por la noche en dosis
constituido la base del tratamiento en la mayoría de única; sin esta indicación queda como fármaco de ter-
los ensayos clínicos, incluyendo población anciana. En cera o cuarta línea) y betabloqueantes en hipertiroidis-
el control de la HSA en ancianos, la clortalidona y el mo, migrañas, taquiarritmias y temblor esencial.
nitrendipino han demostrado eficacia en la reducción AC tipo dihidropiridonas en el fenómeno de Raynaud.
de los eventos cardiovasculares, en especial los cere- AC no dihidropiridonas, verapamilo y diltiacem, como
brovasculares. Así, en la HSA están especialmente frenadores de frecuencia cardiaca en taquiarritmias.
indicados los diuréticos tiazídicos y los antagonistas El tratamiento farmacológico en el anciano debe ini-
del calcio (AC) tipo dihidropiridonas. El estudio ciarse con un solo fármaco, a dosis bajas y en dosis
ALLHAT demostró que los diuréticos tiazídicos apenas única diaria matutina, planificando una reducción lenta
fueron superados por los AC ni por los inhibidores de y gradual de la PA, evitando descensos bruscos
la enzima convertidora de angiotensina (IECA) a la (véase tabla 8: fármacos usados en la HTA). El pacien-
EC: enfermedad coronaria; HVI: hipertrofia ventricular izquierda; IECA: inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina; ARA: anta-
gonista de receptor de angiotensina; AC: antagonista de calcio.
Losartán, irbesartán1 en nefropatía diabética tipo 2, perindoprilo asociado a indapamida2, Losartán3.
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Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
te en estadio 2 que además presenta LOD, TCA o DM, fijas de antihipertensivos en ancianos, y más en los
se debe iniciar doble terapia, que incluya un diurético que presentan un pobre apoyo social o educacional,
tiazídico. Muy cómodas y sencillas son las asociaciones ya que disminuyen la polifarmacia tan común en esta
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
población (véase tabla 9: asociaciones fijas de antihi- comer o con los cambios posturales (ortostatismo),
pertensivos). Una vez establecida la terapia inicial se con gran riesgo de caídas y fracturas traumáticas.
debe comprobar la respuesta al cabo de un mes, con Si se inicia tratamiento con IECA, ARA o ahorrado-
tomas correctas de cifras tensionales al menos una res de potasio, es necesario un control de la función
vez por semana. Si no hay respuesta favorable: renal (creatinina plasmática; Crp) e iones (potasio; K+)
a) aumentar paulatinamente el fármaco hasta dosis a las dos o cuatro semanas, e igualmente, tras cada
suficientes o toleradas; b) cambiar de fármaco si apa- aumento de dosis. Una vez conseguida la dosis desea-
recen efectos adversos; c) añadir otro fármaco a dosis da del fármaco, se realizará monitorización de creatini-
bajas (preferentemente un diurético si no era el usado na e iones cada seis meses. Se debe suspender IECA
previamente), y preferiblemente que actúe por vía dis- y ARA cuando el valor basal de la creatinina plasmáti-
tinta del primero, y con efecto potenciador. Si tras rea- ca se incrementa por encima de un 35% y/o el K+ sea
lizar estas opciones no se obtienen los objetivos de- mayor de 5,5 mEq/L. Se suspenderá el ahorrador de
seados, es necesario asociar un tercer fármaco potasio con Crp mayores de 2 y K+ mayor de 5 mEq/L.
antihipertensivo, siendo uno de ellos un diurético. El En nefropatías crónicas (definido como aclaramiento
seguimiento en consulta hasta conseguir el objetivo de creatinina < 60 ml/min, Crp > 1,3 mg/dl en mujeres
deseado debe ser cada cuatro semanas, o menos si o >1,5 mg/dl en hombres, o bien por albuminuria de
el paciente sufre HTA en estadio 2. Una vez logrado y > 300 mg/día o 200 mg/gramo de creatinina) es nece-
mantenido dicho objetivo, las visitas se distanciarán sario que un ARA o IECA formen parte del tratamiento
cada tres meses si el paciente presenta riesgo vascu- para frenar el deterioro de la función renal, incluso
lar alto o muy alto o con difícil control de los otros regresar la microalbuminuria. Se puede asociar IECA
FRCV, y cada seis meses si presenta riesgo vascular con ARA, realizando un doble bloqueo del sistema reni-
medio y buen control de los otros FRCV. Igualmente, na-angiotensina-aldosterona (SRAA), al utilizar ambas
una vez logrado el objetivo tensional, los controles de clases de fármacos vías distintas de mecanismos de
PA se realizarán mensualmente. Estas mediciones acción. Es preferible usar como IECA fosinoprilo, al ser
serán registradas en una cartilla del hipertenso, que el el único con doble vía de excreción; no sólo la renal
paciente aportará en cada visita. Se interrogará siem- como el resto de IECAs, sino también biliar. En el doble
pre sobre los hábitos saludables, en especial los dieté- bloqueo del SRAA es especialmente importante el
ticos y el ejercicio físico diario. Asimismo, por posibles seguimiento periódico de la función renal y del potasio.
efectos secundarios (véase tabla 8), como clínica En Crp 2 mg/dl o aclaramiento de creatinina < 30
sugerente de hipotensión. Los ancianos tienen dismi- ml/min los diuréticos tiazídicos son ineficaces, estando
nuidos los reflejos cardiovasculares como los media- indicados los diuréticos del asa a dosis crecientes.
dos por los barorreceptores, por lo que pueden sufrir La HTA resistente tiene lugar cuando un paciente
marcadas disminuciones de PA tras el ejercicio, tras que toma dosis plenas de un régimen triple adecuado
306
Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
Medición inadecuada de la PA, seudorresistencia (HTA de bata blanca, seudoHTA del anciano).
Mala cumplimentación del tratamiento.
Sobrecarga de volumen y pseudotolerancia (exceso de Na+, retención de volumen por nefropatía progresiva,
tratamiento diurético insuficiente).
Dosis bajas de fármacos antihipertensivos o asociaciones no sinérgicas.
Fármacos «hipertensores» (véase cuadro 1).
Trastornos asociados: otros FRCV mal controlados (obesidad, DM...), apnea del sueño, ansiedad.
Hipertensión arterial secundaria.
HTA: hipertensión; Na+: sodio; FRCV: factores de riesgo cardiovascular; DM: diabetes mellitus
(con un diurético), no alcanza el valor deseado de PA. cen la placa en mayores de 75 años de una manera
El clínico después de descartar las causas conocidas similar a los más jóvenes. Además, se ha observado
de HTA (tabla 3), debe investigar cuidadosamente los la reducción de los eventos cardiovasculares, incluso
motivos por los que el paciente no llega al objetivo antes de que se produzca angiográficamente la
deseado (tabla 10). reducción de la placa, lo que implica que las estatinas
operan a través de otros mecanismos adicionales
(efectos pleitróficos). Ejercen acción sobre algunos
DISLIPEMIAS
reactantes de fase aguda y vasomotores; por lo tanto,
Introducción poseen efectos antiinflamatorios contribuyendo a la
estabilidad de la placa, asimismo, efectos antiprolife-
Existen suficientes evidencias de que los niveles ele-
rativos, efectos antitrombogénicos..., mejorando la
vados de colesterol total y de algunas de sus fraccio-
función endotelial.
nes, como el c-LDL, constituyen una causa importan-
Mención especial requiere la ECV subclínica. La
te de enfermedad cardiovascular (ECV). Este nexo
presencia de indicios de daño en el árbol vascular o en
viene establecido por múltiples estudios epidemiológi-
órganos diana es muy frecuente en ancianos y conlle-
cos y ensayos clínicos que muestran la vinculación
va no sólo un elevado riesgo vascular, sino también de
entre niveles elevados y riesgo vascular, así como la efi-
fragilidad (13).
cacia de los tratamientos hipolipemiantes en la reduc-
ción de los eventos cardiovasculares. Aunque la rela-
Diagnóstico
ción de la dislipemia con la enfermedad coronaria
queda bien establecida, la asociación causal entre la Siguiendo el programa ATP III (Adult Treatment Panel)
dislipemia y la enfermedad vascular cerebral no está del NCEP (The Nacional Cholesterol Education Pro-
clara, pero existen datos de ensayos clínicos que gram) (14), el primer paso para justificar la intervención
demuestran una notable reducción de la frecuencia de terapéutica es identificar a todos los individuos en ries-
ictus de manera asociada al empleo de estatinas. La go de padecer enfermedad vascular, estimando el ries-
incidencia de eventos cardiovasculares se incrementa go absoluto (basado en la puntuación de Framingham),
de forma significativa en mayores de 65 años; la y a los que presenten niveles de colesterol elevado.
mayoría de episodios nuevos de cardiopatía coronaria
y eventos cerebrovasculares, así como la mayor parte
Clasificación ATP III de los triglicéridos
de la mortalidad por causas coronaria y cerebrovascu-
en suero (mg/dl)
lar, se producen en individuos de edad avanzada.
150 Normal
Fisiopatología 150-199 Límite superior
200-499 Elevado
A medida que avanza la edad, aumenta la carga de
500 Muy elevado
placas arterioscleróticas, principal factor de riesgo de
la ECV, sufriendo esta población las más elevadas
incidencias y prevalencias de las ECV. La arterioscle- Clasificación ATP III de colesterol LDL,
rosis es un fenómeno casi inseparable del envejeci- total y HDL (mg/dl)
miento. Está demostrado que el mayor determinante
LDL-col:
del riesgo vascular es la presencia y extensión de la
placa de ateroma. Por otro lado, se ha podido com- < 100 Óptimo
probar, mediante angiografía, que las estatinas redu- 100-129 Próximo al óptimo/por encima del óptimo
307
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
308
Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
ción de tratamiento hipolipemiante en el grupo de sonas entre 65 y 80 años con alto riesgo vascular y
edad de 65 a 80 años. Sin embargo, persiste la dis- que presentan niveles de colesterol total igual o mayor
cusión de tratar al grupo de edad superior a los 80 de 240 mg/dl y c-LDL mayor de 160 mg/dl, asociados
años, fundamentalmente por la falta de estudios con- a otro factor de riesgo.
trolados aleatorizados de uso de estatinas u otros Desde el punto de vista práctico, se podrían esta-
hipolipemiantes en este grupo de edad. En contra de blecer las siguientes pautas terapéuticas basadas en
esta tendencia, un estudio evaluó el claro beneficio las directrices del ATP III, en función de la situación
del tratamiento con estatinas en pacientes muy biológica, y de los FRCV presentes, sin obviar las
ancianos (mayores de 80 años) al reducir significati- medidas no farmacológicas y la necesidad de control
vamente la mortalidad de causa coronaria, observan- del resto de estos FRCV (28):
do, asimismo, el infratratamiento en esta población
en comparación con las más jóvenes (22). En el Car- 1. Prevención primaria: dado que, ya sólo por la
diovascular Health Study se observó que en ancianos edad, el riesgo absoluto de los ancianos es
sin cardiopatía isquémica o enfermedad cerebrovas- mayor del 10%, el objetivo es mantener el LDL-
cular pero con colesterol total elevado, el tratamiento col por debajo de 130:
con estatinas reducía casi a la mitad el riesgo de a) Si las LDL-col se encuentran entre 130 y
eventos cardiovasculares y de mortalidad cardiovas- 159: cambio de los estilos de vida.
cular y global, después de ajustar para FRCV, siendo b) Si están entre 160 y 90: intensificar cambios
la reducción similar entre los mayores y los menores en estilo de vida, iniciando un programa de
de 75 años (23). En cuanto a prevención primaria, actividad física si es necesario. Considerar
hasta muy recientemente, sólo existía un estudio con tratamiento farmacológico si coexisten dos
lovastatina que incluía a mayores de 65 a 75 años o más FRCV, incluidos ECV subclínica.
(24). Esta escasez de estudios conllevó a que c) Mayores de 190: cambios de estilo de vida y
muchos ancianos estuvieran excluidos de las guías tratamiento farmacológico.
de prevención. Pero recientemente se ha publicado el
Heart Protection Study realizado con simvastatina 2. Prevención secundaria: dirigidas a personas con
(25), cuyas conclusiones apoyan dos cuestiones: el un evento cardiovascular previo, a diabéticos,
valor de «los equivalentes de riesgo» como precurso- independientemente del estatus vascular, y a
res de ECV clínica, y la posibilidad de que los mayo- ancianos con equivalentes de riesgo:
res de 75-80 años se beneficien de los tratamientos
a) Objetivo: mantener LDL-col por debajo de
de prevención primaria con estatinas. Más reciente-
100.
mente, el estudio ASCOT-LLA (26) mostró en preven-
b) Si el LDL-col se encuentra entre 100 y 129:
ción primaria, con 10 mg de atorvastatina, una reduc-
maximizar los cambios en el estilo de vida.
ción del 36% del infarto de miocardio no mortal y del
c) Si es mayor de 130: tratamiento farmacoló-
27% del ictus. Eran pacientes hipertensos entre 40 y
gico y cambios en el estilo de vida.
79 años, con una edad media de 63 años. Frente a
d) Si HDL-col menor de 40, con colesterol total
este estudio y al PROSPER se publica en 2002 el
y LDL-col normales: abandono de alcohol y
estudio ALLHAT en el que en pacientes hipertensos
tabaco, la actividad física y la reducción del
con una edad media de 66,4, algo mayor que en el
peso son maneras de elevarlo. Las estatinas
ASCOT (pacientes todos mayores de 55 años y tra-
también consiguen incrementar sus valores,
tados con 40 mg de pravastatina), no se observaron
pero no está claro si son eficaces en pre-
efectos beneficiosos significativos en cuanto a la
vención si el LDL-col son menores de 130,
mortalidad por todas las causas o los eventos cere-
por lo que pudiera estar indicado el gemfi-
brovasculares y coronarios. Estos resultados pueden
brozilo, sobre todo si coexiste hipertriglice-
ser explicados por la escasa diferencia de los niveles
mia o síndrome metabólico.
de colesterol LDL y total existentes entre los tratados
con estatinas y los tratados sólo con dieta (27).
El ATP III apoya el control de la hipercolesterolemia
Estatinas (tabla 12)
más allá de los 65 años, si se esperan beneficios a
largo plazo. Así, en individuos mayores de 65 años Son fármacos que inhiben el enzima HMG-CoA
con diabetes, pero sin otros factores de riesgo adicio- reductasa. Disminuyen el LDL-col y en menor grado
nales, al margen de la edad, aconsejan un juicio clíni- los triglicéridos y aumentan el HDL-col. Se metaboli-
co mediante una valoración geriátrica global para zan en el hígado mediante el citocromo p-450. En
determinar con qué grado de intensidad deben apli- ancianos se inicia con la dosis mínina y si es necesa-
carse sus directrices. rio aumentar dosis se hará cada cuatro semanas. Tras
La Sociedad Americana de Cardiología Geriátrica iniciar el tratamiento o aumentar dosis, puede produ-
recomienda tratamiento con hipolipemiantes en per- cirse una elevación transitoria de transaminasas,
309
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
debiendo suspender el tratamiento si esta elevación su edad cronológica), la actitud y decisiones terapéu-
es superior a tres veces la basal. Las complicaciones ticas a seguir, no siempre en concordancia con la
más importantes, aunque poco frecuentes, son la guías terapéuticas derivadas de dichos estudios. Por
miositis y rabdomiolisis (debilidad muscular, calam- lo tanto, en el anciano se requiere siempre individuali-
bres) con elevación de creatinquinasa (CPK) por enci- zar el tratamiento tras haber realizado, en primer lugar,
ma de cinco veces su valor basal. Por todo lo anterior, una correcta valoración geriátrica global e integral. Las
se monitoriza la función hepática y muscular (GOT, progresivas mejoras en la expectativa de vida están
GPT y CPK) antes y cada cuatro-seis semanas duran- posibilitando que los muy ancianos ocupen un seg-
te el primer año de tratamiento. En insuficiencia renal mento cada vez más amplio de la población, con no
moderada-severa es necesario reducir dosis. El gem- pocos años en perspectiva, muchos de ellos libre de
fibrocilo, ácido nicotínico y macrólios inhiben el cito- discapacidad, y con probabilidades elevadas de
cromo-p450, aumentando niveles de las estatinas. Si padecer una ECV, por lo que resulta lícito plantear la
existe dislipemia mixta (hipercolesterolemia e hipertri- oportunidad del rastreo y abordaje terapéutico de la
glicemia) y es necesario asociar gemfibrocilo y estati- hipercolesterolemia en este grupo de más edad. Por lo
nas, nunca se llegará a dosis máximas de ambos fár- tanto, detectar y tratar la hipercolesterolemia parece
macos, y se pautarán separados (gemfibrocilo en correcto, en base a los datos disponibles, en espera
dosis matutina y estatina en dosis nocturna). Monitori- de la llegada de evidencias definitivas.
zar estrechamente CPK y transaminasas.
Por desgracia, los grandes ensayos clínicos con
hipolipemiantes han excluido sistemáticamente a Bibliografía
mayores de 80 años, tanto en prevención primaria 1. Ezzai M, López AD, Rodgers A, Van der Hoorn S,
como secundaria, y sólo una pequeña proporción de Murray CJ. Comparative Risk Assesment Collaborating
los sujetos incluidos tiene, en algunos de ellos, más de Group. Selected major risk factors and global and regio-
70 años. Esto conlleva a que la práctica clínica se nal burden of disease. Lancet 2002; 360: 1347-60.
base en extrapolarizaciones de los resultados de estu- 2. Age-specific relevance of usual blood pressure to vas-
dios realizados en adultos más jóvenes, aunque los cular mortality: a metaanalysis of individual data for one
hallazgos soporten la idea de que los beneficios del million adults in 61 prospective studies. Prospective
tratamiento son extensibles, al menos hasta los 80 Studies Collaborative. Lancet 2002; 360: 1903-13.
3. Whelton PK. Epidemiology of hypertension. Lancet
años, cifra límite en estos trabajos; cuestionando que
1994; 344: 101-6
los eventos cardiovasculares contengan un límite de
4. Kannel WB. Blood pressure as a cardiovascular risk fac-
edad en cuanto a las posibilidades de prevención. tor. Prevention and treatment. JAMA 1996; 275: 1571-6.
Actualmente hay una nítida tendencia a desplazar los 5. Rodríguez Roca GC, Artigao Ródenas LM, Llisterri Caro
esfuerzos de prevención primaria también a la pobla- JL, Alonso Moreno FJ, Banegas Banegas JR, Lou Arnal
ción mayor de 80 años, siempre que no presente S, et al. Control de la hipertensión arterial en la pobla-
enfermedad que limite de forma neta su expectativa ción española mayor de 65 años asistida en Atención
de vida. En prevención secundaria, en principio, se Primaria. Rev Esp Cardiol 2005; 58: 359-66.
aconseja tratar a los muy ancianos igual que a sujetos 6. Stytkowski PA, D’Agostino RB, Belanger AJ, Kanel WB, et
de mediana edad, con la excepción de pacientes con al. Secular trenes in long-term sustained hipertensión,
severas patologías que afecten de forma evidente long-term treatment and cardiovascular mortality. The Fra-
mingham Heart Study 1950 to 1990. Circulation 1996; 93:
tanto a la expectativa de vida, como a la calidad de la
697-703.
misma. Hoy en día y dada la heterogeneidad de la
7. The world health report 2002: Reducing risks, promoting
vejez, el paciente anciano reúne una serie de peculia- healthy life. World Health Organization (WHO); 2002.
ridades, como la pluripatología, farmacocinética, fun- 8. Franklin SS, Khan SA, Wong ND, Larson MG, Levy D. Is
ción, estado cognitivo y social, polifarmacia..., que, sin pulse pressure useful in predicting risk for coronary Heart
duda, van a determinar, o deberían (independiente de
310
Situaciones clínicas más relevantes. Factores de riesgo cardiovascular: hipertensión arterial y dislipemias
disease? The Framingham heart study. Circulation 1999; vention of coronary Herat disease in men with low levels
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Lectura recomendada
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311
C APÍTULO 30
INSUFICIENCIA
Arturo Vilches Moraga
CARDIACA CONGESTIVA
Carlos Rodríguez Pascual
313
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
314
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia cardiaca congestiva
* Otras alternativas para visualizar el corazón cuando se consiguen imágenes de baja calidad mediante ecocardiografía transtorácica
son la ecocardiografía transesofágica, angiografía isotópica y resonancia magnética.
cambios isquémicos o necróticos, las alteraciones del ya que posee un alto valor predictivo negativo, lo que
ritmo, la hipertrofia de cavidades y los patrones de significa que puede excluir IC sin necesidad de prue-
sobrecarga. bas más caras o complicadas. Sus valores están ele-
La existencia de un ECG normal en ausencia de vados en IC descompensada, valvulopatías, isque-
una historia clínica compatible con enfermedad coro- mia aguda, hipertrofia ventricular, hipertensión arterial
naria, prácticamente descarta la existencia de IC (valor y embolia pulmonar. Los pacientes con niveles per-
predictivo negativo del 98%), lo que debe propiciar la sistentemente elevados tienen peor pronóstico, pero
búsqueda de un diagnóstico alternativo. no está claro su utilidad en la monitorización del tra-
tamiento ni pueden diferenciar los pacientes con IC
por disfunción sistólica de los que tienen disfunción
Radiografía de tórax
diastólica.
Permite valorar el tamaño y forma del corazón, vascu-
latura pulmonar y otras estructuras torácicas. Los cam-
Ecografía cardiaca
bios típicos de edema agudo de pulmón (predistribución
vascular, edema intersticial, líneas B de Kerley y derra- La ecocardiografía es la prueba complementaria
mes pleurales), en ausencia de cardiomegalia, sugieren más importante en la evaluación de pacientes en los
la existencia de una patología subyacente aguda. que se sospecha IC. Permite confirmar el diagnóstico
y poner de manifiesto causas subyacentes. Un eco-
cardiograma puede facilitar información sobre la masa
Laboratorio
ventricular, la fracción de eyección, la existencia de
La realización, cuando esté indicada, de enzimas car- alteraciones segmentarias y de la contractilidad, y pre-
diacas (troponina, CPK), bioquímica general, gaso- sencia o ausencia de enfermedades valvulares y del
metría arterial, hemograma y pruebas de función tiroidea pericardio.
permite confirmar o excluir patología subyacente, pre- No está clara la utilidad e indicación de ecografías
cipitante o coadyuvante. seriadas y sólo deben repetirse en caso de cambio clí-
El péptido atril natriurético (BNP y pro-BNP) es nico importante que pueda indicar una mejoría o dete-
particularmente útil en Atención Primaria y urgencias, rioro de la función cardiaca.
315
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
316
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia cardiaca congestiva
317
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
IECAs
ARAII (1)
Betabloqueantes (2)
Diuréticos (3)
Digoxina (5)
I II III IV
ca en que podría estar indicada la revascularización tico o edema angioneurótico previo con IECAs)
(intervenciones por cateterismo cardiaco y/o cirugía deben recibir estos fármacos como tratamiento
abierta), pacientes con enfermedad valvular cardiaca de primera línea, independientemente de su
que precisen de intervención quirúrgica (por ej., repa- estado sintomático, ya que pueden reducir sín-
ración de válvula mitral), aquellos pacientes que se tomas, mejorar la calidad de vida y disminuir
puedan beneficiar de cardioversión eléctrica (por ej., tanto los ingresos hospitalarios, como la tasa de
fibrilación auricular en insuficiencia cardiaca diastólica), mortalidad.
enfermos con arritmias ventriculares (evaluar la indica- La dosis inicial de IECAs debe ser incrementada
ción de desfibrilador implantable) y aquéllos en los que a intervalos de dos semanas hasta alcanzar la
podría estar indicada la terapia de resincronización dosis máxima tolerada o la dosis de manteni-
(marcapasos biventricular). miento utilizada en ensayos clínicos (tabla 6).
En general, los efectos secundarios son poco
1. Inhibidores de la enzima convertidota de angio- frecuentes, pero hasta un 20% de enfermos
tensina (IECAs). Todos los pacientes con una experimenta tos seca persistente que puede
función ventricular izquierda inferior al 45% y sin remitir espontáneamente o al reducir la dosis.
contraindicaciones absolutas (estenosis bilateral Otras complicaciones incluyen la hipotensión
de arteria renal, insuficiencia renal progresiva o (especialmente en situaciones de depleción de
hiperpotasemia severa o mantenida, shock sép- volumen, pacientes ancianos, hiponatrémicos
318
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia cardiaca congestiva
319
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Paso 1
320
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia cardiaca congestiva
síntomas, disminuye las reagudizaciones y aumenta la (cada 4-6 h), pero es menos importante cuando
supervivencia en pacientes con disfunción ventricular se toman espaciados cada 8-12 h.
en clase funcional III y IV que reciben tratamiento con La combinación de hidralazina y nitrato de iso-
IECAs y diuréticos. La eplerenona (25-50 mg) está sorbida a dosis altas (300 mg de hidralazina y
indicada en pacientes que han sufrido infarto de mio- 160 mg de isosorbida) es menos efectiva y peor
cardio y presentan disfunción ventricular izquierda sin- tolerada que los IECAs, pero se puede conside-
tomática o asintomática si son diabéticos. rar en los pacientes que permanecen sintomáti-
Estos fármacos se deben introducir en situa- cos a pesar de tratamiento optimizado con
ción de estabilidad hemodinámica e hidroelec- diuréticos, IECAs y BB o cuando no se puede
trolítica y con niveles de Cr inferiores a 2,5 mg administrar alguno de ellos.
y K menores de 5,0 meq/l, comprobando la fun- 8. Antiagregantes y estatinas. Se deben pautar
ción renal y los electrolitos plasmáticos a los 5-7 para la prevención de episodios trombóticos
días tras su iniciación, 4, 8 y 12 semanas, 6, 9 y arteriales en pacientes con historia de enferme-
12 meses, y cada seis meses a partir de entonces. dad arteriosclerótica sintomática.
Los inhibidores de la aldosterona se tomarán en 9. Anticoagulantes orales. Están indicados en fibri-
días alternos cuando el K se encuentre entre 5,5 lación auricular y enfermedad tromboembólica,
y 5,9 mmol/l, suspendiendo el tratamiento cuan- pero su uso rutinario no está justificado en IC y
do el potasio ascienda por encima de 5,9 mmol/l, ritmo sinusal.
cuando se produzca hipotensión, hipovolemia o 10. Otros fármacos con eficacia no comprobada en
perdida de peso persistente o el paciente de- ICC incluyen la amiodarona, el nesiritide (análo-
sarrolle ginecomastia dolorosa. go sintético similar al BNP) y la dobutamina
6. Digoxina. Reduce los reingresos hospitalarios y (mejoría clínica de corta duración).
retrasa el empeoramiento clínico de pacientes 11. Fármacos que precipitan o empeoran los sínto-
en ritmo sinusal con IC severa tratados con mas y que, por tanto, hemos de evitar en lo posi-
IECAs, betabloqueantes y diuréticos, y en cual- ble en pacientes con ICC, incluyen los AINEs,
quier clase funcional de pacientes en fibrilación bloquentes alfaadrenérgicos, calcioantagonistas
auricular. El rango terapéutico óptimo (0,5- (en especial diltiazem y verapamil), antiarrítmicos
0,8 mg/ml) se puede alcanzar en ancianos inotropos negativos, inhibidores de la fosfodies-
mediante dosis diarias de 0,065 a 0,250 mg. terasa (milrinona, amrinona) y análogos orales de
7. Nitratos e hidralazina. Los nitratos se utilizan como la dopamina (ibopamina).
tratamiento sintomático ante la presencia de angi- 12. Calcioantagonistas. No se recomiendan en el tra-
na o con el objetivo de mejorar la disnea. No exis- tamiento de la IC con disfunción ventricular, en
ten datos que indiquen que mejoran los síntomas particular diltiazem y verapamil, o su uso con BB.
de IC a largo plazo. El desarrollo de tolerancia o Los fármacos más modernos, como felodipino o
taquifilaxia se presenta con tomas frecuentes amlodipino añadidos al tratamiento de la IC, par-
ticularmente diuréticos e IECAs, no añaden mejo-
321
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
ras en la morbimortalidad (1, 2) y deben considedrarse ensayos clínicos. En la actualidad debe ser con-
fármacos de uso concomitante para controlar la hiper- siderada en pacientes con angina de pecho
tensión o episodios de angina. recurrente o severo.
Diagnóstico definitivo
— Evidencia clínica definitiva de insuficiencia cardiaca.
— Función sistólica ventricular izquierda normal, con fracción de eyección mayor del 50%, determinada en las 72 h
siguientes a la descompensación clínica.
— Evidencia objetiva de disfunción diastólica en el estudio hemodinámico (aumento de la presión telediastólica con
volumen telediastólico normal o reducido).
Diagnóstico probable
— Evidencia clínica definitiva de insuficiencia cardiaca.
— Función sistólica ventricular izquierda normal, con fracción de eyección mayor del 50%, determinada en las 72 h
siguientes a la descompensación clínica.
Diagnóstico posible
— Evidencia clínica definitiva de insuficiencia cardiaca.
— Función sistólica ventricular izquierda normal, con fracción de eyección mayor del 50%, pero determinada fuera
de las 72 h siguientes a la descompensación clínica.
322
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia cardiaca congestiva
323
C APÍTULO 31
SÍNDROME
CORONARIO AGUDO
M.ª Teresa Vidán Astiz
325
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
— El ECG normal o inespecífico define un grupo bien por el cardiólogo o el personal del Servicio
de bajo riesgo pero no descarta la isquemia de Urgencias correspondiente. Si el ECG sigue
miocárdica. siendo normal deben repetirse el ECG y los
— La elevación o descenso transitorios o manteni- marcadores de necrosis a las seis-ocho horas.
dos del ST sugieren una mayor probabilidad de Si en el ECG aparecen cambios isquémicos, los
isquemia y por tanto mayor riesgo. marcadores se hacen positivos o aparece un
— Las alteraciones de la onda T tienen menos sig- nuevo episodio de angina el paciente debe ser
nificado. ingresado. Se recomienda un tiempo de obser-
— Las alteraciones de la repolarización con y sin vación entre seis y 24 horas.
dolor son mucho más específicas
La figura 1 resume los pasos a seguir en el manejo
Los marcadores de daño miocárdico: la aparición del paciente con dolor torácico.
en sangre periférica de marcadores intracelulares es El protocolo de manejo inicial en el anciano debe
diagnóstica de daño miocárdico y tiene valor pronós- ser esencialmente el mismo, pero deberá incluir en la
tico existiendo una relación directa entre el valor séri- valoración datos sobre situación funcional, enferme-
co alcanzado y el riesgo de consecuencias adversas. dades crónicas incapacitantes y calidad de vida (utili-
Los más utilizados son la mioglobina, las troponinas y zando siempre que sea posible instrumentos de
la CK-MB masa cuyas características se describen en medida objetivos y validados) que nos ayudarán a
la tabla 1. elegir, después, de entre las distintas opciones
Con estos datos de la historia clínica podemos cla- diagnósticas y terapéuticas la más adecuada para
sificar a los pacientes con dolor torácico en tres gru- cada paciente.
pos que serán la base de los principales algoritmos
para su manejo posterior:
Estratificación de riesgo
1. Pacientes con SCA (con/sin elevación del ST).
La evaluación de la probabilidad de evolución inme-
Los pacientes con elevación del ST deben ser
diata desfavorable se basa en la existencia de criterios
tratados de inmediato con alguna estrategia de
de riesgo. Los enfermos se dividen en tres grupos con
reperfusión coronaria. Los pacientes con SCA-
distinto pronóstico y manejo terapéutico (3, 4).
SEST y marcadores de riesgo deben ser ingre-
sados y tratados según las recomendaciones 1. Grupo de alto riesgo: enfermos que presentan
de las guías clínicas que veremos a continua- alguno de los siguientes criterios:
ción. — Inestabilidad hemodinámica: shock, edema
2. Los pacientes con dolor torácico no coronario agudo de pulmón, hipotensión arterial o
deberán ser tratados según su etiología. insuficiencia mitral.
3. Pacientes con dolor torácico de naturaleza no — Angina recurrente con tratamiento adecua-
clara. Son pacientes que deben permanecer en do.
observación y con seguimiento por las Unida- — Angina de reposo con cambios del seg-
des de dolor torácico si existen en el Hospital o mento ST 1 mV durante la crisis.
326
Situaciones clínicas más relevantes. Síndrome coronario agudo
Dolor torácico
+ –
+ – ALTA
327
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
— O2 en toda crisis anginosa, si existen datos de ximab. Han demostrado beneficios asociados a
congestión pulmonar o la saturación de O2 es AAS y heparina, sobre todo en pacientes de
< 90%. alto riesgo que se van a someter a revasculari-
— Completar la historia clínica, preguntando las zación coronaria. El abciximab se utiliza sólo en
posibles contraindicaciones de tratamiento fibri- el laboratorio de hemodinámica.
nolítico en los casos de SCACEST y detallando Su utilización en ancianos se ha asociado a
el resto de patologías concomitantes, enferme- beneficios mucho menores y a mayores riesgos
dades crónicas y capacidad funcional del especialmente de sangrado. El estudio PUR-
anciano para poder establecer un plan terapéu- SUIT reveló que el uso de eptifibatide se aso-
tico completo, adecuado o no a las guías clíni- ciaba a un incremento del riesgo de hemorragia
cas generales, según los casos. del 71% en el grupo de > 80 años mientras el
— Exploración física incluyendo siempre tensión incremento era del 35 a 80% en más jóvenes.
arterial, frecuencia cardíaca, signos de hipoper- Un análisis similar realizado por los investigado-
fusión, insuficiencia cardíaca o shock. res del estudio PRISM-Plus reveló que, mien-
— En la historia del enfermo debe quedar claro el tras que el beneficio en la reducción en la
grado de riesgo y si se trata de un paciente incidencia de muerte o IAM observado con tiro-
subsidiario de medidas de reanimación cardio- fibán se va atenuando progresivamente con la
pulmonar o no. edad, el riesgo de hemorragias aumenta expo-
nencialmente, haciendo que el balance entre
beneficio y riesgo sea menor en los pacientes
Manejo del síndrome coronario agudo sin elevación
de edad más avanzada (13).
del ST
El manejo consiste fundamentalmente en la utili-
Anticoagulantes
zación de antiagregantes, anticoagulantes, tratamien-
to antianginoso y estabilización de la placa de atero-
Heparinas de bajo peso molecular:
ma (4).
— Enoxaparina (CLEXANE ®) (Indicación Clase I en
fase aguda). Su uso ha demostrado menor ries-
Antiagregantes
go de muerte, IAM no fatal, angina recurrente o
— Aspirina: (indicación clase I). Reduce en un 50% necesidad de revascularización. Se recomienda
el riesgo de muerte e IAM no mortal durante los una dosis de 1 mg/kg/12 h en inyecciones sub-
primeros tres meses, con un beneficio que cutáneas. Según algunos estudios es superior
puede prolongarse hasta los dos años. La dosis al uso de heparina no fraccionada, especial-
a utilizar es de 162-325 mg/día. mente en pacientes que no van a ser sometidos
— Clopidogrel: es un derivado de la tienopiridina a cirugía de revascularización en las primeras
con menos efectos secundarios que la ticlopidi- 24 horas. En caso de insuficiencia renal parece
na. No se ha probado su efectividad en sustitu- que es conveniente reducir la dosis en un 60%
ción de la Aspirina en las fases iniciales del cuando el aclaramiento de creatinina sea infe-
SCA, aunque sí se ha demostrado su eficacia rior a 30 ml/min. (Clase III).
en sustitución de la Aspirina en la prevención — Dalteparina (FRAGMIN ®) (Indicación Clase I en
secundaria a largo plazo. Las guías americanas fase aguda).
establecen la indicación clase I en fase aguda Utilizar a dosis de 120 U/kg/ d con dosis máxi-
en los pacientes con intolerancia a AAS. El ma de 10.000 U. No ha demostrado beneficio a
estudio CURE demostró mayor beneficio con la largo plazo.
asociación AAS y clopidogrel (300 mg en dosis — Nadroparina (FRAXIPARINA ®) (Indicación Clase
de carga el primer día y luego 75 mg/día) que I en fase aguda).
con AAS sólo. El beneficio fue mayor en los Añadida a AAS disminuye la incidencia de muerte,
subgrupos con riesgo intermedio y bajo y con angina recurrente y necesidad de revascularización.
historia de revascularización coronaria previa.
Su utilización estaría, por tanto, indicada en
Heparina no fraccionada:
estos pacientes (Clase I). En los casos de SCA-
SEST de alto riesgo debe valorarse la relación (Indicación Clase I). Su utilización ha demostrado
riesgo beneficio cuando reciben tratamiento una reducción significativa de la mortalidad, la angina
con inhibidores de la GP IIb-IIIa. refractaria y el IAM no mortal inicialmente y hasta 90
— Inhibidores de la glicoproteína IIb-IIIa: son otro días. Se utiliza una dosis inicial de hasta 5.000 U en
grupo de fármacos antiagregantes en el que los bolo y luego una perfusión de 10 U/kg/hora para man-
más conocidos son tirofibán, eptifibatide y abci- tener una cifra de APTT dos veces el control, durante
328
Situaciones clínicas más relevantes. Síndrome coronario agudo
Nitroglicerina
Coronariografía en el Scasest
Indicación Clase I: al reducir la precarga disminuye
el trabajo cardíaco y el consumo de O2 aliviando la
Indicaciones
isquemia. Inicialmente se puede utilizar vía sublingual y
si persisten los síntomas se debe iniciar una perfusión — Se debe realizar coronariografía y revasculariza-
intravenosa durante las primeras 24-48 horas. La do- ción si es técnicamente posible en aquellos pa-
sis de inicio es de 0,3-0,6 mg/h aumentando progresi- cientes clasificados como de alto riesgo, y en
vamente 0,3-0,6 mg/h cada 5 minutos según res- las primeras 24-48 horas tras el evento corona-
puesta de la angina y cifras tensionales hasta una rio (Indicación Clase I).
dosis máxima de 12-24 mg/h. — En los pacientes que reúnen dos o más criterios
Tras la fase inicial se puede utilizar nitroglicerina de riesgo intermedio, debería realizarse corona-
transdérmica 5-15 mg/día. riografía, aunque el límite de tiempo puede ser
más amplio (primeros cuatro días).
— También se recomienda cuando las pruebas de
Betabloqueantes
provocación de isquemia sean positivas o exis-
Indicación Clase I en todos los pacientes con SCA, tan otros criterios de mal pronóstico.
siempre que no exista contraindicación, para alcanzar
una frecuencia cardíaca en reposo entre 50-60 lpm.
No indicada
Las indicaciones en el paciente anciano son las mis-
mas pese a ello, los registros de práctica clínica — Cuando la causa de inestabilidad del paciente
demuestran que la utilización tanto de AAS como de no es cardíaca.
betabloqueantes es menor que en pacientes más — Si se conoce la anatomía coronaria de otros
jóvenes. Los fármacos de primera elección incluyen eventos previos y se ha considerado como no
metoprolol, propranolol y atenolol, sin diferencias en revascularizable.
efectividad entre ellos.
En hospitales sin posibilidad de coronariografía e
intervencionismo in situ:
Calcioantagonistas
— Los pacientes de alto riesgo deben ser trasla-
Son de elección sólo en la angina de Prinzmetal. Los dados lo más precozmente posible, dentro de
no dihidropiridínicos (verapamil y diltiazem) pueden ser las primeras 48 horas a otro hospital con posi-
una alternativa a los betabloqueantes cuando éstos bilidad de realizarla.
están contraindicados, pero no deben usarse si existe — En los pacientes con varios factores de riesgo
disfunción de ventrículo izquierdo (FEVI < 45%) o an- intermedio el traslado puede demorarse hasta
tecedentes de insuficiencia cardíaca. No reducen el cuatro días.
riesgo de muerte, angina refractaria o IAM. Los dihidro-
piridínicos pueden usarse como tratamiento comple-
Manejo del síndrome coronario agudo
mentario si fueran necesarios para control sintomático.
con elevación del ST
El SCACEST presenta algunas diferencias clínicas
IECAs
en los ancianos. El infarto silente es más frecuente en
Indicados en el infarto agudo sin elevación del ST ancianos que en jóvenes. Igualmente, la disnea, el sín-
o cuando existe insuficiencia cardíaca, disfunción del cope o los trastornos de conducta son más frecuen-
ventrículo izquierdo (FEVI < 40%), hipertensión o dia- tes como síntoma principal (2). Un aspecto importan-
betes. Han demostrado reducción de la mortalidad te es el mayor retraso que sistemáticamente se
en los pacientes con IAM o antecedentes de infarto observa en los más mayores en el diagnóstico e ingre-
previo. so hospitalario del IAM. Al menos la mitad de los IAM
329
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
en los ancianos se presentan sin elevación de ST (5), que en general se emplean las mismas pautas, estan-
los cuales tienen mejor pronóstico en la fase aguda, do muy atentos a las peculiaridades de cada enfermo.
aunque no a largo plazo. El curso clínico del IAM suele
ser más complicado (6). Alrededor de la mitad de-
Fibrinolisis versus intervencionismo coronario
sarrolla algún grado de insuficiencia cardíaca durante
percutáneo
el ingreso y un 20% llegan a sufrir shock cardiogénico.
Las complicaciones mecánicas son más frecuentes,
Indicaciones de la fibrinolisis
particularmente la rotura de la pared libre ventricular.
Algunos trastornos del ritmo, en concreto el bloqueo
Clase I:
AV y las arritmias supraventriculares son más frecuen-
tes, mientras que la FV (fibrilación ventricular) primaria — En ausencia de contraindicaciones, debe admi-
es menos frecuente. Las complicaciones no cardíacas nistrarse en pacientes con síntomas que
son también más frecuentes. La mortalidad aumenta comienzan en las primeras 12 horas y presen-
exponencialmente, aproximándose al 30% en los tan un ascenso del segmento ST en al menos
SCACEST en personas mayores de 75 años (6). dos derivaciones contiguas: 1 mm en el plano
frontal y 2 mm en derivaciones precordiales.
— En ausencia de contraindicaciones, debe admi-
Tratamiento farmacológico nistrarse en pacientes con síntomas que
Las indicaciones farmacológicas son, en general, comienzan en las primeras 12 horas y presen-
las mismas que para el SCASEST, aunque con algu- tan un bloqueo de rama izquierda de novo.
nas peculiaridades que deben conocerse:
Clase II:
330
Situaciones clínicas más relevantes. Síndrome coronario agudo
331
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
ros (sin signos de congestión pulmonar) con o sin 7. The GUSTO V Investigator. Reperfusion therapy for
ingurgitación yugular. Se debe buscar en todos los acute myocardial infarction with fibrinolytic therapy or
infartos de localización inferior realizando ECG con combination reduced fibrinolytic therapy and platelet
precordiales derechas (ST en V3R-V4R >1 mm duran- glycoprotein IIb/IIIa inhibition: the GUSTO V randomised
trial. Lancet 2001; 357: 1905-14.
te las primeras horas). El diagnóstico diferencial que
8. The Assessment of the Safety and Efficacy of a New
hay que realizar es principalmente con las complica-
Thrombolytic Regimen (ASSENT)-3 Investigators. Effi-
ciones mecánicas (taponamiento, CIV), generalmen- cacy and safety of tenecteplase in combination with
te realizando ecocardiograma y monitorización he- enoxaparin, abciximab, or unfractionated heparin: the
modinámica. ASSENT-3 randomised trial in acute myocardial infarc-
En su manejo hay que estar alerta a tres posibles tion. Lancet 2001; 358: 605-13.
situaciones: 9. Berger AK, Radford MJ, Wang Y, Krumholz HM. Throm-
bolytic therapy in older patients. J Am Coll Cardiol 2000;
— Disminución de la precarga: por administración 36: 366-74.
de nitroglicetrina iv o exceso de diuréticos. 10. Soumerai SB, McLaughlin TJ, Ross-Degnan D, Christian-
— Pérdida de sincronía en la contracción por blo- sen CL, Gurwitz JH. Effectiveness of thrombolytic therapy
queo AV asociado con frecuencia. for acute myocardial infarction in the elderly: cause for con-
— Fallo del VI por existencia de infarto extenso o cern in the old-old. Arch Intern Med 2002; 162: 561-6.
mala función ventricular previa. 11. Zahn R, Schiele R, Schneider S, Gitt AK, Wienbergen H,
Seidl K, et al. Primary angioplasty versus intravenous
thrombolysis in acute myocardial infarction: can we defi-
Bibliografía ne subgroups of patients benefiting most from primary
1. Harris T, Cook EK, Kannel WB, Goldman L. Proportional angioplasty? Results from the pooled data of the Maxi-
hazards analysis of risk factors coronary heart disease in mal Individual Therapy in Acute Myocardial Infarction
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1023-8. Coll Cardiol 2001; 37: 1827-35.
2. Tresch DD. Management of the older patient with acute 12. De Boer MJ, Ottervanger JP, Van’t Hof AW, Hoorntje
myocardial infarction: Differences in clinical presenta- JC, Suryapranata H, Zijlstra F, Zwolle Myocardial Infarc-
tions between older and younger patients. J Am Geriatr tion Study Group. Reperfusion therapy in elderly
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Cardiología en la angina inestable/infarto sin elevación therapy. J Am Coll Cardiol 2002; 39: 1723-8.
ST. Rev Esp Cardiol 2000; 53: 838-85.
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Lectura recomendada
la Sociedad Española de Cardiología en angina inesta-
ble/infarto sin elevación del segmento ST. Rev Esp Car- ACC/AHA 2002 Guideline Update for the Management of
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332
C APÍTULO 32
333
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
334
Situaciones clínicas más relevantes. Síncope
335
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
336
Situaciones clínicas más relevantes. Síncope
es realizar una predicción del riesgo de muerte súbita La hipotensión ortostática con frecuencia no se
y la probabilidad de síncope cardiaco. acompaña de síntomas. Deberá medirse la PA y la FC
Múltiples estudios han mostrado una mayor mortali- después de que haya permanecido el paciente tum-
dad y muerte súbita en pacientes con síncope de bado durante al menos cinco minutos. Inmediatamen-
causa cardiaca (estenosis aórtica, hipertensión pulmo- te después se obtendrán determinaciones en bipe-
nar y síncope por arritmia). Las arritmias siempre hay destación y durante al menos tres minutos después
que considerarlas en pacientes con enfermedad car- de la bipedestación. Estas mediciones deberán
diaca o ECG alterado. La insuficiencia cardiaca, en- tomarse durante 10 minutos si existe una alta sospe-
fermedad valvular, cardiomiopatía hipertrófica y otros cha de hipotensión ortostática y no se objetiva una
tipos de enfermedad orgánica cardiaca constituyen un caída precoz de la PA. En ocasiones es preciso reali-
grupo de alto riesgo. El bloqueo auriculo-ventricular de zar determinaciones varios días. Las determinaciones
primer grado, el infarto antiguo y el síndrome de Wolff- en sedestación no son válidas.
Parkinson-White son ejemplos de alteraciones ECG de En la exploración cardiológica son esenciales varios
alto riesgo. Si la presencia o ausencia de enfermedad hallazgos para el diagnóstico. Diferencias en la inten-
cardiaca no se puede determinar clínicamente, existen sidad del pulso y de PA (generalmente mayores de 20)
otros tests específicos para la estratificación (ecocar- entre los dos brazos sugieren disección aórtica o robo
diograma, prueba de esfuerzo, estudios de función de subclavia. Hay que prestar especial atención para
ventricular, estudios electrofisiológicos). descartar estenosis aórtica, estenosis subaórtica
hipertrófica, hipertensión pulmonar, mixomas y disec-
ción aórtica.
Aproximación a la evaluación diagnóstica
Siempre hay que realizar una historia, exploración
El ECG y el laboratorio
cuidadosa y un ECG.
Siempre es necesario, aunque la probabilidad de
En la historia obtener un diagnóstico es baja; en caso de hacerlo se
puede actuar rápidamente.
Siempre estarán incluidos los fármacos; se ha visto Los tests de laboratorio iniciales raramente ayudan
que aquellos ancianos que tomaban uno de estos cua- al diagnóstico. Se encuentran hipoglucemia, hipona-
tro fármacos tenían más riesgo de padecer un sínco- tremia, hipocalcemia y fallo renal en el 2 a 3% de los
pe: L-dopa, haloperidol, fluoxetina y prometazina (5). pacientes, pero estas alteraciones ocasionan convul-
Hay datos de la historia que pueden orientar el diagnós- siones más que síncopes.
tico: después de dolor inesperado desagradable sínco-
pe vasovagal; durante o inmediatamente después de En un estudio sobre síncope en el anciano, la histo-
micción, tos, deglución o defecación síncope situacio- ria y la exploración permitieron el diagnóstico del 40%
nal; con neuralgia glosofaríngea o del trigémino síncope de los casos; en otro 15% lo sugirieron, confirmándo-
reflejo; al levantarse hipotensión ortostática; tras bipe- se con tests específicos (ecocardiograma, cateteriza-
destación prolongada y prestando atención puede ser ción, etc.) (9).
vasovagal; atleta bien entrenado después del ejercicio
mediado por reflejo neurocardiogénico; al cambiar de Algoritmo diagnóstico
posición (de sentado a tumbado, inclinándose o girán- (Grupo de trabajo sobre el síncope de la Sociedad
dose en la cama), mixoma auricular o trombo; síncope Europea de Cardiología. Actualización 2004) (7)
con el ejercicio y presencia de enfermedad cardiaca
puede ser por obstrucción del flujo, reflejo neurocar- El uso específico de guías y algoritmos mejora los
diogénico o por arritmia; con la rotación de la cabeza o resultados en cuanto al porcentaje de hallazgos
con presión en el seno carotídeo (tumores, afeitarse, etiológicos, reduciendo el porcentaje de los llamados
collar apretado) síncope del seno carotideo; con movi- de «causa desconocida». En un estudio multicéntrico
mientos del brazo síndrome del robo de la subclavia; sobre 195 pacientes consecutivos que ingresaron en
asociado con vértigo, disartria, diplopía y otros sínto- urgencias en nueve hospitales durante dos meses,
mas motores o sensoriales de isquemia cerebral TIA o demostró que el porcentaje de pacientes al que se les
robo de la subclavia o migraña de arteria basilar. aplicó un protocolo diagnóstico al concluir el estudio
se etiquetaron de síncopes de causa desconocida,
descendieron del 54,4 al 17,5%.
La exploración física
La evaluación inicial de un paciente con pérdidas de
Nos permite diagnosticar entidades específicas y conocimiento puede conducir a un diagnóstico de sín-
descartar otras. La exploración de la existencia de cope con una etiología concreta, o puede no conducir
hipotensión ortostática, hallazgos cardiovasculares y a su etiología, pasando a constituir el denominado
la exploración neurológica son fundamentales. «síncope de causa desconocida».
337
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Evaluación Historia, examen físico, presión arterial en supino y bipedestación, ECG estándar
inicial
+ – + – + –
Revaluación Revaluación
Tratamiento Tratamiento Tratamiento Tratamiento
338
Situaciones clínicas más relevantes. Síncope
— Las pruebas de laboratorio sólo están indicadas evaluación convencional, según cuatro estudios con un
si se sospechan pérdidas de volumen o trastor- total de 247 pacientes, mostró una relación entre sínco-
nos metabólicos. En pacientes con fallo del sis- pe y ECG en 84 pacientes (34%).
tema nervioso autónomo o enfermedad neu- Las recomendaciones de Clase I para la monitori-
rológica deben realizarse pruebas oportunas. zación electrocardiográfica con un grado B de reco-
mendación son:
En ancianos sin enfermedad cardiaca manifiesta y
con síncope inexplicado se deberá realizar inicialmen- — La monitorización en el hospital debe garanti-
te masaje del seno carotídeo y posteriormente, si no zarse cuando el paciente tiene una cardiopatía
ha sido diagnóstico o hay duda de su valor predictivo estructural importante y alto riesgo de padecer
positivo, una prueba de esfuerzo o un ecocardiograma una arritmia que ponga en peligro su vida.
para descartar enfermedad cardiaca oculta. Muchas — La monitorización se indicará cuando el síncope
veces si no se llega al diagnóstico habrá que pensar a través de la clínica tenga sospecha de origen
en la posibilidad de múltiples anormalidades, y en este arrítmico. Con loop monitorización el paciente,
caso corregirlas con un tratamiento de prueba antes cuando recupera la conciencia, activa una gra-
de considerar otras exploraciones más agresivas. bación electrocardiográfica que cubre los minu-
tos anteriores.
— Cuando el mecanismo del síncope siga sin
Pruebas diagnósticas
aclararse después de una evaluación completa,
En los ancianos cuando no se establece una causa especialmente mediante loop record, su colo-
del síncope por la historia y exploración hay que pen- cación está indicada en estudios para probar la
sar en estas cuatro posibilidades: contribución de la bradicardia antes de la colo-
cación de un marcapasos cardiaco en pacien-
1. Detección de arritmias.
tes con síncopes neuromediados probables o
2. Masaje del seno carotídeo.
seguros que presentan episodios sincopales
3. Tilt-test.
frecuentes.
4. Valoración de la posibilidad de existencia de múl-
— Pacientes con bloqueo de rama del haz de His
tiples anormalidades como origen del síncope.
en los que se sospecha bloqueo paroxístico
aurículo-ventricular, a pesar de la evaluación
Detección de arritmias electrofisiológica negativa.
— Pacientes con cardiopatía estructural confirma-
Deberá buscarse siempre una relación entre los sín-
da y/o taquiarritmias ventriculares no sostenidas
tomas y la arritmia. Las arritmias son diagnosticadas
en los que se sospecha taquiarritmias ventricu-
en un 2-9% por ECG o tira de ritmo; para el resto se
lares, a pesar de que el estudio electrofisiológico
necesita Holter o estudios electrofisiológicos. En un
sea negativo.
estudio, el ECG llevó al diagnóstico en el 9% de los
— Pacientes ancianos con caídas inexplicables.
pacientes ancianos a diferencia del 4% en sujetos
jóvenes. La prueba de esfuerzo puede ayudar a detec- La ausencia de síntomas y de arritmias en la moni-
tar isquemia y taqui o bradiarritmias relacionadas con torización no excluye la arritmia como causa del sín-
el ejercicio responsable del síncope, aunque la renta- cope. Pacientes con alta probabilidad pretest necesi-
bilidad de este test para arritmias es muy baja. tarán más evaluación: monitorización durante más
tiempo o estudios electrofisiológicos.
Monitorización electrocardiográfica
(Holter o telemetría) Estudios electrofisiológicos
Como norma, la monitorización electrocardiográfica Son positivos con mayor frecuencia en pacientes
está indicada si existe alta probabilidad previa a la con enfermedad cardiaca conocida, función ventricular
prueba de poder identificar una arritmia como causa anormal (< 40%) o anormalidades en monitorización
del síncope. El registro se realizará en el hospital cuan- electrocardiográfica. La probabilidad de diagnosticar
do el riesgo alto de padecer una arritmia ponga en de taquicardia ventricular por estudios electrofisiológi-
peligro la vida del paciente. cos está aumentada en el caso de: enfermedad car-
Un estudio reciente demuestra que la utilización de diaca orgánica, extrasístoles ventriculares en el ECG y
Holter de asa continua externa no fue útil para el taquicardia ventricular no sostenida en Holter.
diagnóstico de síncope en pacientes de más de dos Los predictores de bradiarritmias son: bradicardia
episodios en los últimos seis meses, sin cardiopatía sinusal, bloqueo AV de primer grado, bloqueos de
estructural y con prueba basculante negativa. Por el rama y bloqueos bifasciculares.
contrario, el Holter implantable en el estudio de sínco- Los predictores de resultados electrofisiológicos
pes de etiología desconocida después de una primera negativos en pacientes con síncope son ausencia de
339
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
340
Situaciones clínicas más relevantes. Síncope
cionadas de ancianos con síncope. Sin embargo, el — En los síncopes inexplicados que por la historia,
valor predictivo positivo no está definido (y probable- la exploración y el ECG nos permitirán estratifi-
mente disminuya con la edad), por lo que habrá que car a los pacientes según el riesgo de arritmias
considerar otras posibles causas de síncopes en fun- y de muerte súbita.
ción de los antecedentes del paciente y las caracterís-
ticas del síncope.
Tratamiento específico de cada entidad
Múltiples anormalidades como origen del síncope Síncope neuromediado (vasovagal, etc.)
La evaluación del anciano debería enfocarse inicial- Sólo está indicado el tratamiento en aquellos
mente en la búsqueda de una sola enfermedad como pacientes con síntomas recurrentes o incapacitantes.
responsable del síncope. Si se encuentra, deberá ini- Habrá que descartar enfermedad psiquiátrica y tratar-
ciarse el tratamiento oportuno; pero en muchas oca- la en su caso.
siones no aparece una sola enfermedad. En estos Las recomendaciones en el tratamiento del síncope
pacientes, la incapacidad para compensar hechos coti- neuromediado con indicaciones de Clase I son:
dianos estresantes en el seno de múltiples problemas
médicos, medicaciones o alteraciones fisiológicas, pue- — Explicar el riesgo y tranquilizar al paciente sobre
den ser responsables de la pérdida de conciencia. Una el pronóstico del vasovagal.
vez se identifican estos factores, deberá establecerse — Evitar los factores desencadenantes y las situa-
el tratamiento oportuno. Por ejemplo, un anciano con ciones causales.
síncope que toma 10 mg de enalapril/día y tiene ane- — Modificar los fármacos hipotensores que pue-
mia, leve hipotensión ortostática y una infección respi- den desencadenarlos.
ratoria reciente; si no se descubre una única causa, lo — Marcapasos cardiacos en pacientes con sín-
correcto sería repleccionar el volumen, tratar la anemia drome cardioinhibitorio o síndrome mixto del
y ajustar o cambiar la medicación antihipertensiva. seno carotídeo.
— Marcapasos cardiaco en pacientes con sínco-
pes vasovagales cardioinhibitorio con una fre-
Otras pruebas diagnósticas
cuencia de > 5 ataques al año o con daño físi-
La radiografía de cráneo, la punción lumbar, el co importante y mayor de 40 años.
SPECT cerebral y la angiografía cerebral no son útiles
para identificar la causa del síncope en ausencia de En el caso de síncope vasovagal se pueden utilizar
hallazgos sugestivos de alteración neurológica. El EEG diversos fármacos:
muestra anormalidades epileptiformes en el 1%, pero 1. Betabloqueantes: atenolol (25-200 mg/día), meto-
casi todos estos casos se sospechan por la clínica. El prolol (50-200 mg/día), propranolol (40-160
TAC craneal se necesita si se sospecha sangrado sub- mg/día). Al disminuir la capacidad contráctil, dis-
dural debido a un traumatismo cerebral o en pacientes minuyen el estímulo sobre los mecanorreceptores.
en que se crea que han tenido una convulsión como 2. Anticolinérgicos: parche de escopolamina
causa de su pérdida de conciencia. (cada dos o tres días), propantelina, disopira-
mida (200-600 mg/día).
Tratamiento 3. Teofilina (6-12 mg/kg/día).
4. Medidas para aumentar el volumen: ingesta de
El tratamiento del síncope va dirigido a la causa sal, mecanismos de compresión desde tobi-
subyacente. llos hasta cinturas y acetato de fludrocortisona
(0,05-0,1 mg/día).
Ingreso hospitalario 5. Marcapasos auriculoventriculares (preferible-
mente DDD): pueden ser útiles en el caso de sín-
La indicación de ingreso hospitalario se fundamen- copes cardioinhibitorios (vasovagales y del seno
ta en: carotídeo), aunque aún puedan suceder reaccio-
— Necesidad de un diagnóstico etiológico precoz nes vasodepresoras. Incluso aquellos con bradi-
si se considera que existe riesgo de una muer- cardia e hipotensión como respuesta en el tilt-
te súbita cardiaca si se retrasa el diagnóstico: test, mejorarán con fármacos.
sospecha de arritmias severas, enfermedades
cardiacas importantes (estenosis aórtica, infar-
Hipotensión ortostática
to), riesgo de muerte súbita o de convulsiones,
ACV recién diagnosticado. El tratamiento adecuado es asegurar una ingesta
— Necesidad de instaurar tratamiento específico adecuada de sal y de líquidos y retirar los fármacos cau-
en el ámbito hospitalario. santes de la hipotensión ortostática. Aconsejar manio-
341
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
bras físicas (doblar las piernas, cuclillas, flexionar el cue- 2. A mmarati F, Colivichi F, Santini M, Diagnosis syncope in
llo, levantarse lentamente) y evitar estar mucho tiempo clinical practice. Implementación of a simplied diagnos-
de pie. Usar medias de compresión hasta el muslo que tic algorithn in a multicentre prospective trial-the OESIL
disminuirán el estancamiento venoso. Las comidas lige- 2 study Eur Heart J 2000 Jun; 21 (11): 935-40.
3. Bannister SR. Autonomic failure. New York: Oxford Uni-
ras y frecuentes evitarán la hipotensión postprandial.
versity Press; 1988. p. 8.
Fármacos a utilizar:
4. Brignole M, Alboni P, Benditt D, Guidelines on manega-
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midodrina (alfa 1 agonista a dosis 2,5 mg/12 5. Cherin P, Colvez A, Deville de Piere G, Sereni D. Risk of
syncope in the elderly and consumption of drugs in case
horas hasta 10 mg/8 horas), eritropoyetina (25
control study. J Clin Epidemiol 1997; 50: 313-20.
a 75 U/kg tres veces a la semana) (Robertson y
6. Guidelines on Management (diagnosis and treatment) of
Davis, 1995). syncope - update 2004: The Task Force on Syncope,
2. Otros fármacos utilizados (con menor éxito): European Society of Cardiology. Europace 2004; 6:
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Europea de Cardiología. Guías de Práctica Clínica sobre
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Arritmias
Actualización 2004. Versión resumida. Rev Esp Card
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detectadas por estudio electrofisiológico se 8. Kapoor W, Snustad D, Peterson J, Wieand HS, Cha R,
beneficiarían de desfibrilador-cardioversor. Karpf M. Syncope in the elderly. Am J Med 1986; 80:
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da se recomienda implantar cardioversor-desfi- 10. Kappor WN. Syncope. En: Cassel CK, Cohen HJ, Lar-
brilador, y si existe bloqueo de rama del haz de son EB, Meier DE, Resnick NM, Rubenstein LZ, Soren-
His se beneficiarían de marcapasos. sen LB, editores. Geriatric Medicine. New York: Sprin-
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11. Kenny J, O´Shea D, Walker HF. Impact of a dedicated
Instrucciones al paciente y educación sanitaria
syncope and falls for older adults on emergrncy beds.
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reproducibility of tilt-table test results in elderly patients
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prolongada, venipuntura, comidas copiosas, el Cardiol 1997; 80: 1492-4.
calor (baños calientes, tomar el sol), el ayuno, la 13. Linzer M, Yang EH, Estes NA III, Wang P, Vorperian VR,
falta de sueño y la ingesta de alcohol. Kappor WN. Diagnosing syncope. Part 2: unexplained
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bebidas isotónicas, ya que muchas veces está
advanced age: clinical and research implications. J
relacionado con deplección de líquidos y sal. En
Gerontol 1989; 44: M179-83.
otros casos deberán retirar el ejercicio. 15. Lipsitz LA. Orthostatic hypotension in the elderly. N Eng
El síncope en ancianos puede ser el responsable de J Med 1989; 14: 952-7.
accidentes de circulación. En Estados Unidos, el 52% 16. McIntosh SJ, Lawson J, Kenny RA. Clinical characte-
ristics of vasodepressor, cardioinhibitory, and mixed
de los estados tienen restricciones de conducción tras
carotid sinus syndrome in the elderly. Am J Med 1993;
un episodio de pérdida de conciencia distinta a con-
95: 203-8.
vulsiones (en este caso el 84% de los estados). La dura-
ción media de la restricción es de 4,3 meses. La pro-
babilidad de recurrencia y de un tratamiento eficaz Lectura recomendada
determinarán la posible restricción. Zipes DP, Libby P, Bonow R, Braunwald E. Braunwald. Tratado
de cardiología. 7.ª ed. 2 vols. Madrid: Elsevier España; 2005.
Martin A, Camm J, Geriatric cardiology: principles and prac-
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342
C APÍTULO 33
343
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
344
Situaciones clínicas más relevantes. Fibrilación auricular. Anticoagulación
Fármaco Dosis inicial Inicio del efecto Dosis de mantenimiento Efectos secundarios
Digoxina Hasta 1,5 mg/día, Toxicidad digitálica,
tanto vía oral como i.v. 2 horas 0,125-0,375 mg/día bloqueos, bradicardia.
Propanolol No precisa 60-90 min 80-240 mg/día Hipotensión, bloqueos,
en varias dosis asma, bradicardia, fallo
cardiaco.
Metoprolol No precisa 4-6 horas 25-100 mg/día Hipotensión, bloqueos,
en dos dosis asma, bradicardia, fallo
cardiaco.
Verapamil No precisa 1-2 horas 120-360 mg/día Hipotensión, bloqueos,
en varias dosis fallo cardiaco, interacción
con digoxina.
Diltiazem No precisa 2-4 horas 120-360 mg/día Hipotensión, bloqueos,
en varias dosis fallo cardiaco.
Amiodarona 800 mg/día 1 semana 1-3 semanas 200 mg/día Toxicidad pulmonar,
600 mg/día 1 semana hipotiroidismo,
400 mg/día 4-6 semanas fototoxicidad, neuropatía,
depósitos corneales,
arritmogenicidad.
b) ß-bloqueantes: son efectivos para controlar la fre- debemos separar el tratamiento agudo del tratamien-
cuencia ventricular tanto en reposo como duran- to de mantenimiento. Pero antes de pautar ningún fár-
te el ejercicio, aunque no hay datos concluyentes maco, es importante realizar tres consideraciones: en
que demuestren una mayor tolerancia al ejercicio. primer lugar, la FA no es una arritmia maligna, y, por
c) Calcio-antagonistas: dentro de este grupo de tanto, los fármacos a utilizar deben ser seguros; en
fármacos, estarían indicados el verapamil y el dil- segundo lugar, existe una alta tasa de cardioversión
tiazem; controlan la frecuencia tanto en reposo espontánea (que puede llegar al 48%), siendo el prin-
como en ejercicio, mejorando la tolerancia al cipal determinante la duración de la fibrilación; en ter-
esfuerzo; tienen la desventaja de poder empeo- cer y último lugar, la recurrencia de la fibrilación es muy
rar o desencadenar un episodio de fallo cardia- frecuente, sobre todo en FA persistente, independien-
co, por lo que no deben administrarse a pacien- temente del fármaco utilizado (sólo el 30% de los
tes con disfunción sistólica. pacientes permanecen en ritmo sinusal a los cuatro
d) Otros fármacos: la amiodarona es capaz de dis- años), siendo factores de riesgo la duración prolonga-
minuir la frecuencia cardiaca, aunque sus efec- da de la arritmia (más de uno-tres años), el tamaño de
tos adversos desaconsejan su uso como prime- la aurícula izquierda (mayor de 55 mm), la edad avan-
ra elección. zada (mayor de 60-75 años) y la existencia de enfer-
medad valvular mitral reumática.
Recuperación del ritmo sinusal
En pacientes sintomáticos, recuperar el ritmo sinu- Cardioversión aguda
sal puede suponer el cese de la sintomatología y, por
Los fármacos de elección son los antiarrítmicos de
tanto, la mejora de la calidad de vida, así como dismi-
clase IC (tabla 3), aunque se pueden utilizar otros fárma-
nuir el riesgo de embolismo sistémico; asimismo,
cos (digoxina, ß-bloqueantes y calcio-antagonistas no
recuperar el ritmo sinusal también disminuye el riesgo
han demostrado ser más eficaces que placebo para
de remodelado auricular que, como sabemos, puede
conseguir revertir la fibrilación). Tampoco hay que olvidar
perpetuar la fibrilación. Además, si la FA supone un
la cardioversión eléctrica, que tiene sus indicaciones.
compromiso hemodinámico, la cardioversión es obli-
gada, incluso mediante choque eléctrico si la situación a) Cardioversión eléctrica: indicada de forma
lo requiere (1, 6). urgente cuando existe compromiso hemodiná-
Si la cardioversión tiene éxito, tenemos que plantear- mico; de forma electiva estaría indicada como
nos la posibilidad de administrar fármacos que man- primera opción ante una fibrilación persistente, y
tengan dicho ritmo sinusal. Por ello, en este punto, de primera o segunda opción ante una fibrilación
345
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
paroxística (tanto si se ha intentado una cardioversión en la FA, consiguiendo tasas de cardioversión del
farmacológica o no) y ante una fibrilación de duración 75 y 50%, respectivamente. Sotalol y dofetilide
desconocida. muestran una eficacia pobre en la cardioversión.
b) Antiarrítmicos IC (flecainida, propafenona): con-
siguen tasas de cardioversión que llegan al 90%
Prevención de las recurrencias
administrados por vía endovenosa, y al 80% por
vía oral; no deben administrarse a pacientes con Estaría indicado el tratamiento profiláctico en pacien-
insuficiencia cardiaca, disminución de la fracción tes con FA paroxística sintomática con más de un epi-
de eyección, isquemia aguda o trastornos sodio en tres meses, y en FA persistente. En el primer
importantes de la conducción. Además, debe caso, serían de elección los antiarrítmicos IC (siempre
vigilarse la duración del QRS por la capacidad que no estuvieran contraindicados por la cardiopatía de
arritmógena de estos fármacos. base). En el caso de la fibrilación persistente, la eficacia
c) Antiarrítmicos IA (quinidina, procainamida y diso- de los distintos fármacos parece ser similar; algunos
piramida): consiguen una cardioversión en torno autores proponen una terapia secuencial con distintos
al 50-60%. Su uso está limitado por su arritmo- antiarrítmicos en las sucesivas recurrencias (por ejem-
genicidad importante. plo, flecainida-sotalol-amiodarona) (tabla 4).
d) Antiarrítmicos III: la amiodarona no ha demostra-
da eficacia en la cardioversión respecto a place-
Prevención de embolismos sistémicos
bo, aunque se utiliza en pacientes con IAM (infar-
to agudo de miocardio) o disfunción sistólica en La FA incrementa el riesgo de sufrir un embolismo
los que están contraindicados los antiarrítmicos sistémico, fundamentalmente un ictus. La capacidad
clase IC. El ibutilide es más eficaz en el flutter que de los anticoagulantes orales para disminuir dicho
346
Situaciones clínicas más relevantes. Fibrilación auricular. Anticoagulación
riesgo ha sido ampliamente demostrada en la literatu- gicas como los anticoagulantes clásicos, pueden
ra científica (10). Diversos estudios encuentran una incrementar el uso de estos fármacos en los próximos
disminución del riesgo de hasta el 86%. La clásica años, sobre todo en los pacientes geriátricos (13).
división entre fibrilación de origen valvular o no, o de Es importante remarcar que, aunque el paciente
valvulopatía reumática o no reumática, parece haber geriátrico es el que más se puede beneficiar del trata-
sido superada por la evidencia de que la reducción del miento anticoagulante por tener una mayor incidencia
riesgo es independiente de la etiología de la fibrila- de ictus, el riesgo de hemorragia secundaria a dicho
ción (11, 12). Sin embargo, aunque en la FA de origen tratamiento aumenta con la edad, así como el riesgo
valvular ya existía un consenso para indicar la anticoa- de interacciones medicamentosas (debido a la polifar-
gulación, en la de origen no valvular se calcula el ries- macia que habitualmente sufre este sector de la
go de sufrir un ictus en base a una serie de facto- población) y las alteraciones metabólicas que dificul-
res (1, 6, 9-11); éstos incluyen la edad (mayor de 75 tan el control adecuado del INR. Además, en los estu-
años), hipertensión arterial, diabetes mellitus, insufi- dios realizados con anticoagulantes no se valoran
ciencia cardiaca congestiva e ictus (tanto transitorio aspectos como la funcionalidad o la situación cogniti-
como establecido). Algunos autores añaden criterios va, imprescindibles cuando hablamos de pacientes
ecocardiográficos como la disfunción ventricular (frac- geriátricos. Por todo ello, la indicación de iniciar trata-
ción de eyección menor del 35%), hipertrofia del miento anticoagulante en un enfermo debe ser, en
ventrículo izquierdo, calcificación del anillo mitral o pre- geriatría, individualizada, valorando con detenimiento
sencia de trombos auriculares en una ecocardiografía los beneficios y los riesgos, e implicando en el trata-
transesofágica. Por tanto, está indicada la anticoagu- miento tanto al paciente como a los familiares o cui-
lación en pacientes con FA y, al menos, uno de los fac- dadores principales (1, 5, 11).
tores de riesgo citados previamente. En ausencia de
dichos factores se podría instaurar tratamiento con
Conclusiones
ácido acetilsalicílico a dosis de 325 mg/día, que ha
demostrado reducir el riesgo de eventos cerebrovas- 1. La FA es una patología muy prevalente en
culares en un 22% (10) (tabla 5). geriatría, que incrementa la morbimortalidad de
El objetivo de la anticoagulación sería alcanzar un los pacientes tanto per se (alteraciones hemo-
INR (international normalized ratio) entre 2 y 3 (11), dinámicas) como por sus complicaciones
puesto que un valor inferior no ha demostrado mayor (embolismo sistémico).
eficacia que la antiagregación con ácido acetilsalicílico 2. El tratamiento puede ir enfocado a restablecer
para prevenir el ictus, y un valor superior incrementa el el ritmo sinusal (y prevenir la recidiva) o a con-
riesgo de sangrado, sobre todo hemorragias intracra- trolar la frecuencia ventricular; no existiendo
neales. Además, el INR debe ser monitorizado si utili- evidencia de que una opción sea superior a la
zamos warfarina o acenocumarol, dado que su meta- otra.
bolismo está influido por muchos y diversos factores 3. En todo paciente con fibrilación se debe realizar
(fármacos, infecciones, descompensaciones metabó- una profilaxis antitrombótica, preferentemente
licas, insuficiencia renal...), y los estudios realizados con anticoagulantes orales (manteniendo un
con dosis fijas de anticoagulantes no han demostrado INR entre 2 y 3); si existe cualquier tipo de con-
eficacia. El desarrollo de nuevos fármacos como las traindicación para anticoagular, el paciente debe
antitrombinas (ximelagatran), que no requieren moni- recibir tratamiento con ácido acetilsalicílico a
torización y no tienen tantas interacciones farmacoló- dosis de 325 mg/día (otros antiagregantes
1
Factores de riesgo: ictus o embolismo sistémico previo, disfunción VI (IC o disminución del 25% en FE), edad >75, HTA.
DM, enfermedad coronaria, tirotoxicosis.
347
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
como el clopidogrel no han sido correctamente estu- 7. Page RL. Newly diagnosed atrial fibrillation. N Engl J
diados en ancianos). Med 2004; 351: 2408-16.
4. La indicación de cualquier tratamiento en geriatría 8. Brugada R, Tapscott T, Czernuszewicz GZ, Marian AJ,
debe ser individualizada, realizando previamente Iglesias A, Mont L, et al. Identification of a genetic locus for
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Atrial fibrillation: strategies to control, combat, and cure.
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348
C APÍTULO 34
Introducción buto del paso de los años (2). Posiblemente, las fuer-
zas de tracción y el sufrimiento mecánico, en general,
Desde la mejora en la prevención de la cardiopatía
establecido en la cara aórtica, generan una lesión
reumática y el fenómeno de transición demográfica, la
endotelial que permite la entrada de lipoproteínas,
cirugía valvular en ancianos está cobrando gran pujan-
fenómeno observado precozmente en esta lesión, que
za. En este capítulo revisaremos tan sólo las lesiones
tras ser oxidadas inician fenómenos de quimiotaxis de
valvulares relevantes en medicina geriátrica.
leucocitos, mayor oxidación, formación de células
espumosas e inicio del proceso inflamatorio y produc-
Estenosis aórtica degenerativa ción de proteínas, como la osteopontina, que modula
Es la valvulopatía más frecuente en la senectud, la la calcificación tisular. Los fenómenos de rotura y
tercera cardiopatía más frecuente en Occidente, tras trombosis local son excepcionales, a diferencia de lo
la hipertensiva y la isquémica. Tras la revascularización que ocurre en la arteriosclerosis.
coronaria es la intervención más frecuente en cirugía En las etapas iniciales este proceso no produce
cardiaca en ancianos. Su pronóstico, una vez iniciada estenosis significativa y se denomina esclerosis valvu-
la sintomatología, es tan ominoso como muchos lar. Característicamente, tanto en esta fase como en la
tumores malignos. de estenosis, no hay fusión comisural (3).
La enfermedad es progresiva, según se ha compro-
bado en estudios prospectivos. En una serie de más
Epidemiología
de 110 enfermos asintomáticos seguidos por cinco
Según el Helsinki Ageing Study el 53% de los mayo- años, el 80% había muerto o necesitado un reempla-
res de 75 años sufrían calcificaciones valvulares y un 5% zo valvular. Los seguimientos ecocardiográficos seria-
estenosis severa (2% entre 75 y 79 años, 8% en mayo- dos demuestran que como media se produce una
res de 85 años) (1). En el Cardiovascular Health Study, el progresión anual en pacientes asintomáticos, con un
38% tenía algún tipo de alteración valvular aórtica con un incremento de 0,2 a 0,4 m/seg en la velocidad del
3% de estenosis; estas cifras crecían hasta el 52% y 4% Jet, de 6 a 8 mmHg de presión en el gradiente y dis-
respectivamente en mayores de 85 años. La mortalidad minución del área valvular de 0,1 cm2. En la forma
difiere en los diferentes estudios, pero una vez apareci-
dos los síntomas se sitúa en torno al 50% y 75% a los
dos y tres años respectivamente. Es conocido que com-
parten factores de riesgo con la cardiopatía isquémica, Tabla 1. Factores de riesgo
pero no disponemos de cifras concretas. Al menos el asociados a estenosis
50% de estos pacientes tienen estenosis coronarias sig-
aórtica
nificativas. Se desconoce la causa, pero es menos fre-
cuente en hombres de raza negra. Menos del 10% de
las estenosis aórticas son de origen reumático o por — Edad avanzada.
degeneración de válvula bicúspide; en estos casos la — Sexo masculino.
sintomatología clínica, en general, ha aparecido entre la — Tabaquismo.
cuarta y sexta década de la vida. — Baja estatura.
— Hipertensión.
Fisiopatología — LDL colesterol elevado.
Se trata de una enfermedad progresiva, de carácter — Lp (a) elevada.
degenerativo, que comparte con la arteriosclerosis — Diabetes.
sistémica factores de riesgo (tabla 1), y no un mero tri-
349
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
más avanzada puede haber cierto grado de fusión de con la gravedad de la estenosis; el pico en las fases
las comisuras. iniciales se acerca al R1 y a medida que la lesión pro-
La estenosis condiciona una hipertrofia ventricular gresa se acerca al R2; su intensidad también suele
izquierda destinada a mantener el gasto cardiaco; el disminuir al caer la función sistólica. Aunque lo común
aumento de masa facilita la isquemia subendocárdica es su irradiación carotídea, puede no hacerlo. Un des-
y la rigidez ventricular con la consiguiente disfunción doblamiento claro del R2 quiere decir que la estenosis
diastólica. A medida que la lesión progresa, se desa- no es grave, pues los velos aún son elásticos.
rrolla una disfunción sistólica. Todas estas modifica-
ciones son las responsables de la sintomatología.
Pulso
El pulso carotídeo clásico es parvo y tardo, es decir,
Síntomas y diagnóstico
disminuido en amplitud y retrasado en la sístole tardía.
Los síntomas clásicos de dolor torácico, síncope e En ancianos este dato puede ser de poco valor al
insuficiencia cardiaca no son tan patentes en muchas estar oscurecido por la arterioesclerosis.
ocasiones. El periodo preclínico es largo. El inicio sin-
tomático suele darse por encima de los 70 años, a
Electrocardiograma
diferencia de otros tipos etiológicos de estenosis aór-
tica, cuya presentación clínica es más precoz. Los sín- Puede demostrar hipertrofia ventricular izquierda,
tomas pueden iniciarse como una intolerancia al aunque como se vio en una serie nacional hasta el
esfuerzo, caídas e inestabilidad postural, lo que dificul- 30% de los mayores de 65 años con esta enferme-
ta el diagnóstico. En pacientes con deterioro cogniti- dad, pueden tenerlo rigurosamente normal. La radio-
vo, el diagnóstico puede ser especialmente difícil al no grafía de tórax es poco representativa, pudiendo apre-
describir los síntomas con claridad. La sintomatología ciar signos de crecimiento ventricular o más raramente
puede atribuirse al propio envejecimiento, o a otras densidades cálcicas en el territorio valvular.
patologías de alta prevalencia, si no se tiene la sufi- El diagnóstico lo da la ecocardiografía con doppler.
ciente pericia. La angina se debe a un aumento en las Nos ayuda en tres determinaciones diagnósticas: el
demandas miocárdicas por la elevada poscarga y fre- área de la estenosis, el gradiente transvalvular y la velo-
cuente enfermedad coronaria coexistente. La pato- cidad del chorro a través de la estenosis, parámetros
genia del síncope de esfuerzo no es clara; probable- todos ellos que nos dan la gravedad de la estenosis.
mente haya un desequilibrio entre las resistencias Además, podremos conocer la función ventricular glo-
periféricas y el gasto cardiaco. También se han eva- bal y segmentaria, espesores ventriculares, estado de
luado las arritmias como su causa, aunque no parecen otras válvulas y presión en la arteria pulmonar.
primordiales en este sentido. Otra especulación se Los tests de esfuerzo no están indicados de forma
refiere al incremento de mecanorreceptores asociado rutinaria y, en ocasiones, pueden ser tremendamente
a la hipertrofia ventricular izquierda que conferirían nocivos. Pueden ser necesarios para aclarar la situa-
mayor sensibilidad al incremento de inotropismo aso- ción hemodinámica en pacientes con síntomas equí-
ciado al aumento de catecolaminas. La muerte súbita vocos. Se ha propuesto realizar ecografía de estrés en
es poco frecuente si estos pacientes están asintomá- pacientes con indicaciones límites para cirugía, de tal
ticos (4). modo que aquellos pacientes con estenosis severa y
La insuficiencia cardiaca puede deberse a un fraca- gradiente no muy alto podrían reflejar una función ven-
so en la función sistólica por alta poscarga o fracaso tricular mala que empeora el pronóstico quirúrgico. El
contráctil o disfunción diastólica por rigidez ventricular. incremento de gradiente con inotrópicos traduce un
Las arritmias supraventriculares pueden empeorar el subgrupo de pacientes buenos candidatos a cirugía.
cuadro.
El diagnóstico clínico se basa en tener un alto índi-
Tratamiento médico
ce de sospecha como premisa. La exploración, el
electrocardiograma y la radiografía de tórax no tienen En el paciente con síntomas y estenosis severa el
tanta riqueza semiológica como en jóvenes. Entre los recambio valvular es de elección. Los fármacos única-
datos básicos, que en una primera aproximación pue- mente alivian la clínica. El beneficio teórico de reducir
den hacernos sospechar la entidad, destacamos: la resistencias periféricas puede seguirse de hipoten-
sión, al ser muy difícil incrementar el gasto cardiaco
Soplo sistólico por la estenosis fija. Los diuréticos pueden reducir la
precarga de forma considerable en estos casos, por lo
Suele ser romboidal, se ausculta mejor en foco aór- que también se prescribirán cautelosamente. Recor-
tico, se silencia en el esternón y vuelve a oírse en área demos que la cardiopatía isquémica es muy prevalen-
apical remedando una insuficiencia mitral (fenómeno te en estos pacientes y debe ser tratada de forma
de Gallivardin). La severidad del soplo no se relaciona óptima.
350
Situaciones clínicas más relevantes. Valvulopatías
No debe olvidarse que estos pacientes son candi- años. Infecciones, fibrilación auricular (mucho más fre-
datos a profilaxis antibiótica de endocarditis. cuente en este segmento etario), bajo gasto, infarto de
Los factores de riesgo vascular deben tratarse miocardio e ictus son las complicaciones más fre-
enérgicamente, pues aunque no hay evidencia de que cuentes. No hay evidencia de que los ancianos que-
su control estricto redunde en un retraso evolutivo en den con mayor deterioro mental que los más jóvenes,
pacientes asintomáticos, los estudios fisiopatológicos aunque sí es más frecuente el delírium postoperatorio.
y la opinión de los expertos apuntan en este sentido. Actualmente se está desarrollando la cirugía mínima-
mente invasiva; la mortalidad es igual al abordaje con-
vencional, pero su morbilidad y estancia hospitalaria
Tratamiento quirúrgico menores (4).
Como indicamos es el tratamiento de elección en el
paciente sintomático con estenosis crítica. Se puede Pronóstico tras cirugía
considerar, individualizando el riesgo, en pacientes
La mortalidad a los 1, 3 y 5 años en series de otros
asintomáticos candidatos a cirugía de by pass coro-
países es de 76%, 84% y 91% respectivamente, con
nario. No está claro el beneficio de la cirugía en
mejoría en la función ventricular, reducción en la hiper-
pacientes con estenosis severa y absolutamente asin-
trofia ventricular y mejoría funcional sintomática y en
tomáticos. Estos pacientes deben ser seguidos de
cuanto a la realización de actividades de la vida diaria.
forma estrecha evaluando la cirugía ante la aparición
Hay seguimientos de hasta 12 años con buena fun-
del menor síntoma atribuible. El riesgo de muerte súbi-
ción protésica.
ta en población general con estenosis aórtica severa
asintomática es de 0,4% año, muy inferior al de la
cirugía y sus complicaciones. Según las guías de la Alternativas a la cirugía
AHA y American College of Cardiology, es una reco-
Actualmente no las hay de eficacia demostrada (5):
mendación IIa si hay evidencia de disfunción sistólica,
cuestión esta infrecuente en pacientes asintomáticos. — Valvuloplastia percutánea: descrita hace 19 años,
Las indicaciones son: se pusieron grandes esperanzas en ella, pero no
ha mostrado su eficacia, con mortalidad y morbi-
— Estenosis severa sintomática.
lidad no despreciable durante el proceso y esca-
— Estenosis severa asintomática con:
sa eficacia a medio y largo plazo. Actualmente
• Datos de rápida progresión en el seguimiento. sólo se contempla como una técnica transitoria
• Disfunción ventricular izquierda. para que un paciente que se encuentre en situa-
ción crítica llegue a la cirugía definitiva.
— Técnicas futuras: extracción de los depósitos
Factores de riesgo para la intervención
cálcicos de la válvula sin lesión de las estructu-
ras, que permite recuperar la elasticidad de los
La mortalidad quirúrgica (a los 30 días) en la series
velos. Es un tratamiento no disponible actual-
de nuestro país rondan el 10% en mayores de 75 años,
mente en clínica, pero parece prometedor. Algo
oscilando entre el 8% y 13%. Los factores predictivos
más compleja es la técnica de implantación val-
previos dependen de la comorbilidad asociada. Pare-
vular protésica percutánea. Esta técnica realizada
ce que el grado funcional de la NYHA, la fracción de
en válvulas pulmonares aún no se ha realizado en
eyección ventricular izquierda inferior al 40%, la coe-
humanos, presentando, además, el problema de
xistencia de insuficiencia aórtica y la superficie corpo-
los ostium coronarios (6).
ral reducida son determinantes. La necesidad de una
intervención asociada como cirugía de repercusión
coronaria o reparación o sustitución mitral elevan la Cirugía no cardiaca en el paciente con estenosis
mortalidad de forma considerable. En las series aórtica
nacionales no hay referencias a las situaciones fun-
La cirugía mayor, traumatológica y abdominal en
cionales o mentales previas, pero parece claro que
especial, es frecuente en pacientes ancianos. Plan-
deben individualizarse los casos y no desestimar a
teemos los siguientes supuestos:
todos los pacientes con mala función física, pues ésta
podría ser dependiente de las malas condiciones car- — Estenosis crítica sintomática: la cirugía valvular
diacas. es la primera medida.
— Estenosis crítica asintomática: la mayoría de los
autores considera indicada la intervención de
Cirugía
recambio valvular como técnica previa. La anes-
Las prótesis biológicas son las más indicadas. Las tesia raquídea está considerada como contrain-
complicaciones son más frecuentes en mayores de 75 dicada por muchos expertos.
351
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
— Pacientes con estenosis de menor grado deben Además de los síntomas clásicos de los más jóvenes,
ser evaluados por el cardiólogo previamente a la hay que fijarse en las taquiarritmias y facilidad para
cirugía y tener un manejo óptimo de pre y post- que asiente en ellas la endocarditis.
carga en el período perioperatorio (7).
Fisiopatología
Insuficiencia mitral El orificio insuficiente permite que parte del volu-
men ventricular escape anterógradamente en forma
Etiopatogenia directa con la presión sistólica ventricular izquierda.
Se trata de un proceso degenerativo, similar a la Teóricamente una reducción en resistencias periféri-
estenosis aórtica degenerativa. En la mitad de los cas disminuiría el reflujo mitral. La dilatación auricular
ancianos se pueden detectar, mediante ecocardio- facilita la aparición de fibrilación auricular y fenóme-
grafía, calcificaciones en el anillo mitral (1). nos tromboembólicos asociados. El incremento de
La mayoría de ellos tiene cierto grado de insuficien- presiones auriculares provoca dilatación de dichas
cia mitral, sin transcendencia patológica en la mayoría cámaras con la consiguiente dificultad para mantener
de los casos. La etiología es variada dada la compleji- ritmo sinusal y asentar en ellas fenómenos trombóticos.
dad funcional de la estructura; la etiología reumática es
poco frecuente en la ancianidad y suele presentarse clí- Síntomas y diagnóstico
nicamente muchos años antes. Las valvas se deses-
tructuran en la degeneración mixoide, el anillo por calci- Se derivan de la congestión pulmonar, astenia, arrit-
ficación, músculos papilares por isquemia, cuerdas mias y fenómenos tromboembólicos. Lo más llamati-
tendinosas por envejecimiento o dilatación ventricular vo en la exploración es la presencia de un soplo pan-
por disfunción sistólica. sistólico, más intenso en ápex, irradiado a axila, y
La calcificación del anillo es un proceso similar al de relacionado en su intensidad con la gravedad de la
la estenosis aórtica degenerativa en su origen, y com- insuficiencia valvular. Las maniobras que incrementan
parte puntos etiológicos con ella como son hiperten- la postcarga incrementan la intensidad del soplo a
sión, diabetes e hiperlipidemia. Hay indicios de que en diferencia del de la estenosis aórtica. En casos de
mujeres es más nociva, o al menos se empareja con depósitos cálcicos muy protruyentes puede producir-
mayor incidencia a eventos vasculares graves como se un soplo diastólico de estenosis mitral. La palpa-
fibrilación auricular, defectos de conducción aurículo- ción torácica demuestra un desplazamiento lateral del
ventricular, ictus tromboembólicos e infarto de miocar- impulso apical.
dio. Su relación con la edad es patente, la incidencia es La radiografía de tórax puede demostrar, principal-
del 10% en menores de 60 años, ascendiendo a casi el mente en proyecciones oblicuas, la calcificación anu-
50% en mayores de 90 años. Es casi cuatro veces más lar; el electrocardiograma es poco específico y depen-
frecuente en mujeres ancianas que en varones. En esta- diente, en parte, de la etiología de la lesión etiológica;
dios iniciales y moderados el depósito de calcio subval- así pueden verse crecimiento ventricular, imágenes de
vular, generalmente posterior, no distorsiona la anatomía cicatrices ventriculares, ondas P mitrales y, principal-
de la zona. En estadios más avanzados, el depósito mente, alteraciones del ritmo, generalmente fibrilación
inmoviliza hasta 2/3 del velo; en ciertas ocasiones, la auricular. Los defectos de conducción también son
inmovilidad de la zona también produce estenosis (2). más frecuentes, tanto en el territorio aurículo-ventricu-
La degeneración mixoide es una patología frecuen- lar como en las ramas de His.
te en la que la matriz normal se transforma en un La ecocardiografía Doppler nos indica la severidad
material laxo con metacromía a la tinción asociada a de la lesión, acerca de la etiología, y en los casos en
factores genéticos y de envejecimiento. Su incidencia que se contemple la cirugía, la ecografía transesofági-
se incrementa con la edad, siendo más frecuente en ca puede orientar hacia los tipos de reparación valvu-
pacientes de 75 a 89 años. Los factores más carac- lar a practicar.
terísticos son la predisposición a endocarditis infeccio-
sa y ruptura de cuerdas tendinosas. La afectación de Tratamiento médico (7)
las valvas posteriores es más frecuente y grave. La
Los puntos esenciales son:
protrusión de la valva en la aurícula en sístole es la
causa de la insuficiencia valvular, pudiendo causar — Control evolutivo.
insuficiencia cardiaca; las cuerdas tendinosas, adelga- — Profilaxis antibiótica contra endocarditis en
zadas, pueden romperse espontáneamente. casos de procedimientos de riesgo.
El prolapso mitral se ve en el 6% al 8% de los ancia- — Fármacos que disminuyan la congestión pulmo-
nos. Afecta a las valvas y cuerdas tendinosas, exis- nar. No está demostrado el beneficio de la
tiendo otra forma producida por afectación papilar de reducción en la postcarga si no hay hipertensión
la porción inferoposterior del ventrículo izquierdo. ni disfunción ventricular sistólica. La asociación
352
Situaciones clínicas más relevantes. Valvulopatías
353
C APÍTULO 35
355
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Estadio I Asintomático
Estadio II Claudicación intermitente:
IIa (leve) — Capaz de caminar más de 150 m.
IIb (moderada-grave) — Capaz de caminar menos de 150 m.
Estadio III Dolor isquémico en reposo:
IIIa — Presión sistólica en el tobillo mayor de 50 mmHg.
IIIb — Presión sistólica en el tobillo menor de 50 mmHg.
Estadio IV Lesiones tróficas:
IVa — Úlcera.
IVb — Gangrena.
vascular estudiado (1). Por tanto, su adecuado control que el ictus o la cardiopatía isquémica. Desde el
y tratamiento retrasan la evolución de la EAP y dismi- punto de vista topográfico, las lesiones arteriales cró-
nuyen su morbimortalidad. nicas obliterantes se agrupan en tres sectores: aor-
toilíaco, femoropoplíteo y distal. La clasificación de
1. Factores de riesgo bien documentados:
Leriche-Fontaine, que tiene también interés pronósti-
a) Tabaquismo: probablemente es el factor de co y terapéutico (4), establece cuatro estadios de la
riesgo más importante; el riesgo de padecer enfermedad según la clínica (tabla 1). Utilizando esta
EAP es casi seis veces más entre los fuma- clasificación, subdividimos la isquemia crónica en
dores; asimismo, agrava el proceso isquémico claudicación intermitente (estadio II) e isquemia críti-
establecido, aumentando el riesgo de ampu- ca (estadios III y IV).
tación. La isquemia crítica es, por tanto, el estadio final de la
b) Diabetes mellitus: duplica el riesgo de pade- isquemia crónica, e implica mal pronóstico, tanto para la
cer EAP y multiplica por 10 la probabilidad extremidad como para la supervivencia. Aquellos
de sufrir una amputación. pacientes con presión sistólica baja en el tobillo tienen
c) Sexo masculino. mayor riesgo que aquellos con presión alta, y la presen-
d) Edad avanzada. cia de diabetes y hábito tabáquico empeora el pronós-
e) Dislipemia: fundamentalmente la combina- tico. La prevalencia no se conoce, aunque se estima
ción de hipertrigliceridemia y niveles bajos de que menos del 10% de los pacientes con claudicación
colesterol HDL. intermitente alcanzarán el siguiente estadio (5).
f) Hipertensión arterial. La isquemia aguda se define como el descenso o
empeoramiento súbito de la perfusión sanguínea,
2. Factores de riesgo «emergentes»:
resultado de la obstrucción arterial, que amenaza la
Aunque se han relacionado con la EAP, estos viabilidad de la extremidad. La incidencia está en torno
factores tienen todavía un significado incierto, y a 200-300 casos por año y millón de habitantes; la
son necesarios más estudios para determinar prevalencia es difícil de determinar (por la confusión
su valor real. Entre los llamados factores de terminológica existente entre isquemia aguda e isque-
riesgo «emergentes» se encuentran los siguien- mia crítica), aunque sí se sabe que aumenta con la
tes: predisposición genética, lipoproteína (a), edad, dado que factores predisponentes como fibrila-
fibrinógeno, hiperhomocisteinemia, proteína C ción auricular (por su potencial embolígeno) o estados
reactiva e hipercoagulabilidad. de hipercoagulabilidad son más frecuentes en el
anciano. La etiología más común de la isquemia
aguda (6) es el embolismo (casi el 80%), fundamental-
Clasificación
mente el de origen cardíaco (90% de los casos de
Clasificamos la EAP, hablando de miembros inferio- embolismo), aunque también puede ser arterio-arte-
res, en dos grandes grupos según la cronopatología rial, embolismo graso, exploraciones invasivas, inter-
de la isquemia: isquemia crónica e isquemia aguda. vencionismo radiológico... Su localización más fre-
La isquemia crónica de miembros inferiores es el cuente es la bifurcación de los vasos. Otras causas de
resultado de una aterosclerosis generalizada, conse- isquemia aguda son la trombosis arterial (con un
cuencia de los mismos factores de riesgo vascular impacto menor, dado que, al asentar sobre una pared
356
Situaciones clínicas más relevantes. Patología vascular periférica
arterial previamente dañada, existe mayor probabili- sobreinfección o inflamación local. Respecto al desa-
dad de haber desarrollado circulación colateral) o los rrollo de gangrena, el dolor aumenta inicialmente
traumatismos arteriales. La gravedad de la isquemia para disminuir o desaparecer cuando está plena-
depende, sobre todo, de la localización y extensión mente establecida.
intraluminal del trombo o émbolo, aunque también En la isquemia aguda también es el dolor el síntoma
influye la presencia de colaterales, estenosis previa del principal (6). Tiene un inicio súbito y se localiza en la
vaso, tiempo de evolución y estado de la circulación región donde se ha producido la oclusión arterial. Con
sistémica. el tiempo se transforma en constante y difuso. Se
suele acompañar de frialdad, palidez y parestesias de
la extremidad afecta (siempre distal a la lesión). La
Manifestaciones clínicas
ausencia de pulsos distales y la presencia de venas
Las lesiones ateromatosas suelen progresar de vacías apoyan el diagnóstico. Si la isquemia se pro-
forma silente y, en general, no se produce un déficit de longa en el tiempo sin que podamos intervenir, apare-
irrigación tisular hasta que la luz arterial no está reduci- cerán síntomas y signos tardíos que indican pérdida
da más allá del 70%. No existe una buena correlación tisular, con mayor riesgo de amputación e, incluso,
entre la clínica y el grado de estenosis y/o la antigüe- amenaza de la vida del paciente. Dichos signos y sín-
dad de las lesiones (4), por lo que es imprescindible la tomas son anestesia o hipoestesia, parálisis, contrac-
realización de estudios hemodinámicos. tura muscular, rigidez, cianosis, flictenas, edema y
En la fase asintomática podemos encontrar signos gangrena.
que indican la presencia de la enfermedad, por ejem- Es importante recordar que existen enfermedades
plo, la ausencia de un pulso. que pueden agravar el dolor (anemia, policitemia, fallo
En la fase sintomática es el dolor el principal sínto- cardíaco, arritmias, enfermedad pulmonar crónica...),
ma, manifestado en forma de claudicación intermiten- y que, dada la pluripatología del paciente geriátrico,
te o de reposo. La claudicación intermitente, que debemos detectar y tratar.
suele ser el primer síntoma, se define como dolor
muscular constrictivo en la extremidad, que aparece
Diagnóstico
con la deambulación, y que obliga al enfermo a dete-
nerse, cediendo con el reposo y reapareciendo al Para realizar un diagnóstico correcto debemos
continuar la marcha (7). Cuando la marcha implica comenzar por una valoración geriátrica integral (con
mayor esfuerzo (ascender pendientes o subir escale- atención especial a la funcionalidad, puesto que la
ras), el dolor aparece de forma más precoz. La locali- claudicación intermitente es un dolor que aparece con
zación del dolor dependerá del sector afectado; de el ejercicio, y pacientes con escasa o nula capacidad
esta forma, las lesiones más proximales (aortoilíacas) de deambulación pueden no manifestar el síntoma) y
suelen producir un dolor urente en cadera, nalgas o una anamnesis exhaustiva que identifique posibles
muslo, asociado muchas veces con sensación de factores de riesgo.
debilidad a dicho nivel; el dolor tipo calambre en la En segundo lugar, debemos conocer las carac-
masa gemelar suele corresponder a lesiones del sec- terísticas del dolor (que suele ser el motivo de con-
tor femoropoplíteo; por último, las lesiones distales sulta) para realizar un diagnóstico diferencial ade-
producen dolor en el pie. La claudicación intermiten- cuado (tabla 2) (8). Generalmente, el dolor de la
te no refleja sólo un trastorno hemodinámico, sino patología osteo-articular suele aparecer al iniciar el
también las alteraciones metabólicas secundarias a la movimiento y mejorar progresivamente, al contrario
hipoxia tisular (4). Además, la distancia recorrida que el dolor isquémico, que aparece con el ejercicio.
necesaria para que aparezca el dolor, y el tiempo que Del mismo modo, la claudicación venosa no mejora
tarda en desaparecer éste con el reposo, son impor- con el reposo y sí con la elevación de la extremidad,
tantes para el pronóstico y la actitud terapéutica a al contrario que la arterial. En ocasiones, pueden
tomar (pacientes en estadio IIb y superiores de la cla- coexistir varias patologías que dificulten el diagnósti-
sificación de Leriche-Fontaine deben ser remitidos al co, por lo que la exploración física en nuestros
especialista). pacientes debe ser, si cabe, más minuciosa. Se
El dolor de reposo corresponde a la fase de puede encontrar atrofia de la masa gemelar y del teji-
isquemia crítica. A menudo es intolerable e incapa- do celular subcutáneo, fundamentalmente de la
citante, suele aparecer por la noche o cuando el grasa (pie brillante, escamoso y esquelético), piel fina
paciente adopta una posición en decúbito, de loca- y seca (el pie isquémico no transpira), pérdida de
lización distal, generalmente en el pie, entorno a una vello, uñas engrosadas, cambios de coloración (pali-
úlcera o un dedo gangrenoso y se exacerba con el dez) al elevar la extremidad con rubor en declive
frío. La presencia de edema intensifica la isquemia y («pie alangostado»). Debemos valorar la presencia
el dolor. Con la formación de úlceras, el dolor puede de pulsos a todos los niveles (femoral, poplíteo, tibial
remitir parcialmente, aunque empeorará si existe posterior y pedio), así como la existencia de soplos
357
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
358
Situaciones clínicas más relevantes. Patología vascular periférica
Neuropáticas Neuroisquémicas
Indoloras. Dolorosas.
Pulsos normales. Pulsos ausentes.
Aspecto perforado típico. Márgenes irregulares.
Localizadas en planta y borde del pie. Localizadas en dedos del pie.
Presencia de callos. Ausencia de callos.
Pérdida de sensibilidad y reflejos. Hallazgos sensitivos variables.
Incremento del flujo sanguíneo. Disminución del flujo sanguíneo.
Venas dilatadas. Venas colapsadas.
Pie caliente y seco. Pie frío.
Deformidades óseas. No deformidades óseas.
Aspecto rojo. Palidez y cianosis.
359
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Negativa Positiva
Aguda Crónica
Otras etiologías
Crítica Moderada
Exploraciones complementarias
Envío urgente al hospital
(ITB, analítica, Doppler, EKG)
Tratamiento
Fuente: Modificado de Protocolos de patología vascular para Atención Primaria. Estevan JM y cols. Ed. Ilustre Colegio Oficial de Médi-
cos de Asturias, Oviedo 2004.
360
Situaciones clínicas más relevantes. Patología vascular periférica
b) Quirúrgico: con procedimientos intravascu- 4. Roqué M, García Madrid C, Reis ED. Avances en el tra-
lares o mínimamente invasivos (fibrinolisis, tamiento médico y mínimamente invasivo de la isquemia
angioplastia transluminal percutánea con crónica de miembros inferiores. Med Clin (Barc) 2003;
balón e implante de stent...), o cirugía con- 120 (1): 24-30.
5. Martín Álvarez A, González Fueyo MJ, Malo E, Barbas
vencional (sigue siendo la técnica de elec-
Galindo MJ, Ortega Martín JM, Fernández Morán C, et
ción para el tratamiento de las oclusiones
al. Angioplastia transluminal percutánea del sector
largas e irregulares). Se considera salvación femoropoplíteo distal en la isquemia crítica. Angiología
satisfactoria cuando logramos la conserva- 2004; 56 (1): 4-16.
ción de una extremidad funcional, incluido al 6. Angle N, Quiñones-Baldrich WJ. Acute arterial and graft
menos parte del pie, sin necesidad de una occlusion. En: Moore WS editor. Vascular surgery: a
prótesis. comprehensive review. 6.ª ed. Philadelphia: Elsevier
Science; 2002. p. 697-718.
4. Isquemia aguda: 7. Nehler MR, Taylor LlM Jr, Moneta GL, Porter JM. Natu-
a) Medidas generales: reposo en cama con la ral History and nonoperative treatment in chronic lower
extremidad ligeramente en declive, suerote- extremity ischemia. En: Moore WS editor. Vascular sur-
gery: a comprehensive review. 6.ª ed. Philadelphia: Else-
rapia y analgesia (con los fármacos y dosis
vier Science; 2002. p. 264-75.
que precise).
8. Estevan Solano JM. Guía de actuación en patología vascu-
b) Tratamiento médico: anticoagulación con lar en Atención Primaria. Madrid: Ed. Adalia Farma; 2004.
heparinas de bajo peso molecular a dosis 9. Llaneza Coto JM. Diagnóstico diferencial y tratamiento
terapéuticas por vía subcutánea (6). general de las úlceras vasculares. Angiología 2003; 55
c) Tratamiento quirúrgico: con fibrinolisis arte- (3): 268-71.
rial directa con catéter u otras técnicas 10. Hiatt WR. Preventing atherothrombotic events in perip-
(trombectomía, embolectomía, angioplastia heral arterial disease: the use of antiplatelet therapy. J
transluminal percutánea y amputación). Intern Med 2002; 251: 193-206.
d) Tratamiento etiológico (fibrilación auricular, 11. Abejón Arroyo A. Tratamiento local de las úlceras vas-
fallo cardíaco, IAM...). culares. Angiología 2003; 55 (3): 272-9.
361
C APÍTULO 36
363
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
CI
CV
CV
Vt
CPT
Vt VRE
VRE
CRF CRF
VR
VR
CPT = capacidad pulmonar total; CV = capacidad vital; VR = Volumen Residual; VRE = volumen de reserva espiratorio; Vt = volumen
de ventilación pulmonar. CRF = capacidad funcional residual; CI = capacidad inspiratoria.
En relación a estas variaciones que conlleva el enve- patológico. Su cálculo es útil para distinguir la insufi-
jecimiento, también se presentan cambios en los volú- ciencia respiratoria de causa pulmonar (gradiente ele-
menes pulmonares (figura 1): vado) de la extrapulmonar (conservado), así como
comparar diferentes gasometrías, valorando su evolu-
— Notable disminución de la capacidad vital (CV)
ción. Dependiendo de la rapidez de instauración, la
que puede alcanzar hasta el 75% de su valor en
insuficiencia respiratoria se puede producir de forma
la séptima década de la vida.
aguda en pacientes con o sin enfermedad respirato-
— Aumento del volumen residual (VR) hasta 50%.
ria, o de forma crónica. Además, es frecuente encon-
— Disminución del volumen máximo espiratorio
trar pacientes con insuficiencia respiratoria crónica
forzado por segundo (VEMS o FEV1) en 10-
que sufren descompensaciones agudas de su enfer-
30 ml/año (5), siendo tal pérdida de 30-
medad de base, que hace que empeore el intercam-
32 ml/año en hombres y 23-25 ml/año en
bio gaseoso.
mujeres. El declive comienza a partir de los 25-
30 años, siendo más acusado conforme pasan
los años. Etiología
— Disminución de la capacidad vital forzada (FVC)
La insuficiencia no es una enfermedad en sí misma,
alrededor de 15-30 ml/año.
sino la consecuencia final común de gran variedad de
La mayoría de los ancianos son capaces de mante- procesos específicos, no sólo de origen respiratorio
ner su estilo de vida y una función respiratoria satisfac- sino también cardiológico, neurológicos, tóxicos y
toria bajo condiciones de reposo, y las alteraciones se traumáticos. Las causas más frecuentes se recogen
ponen de manifiesto cuando las condiciones ambien- en la tabla 2.
tales empeoran o cuando aparece la enfermedad.
Clínica
Fisiopatología
La sintomatología predominante es la correspon-
Son varios los mecanismos fisiopatológicos del sis- diente a la enfermedad causal, ya que la referida a la
tema respiratorio que alteran el intercambio de gases insuficiencia respiratoria (hipoxemia e hipercapnia) es
sanguíneos (tabla 1). La diferencia entre la presión bastante inespecífica.
alveolar de O2 (PAO2) y la PaO2 se denomina gra- La hipoxemia leve no produce síntoma alguno, salvo
diente alvéolo-arterial de oxígeno (PA-aO2), que se la posible ligera hiperventilación. Si es más acusada,
calcula mediante la fórmula: PA – aO2 = PAO2 – PaO2 pueden aparecer síntomas y signos como cianosis,
= [(PB-PH2O) x FiO2 – (PaCO2/0,8)] – PaO2. Siendo cefalea, desorientación temporoespacial, incoor-
PB: presión barométrica, PH2O: presión del vapor de dinación motora, disminución de la capacidad intelec-
agua (47 mmHg), FiO2: fracción inspiratoria de oxíge- tual, bradipsiquia, irritabilidad, ansiedad, somnolen-
no. Un gradiente superior a 20 debe ser considerado cia, estupor o coma, astenia, taquicardia, hipertensión
364
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia respiratoria
arterial y oliguria. Si la hipoxemia se mantiene de forma reducida superior a 5 g/dl, presentándose con niveles
crónica puede producir hipertensión pulmonar, con de PaO2 entre 40 y 50 mmHg. La hipercapnia no pro-
desarrollo de cor pulmonale crónico, aumento del duce síntomas o signos, salvo somnolencia, cefalea,
gasto cardiaco, deterioro de la función miocárdica y sensación de abotargamiento y temblor distal en ale-
trastorno de la función renal con tendencia a la reten- teo, si hay variaciones en el equilibrio ácido-básico
ción de sodio. La cianosis central se descubre en la puede llegar, en ocasiones, a presentar obnubilación y
lengua y corresponde a un contenido de hemoglobina coma hipercápnico.
IR hipercápnica
Aumento del espacio muerto:
— Disminución de la perfusión.
— Enfermedades pulmonares.
— Alteración de la pared torácica.
Disminución del volumen minuto:
— Alteraciones del SNC.
— Alteraciones neuromusculares.
— Alteraciones de la pared torácica.
— Intoxicaciones medicamentosas.
— Obstrucción respiratoria alta.
Aumento de producción de CO2 asociado a patología pulmonar:
— Fiebre.
— Sepsis.
— Convulsiones.
— Exceso de hidratos de carbono.
IR hipercápnica
Con gradiente normal
— Depresión del centro respiratorio: fármacos, ACV, TCE, infecciones del SNC.
— Enfermedades neuromusculares: botulismo, síndrome de Guillain–Barré, tétanos, difteria, poliomielitis, miositis,
miastenia gravis, síndrome de Eaton-Lambert, fármacos o tóxicos bloqueantes ganglionares o neuromusculares,
malnutrición o alteraciones metabólicas y electrolíticas graves.
— Obstrucción de la vía aérea superior: aspiración de cuerpo extraño, espasmo de glotis, angioedema, epiglotitis,
parálisis de cuerdas vocales, enema postintubación, absceso retrofaríngeo, quemaduras, lesiones por
cáusticos.
Con gradiente elevado
Cualquier causa de IR no hipercápnica lo suficientemente grave o prolongada que produzca fatiga muscular o con
alteraciones pulmonares asociadas.
365
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
IR no hipercápnica
Con pulmones claros
— Obstrucción difusa de la vía aérea (broncoespasmo, EPOC agudizado, bronquiolitis).
— Tromboembolismo pulmonar.
— Shunt anatómico agudo derecha-izquierda (infarto de miocardio, hipertensión pulmonar aguda).
— Microatelectasias.
— Fase precoz de procesos de ocupación de la vía aérea (enema intersticial, neumonía).
Con opacidad pulmonar difusa
— Edema agudo de pulmón cardiogénico.
— Síndrome de distrés respiratorio agudo.
— Neumonía difusa.
— Aspiración de líquidos. Inhalación de gases tóxicos.
— Menos frecuentes: síndrome de hemorragia alveolar, contusión pulmonar difusa, neumonitis por hipersensibilidad,
por fármacos, tóxicos o radiación, neumonía eosinófila aguda, embolismo graso.
Con opacidad pulmonar localizada
— Neumonía.
— Atelectasia.
— Aspiración.
— Hemorragia alveolar localizada.
— Infarto pulmonar.
Con patología extraparenquimatosa
— Neumotórax.
— Obesidad mórbida.
— Cifoescoliosis.
— Derrame pleural masivo o bilateral.
— Inestabilidad de la caja torácica (volet, rotura diafragmática).
366
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia respiratoria
Sospecha clínica IR
Otros
Gasometría arterial
diagnósticos
Insuficiencia respiratoria
Gradiente P A-aO2
te. Si la situación lo permite se debe realizar una explo- niveles de PCO2 y el equilibrio ácido-base, y,
ración física completa con la búsqueda de signos en además, poca fiabilidad en casos de anemia
relación con la enfermedad causal. severa, hipoperfusión, hipotermia, presencia
de carboxi o metahemoglobina o en saturacio-
nes por debajo del 70%.
Pruebas complementarias
— Radiografía de tórax: de gran utilidad para el
— Gasometría arterial: cuando la situación lo per- diagnóstico de la causa desencadenante actual
mita se debería realizar en condiciones basa- (neumotórax, derrame pleural, fracturas costa-
les del paciente. Si se realiza con administra- les, etc.) como la patología subyacente o enfer-
ción de oxígeno, debe indicarse siempre la medad de base (fibrosis pulmonar, deformidad
FiO2 que se le suministra al paciente. Con los de caja torácica, etc.).
datos obtenidos podemos distinguir entre — ECG: puede orientar acerca de la etiología, así
insuficiencia respiratoria hipercápnica o no y como de complicaciones derivadas de la hipo-
puede ayudar a diferenciar entre un cuadro xemia. En casos de insuficiencia respiratoria
agudo, crónico o crónico agudizado. También crónica con hipertensión pulmonar asociada,
puede utilizarse en el cálculo del gradiente pueden aparecer signos de hipertrofia y sobre-
alvéolo-arterial como apoyo a la búsqueda del carga de cavidades derechas.
mecanismo de producción. Como método no — Analítica: es necesaria la determinación de diver-
invasivo se puede utilizar la pulsioximetría para sos parámetros bioquímicos y hematológicos
la determinación de la saturación arterial de para valoración de causas desencadenantes o
oxígeno y monitorización de la respuesta al asociadas implicadas (leucocitosis, anemia, poli-
tratamiento, no ofreciéndonos datos sobre los globulia, insuficiencia renal, etc.).
367
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
— Otras: para dirigir la investigación etiológica latura respiratoria, alteración del nivel de consciencia o
pueden ser necesarias otras exploraciones inestabilidad hemodinámica.
complementarias, tales como pruebas funcio- La edad per se no es razón para la exclusión de las
nales respiratorias, broncoscopia, TAC torácico, unidades de cuidados intensivos (9), sino que se ha
ecocardiograma, cultivos de secreciones respi- demostrado que el estado funcional previo, la presen-
ratorias, etc. cia de comorbilidad propia (EPOC), el diagnóstico ini-
cial y la severidad de la enfermedad aguda son facto-
res pronósticos iniciales mucho más importantes que
Tratamiento
ésta para la supervivencia y calidad de vida poste-
Los objetivos son asegurar la oxigenación del rior (10). En un estudio realizado con pacientes ancia-
paciente, garantizar la ventilación alveolar, tratar tanto nos sometidos a ventilación mecánica se observó que
la causa como las circunstancias desencadenantes de muchos de ellos, que tenían como diagnóstico una
la IR y prevenir las complicaciones. causa no pulmonar, presentaban una enfermedad pul-
monar subyacente, siendo probable que el compromi-
Medidas generales so de su función pulmonar les aumentara el riesgo de
presentar insuficiencia respiratoria (11). La ventilación
Asegurar la permeabilidad de la vía aérea, acceso mecánica no invasiva (VMNI) ha demostrado ser útil en
endovenoso, nutrición e hidratación adecuada, trata- casos seleccionados de pacientes con insuficiencia
miento de la fiebre, evitar medicación depresora del respiratoria aguda. Puede utilizarse en pacientes
sistema nervioso central, y asegurar un buen trans- hemodinámicamente estables y en los que se prevé
porte de oxígeno, intentando disminuir los requeri- una rápida resolución de la situación aguda. También
mientos de éste y la producción de CO2, con correc- está indicada en determinadas situaciones de cronici-
ción de la anemia y control del gasto cardiaco, así dad (síndromes de hipoventilación-obesidad, enfer-
como de forma individualizada, profilaxis de la enfer- medades neuromusculares, alteraciones restrictivas
medad tromboembólica y protección gástrica. de pared torácica y enfermedades obstructivas sin
respuesta a tratamiento convencional), pudiendo ser
realizada de forma domiciliaria. Las contraindicaciones
Oxigenación
se muestran en la tabla 3.
El objetivo es corregir la hipoxemia mediante admi-
nistración de oxígeno para conseguir una PaO2 por Enfermedad de base
encima de 60 mmHg y una saturación basal de 90%
sin deprimir el centro respiratorio. El O2 debe ser con- Una vez identificada la causa, se deberá iniciar el
trolado con gradual aumento de FiO2 para evitar la tratamiento específico para la misma así como de los
retención de CO2 y la aparición de acidosis respirato-
ria (control con gasometría arterial). El empleo de
gafas nasales es más cómodo para el paciente, pues Tabla 3. Contraindicaciones
puede permitir la nutrición simultánea, pero tiene para VMNI (12)
como inconvenientes su efecto irritante a altos flujos
y que la FiO2 proporcionada es desconocida. Con la — Parada cardiaca o respiratoria (hipoxemia
mascarilla efecto Venturi se administra una FiO2 fiable refractaria con amenaza vital).
y constante. — Inestabilidad hemodinámica (hipotensión,
arritmias, infarto de miocardio).
Ventilación mecánica — Encefalopatía severa (Glasgow < 10, alteración
del nivel de consciencia, somnolencia,
Se trata de la sustitución temporal de la función res- convulsiones, falta de colaboración).
piratoria con apoyo artificial por la existencia de insufi- — Secreciones abundantes y/o viscosas con alto
ciencia respiratoria tanto aguda como crónica que no riesgo de aspiración.
responde a tratamiento convencional. La principal — Hemorragia digestiva alta.
indicación de ventilación invasiva es la necesidad de — Cirugía facial o gastroesofágica reciente.
ventilación como soporte vital durante las 24 horas del
— Obstrucción de la vía aérea superior.
día o el acceso directo a la vía aérea para poder aspi-
rar. Los parámetros que se deben valorar para tomar — Traumatismo craneofacial y/o malformación
nasofaríngea.
la decisión de ventilar de forma invasiva son: la inca-
pacidad para obtener una oxigenación adecuada — Quemados.
mediante oxigenoterapia (pO2 < 60 mmHg con — Obesidad mórbida.
FiO2 > 60%), acidosis respiratoria grave y progresiva
(pCO2 > 50 con pH < 7,26), agotamiento de la muscu- VMNI: Ventilación mecánica no invasiva.
368
Situaciones clínicas más relevantes. Insuficiencia respiratoria
369
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
entablando discusiones acerca de la asistencia termi- 9. Pesau B, Falger S, Berger E, Weimann J, Schuster E,
nal por lo que la rehabilitación pulmonar brinda una Leithner C, Frass M. Influence of age on outcome of
importante oportunidad para ayudar a planificar, por mechanically ventilated patients in an intensive care unit.
adelantado, la asistencia de estos cuidados, analizar Crit Care Med 1992. p. 489-92.
10. Cohen IL, Lombrinos J, Fein A. Mechanical ventilation
los instrumentos adecuados y la discusión paciente-
for the elderly patient in intensive care. Incremental
médico sobre los cuidados paliativos para el final de
changes and benefits. JAMA 1993; 269: 1025-9.
la vida (15). 11. Ely EW, Evans GW, Haponik EF. Mechanical ventilation
in a cohort of elderly patients admitted to an intensive
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Madrid: Editores médicos; 1998. p. 745-58. New York: McGraw-Hill; 1998.
370
C APÍTULO 37
371
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Estadio Características
0: en riesgo Espirometría normal.
Síntomas crónicos (tos, aumento de la producción de esputo).
I: EPOC leve FEV1/FVC < 70%.
FEV1 80% ref.
Con o sin síntomas crónicos (tos, aumento de la producción de esputo).
II: EPOC moderada FEV1/FVC < 70%.
50% FEV1 < 80% ref.
Con o sin síntomas crónicos (tos, aumento de la producción de esputo, disnea).
III: EPOC grave FEV1/FVC < 70%.
30% < FEV1 < 50% ref.
Con o sin síntomas crónicos (tos, aumento de la producción de esputo, disnea).
IV: EPOC muy grave FEV1/FVC < 70%.
FEV1 < 30% o FEV1 < 50% ref. más insuficiencia respiratoria o cardiaca derecha.
FEV1: volumen espiratorio máximo en el primer segundo; ref.: valor de referencia; FVC: capacidad vital forzada; insuficiencia respirato-
ria: presión parcial de oxígeno arterial (PaO2) inferior 60 mmHg con o sin presión parcial de CO2 arterial superior a 50 mmHg, respiran-
do aire ambiente y al nivel del mar.
GOLD: Global Chronic Obstructive Lung Disease (3).
periféricas, pequeños bronquios y bronquiolos con un estas alteraciones se producen en el citado orden en
diámetro inferior a 2 mm, la inflamación crónica conlle- el curso de la enfermedad.
va ciclos repetidos de lesión y reparación con incre- En la EPOC avanzada, la obstrucción de las vías
mento del contenido de colágeno y la formación de aéreas periféricas, la destrucción del parénquima y las
tejido cicatricial, que conducen al estrechamiento de la anormalidades vasculares pulmonares reducen la
luz y a la obstrucción permanente de las vías aéreas. capacidad para el intercambio gaseoso y provocan el
La destrucción del parénquima pulmonar ocasiona la desarrollo de hipoxemia y, posteriormente, de hiper-
formación de enfisema centrolobulillar, con dilatación y capnia. La hipertensión pulmonar, que aparece más
destrucción de bronquiolos respiratorios, el desequili- tardíamente en el curso de la EPOC (estadio III: EPOC
brio entre enzimas proteolíticas y antiproteinasas endó- grave), es la complicación cardiovascular de mayor
genas también interviene en este proceso, así como el importancia y da paso al desarrollo de cor pulmonale
estrés oxidativo secundario al proceso inflamatorio. con un peor pronóstico.
Los cambios vasculares pulmonares se caracterizan
por el engrosamiento de la pared de los vasos que se Clasificación
inicia precozmente en la historia natural de la enferme-
dad, seguido por el incremento del músculo liso y la La EPOC se clasifica en cuatro estadios clínicos en
infiltración de pared vascular por células inflamatorias. función de su gravedad y a los valores del volumen
espiratorio máximo en el primer segundo (FEV1). La
finalidad de esta clasificación es proporcionar al médi-
Fisiopatología
co una herramienta que le pueda servir para establecer
Las alteraciones anatomopatológicas pulmonares el pronóstico y el tratamiento. Existen varias clasifica-
son responsables de los cambios fisiológicos carac- ciones según las diferentes sociedades, aunque todas
terísticos de la enfermedad, que incluyen hipersecre- basadas en los mismos parámetros (4). En la tabla 1 se
ción mucosa y disfunción ciliar (responsables de la tos muestra la clasificación de la guía GOLD (3).
crónica y el aumento de la producción de esputo), limi-
tación del flujo aéreo, clave para el diagnóstico de la
Clínica
enfermedad mediante la espirometría, se debe princi-
palmente a la obstrucción permanente de las vías Los síntomas principales son: tos crónica, que se
aéreas y al aumento de su resistencia; hiperinsuflación presenta intermitentemente o todos los días, y rara-
pulmonar, alteraciones del intercambio gaseoso, mente es sólo nocturna. Aumento crónico de la pro-
hipertensión pulmonar y cor pulmonale. Por lo general, ducción de esputo. El cuadro clínico de tos y expec-
372
Situaciones clínicas más relevantes. EPOC. Cor Pulmonale
Pruebas complementarias
Anamnesis (3)
— Espirometría forzada es la prueba más impor-
En todo paciente con EPOC o sospecha de la
tante para el diagnóstico, pues nos permite
misma hay que recoger una historia clínica evaluando:
valorar la gravedad, realizar un seguimiento
— La exposición a factores de riesgo, fundamen- evolutivo del paciente y establecer el pronóstico
talmente tabaco. (tabla 1).
373
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
374
Situaciones clínicas más relevantes. EPOC. Cor Pulmonale
xemia, el grado de hipertensión pulmonar, la presencia ción pulmonar, de inicio en todo paciente en riesgo,
de hipercapnia o de cor pulmonale, las enfermedades anualmente en pacientes estables, y más frecuente-
asociadas y la aparición de complicaciones. mente si se requiere valorar el estado clínico y la res-
puesta al tratamiento.
Tratamiento
Tratamiento farmacológico
Manejo de la EPOC estable
Broncodilatadores inhalados
Los objetivos principales del tratamiento son preve-
nir la progresión de la enfermedad, el alivio de los sín- Se pueden clasificar por su duración y por su meca-
tomas, mejorar la tolerancia al ejercicio, prevenir y tra- nismo de acción (tabla 3). En paciente estable se pre-
tar las complicaciones y reagudizaciones y reducir la fiere la administración de estos fármacos por inhala-
mortalidad. Un tratamiento integral conlleva, en primer dores con contador de dosis o en polvo seco. En
lugar, un adecuado mantenimiento de un nivel de EPOC leve y con síntomas intermitentes se recomien-
salud, en segundo lugar un tratamiento médico y, por da el uso a demanda de un broncodilatador de corta
último, terapias complementarias. acción. En EPOC moderados se usan broncodilatado-
res de forma pautada. Las últimas actualizaciones de
las guías recomiendan utilizar como terapia inicial
Mantenimiento del estado de salud
broncodilatadores de larga duración, aunque también
Para mantener un estado de salud adecuado, la pri- más caros (3). Éstos no se deben usar para los sínto-
mera medida y la intervención que ha demostrado mas agudos, en estos casos hay que utilizar los ago-
mayor efectividad es el abandono del tabaco. Las nistas β2 de corta duración. La combinación de un
vacunaciones del neumococo y la gripe anual también agonista β2 con un anticolinérgico debería considerar-
deben considerarse en este apartado. La espirometría se cuando la utilización de uno solo de ellos no alivia-
debería realizarse de forma regular para valorar la fun- ra los síntomas (ver tabla 4).
Fármaco Inhaladores (µg) Nebulizador (mg) Oral (mg) Duración acción (h)
Agentes beta-2
Fenoterol 100-200 0,5-2,0 — 4-6
Salbutamol 100-200 2,5-5 (0,5-1cc) 4 4-6
Terbutalina 250-500 5-10 5 4-6
Formeterol 12-24 — 12+
Salmeterol 50-100 — 12+
Anticolinérgicos
Bromuro de ipratropio 40-80 0,25-0,5 (250-500 µg) — 6-8
Bromuro de tiotropio 18 24
Metilxantinas
Aminofilina (liberación lenta) — — 225-450 Variable, hasta 24 h
Teofilina (liberación lenta) — — 100-400 Variable, hasta 24 h
375
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
376
Situaciones clínicas más relevantes. EPOC. Cor Pulmonale
377
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
90%) sin que disminuya el pH arterial por debajo de — EPOC moderada o grave sin riesgo de P. aeru-
7,30 debido al aumento indeseable de PaCO2. En ginosa: a las bacterias previas hay que añadir
algunos casos de EPOC grave el límite de PaO2 se enterobacterias (K. pneumoniae, E. coli). Levo-
puede situar en 55 mmHg. Normalmente suelen ser floxacino o moxifloxacino a las dosis previas y
suficientes concentraciones de O2 entre el 24 y el por vía oral. Asimismo, se puede usar amoxici-
28%, más recomendable mascarilla de Venturi. lina-clavulánico a dosis altas de amoxicilina y la
telitromicina a las dosis arriba referidas. Si requie-
re ingreso hospitalario dada la gravedad, se
Broncodilatadores
aconseja usar de forma parenteral; las dosis de
Beta2 adrenérgicos de acción corta (tabla 3), admi- fluorquinolonas son las mismas, las de amoxicili-
nistrados en nebulización, pudiendo repetir dosis a las na-clavulánico son de 2 g-200 mg/8 h. Se puede
una-dos horas y posteriormente cada cuatro-seis horas. usar también cefotaxima a dosis de 1-2 g/8 h,
Si la situación es grave también se puede utilizar por ceftriaxona: 1-2 g/24 h.
vía subcutánea: salbutamol 0,5 mg sc. Es importante recordar que el uso de un beta-
El beneficio de las xantinas en la EPOC es contro- lactámico por vía parenteral permite concentra-
vertido y no exento de efectos secundarios, aunque ciones en sangre cinco a 10 veces superiores a la
en EPOC grave que no mejore con el tratamiento vía oral, en cambio con las fluorquinolonas las
broncodilatador inicial se puede añadir aminofilina iv concentraciones por ambas vías son superponi-
2,5 a 5,0 mg/kg, en 30 min, seguida de perfusión con- bles.
tinua de 0,2 a 0,5 mg/kg/h. Si el paciente ya tomaba — EPOC moderada o grave con riesgo de P. aeru-
teofilinas la dosis de inicio se suprime. ginosa: dosis altas de ciprofloxacino: 500-
750 mg/12 h, o 400 mg/8-12 h vía iv. Este trata-
miento debería pautarse según el antibiograma,
Glucocorticoides ya que un 30% de P. aeruginosa son resistentes
Es aconsejable usarlos desde el inicio en pacientes a ciprofloxacino. En caso de gravedad, es prefe-
que requieran ingreso hospitalario. Dosis de 0,4- rible utilizar un betalactámico activo frente a P.
0,6 mg/kg de metilprednisolona cada seis horas iv, u aeruginosa (cefepima: 1-2 g/12 h, imipenen: 500
otro equivalente. Se mantendrá durante tres o cuatro mg/6 h, meropenen: 1 g/8 h) asociado o no a un
días y se reducirá de forma paulatina.
Tabla 6. Criterios de selección
Otros tratamientos y exclusión de VMNI (3)
Si insuficiencia cardiaca asociada valorar la asocia-
Criterios de selección (al menos deben estar
ción de diuréticos, como furosemida.
presentes dos de ellos).
— Disnea, de moderada a grave intensidad, con
Antibióticos (14) utilización de músculos accesorios y movimiento
paradójico abdominal.
La indicación de tratamiento antimicrobiano de — Acidosis, moderada-grave (pH 7,30-7,35)
forma empírica se realiza cuando están presentes al e hipercapnia (PaCO2 < 45-60 mmHg).
menos dos de los siguientes datos clínicos: aumento
— Frecuencia respiratoria > 25 respiraciones/min.
de la disnea, incremento del volumen de la expectora-
Criterios de exclusión (cualquiera puede estar
ción y/o aumento de la purulencia del esputo. La elec-
presente).
ción del tipo de antibiótico debe contemplar: la grave-
— Paro respiratorio.
dad de la EPOC, la edad (mayor o menor de 65 años),
la comorbilidad (diabetes mellitus, cirrosis hepática, — Inestabilidad cardiovascular (hipotensión,
insuficiencia renal crónica o cardiopatía) y la implicación arritmias, infarto agudo de miocardio).
de P. aeruginosa en la reagudización, valorado por los — Somnolencia, alteración del estado de
ciclos de antibiótico (> 3 ciclos en el último año) (14). conciencia, paciente no colaborador.
— Alto riesgo de aspiración, secreciones viscosas
— EPOC leve, menor de 65 años y sin comorbilidad: o copiosas.
donde se implican H. influenzae, S. pneumoniae, — Cirugía facial o gastrointestinal reciente.
M. catarrhalis, se aconseja dosis altas vía oral de
— Traumatismo craneofacial, anormalidades
amoxicilina-clavulánico (875/125 mg cada ocho nasofaríngeas fijas.
horas. También pueden usarse las nuevas fluor-
— Obesidad extrema.
quinolonas (levofloxacino: 500 mg/24 h o moxi-
floxacino: 400 mg/24 h). Otra posibilidad es teli-
tromicina a dosis de 800 mg/24 h, vía oral. VMNI: ventilación mecánica no invasiva.
378
Situaciones clínicas más relevantes. EPOC. Cor Pulmonale
aminoglucósido (tobramicina o amikacina) durante los 7. McKay SE, Howie CA, Thomson AH, Whiting B, Addis
tres a cinco primeros días. Si existen contraindicaciones GJ. Value of theophylline treatment in patients handi-
para estos últimos se puede sustituir por ciprofloxacino. capped by chronic obstructive lung disease. Thorax
1993; 48 (3): 227-32.
8. Burge PS, Calverley PMA, Jones PW, Spencer S,
Soporte ventilatorio Anderson JA, Maslen TK. Randomised, double blind,
— Soporte ventilatorio no invasivo: la más utilizada placebo controlled study of fluticasone propionate in
es la ventilación mecánica no invasiva con pre- patients with moderate to severe chronic obstructive
sión positiva intermitente (VNIPP). Proporciona pulmonary disease: the ISOLDE trial. BMJ 2000; 320:
un aumento del pH, reduce la PaCO2, disminu- 1.297-303.
9. Wijkstra PJ, Van Altena R, Kraan J, Otten V, Postma DS,
ye la mortalidad, la necesidad de intubación
Koeter GH. Quality of life in patients with chronic obs-
orotraqueal y acorta la hospitalización (nivel de
tructive pulmonary disease improves after rehabilitation
evidencia A). (Ver criterios de selección y exclu- at home. Eur Respir J 1994; 7: 269-73.
sión tabla 6.) 10. Lupatkin H. Influenza Vaccine in the Elderly and Chronic
— Soporte ventilatorio invasivo: la intubación Obstructive Pulmonary Disease. Curr Infect Dis Rep
endotraqueal estaría indicada para insuficiencia 2005; 7 (3): 200-3.
respiratoria severa a pesar del tratamiento pre- 11. Foxwell AR, Cripps AW, Dear KBG. Vacunación oral con
vio. Ver indicaciones de ventilación mecánica una cepa de Haemophilus influenzae de célula entera
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379
C APÍTULO 38
381
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
382
Situaciones clínicas más relevantes. Enfermedad tromboembólica venosa
383
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Tomado de Anderson DR, Wells PS. Thromb Haemost 1999; 82: 878-86.
384
Situaciones clínicas más relevantes. Enfermedad tromboembólica venosa
La flegmasia cerulea dolens se caracteriza por negativa, la sensibilidad y especificidad para detectar
edema muy severo de toda la extremidad con inten- trombos proximales en pacientes sintomáticos es del
sa cianosis, pulsos atenuados y gangrena venosa. 97%.
Es más frecuente en los ancianos, y ante su presen- En definitiva, la evaluación inicial y la decisión
cia se debe buscar una causa subyacente de hi- terapéutica de los pacientes sintomáticos puede
percoagulabilidad (carcinoma, anticuerpos anticar- hacerse basado en los resultados del duplex venoso,
diolipina, trombocitopenia trombótica inducida por el cual se considera el método objetivo no invasivo
heparina...). más exacto, siempre que una exploración negativa
El diagnóstico diferencial de la TVP ha de hacerse vaya seguida de exploraciones seriadas, al menos dos
con otras causas de hinchazón o de dolor en las extre- en los siguientes ocho días (día 2 y día 8), para detec-
midades (tabla 5). tar una eventual extensión proximal de una trombosis
La trombosis venosa superficial se acompaña de distal no detectada (9).
TVP en el 25% de los casos, siendo la mitad de las La tomografía axial computerizada, la resonancia
veces proximal. Cuando coexisten ambas entidades nuclear magnética, y los métodos biológicos [D-díme-
es frecuente una neoplasia de base. ros (10)] son útiles en el diagnóstico de la TVP. Una
estrategia basada en la determinación de los D-díme-
ros puede evitar realizar ecografías seriadas en aque-
Diagnóstico objetivo
llos pacientes con sospecha clínica de TV y una pri-
Técnicas diagnósticas invasivas mera exploración ecográfica normal. Mediante la RNM
podemos diferenciar una obstrucción aguda de una
La flebografía radiológica ascendente es la prueba crónica, lo que es de utilidad para el diagnóstico de las
definitiva de diagnóstico y la de referencia para validar recurrencias.
las otras. La modalidad en supino con torniquetes es
de elección en los ancianos. Permite visualizar todo el
sistema venoso profundo de las extremidades inferio- Algoritmos para el diagnóstico de la TVP (7, 11, 12)
res, detectando tanto los trombos distales como los Diferenciamos tres grupos de pacientes:
trombos proximales. El criterio diagnóstico principal es
un defecto de relleno intraluminar presente en más de — Pacientes con síntomas de un primer episodio
una proyección. de TVP.
— Pacientes con síntomas de recurrencia de una
TVP.
Técnicas diagnósticas no invasivas — Pacientes de alto riesgo asintomáticos.
La pletismografía de impedancia detecta los trom- 1. Pacientes con síntomas de un primer episodio
bos oclusivos en la vena poplítea o proximales a ella. de trombosis venosa: la prueba debe ser sensi-
Es simple, puede hacerse ambulatoriamente y repetir- ble y específica para detectar trombos proxima-
se fácilmente. Es adecuada para el diagnóstico de la les, y si no es capaz de detectar los distales,
TVP en pacientes sintomáticos si se utiliza de manera debe indentificar si se extienden a las venas
seriada. Es aceptable para el diagnóstico de las recu- proximales mediante exploraciones seriadas en
rrencias si se ha documentado la normalización des- los días siguientes (figura 1).
pués del tratamiento del episodio previo. En la TVP 2. Pacientes con síntomas de recurrencia de una
sintomática tiene una buena sensibilidad (90%) y trombosis venosa: la mejor estrategia evaluada
especificidad (95%). en este grupo es la utilización combinada de la
La ultrasonografía (US) doppler es sensible para el pletismografía, el fibrinógeno radiactivo y la fle-
diagnóstico de las TVP obstructivas, pero pierde sen- bografía. La pletismografía aislada es útil si
sibilidad en el diagnóstico de trombos no obstructivos tenemos constancia de que la prueba se ha
proximales y en las TVP limitadas a la pantorrilla. En normalizado después del evento inicial. La
general, la sensibilidad y especificidad para el ultrasonografía pone de manifiesto anomalías
diagnóstico de la TVP proximal es inferior al 90%. persistentes en el 40% de los casos durante un
La ultrasonografía modo B en tiempo real ofrece año de seguimiento. Por la complejidad del
una imagen bidimensional del sistema venoso. El diagnóstico de las recurrencias utilizamos una
signo más sensible es la imposibilidad de colapsar la combinación de pruebas (figura 2).
vena cuando contiene un trombo (ultrasonografía de 3. Pacientes de alto riesgo asintomáticos: en este
compresión). La adición del doppler (duplex venoso) caso los trombos suelen ser pequeños, no obs-
con o sin flujo en color (triplex venoso) a la ultrasono- tructivos y distales. La flebografía sería el único
grafía modo B en tiempo real, permite la exploración método sensible para detectar estos trombos,
anatómica y funcional del sistema venoso profundo. pero su utilización rutinaria con dicho fin es ina-
Haciendo exploraciones seriadas cuando la inicial es ceptable.
385
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Sospecha clínica
Circunstancias clínicas que indican un
diagnóstico más agresivo:
Baja Moderada Alta —T rombosis de la vena ilíaca.
—Dificultad para hacer US seriadas.
—Mala r eserva cardiopulmonar.
—US técnicamente inadecuada.
Ultrasonografía (US) —Posible falso positivo de US.
D-dímeros de compresión
– + TVP Normal
Venografía
RNM
TVP excluida
Repetir US
5-7 días más tarde
TVP excluida
Sospecha clínica
o
Pletismografía de impedancia Comparar con
Repetir US resultados previos
5-7 días más tarde
Afectación de un nuevo
segmento venoso
Normal Patológico Anticoagulación
386
Situaciones clínicas más relevantes. Enfermedad tromboembólica venosa
Negativos Positivo
Sospecha clínica de la EP
Datos clínicos
Las características clínicas de la embolia de pulmón Gammagrafía de V/P
son inespecíficas; sin embargo, puede sospecharse EP excluida o
en presencia de disnea, dolor pleurítico, síncope, Angio-TAC
hemoptisis, taquipnea, etc. La sospecha es mayor si
hay factores de riesgo, cuando no hay una explicación
387
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Angio-TAC (+) G V/P alta probabilidad Angio-TAC (-) o G V/P G V/P (-)
baja-intermedia probabilidad
Positivo Negativo
EP confirmada Angiografía
pulmonar
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Situaciones clínicas más relevantes. Enfermedad tromboembólica venosa
Positivo Negativo
EP confirmada Angiografía
pulmonar
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
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Situaciones clínicas más relevantes. Enfermedad tromboembólica venosa
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TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
392
Situaciones clínicas más relevantes. Enfermedad tromboembólica venosa
Reproducido de: F. Veiga. Indicaciones de las HBPM en Atención Primaria. Cap. 10 (77-81). DOYMA 2000.
oral durante al menos seis meses (23). Pautas de Otras modalidades terapéuticas
menor duración podrían ser suficientes en pacientes
con un primer episodio de TVP con factores de ries- Tratamiento trombolítico
go reversibles o cuando el riesgo hemorrágico es A pesar de los beneficios teóricos en el tratamiento
alto. Cada vez es más evidente la necesidad de una de la TVP, la trombolisis no ofrece más ventajas que la
profilaxis secundaria prolongada en la ETV idiopáti- anticoagulación en la prevención de la embolia de
ca. Los pacientes con episodios recurrentes de ETV pulmón, y da lugar al doble de complicaciones
idiopática y factores de riesgo persistentes (cáncer, hemorrágicas, incluido un riesgo dos a cuatro veces
anticuerpo antifosfolípido...) deben recibir profilaxis mayor de hemorragia intracraneal. Debe ser utilizada
secundaria por un período largo indefinido. En los solamente en casos seleccionados, actualmente sin
pacientes con trombofilia hereditaria, como aque- definición precisa. La fibrinolisis dirigida por catéter es
llos con factor V Leiden, no se ha demostrado la uti- una buena alternativa cuando se decide utilizar este
lidad de mantener indefinidamente la anticoagula- tratamiento en la TVP.
ción oral. La utilidad de la fibrinolisis en la EP está bien defini-
La heparina no fracionada por vía subcutánea cada da, siendo actualmente el tratamiento de elección en
12 horas en dosis suficientes para mantener un TTPa los pacientes con embolia de pulmón masiva e inesta-
entre 1,5 a dos veces el control, es tan eficaz y da bilidad hemodinámica.
lugar a menos complicaciones hemorrágicas.
Las HBPM por vía subcutánea en dosis fijas cada
Tratamiento quirúrgico
24 horas también son eficaces para evitar las recu-
rrencias de la TVP sin apenas efectos secundarios Se ha recomendado para el tratamiento de la fleg-
(24). Esta pauta de profilaxis secundaria ha sido eva- masia cerulea dolens, un estado de tan extensa oclu-
luada específicamente en ancianos frágiles (24) sión venosa con compromiso de la circulación arterial,
(tabla 13) y es superior a la anticoagulación oral en en la cual cualquier mejoría en el retorno venoso
pacientes oncológicos. podría salvar el miembro.
Los inhibidores directos de la trombina por vía oral En la EP la embolectomía quirúrgica está indicada
(ximelagatran), que no precisan ajuste de dosis ni en caso de inestabilidad hemodinámica cuando hay
monitorización de la coagulación, son una alternativa contraindicación para la trombolisis o cuando ésta ha
prometedora en la profilaxis secundaria. fallado.
393
TRATADO
de GERIATRÍA para residentes
Actuación sobre la vena cava inferior 13. PIOPED Investigators. Value of the ventilation/perfusion
scan in acute pulmonary embolism: results of the pros-
Indicada en pacientes con TVP o de alto riesgo pective investigation of pulmonary embolism diagnosis
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