Manteinieto
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Mantenimiento Quincenal
Si se realizan todas las actividades que se detallan en esta lista, en realidad se están eliminando todas las
causas que provocan las averías más frecuentes. Si se compara esta lista de tareas con la lista de
averías más frecuentes se puede comprobar que esta revisión esta orientada a evitar todos los problemas
habituales de las turbinas. La razón de la alta disponibilidad de estos equipos cuando se realiza el
mantenimiento de forma rigurosa es que realmente se está actuando sobre las causas que provocan las
principales averías.
PRINCIPALES REPUESTOS
Del análisis de las averías que puede sufrir una turbina se deduce el material que es necesario tener en
stock para afrontar el mantenimiento. Todas las piezas que la componen pueden dividirse en cuatro
categorías:
Tipo A: Piezas que es necesario tener en stock en la planta, pues un fallo supondrá una pérdida
de producción inadmisible. Este, a su vez, es conveniente dividirlo en tres categorías:
Material que debe adquirirse necesariamente al fabricante del equipo. Suelen ser piezas diseñadas por el
propio fabricante.
Material estándar. Es la pieza incorporada por el fabricante del equipo y que puede adquirirse en
proveedores locales
Consumibles. Son aquellos elementos de duración inferior a un año, con una vida fácilmente predecible,
de bajo coste, que generalmente se sustituyen sin esperar a que den síntomas de mal estado. Su fallo y
su desatención pueden provocar graves averías.
Tipo B: Piezas que no es necesario tener en stock, pero que es necesario tener localizadas. En
caso de fallo, es necesario no perder tiempo buscando proveedor o solicitando ofertas. De esa lista de
piezas que es conveniente tener localizadas deberemos conocer, pues, proveedor, precio y plazo de
entrega.
Tipo C: Consumibles de uso habitual. Se trata de materiales que se consumen tan a menudo que
es conveniente tenerlos cerca, pues ahorra trámites burocráticos de compra y facilita la operatividad del
mantenimiento.
Tipo D: Piezas que no es necesario prever, pues un fallo en ellas no supone ningún riesgo para
la producción de la planta (como mucho, supondrá un pequeño inconveniente).