Fray Bartolomé de Las Casas
Fray Bartolomé de Las Casas
Fray Bartolomé de Las Casas
Bartolomé de Las Casas nació en Sevilla en 1484 y murió en Madrid en 1566. Siendo
niño, conoció a los Reyes Católicos y al almirante Cristóbal Colón porque su padre, Pedro
de Las Casas participio en los viajes hacia el Nuevo Mundo. En 1499, tuvo la oportunidad
de conocer a un indio, el cual fue traído a España por Colón y regalado a su padre como
esclavo.
Allí en 1518, intentó poner en práctica sus ideas, pero las tribus se rebelaron y el
proyecto fracasó. Desde entonces, cada vez que proponía nuevas cosas para
humanizar el trato hacia los indígenas, sus detractores lo recordaron el episodio
de fracaso en Venezuela.
La conquista del Perú que engendró muchas matanzas obligó a Carlos I buscar
soluciones frente a tanto descontrol. Bartolomé de Las Casas, en 1542, empezó
a influir políticamente en Valladolid. Leyó ante el Consejo de las Indias, una
versión previa de su famosa obra Brevísima relación de la destrucción de las
Indias. Trata de las atrocidades cometidas por los españoles desde la conquista
hasta entonces. Contribuyó así a la promulgación de las Leyes Nuevas en 1542.
Se fue después a América en calidad de obispo de Chiapas, con el encargo de
poner en prácticas sus teorías.
En 1510, fue uno de los primeros misioneros que embarcaron para el Nuevo
Mundo. Pronunció en nombre de toda la comunidad de dominicos los famosos
sermones del 21 y 28 de septiembre de 1511.
«Oído este tema, ya vieron luego los más avisados adonde iba a parar, y fue arto
sufrimiento detalle de allí pasar. Comenzó a fundar su sermón y a referir todo lo
que en el sermón pasado había predicado y a corroborar con razones y
autoridades lo que afirmó de tener injusta y tiránicamente aquellas gentes opresas
y fatigadas, tornando a repetir sus ciencia; que tuviesen por cierto no poderse
salvar en aquel estado; por eso, que con tiempo se remediasen, haciéndoles
saber que a hombre ellos no confesarían, más que a los que andaban salteando, y
aquello publicasen y escribiesen a quien quisiesen a Castilla»
Teniendo en cuenta que los indios, antes de que llegaron los españoles, tenían una
propia organización social y política, afirma que éstos tienen derecho a sus tierras y
que pueden gobernarse por sí mismos. Rechaza entonces la idea de la conversión
forzada de los indios y de la autoridad de los españoles sobre ellos.
Según Vitoria, la conquista de América podía ser justa si se cumplía con los justos
títulos que define. Es decir:
Se preocupa por los derechos de los indios y en su obra De indios, menciona los
abusos de poder cometidos por los conquistadores y revindica una colonización y
una evangelización que respete los derechos fundamentos del hombre en el caso
del indio. En ella, afirma que los indios no son seres inferiores, sino que poseen los
mismos derechos que cualquier ser humano.
Toribio de Benavente o Motolinía
Toribio de Benavente nació en Benavente hacia 1482 y murió 1569 en México. Fue
un misionero franciscano y un historiador de la Nueva España.
Se caracterizó por ser el defensor de los derechos de los indígenas y también fue
conocido por los indios bajo el nombre de Motolinía.
Entre 1524 y 1529, Toribio era guardián de conventos de México y fue allí donde
evangelizaba y enseñaba diversos oficios a los indígenas. Motolinía no se
preocupaba sólo por la conversión de los indígenas, sino que también aprendió el
náhuatl para entenderlos mejor y poder ayudarlos.
Pretendió crear una sociedad de indígenas en la que los frailes se ocuparían de su
educación. Quería una colonización menos cruel con un trato humano hacia los
pueblos nativos. Escribió la Historia de los Indios de la Nueva España entre 1535 y
1541.
Toribio se opuso muchas veces a las autoridades valorando los derechos de los
indígenas. Un aspecto muy importante que hay que apuntar fue que también tuvo
problemas con los dominicos, sobre todo con Bartolomé de Las Casas.
En 1555, escribo una celebre carta al emperador Carlos V contra Las Casas,
defensor de los indios frente a la conquista, a los colonos, y a la evangelización
censurando las inexactitudes de su pensamiento.
Llegaba a comparar Hernán Cortes con Las Casas valorando las actuaciones de
Hernán Cortes mientras que él mismo tenía ideas anticoloniales.