LOS GUARDIANES

Por Akasha

Dedicatoria: Dedico este primer ensayo a Selene, quien me llevó hasta el estanque y
me mostró dónde estaba el agua. Que los Dioses y Diosas te Bendigan. Gracias por
haberme guiado y esforzado en ayudarme a dar estos primeros pasos.

La majoría de los Magos usan un círculo protector, dentro del cual desarrollan sus
'trabajos', a la hora de poner en movimiento energías, según su voluntad. (*)
Mediante este 'Círculo Mágico' o 'Campo de protécción' -como le llaman algunos- el
Mago puede trabajar fuera del mundo ordinario (el mundo de todos los días), y penetra
un plano diferente al de la realidad en el que se mueve diariamente.

Una vez dentro, el Círculo Mágico representa una frontera a nuestro alrededor que
acumula la energía que será elevada y dirigida. Esta barrera también impide que
energías negativas -o presencias no deseadas- penetren el Círculo y nos invadan. 

A la hora de reforzar esta 'barrera mágica' el Oficiante invoca a las Cuatro Esquinas:
los 4 puntos cardinales y, a su vez, cada Esquina representa uno de los cuatro
Elementos (Tierra, Agua, Aire y Fuego) y a los Seres o Espíritus que los rigen según la
Tradición que se siga.

A estos Seres o Espíritus se los llama Guardianes (Watchtowers) quienes son Seres
conocidos a través de diferentes culturas por nombres tales como: Ángeles, Agentes,
Formas de Pensamiento Conciente, Energías Creativas, Puertas, Gobernadores,
Señores, Brillantes, etc. Todos estos títulos representan diferentes formas de energía.

Cada uno de éstos "Guardianes" –Watchers- se ubican en uno de los 4 puntos del
Círculo Mágico. Éstos seres pertenecen al Plano Espiritual (el plano más elevado a nivel
vibracional y energético)

Muchos son los que ubican en las Esquinas a los seres pertenecientes a un plano
mucho mas inferior, como lo es el Astral, a los conocidos por el nombre de
“Elementales”. Estos seres, quienes según muchos autores y cuentos de hadas (Faery
Tales), representan a los llamados “espíritus de la naturaleza” (ej: sílfides, gnomos,
ondinas y duendes. Según la tradición el nombre puede variar, al igual que el tipo de
ser). Al pertenecer a un plano de existencia menor al espiritual, estos seres expelen
vibraciones muy bajas y  poseen una carga emocional muy fuerte, la cual puede ser
positiva o negativa.

Pero, los Elementales, a pesar de la información comercial que corre en libros y

páginas de internet, NO SON los llamados "Guardianes" a los que hicimos alusión
párrafos más arriba.

Cuando se traza el Círculo, una opción aceptable es la de enfocarnos en los cuatro

Elementos, tal como se observan desde el plano espiritual superior (ej: el Espíritu del
Fuego, el más alto poder vibracional del elemento fuego)

Recapitulando: los cuatro planos son: físico, astral, mental y espiritual. Los seres que
mencionamos como pertenecientes a la naturaleza, estarían ubicados en el plano astral
y, como dijimos, un plano con energías muy bajas. Son criaturas muy simples
relacionadas más con el tipo de magia "Faery" o la denominada "magia natural".

Respecto a los "Guardianes", éstos son seres que pertenecen al PLANO ESPIRITUAL, el
plano de vibraciones más altas.

Los Elementos han sido ricos símbolos por más de 2.500 años.
“Los elementos están asociados con los puntos cardinales del círculo mágico y con una
jerarquía de espíritus de bajo nivel vibracional llamados Elementales quienes, a su vez,
están gobernados por seres de existencia superior, devas, llamados también Señores
de las Atalayas, Todo Poderosos y Guardianes”

Cuando hablamos de las “esquinas” nos estamos refiriendo a los 4 puntos cardinales:
Este, Sur, Oeste y Norte.

“Muchas son las brujas que utilizan los Elementos, al verlos como energías generales
que están interconectadas, quienes son la estructura de toda vida.” (“The four quarters
/corners”, Copyright © 1999 Volute, All Rights Reserved.)

En general estas energías o formas de energías son llamadas al círculo mágico con el
fin de crear un “espacio sagrado” de trabajo. Pero es mas correcto mencionar que se
los invoca para mantener la energía elemental a la par del trabajo.

La Correspondencia de los elementos con las esquinas:

Generalmente los libros con fines comerciales presentan la siguiente correspondencia:

Este: Aire

Sur: Fuego

Oeste: Agua

Norte: Tierra

Esto puede ser correcto o incorrecto dependiendo de la tradición o, especialmente, de

DONDE NOS ENCONTREMOS GEOGRÁFICAMENTE.

Tomemos el ejemplo de Buenos Aires (mantengamos en mente el ejemplo anterior

para notar las diferencias):

Tenemos al Este la enorme masa de agua que comprende el Río de La Plata. ¿Sería
correcto, entonces, ubicar al Este el Aire?

Yendo hacia el Sur, nos encontramos con las masas de viento frío y luego las placas de
hielo que conforman la Antártida. ¿No seria lo correcto ubicar el elementos Aire aquí?

Hacia el Norte el calor va aumentando. Se hace presente el elemento Fuego.

Y, por último, al Oeste nos topamos con la Cordillera de los Andes, una masa de tierra
enorme y extensa. Representando la Tierra.

Profundicemos en este tema tomando como ejemplo la idea sobre los “ejes
femeninos / masculino” del artículo de Mike Nichols “Re-thinking the Watchtowers”,
para diferenciar los aspectos “pasivos” y “activos” de los elementos.

En este artículo Nichols hace referencia a las posiciones cardinales y al eje (en forma
de cruz) que forman la mismas. Así, podemos mencionar lo siguiente: La línea que
marca el eje Norte-Sur es vertical mientras que la línea que marca el eje Oeste-Este es
horizontal; de esta misma forma dentro del círculo mágico es trazada una línea
vertical, Norte-Sur, que representa al eje masculino (aire y fuego), mientras que la
línea horizontal, Oeste-Este, representa al eje femenino (tierra y agua). Nichols nos
dice que todo esto tiene un sentido lógico: “cuando miramos hacia el horizonte de la
tierra, vemos un plano horizontal. Los elementos femeninos son considerados
“pasivos”, teniendo una tendencia natural de “tenderse”. El fuego, por otro lado,
siempre asume una posición erecta o vertical. El aire también puede ascender, como la
tierra y el agua no. Los elementos masculinos son “activos”, teniendo una tendencia
natural de mantenerse “en pie”.”
Otro ejemplo que podemos tomar del mismo artículo es el de “Generador”. En el
mismo Nichols explica que si el elemento masculino Fuego esta en el sur entonces, el
elemento masculino Aire, SI O SI DEBE estar en el norte. Lo mismo ocurre con los
elementos femeninos: si el elementos femenino agua esta en el oeste, entonces el
elemento femenino tierra DEBE ubicarse en el este. Un ejemplo sencillo de esta
alternancia (nótese que si las correspondencia norte: aire: masculino-sur: fuego:
masculino y oeste: agua: femenino-este: tierra: femenino, tenemos una alternancia, al
marcar el círculo, de un polo masculino seguido por uno femenino constantemente) es
la danza que hacen muchas brujas y brujos para elevar el “cono de poder”. Tomados
de las manos danzan en deosil (sentido de las agujas del reloj), cada vez más y más
rápido. La ubicación de las personas es alternada: a un hombre le sigue una mujer y
así sucesivamente. Danzan alrededor del círculo hasta que el poder es liberado. Nichols
dice: “Estos polos, en sí mismos, DEBEN alternarse entre positivo y negativo si el
poder va a ser levantado.”

Expliquemos, desde otro punta de vista, esta alternación de los elementos.

John Opsopaus nos habla del simbolismo importante del proceso transformativo de la
alternancia, el cual se manifiesta a lo largo del mundo espiritual y material.

Opsopaus afirma que la rotación de los elementos depende de dos estructuras

interrelacionadas, una lineal y otra circular. Opsopaus dice "la estructura linear es LA
CRECIENTE SUTILEZA QUE APARECE EN LA SERIE TIERRA, AGUA, AIRE, FUEGO" ¿Qué
quiere decir con esto? Que hay una transformación linear que comienza en el elemento
más pesado y ‘consistente’, Tierra, pasando por diferentes estados hasta alcanzar el
esta más sutil y liviano que es el Fuego; arrastrando, en cada ‘paso’ alguna
característica del elementos anterior. Este tema también se relaciona con el trazado
del Pentagrama (nota: lo tratamos más adelante en este documento).

Esto lo explica Nichols cuando dice que cada elemento que cada Elemento sigue, en
deosil, su cualidad dominante. Él explica que: la Tierra es Seca y Fría, el Agua es Fría y
Húmeda, el Aire es Húmedo y Caliente y el Fuego es Caliente y Seco.

Es importante tener en cuenta los estudios de Aristóteles. Él explicaba que el Calor era
el poder de la “separación”, porque este hace que cada sustancia se aferre a otra de
igual tipo, como ocurre en la destilación (ejemplifica Opsopaus). Por tanto, el Calor,
hace que las cosas sean sutiles, ligeras, ascendentes y centrífugas.

Opsopaus explica que, a diferencia del Calor, el Frío asocia cosas diferentes, y permite
a las sustancias mezclarse. El Frío hace a las cosas gruesas, pesadas, descendentes y
centrípetas.

Volviendo a Aristóteles, éste sigue explicando que la Humedad es la cualidad de la

fluidez o flexibilidad, que permite a algo adaptarse a condiciones externas. Por otro
lado, explica, que la Sequedad es la cualidad de la rigidez que permite a una cosa
definir su propia forma y extensión.

Podemos deducir entonces que las cosas húmedas tienden a ser volátiles y expansivas;
mientras que las cosas secas son estables y estructuradas, desde que pueden definir
su propia forma.* (Para mayor información sobre estos puntos, referirse al artículo de
John Opsopaus)

Opsopaus sigue explicando que, de esta forma, mientras el Fuego y la Tierra son
“absolutamente” liviano y pesado, respectivamente, el Aire y el Agua son
“relativamente” liviano y pesado.

Así explica que como el Frío domina al Agua, la Humedad domina al viento.

En la rotación mas común la Tierra se vuelve Agua, el Agua se vuelve Aire, el Aire se
vuelve Fuego, y el Fuego se vuelve Tierra. Desde un punto de vista alquímico podemos
mencionar la relación anterior de la siguiente forma: la Tierra se vuelve Agua cuando
se derrite una sustancia sólida o disolviendo la Tierra en algún solvente. El Agua se
convierte en Aire por medio de la ebullición que, por otro lado, el calor se transforma
en Fuego (un vapor seco). Finalmente el Fuego se vuelve Tierra cuando se deja a los
vapores condensarse en un material sólido.

Es importante recordar lo que Aristóteles dijo, refiriéndose a este tema: “Esta claro
que la creación de los elementos es circular, y este modo de cambio es sencillo porque
las cualidades correspondientes están presentes en los elementos adyacentes.” Sobre
esto Opsopaus explica: “En términos abstractos la aplicación del Calor produce Tierra
para perder su rigidez (Sequedad) y volverse mas flexible (Humedad), con lo cual se
logra Agua. Además el Calor disminuye el Frío del Agua e incrementar su Calor, con lo
cual tenemos Aire. Cuando el Aire es Calentado su fluidez se seca absolutamente, y se
vuelve rígido, con lo cual logramos Fuego. Cuando el Fuego se vuelve Frío, pierde su
Calor y se convierte en Tierra una vez más.”

Recapitulando: la ubicación de los Elementos en el Círculo Mágico, más

específicamente en los diferentes puntos cardinales; no responden a un “capricho” en
el que uno termina colocando el Elemento, donde lo así sienta. Existe una ubicación
CORRECTA que se adapta geográficamente a dónde nos hallamos. PERO, recalco la
siguiente explicación, lo importante es respetar ciertas pautas, y éstas son las
estructuras interrelacionadas, lineal y circular, a la hora de ubicar los Elementos y
teniendo en cuanta, también, LA CARACTERÍSTICA DE CADA UNO para su correcta
ubicación.

Podemos graficar de la siguiente forma:

Así es como en el gráfico expuesto vemos que cada Elemento contiene una
característica de su opuesto.

En este otro gráfico podemos observar lo mencionado anteriormente, sobre los

Elementos y sus opuestos.

En el siguiente gráfico podemos ver claramente como a partir de diferentes “medios, la

Tierra puede convertirse en Agua, el Agua en Aire, el Aire en Fuego, y por último el
Fuego en Tierra nuevamente.
 ROTACIÓN DE LOS ELEMENTOS.

Todo esto es un proceso alquímico que no influye solo a nivel material sino también a
nivel espiritual. ES AQUÍ DONDE HABLAMOS DE ALQUIMIA.

La verdadera Alquimia trabaja el espíritu del Mago: lo transforma, lo purifica. Es por

eso que aquellos que no entendían esta verdad morían a causa de una búsqueda
completamente material: la avaricia de querer convertir los metales en oro.

En un ritual ponemos en movimiento éste proceso. Por ejemplo, el trazado del

Pentagrama es una acción alquímica poderosísima que debemos saber utilizar ¿cómo?
Entendiendo lo que estamos haciendo.

Cuando trazamos un Pentagrama de Invocación estamos literalmente bajando el

Espíritu a la materia; lo transformamos y luego lo volvemos a elevar; llamamos al
Espíritu a que se materialice. Así, comenzamos desde el Espíritu, lo llevamos a la
Tierra; luego convertimos la Tierra en Agua; el Agua en Aire; el Aire en Fuego y por
último el Fuego en Espíritu nuevamente. Como verán TODO tiene un por qué. Es por
eso que decía que no se trata de solo ubicar los Elementos dónde mejor nos parezca.

La Quintaesencia

“Los cuatro Elementos deben ser combinados de manera especial, porque la

Quintaesencia no es una mixtura simple y caótica de los Elementos” , dice Opsopaus, y
agrega: “La Quintaesencia debe envolver simultáneamente a los pares contradictorios”

¿Qué es, entonces, la Quintaesencia? Sencillamente es Espíritu Puro; es inmaterial.

Con el siguiente gráfico vemos como nos acercamos a la Quintaesencia en forma

espiral:

Refinamiento hacia la Quintaesencia.

 
Podemos explicar el gráfico de la siguiente forma: a medida que nos acercamos al
centro las cualidades de los Elementos se van divorciando de la materia. Esto lo
logramos a través de diferentes fases de refinamiento de los Elementos en cuestión,
preservando sus cualidades puras y eliminando las contaminadas.

Primer fase: parte de la Tierra es disuelta y convertida en Agua, dejando de lado los
desperdicios. Así el frió del la Tierra queda en el Agua, pero parte de la materia seca se
pierde; así la espiral se acerca un poco más al centro.

Segunda fase: a través del calor parte del Agua se convierte en Aire; pero se preserva
la humedad; dejando algunos residuos de agua.

Tercer fase: el Aire es convertido en Fuego liberándose todo lo restante como vapor
húmedo. En esta tercer fase se volatiliza lo fijo, a través de la espiritualización de la
materia.

Cuarta fase: en ésta última fase los vapores calientes son enfriados, y así parte del
Fuego es convertido a nuestro punto de partida: la Tierra. Ahora estaríamos fijando lo
volátil a través de la materialización del Espíritu (que es lo que explicaba párrafos más
arriba con el ejemplo del Pentagrama)

Estas cuatro fases completan un ciclo de refinamiento y nos acercan a la

Quintaesencia.

Para ir concluyendo podemos agregar que cada cualidad del Elemento se va haciendo
más sublime flexibilizando parte de encarnación material.

Opsopaus nos dice: “técnicamente, la espiral nunca encontrará exactamente el centro,

pero se acercará lo suficiente para servir como un “fermento permanente”.”

Esta espiral esta simbolizada por el Serpiente Ouroboros, en la cual dicho animal
(también representado como un Dragón) se come su propia cola, simbolizando el
eterno círculo.

(*) Es necesario aclarar que no todas aquellas personas que practican Magia crean
este 'círculo de poder' a su alrededor cuando realizan rituales.

ACLARACION y AGRADECIMIENTOS: Si bien la bibliografía expresada a continuación es

lo que subyace detrás de este trabajo, la base del mismo para que fuera realizado me
la brindó quien fue mi Maestra: Selene. Por tal motivo, éste ensayo esta dedicado a
ella por haberme guiado, corregido y ayudado a analizar cada párrafo escrito en el
presente texto y por haberme IMPULSADO (ya que este fue el primer ensayo que
escribí como alumna suya) a superarme a mi misma a través del conocimiento.

Bibliografía:

Mike Nichols: RE-THINKING THE WATCHTOWERS or 13 Reasons Air

Should Be In The North

(c) 1995, John Opsopaus: The Rotation of the Elements

The Four Quarters / Corners